Catarino, un regalo de Navidad

Leer más

La hermosa relación entre la Virgen María y las flores

La Virgen María está asociada con las flores. Te explicamos por qué.

28 mayo, 2021
La hermosa relación entre la Virgen María y las flores
La Virgen María con una corona de flores. Foto: Cathopic

La Virgen María está asociada con las flores y por eso en mayo, que es un mes dedicado a Ella, se acostumbra llevarle flores a los templos.

Te puede interesar: La Virgen de Guadalupe y la verdad de las flores

La palabra Rosario, oración completamente mariana, promovida por Santo Domingo de Guzmán significa cadena de rosas, de modo que cada vez que se reza, el orante le ofrece a la Virgen 50 rosas que son el número de cuentas en las que se dice el Ave María. Además, algunos artesanos fabrican sus rosarios con pétalos de rosa con lo que le imprimen su aroma.

¿Qué es el Santo Rosario?

¿Qué es el Santo Rosario?

En la letanía, se menciona a la Virgen como Rosa Mística, y en el Akathistos, que es un antiguo himno mariano escrito en griego y que fue redactado al paso de los siglos, la comparan a Ella con una Azucena de intacta belleza.

Durante las apariciones en el Tepeyac, las rosas tuvieron un papel importantísimo pues la Virgen le pidió a San Juan Diego que subiera el cerrito y que cortara rosas como las de Castilla, además de que, en el vestido de la Virgen de Guadalupe aparecen dibujadas varias flores con distinto número de pétalos.

Fotografía de la tilma sagrada donde quedó impresa la Virgen de Guadalupe. Foto: María Langarica

Fotografía de la tilma sagrada donde quedó impresa la Virgen de Guadalupe. Foto: María Langarica

En la Basílica de Guadalupe, todos los días, los fieles le llevan a la Virgen incontables ramos y adornos florales que se ponen, a la vista de todos, en su templo, y en una misa especial, se bendicen y se reparten rosas.

Los fieles recibieron una rosa en la Basílica de Guadalupe.

Los fieles recibieron una rosa en la Basílica de Guadalupe.

Las flores llevan consigo otro regalo a los sentidos: el aroma. San Agustín dice en sus Confesiones: “el deleite siempre busca lo hermoso, lo sonoro, lo fragante, lo suave”, y Flavio Josefo en su libro Las guerras de los judíos comenta: “dentro del sancta santorum del templo de Jerusalén, donde no era lícito entrar, excepto al sumo sacerdote, vio también la multitud de perfumes y olores que tenían”.

Durante la aparición de la Virgen en Lourdes, en Francia, la Virgen tenía flores amarillas o doradas como adorno de su calzado.

En la Basílica de Santa María la Mayor, de Roma, se acostumbra cada año hacer una lluvia de pétalos de rosa en honor a María, como si fuera nieve y lo mismo ocurre en otros templos marianos.

Lluvia de pétalos de flores en la Basílica de Santa María la Mayor. Foto: Daniel Ibáñez

Lluvia de pétalos de flores en la Basílica de Santa María la Mayor. Foto: Daniel Ibáñez

En la piedad popular, es frecuente que, durante algunas procesiones, como en Sevilla, en España, el paso de la Virgen Macarena durante la Semana Santa este acompañado de una nutrida lluvia de flores que arrojan los fieles. En todos los santuarios y fiestas marianas están presente las flores.

Es costumbre que los Papas envíen flores de oro a algunas advocaciones de la Virgen María, como es el caso de Paulo VI y Francisco, que destinaron a la Virgen de Guadalupe estos presentes.

El Papa Francisco coloca flores a los pies de la Virgen de Santa María la Mayor.

El Papa Francisco coloca flores a los pies de la Virgen de Santa María la Mayor.

De todas las advocaciones marianas, ninguna, como la Virgen de Guadalupe, tiene tanta relación con las flores y su aroma, que como incienso, asciende al cielo y le dan gloria a Dios.



Autor

Estudió Periodismo y Comunicación Colectiva en la UNAM. Con 30 años de experiencia en periodismo, se ha especializado en la cobertura religiosa, trabajando en Televisa S.A. y Televisión Azteca. En 1997, recibió el Premio Nacional de Periodismo del Club de Periodistas de México. Ha realizado reportajes en cuatro continentes, incluyendo coberturas significativas como el Jubileo del año 2000 en Roma, los funerales de Juan Pablo II, el viaje de Juan Pablo II a Tierra Santa y el Encuentro Mundial de la Juventud en Sydney. Fue Jefe de Prensa durante el VI Encuentro Mundial de las Familias en México. Además, ha colaborado en publicaciones como Época, Última Moda e Impacto, donde mantiene columnas sobre cultura religiosa. Ha escrito varios libros, entre ellos "El Agua del destino" y "Popocatépetl: Mito, ciencia y cultura". También es comentarista en programas de radio.