Las Casas Astrologicas-Huber
Las Casas Astrologicas-Huber
Las Casas Astrologicas-Huber
Psicologa astrolgica
Huber
LAS CASAS
ASTROLGICAS
ISBN 84-932790-3-X
7 8 8 4 9 3 2 7 9 03 5
Psicologa astrolgica
ndice
Prlogo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Introduccin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
10
19
20
20
21
22
23
24
2. El sistema de casas
Grfico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Indicaciones tcnicas sobre las casas . . . . . . . . . . . . . . .
La hora exacta de nacimiento y el momento
de nacimiento . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Consideraciones bsicas sobre el sistema de casas . . . . .
El significado psicolgico de las doce casas
en la vida cotidiana . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Estructura interior y dinmica del sistema de casas . . . .
1. El sistema de casas como estructura espacial . . . . . . .
2. Procesos de desarrollo en el horscopo . . . . . . . . . .
3. La progresin de edad (o el punto de la edad) . . . . .
4. Los signos y los planetas en las casas . . . . . . . . . . . .
Resumen . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Reglas para la interpretacin de las casas . . . . . . . . . . .
30
31
36
38
41
43
43
44
47
49
49
50
56
56
65
66
68
69
4. Los cuadrantes
El primer cuadrante . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
El segundo cuadrante . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
El tercer cuadrante . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
El cuarto cuadrante . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Las doce casas astrolgicas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
76
78
81
84
88
93
96
98
101
104
107
111
114
117
121
130
130
133
136
138
138
140
141
142
142
147
148
151
153
7. La curva de intensidad
Introduccin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
La proporcin urea . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Diferencia de intensidad entre las casas y los signos . . .
La cspide de la casa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
El punto de inversin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
El punto de reposo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Clculo de los puntos de reposo de las casas . . . . . . . .
Tabla PE-PR-PI . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Las tres zonas de cada casa segn las cualidades
de las cruces . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Los procesos de desarrollo en tres fases
en el horscopo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
156
158
160
162
166
169
175
177
178
180
186
Introduccin
La historia de la astrologa empez hace miles de aos.
Los vestigios astrolgicos ms antiguos datan de la poca
de las primeras culturas. Pero lo que puede llamarse con
propiedad un sistema astrolgico, es decir, un concepto
estructurado de la astrologa, existe desde hace poco ms
de dos mil aos. Antes, los conocimientos astrolgicos se
transmitan oralmente y, por lo tanto, no han quedado
documentos escritos; no obstante, la investigacin histrica nos permite afirmar que la astrologa dispone de una
experiencia milenaria. Multitud de generaciones de
astrlogos (entre las que hubo muchos sabios) se interesaron por esta ciencia y, basndose en la observacin del
ser humano y de su vida, se esforzaron por deducir reglas
que legaron a la posteridad.
La antigedad de la astrologa es mayor que la de cualquier otra ciencia. Con frecuencia se oye el argumento de
que la astrologa es la madre de todas las ciencias porque,
por ejemplo, las matemticas, la astronoma y otras ramas
cientficas se han servido de los conocimientos tericos y
prcticos de las leyes naturales obtenidos por la astrologa.
El hecho de que, a pesar de los mltiples ataques recibidos, la astrologa se haya mantenido viva durante milenios puede considerarse un fenmeno extraordinario. En
el transcurso de los siglos, la astrologa ha sufrido grandes
transformaciones. Empez siendo un sencillo acto de
culto ligado a concepciones mgicas de los fenmenos
de la vida y, con el paso del tiempo, se ha convertido en
una ciencia de gran complejidad. En las ltimas dcadas
se ha visto enriquecida con los conocimientos de la psicologa y se ha adaptado al pensamiento del ser humano
moderno e inteligente.
10
La investigacin nos ha obligado continuamente a suprimir, a adoptar una actitud de moderacin que nos ha
conducido a lo esencial. Los elementos han regresado a
su sencillez original: slo debemos pensar en
10+12+12+7 componentes (10 planetas, 12 signos, 12
casas y 7 aspectos). Pero con nuestro actual instrumental
intelectual podemos emplearlos y manejarlos de forma
ms sutil y diferenciada.Y esto nos permite obtener perfiles de carcter y de comportamiento del individuo cuidadosamente descritos y comprobables al detalle.
No queremos decir que con esto se haya agotado la investigacin sobre el instrumento astrologa sino todo lo contrario. Pero s creemos haber establecido una base slida
para un nuevo pensamiento astrolgico y haber dado estmulos para la realizacin de investigaciones adicionales.
Con este libro queremos incorporar a la astrologa una
nueva forma de pensar. Queremos hablar del ser humano,
de cmo es en realidad, de cmo vive y de qu lo hace
sufrir. En el centro de la vida y de la realidad csmica ponemos al ser humano; no cifras, mtodos o alguna mitologa.
En este libro, que forma parte de una serie sobre psicologa
astrolgica, intentamos explicar el sistema de casas astrolgicas a partir de la experimentacin natural del mismo. La
intensa percepcin sensorial y el reconocimiento intuitivo
de las interconexiones, caractersticas propias del ser humano de las primeras culturas, han permitido la creacin de las
doce casas astrolgicas como sistema de ordenacin de la
interaccin entre el ser humano y su entorno. El desarrollo del pensamiento psicolgico moderno ha permitido
reconocer la profundidad y la trascendencia de las doce
casas o sectores vitales de la vida humana.
13
Desde el punto de vista de la psicologa del comportamiento, las casas son el elemento interpretativo ms
importante de la psicologa astrolgica. Son el sistema de
referencia con el que vemos el mundo real y muestran los
procesos psicolgicos que tienen lugar continuamente
entre el ser humano y su entorno. sta es la razn por la
que empezamos nuestra serie de libros con un libro sobre
el sistema de casas y no sobre los signos o los planetas.
14
Marte
Luna
Jpiter
Saturno
Urano
Mercurio
Neptuno
Venus
Plutn
Libra
Tauro
Escorpio
Gminis
Sagitario
Cncer
Capricornio
Leo
Acuario
Virgo
Piscis
Abreviaturas
AC
IC
DC
MC
PE
= Ascendente
= Immum Coeli
= Descendente
= Medium Coeli
= Punto de la edad
15
16
1. El significado psicolgico
del horscopo
1. El crculo interior: el centro.
2. La figura de aspectos.
3. Los planetas.
4. Los signos zodiacales (el zodaco).
5. Las casas.
6. El ser humano en su globalidad.
Concepcin astrolgica del ser humano: un camino
hacia el autoconocimiento.
17
Para comprender el significado del sistema de casas dentro del modelo conceptual de la psicologa astrolgica es
necesario considerar el horscopo de manera global.
Como sabemos, el horscopo muestra las posiciones de
los planetas en el cielo en el momento del nacimiento de
una persona. Aplicando determinados criterios de interpretacin a esta configuracin planetaria, podemos deducir las particularidades del carcter y del desarrollo psicolgico de la persona.Todava no sabemos por qu esto es
as. Pero el efecto real de esta correlacin entre la configuracin de los planetas y el condicionamiento del ser
humano es algo que puede demostrarse claramente en
cualquier individuo.
Para nosotros es muy importante resaltar que el horscopo representa al ser humano como centro subjetivo (esto
es, como un ser nico con sus valores) frente a su entorno. Considerndolo as, el horscopo es una imagen simblica de la persona y del mundo en que vive. Muestra
el punto de vista subjetivo del ser humano, es decir,
muestra cmo se percibe a s mismo (aunque, en buena
parte, sea de forma inconsciente). El horscopo es la
medida de su mundo (un mundo en cuyo centro se
encuentra) y eso lo convierte en el smbolo de su existencia. Por eso, para el psiclogo de orientacin astrolgica, el horscopo es un instrumento de diagnstico
extraordinario que le permite ver la problemtica del
individuo de manera rpida y fiable.
Demos una mirada al horscopo ejemplo de la pgina
16. Tenemos ante nuestros ojos una estructura grfica
que, si bien se compone de distintos elementos, pticamente puede captarse como un todo. Si dibujamos los
horscopos (sobre todo la figura de aspectos) de manera
18
cuidadosa y a color, podemos percibirlos con todos nuestros sentidos. Entonces, la figura de aspectos empieza a
hablarnos grficamente. Del mismo modo, tambin
podemos dirigir nuestros sentidos hacia una persona que
se encuentre ante nosotros, intentando percibir la sensacin que nos produce. Hay muchas personas que con esta
primera impresin ya saben con quin estn tratando.
En el horscopo diferenciamos cinco niveles bsicos:
1. El crculo interior:
el centro
Al mirar el horscopo
ejemplo podemos considerar que el crculo central
representa el centro esencial de la persona. Ah dormita el ser humano en
potencia.
Este centro recibe muchos nombres. Unos lo llaman
alma, psique o atman; otros lo llaman espritu, yo superior
o mnada. En la filosofa hind, este centro del que mana
la vida recibe el nombre de chispa divina o fohat. En las
culturas griega y cristiana se conoce como entelequia. En
realidad, este ncleo del ser no puede definirse con conceptos humanos. Por eso, al dibujar el horscopo, siempre dejamos el crculo central en blanco: no dibujamos
ningn aspecto que lo atraviese. El centro est circunscrito en el horscopo.
Cuando el ser humano nace, este centro empieza (simblicamente) a irradiar energas en todas direcciones
como se representa en la figura adjunta. El ser humano
19
crece en su mundo a partir de este centro para desarrollarse y producir un efecto en el mismo.
2. La figura de aspectos
En su proceso de irradiacin, lo primero que se encuentran las energas provenientes del centro son las lneas de
la figura de aspectos. La figura de aspectos tiene un significado de gran importancia. Acta como esquema de
conexiones de la conciencia o como patrn de reaccin
de las fuerzas vitales del individuo. Desde el punto de
vista psicolgico, representa la imagen de la conciencia
de la persona. La figura de aspectos proporciona informacin sobre la orientacin bsica de la persona en la
vida. Muestra sus tendencias, sus intereses principales, sus
deseos esenciales, lo que quiere hacer en la vida (aunque
no sea completamente consciente de ello) y cmo y
dnde quiere emplear sus fuerzas.
En la figura de aspectos se ven las capacidades que estn
a disposicin de la persona desde el momento de su nacimiento y que puede emplear sin dificultades. Pero tambin se ven las capacidades latentes que no pueden ser
utilizadas tan fcilmente porque no estn bien integradas
en el esquema de conexiones general: porque estn
como colgadas de la figura de aspectos o porque no
tienen ninguna conexin con ella (como el Sol en el
horscopo ejemplo).
3. Los planetas
A travs de las lneas de la figura de aspectos, las energas que irradian del centro son conducidas y distribuidas hacia los planetas, que se encuentran situados alrededor del horscopo. Los planetas son las verdaderas
20
5. Las casas
Las casas representan las situaciones reales y formales de
la vida, con sus diferentes tipos de experiencias y actividades. A diferencia de los aspectos, los planetas y los signos, que simbolizan la constitucin interior de la persona, las casas son una configuracin formal ajena a la persona que acta sobre ella desde el exterior. El efecto de
las casas empieza en el momento del nacimiento y constituye algo de lo que la persona debe ocuparse durante
toda su vida.
El ser humano empieza a vivir de verdad cuando toma
conciencia de su entorno. De ah la gran importancia
del sistema de casas para la persona que vive de manera
22
mi vida; quiero que sea distinto. Desde el centro podemos hacer que esto se convierta en realidad.
En el centro, la voluntad es altamente efectiva porque es
resultado del proceso de interiorizacin y autoconocimiento. Es un proceso complejo que por una parte
requiere tiempo y por otra la voluntad firme y serena de
enfrentarse con uno mismo y llegar a lo ms profundo
del ser. El conocimiento de uno mismo no es algo que
se consiga de la noche a la maana: es un proceso que
puede durar toda la vida. Las personas que estamos familiarizadas con la astrologa tenemos una ventaja. El
horscopo nos permite considerar los diferentes niveles,
orientarnos en cada situacin de la vida y darnos cuenta
de dnde nos hemos quedado atascados o estamos bajo
presin.
Podemos preguntarnos: Dnde est la tensin en esta
estructura de niveles y dnde hay una salida o una solucin al problema? Las personas que no estn familiarizadas con la astrologa no tienen esta fabulosa herramienta
de autoconocimiento. Quienes s lo estamos tenemos
ventaja pero, evidentemente, tambin tenemos una obligacin (no slo con respecto a nosotros mismos sino
tambin con relacin a los dems). Es nuestra responsabilidad espiritual ante el Todo y tambin parte de lo que
entendemos como Voluntad.
Como disfrutamos de la libertad que nos ofrece el distanciamiento, podemos desarrollar nuestra voluntad y
emplearla. Desarrollamos la voluntad libre en la medida en que, a travs del autoconocimiento, somos capaces de crear las condiciones ticas bsicas que nos permiten conseguir que nuestras metas e intereses estn en
concordancia con el bien del Todo y emplear nuestras
27
28
2. El sistema de casas
Indicaciones tcnicas sobre las casas.
La hora exacta de nacimiento y el momento
del nacimiento.
Consideraciones bsicas sobre el sistema de casas.
El significado psicolgico de las doce casas
en la vida cotidiana.
Estructura interior y dinmica del sistema de casas.
1. El sistema de casas como estructura espacial.
2. Procesos de desarrollo en el horscopo.
3. La progresin de la edad (o el punto de la edad).
4. Los signos y los planetas en las casas.
Resumen.
Reglas para la interpretacin de las casas.
29
30
31
Los planetas
El retculo.
33
Como sabemos, el zodaco se divide en doce partes iguales, denominadas signos. Estos signos son sectores de un
espacio csmico y, por lo tanto, extraterrestre (el sistema
solar) y ejercen influencia en toda la Tierra. En s, los signos del zodaco tienen un efecto colectivo pero son cualidades csmicas que estn a disposicin de todos los
seres humanos como fuentes de energa. En cambio, las
casas son una divisin del espacio terrestre alrededor de
la persona en doce sectores que se realiza en el momento de su nacimiento y desde el lugar de nacimiento; por
lo tanto, tienen un carcter individual y ligado al lugar.
34
Signos y casas
Aries
Tauro
Gminis
Cncer
Leo
Virgo
Casa
Casa
Casa
Casa
Casa
Casa
1
2
3
4
5
6
Libra
Escorpio
Sagitario
Capricornio
Acuario
Piscis
Casa
Casa
Casa
Casa
Casa
Casa
7
8
9
10
11
12
35
As como el zodaco, que representa las constelaciones celestes, es un sistema de referencia geocntrico,
es decir, en su centro se encuentra la Tierra, las casas
son un sistema de referencia egocntrico, es decir, en
su centro se encuentra el ser humano. Por eso las
casas nos proporcionan una informacin tan significativa sobre el individuo.
As pues, existe una correspondencia entre los doce signos del zodaco (divisin csmica) y los doce sectores del
sistema de casas (divisin terrestre). Cada signo zodiacal
tiene algo en comn con la cualidad de una casa o rea
de la vida.
Desde el punto de vista psicolgico y de la interpretacin, estos dos sistemas de referencia tienen significados
muy distintos en lo que concierne al ser humano.
natal. En la mayora de los estados europeos, desde principios de siglo, al inscribir al recin nacido en el registro
civil existe la obligacin legal de indicar la hora de nacimiento (con una aproximacin de ms o menos 15
minutos).
La segunda cuestin es ms controvertida y requiere
algunas consideraciones adicionales. Con el primer grito,
el recin nacido respira aire por primera vez. Es su primer acto independiente y tambin un anuncio claro y
fuerte: Aqu estoy! El primer grito o el primer aliento es
el comienzo del proceso de desarrollo hacia la individualidad. Por otra parte, al cortar el cordn umbilical se
rompe la unin fsica con la madre y el recin nacido
abandona la proteccin del cuerpo materno. De este
modo empieza el funcionamiento independiente del
organismo infantil.
Desde este punto de vista, tanto el momento del primer
grito como el del corte del cordn umbilical pueden considerarse como el verdadero momento de nacimiento.
Los intentos cientficos realizados hasta la fecha para
determinar con exactitud el momento de nacimiento
todava no han producido un resultado satisfactorio. Esto
se debe a que tan slo se han realizado intentos aislados.
Slo una investigacin a gran escala podra dar resultados
convincentes. Sin duda, detrs de un hecho tan importante debe existir algn tipo de regularidad: tal vez la descubramos en el futuro.
Ante esta realidad, lo ms adecuado es proceder de
manera pragmtica: para trabajar de forma detallada y
fiable con un horscopo deberemos realizar una verificacin de la hora de nacimiento. En cambio, si lo que
37
pretendemos es slo obtener una visin general y simplificada del horscopo, la hora oficial (con su probable
inexactitud) nos bastar.
Para realizar investigaciones psicolgicas o tratamientos
teraputicos es indispensable realizar una correccin de
la hora de nacimiento basndose en las fechas de las
vivencias importantes de la persona. En nuestro libro El
reloj de la vida exponemos un sencillo mtodo de
correccin de la hora de nacimiento: la progresin de la
edad.
Vida
Ganancia
Hermanos
Padres
Hijos
Salud
7 UXOR
8 MORS
9 PIETAS
10 REGNUM
11 BENEFACTAQUE
12 CARCER
Esposa
Muerte
Deber, respeto
Regencia
Buenas acciones
Crcel
Esta perspectiva reduca la vida humana y, consiguientemente, la consulta del horscopo a unas pocas necesidades. Con estas palabras clave tambin se perdi la estructura interna y la dinmica de interrelacin del sistema de
casas. Cada casa estaba completamente aislada, no tena
ninguna relacin con las casas vecinas y se asociaba a un
concepto rgido.
40
Con el paso de los siglos, para cada casa se fue desarrollando una lista de conceptos. Esto ha ocasionado muchas
contradicciones y confusiones y, finalmente, el sistema de
casas ha quedado completamente desintegrado en sus
componentes individuales (las casas).
En la vida real, entre las distintas reas de la vida existen
solapamientos e interdependencias. Las influencias recibidas en una casa desencadenan efectos y reacciones en otra.
Cada casa es una parte de la estructura de la vida y, en ella,
los efectos se entrelazan y se condicionan mutuamente.
Los 4 temperamentos:
del entorno. Estas tendencias de desarrollo estn representadas en los siguientes puntos:
-
Casa 1
Aries
Casa 5
Leo
Casa 9
Sagitario
Desarrollo de la
personalidad
Casas de tierra
corresponde a:
Casa 2
Tauro
Casa 6
Virgo
Casa 10
Capricornio
Desarrollo social
Casas de aire
corresponde a:
Casa 3
Gminis
Casa 7
Libra
Casa 11
Acuario
Relaciones exteriores
Casas de agua
corresponde a:
Casa 4
Cncer
Casa 8
Escorpio
Casa 12
Piscis
Orientacin interior
(pertenencia)
45
Casa 1
Aries
Casa 4
Cncer
Casa 7
Libra
Casa 10
Capricornio
Casas fijas
corresponde a:
Casa 2
Tauro
Casa 5
Leo
Casa 8
Escorpio
Casa 11
Acuario
Estabilizacin
Casa 3
Gminis
Casa 6
Virgo
Casa 9
Sagitario
Casa 12
Piscis
Cambio
Casas mutables
corresponde a:
Impulso
3. La progresin de la edad
(o el punto de la edad)
La progresin de la edad es un mtodo que permite hacer un
seguimiento detallado de los procesos de desarrollo por los
que la persona pasa a lo largo de su vida. Se basa en que,
en el horscopo, aparte de la dimensin espacial, tambin
existe una dimensin temporal. La progresin de la edad
es una tcnica que permite identificar la postura psicolgica bsica de la persona en cada momento de su vida, as
como sus posibilidades de desarrollo en el futuro.Tambin
es de gran utilidad para corregir la hora de nacimiento.
La progresin de la edad es una especie de reloj de la
vida que se pone en marcha en el AC (en el momento del nacimiento) y que recorre las casas en sentido
47
48
Resumen
El primer acercamiento al sistema de casas ha sido realizado desde el punto de vista espacial: una perspectiva
basada en la cruz y derivada de la misma naturaleza (arriba, abajo, izquierda y derecha).
El otro acercamiento contempla la secuencia del tiempo
y el curso de la vida. Es un acercamiento temporal.
En medio estn los temperamentos, los trgonos donde la
dimensin espacio se cruza con la dimensin tiempo y
que muestran el proceso de desarrollo dinmico del ser
humano.
La ltima consideracin hace referencia a las distintas
posibilidades de combinacin de las fuerzas de crecimiento estticas y dinmicas, que siempre se manifiestan
en procesos de desarrollo en tres fases.
Todo esto nos proporciona una perspectiva muy completa del sistema de casas que trataremos detalladamente en
este libro y en libros posteriores.
49
3. Representacin detallada
de las casas como
estructura espacial
Orientacin.
1. El retculo: la horizontal y la vertical.
2. La mitad izquierda: el lado del yo.
3. La mitad derecha: el lado del t.
4. La mitad inferior: el espacio inconsciente.
5. La mitad superior: el espacio consciente.
55
Orientacin
Nuestra orientacin (en el espacio fsico) se basa en los
conceptos de arriba, abajo, izquierda y derecha. Y lo
mismo ocurre con nuestra orientacin psicolgica y
mental. Nuestra vida y nuestra forma de pensar se fundamentan en esta orientacin. Sin ella nos encontraramos
perdidos y no seramos capaces de vivir.
El sistema de casas no es otra cosa que el sistema de
referencia ligado al cuerpo con el que nos orientamos
en el cosmos y en la vida, en el espacio y en el tiempo.
Si dibujamos una cruz en el horscopo se forman cuatro
partes que podemos tratar desde los siguientes puntos de
vista (vase el grfico de la pgina 74):
1. El retculo
2. La mitad izquierda
3. La mitad derecha
4. La mitad superior
5. La mitad inferior
Yo-t, colectivo-individuo
El lado del yo
El lado del t
El espacio consciente
El espacio inconsciente
Eje de encuentro
En este nivel, la diferenciacin que se hace es la siguiente: yo estoy aqu t ests ah. Estamos frente a frente. Si
la diferencia entre el yo y el t se hace demasiado grande, levantamos una barrera que hace imposible el
encuentro humano autntico. Construimos entonces un
muro tan alto entre nosotros y nuestros semejantes, que
impide que nos relacionemos. sta es una actitud hostil
que provoca la correspondiente reaccin por parte del
t. Normalmente, la reaccin es de establecer barreras, de
negarse al contacto o de rechazo (que puede ser agresivo).Acusamos, entonces, al t de no querer saber nada de
nosotros, olvidando que fuimos nosotros quienes construimos la barrera y que, por ello, debemos ser tambin
nosotros quienes la quitemos.
Tambin puede ocurrir que dependamos excesivamente
del t. ste sera el caso de la tpica persona que no sabe
estar sola y que constantemente intenta atraer la atencin
de los dems, hace todo lo posible para conseguir su participacin o busca sentirse confirmada por ellos. El resultado suele ser que los dems se sienten agobiados y reaccionan de forma desagradable.Tambin podemos esperar
dificultades en la relacin yo-t si nos inmiscuimos en
asuntos que no nos conciernen.
Estos posibles comportamientos en el contacto estn
indicados por las posiciones planetarias en las reas del yo
y el t del horscopo. Para ms detalles sobre los problemas que pueden aparecer en este eje y sus posibles soluciones, vase el captulo 6.
Resulta interesante constatar que los antiguos sistemas de
casas tenan como referencia fundamental el horizonte,
mientras que los nuevos sistemas (entre ellos, el que
empleamos) tienen como referencia el meridiano. Los
60
2. La mitad izquierda:
el lado del yo
En este lado del horscopo, el yo es el
principio que gobierna y regula. El yo
controla tanto las funciones inconscientes que se encargan del mantenimiento de la vida como
los procesos de autoexperiencia conscientes.
El lado izquierdo es el espacio interior. El interior est
siempre dentro de m: es mi esfera privada o ntima. Esto
es lo que soy, stos son mis intereses, mis necesidades,
mis penas y mis alegras en los planos fsico, emocional
y mental. En este espacio, la referencia siempre es el yo:
valoro y juzgo al mundo desde mi punto de vista (el
punto de vista del yo).Todo debe estar aqu en armona
con mi visin de las cosas antes de que se produzca el
acercamiento a los dems.
En este lado del horscopo me reconozco a m mismo
por mi forma de pensar y de reaccionar. En el lado del
yo conozco bien mis deseos y mis necesidades y, consciente o inconscientemente, hago lo posible por satisfacerlos. En este espacio hay dos objetivos esenciales: la
conservacin y la manifestacin del yo.
Los planetas del lado del yo son rganos o capacidades esenciales que estn controlados por el yo. Son instrumentos tiles para la manifestacin y para la experiencia del yo. Pero estos planetas tambin indican intereses propios y rasgos egocntricos o individualistas
(segn se encuentren abajo o arriba). Si nuestra reaccin es negativa, nos aislamos del mundo, nos retiramos
a nuestro interior, nos encerramos en nosotros mismos
y castigamos al entorno con nuestro desprecio pero, de
65
3. La mitad derecha:
el lado del t
En este lado del horscopo, la referencia es el entorno: lo que est fuera de
m. ste es el espacio del t, de los
dems y de la sociedad. Aqu encontramos todo lo que
ha creado el ser humano: sistemas de pensamiento,
estructuras e instituciones sociales, necesidades econmicas, obligaciones y responsabilidades, normas de
comportamiento, etc.
66
4. La mitad inferior:
el espacio inconsciente
En este espacio del horscopo estn en
funcionamiento los mecanismos impulsivos e instintivos inconscientes, esto es,
que funcionan sin nuestra intervencin consciente.
Como en psicologa, en el modelo conceptual astrolgico distinguimos entre el funcionamiento consciente y el
funcionamiento inconsciente. Nuestro conocimiento de
este espacio inferior es muy reducido: muchas veces no
sabemos casi nada de l. Ante todo debemos entender
que la Tierra es una esfera y que el cielo contina al otro
lado de la misma. Antiguamente se crea que el mundo
estaba formado por un disco y una semiesfera en la que
los dioses movan las estrellas. Esta concepcin del
mundo perdur hasta que se obtuvo un conocimiento
ms amplio. Lo mismo ocurre con el espacio inconsciente. No sabemos mucho sobre l. Todas nuestra vivencias
y experiencias se acumulan ah abajo: sedimentan en el
inconsciente y forman un sistema independiente de
mecanismos e impulsos psicolgicos que dirigen nuestras
actuaciones de manera instintiva (condicionamiento y
automatismos).
Los planetas de la mitad inferior son difciles de
emplear de forma consciente. Con estos planetas solemos
reaccionar de manera impulsiva o instintiva, es decir, de
forma refleja. Normalmente, tomamos conciencia de lo
que hemos hecho con estos planetas al ver los efectos
producidos como resultado de nuestra reaccin refleja.
En terminologa astrolgica, para referirse a los signos y
planetas que se encuentran en el espacio inconsciente,
se emplea la expresin: Experimentarse a partir de la
68
propia actuacin. Hacemos algo y, de este modo, tenemos una experiencia (descubrimos algo) sobre nosotros.
Por lo tanto, la mitad inferior del horscopo es un espacio de actividad (de hechos) en el que funcionamos de
manera refleja y profunda, y en el que hacemos lo que se
nos manda y lo que hemos aprendido.
Las personas con muchos planetas en la mitad inferior
del horscopo, sobre todo si estn agrupados alrededor
del IC, tienen una gran necesidad de seguridad y hacen
todo lo posible para sentirse protegidas. Buscan esta proteccin en la familia, en algn tipo de colectivo o comunidad a cuyas estructuras, normas y leyes se adaptan
voluntariamente. Estas personas no suelen atreverse a
hacer su propio camino.
5. La mitad superior:
el espacio consciente
Este espacio del horscopo contiene
todo lo que experimentamos, vemos y
percibimos de manera consciente en la
vida. Aqu captamos directamente las impresiones que
nos llegan del entorno, las elaboramos mentalmente,
planificamos nuestra intervencin y, finalmente, actuamos. Con planetas en este espacio, el pensamiento
suele estar bien desarrollado: tenemos capacidad de
reflexionar, adoptamos posturas claras y somos hbiles
tomando decisiones. Aqu entra en juego la voluntad y
estamos relativamente libres de reacciones instintivas o
descontroladas.
En esta parte del horscopo reflexionamos sobre el
mundo y adoptamos una postura al respecto. Como
podemos relacionarnos de manera consciente tanto con
69
los individuos como con la sociedad, tenemos mayores posibilidades de hacernos un lugar destacado en
sta.
Aqu somos conscientes de nuestro yo. La percepcin de
nuestro yo ya no depende de reflejos inconscientes. En
este espacio somos conscientes del efecto que producimos en el mundo y nos presentamos ante el mismo
conociendo nuestro valor.
Los planetas de la mitad superior indican seguridad personal. Son capacidades que podemos emplear de manera
consciente en la vida porque se encuentran por encima
del horizonte, a la luz del da. Con ellos podemos planificar, reflexionar y actuar consciente y precavidamente.
Por lo tanto, a diferencia de la mitad inferior, que es una
parte orientada a la accin, la mitad superior es un espacio de pensamiento y reflexin. La mitad superior es la
parte terica y la inferior, la prctica.
Si todos los planetas de un horscopo estn por encima
del horizonte, existe el riesgo de que la persona se quede
colgada en la teora y viva en un mundo imaginario sin
ninguna relacin con la realidad. En este caso, y con
determinadas configuraciones difciles, pueden aparecer
la presuncin, el orgullo y la arrogancia.
La acumulacin de planetas en la mitad superior del
horscopo indica una personalidad consciente de s
misma que quiere destacar de la masa y que aspira a realizar una tarea independiente en la vida. Estas personas
no se someten fcilmente, tienen su propia opinin y
tambin el valor de ponerse frente al mundo para exigir
sus derechos. Suelen irradiar una autoridad natural que
70
los dems reconocen. Esto hace que en muchas ocasiones acten como lderes o dirigentes. De todos modos,
con esta configuracin tambin se dan casos de personas
presuntuosas que actan de forma poco respetuosa con
los derechos de los dems.
71
72
4. Los cuadrantes
El primer cuadrante.
El segundo cuadrante.
El tercer cuadrante.
El cuarto cuadrante.
Las doce casas astrolgicas.
73
Los cuadrantes
74
Si slo miramos las posiciones individuales de los planetas, nos perdemos en el detalle y no tenemos ninguna
referencia que nos diga si un determinado detalle es ms
o menos importante, o ms o menos favorable. Debemos,
pues, considerar la distribucin de los planetas en los
cuadrantes para orientarnos y tener una idea de la situacin global.
El primer cuadrante
Impulso
llamamos condicionamiento: las formas de comportamiento y de reaccin que se van consolidando en nosotros
durante la infancia y la juventud como resultado de la
influencia del entorno.
Son los resultados de la educacin y de la influencia del
entorno, entendiendo por entorno nuestro hogar, con las
normas y las costumbres que debamos respetar, nuestros
profesores, el sacerdote que nos daba religin, el polica
del barrio, los compaeros de juego, los amigos, las primeras experiencias amorosas, etc. Son fuerzas condicionantes cuya influencia empieza en la infancia y contina
hasta la mitad de la vida que pueden fomentar o inhibir
nuestra disposicin instintiva y marcan nuestro comportamiento en el contacto.
A partir de estas experiencias desarrollamos simpatas y
antipatas que, con el tiempo, se condensan dando lugar
a patrones de comportamiento emocional y mecanismos
de accin y reaccin que entran en funcionamiento de
forma refleja o instintiva. Estos mecanismos instintivos se
forman a partir de las experiencias de contacto y de relacin con las diferentes personas que nos vamos encontrando.
En este cuadrante, la persona afronta la vida considerando que est en un mundo de sujetos. Su actitud bsica es
ofensiva y la parte emocional est enfatizada.
El Sol o planetas en el segundo cuadrante
En este cuadrante tambin predominan las acciones y las
reacciones inconscientes.Aprendemos a partir de las experiencias de contacto a flor de piel con el t, puesto que
este cuadrante tiene que ver con el t (lado derecho).
79
En este cuadrante, la tendencia al contacto es muy intensa. Hay un gran inters por el entorno pero es un inters
dirigido sensorialmente. Un aparato de instintos altamente complejo y un gigantesco mecanismo de reflejos
hacen que la persona reaccione a cualquier estmulo, por
ms sutil que ste sea. De esta manera aprende a manejar
las herramientas fsicas y psquicas de la vida. Pero tambin existe el riesgo de que se pierda en la accin y lo
mida todo exclusivamente con criterios de rendimiento.
Las personas con el Sol en este cuadrante se experimentan a s mismas a travs del contacto con el t. Por eso es
tan importante ser consciente de uno mismo. Muchos
planetas en este cuadrante pueden indicar desde una exageracin de la importancia de uno mismo hasta una actitud agresiva.
Este cuadrante tambin se divide en tres casas. En la
casa 4 encontramos nuestros orgenes, nuestro lugar de
procedencia (desde un punto de vista prctico, la casa de
nuestros padres). La casa 4 es nuestro nido. Esta casa nos
indica cmo queremos que sea nuestro hogar.
Representa el lugar donde crecimos, el espacio donde se
form una gran parte de nuestro carcter y de nuestra
individualidad. Por eso en esta casa encontramos las tradiciones, el conservadurismo, los lazos familiares sentimentales y la dependencia del colectivo.
sta es la casa de nuestra vida familiar y privada.Aqu est
indicado cmo nos comportamos en nuestro hogar y
cmo son las relaciones con nuestra familia y con el
colectivo.
En la casa 5 estamos dispuestos a experimentar y somos
emprendedores. En esta casa nos probamos a nosotros
80
El tercer cuadrante
Pensamiento
relaciones y contactos con el entorno de forma consciente, e intenta controlarlos. De esta forma aprende a
manejar las relaciones, los contactos y los sistemas sociales, y tambin a conseguir una buena posicin en la
sociedad. La mejor descripcin posible para este comportamiento es conciencia extrovertida.
La casa 7 muestra la relacin con el t. El yo est frente
al t (en el lado opuesto) y comprende que sus propias
fuerzas son insuficientes para dominar la vida. Aqu queremos ligarnos al t de manera individual, incitarlo a
colaborar con nosotros y asegurarnos de que lo hace. Aspiramos a una colaboracin autntica y debemos aprender a integrarnos en ella. En el proceso pueden producirse fricciones puesto que el t seala los defectos que
dificultan la armona de la convivencia. Nuestro proceso
de adaptacin consciente comienza cuando empezamos
a trabajar en nosotros mismos, en nuestro yo.
La casa 8 exige que nos adaptemos a la realidad de la
sociedad.Y, con frecuencia, esto significa que algn concepto desfasado o algn tipo de lastre individual que
impide el desarrollo debe morir. La casa 8 es la casa de la
muerte, de los procesos de muerte y renacimiento. En
esta casa debemos abandonar todas las cargas y todo lo
innecesario. Este proceso de separacin suele ser doloroso pero debemos llevarlo a cabo pues estamos en la casa
del cambio, de la renovacin y del ascenso hacia la individualidad que conscientemente debe dar a la sociedad lo
que sta exige por derecho (obligaciones). Pero, a cambio, aqu tambin recibimos legados, herencias y subvenciones, desempeamos cargos pblicos y recibimos
honores del t o de la sociedad.
83
El cuarto cuadrante
Ser
lleva hacia s mismo, hacia su interior, donde comprende que forma parte del Todo csmico. Aqu debemos
desarrollar la capacidad de atender a nuestra vida interior, estando en contacto con nuestro yo, as como
aprender a vivir aislados y en soledad. Es la casa del aislamiento (voluntario o forzado) y de la soledad (productiva o no).
87
88
89
90
91
Esta misma regularidad puede verse en la estructura espacial del horscopo.Y lo mismo sucede cuando miramos
una hoja de papel en blanco: hay una zona activa o dinmica y una zona pasiva, ms esttica. Para la mayora de las
personas, la zona pasiva es la izquierda y, curiosamente,
esta zona no llega hasta la mitad de la hoja sino slo, aproximadamente, hasta una tercera parte de la misma: la distancia que corresponde a la proporcin urea. La zona
derecha es la activa.
En un captulo posterior veremos como, sobre la base de
la proporcin urea, realizamos una divisin de cada casa
en zonas que permiten una clara diferenciacin psicolgica. Pero antes, nos ocuparemos de las zonas de expansin y de contraccin del horscopo.
Las casas en las zonas de expansin
y de contraccin del horscopo
En la parte interior del grfico de la pgina siguiente
vemos un crculo con ondulaciones. Este crculo abovedado est formado por cuatro lneas onduladas iguales.
Las curvas van primero hacia fuera y despus hacia dentro, formando as zonas positivas y negativas.
Desde la perspectiva del centro, los puntos de mxima
amplitud de este crculo ondulado estn en los ejes principales (fuerzas expansivas) y los puntos de mnima
amplitud en las casas intermedias (fuerzas contractivas).
En total hay cuatro curvas hacia el interior que abarcan
cuatro casas (las casas fijas) y cuatro curvas hacia el exterior que abarcan ocho casas (las cardinales y las mutables). Por lo tanto, cada una de las curvas hacia el exterior abarca dos casas.
94
El retculo como
experiencia del espacio
De nuevo partimos del retculo
puesto que es la base de toda
representacin espacial. Debemos
imaginarnos que tanto la lnea
horizontal como la vertical no
producen efecto slo como lneas sino como zonas.
96
Casas cardinales:
1
Aries
Cncer
Libra
10
Capricornio
Casas mutables:
3
Gminis
Virgo
Sagitario
12
98
Piscis
cardinales reciban el nombre de casas angulares o determinantes, y las casas mutables el de casas cadentes o lbiles. En el pasado muchas cosas se clasificaban segn criterios de blanco o negro y las casas cadentes o lbiles
empezaron a valorarse de forma negativa. Las casas
cadentes no son casas cadas y lbil no significa malo o
negativo, sencillamente son casas que no son especialmente activas hacia fuera. Son casas pasivas, casas de
espera y de reflexin. Resulta sorprendente que fuera
precisamente durante la Edad Media cuando se empez
a restar la debida importancia a las casas mutables puesto que fue una poca en la que hubo una gran tendencia hacia la interiorizacin espiritual. Segn parece, lo
que causaba mayor impresin en esa poca era lo que
produca efectos en el exterior, lo que tena xito.
100
En los puntos cardinales tambin tenemos un efecto espacial. Lo que produce efecto no es slo un punto sino el
espacio que lo rodea, es decir, la zona alrededor del punto
cardinal (vase el grfico de la pgina anterior). Cuando
un planeta se encuentra en una de estas zonas, es importante diferenciar si est en el lado activo o en el pasivo.
La zona del yo
Casas 12 y 1
(Piscis) (Aries)
En la zona del yo tenemos una casa
activa y una casa pasiva. En la casa 1, el
yo quiere actuar y presentarse de forma activa. En la casa
12 el yo tambin trabaja con la misma intensidad, slo
que de una manera completamente distinta.
La casa 12 es un espacio pasivo. En ella no actuamos
sino que tenemos tendencia a reflexionar, a observar, a
criticar. Es un espacio de toma de conciencia por reflexin y contemplacin.
Como estamos en la zona del yo, reflexionamos sobre
nuestro yo. Estamos a solas y nos observamos. Es el rincn ms tranquilo de todo el horscopo. A algunas personas no les gusta porque reflexionar sobre uno mismo
puede ser doloroso.
En la casa 12 debemos intentar reconocer nuestra forma
de ser y encontrar el sentido de nuestra existencia. Las
personas muy extrovertidas tienen dificultades importantes con este espacio porque est muy alejado del campo
de actividad externa y, en realidad, conduce a una dimensin espiritual y trascendental.
101
hacen que la persona entre en escena con una gran seguridad en s misma.
Con el Sol en la casa 1 no pasamos inadvertidos, captamos la atencin de los dems, nos perciben y nos tienen
en cuenta. Conseguimos llevar a cabo nuestros propsitos en la vida y nos aseguramos de que nuestros deseos se
tengan en cuenta. Nos construimos una imagen que
transmita claramente al mundo lo buenos, simpticos y
guapos que somos, y lo que somos capaces de hacer.
En la casa 1 vemos el mundo a travs de nuestras propias
gafas y nos sorprendemos cuando los dems no reaccionan del mismo modo que nosotros.Tenemos una idea de
cmo debe ser el comportamiento de los dems y nos
desilusionamos cuando no coincide con la realidad.
En la casa 1 mostramos nuestro yo. En esta casa, en determinadas circunstancias, se pone de manifiesto si nos mostramos tal como realmente somos o si lo que mostramos
al exterior es tan slo una mscara que no tiene nada que
ver con nuestra esencia y que lo nico que pretende es
producir un determinado efecto en el observador. La casa
1 puede ser un lugar de engao, sobre todo de autoengao: depende de los planetas y los signos que la ocupen.
Tambin puede ser el espacio donde nos mostramos tal
como somos y donde salimos al encuentro del t y del
mundo de forma abierta y honesta.
Si el Sol se encuentra todava en la casa 12, justo antes
del AC, la persona intenta imponer su yo en el mundo
pero no lo consigue (esta zona situada antes del eje se
llama zona de estrs). La persona se esfuerza por llamar la
atencin pero los dems no la toman en serio. En esta
zona, el Sol (la autoconciencia) no consigue destacar o
103
La zona del t
Casas 6 y 7
(Virgo) (Libra)
La zona del t est en el lado opuesto
a la zona del yo.Aqu tambin tenemos
una casa pasiva que observa y reflexiona, y una casa activa que acta.
En la zona del t queremos conocer al t y comprender
como es. En esta zona intentamos entablar una relacin
ptima con el t. Ambas casas persiguen este propsito.
En la casa 6 queremos saber cmo se comporta el t
cuando nos presentamos ante l. En la casa 6 podemos
ver el efecto de nuestra propia casa 1. Estas dos casas estn
situadas una enfrente de la otra y ambas estn debajo del
horizonte.
En la casa 6 no solemos tener tanta suerte en el contacto
como en la casa 7. En la casa 6 lo esencial son los procesos de toma de conciencia. Antes de acercarnos al t, es
importante que nos conozcamos bien a nosotros mismos.
Si nos engaamos a nosotros mismos o engaamos a los
dems, no conseguimos llegar al t. Cuando fingimos, nos
104
Los contenidos que emergen del inconsciente son siempre ideas o conceptos que estn en sintona con el orden
de la naturaleza y que quieren ser completamente orgnicos. Estas estructuras estn en armona con el inconsciente colectivo y no son factores perturbadores para el
desarrollo de la personalidad. En cambio, el pensamiento
colectivo, por ejemplo, la opinin pblica o las tendencias
de moda, pueden superponerse al propio saber interior e
impedir el pensamiento autnomo. Esto ocurre con ms
frecuencia de lo que, aparentemente, puede parecer.
El pensamiento astrolgico es una forma de pensar
arquetpica. Cuando una persona se acerca a la astrologa,
en general, lo hace por uno de los siguientes motivos:
porque alguien le ha dicho que la astrologa es interesante o porque, con su saber interior, capta intuitivamente el
contenido arquetpico de los smbolos y se identifica con
el mismo. Las personas que rechazan la astrologa se identifican con una estructura mental superpuesta: el pensamiento cientfico, que no acepta nada que no pueda
explicarse racionalmente. Muchas personas tienen dificultades para reconocer abiertamente su inters por la
astrologa porque el pensamiento cientfico-racional
acta como una superestructura que retiene estas antiguas verdades simblicas en el inconsciente colectivo sin
dejarlas emerger. Pero cuando alguien se abre a esa
dimensin de formas de pensamiento arquetpicas, enseguida comprende el significado de los smbolos astrolgicos (vase Obras Completas, vol.VII de C.G. Jung).
La casa 3 es el espacio donde se desarrollan estas formas
de pensamiento del colectivo o superestructuras mentales. En cambio, la casa 4 puede conducirnos directamente al inconsciente. Cerca del IC, el punto ms profundo
108
del horscopo, podemos encontrar el camino que conduce a las madres (nombre con el que tambin se conocen los espacios arquetpicos).
La casa 3 muestra cmo est estructurado nuestro pensamiento, esto es, la forma de pensar que se nos inculc
en la infancia. La estructura de nuestro pensamiento est
enormemente influenciada por el entorno en el que crecimos. Las costumbres y las formas de pensar habituales
de nuestro entorno familiar ejercen una gran influencia
en nuestra forma de pensar y le dan una coloracin
determinada (normalmente de manera inconsciente).
Son convicciones bsicas que se consideran normales en
nuestro entorno, a las que apenas podemos objetar nada.
Es el pensamiento colectivo, un pensamiento de carcter
axiomtico que crea hbitos mentales inconscientes
(tomar conciencia de ellos no es nada fcil). En la casa 3,
en gran medida, no pensamos de forma autnoma sino
que somos pensados, es decir, estamos altamente
influenciados y determinados por los criterios de valoracin y las formas de comportamiento del colectivo.
Con el Sol en la casa 3 nuestro nivel de autoconciencia
se mide por nuestros conocimientos sobre el saber colectivo. Contamos sobre todo con lo que hemos aprendido
y continuamente estamos interesados en ampliar nuestros
conocimientos, en conseguir una buena formacin, y en
tener un nivel aceptable de sentido comn.Tenemos una
habilidad especial para establecer contacto con personas
competentes que nos proporcionan conocimientos y que
pueden sernos muy tiles en nuestro desarrollo.Tambin
hacemos lo posible por mostrar a los dems nuestro nivel
de conocimientos: de esta forma obtenemos el reconocimiento y la aceptacin de nuestro entorno inmediato.
109
Casas fijas:
2
Tauro
Leo
Escorpio
11
Acuario
En las casas fijas se intentan asegurar los resultados llevando a cabo una organizacin y una planificacin intensas.
Esta forma de actuar permite obtener xitos y sacar lo
mximo posible de cada situacin con relativamente
poco esfuerzo pero tambin ocasiona una fuerte dependencia de las circunstancias y, como consecuencia, produce una cierta falta de libertad espiritual.
Esta dependencia de los estados o de las circunstancias de
los que la persona quiere aprovecharse desempea un
papel esencial en todas las casas fijas pero tambin representa su lado de sombra. Este deseo de estabilizacin de
los estados no es slo una cuestin de comodidad sino que
tambin persigue el objetivo de protegerse de posibles
peligros mediante la adopcin de medidas de seguridad.
En las casas fijas, lo ms importante es la seguridad. En la
casa 2, lo esencial es la seguridad material, en la casa 5 el
reconocimiento y la proteccin de la esfera de la propia
personalidad, en la casa 8 la obtencin de un puesto
seguro en la sociedad y en la casa 11 la organizacin y la
planificacin de todas las relaciones para asegurarlas.
Las personas con muchos planetas en las zonas de expansin intentan satisfacer su necesidad de libertad con una
ocupacin individual. En cambio, las personas con
muchos planetas en las zonas de contraccin intentan
organizar su vida de manera definitiva: quieren tener
seguridad en todos los mbitos, continuar viviendo en el
mismo lugar y relacionarse con personas que conozcan a
fondo. Estas personas hacen todo lo posible por mantener el orden establecido y organizan y regulan su vida
intensamente para que el orden y la tranquilidad no se
vean perturbados y su seguridad no se vea amenazada.
116
arriesgar, y queremos crearnos un mundo nuevo. La creatividad y la estructura propia del ser interior quieren desarrollarse y producir efectos, ya sea en el amor, a travs del
arte o mediante una organizacin particular de nuestra
vida, rompiendo las reglas, traspasando los lmites y
haciendo lo que nos apetece.Todo lo referente a esta casa
tiene que ver con la autorrealizacin y con la presentacin
de la propia personalidad. Las propias empresas y los propios productos (tambin los hijos) sirven a este propsito.
En la casa 5 queremos ser aceptados por el t. Por eso
hacemos cierto ruido a nuestro alrededor: para captar
la atencin del t. Es lo que se llama pavoneo. Queremos
impresionar al t del mismo modo que lo hacen los animales para atraer a su pareja. En la casa 5 queremos experimentarnos en una relacin ntima con una pareja. Por
eso buscamos la autoconfirmacin tambin en el erotismo y el amor con todas sus ilusiones y desengaos. Las
desilusiones amorosas nos afectan profundamente y si
nuestra autoestima depende excesivamente de nuestra
relacin de pareja, somos muy celosos de todo lo que nos
impida disfrutar este placer de la vida. Cualquier cambio
en las relaciones o en el contacto ntimo nos hace sufrir.
Intentamos aferrarnos al amor por todos los medios pero
debemos aprender que ste tiene sus propias reglas y que
no se puede manipular.
La casa 5 corresponde a Leo, el signo fijo de fuego.
Como en todos los signos fijos, hay una fuerte necesidad
de seguridad.
En la casa 5 buscamos esa seguridad mediante la delimitacin de nuestra esfera personal, a la que, eventualmente, tambin pueden pertenecer ciertas personas en calidad de posesin. Si alguien viola esta esfera personal o
122
Utiliza los recursos de los dems, se convierte en seguidora de individuos con personalidades ms fuertes o se
hace cargo de continuar un cometido dinstico.
En casos extremos, el comportamiento conformista llega
tan lejos que, en lugar de vivir su vida, la persona es vivida. Cuando esto sucede, se identifica completamente con
su funcin y con su papel, y pierde el contacto con la
realidad vital. Se limita a mantener la forma externa (la
maquinaria) sin cuestionarse el sentido de la vida y pierde la referencia de lo que es el ser humano. De este modo
el individuo se convierte en un misntropo y pierde el
contacto con el ser interior. Esto puede producir crisis
psicolgicas y espirituales que no son otra cosa que los
procesos de muerte y renacimiento de la casa de
Escorpio.
Estas crisis aparecen cuando la forma, la estructura o las
leyes oprimen a la persona de tal modo que le producen
un efecto asfixiante o cuando el estado imperante hasta
el momento se desmorona por cuestiones externas.
La vida reprimida en el interior de la persona, o lo que
es lo mismo, el yo prisionero de la rutina, encadenado a
las obligaciones y aferrado a las personas se rebela y se
dispone a andar su propio camino. Entonces la persona se
pregunta: Qu sentido tiene todo esto? Vale la pena
todo este esfuerzo? Tiene sentido continuar as, tan
fuertemente limitado por las reglas, las leyes y las obligaciones? Una duda que la corroe surge en su interior.
Con determinadas configuraciones de la casa 8 (sobre
todo cuando Saturno se encuentra en ella), esta duda es
permanente. Una consecuencia posible es lo que se
denomina la sabidura del pesimista, actitud en la que la
125
126
127
Fija
Mutable
128
Cuando no hay recetas definitivas, la solucin pasa forzosamente por la bsqueda de una tercera posibilidad: un
tercer polo.
Para avanzar en la comprensin de la posibilidad del tercer polo, a continuacin abordaremos el sistema de casas
desde la perspectiva de la polaridad de sus ejes.
del eje de posesiones: dos reas astrolgicas que estn claramente en conflicto. Como veremos ms adelante, la
solucin del conflicto requiere ir ms all de la actitud
dualista en trminos de o... o....
El eje fijo 5/11
Eje de relaciones
En este caso tambin tenemos en cuenta el lado en que se halla cada casa.
Evidentemente, el hecho de que la casa 11 se encuentre
en el lado del yo no significa que en ella no se produzcan relaciones con el t: lo nico que indica es que el
nfasis est puesto en el yo. En cambio, en la casa 5, lo
que se enfatiza es el t.
Como resultado de esta diferencia, el comportamiento
en cada casa es muy distinto.
En la casa 5 vamos hacia el t. Nos abalanzamos sobre l
y el resultado puede ser un contacto un tanto agresivo.
En esta casa, durante la toma de contacto, cada persona
utiliza su truco particular para llegar al t: siempre la
misma maniobra o el mismo artificio.
En la casa 5, el contacto est claramente determinado por
el instinto: buscamos una relacin fsica con connotaciones sexuales con el t.
El hecho de que cada individuo tenga su propio truco,
su artificio o su forma de pavonearse es muy significativo en el proceso de seleccin de pareja. Con su truco, el
individuo slo atrae a determinadas personas (no a
todas). Con su red particular, cada persona captura slo
133
Las polaridades
en la cruz cardinal
El eje cardinal 4/10
Eje de individualizacin
normalmente indicada en el horscopo por oposiciones en el eje de encuentro AC-DC) slo pueden resolverse tomando conciencia de uno mismo. Y esto se
produce en el eje 4/10, el eje de la individualizacin.
Ah nos ponemos de pie y nos mostramos en nuestra verdadera estatura. Con la columna vertebral y la cabeza
erguidas logramos una posicin estable que, adems, nos
permite ver bien lo que sucede a nuestro alrededor. Nos
damos cuenta de que nos hemos comportado incorrectamente con el t y decidimos cambiar nuestra conducta
adoptando una nueva actitud. Empezamos a valorar al t
y a ver a las dems personas tal como son en realidad.Tras
liberarnos de las proyecciones de nuestros propios deseos
e imaginaciones, podemos participar en un verdadero
encuentro con el t: un intercambio autntico que aporta felicidad a ambas partes. Para llegar a ser una verdadera pareja para el t, debemos estar seguros de nosotros
mismos y ser capaces de vivir independientemente.
decir, con la conviccin de que nuestra vida tiene sentido.Todo esto tiene que ver con la cuestin existencial de
la vida, con el derecho a existir y, en ltima instancia, con
el ser. En este eje, la realidad de la vida nos enfrenta una
y otra vez a este tipo de cuestiones. El problema es la
existencia en la disyuntiva de ser o no ser: un dilema
que slo puede resolverse desde la perspectiva psicolgica o espiritual.
En la casa 12 debo tomar conciencia de m mismo:
darme cuenta de quin soy, dnde estoy y cules son mis
puntos fuertes y dbiles. Las preguntas que debo hacerme son: Tengo algo que ofrecer al mundo? Soy de utilidad? Soy capaz de realizar mis tareas en la vida? Por
qu fracaso en la vida y en el trabajo? Soy una carga para
los dems? Soy capaz de sobrevivir por m mismo?
La casa 6 es el verdadero espacio de la lucha existencial.
Es un rea de la vida donde debemos hacer algo. Pero lo
esencial no es la actividad en s sino cmo la realizamos.
Debemos observar el entorno y observarnos a nosotros
mismos. Cmo realizamos el trabajo? Qu nos demanda el entorno? Qu debemos saber y qu debemos
aportar para poder convivir con los dems? Se trata de
encontrar una forma de vida en la que podamos emplear nuestras capacidades de forma ptima, de hallar nuestro hueco en el mercado: un lugar donde se requieran
nuestras capacidades. Encontrar ese hueco supone la
mejor confirmacin posible de la autoconciencia y de la
propia capacidad de superacin de la existencia. En este
eje, la autoconciencia se construye sobre la propia capacidad de trabajo y de rendimiento.
Las tensiones, los enfrentamientos y los fracasos en el trabajo y en la vida nos hacen tomar conciencia de nuestros
144
En la casa 9 las cosas son diferentes: siempre hay en marcha procesos de pensamiento originales, procesos mentales que no estn basados en ideas y conceptos aprendidos
de los dems sino en la propia percepcin de las cosas y
que, tras una intensa reflexin, producen resultados propios. En la casa 9 somos conscientes de nuestra capacidad
de pensar y estamos convencidos de que nuestra opinin
es tan buena o incluso mucho mejor que la de los dems.
En la casa 3 partimos de la base de que los dems (el
maestro, los profesores, el prroco, los padres) siempre tienen la razn. No tenemos una opinin propia y no nos
atrevemos a expresar nuestro parecer.Tendemos a dar por
buena la opinin de los dems y no reflexionamos demasiado sobre si las cosas son correctas o no.
El ser humano se mueve entre estas dos posibilidades
extremas: permanecer fiel a los patrones de pensamiento
del entorno que le han sido inculcados a lo largo del proceso de educacin y basar su vida en los mismos o tener
el valor de cuestionar estos patrones para, poco a poco,
liberarse de ellos, dirigiendo su desarrollo hacia la casa 9.
Quedarse en la cercana casa 3 o evolucionar hacia la lejana casa 9. Esto ltimo significa dejarse impresionar por
cosas que estn fuera del propio alcance, reconocerlas
como verdad o realidad, y despus intentar comprenderlas. Esto ocasiona una expansin de conciencia: un verdadero crecimiento. Es el estmulo de perseguir lo nuevo y
lo lejano, y de buscar nuevos caminos: un estmulo que se
encuentra de la casa 9.
Las posiciones planetarias en este eje indican si la persona tiende a ser conservadora y a quedarse con lo antiguo
(casa 3) o si, por el contrario, busca caminos nuevos y est
abierta al aprendizaje espiritual (casa 9).
150
La solucin de la polaridad
del eje 3/9
Una vez ms, el tercer polo nos ofrece
la solucin. La necesidad de solventar la
cuestin existencial hace que el terico
sublime de la casa 9 descienda de su
elevado pedestal y se ponga a trabajar como todos los
dems. Asimismo, muy a menudo la presuncin espiritual
del pensador independiente se ve equilibrada por el eje de
existencia. En el eje 6/12 o eje de existencia todos nos
confrontamos con la realidad, la necesidad y la exigencia
natural de sobrevivir. El hecho de tomar conciencia del
gran nmero de personas necesitadas de nuestro mundo
puede conmover al presuntuoso pensador independiente y
despertar en l la voluntad de ayudar y servir en el eje
6/12. Cuando se da cuenta de la responsabilidad que supone disponer de una capacidad intelectual como la suya en
151
un mundo lleno de personas necesitadas, se vuelve humilde. A partir de este momento empieza a emplear la fuerza
de su pensamiento en intentar solucionar los problemas
existenciales del ser humano, dedicndose a la enseanza,
el asesoramiento o a alguna actividad de tipo curativo.
La persona con nfasis en la casa 3 tiene problemas en la
vida por mantener unos esquemas mentales antiguos y
desfasados. Los problemas existenciales ponen de manifiesto que su patrn de pensamiento ya no sirve: debe
adaptar su pensamiento a los nuevos tiempos. Sus fracasos le hacen darse cuenta de que no puede continuar
como hasta ahora: debe cambiar. Esto la hace reflexionar
hasta encontrar la solucin de su dilema: emprender un
camino nuevo.
Los polos del eje 3/9 se encuentran y se equilibran en
el eje 6/12, que es un eje muy ligado a la realidad. En
la prctica cotidiana de la superacin existencial se pone
de manifiesto que el pensamiento colectivo es tan
importante como el pensamiento individual y viceversa. El individualista acaba reconociendo que en el pensamiento colectivo hay muchas cosas valiosas que no
pueden tirarse por la borda a la ligera. El equilibrio est
en el centro: lo que prevalece y se sigue empleando es
lo que la realidad acredita como vlido, lo que verdaderamente funciona, ya sean esquemas mentales aprendidos y empleados de forma habitual (casa 3) o resultados
de procesos mentales individuales (casa 9). En cambio,
si los esquemas mentales habituales, los prejuicios, las
opiniones fijas y los comportamientos chocan repetidamente contra la realidad, deben buscarse nuevos caminos (al menos, debe hacerse un esfuerzo en esta direccin, permaneciendo abierto a nuevas posibilidades).
152
Resumen
La cruz mutable siempre tiene que ver con tomar conciencia, reconocer, darse cuenta de algo.
En la casa 12, lo esencial es tomar conciencia del ser
interior y del sentido de la existencia: Existo o no existo? En la casa 6, lo primordial es tomar conciencia del
mundo y de nuestra relacin con l en lo referente a la
cuestin existencial: encontrar nuestro hueco en el
mercado. En la casa 3 se trata de reconocer nuestros orgenes y el grado de estructuracin de nuestro pensamiento por parte el colectivo. En esta casa est nuestra
sustancia mental bsica, el sustrato de pensamiento, lo
que llevamos con nosotros desde los primeros aos de
nuestra vida. Y en la casa 9 precipitan los resultados
finales de los procesos de pensamiento, reconocimiento
y toma de conciencia de todas las casas mutables en
forma de filosofa de vida propia: una filosofa de vida
a la que la persona llega por s misma.
Todos tenemos una filosofa con la que explicamos nuestra vida. Esta filosofa debe buscarse en la casa 9.Ah surgen las preguntas sobre el sentido de la vida: unas preguntas que estn intrnsecamente relacionadas con el eje
de existencia. En la casa 9 se trata de llegar a certezas
esenciales, aspectos que no son estrictamente necesarios
para resolver los problemas existenciales bsicos pero que
surgen de los conocimientos existenciales de la persona,
esto es, de la capacidad o incapacidad de salir adelante en
la vida y de darle un sentido a la misma.
Hemos visto los problemas resultantes de abordar las
polaridades de forma dualista en cada una las tres cruces.
Y tambin hemos visto que la solucin de las mismas la
153
154
7. La curva de intensidad
Introduccin.
La proporcin urea.
Diferencia de intensidad entre las casas y los signos.
La cspide de la casa.
El punto de inversin.
El punto de reposo.
Clculo de los puntos de reposo de las casas.
Las tres zonas de cada casa segn las cualidades
de las cruces.
Los procesos de desarrollo en tres fases
en el horscopo.
155
Introduccin
En este captulo nos ocuparemos de un elemento de
gran importancia para la interpretacin diferenciada de
los planetas en el sistema de casas: la curva de intensidad.
Esta curva o lnea de intensidad del sistema de casas permite distinguir tres zonas con distinta intensidad de
actuacin en cada casa.
En el grfico de la pgina siguiente, la curva de intensidad est representada mediante la lnea dentada exterior.
Como puede verse, se trata de una lnea con forma de
onda que recorre todo el sistema de casas. La intensidad
alcanza su punto mximo en las cspides de las casas y,
desde ah, desciende hasta llegar al mnimo en el llamado punto de reposo de cada casa. (N. del T.: punto de reposo
es la expresin que se emplea desde hace aos para referirse al punto de menor energa de cada casa pero no
debe olvidarse que, en alemn, la lengua del texto original, se emplea la palabra Talkpunkt, cuya traduccin
directa es punto valle. De este modo, en cada casa hay
un punto de cspide y un punto de valle). Este punto
coincide con el punto que resulta de la aplicacin de la
proporcin urea al tamao de la casa.
En realidad, este punto se encontr de forma pragmtica
en un largo proceso de investigacin. La coincidencia
con la proporcin urea se constat bastante despus. Por
esta razn existe una pequea desviacin (en el tercer
decimal) entre la cifra empleada para calcular la tabla de
velocidades del punto de la edad y de distancias del punto
de reposo y del punto de inversin en funcin del tamao de
cada casa (tabla PE-PR-PI) (cifra pragmtica: 0.615) y la
cifra correspondiente a la proporcin urea (0.618).
156
157
La proporcin urea
En la consideracin del espacio desde el punto de vista
dinmico, la ley de la proporcin urea tiene un significado de gran importancia. La proporcin urea divide un
segmento en dos partes de manera que la relacin entre
la parte menor y la parte mayor es igual a la relacin
entre la parte mayor y la suma de ambas:
a
b
b
= (a + b)
158
Signos y casas
161
Modo de funcionamiento
En ocasiones, los planetas no estn exactamente en la
cspide sino un poco antes o despus de la misma. Las
zonas que se hallan antes y despus de las cspides tambin tienen un significado especial.
Desde el punto de vista psicolgico, el esfuerzo por
alcanzar la cima (representada por la cspide de la casa)
ocasiona una crisis con un mecanismo de crisis especfico. Cuando estamos cerca de la cima o de la cspide,
debemos hacer un sobreesfuerzo para alcanzarla. Pero si
163
tiene intereses y obligaciones de tipo social, ya se interesa por la libertad del pensamiento creativo. Este inters
por el tema de la casa 9 est presente a partir de la posicin ms profunda de la curva de intensidad de la casa
8: el punto de reposo.
Si un planeta se halla antes de la cspide de la casa 10, la
persona todava tiene una actitud filosfica (relacionada
con la cualidad del planeta) pero ya se interesa por su
carrera personal, es decir, quiere hacer realidad lo que ha
concebido con su pensamiento en la casa 9.
Los planetas situados antes de una cspide estn en un
dilema: todava estn ocupados con el tema de la casa en
la que se encuentran pero sienten la atraccin del tema
de la casa siguiente. Las energas se concentran en lo que
viene.
Los planetas situados despus de una cspide se identifican plenamente con el tema de la casa correspondiente. Esta claridad en los objetivos hace que estos planetas
puedan emplearse exitosamente en la vida. En general,
estos planetas son ms eficientes que los que se encuentran antes de la cspide.
Esta diferenciacin es muy importante, sobre todo en la
interpretacin de horscopos de gemelos. Muchas veces,
la nica (aunque esencial) diferencia entre ambos horscopos es que un mismo planeta est en un caso antes de
un eje y en el otro despus.
En general, en el sector que va desde la cspide hasta el
punto de reposo, la intensidad es mayor. En este sector, el
empleo de las energas del planeta en la vida es mucho
ms efectivo porque no hay discrepancias en cuanto a la
165
direccin de la energa ni tampoco en cuanto a la temtica de la casa. Dentro de este sector hay otro punto de
gran importancia: el punto de inversin.
En las cspides de las casas, los planetas u rganos de funcin tienen la efectividad mxima hacia el exterior. El
efecto es, con frecuencia, tan expansivo que resulta difcilmente controlable y fcilmente puede conducir a un
derroche de energa. Pero si estn alejados del intenso
efecto estimulante de la cspide, ya se encuentran en el
mbito de influencia del punto de reposo y estn sometidos al efecto de freno del mismo, lo que hace necesario
166
Modo de funcionamiento
En el punto de inversin (PI), la curva de intensidad alcanza un nivel bastante bajo. En este punto se comprende
que las fuerzas no durarn siempre, que hay que dosificarlas y que es mejor actuar de manera reflexiva y organizada que derrochar las energas dejndose llevar por la
euforia.
En el punto de inversin, las fuerzas polares alcanzan un
estado de equilibrio que se mantiene con la inteligencia
y la voluntad. Pero no se trata de un equilibrio esttico
sino dinmico: un equilibrio que surge del tercer polo.
Las energas se emplean en la medida justa y adecuada.
Las fuerzas actan conjuntamente en un proceso de
equilibrio antagnico. Cada fuerza controla a las dems.
Debido a este efecto disciplinador, los planetas que se
encuentran en un punto de inversin pueden emplearse
de forma controlada y exitosa en la vida.Aqu, el impulso no es excesivo (como lo era en la cspide) y las fuerzas estabilizadoras no conducen a estados rgidos ni de
167
CUALIDAD: En el punto de reposo las fuerzas que proporcionan impulso alcanzan un estado de paralizacin. La actividad vital no est orientada hacia
el exterior sino hacia el interior. Las fuerzas se
repliegan hacia dentro, lo cual produce estabilizacin y profundizacin. En los puntos de
reposo siempre se dan procesos de maduracin, recogimiento interior y reorientacin.
Con frecuencia se produce una transformacin que da lugar a un nuevo comienzo.
Con los planetas en puntos de reposo podemos procesar, elaborar y asimilar experiencias, vivencias, acontecimientos y
reconocimientos. En el punto de reposo hay que hacer balance y sacar conclusiones de las experiencias, los fracasos y los
deseos no satisfechos. El punto de reposo tiene una cualidad
relacionada con la interiorizacin y la introspeccin. En los
puntos de reposo tenemos acceso al centro, a nuestra esencia,
al mbito del alma, a experimentar de forma directa nuestro verdadero yo. En ellos, podemos tener experiencias
vivenciales de autoobservacin y autopercepcin.
IDEA CENTRAL: Las capacidades y cualidades de los planetas
situados en puntos de reposo o cerca de los
mismos actan hacia dentro y no pueden
emplearse de forma efectiva en la vida exterior. Necesitan un tipo de estmulo especial
y su desarrollo requiere mucho tiempo.
Modo de funcionamiento
En nuestra sociedad actual, que tanto valora el rendimiento, los planetas en punto de reposo suelen ser un tanto problemticos. El entorno no muestra inters por esas capacidades, que apenas encuentran confirmacin en la vida. La
situacin vital no demanda nada de estos planetas y apenas
se encuentra la forma de emplearlos. Segn el planeta de
que se trate, esta situacin puede ser bastante dolorosa.
Los planetas transpersonales no se sienten tan afectados
como, por ejemplo, el Sol o Marte, que son planetas que
necesitan actuar porque la accin les proporciona tanto
autoconfirmacin como confirmacin por parte del
entorno. Si estas capacidades no encuentran respuesta
suficiente en el entorno, pueden provocar perturbaciones
psquicas y nerviosas, depresiones y situaciones de estancamiento relacionadas con complejos.
Por eso es importante comprender las posiciones de
punto de reposo desde la perspectiva espiritual. Las capacidades representadas por los planetas en puntos de reposo
pueden considerarse como puertas de entrada o puntos de acceso al centro esencial de la persona (representado por el crculo central del horscopo).Vistos as, estos
planetas nos ofrecen una oportunidad espiritual: entrar
en contacto con nuestras cualidades anmicas. Con estos
planetas podemos dirigirnos conscientemente hacia
nuestro centro y encontrar unas posibilidades de crecimiento completamente diferentes de las cualidades
extrovertidas que nos ofrecen los planetas de las cspides
de las casas.
Sin embargo, la mayora de las personas no comprenden
qu exigen estas posiciones y se bloquean ante los impulsos
171
evolutivos del ser interior. Lo que hay que hacer con los
planetas en puntos de reposo es escuchar la voz interior,
sintonizar con la voluntad del verdadero yo, interiorizar,
cultivar el desapego y dejar espacio para que se manifieste la nueva vida que quiere emerger. De este modo permitimos que se libere energa fresca y nueva de nuestras
inagotables fuentes anmicas y fortalecemos nuestro
enraizamiento en el ser interior. Dejamos de vivir una
vida dirigida por estmulos y tareas externas, e intentamos vivir en sintona con nuestro verdadero yo. Una vez
que hemos tenido la experiencia de unidad con el ser
interior, slo deseamos que en nosotros se produzca una
transformacin fundamental que nos d una nueva
orientacin que est en sintona con nuestra esencia.
Sentimos la necesidad de emprender un camino nuevo.
Este cambio tiene lugar en el punto de reposo y cuando
empieza nos vemos obligados a soltar todo lo que habamos alcanzado hasta el momento, todo aquello que
nos era familiar y a lo que estbamos acostumbrados,
para estar libres y disponibles para lo nuevo, para lo que
debe ser. Esto no es fcil, puesto que solemos estar apegados a nuestras posesiones y a nuestro status. Pero la
renovacin exige este cambio interior. Esta transformacin tiene que ver con los procesos de muerte y renacimiento que tienen lugar, en mayor o menor medida,
en todos los puntos de reposo y que debemos experimentar. Evidentemente, las vivencias de punto de reposo son
diferentes segn se trate de una casa cardinal, fija o
mutable.
En los puntos de reposo de las casas cardinales, la fuerza
impulsiva est retenida y dirigida hacia el interior. Tal
vez, como compensacin, la actividad se incremente y se
172
convierta en una finalidad en s misma pero los resultados que se obtienen no son satisfactorios, lo cual puede
provocar depresiones y obstinados intentos de evasin.
En las casas fijas, el punto de reposo produce una sensacin de inseguridad que hace que la persona intente
mantener los estados alcanzados, las posesiones y todo
aquello a lo que est acostumbrada por todos los medios
posibles. Pero esto suele degenerar en una rigidez importante que, como consecuencia, produce aislamiento.
En las casas mutables, el cambio y la renovacin plantean menos dificultades. La persona suele abrirse conscientemente a las fuerzas transformadoras de su propio interior. Reorientarse hacia metas nuevas resulta ms fcil en
estas casas puesto que la disposicin a dejar atrs las situaciones estticas es una de las caractersticas tpicas de la
cruz mutable.
De todos modos los planetas en punto de reposo suelen
ejercer una presin considerable sobre la autoconciencia,
puesto que nunca reciben la suficiente confirmacin por
parte del entorno.
Ejemplo
Tomemos como ejemplo un Sol que se encuentra en el
punto de reposo de una casa pero que, al mismo tiempo,
se halla a 12 de un signo, es decir, que est en el punto
ms fuerte por signo y en el ms dbil por casa. La
autoconciencia podra ser muy fuerte puesto que el Sol
est a mitad de signo pero la posicin en el punto de reposo elimina cualquier posibilidad de encontrar un eco en
la vida: no puede mostrarse hacia fuera de la manera
adecuada.
173
23
1 En total:
24
176
Tabla PE-PR-PI
Paso del
PE
Mensual
Anual
Tamao
de la
casa
PR
Paso del PE
PI
Mensual
Anual
Tamao
de la
casa
PR
PI
9
10
10
11
12
13
14
15
15
16
17
18
19
20
20
21
22
23
24
25
25
26
27
28
29
30
30
31
32
33
34
10
0
50
40
30
20
10
0
50
40
30
20
10
0
50
40
30
20
10
0
50
40
30
20
10
0
50
40
30
20
10
1
2
2
2
2
2
2
3
3
3
3
3
3
4
4
4
4
4
4
5
5
5
5
5
5
6
6
6
6
6
6
50
0
10
20
30
40
50
0
10
20
30
40
50
0
10
20
30
40
50
0
10
20
30
40
50
0
10
20
30
40
50
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31
32
33
34
35
36
37
38
39
40
41
6
7
8
8
9
9
10
11
11
12
12
13
14
14
15
16
16
17
17
18
19
19
20
21
21
22
22
23
24
24
25
47
24
2
39
16
53
30
7
44
21
58
35
12
49
27
4
41
18
55
32
9
46
23
0
37
14
52
29
6
48
20
54
59
4
9
14
19
24
29
34
38
43
48
53
58
3
8
19
12
23
28
33
38
42
47
52
57
2
7
12
17
22
4
4
4
5
5
6
6
6
7
7
8
8
8
9
9
9
10
10
11
11
11
12
12
12
13
13
14
14
14
15
15
12
35
57
20
43
6
29
52
15
38
1
24
47
10
32
59
18
41
4
27
50
18
36
59
22
45
7
30
53
16
39
6
1
56
51
46
41
36
31
26
22
17
12
7
2
57
52
47
42
37
32
27
22
18
13
8
3
56
53
48
43
38
35
35
36
37
38
39
40
40
41
42
43
44
45
45
46
47
48
49
50
50
51
52
53
54
55
55
56
57
58
59
60
0
50
40
30
20
10
0
50
40
30
20
10
0
50
40
30
20
10
0
50
40
30
20
10
0
50
40
30
20
10
0
7
7
7
7
7
7
8
8
8
8
8
8
9
9
9
9
9
9
10
10
10
10
10
10
11
11
11
11
11
11
12
0
10
20
30
40
50
0
10
20
30
40
50
0
10
20
30
40
50
0
10
20
30
40
50
0
10
20
30
40
50
0
42
43
44
45
46
47
48
49
50
51
52
53
54
55
56
57
58
59
60
61
62
63
64
65
66
67
68
69
70
71
72
25
26
27
27
28
29
29
30
30
31
32
32
33
33
34
35
35
36
37
37
38
38
39
40
40
41
42
42
43
43
44
57
34
11
48
25
2
39
17
54
31
8
45
22
59
36
13
50
27
4
42
19
56
33
10
47
24
1
38
15
52
29
27
32
37
42
46
51
56
1
6
11
16
21
26
31
36
41
45
50
55
0
5
10
15
20
25
30
35
40
45
49
54
16
16
16
17
17
17
18
18
19
19
19
20
20
21
21
21
22
22
22
23
23
24
24
24
25
25
25
26
26
27
27
2
25
48
11
34
57
20
42
5
28
51
14
37
0
23
46
9
32
55
18
40
3
26
49
12
35
58
21
44
7
30
33
28
23
18
14
9
4
59
54
49
44
39
34
29
24
19
15
10
5
0
55
50
45
40
35
30
25
20
15
11
6
8
17
25
33
42
1
3
5
6
8
10
20
30
40
50
6
12
18
24
30
11
22
32
43
54
3
7
11
15
19
49
38
28
17
6
40
20
0
40
20
177
En la zona que va desde la cspide hasta el punto de inversin predomina la fuerza de impulso de la cruz cardinal.
En la zona que va desde el punto de inversin hasta el punto
de reposo prevalece la energa estabilizadora y generadora
de forma de la cruz fija. Por ltimo, en la zona que va
desde el punto de reposo hasta la cspide de la casa siguiente, lo esencial es la toma de conciencia y el comienzo de
un camino nuevo, cualidades caractersticas de la cruz
mutable.
178
De PI a PR
De PR a CC
Cardinal
Rendimiento
Energa
Esfuerzo
Ejecucin
Proceso de creacin
Fija
Concentracin
Forma
Acumulacin
Estabilizacin
Utilizacin
Mutable
Distensin
Pensamiento
Descanso
Planificacin
Formacin de ideas
179
la
la
la
la
la
casa
casa
casa
casa
casa
1
2
3
4
5
En la casa 6
En la casa 7
En la casa 8
En la casa 9
En la casa 10
En la casa 11
182
Todo lo humano (las culturas, las formas de comportamiento, las obras, las relaciones, etc.) se desarrolla
segn este proceso y con esta secuencia: todo est
sujeto al proceso dinmico y cclico de las fuerzas de
la evolucin.
183
184
8. Interpretacin psicolgica
del horscopo
Interpretacin del horscopo ejemplo.
185
ilusin de ser alguien especial y, al mismo tiempo, la sensacin de que los dems no reconocen su vala personal.
El sentimiento de fracaso constante derivado de este
comportamiento puede producir sentimientos de culpabilidad que pueden acabar en depresiones que dificulten
e incluso imposibiliten un desarrollo armnico. Todo
depende de si los padres reconocen y estimulan la verdadera disposicin natural del hijo.
La Luna est en la cspide de la casa 9, lo que le permite desarrollarse hacia fuera: en esta posicin llega bien al
entorno y es bien aceptada en el mismo. Esto significa
que la Luna ofrece buenas posibilidades para el desarrollo de la personalidad.
Combinando esta posicin con la del Sol, vemos que esta
persona tiene muchas ms posibilidades de autorrealizacin en la vida a travs de los sentimientos (Luna) que a
travs de la autoconciencia (Sol). El proceso de individualizacin no debe estar basado en el Sol sino en la
Luna. En otras palabras, esto significa que la persona no
debe perseguir metas materiales ambiciosas sino que
debe llevar a cabo una tarea de ayuda y de servicio, ms
en sintona con una Luna Piscis y con los ideales humanitarios del cuadrante del ser.
El hecho de que tanto la casa 9 como el signo de Piscis
sean mutables es un factor importante. Indica que la casa
y el signo actan conjuntamente en la misma direccin.
Coinciden la disposicin hereditaria y la situacin vital
externa.
La casa 9 exige desarrollar procesos mentales propios. Debe
emplearse la reflexin para profundizar en el sentido de los
problemas y para descubrir la meta interior. El abnegado
190
signo de Piscis se amolda voluntariamente a las circunstancias existentes y la Luna se adapta instintivamente.
La posicin de la Luna indica que el propio pensamiento se basa en la comprensin emocional de la verdad y
que debe tomarse conciencia del mismo a travs de un
enfrentamiento con el pensamiento colectivo. La oposicin Luna/Neptuno en el eje de pensamiento dificulta
enormemente imponer el propio criterio frente a los
ideales que estn intensamente influenciados por el
colectivo. Desilusiones, dudas sobre s mismo y sobre el
mundo, miedo a la opinin pblica, al qu dirn y a que
los propios ideales sean despreciados, no tenidos en
cuenta o mal comprendidos, etc. La persona debe pasar
por todas estas experiencias para, despus, asimilarlas
espiritualmente e incorporar su esencia como verdad
descubierta por ella misma.
La Luna es el planeta que se encuentra ms cerca del
punto del t. Este planeta de contacto en el signo de
Piscis hace pensar en una intensa necesidad de amor y
comprensin. Su posicin en el lado del t indica que se
trata de una Luna fatigada por el entorno. El signo de
Piscis la hace muy sensible, susceptible y pasiva. Se deja
influenciar con facilidad y depende mucho de las opiniones del t. Estamos, pues, ante una persona que se adapta de buena fe a lo que se le pide que haga. De esta
voluntad de ser buena, esta persona hace toda una filosofa (cspide de la casa 9).
La oposicin Luna/Neptuno en el eje 3/9 o eje de pensamiento indica una problemtica aguda en el pensamiento cuya solucin debe buscarse en el eje 6/12. La
orientacin hacia valores espirituales y la tendencia a la
idealizacin por una parte y los deseos de adaptacin de
191
la Luna por otra deben emplearse de manera constructiva en la lucha existencial para evitar la formacin de un
abismo entre la realidad y los ideales. Esto podra conducir a la persona a refugiarse en un mundo ideal, al aislamiento y la soledad, lo cual, dadas sus necesidades de
contacto y amor, le supondra un gran sufrimiento.
Las capacidades especiales de esta persona y, con ellas, la
solucin del problema, tienen que ver con llevar a cabo
una tarea de cuidado y servicio: algo que debera tener
en cuenta en el momento de la eleccin de la profesin.
El tercer polo de la problemtica est en el eje de existencia. Marte en Cncer y en la cspide de la casa 12
indica la posibilidad de una profesin de ayuda, por
ejemplo en un hospital o en una residencia sanitaria. Si
estuviramos ante el horscopo de una mujer, su profesin podra ser la de enfermera. Si se tratara del horscopo de un varn, podra pensarse en un trabajo con nios
problemticos a raz de su historia familiar.
Las tendencias sociales y de ayuda de esta persona estn
confirmadas por la posicin de Venus que, en el punto de
inversin de la casa 9, indica el mejor camino para abrir
sus energas productivas y emplearlas exitosamente en la
vida. El Nodo Lunar y Jpiter tambin se encuentran en
puntos de inversin.
Resumiendo, puede decirse que el proceso de individualizacin y de formacin consciente del yo indicados por
la posicin del Sol en el cuadrante del ser, la acumulacin de planetas en esta misma zona, la posicin de la
Luna en la cspide de la casa 9 y el AC Leo podr llevarse a cabo mucho mejor realizando una tarea de servicio y ayuda a los dems. Una actividad de este tipo reforzar la autoconciencia de la persona y le permitir vivir
192
sin depender de la opinin de los dems, y con la seguridad y la certeza de estar ejerciendo su verdadera vocacin. De este modo, esta persona puede convertirse en
fuente de energa y apoyo interior para muchos, lo que
le reportar una sensacin de plenitud personal.
Como vemos, un horscopo puede sealar puntos dbiles en unas posiciones planetarias y ofrecer posibilidades
de solucin en otras. Esta informacin es de gran ayuda
para solucionar los problemas y afrontar las dificultades
en el camino de crecimiento personal. Esto convierte al
horscopo en una herramienta teraputica de gran valor
puesto que nos indica caminos y posibilidades para avanzar en el proceso de desarrollo personal.
En este ejemplo de interpretacin no hemos dicho nada
sobre las influencias de los planetas y los signos. Este
tema, junto con la interpretacin de la figura de aspectos, lo abordamos en el resto de libros de la coleccin
Psicologa astrolgica. Slo teniendo en cuenta todos estos
elementos es posible hacer una interpretacin correcta
que contemple tanto la globalidad del carcter como las
peculiaridades especficas de la persona.
En esta interpretacin nos hemos limitado a abordar los
temas tratados en este libro con el nico objetivo de
mostrar cmo emplear el sistema de casas en la prctica.
Como hemos visto, slo con el sistema de casas ya pueden identificarse factores esenciales del comportamiento
psicolgico que pueden ser de gran importancia, por
ejemplo, para la eleccin de la profesin.
193
Tabla de planetas
Publicacin prevista
2003
2002
2004
2003
2004
Publicacin prevista
2003
2002
2004
2004
2004
2004
2004
Publicacin prevista
2005
2005
Escuela de
Psicologa
Astrolgica
www.astro-api.ch
El API (Astrologish-Psychologisches Institut) o Instituto de Psicologa
Astrolgica tambin conocido como Escuela API o Escuela Huber
fue fundado en 1968 por Bruno y Louise Huber en Adliswil
(Zurich/Suiza).
El API es una escuela de astrologa reconocida internacionalmente.
Desde 1968, esta escuela forma astrlogos que se acercan a la psicologa
astrolgica como hobby, como parte del proceso de autoconocimento
o como profesin. La Escuela API tiene representaciones en
Alemania, Austria, Reino Unido, Espaa, Italia y Hungra. El inters
por una formacin profesional con buen fundamento se ha expandido.
Formacin de asesores astrolgicos como profesin. Desde 1973, el
API forma asesores astrolgicos con el objetivo de hacer accesible
la psicologa astrolgica al gran pblico como herramienta de ayuda
en la vida. Muchos de los asesores astrolgicos que se han formado
en nuestra escuela han encontrado en esta nueva profesin una actividad satisfactoria y llena de sentido. La formacin como asesor
astrolgico dura aproximadamente tres aos y finaliza con la obtencin del diploma API.
El API dispone de profesores competentes. La formacin en el API
se lleva a cabo en cursos, seminarios de fin de semana, seminarios
de vacaciones y tambin mediante un curso a distancia. Adems de
los libros sobre psicologa astrolgica y del material de los cursos, el
API edita la revista Astrolog con una frecuencia bimensual. Desde
1989, tambin est operativo el API Internacional, una asociacin
profesional de asesores astrolgicos.
SPAIN
Escuela Huber
de Astrologa
www.escuelahuber.org
La Escuela Huber de Astrologa se organiz en
Espaa en 1990. Su objetivo principal es el de servir
de puente a las personas de habla hispana interesadas
en conocer y aprender el enfoque astrolgico de
Bruno y Louise Huber que se imparte en el
Astrologish-Psychologisches Institut (API) de Suiza.
Ofrece: