Mather Anne Sueno de Una Adolescente

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ANNE MATHER

Sueo de una adolescente (1983)


Ttulo Original: Storm in a Rain Barrel
Coleccin: Julia 36 28/09/83
Protagonistas: JAMES Y DOMINIQUE
Argumento:
Despus de la muerte de su to, Dominique qued bajo la tutela de James Mannering hasta su mayora
de edad. James posea un irresistible atractivo que enloqueca a as mujeres, y fue inevitable que
Dominique sucumbiera a sus encantos. Pero para l slo era una nia... y ella no estaba dispuesta a que la
tratara de esa forma.

Captulo

ERA una tarde lluviosa, a travs de la ventana se podan contemplar los rboles sacudidos por el
viento. No haba pasado mucho rato, cuando empez a tronar. A Domini-que le asustaban las tormentas.
Desde su habitacin, vea el patio que rodeaba el convento; siempre se haba quejado, porque el muro
haca que se sintiera prisionera, pero ahora le ofreca tranquilidad.
Por qu no habra llegado? Qu le habra hecho retrasarse? Estaba impaciente por la llegada de
James Mannering.
Se levant del silln para dar vueltas por la habitacin. Eran las tres y media, pero el da estaba tan
oscuro que parecan las siete. Dominique se senta deprimida.
Volvi a mirar por la ventana. No le agradaba esperar. Cogi su bolso y sac una cajetilla de cigarrillos
que ocultaba en el fondo, ahora nadie podra prohibirle que fumara uno o varios cigarros al da, a no ser
que James Mannering no permitiera que las jovencitas fumaran. Las monjitas, con las que haba vivido

tantos aos, le haban prohibido fumar dentro del convento. Dominique no quera que la hermana Theresa
la encontrara fumando, aunque ahora dejara de ser responsabilidad de la comunidad
Encendi su cigarrillo y sigui mirando por la ventana; observaba la verja, todos los coches tenan que
entrar por all. Oy el ruido del motor de un coche, que pas de largo. Seguramente se trataba de alguien
que pasaba delante del convento por casualidad.
Dominique temblaba al pensar lo que sucedera a partir de ese da. Es que acaso James Mannering no
imaginaba su estado de nimo y la inseguridad de encontrarse tan de repente ante una nueva vida? Por
qu tardaba tanto tiempo en llegar?
Se levant y apag el cigarrillo, guard la colilla en la caja de cerillas y la volvi a meter en el bolso.
Se mir en el pequeo espejo de su polvera, uno de los pocos que haba en el convento y la imagen que vio
no le agrad demasiado. Se preguntaba qu pensara de ella James Mannering cuando la viera. Cmo sera
l? Cul habra sido su reaccin al saber que se converta en tutor de una chica de diecisiete aos?
Se retir el pelo de la cara y se mir en el espejo. Su piel era muy blanca, y sus ojos, bastante
grandes. Las cejas y las pestaas las tena oscuras, y le resaltaban mucho con el maquillaje que les
permitan usar en ocasiones especiales las monjas; tambin se pint los labios, aunque en un tono bastante
plido. Su pelo, moreno y muy largo, brillaba gracias a que lo cepillaba con regularidad, pero no lo luca, ya
que tena que llevarlo siempre recogido.
Guard la polvera mientras pensaba en lo que le dira a James Mannering cuando le conociera. En
realidad, saba muy poco de l, ignoraba cmo tratarle. Tena ms de cuarenta aos y se dedicaba a
escribir obras de teatro, seguramente hablara con un lenguaje bastante cuidado. Slo en una ocasin
haba odo hablar de l a unos actores, en un caf en el que estaba con dos amigas, y esto haba sido haca
ya mucho tiempo. Supuso que sera una especie de to para ella, aunque no les una ningn vnculo familiar.
No acababa de entender los propsitos del to Henry. Qu era lo que esperaba nombrando a James
Mannering su heredero, despus de que durante tantos aos no le haba reconocido como hijo?
Apart de su mente ese pensamiento, el dinero era lo que menos le importaba, pero si esto hubiese
sucedido seis meses ms tarde, ella tendra entonces dieciocho aos y todo hubiera resultado mucho ms
fcil. Sera mayor de edad y podra rechazar la caridad que ahora le ofrecan.
No haba otra alternativa, tendra que acatar los deseos del to Henry. Durante los nueve aos que
haba estado bajo su custodia, nunca estuvo en la casa que posea en Yorkshire, conocida con el nombre de
Grey Witches. l pasaba all nueve meses del ao, y los tres restantes se los dedicaba a Dominique. La
llevaba a un hotel en Bognor sin fallar un slo ao y all celebraban la Semana Santa, las Navidades y
pasaban las vacaciones de verano.
Apoy la barbilla en sus dos manos y sigui recordando su niez bajo la tutela de su to. Gracias a l
haba estado en este convento y debido a su generosidad haba recibido una educacin completa. An

recordaba el accidente ferroviario en el que sus padres haban perecido. Todava escuchaba el rechinar
de los vagones, los gritos de las mujeres y el llanto de los nios al volcarse los trenes. Tembl una vez
ms, como lo haca cada vez que una pesadilla la despertaba a media noche. No le sera fcil olvidar aquella
escena.
El to Henry la sac del orfanato y la ingres en el convento con las hermanas. No poda hacerse cargo
de la pequea, pero pens en alguien que lo hiciera por l y quin mejor que personas entregadas a Dios
para educar a una nia. l no era creyente, paro respetaba la religin y lo que sta representaba. As que
Dominique estuvo al cuidado de las monjas durante nueve aos, dejando el convento slo tres meses al
ao, cuando su to la recoga y la llevaba a Bognor.
Ella pensaba que cuando saliera del convento podra ir a la universidad. Era una chica inteligente y las
hermanas la animaban a seguir adelante.
Pero con la muerte de su to todo cambiaba y no saba cmo sera su vida a partir de ahora.
La generosidad del to Henry para con ella, fue admirable a pesar de que haba sido slo un pariente
poltico; contrajo matrimonio con la hermana de su abuela y se hizo cargo de ella sin obtener con ello
beneficio alguno. No tuvo hijos, o al menos eso afirmaba, y le dio a Dominique la oportunidad de adquirir
una educacin excelente.
La hermana Teresa hizo que abandonara sus pensamientos al abrir la puerta.
Dominique dijo sonriendo Ests lista?
Quiere decir que ha llegado? pregunt sintiendo que el corazn le lata con rapidez.
El seor Mannering acaba de llegar. Debido a la tormenta, creo que ha tenido dificultades para
encontrar el convento. Adems, no hay muchas seales que indiquen el lugar.
No he odo llegar al coche coment Dominique extraada.
La lluvia impide or muchos ruidos del exterior, o tal vez estabas totalmente abstrada en tus
pensamientos.
Dominique haba estado durante unos cuantos minutos, recordando su infancia, y no haba prestado
atencin a ningn sonido.
Se levant, y se coloc bien la falda, se senta bastante aniada con el uniforme, le hubiera gustado
presentarse ante James Mannering con otra ropa, pero saba que hubiera resultado ridicula y absurda.
Camin detrs de la religiosa por un largo pasillo y despus por una escalera que conduca a la planta
baja; all, en medio del vestbulo, haba una estatua de la Virgen con el Nio, que lo haca ms acogedor.

Ella no era catlica y nunca haba sentido ninguna inquietud por conocer la religin cristiana, pero en ese
momento, al ver la imagen, sinti que una fuerza desconocida la envolva.
La hermana Teresa llam a la puerta de la oficina de la Superiora y le dio un empujoncito a Dominique
para que entrara la primera. La joven recorri la habitacin con la mirada y le vio de pie ante la ventana.
La Superiora estaba sentada tras su escritorio. Unas lmparas iluminaban el pequeo despacho oscurecido
por los nubarrones que cubran el cielo.
Cuando oy el ruido de la puerta al cerrarse, l se volvi y mir a Dominique. En realidad no era como
le haba imaginado. Era alto, de espaldas anchas y ojos grises. Su cabello era oscuro y tena unas grandes
patillas. No se poda decir que era un hombre bien parecido, ya que sus facciones eran toscas. Pero en
conjunto, resultaba bastante atractivo. Era difcil calcular su edad, pero no pasaba de los cuarenta, y
pareca mucho ms joven. Y desde luego, su apariencia era muy diferente de la que Dominique haba
imaginado. El traje que llevaba era oscuro y bien cortado, la chaqueta la llevaba abierta, ya que en ese
momento tena las manos metidas en los bolsillos del pantaln. Pequeas gotas de lluvia brillaban en su
cabello. Dominique mir a la Superiora y se dio cuenta de que la anciana no estaba an muy convencida de
entregarla al visitante.
Se levant cuando Dominique se acerc al escritorio y, por el tono con el que se dirigi a ella, supo que
no deseaba demostrar lo que realmente senta.
Querida Dominique, el seor Mannering ha venido para llevarte a casa.
Dominique era incapaz de hablar Cul sera esa casa a la que se refera? El hotel en Bognor, su casa
o Grey Witches?
Cmo est usted? dijo tendindole la mano.
l cogi la mano entre las suyas, Dominique pens que lo nico bonito en l eran esas manos, largas y
delgadas.
Hola, Dominique. Ests lista para partir?
Pero... titube la superiora , es que no tomar el t con nosotras, seor Mannering? As le dara
la oportunidad a esta nia de conocerle un poco. Despus de todo, es la primera vez que le ve.
No nos conocemos, ya lo s, pero no creo que podamos hacerlo en presencia de un tercero replic
con sarcasmo . Adems, me gustara llegar a Londres antes de la cena y con este tiempo no s cunto
tardaremos.
Dominique sinti una extraa sensacin en el estmago. Ahora se daba cuenta de que bajo la tutela
0de este hombre, debera obedecer sin replicar. La Superiora observ su nerviosismo y coment:

Debo insistir en que tomen el t con nosotras. Me interesa conocer los planes futuros para
Dominique, es una de nuestras mejores alumnas y podra decir que la ms inteligente. Deseo enterarme de
los proyectos que tiene para ella.
James Mannering sac una cajetilla de cigarrillos de su bolsillo derecho y encendiendo uno, respondi
un poco molesto:
De acuerdo, tomen el t, yo las acompaar mientras fumo, si no le molesta.
La religiosa le mir, se dirigi a la puerta y abrindola un poco, llam a la hermana Teresa para que les
llevara una bandeja con el t y unas pastas.
l tom asiento cerca de la ventana, Dominique a un lado del escritorio. Esta situacin era realmente
inusitada. Ahora entenda un poco a James Mannering, de repente se encontraba a cargo de una
adolescente sin experiencia en la vida, sin ningn trato social. Sus nicos contactos con el mundo exterior
haban sido sus salidas al teatro, el cine, o a alguna funcin de caridad en compaa de su to.
Lo poco que conoca de la vida fuera del convento, era lo que sus compaeras comentaban. Susan, por
ejemplo, tena dos hermanos mayores con los que comparta momentos muy agradables. La haba odo
hablar sobre ropa, discos, amigos y de muchos temas que interesaban a chicas de su edad.
La religiosa abord a Mannering con preguntas sobre los planes futuros para su alumna, pero no
obtuvo mucha informacin, por la que opt por preguntar a Dominique:
Has hecho algn plan? Has pensado en cmo pasaras el tiempo fuera de aqu?
Creo que es un poco prematuro hablar de ello, pero, dentro de seis meses, cuando la tutora del
seor Mannering llegue a su fin, buscar trabajo en una oficina, o en alguna librera. Supongo que con mis
excelentes calificaciones no tendr ningn problema para ser contratada.
Vamos, madre dijo James Mannering , no entiendo porqu tanta preocupacin. Dominique ha
sido puesta bajo mi custodia y yo velar por su bienestar; por su expresin cualquiera pensara que la
estoy comprando en un mercado de esclavas aadi sonriendo. La Superiora le mir con indiferencia y se
dio cuenta de que Dominique se ruborizaba al escuchar sus palabras
Nunca hemos insinuado tal cosa, seor Mannering, simplemente debo conocer qu es lo que esta nia
va hacer de ahora en adelante. Para una chica de su edad es necesario conseguir una buena posicin, para
sacar provecho a sus cualidades.
Mannering la mir framente y le pregunt:
A qu se refiere con una buena posicin?

La hermana se ruboriz.
No creo que deba contestar a su pregunta. Me parecen bien las ideas de Dominique. Estoy de
acuerdo con ella.
En efecto, est de acuerdo con empleos sencillos e insulsos, que estn a tono con la monotona y
reglas que rigen este lugar dijo l con franqueza . Pero pienso que Dominique puede realizar otro tipo
de trabajo y no encerrarse en un banco o en una oficina. Hay ocupaciones ms interesantes para una chica
de su edad, y adems estn muy bien remuneradas. Por ejemplo: la publicidad, la pintura, o algo ms
excitante, como el teatro.
Es evidente que estamos hablando de cosas diferentes, seor Mannering. Acaso porque usted se
dedique al teatro, tiene que gustarle a Dominique?
Por supuesto que no, hermana! se puso de pie mientras aada : De todas maneras no veo el
objeto de esta conversacin, Dominique no trabajar por ahora.
Por qu? pregunt la joven asombrada.
Ya hablaremos aadi indiferente, se abroch su chaqueta y prosigui : No creo que sea el
momento oportuno para llegar a un acuerdo, la tendr al tanto de las actividades de Dominique, hermana.
Y ahora, creo que debemos irnos, se ha hecho tarde y como ya les he dicho antes, deseo llegar a Londres
antes de la cena.
La Superiora no tuvo otra alternativa, mand a Dominique a recoger sus cosas y a despedirse de sus
compaeras. Susan Johnson la esperaba impaciente:
Vaya fenmeno! No me digas que es James Mannering.
Qu fenmeno? pregunt Dominique en tono cortante.
No me digas que no te has dado cuenta de que es guapsimo! replic Susan . Jane y yo
estbamos en el vestbulo cuando lleg. Es l?
S respondi Dominique, mientras guardaba los objetos del tocador en un fin de semana, y los
colocaba junto a su maleta que ya estaba preparada.
No te veo muy contenta dijo Susan moviendo la cabeza . Evidentemente no es como te lo habas
imaginado. Dominique se dirigi a la puerta.
Estoy de acuerdo contigo, pero debo aadir que no s absolutamente nada de l. Ni siquiera conozco
el lugar donde voy a vivir.
Sabes que es un escritor conocido y despus de todo, t no tienes ningn inters especial por l,

verdad? No es mi intencin ofenderte, pero creo que eres un poco ingenua.


Yo? pregunt Dominique riendo.
Envidio tu suerte, estar bajo la tutela de un hombre como l y conocer gente del medio en el que se
desenvuelve, debe ser fascinante. Me gustara estar en tu lugar, para poder casarme con algn tipo que
tenga posibilidades de xito.

Espero que me escribas, Susan. Tan pronto como conozca mi direccin te la enviar.
Claro que s! Y alguna vez me puedes invitar a pasar unos das contigo.
Dominique se dirigi a la escalera. Empez a bajar y le observ, esperndola junto a la Superiora. Al
verla, subi los escalones que los separaban, dejando a la religiosa con la palabra en la boca, y le cogi sus
maletas. Este detalle la sorprendi, ya que estaba acostumbrada a hacerse todas las cosas ella misma, le
mir y advirti en sus ojos un destello de burla, como si se alegrara de tener que dejar a la hermana. Por
lo visto, no deseaba escuchar ms sermones.
La hermana Teresa y la Superiora los acompaaron a la puerta. Dominique se puso la gabardina y
cuando James abri la puerta, le dijo:
Espera aqu! Acercar el coche.
Enseguida escucharon el motor del coche y le vieron acercarse a la puerta. Dominique se despidi de
las hermanas y corri hacia el coche sintiendo que un nudo le oprima la garganta. Ya instalada en el
confortable asiento vio cmo James Mannering bajaba y se despeda de las religiosas. Ella les dijo adis
con la mano, y el coche arranc dejando atrs gran parte de su vida.
La joven observaba cmo caa la lluvia a raudales sobre el coche y pens que a partir de entonces,
cuando se viera en medio de una tormenta, recordara ese momento. James condujo en silencio desde el
convento, que estaba en Guildford, hasta la carretera que conduca a Londres. Fue entonces cuando se
volvi hacia ella y le pregunt:
Llorars ahora, o guardars las lgrimas para esta noche?
Dominique le mir sorprendida, no esperaba orle hablar en ese tono.
- No, seor Mannering, no llorar. Adems, ni siquiera conozco el lugar donde pasar la noche
aadi, intentando no demostrar demasiada curiosidad.
Pero es que no te informaron de hada?

No he visto a nadie que pudiera hacerlo.


Quieres decir que todo te lo comunicaron por correspondencia? Mannering frunci el ceo.
Por-supuesto. Adems, no veo el objeto de hacer venir al notario desde tan lejos; por carta lo
explic todo y debo aadir que por lo que le, me dio la impresin de que l estaba tan sorprendido como
yo.
Por qu la sorpresa? Acaso esperabas ser la heredera del to Henry?
Creo que no me ha entendido, seor Mannering respondi molesta , yo nunca esper nada, el to
Henry no era tan mayor como para pensar que morira pronto. Slo deseaba terminar el bachillerato y
poder ir a la universidad, buscar trabajo y comenzar a vivir a mi aire.
De acuerdo contest . Creo que he sido grosero contigo, te pido me disculpes, es por la
costumbre que tengo de tratar con todo tipo de gente y olvidar que an existen personas como t.
An no ha contestado a mi pregunta dijo Dominique ruborizada . Dnde vivir a partir de hoy?
Mannering sac la pitillera de su bolsillo y cogiendo un cigarrillo lo encendi.
Esta noche dormirs en mi casa de Londres. Maana continuaremos el viaje hacia Yorkshire.
A Grey Witches? pregunt sorprendida.
Por supuesto. No intento vender el lugar.
Yo tampoco lo hara contest Dominique negando con la cabeza y pensando que sera agradable
tener un hogar como ese.
Mannering no habl ms, la circulacin le mantuvo ocupado y ella se entretuvo mirando el ir y venir de
coches y el ajetreo de la ciudad. Realmente no conoca Londres. Al to Henry no le gustaba nada, y sola
decir que la ciudad estaba sucia y era insalubre; ella era muy nia por entonces para haber formado su
opinin.
Una vez dentro del edificio, montaron en el ascensor, y subieron al dcimo tercer piso. Salieron a un
pasillo alfombrado y se dirigieron hacia la puerta del piso de James.
Su acompaante abri una de las dos puertas y sali un hombre de baja estatura que le ayud a
Dominique a quitarse el impermeable, ella mir a su alrededor y se dio cuenta de que haban entrado por la
cocina, Mannering le present a Graham.
Dominique le salud sonriendo.

Graham, trabaj para Lord Bestingcot antes de hacerlo para m y te aseguro que es todo un
caballero, est conmigo desde hace diez aos y sonriendo pregunt : No es as Graham?
La joven se dio cuenta de que su amiga Susan tena razn. James era muy atractivo, el sonrer
suavizaba un poco sus marcadas facciones.
Graham cogi la gabardina de Dominique y les ofreci caf, comunicndoles que la cena estara lista
en pocos minutos.
-Mejor tomaremos algo de aperitivo dijo Mannering. El mayordomo asinti y se retir a terminar de
preparar la cena.
Ella no sala de su asombro. De pie, en la puerta que daba acceso a la habitacin, admiraba la magnfica
decoracin. La alfombra era de estilo persa y el ambiente muy agradable; haba sillas tapizadas en color
rojo alrededor de una mesa de bano, repisas con libros de todos los tamaos, un equipo de alta fidelidad
y un magnfico televisor. Unos grandes ventanales rodeaban la habitacin; desde all se poda contemplar
la ciudad. Unas lmparas maravillosas iluminaban el saln, y lo hacan muy acogedor, especial para el
descanso y la reflexin. Sobre la mesa haba un montn de folios, que seguramente seran el manuscrito
de alguna obra de James. Se preguntaba si su to Henry haba conocido aquel lugar.
Pasa y sintate. Dominique, quiero que te encuentres cmoda. Estars bajo mi custodia durante los
prximos seis meses, as que ser mejor que empecemos a conocernos un poco.
La joven dud antes de ir hasta un silln y sentarse. Era ms cmodo de lo que supona.
Qu deseas tomar? le pregunt, acercndose al bar , oporto, jerez, martini o zumo de
frutas?
Zumo de frutas, por favor acept cruzando las manos sobre su regazo.
La mir esperando que cambiara de parecer.
Bien, aqu lo tienes.
l se servio un whisky y se lo bebi de un solo trago, se sirvi otro y se sent junto a Dominique. La
observaba detenidamente, con tanta atencin, que ella se sonroj, bebi un poco de zumo, y deseando que
l dejara de mirarla, recorri la habitacin con la vista. l not su inquietud y para que se relajara, le dijo:
No deseas hacerme alguna pregunta?
Ella mir el vaso que tena entre sus dos manos y respondi:
Muchas!

Entonces empieza. No saba cmo hacerlo.


Ha escrito muchas obras?
l se recost sobre el respaldo y exclam impaciente:
Por favor, Dominique! Eso qu importa? Anmate un poco y di lo que piensas. No te molesta que
Henry te haya dejado a mi cargo?
Por supuesto que s respondi apretando el vaso con enfado . Deseaba hablar sobre eso con
usted y se me ocurri que tal vez, si me quedara a vivir en Londres podra conseguir algn trabajo.
No! Contest mirando el techo con impaciencia, y observndola de nuevo aadi : De ninguna
manera, no lo consentira. El to Henry saba perfectamente lo que haca al dejarte a mi cuidado.
Quedarte sola en Londres, ni pensarlo! No sabes bien lo que dices, esta ciudad es muy peligrosa para una
joven de tu edad.
Pero, no deseo ser una carga. No quiero causarle ninguna molestia.
Una carga? pregunt moviendo la cabeza . Pequea, comenzaste a serlo hace tres semanas
cuando al to Henry se le ocurri fallecer. Y lo sers por algn tiempo. Cuntos aos tienes, quince,
diecisis?
Diecisiete contest enfadada . Y usted lo sabe tan bien como yo.
S, creo que s replic con una sonrisa . Pero tal como son las chicas hoy en da, por tu forma de
ser, yo te situara en el grupo de las de doce aos.
Gracias dijo Dominique ponindose de pie . Puede pensar lo que desee, su tutela le da derecho a
eso, pero le aseguro que no soy como usted se imagina. Conozco la vida mejor de lo que usted cree
La mir sonriendo.
Si es as, te ruego que me disculpes.
Se apart de su lado, no tena la habilidad suficiente para responderle de la misma forma. James se
dio cuenta.
Dominique, no hay ningn motivo para que discutamos. Acepto el que conozcas la vida, pero an hay
muchas cosas que ignoras y te aseguro que no las vas a aprender en dos semanas.
No esperaba hacerlo dijo mirndole.
James se inclin hacia adelante y observndola con detenimiento le dijo:

--Aprenders hacienda preguntas insisti . Como por ejemplo: Por qu Henry dej todo a mi
cargo?
Eso no tiene que ver nada conmigo.
Claro que s contest moviendo la cabeza, como si le resultara imposible creer en su falta de
curiosidad . Dime, nunca te habl sobre mi madre o sobre m?

Que yo recuerde, no. Y de Grey Witches? Dominique neg con la cabeza.


Y me imagino que nunca has estado all. -No.
Por lo visto, tu to no quera mezclar dos etapas de su vida. Llevarte all hubiera propiciado que le
hicieras muchas preguntas desagradables para l.
Pero, por qu?

Porque mi madre ha vivido siempre en Grey Witches. -Cmo?


Dnde ms vivira el ama de llaves?
Ella era el ama de llaves del to? pregunt asombrada . Creo que ya entiendo.
Qu es lo que entiendes, Dominique? pregunt sarcstico.
Creo que eso explica un poco el misterio contest ruborizada.
Es que no hay ningn misterio replic l . Tu to era un hombre comn y corriente. Su esposa
estuvo invlida durante muchos aos, lo sabas? De todas formas, creo que no importa mucho ya que
sucedi antes de que t nacieras. Mi madre fue alguien muy especial para l.
Entiendo dijo Dominique, sintiendo que se ruborizaba.
James Mannering estaba nervioso.
Mira Dominique, s lo que piensas, aunque no las conclusiones a las que puedas llegar. No s los
conocimientos que tienes, pero djame decirte que no soy hijo ilegtimo. Mi madre contrajo matrimonio
cuando supo que estaba embarazada.
No tiene por qu darme esa clase de explicaciones admiti ella bajando la cabeza.
No es eso! exclam enfadado . No trato de explicar nada. Mi padre no era un santo y cuando

supe mi relacin con l, le odi. Eso sucedi hace mucho, cuando tena tu edad ms o menos, empezaba a
ver la vida tal como era y no como trataban de mostrrmela. Necesitaba un buen pretexto para escapar,
lo obtuve, y me fui a Londres. Cuando llevaba varios aos viviendo slo, me di cuenta de lo estpida que
haba sido mi actitud, y comprend muchas cosas.
Y su madre, an vive?
Claro que s! Slo tiene sesenta aos. Ahora que mi padre ha muerto, puedo asegurarte que nunca le
vi como tal, obtuve ms comprensin y cario de mi padre adoptivo; creme, el to Henry y yo, nunca
compartamos las mismas ideas.
No entiendo por qu razn nunca me habl de todo eso dijo Dominique . Es ms, en una ocasin
vimos una obra suya en Brighton, hubiera sido un buen momento para que me lo hubiera comentado.
Como ya te he dicho, nunca compartamos las mismas ideas.
Graham entr anunciando la cena, y se dirigieron al comedor; en el centro haba una mesa redonda
rodeada de sillas tapizadas en piel de color marrn. Una lmpara penda del techo e iluminaba el cristal y
los cubiertos de plata. Dominique se acordaba del to Henry. Qu pensara l del xito que haba
conseguido su hijo? Supona que por su actitud, nunca le agrad. Todava no comprenda los motivos que le
haban llevado a su to a ocuparse de ella. Tal vez no quiso aceptar pblicamente a James Mannering como
hijo suyo y menos en un lugar tan pequeo como Hollingford. Le daba pena pensar que su to no la vera
convertida en una mujer; sin embargo, pareca que su hijo ocupaba el primer lugar en su mente, ya que le
haba nombrado su heredero.

Captulo

AQUELLA noche, acostada en una elegante cama, Dominique repasaba los acontecimientos del da. No
poda decir que ste haba sido feliz, pero s diferente de todos los que haba vivido. La excitacin y todo
lo nuevo que le rodeaba no le permitan conciliar el sueo.
Se acordaba de sus compaeras del convento. Seguramente estaran pensando en ella, sobre todo
Susan, la que ms se haba interesado por su futuro y por su protector.
Una extraa sensacin la invadi al pensar en James Mannering. Haba tenido muy pocas
oportunidades de tratar con jvenes de su edad, y nunca haba conocido a ningn hombre como l. Era
fuerte, y con su carcter podra conseguir lo que se propusiera, pero Dominique tena la certeza de que a
pesar de todo, era bondadoso. Le estaba agradecida porque haba sido muy generoso con ella.
Durante la cena le haba hecho una serie de preguntas para conocerla mejor. La interrog sobre su
vida en el convento y sobre cmo pasaba esos tres meses al ao con, Henry Farriday. Dominique sonri al
compararlos, ambos se parecan mucho. Su to tambin se interesaba por todo lo que ella haca en el
convento, y le encantaba que le hablara de sus cosas.
Cuando terminaron de cenar, Mannering se disculp, se march a una cita de negocios y la dej al
cuidado del mayordomo. ste, al darse cuenta de que su patrn no llegaba y viendo la hora que era, las
diez de la noche, le sugiri a Dominique que se retirara a descansar. Ella se desilusion un poco cuando
supo que Mannering no llegara hasta ms tarde. Graham le ense toda la casa; tena cuatro habitaciones,
cada una con su cuarto de bao, un despacho donde su tutor escriba sus guiones, el saln, el cuarto de
estar, que lo utilizaban de comedor, y la cocina. Todo amueblado con muy buen gusto. La habitacin del
mayordomo se encontraba junto a la cocina y tena entrada independiente.
El dormitorio de Dominique, estaba decorado en tonos azules, las cortinas y la colcha de la cama
tambin hacan juego, en el cuarto de bao dominaba el color oro. Antes de meterse en la cama, se dio una
ducha, y se puso un pijama de algodn. Las sbanas eran de seda, y se sinti bastante ridicula con su
pijama. Apag la luz enseguida, sintindose mejor en la oscuridad.
No oa ningn ruido, ni siquiera el motor de los coches, porque el piso estaba bastante alto.
Cuando llevaba un buen rato acostada, oy un ruido que proceda del saln, encendi la lmpara le la
mesilla para ver la hora y la apag de inmediato. Eran las dos y diez de la maana! No era una hora
apropiada para volver de una cita de negocios, pens que seguramente haba sido una excusa para librarse
de ella durante ms horas. Posiblemente habra salido con una amiga, tal vez con su novia, con la que un da

se casara. Ella le empezaba a ver como al to Henry, como a su tutor. La haba ido a buscar para que
viviera con l, para cuidara, por obligacin, era absurdo pensar que pudiera interesarle una chica
inexperta recin salida de un convento. Adems, tal como l le haba dado a entender por la tarde, no era
ms que una carga.
Con tristeza, Dominique, cerr los ojos. Aquel da tan emocionante haba pasado.
Por la maana, se despert al or el ruido producido por las gotas de lluvia. Se levant de la cama y
subi la persiana para mirar la calle. La maana estaba gris, el cielo nublado, y segua cayendo la lluvia. Era
el mes de octubre, el invierno sera largo y fro. Tembl al recordar su situacin, no saba qu cosas
nuevas descubrira de James Mannering.
Mir su reloj y se sorprendi al ver la hora. Las once! Qu pensara el seor Mannering? En el
convento sola levantarse a las siete de la maana, nunca dorma hasta tan tarde.
Entr en el cuarto de bao, se lav la cara y los dientes, se cepill el pelo y se hizo una coleta. Volvi a
la habitacin, se puso su uniforme y sali. El saln estaba vaco y no se le ocurra la forma de hacer notar
su presencia.
Graham la salv de la situacin cuando lleg al saln pasando la aspiradora.
Buenos das, seorita Grainger dijo sonriendo . Espero que el ruido no la haya despertado.
No lo creo respondi , y si as hubiera sido, le estara muy agradecida, seor Graham, nunca me
levanto tan larde, no s que pensar el seor Mannering de m.
Llmeme Graham, a secas, sin formalidades le dijo con amabilidad . No se preocupe por el
seor Mannering, l dio orden de que no se le despertara, supona que estara muy cansada.
Pero, crea que deseaba salir haca Yorkshire hoy mismo.
Lo s, y an tienen tiempo para hacerlo, no se necesita todo el da para ir en coche a Hollingford
dijo mientras se diriga a la cocina para guardar la aspiradora . En cuanto ponga esto en su sitio, le
preparar el desayuno aadi sealando la mquina.
No, no se moleste, no tengo apetito.
El mayordomo la mir, estaba muy delgada y pens que a pesar de su estatura necesitaba comer bien.
As que sin pensarlo dos veces le sugiri:
Que te parecen unos huevos o unas tostadas? Recuerde que an faltan un par de horas hasta la
comida.
Oh, no! De verdad que no tengo hambre dijo negando con la cabeza . Slo tomar un caf con

una o dos galletas.


Sintese cmodamente, le traer una bandeja con el desayuno,
Aqu? pregunt recorriendo la habitacin con la mirada.
Por supuesto, no debe sentirse incmoda, cuando el seor Mannering trabaja en algo importante, le
suelo servir aqu.
Domine se dirigi hasta una mesa, donde se encontraban los peridicos del da. Se acerc al ventanal,
la vista era maravillosa a pesar de que la lluvia caa sobre la ciudad. Cogi un peridico y lo hoje sin
prestar demasiada atencin a lo que lea, pensaba en su tutor, dnde se encontrara en esos momentos?
Con sus mltiples ocupaciones no acertaba a comprender cmo se las arreglara para llevarla a Hollingford.
Busc la pgina de espectculos y estuvo mirando alguna obra suya que pudiera estar en escena. Haba
una, El Inventario, ley las crticas pero no sac nada en claro, tan slo contaban la obra.
Pas a hoja desilusionada, no iba a saber si era un xito. Intentaba recordar la obra que el to Henry
la llev a ver, pero no consegua acordarse del ttulo. Haca ya, casi un ao que la haba visto y de lo nico
que estaba segura era de que no haba sido El Inventario.
Vio a Graham caminar hacia ella llevando una bandeja con su desayuno: caf, leche, pan con
mantequilla y galletas. La coloc en la mesa junto a ella.
Sabe dnde se encuentra el seor Mannering? pregunt la joven tratando de ocultar su
nerviosismo.
Est en los estudios de televisin contest ceremoniosamente . Van a grabar una obra suya y ha
tenido que corregir varios guiones. Es un medio diferente al del teatro. Hay que adaptar la obra,
reformarla con vistas a la televisin. No se puede filmar tal como se pone en escena.
Y eso es importante? Quiero decir, le conviene que emitan sus obras por televisin?
Depende de varios factores. Una obra trasmitida por televisin tiene ms espectadores que en el
teatro, y si a la vez se est poniendo en escena, seguramente ser un fracaso, nadie ira a verla porque ya
la habran visto por televisin.
Entiendo respondi Dominique mordiendo un pedazo de pan con mantequilla. Y despus volvern a
representar esta obra en el teatro?
No, este caso es diferente. ltimamente ha estado escribiendo para la televisin. Van a poner una
obra escrita por l hace ya varios aos. Cuando la estrenaron no tuvo mucho xito, pero piensan que ser
adecuada para este otro medio de comunicacin.

Ella se sirvi otra taza de caf, pudo comprobar que el mayordomo conoca bien el trabajo de su
patrn, y que se senta orgulloso de poder dar explicaciones sobre l. Tal vez a ella tambin le interesara
el teatro cuando lo conociera.
Viene con nosotros a Yorkshire, Graham?
No, seorita, Debo permanecer aqu. En Grey Witches ya tienen los empleados suficientes.
Crea que siendo tan fiel al seor Mannering, le acompaaba a todas partes.
Graham sonri.
Cuando estuve bajo las rdenes de Lord Bestingcot, era su ayudante de cmara, pero con el seor
Mannering es diferente,
no le gusta que nadie est pendiente de l constantemente.
Muchas gracias, Graham. El desayuno estaba realmente delicioso, no crea que iba a comer tanto.
Son casi las doce dijo complacido por sus palabras . El seor no tardar en llegar, ir a
preparar la comida.
Vaya. Yo ir a hacer mi cama.
Usted no har tal cosa, seorita! exclam el mayordomo horrorizado . se es mi trabajo.
Escuche un poco de msica o coja un libro y pngase a leer, tiene muchos para elegir.
Dominique tuvo que acceder. No saba poner el tocadiscos, as que fue a seleccionar un libro.
La biblioteca de James contena toda clase de literatura: de misterio, de espionaje, de aventuras y
muchos best sellers, no se decida a coger uno de estos, acordndose de lo que sus compaeras decan
sobre ellos.
Estaba pensando en eso, cuando comenz a sonar el telfono. No tena la costumbre de contestar a
menos que se lo pidieran, supuso que Graham lo hara, pero como continuaba sonando sin que ste
acudiera, cogi el auricular y contest:
Dgame?
Es el 323 04041? pregunt una voz femenina. Dominique mir el nmero escrito en la tarjeta
adherida al aparato.
S, es ese nmero.
Entonces, puede decirme con quin hablo? pregunt en tono violento.

Soy la protegida del seor Mannering respondi . Si desea hablar con l, tendr que llamar ms
tarde, porque no est en casa, en este momento.
Comprendo. Sabe usted a qu hora regresar? pregunt despus de una breve pausa.
La joven no saba qu contestar, en esos momentos Graham entr en la habitacin, tap el auricular
con la palma de la mano y le coment:
Es una mujer que pregunta por el seor Mannering y quiere saber a qu hora regresar.
Sabe usted quin es?
No, no se lo he preguntado.
Hgalo, por favor.

Me puede decir quin le llama? pregunt un poco incmoda.


Puedes decirle que soy Ivonne respondi furiosa . Est ah y no quiere hablar conmigo?
No! exclam Dominique y volvi a tapar el auricular . Cree que est aqu y que no se quiere
poner.
Debe ser Ivonne Park dijo el mayordomo con seguridad. Ella le mir sorprendida.
S, dice que se llama Ivonne.
Permtame, seorita Graham cogi el auricular y la joven se dirigi hacia la ventana no deseando
or la conversacin. Pero le resultaba difcil ya que la llamada haba despertado su curiosidad.
Graham aclar el malentendido, aunque al principio la seorita Ivonne Park no crea que el seor
Mannering no estuviera. El mayordomo la convenci dicindole que en cuanto llegara le dara su recado.
Colg el telfono, y mir a Dominique.
Vaya! Ser una pena que se le ocurra venir a buscarle por la tarde, ya que el seor James no estar.
Quin es ella?
No me diga que no ha odo hablar de Textiles Park?
Textiles Park? Los industriales?
Exacto, Ivonne es la hija del presidente de la firma.

Ya veo murmur . Es amiga del seor Mannering?


Se puede decir que s o al menos ella intenta serlo
respondi.
Es que a l no le interesa?
Su inters por ella decay hace cosa de seis semanas
contest mientras se diriga a la cocina. Antes de desaparecer por la puerta la mir
compasivamente y aadi : Hay muchas cosas que tiene que aprender, Dominique.
No le molest que la llamara Dominique, a secas. Se sent en una silla y apoy la barbilla sobre las
palmas de sus manos.
Haba imaginado que tendra muchas amigas murmur.
El hombre y la mujer no pueden ser amigos afirm una voz tras ella que reconoci como la de
James Mannering.
El mayordomo sonri y entr en la cocina, saba que Dominique estaba en desventaja. Se puso de pie e
intent hablar deprisa.
Hay un recado para usted. Le ha llamado una mujer llamada Ivonne Park.
De veras? se sent en una silla y encendi un cigarrillo. Has dormido bien?
Ha odo lo que le he dicho? pregunt molesta.
S, te he odo respondi con amabilidad . Gracias. Y no me hables de usted.

Aunque a Dominique le daba cierto reparo, lo intent:


A veces haces que me sienta como si fuera una nia dijo molesta . No es necesario que me
hables de esa forma. Graham me ha dicho que usted y esa mujer son amigos.
As que eso te cont l? pregunt mientras se pona de pie y se diriga al bar . Qu tal te
llevas con Graham? se sirvi un whisky . No creas que soy un bebedor empedernido explic
sealando el vaso . Simplemente, he tenido una maana muy difcil y necesito algo para reanimarme y no
parecer grosero.

Dominique apret los labios y mir hacia otro lado impaciente. No le hara cambiar de modo de pensar,
la seguira tratando como a una nia.
Creo que tendremos que ocuparnos de eso.
Qu quieres decir? Si no quieres que hable de tus asuntos con Graham, no tienes ms que decirlo.
Eres muy agresiva, lo sabas? dijo sonriendo . Pero no me refera a mis asuntos sino a otra
cosa muy diferente, a tu apariencia.
Mi apariencia? repiti sintiendo que se ruborizaba . Qu tiene de malo?
No es que tenga algo malo, es slo que la falda y la blusa que llevas puestas no son muy bonitas que
digamos. Hay otro tipo de ropa ms juvenil para una chica como t.
A tu padre, quiero decir al to Henry, no le gustaba la ropa demasiado moderna.
A m tampoco contest impaciente , no insino que te vistas en contra de tus gustos, pero
insisto en que te ira mejor otro estilo, y desechar ese uniforme.
Tengo otros vestidos replic.
Entonces te sugiero que te cambies dijo mientras se diriga hacia la ventana y se sentaba para
leer los peridicos del da.
Dominique sali, y se fue a su habitacin. Ya haban hecho la cama, y todo estaba ordenado.
Abri su armario, en efecto, tena ms vestidos, pero todos eran oscuros y de corte sencillo. Decidi
ponerse un vestido de terciopelo verde, con falda plisada, manga larga y cuello cerrado. Se mir al espejo,
ese color la haca an ms plida, no consegua mejorar su apariencia, se vea igual.
Sali de la habitacin y vio a Graham hablando con James, al darse cuenta de su presencia le anunci
que la comida estaba servida. Mannering la mir y le cedi el paso para entrar al comedor.
Hubo silencio durante la comida. Dominique pens que tal vez debera preguntarle qu tal le haba ido
su trabajo, pero como l pareca no tener intenciones de hablar, ella permaneci en silencio. Quiz James
estara pensando en sus problemas laborales y ella no se atrevi a interrumpirle. Se limit a comer el pollo
y el arroz que le haban servido, y despus tom un poco de souffl de limn.
Tomaron el caf en el saln y fue un desastre. Al servir su taza, Dominique derram la bebida sobre
el plato, y despus, cuando se sirvi el azcar, salpic un poco el mantel. Era ya la una y media de la tarde
y supuso que no iran a Yorkshire. Despus de todo, Mannering era un hombre muy ocupado y si acaso se
decida a llevarla no podra quedarse mucho tiempo. Dominique se preguntaba si l la dejara al cuidado de
su madre. No le agradaba la idea. No los conoca y seguramente ella no aprobara que viviera a su lado y

bajo la tutela de su hijo. Se recost sobre el respaldo del silln, en realidad, ella era poca cosa para un
hombre como Mannering. Pensaba que tena que haberse quedado en el convento como novicia, al menos
conoca esa clase de vida.
l levant la vista de los papeles que estaba hojeando, y la mir inquisitivamente.
En qu ests pensando, Dominique?
En nada, de verdad intent responder con naturalidad.
No mientas, tu expresin indica lo contrario afirm mientras apartaba sus papeles.
Slo pensaba que a lo mejor habras cambiado la idea y no iramos hoy a Yorkshire.
No, no he cambiado de idea, y t? pregunt.
Ya sabes que mi opinin no tiene importancia.
Explica eso, Dominique.
No se te ha ocurrido pensar que ir a Yorkshire y conocer a tu madre, sera muy incmodo para m?
Por qu?pregunt frunciendo el ceo.
Es que no estoy acostumbrada a vivir en familia replic retorciendo las manos sobre su regazo .
Mi vida en el convento ha sido muy simple, y los meses que pasaba al lado del to Henry no eran nada
extraordinarios.
Y te agradaba vivir con l?
No exactamente. Pero no se le puede exigir a una persona que ha llevado siempre esa clase de vida,
que la cambie de la noche a la maana.
No quieres ir a Yorkshire?
No es eso...
Entonces, qu es? pregunt impaciente.
Apenas me estoy acostumbrando a vivir contigo dijo con esfuerzo , y ya quieres que me habite
a otro ambiente y a otra clase de personas.
Y qu esperas que haga contigo? No puedes quedarte aqu.
Y por qu no? Por favor, slo unos das mientras me acostumbro a la idea. Tengo algn dinero que
me dio el to Henry, y podra aprovechar para comprarme algo de ropa. As no te parecera tan horrible.

Yo no dije tal cosa la interrumpi.


No tenas que hacerlo, con tu actitud me lo diste a entender claramente.
Mannering se levant, y empez a dar vueltas por el saln.
No entiendo tu miedo a ir a Yorkshire. Mi madre no es ningn ogro y yo tambin estar all.
De veras? Te quedars en Grey Witches? pregunt . Crea que me llevaras y te volveras
enseguida. Eres un hombre muy ocupado. Tienes un programa de televisin en perspectiva, has tenido una
maana llena de trabajo, y la seorita Park intentaba localizarte para hablar contigo. Si me quedo aqu no
tendrs tiempo para dedicarte a tus amigos...
Dominique se call, al darse cuenta de que estaba hablando demasiado.
James la mir observando su entusiasmo.
As que de eso se trata replic sarcstico . Parece que estoy muy solicitado. Y quieres partir a
Yorkshire hoy mismo?
S dijo asintiendo con la cabeza y sin tener en cuenta su sarcasmo.
Bueno, pues empecemos a preparar todo para el viaje. Tienes hechas tus maletas?
Asinti de nuevo y l se dirigi a la cocina para dejarle a Graham algunos recados por si le llamaban
por telfono. Por lo que Dominique pudo escuchar, sus amigos ms ntimos conocan la situacin. El no
mencion a Ivonne, y Dominique se alegr sin saber por qu. Bajaron al garaje para recoger el coche, el
mayordomo los segua, llevando las maletas. Las acomod en el maletero, y. despus de desearles buen
viaje, se retir.
Dominique haba estado tan nerviosa el da anterior que no se haba dado cuenta de la clase de coche
que posea su tutor. Era un deportivo, capaz de alcanzar grandes velocidades. Se acomod en el asiento
estirndose la falda hasta cubrir las rodillas. Ahora se daba cuenta de su indumentaria al compararla con
la de Mannering. La gabardina de James no era una imitacin como la suya, era de piel legtima.
Arranc, y se dirigi a la rampa que conduca a la calle, sali a Edgware Road y dio la vuelta en
Hatfield. An llova, y los parabrisas se movan rpidamente, arrojando el agua de un lado a otro, se poda
or el ruido que hacan las ruedas sobre el pavimento mojado. Hasta que no salieron de la ciudad no
hablaron nada. Una vez en la autopista Mannering le dijo:
No es un da muy bonito para que conozcas tu nuevo hogar verdad?
Mi nuevo hogar? Quiero decir, ya tienes planes para mi futuro?

Hizo una maniobra y adelantaron a un camin que iba a la velocidad mnima.


No son exactamente planes respondi con cario , pero ser algo mejor que pasear con tu to
Henry.
Sabas que dbamos largos paseos?
Por supuesto. T no nos conocas, pero nosotros a ti s. Sabamos toda tu vida. Gracias a ti, mi padre
cambi y se hizo ms responsable. Al hacerse cargo de ti, tranquiliz su conciencia y se sinti satisfecho
dando a alguien un poco de s mismo.
Cuntame algo de tu madre.
Qu puedo decirte de ella?
Por qu no contrajo matrimonio con el to Henry cuando muri su esposa y ella se qued viuda?
Mi madre nunca se hubiera casado con l. No despus de todo lo que pas.
Qu quieres decir?
Lo sabrs muy pronto, as que no importa que te lo explique ahora suspir . Todo empez cuando
mi madre trabajaba para la seora Farriday. Lo haca con gusto, pero cometi el error de rendirse ante
los encantos de tu to. Henry tena fama de ser encantador con las mujeres. Y aqu estoy yo, fui el
resultado de aquella unin sonri con amargura . No esperabas que la realidad fuera tan
desagradable, verdad? Ahora que la conoces, no te gustar tanto el ser la protegida del to Henry...
No lo dej continuar, tapndose los odos con las manos grit:
No digas eso! El no tuvo la culpa!
Entonces, continuar. Cuando mi madre supo cul era su estado, acudi a mi padre, necesitaba
ayuda. Despus de todo, l era el ms indicado para brindrsela, no te parece? Pero el to Henry no
solamente se la neg, sino que tambin la despidi. No tuvo miramientos, la dejo sin trabajo. Y ella no
tena amigos a quien acudir.
Oh, no! exclam Dominique.
-S! De no haber sido por mi padre, Lewis Mannering, probablemente se hubiera suicidado. Se cas
con ella conociendo todos los antecedentes; una de las cualidades de mi madre es ser muy honesta y no le
ocult nada. En ese sentido soy como ella sac la cajetilla de cigarrillos y le ofreci : Quieres uno?
Dominique asinti, cogi uno, sus manos temblaban cuando l le dio el mechero.

Despus de algunos aos, cuando la esposa del to Henry muri, mi madre regres a su casa como
ama de llaves.
Pero, por qu lo hizo? No entiendo cmo pudo regresar, despus de lo mal que la haba tratado.
Eres muy joven para entenderlo, la vida es la que se encarga de ensearte estas cosas. Mi madre
regres para vengarse. El viejo Henry no sospech nada al principio. Fue mucho despus, cuando
comprendi las intenciones de mi madre.
Y su marido?
Era un granjero. Posea una pequea extensin de tierra, pero nos daba para vivir. Cuando yo tena
catorce aos l muri de cncer y fue entonces cuando regresamos a Grey Witches. Estoy seguro de que
el viejo Henry no se imaginaba que tena un hijo y de no haber muerto el marido de mi madre, nunca lo
hubiera sabido.
Comienzo a entenderlo todo. El to Henry te reconoci romo hijo suyo, no es as?
Exacto. Desgraciadamente me pareca mucho a l. Te imaginars el revuelo que caus en el pueblo
nuestra estancia en < > rey Witches, fue algo que el viejo no pudo evitar.
Por qu? No poda despedir a tu madre?
Supongo que ella le amenazara con llevar el caso a los tribunales si se negaba a mantenernos
continu Mannering . No me parece buena la actitud de mi madre, "pero s que ella tendra motivos para
hacerlo. Poco despus, cuando las murmuraciones se acabaron, me fui de Hollingford a Londres. El resto
ya lo sabes.
Y tu padre te reconoci despus?
S. Le pidi a mi madre en varias ocasiones que se casara con l, pero ella nunca le acept.
Por eso te nombr su heredero?
Supongo que quiso reparar el dao que hizo en vida. Dominique suspir, un sentimiento extrao la
invadi.
Pensaba que James Mannering habra sufrido mucho, y se preguntaba si no le habra influido en su
carcter la vida tan triste y difcil que haba llevado. No poda comparar su personalidad con la del to
Henry, eran distintas, una dura y fra, y la otra tierna y bondadosa. Ella le estara siempre agradecida a
su"' to por haberla educado y colocado bajo la tutela de las religiosas. Ahora, iba a conocer a una mujer
que vivi para vengarse, deba querer mucho a su hijo para haber puesto tanto inters en conseguir su
propsito.

Captulo

A PESAR del mal tiempo, llegaron a Boroughbridge cerca de las seis y media, all tomaron el camino
hacia Maltn. Era una carretera estrecha y muy mal iluminada. Tan slo se apreciaban las luces de los
pequeos pueblos que quedaban a ambos lados de la carretera. Poco despus, se metieron por una
desviacin; gracias a la pericia de James para tomar las curvas, no hubo necesidad de disminuir la
velocidad hasta que llegaron a la cima de una colina.
A Dominique le hubiera encantado poder admirar el paisaje, que saba era precioso, pero la oscuridad
se lo impidi. Le pareca que llegaba a otro mundo.
James Mannering no haca ningn comentario, slo cuando encendieron las luces del valle se decidi a
hablarle:
Hollingford est un poco ms adelante. La casa fue construida a un kilmetro del pueblo. La mayora
de las instrucciones de los alrededores, fueron propiedad de mi padre.
Dominique se esforzaba por poder hacer algn comentario, pero por ms que lo intentaba, no se le
ocurra riada. Durante el resto del trayecto rein un silencio absoluto entre ellos, ella pensaba en todo lo
que James le haba contado, y l, seguramente se entretuvo repasando algn guin o planeando otro.
Tienes hambre? Le pregunt ..Seguro que mi madre nos tendr preparada la cena.
No mucho respondi inquieta . Lo que sucede es que estoy un poco nerviosa.
Tranquilzate, no te suceder nada, al menos, mientras yo est a tu lado sonri. Dominique no
comprendi la intencin de su comentario.
No tardaron mucho en llegar a Hollingford, la calle principal estaba abarrotada de tiendas y casas. Al
final de la calle, terminaba el pueblo con la iglesia y la escuela. Continuaron por una vereda rodeada de
grandes rboles que llegaba hasta una enorme reja abierta, haba una casa pequea junto a ella, pero al
parecer estaba abandonada, pues nadie sali cuando el coche pas por delante. La nica luz que se vea era
la de los faros del coche y por ella, pudo Dominique ver la famosa casa, por fin conoca Grey Witches. No
era tan bonita como ella se haba imaginado; la fachada de piedra estaba cubierta por hiedra, y haba
bastantes ventanas. Tena tres pisos, lo que la haca impresionante. La joven senta que sus nervios
aumentaban por momentos.
Mannering detuvo el coche al pie de la escalinata, apag el motor, encendi la luz interior, y
mirndola le dijo:

Ests desilusionada? pregunt como si adivinara sus pensamientos.


Por supuesto que no. Es slo que... la haba imaginado de otra forma.
l la observ detenidamente, apag la luz y sali fuera. Dominique tambin baj, an llova, pero no
tanto como para tener que subirse la capucha de su gabardina.
La casa daba sensacin de frialdad, no se vea ninguna luz y pareca que a nadie le importaba quien
hubiera llegado. Mannering actuaba como si eso fuera lo normal. Sac el equipaje del maletero, y subieron
los escalones que los separaban de la puerta principal.
Al llegar arriba, dej todo en el suelo y sac su llavero del bolsillo, busc, y eligiendo una de las llaves,
abri la puerta. Le cedi el paso a la joven, y antes de cerrar, encendi las luces. Una gran lmpara ilumin
el vestbulo. Dominique observ que la casa estaba decorada con mucho gusto; la alfombra era preciosa y
le iba muy bien a los muebles. Todo estaba muy limpio. Era evidente que all viva alguien. Al fondo, haba
una escalera que conduca al primer piso. La estaba mirando, cuando oy un portazo, y una chica de
aproximadamente veinte aos, baj la escalera de prisa. Tena un aspecto saludable, sus mejillas estaban
sonrosadas y era de constitucin atltica. Llevaba puestos unos pantalones de montar, que le daban a su
figura un aspecto masculino.
James! exclam con entusiasmo, saltando los tres escalones que los separaban, se colg de su
cuello y le bes repetidas veces en las mejillas. A Dominique no le agrad mucho el recibimiento. La joven
la mir y pregunt.
sta es la chica?
Dominique se sinti incapaz de contestar.
S, Melanie respondi James . Te presento a Domini que Grainger y mirando a Dominique,
aadi : esta es mi prima Melanie Grant.
Se dieron la mano, pero Dominique se dio cuenta de que no le haba cado demasiado bien a la seorita
Grant. sta, inmediatamente despus del indiferente saludo, se volvi hacia su primo, le ayud a quitarse
la gabardina, y se la colg en el armario del vestbulo. Dominique se quit la suya y James se la colg junto
a la suya.
Tu madre te est esperando hace horas, James replic Melanie . Est en el invernadero regando
las plantas, si te hubiese odo llegar, habra salido a recibirte.
Dominique camin detrs de ellos, entraron en un amplio saln, decorado en tonos oscuros, que lo
hacan deprimente, lo nico alegre, era el fuego en la chimenea. Al lado se encontraba el comedor, donde
una criada terminaba de preparar la mesa para la cena.

Melanie condujo a su primo hacia el invernadero, y Dominique prefiri quedarse en el saln y esperar a
que volvieran, no deseaba ser inoportuna.
Nunca imagin que Grey Witches fuera una mansin tan lgubre y poco acogedora, senta que la
depresin y melancola hacan presa de su nimo. Dio gracias de que su permanencia en ese lugar slo
durara seis meses. Se pregunt si su to habra pensado en sus propios sentimientos al ponerla bajo la
tutela de su hijo.
Oy voces de personas que se acercaban. Vio a James acompaado de dos mujeres: una era Melanie, y
la otra se imagin que sera su madre.
Tena el cabello oscuro, era alta y estaba muy delgada; llevaba un traje muy elegante. Le pareci una
mujer con mucho estilo. Su apariencia contrastaba bastante con el ambiente. La seora Mannering se
adelant y le dio la bienvenida con una sonrisa que aparentaba amabilidad.
As que t eres Dominique? pregunt mientras la observaba . Eres tal como te haba imaginado.
La joven no pudo evitar sonrojarse, desde luego, sus palabras no eran un cumplido.
En cambio, usted no es como yo pensaba, seora coment Dominique.
Has odo, James? Esta chica es encantadora y mirndola de nuevo aadi : Tomar tus
palabras como un cumplido.
Por supuesto, seora Mannering, yo esperaba encontrarme con una persona ms mayor dijo
titubeando.
De veras? Y quin te dio esa idea, James?
Oh, no! l no me cont cmo era usted fsicamente replic dndose cuenta del problema en que
se haba metido.
Entonces debo entender que te cont otras cosas murmur, mirando a su hijo . Quisiera saber
el qu.
No la molestes, mam dijo James, incmodo por el tono de la conversacin . Deberas
preguntarle si ha tenido un buen viaje o si tiene apetito. Lo ms seguro es que est hambrienta ya que no
nos hemos parado ni siquiera para tomar una taza de t.
Eso no extrao en ti replic Geraldine Mannering . Dejemos esto por ahora, pareces cansada,
Dominique, vayamos al comedor, ya tendremos tiempo para hablar despus de cenar.
La cena fue abundante y deliciosa. Empez con una sopa de verduras, despus un rosbif y por ltimo
un budn hecho al estilo de Yorkshire. La joven comi con apetito, sin prestar atencin a la conversacin

que mantuvieran madre e hijo. La relacin entre ambos no pareca muy cordial, Dominique no acertaba a
comprender por qu.
Cuando terminaron de cenar, se dirigieron al saln donde les sirvieron el caf. Dominique era
consciente de que, ahora, ella sera el centro de atencin. Por lo que pudo apreciar, la madre de James se
comportaba como toda una dama, duea y seora de la casa. No esperaba que se desenvolviera tan bien en
ese papel, ya que slo llevaba en l tres semanas. El trato de la sirvienta hacia la seora, con tanto
respeto y sumisin, fue algo que la desconcert.
La seora Mannering la miraba con detenimiento, tratando de descubrir en sus facciones el parecido
con alguien que ella conociera.
Cuntame, Dominique. Te habl Henry alguna vez de esta casa?
En varias ocasiones, pero nunca me habl de las personas que vivan en ella.
Y no sentas curiosidad al respecto? aadi la seora Durante los nueve o diez aos que
estuviste bajo su tutela, no te trajo ni una sola vez, no te preguntabas por qu?
Por supuesto que senta curiosidad intervino James . Pero ya tendrs tiempo para conocer a
est chica, y darte cuenta de que no suele preguntar nada.
A Dominique no le agrad ese comentario de James, insista en tratarla como a una chiquilla.
No me parece bien que respondas por ella, James intervino su madre molesta por su intromisin
, te aseguro que ella tiene sus propios pensamientos y la capacidad suficiente para expresarlos
l se puso de pie y se dirigi a una mesita sobre la que haba varias botellas de licor.
Creo que no estas hacindole preguntas adecuadas
dijo mientras se serva un poco de whisky en un vaso.
Insinas que no s lo que hago?
S. No te das cuenta de que Dominique est cansada? Puedes dejar el interrogatorio para otro da.
Ya te he dicho que ella no estaba al tanto de la vida de Henry. Lo nico que saba era que le pagaba sus
estudios, y que en vacaciones la llevaba a Bognor.
Te compr l ese vestido? pregunt la seora Mannering apoyndose en el respaldo del silln en
el que estaba sentada . Tendremos que renovar tu vestuario aadi en tono crtico . Slo se es
joven una vez y hay que sacarle provecho a la juventud se enderez de nuevo . Te ha comentado
James los planes que tiene para tu futuro?

Ahora no, mam surgi l, mientras cruzaban una extraa mirada entre ellos.
Supongo que es un poco tarde para hablar sobre tu futuro respondi la madre disimulando su
enfado . Melanie seras tan amable de prestarle unos pantalones a Dominique? dijo mirndola.
La joven neg con la cabeza y Melanie encogi los hombros con indiferencia a la vez que deca:
Buscar algunos que le puedan valer, para qu los quiere?
Supongo que James querr ensearle maana los alrededores, el mejor modo de hacerlo es a caballo
y si no tiene la ropa apropiada no podr montar.
Qu insinas ahora, mam? pregunt exasperado, mirando a su prima, que pareca no seguir la
conversacin.
No insino nada, querido dijo con fingida dulzura . Slo pienso que no puedes delegar
responsabilidades, no crees?
Dominique abri la boca para dar su opinin, pero volvi a cerrarla sin atreverse a pronunciar palabra.
No comprenda a la madre de James, ni vea el porqu insista tanto en comprometer a su hijo en algo, que
quiz a l an no se le habra ocurrido. Observ a Melanie, no pareca estar muy contenta con los planes
para el da siguiente. Estara celosa? Era absurdo pensarlo, ella no era una rival peligrosa, James la vea
como a una nia. Pero si la seora Mannering deseaba distanciar a los dos primos, seguramente mandara a
su sobrina que fuera con ellos. Todo era tan absurdo, y estaba tan cansada, que no poda entender esos
juegos de palabras ni las intenciones de la madre de James.
Poco despus, le daba las buenas noches a su anfitriona, a su tutor, y a Melanie, que a juzgar por su
expresin, estaba disgustada. Una sirvienta la acompa hasta su habitacin. A pesar de ser la casa tan
antigua, estaba en muy buen estado, los muebles eran muy cmodos, y el ambiente acogedor debido a la
calefaccin. La habitacin se encontraba en el primer piso, era bastante amplia y estaba muy bien
iluminada; la cama era grande y pareca cmoda. Haba espejos en las cuatro paredes, Dominique poda
verse desde cualquier ngulo. El cuarto de bao era grande, algo pasado de moda, pero se encontraba en
buen estado.
Se puso el camisn, y se lav los dientes. Despus se meti en la cama y la encontr demasiado grande
para ella sola. La habitacin qued en una oscuridad total; Dominique estaba un poco nerviosa, nunca haba
dormido sola; en el convento, dorman cuatro chicas en la misma habitacin. Oa la lluvia que golpeaba en
las ventanas y deseaba que cesara. Se durmi enseguida, el cansancio del viaje y el nerviosismo que haba
pasado la noche anterior, hicieron que cayera en un profundo sueo.
Alguien encendi la luz y Dominique se despert, dorma plcidamente y le cost un gran esfuerzo
abrir los ojos. Junto a la cama estaba la sirvienta que la noche anterior le haba acompaado a la
habitacin, y llevaba en las manos una, bandeja con t y galletas.

Perdone que la despierte, seorita, pero la seora Mannering pidi que se le llamara a las siete, ya
que usted y el seor saldrn a dar un paseo a caballo.
No puedo creer que ya sean las siete, tengo la impresin de que me acabo de acostar dijo
frotndose los ojos.
Es que todava est muy oscuro, pero pronto amanecer, y ya no llueve.
Me alegro mucho, cre que continuara lloviendo durante un par de das y mirando la ropa que se
encontraba a los pies de la cama pregunt : qu es eso?
La seorita Melanie me ha dado ese pantaln para usted contest sonriendo . La seora
Mannering se lo pidi para que usted pudiera montar.
Es cierto replic Dominique. Bebi un poco de t y se levant de la cama.
Cogi el pantaln, sin ponrselo se lo midi sobre el pijama y mir a la criada que se estaba riendo de
su apariencia.
Creo que la seorita Melanie est un poco ms llenita que usted, pero tal vez, si se ajusta bien el
cinturn...
Debera ponerme una falda dijo Dominique , pero supongo que no es lo adecuado para montar.
No, seorita aadi retirando la bandeja y dirigindose hacia la puerta.
Dominique la llam y le pregunto:
Cmo te llamas? la observ detenidamente, dndose cuenta de que su vestido era ms largo de
lo normal.
Me llamo Lily, seorita.
Qu edad tienes?
Dieciocho aos.
Tienes un pantaln que puedas dejarme? pregunt, al observar que su constitucin y estatura
eran muy parecidas a las de ella.
Yo? pregunt sonriendo . Creo que s, pero dudo que a la seora Mannering le agrade que se los
preste.
No creo que le importe mucho, adems sabes que eres la primera persona de mi edad con la que
hablo desde que dej el convento?

Pero el seor James y la seorita Melanie son jvenes murmur la criada.


Lo s, pero no es lo mismo, Lily. Anda date prisa y treme algo que pueda ponerme, no puedo salir
con esta ropa tan grande.
Ms tarde, cuando bajaba la escalera, pensaba que los pantalones marcaban su figura. Se puso una
blusa y un suter suyos que iban muy bien con el color del pantaln. Estaba impaciente por conocer los
alrededores. Aunque haca varios aos que no montaba a caballo, de pequea lo haca muy bien, y esperaba
no haber olvidado todo lo que saba. Adoraba a los anmales y todos con los que haba tenido contacto, la
haban correspondido, la queran. Pensaba que tan slo haba que darles cario.
Se detuvo en medio del vestbulo preguntndose donde podra estar su tutor, cuando le vio salir de la
cocina. Pareca ms joven que con el traje; llevaba pantalones de montar, camisa haciendo juego y un
suter azul marino.
Se qued mirndola.
Vaya, vaya. Quin iba a imaginar que la ropa de Melanie te quedara tan bien?
No es de Melanie respondi Dominique , pertenece a Lily.
A Lily Manvers?
-Creo que as se apellida, los pantalones de Melanie me quedaban grandes.
Pens que eran de mi prima agreg sonriendo : eso entraba tambin en los planes de mi madre.
No entiendo Dominique le mir confundida.
Se supona que deberas distraerme de los encantos de mi prima dijo irnico . Pero no ser mi
centro de atencin.
La joven no comprenda nada, se dio la vuelta y vio a Melanie bajar por la escalera. Llevaba pantalones
de montar, como los de el da anterior, pero de otro color, botas y un ltigo ni la mano. Dominique se mir
sus zapatos, eran sencillos y de tacn bajo, pero de todas formas, hubiera preferido ponerse unas botas.
Pero qu es lo que te has puesto? Esa no es la ropa que te he dejado! exclam Melanie en tono
ofensivo.

Lily le prest sus pantalones contest James . Los tuyos no le estaban bien.

Nos vamos? sugiri Melanie no haciendo caso al tono en que le haba respondido su primo.
Una vez fuera de la casa, Dominique pudo apreciar el paisaje. No llova y el cielo estaba
completamente despejado. El aroma del csped hmedo y el de las flores que haba por todas partes, le
encantaban. Se dio cuenta de que el pueblo no quedaba tan lejos como haba supuesto la noche anterior, el
humo de las chimeneas se vea desde el lugar donde se encontraban. El valle se extenda mucho ms lejos
de lo que su mirada poda alcanzar. La casa la haba desilusionado, eso era verdad, pero este paisaje le
pareca maravilloso.
James se acerc a ella. l le pregunt:
Qu te parece? Es algo fabuloso, no crees?
Es precioso. Es tan inmenso que inspira paz e invita a la reflexin.
No te gustar tanto cuando la nieve cubra el valle y nos quedemos aislados durante semanas
intervino Melanie.
Ni a ti tampoco Melanie replic James, y en tono irnico aadi : No debe ser tan malo
quedarse aislado, todo depende de dnde y con quin. Puede ser muy romntico si slo te dedicas a comer,
a dormir ya... no termin la frase, el resto lo dejaba a la imaginacin de cada una.
Dominique le escuch con inters y aunque mientras hablaba, la miraba, supo que la intencin de
molestar no iba dirigida a ella, sino a su prima. Pero de todas formas, se senta incmoda y agradeci el
que Melanie sugiriera comenzar el paseo.
Fueron al establo, el muchacho encargado de los caballos tena cuatro ensillados. A Melanie le dio las
riendas de uno bayo, entre dos que tenan mucho bro, James eligi uno y quedaba una yegua que pareca
muy mansa, adecuada para Dominique.
James se la acerc, y mientras le daba unas palmaditas, le coment a Dominique:
Esta era la favorita de mi padre, sola montarla de vez en cuando. Te agradar, es un animal muy
noble.
Crea que esa yegua era la preferida de tu madre dijo Melanie, mientras montaba en su caballo.
Qu es lo que insinas? pregunt Mannering en tono brusco.
Nada... nada respondi en voz baja y tratando de que James olvidara lo que acababa de decir,
aadi : Qu os parece si iniciamos el paseo?
Los tres jinetes abandonaron el establo y galoparon rumbo al valle. Dominique segua el paso de los
dos primos, lo que haba aprendido haca tantos aos, lo record en un momento.

Era una maana fra pero agradable. Dominique decidi dejarlos atrs y cabalgar por su cuenta, esa
sensacin de libertad ira algo maravilloso. No prest atencin cuando James grit su nombre, deseaba
estar sola y disfrutar esos momentos.
Lleg hasta una colina y se detuvo a contemplar lo que tena ante sus ojos. Poda ver el mar que se
confunda con el azul del cielo; el sol se reflejaba en las aguas tranquilas. Dominique se dio cuenta de que
estaba sudando, la carrera haba sido larga y el esfuerzo que haba hecho para controlar a la yegua hizo
que se acalorara. Desmont y quitndose el suter lo at a la silla.
Se acerc a una roca y se sent a descansar. La quietud que invada el lugar la hizo sentirse tranquila
consigo misma. Ese sentimiento de paz era algo que jams haba experimentado. Muchas veces haba
acompaado a las hermanas en sus oraciones dentro de la capilla, que invitaba a la meditacin y al silencio,
pero nunca haba tenido esa sensacin de paz y tranquilidad.
Levant los brazos sobre su cabeza con naturalidad, cuando vio a James Mannering que la observaba
molesto. Se preguntaba si habra hecho algo malo, tal vez, invada terrenos ajenos.
Se levant deprisa, estaba un poco confundida.
Lo siento. Creo que me adelant un poco. Os estaba esperando. Dnde est la seorita Grant?
Se ha vuelto a casa respondi secamente Qu es lo que tratas de hacer, desapareciendo de
esta manera? pregunt en tono cortante.
No alcanzaba a comprender el porqu de esa actitud, Dominique no crea que hubiese hecho nada
fuera de lo normal.
Es que... pens que os gustara estar a solas murmur ruborizada . No pensaba que te enfadaras
tanto.
Le mir a los ojos, pareca muy enfadado y casi podra decir que furioso. En ese momento, Dominique,
dej de ver a James Mannering como su tutor, y le vio como un hombre. Observ sus anchas espaldas, los
msculos de sus brazos, su pecho; sinti cierta atraccin, y un extrao miedo la invadi al darse cuenta de
que estaba a solas con l.
Le dio la espalda y se dispuso a montar de nuevo.
La prxima vez, cabalgars junto a nosotros. Entendido?
Dominique le mir y la pregunt:
Por qu? Es que no tengo libertad para poder estar a solas?
Aqu no, es un lugar muy peligroso. Hay infinidad de sitios en los que alguien se podra esconder. No

es un sitio apropiado para que una chica de tu edad vaya sola.


Dominique mont, a la vez que le responda:
Creo que exageras un poco, James; realmente desconozco el motivo de tu enfado, pero te aseguro
que no estoy dispuesta a que me sigas regaando.
Se alej galopando y James se qued de pie junto a su caballo. Dominique no quera discutir ms. Lleg
hasta el establo, Melanie la esperaba en la puerta, pero ella no tena ganas de hablar con nadie y menos
con Melanie.
As que mi primo no te encontr dijo satisfecha . No s como pudiste desaparecer tan de
repente! Qu pretendas al galopar de esa manera? Acaso buscabas quedarte a solas con tu tutor?
No seas ridicula! exclam algo molesta.
Supongo que en realidad es absurdo aadi Melanie cerrndole el paso . No entiendo cmo se le
ocurri a Henry dejarte bajo la tutela de James. Imagino que fue parte de su legado, algo as como su
ltima buena obra aadi con una sonrisa maliciosa.
Qu intentas decir? pregunt Dominique confundida.
No me digas que no lo sabes.
Dmelo! Le orden Dominique cogindola del brazo Por favor, Melanie!
La ta Geraldine te lo contar, as que no creo que tenga importancia el que yo te lo diga antes. Tu
nombre no aparece en el testamento de tu to Henry; sin embargo, su notario conoca tu existencia, y le
propuso a James si se quera hacer cargo de ti reemplazando a su padre. El resto ya lo conoces.

Captulo

DOMENIQUE no poda dar crdito a las palabras de Melanie. Esta la mir, y por la expresin de
angustia que tena, la joven se arrepinti de haberle dicho cosas que no le correspondan comunicar a ella.
Intent distraerla y viendo que James se acercaba, le coment:
Ah viene James, se alegrar de que ests aqu. Dominique la mir y se fue corriendo hacia la casa
sin esperarle. Entr de prisa y subi la escalera sin detenerse hasta llegar a su habitacin. Cerr la
puerta y se ech sobre la cama, donde llor amargamente, sintindose muy sola. Ahora comprenda la
actitud que haba mantenido con ella. Su amabilidad la utilizaba para disimular lo que realmente senta. Le
haban hecho responsable de una carga que l no deseaba, sin embargo, por razones que desconoca, l la
haba aceptado.
Era increble el cambio que haba dado su vida, apenas haca dos das que haba dejado el convento y
ya conoca situaciones en las que nunca hubiera supuesto que se encontrara algn da. Las tres personas
que vivan en Grey Witches eran muy extraas y cada una tena sus propios problemas.
Se puso de pie y acercndose al espejo observ su esbelta figura. El pantaln que le haba prestado
Lily le sentaba muy bien. Su apariencia no era la de una nia, y se pregunt si James Mannering habra
notado el cambio sufrido con slo variar de atuendo. Si se hubiera dado cuenta, ahora sabra que no
podra tratarla como a una chiquilla.
Se retir del espejo, y se arregl un poco, no quera que la vieran en ese estado tan depresivo.
Despus del desayuno se cambiara de ropa, ahora tendra que salir, an no haban limpiado su habitacin y
supuso que no tardaran en ir a hacerlo.
Se quit la goma de la coleta, y se cepill el pelo.
Infinidad de pensamientos seguan dando vueltas en su cabeza. Al principio no entenda cmo se le
haba ocurrido al to Henry dejarla bajo la tutela de su hijo. Por qu en vez de eso, no le haba dejado
una pequea suma de dinero que le hubiera permitido terminar sus estudios y as poder situarse en la
vida? Ahora que saba que viva all, gracias a la caridad de los Mannering, senta deseos de marcharse de
Grey Witches.
Unos golpes en la puerta la sacaron de sus pensamientos. Dio su consentimiento para que entraran,
pensando que sera Lily, y continu cepillndose el cabello.
James abri la puerta, entr y la cerr tras l. A Dominique le sent muy mal que fuera l el que haba
interrumpido sus pensamientos. Pareca enfadado, su mirada era fra y no la apartaba de ella. No le
agrad que la viera sin peinar y en ese estado de confusin.

Se acerc a ella y le pregunt:


Me quieres decir qu fue lo que te cont Melanie? Qu te dijo que te hizo correr como una
endemoniada?
Prefiero no hablar de eso ahora respondi nerviosa . No creo que sea el momento oportuno.
Vamos Dominique! exclam . S muy bien lo que mi primate dijo.
Si lo sabes, por qu me lo preguntas? murmur sonrojada . Me aclar mi posicin y la tuya.
Ahora necesito tiempo para decidir que har.
No lo necesitas. No habr ningn cambio en los planes.
S lo habr afirm con decisin . No deseo tu caridad ni la de tu familia, as que buscar
trabajo y me ir de aqu, no deseo ser una carga e inspirar compasin.
Eso es lo que piensas?
No se trata de lo que yo piense, sino de la realidad replic mordindose el labio para evitar que le
temblara.
Escucha, Dominique dijo con cario . Quiero que olvides todo lo que te dijo Melanie. No le des
importancia, desgraciadamente, tanto ella como mi madre, estn acostumbradas a luchar contra todos
durante toda su vida para conseguir lo que desean, sin importarles el que puedan hacer dao a alguien. Con
el tiempo, te dars cuenta de que no son malas, lo que les sucede es que creen que la gente piensa de la
misma forma que ellas.
No puedes obligarme a permanecer aqu dijo bajando la cabeza.
Claro que puedo!
Pero es que no tenemos ninguna relacin, no somos parientes, ni siquiera eres mi padrino camin
unos pasos por la habitacin . Pienso que te dejar ms tranquilo si te libero de la obligacin de
cuidarme.
Qu quieres decir, Dominique?
No deseo quedarme en esta casa. No creo que mi presencia sea muy agradable para tu familia y tu
madre agradecer que me marche.
La mir detenidamente mientras se diriga hacia ella. Por su expresin, supo que James comprenda
que no podra manejarla a su antojo, como tal vez supuso cuando la sac del convento.

Acaso has recibido malos tratos?


Oh, no! No es eso, es slo que como estar aqu tan poco tiempo, pens...
Pero de dnde sacas esas deducciones?
Por qu no me dejaste donde estaba? pregunt con tristeza.
Cre que te agradara vivir en un hogar, y salir de aquel encierrorespondi furioso.
Un hogar, esto?
Es que no tengo otro.
An as, quiero marcharme insisti.
Entonces debo pensar en alguna forma para impedirlo, y creme que la encontrar.
Pero es que no comprendo por qu tanta insistencia.
Simplemente porque no quiero dejarte marchar a un mundo que no conoces. Adems, creo que mi
padre saba lo que haca; siempre pens bien las cosas antes de hacerlas, y supongo que esto lo previo,
mucho antes de su muerte.
Siempre le estar muy agradecida por todo lo que hizo por tle record nuevamente.
Lo s. Y tal vez algn da sepamos por qu procedi as.
Pero es que no puedes pensar bien, ni siquiera cuando te i dieres a tu padre? pregunt molesta.
Eres libre de pensar como desees. Pero permanecers aqu. Despus de todo slo son seis meses.
Lo pensar contest Dominique.
No me provoques le dijo cogindola por los hombros . Le he dicho bien claro que te quedars y
as ser.
La joven contuvo el aliento, era la primera vez que le tena tan cerca y aunque le estaba haciendo
dao, no intent soltarse. Sinti el calor de su cuerpo y pudo contemplar el contraste tan bonito de sus
pestaas oscuras con el color gris intenso de sus ojos.
Me ests haciendo dao! se quej, e inmediatamente l la solt y la mir como nunca lo haba
hecho.
Lo siento murmur . Pero es que me desesperas.

Yo tambin lo siento, James, disclpame. Te quedars en Grey Witches.


De acuerdo no tena intenciones de seguir discutiendo.
Est bien.
James se dio media vuelta y sali de la habitacin. Dominique se senta extraa, nunca haba estado
tan cerca de un hombre y comenzaba a entender los sentimientos que podan despertarse entre dos
personas de diferente sexo. Era algo totalmente nuevo para ella.
Intent no pensar ms en ello, pero estaba segura de que al lado de James Mannering la vida sera
emocionante. No saba si l la vea como a una nia o como lo que era, una joven atractiva.
Procedi a ducharse y a cambiarse de ropa para el desayuno. Se volvi a hacer una coleta, se puso un
vestido, y dej los pantalones de Lily sobre la cama. El vestido, a pesar de no ser muy bonito, le sentaba
muy bien. El color de sus mejillas ya no estaba tan plido, vivir en Grey Witehes le hara adquirir un
aspecto muy saludable. Despus de tanto tiempo encerrada en el convento, vivir tan en contacto con la
naturaleza, le ira muy bien. Se quedara, despus de todo, ya no tema enfrentarse a la seora Mannering
o a Melanie.
Pens que ira a dar una vuelta por el pueblo, y se comprara unos pantalones. No tena intenciones de
quedarse encerrada en aquella lgubre mansin. Cuando volviera, recorrera el valle y poco a poco, ira
conociendo todos los alrededores.
Se arm de valor y baj a desayunar. La

seora y Melanie estaban tomando un caf y fumando un

cigarrillo. Dominique sinti que la miraban con curiosidad, tal vez notaban algo de confusin en su actitud.
Dio los buenos das a la madre de James y se sent. Lily le pregunt lo que deseaba tomar, slo pidi
pan tostado y caf. Estaba incmoda, no se le ocurra ningn tema con el que pudiera iniciar una
conversacin, el silencio reinaba en aquella habitacin. Afortunadamente la seora Mannering tom la
iniciativa.
Has dormido bien? pregunt, a lo que Dominique slo asinti con la cabeza . Te ha gustado el
paseo matutino?
Muchsimo respondi mirando a Melanie, que la observaba como si esperara algn comentario,
respecto a la revelacin que le haba hecho hacia poco menos de una hora.
No s qu le habr sucedido a James dijo, dirigindose a las dos chicas . Es muy extrao que no
haya bajado a desayunar.
Bajar ms tarde dijo su sobrina. Y te aseguro que lo tomar en la cocina, recuerda que le agrada

tomarlo all, me imagino que no querr perder la costumbre aadi con irona.
Qu insinas, Melanie? pregunt la seora en voz baja, tratando de disimular su enfado.
Te aseguro que nada... respondi ruborizada . Pero t le conoces y sabes que no le agrada comer
aqu. Le he odo decir que este lugar en especial, le hace revivir muchos recuerdos.
James habla demasiado, Melanie. Y no vamos a tener en cuenta todo lo que diga respondi
secamente.
Se parece mucho a ti, ta, sobre todo cuando se trata de conseguir lo que desea.
La madre de James procur no mostrarse disgustada.
Me parece que no es el momento, ni el lugar indicado para nuestras discusiones, Melanie. No creo
que a Dominique le interesen nuestros problemas y mirando a sta le pregunt :
Qu has pensado hacer por la maana?
En ese momento Lily le colocaba a la joven en la mesa el desayuno que haba pedido al llegar al
comedor. Advirti en su rostro una sonrisa y supuso que las discusiones entre sus anfitrionas eran de lo
ms normal.
Me gustara ir al pueblo, ir paseando despus de desayunar.
Me parece muy bien, pero pienso que debemos buscarte algo qu hacer mientras permanezcas aqu.
La vida en este lugar puede resultar muy aburrida, vemos muy poco la televisin y no encontrars mucho
que leer mir a Melanie mientras hablaba y Dominique volvi a sentirse como si estuviera ante dos
enemigas.

Siempre hay mucho qu hacer en los establos aadi su sobrina ponindose de pie.
Vamos, vamos Melanie, qu te sucede hoy que ests tan susceptible? En ningn momento he tenido
la intencin de molestarte.
Te conozco demasiado bien, querida ta.
Es suficiente, Melanie! Te suplico que tus desagradables insinuaciones las hagas en otro lado y no
delante de m, te aseguro que no te aguantar.
Claro que no lo hars! respondi dirigindose hacia la puerta . Sabes bien que lo que puedas
decirme me tiene sin cuidado, no me asustas dijo burlndose . Una de las ventajas de la presencia de
James, es que tus maquinaciones se dividen entre l y yo.

Basta! grit Geraldine furiosa . Sabes muy bien que Reuben y Brian se encargan del trabajo en
la granja, y si te agrada permanecer en los establos y apestar a puerco, es tu problema, yo no tengo nada
que ver con eso.
Sabes perfectamente que sin mi ayuda, los establos no existiran.
En realidad, tampoco son tan necesarios como te imaginas.
Eres...! no termin la frase y sali del comedor, dando un portazo.
Mientras, Dominique se haba servido ms caf y pensaba en lo tonta que haba sido al imaginar que la
casa de su to sera el hogar tan anhelado por ella. Mir a la seora Mannering y observ que haca un gran
esfuerzo por recobrar su compostura. Estaba bastante nerviosa.
No tomes en serio a Melanie, siempre se altera cuando critico su apariencia.
No cre que la discusin empezara por eso.
Qu quieres decir? pregunt Geraldine cortante.
Pienso que ella ha provocado todo.
Supongo que s titube al contestar , pero Melanie sabe muy bien lo que pienso sobre su modo
de vestir y no acepta que le haga ningn comentario; lo mismo le sucede en lo que se refiere a los caballos.
Tiene alguna tarea en la granja?
S, as es. La extensin de estas tierras es muy grande, por lo que hace tiempo que instalamos una
granja. Aqu hay un encargado de administrar las propiedades, que estn divididas y son atendidas por
terratenientes. Quiz James te lo ha contado ya.
Su... su padre era propietario de la mayora de las casas coment un poco incmoda, la seora
Mannering se percat de su titubeo.
Veo que te es difcil aceptar que James es hijo de tu to Henry.
No... Le aseguro... Dominique no encontraba las palabras adecuadas para terminar la frase . Por
favor, siga contndome cosas de la granja sugiri . Me interesa mucho.
Geraldine acept la sugerencia de Dominique, aunque le hubiera gustado insistir ms en el tema,
continu:
Como sabes, Henry era el ms rico del lugar, pero creo que nos estamos apartando del tema
verdad? Hizo una pausa y continu : Cuando l viva, la gente que tena a su servicio se encargaba de

todo, al morir, la mayora no quiso quedarse bajo mis rdenes, y se despidieron. Ahora, solamente hay dos
personas en el servicio, Lily y la cocinera, ninguna de las dos conoci a Henry, y no tuvimos ningn
problema para contratarlas. Entre las tres nos organizamos para que en la parte de la casa que vivimos
todo funcione bien. El resto, que an no lo conoces, es demasiado grande para una familia tan pequea.
Y Melanie? pregunt, Dominique.
Su madre era hermana ma, la pobre muri hace dos aos dejando a mi sobrina en completo
desamparo. Cuando lo supe, le suger a Henry la posibilidad de traerla a Grey Witches. Tu to accedi.
Melanie quera trabajar, ya fuera en Hemsley o en Whitby, pens en esos lugares porque son los que
estn mejor comunicados con Grey Witches la ltima frase que haba dicho la madre de James, le
pareci a Dominique que estaba un poco fuera de lugar, pens que tal vez ms adelante la relacionara con
algo importante . Pero al poco tiempo de haber llegado, nos dimos cuenta de que a mi sobrina le
gustaban mucho los animales, as que Henry sugiri que podra cuidar los caballos. Claro que al fallecer tu
to y quedarnos sin gente que desempeara las faenas de la granja, Melanie tuvo que hacerse cargo, no
slo de los caballos sino de muchas cosas ms.
Tambin de los cerdos? pregunt Dominique.
Alguien tiene que hacerlo. Los jvenes de ahora trabajan en las ciudades y no quieren venir a los
pueblos. Los empleados que tena Henry eran muy mayores y casi todos trabajaban aqu desde haca
muchos aos.
Dominique comenzaba a entender la actitud de Melanie. Lo que no acababa de comprender era el
porqu permaneca en Grey Witches. Posiblemente vea en James un posible cnyuge, pero lo dudaba, la
seora Mannering nunca aceptara tal unin, era una mujer ambiciosa y seguramente, dada su posicin
actual, no considerara a Melanie la mujer indicada para su hijo.
Dominique termin su caf y se levant lentamente.
Ya que hay tanto trabajo en esta casa, buscar algo en qu ayudar, mientras est aqu.
Creo que es una buena idea, Dominique dijo Geraldine.
A media maana Dominique se fue andando al pueblo. Era pequeo, pero muy pintoresco. Pase por sus
calles, estuvo en la iglesia, se compr unos pantalones, y tambin sobres y sellos para escribir a sus
amigas. Quera contarle a Susan la vida tan excitante que llevaba en la granja, y describirle al famoso
escritor. Sonri con amargura al pensar que si su amiga supiera la clase de personas que tena a su
alrededor, gente que se hera constantemente nunca la hubiera envidiado y seguramente la compadecera.
Cuando regres a la casa, vio un coche aparcado frente a la puerta principal, subi las escaleras y se
dispona a entrar sin ser vista, pero al cruzar por la puerta del saln, la seora Mannering la llam para

presentarle a la persona con la que hablaba.


Dominique quiero que conozcas a Vincent Morley, nuestro administrador y dirigindose al joven le
present a Dominique . Vincent, esta chica es la sobrina del seor Farriday.
Vincent Morley era un hombre joven, alto y fuerte, al mirar a Dominique le pregunt a Geraldine:
La pupila de James, no es as?
S respondi la seora.
Encantado de conocerte dijo Vincent, dndole un apretn de manos . Cundo has llegado?
Ayer por la tarde contest sonriendo.
Cunto tiempo permanecers aqu?
No estoy muy segura, seor Morley, depende del seor Mannering.
Nos veremos muy a menudo, ya que siempre estoy por aqu cerca, si deseas conocer el lugar, con
mucho gusto te servir de gua.
Se lo agradezco mucho contest la joven. Vincent y la seora Mannering se dirigieron hacia la
puerta, mientras continuaban con la conversacin que haban interrumpido al ver a Dominique. sta se
despidi, y se fue a su habitacin. Ya estaba limpia y ordenada. Abri su armario y se detuvo a observar
su ropa, todo lo que posea incluyendo lo que el to Henry le haba comprado, estaba pasado de moda, y era
de colores oscuros. Si no poda renovar su vestuario, tendra que ingeniar algo para modernizarlo. Como
an dispona de tiempo, ya que la comida se servira una hora ms tarde, sac un vestido de color mostaza
y lo coloc encima de la cama. Era un modelo recto y bastante amplio, con un cinturn haciendo juego, que
serva para darle un poco de forma.
Sac las tijeras de su costurero, y deshizo el dobladillo, enhebr una aguja y lo cosi de nuevo,
dejando el vestido mucho ms largo. Tambin dio unas puntadas al talle para darle forma. Despus se
quit el que llevaba puesto y se puso el que acababa de renovar. Se mir en el espejo, no estaba del todo
mal, su apariencia era agradable y no del todo ingenua.
Le avisaron que la comida estaba servida, sali de la habitacin y cuando lleg al vestbulo vio a James
que estaba sentado revisando unos papeles y con un vaso de whisky en su mano derecha. No quera que se
diera cuenta de que se haba cambiado de vestido, as que se apresur para llegar al comedor, donde las
dos mujeres les esperaban.
Vaya! exclam l . Qu es lo que te has puesto? al

or su voz, Dominique se detuvo.

A qu te refieres? pregunt . No me he puesto nada nuevo.

Vamos, Dominique, ese vestido. Podra asegurar que mi padre no te lo compr.


Qu sucede, James? pregunt Geraldine desde el comedor . Est Dominique contigo?
S, respondi y acercndose a la joven, le pregunt : De qu se trata todo esto, Dominique? Me
gustara saber qu te propones y haciendo una leve pausa aadi : Espero que no hayas interpretado
mal nuestra conversacin de esta maana.
No seas tan engredo, James dijo furiosa, y entr en el comedor.
Vaya con la mojigata! Exclam Melanie al verla , ya veo que ests aprendiendo rpidamente.
De qu hablas, Melanie? pregunt Geraldine confundida . Te sucede algo Dominique?, pareces
muy alterada.
Es evidente que la protegida de tu hijo, ha modernizado su apariencia y aadi con irona : Por
qu lo habr hecho?
Todo lo que he hecho ha sido bajarle el dobladillo a mi vestido protest . No creo que tenga
tanta importancia como la que le estis dando.
Nadie lo est haciendo respondi mirando a su hijo . Pero me gustara saber por qu lo has
hecho.
Todos pensis que soy una chiquilla, as que lo nico que puedo hacer es imitar el estilo de Lily; ella
tiene mi edad y se viste as.
Entiendo contest Geraldine. James pareca interesado en la conversacin, y Melanie disfrutaba
de la situacin mientras tomaba la sopa. La madre de James continu hablando:
No puedes comparar tu posicin con la de Lily.
Lo s contest Dominique framente.
No veo por qu has de imitar la forma tan extraa que tiene la criada de vestirse.
Y por qu no, ta? Yo no encuentro ningn inconveniente.
Dominique no comprenda por qu Melanie la apoyaba, acaso se pona de su lado en contra de su
propia ta? James Mannering las observaba aburrido.
Tengo trabajo pendiente, as que me retiro. An guardas la mquina de escribir mam?
pregunt.
S, querido. Pero me imagino que no trabajars aqu.

No hay mucho que hacer y no pienso dedicarme a escuchar vuestras discusiones. Y tened cuidado
para no volver a herir a Dominique con vuestros comentarios.
La joven le mir mientras hablaba, sus ojos no le decan nada, su mirada era fra e indiferente.
En ese momento Lily entr en la habitacin, pareca muy sorprendida; se dirigi a James.
Disculpe que le moleste seor, pero tiene una visita.
Saben que estoy en casa?
Por supuesto, querido dijo una voz melosa, que a Dominique no le era desconocida . Despus de
todo es la verdad.
James se puso de pie y Dominique mir a la persona que hablaba desde la puerta. Era una mujer
bellsima, vestida con elegancia y buen gusto. Llevaba un abrigo verde con el cuello de piel, y un gorro y un
manguito haciendo juego. Era muy guapa, pero sin saber por qu, la joven no sinti simpata hacia aquella
mujer.
James fue a su encuentro, pero sin el menor entusiasmo, la salud y volvindose para mirar a
Dominique, le dijo:
Dominique, esta es Yvonne Park. Seguramente te acordars y dirigindose a Ivonne aadi :
ella es mi pupila, Dominique Grainger.
Geraldine no perda ningn detalle de las presentaciones de su hijo. Se acerc sonriendo
abiertamente y dijo:
Querida Ivonne, me alegra que hayas venido, no saba que estuvieras en Yorkshire. Ya conoces a
James, jams comenta nada.
Yvonne sonri indiferente a Dominique y a Melanie, que estaban a su lado, mir a James y a su madre,
y despus ignor a las dos chicas por completo.
Es Yvonne Park, hija del dueo de Textiles Park le coment Melanie a Dominique . Observaba
como cambia mi familia con ella, casi se pone de rodillas ante su presencia.
James no quiso llamarla cuando estbamos en Londres - dijo Dominique en voz baja.
No me extraa aadi Melanie , hace meses que trata de hacerla a un lado, pero la ta
Geraldine no deja de insistir.
Y qu es lo que pretende?

Mi ta es una mujer muy ambiciosa y en este momento est preparando el mayor proyecto de su
vida, Yvonne ser la segunda seora Mannering.
Entiendo musit, observando a las personas que la; rodeaban en ese momento.
Dominique pensaba que Melanie quera a su ta, eso no lo dudaba, pero que en este caso no estaba de
acuerdo con ella; vea a Geraldine encantada con la visita y lo que ignoraba era si a James le agradaba que
Yvonne llegara tan inesperadamente, no pudo observar ninguna expresin en su rostro que le revelara sus
sentimientos. Pero despus de todo, qu importancia tena? ella se ira al cabo de seis meses.

Captulo

LA seora Mannering insisti para que Yvonne se quedara a tomar el caf con ellos. Dominique la
observ detenidamente.
Escuch la conversacin que mantenan, y por deduccin se enter de que la amiga de James viva sola
en un piso en Londres. Su familia resida cerca de Hollingford ya que una de las fbricas de su padre se
encontraba en Brodford, muy cerca de all.
Cuando Yvonne se quit el abrigo, Dominique pudo admirar el vestido blanco de lana que llevaba.
Estaba segura de que cualquier color que se pusiera, le sentara bien, pareca una modelo. Suspir
resignada, ella nunca tendra un aspecto parecido, ni su color de piel, ni su guardarropa.
Lo nico que desentonaba en ella, era la voz tan aguda que tena. Tena un sonido muy desagradable y
no le pegaba con su tipo y apariencia. Pens, que tal vez con el paso de los aos se le volvera un poco ms
grave.
Despus de tomar el caf, Geraldine les ofreci una copa.
James neg con la cabeza a la vez que deca:
Lo siento mucho, pero tengo que trabajar. As que si me disculpis... dijo tratando de ser corts.
No me parece un buen momento para trabajar, James le sugiri su madre irritada.
Es que no tengo otra alternativa respondi levantndose y empujando la silla hacia atrs .
Adems, Yvonne conoce muy bien cmo es la vida de los escritores, no te preocupes por ella aadi con
irona.
Crea que habas terminado con todo lo que tenas pendiente, ya que en Londres estuviste muy
ocupado, y no tuve ocasin de verte intervino Yvonne.
James sonri un poco forzado. Dominique se preguntaba cmo aquella mujer poda soportar tanta
indiferencia.
Bueno aadi l , esto te demuestra que tu posicin era equivocada y se levant y sali de la
habitacin, no sin antes mirar a su pupila que le observaba sorprendida.
Lo siento mucho por ti, Yvonne dijo la seora Mannering , pero ya conoces a James, cuando
trabaja es insoportable.

Yvonne Park tratando de disimular su disgusto, sac su pitillera del bolso y encendi un cigarrillo.
Creo que ante las circunstancias, ser mejor que me marche aadi molesta.
Me parece una buena idea coment Melanie.
Ir a ver a los Hamilton, les promet hacerlo y creo que hoy es el da apropiado - dijo, ignorando el
comentario de Melanie.

Por qu tanta prisa? pregunt Geraldine . Tal vez James termine pronto con su trabajo.
Qudate a cenar y quiz despus pueda salir a dar un paseo.
No s, Geraldine dijo indecisa . No me gusta interferir en su vida cuando viene a Grey Witches.
En realidad, no pensaba detenerme aqu, pero pas tan cerca que... dej la frase sin terminar para
aadir despus : Ahora, si crees que James estar libre para la hora de la cena, creo que...
Claro que lo estar! interrumpi la seora Mannering.
Si es as, entonces me quedar.
Con permiso dijo Melanie con forzada cortesa.
Geraldine sonri y dirigindose a Yvonne coment:
Mi pobre sobrina siempre que vienes se siente menospreciada. Tiende a compararse contigo y
comprende que no te puede llegar.
Yvonne se sinti satisfecha ante los halagos. Dominique no soportaba ms aquella conversacin y
levantndose se dirigi a Geraldine:
Si no me necesitas, ir a dar un paseo por los alrededores.
Puedes irte, querida.
La joven sali del saln sintiendo que le faltaba el aire, cerr la puerta, y respir profundamente.
Cogi su abrigo y sali por la puerta principal.
Haca un poco de fro pero la tarde era agradable. Se abroch el abrigo y con las manos en los
bolsillos comenz a caminar. Busc a Melanie con la mirada, pero no la encontr. Se dirigi al establo y all
la vio. Melanie llevaba un cubo y una escoba.
Vaya! exclam . Se puede saber qu haces por aqu?

Pens que podra ayudarte en algo respondi con temor.


Hablas en serio? pregunt Melanie incrdula.
Por supuesto! respondi Dominique . Tu ta me explic que no hay mucha gente para trabajar en
las faenas de la granja, as que pienso que algo podr hacer.
Fue idea suya?
No! Te aseguro que ma. Tal vez te parezca un poco absurdo, pero estoy acostumbrada a
desempear diferentes tareas. En el convento no haba nadie que nos hiciera las camas o lavara nuestra
ropa. Adems, todas las semanas, un grupo de nosotras limpiaba el comedor y el saln donde nos
reunamos.
Bueno, en ese caso acepto repuso Melanie sonriendo . Te importara ensuciarte las manos?
No dijo Dominique . Es ms, creo que lo deseo.
T lo has querido! Pero si a James le sienta mal, le dirs que fue idea tuya de acuerdo?
De acuerdo repiti Dominique con una sonrisa.
Aquella tarde, la joven se dio cuenta de que Melanie poda ser una buena amiga. Su antipata hacia ella
pareca haberse quedado atrs. Las dos trabajaron sin parar. Dominique limpi el gallinero lastimndose
las manos y las rodillas; se resbal en el establo, y para finalizar se encerr junto con un toro. Todo lo que
les sucedi en tan poco rato, pareci acercarlas un poco y las hizo olvidar sus diferencias.
Al anochecer, Dominique sali del establo mientras Melanie cerraba las puertas. Tena una apariencia
graciosa, llevaba paja en el cabello y barro en los zapatos; la cara y las manos las tena sucias, as como
toda la ropa; ola a estircol y deseaba darse un bao.
Entr en su habitacin y se meti en el bao. Esta vez no contaba con tiempo suficiente para hacer un
arreglo rpido a cualquier vestido, as que se puso una falda roja, un poco ms larga que las dems, y una
de sus blusas blancas. Se mir en el espejo, no se vea del todo mal, ese conjunto le gustaba.
nicamente le faltaba peinarse. Ya estaba cansada de llevar el pelo recogido, se lo solt, pero no le
gustaba cmo le quedaba, lo tena muy largo y careca de un buen corte. Sac una paoleta y se la puso,
pero se la quit porque tampoco le convenci. En ese momento Lily llam a la puerta para decirle que la
esperaban para cenar.
Se recogi el pelo en una coleta, y baj de prisa la escalera. Cuando entr en el comedor se dio cuenta
de que todos estaban sentados a la mesa, excepto James. La seora Mannering pareca disgustada.
Dominique pens que seguramente habran tenido alguna discusin.

Hoy has llegado tarde a todas las comidas, Dominique.


Esto no es un hotel, ta exclam Melanie con sarcasmo . Si deseas que seamos puntuales, te
sugerira que hicieras sonar una campana anunciando la hora indicada.
Te agradezco el consejo y mirando a Yvonne pregunt : Crees que es mucho pedir puntualidad?
Es preferible el retraso a la ausencia respondi Yvonne malhumorada.
Te comprendo querida y te pido disculpas, si lo hubiese sabido, no hubiera insistido en que te
quedaras.
No digas nada, por favor dijo Yvonne, haciendo un ademn . No hay nada que pueda
convencerme. Y pensar que pude cenar con los Hamilton! Te aseguro que hubiera recibido otro trato.

Melanie mir a Dominique sonriendo, y sta tuvo que desviar la mirada para no rer y delatarse, ya no
se senta como una intrusa, Yvonne haba pasado a ocupar su lugar. Dominique se preguntaba dnde estara
James en esos momentos.
No os lo vais a creer! continu Yvonne, dirigindose a las chicas . Ha ordenado que le llevaran la
cena al estudio, como si no pudiera sentarse a la mesa y acompaarnos a cenar.
Es que le distraes mucho, y se descentra contest Melanie con irona.
Al or ese comentario, Dominique, que haba empezado a tomar la sopa, comenz a toser, sintiendo que
se ahogaba, Melanie le dio unos golpecitos en la espalda y la sensacin de asfixia se le pas.
Despus de cenar, Yvonne se march furiosa, Geraldine, pretextando un dolor de cabeza, se retir a
su habitacin. Melanie se enfrasc en la lectura de un libro sobre caballos, y Dominique estuvo viendo una
pelcula en la televisin, despus subi a su cuarto, se encontraba cansada pero tena mejor nimo que la
noche anterior.
Durante los das siguientes, James continu trabajando, por lo que Dominique le vea muy pocas veces.
Su madre insista en que su actitud, el da que Yvonne los visit, haba sido incorrecta, pero a pesar de
hablarle y sermonearle, no consegua reacciones positivas por parte de su hijo. A Geraldine le preocupaba
la cuenta del telfono, James llamaba constantemente a Londres por razones de su trabajo.
Dominique durante esos das se dedic a montar a caballo, a pasear por los alrededores y a hacerse
amiga de Melanie. Le ayudaba a realizar sus labores y poco a poco fueron convirtindose en amigas
inseparables. La chica le confi sus sentimientos hacia James, dicindole que era la nica razn por la que

soportaba a su ta Geraldine. A Dominique no le agrad demasiado la confidencia, ya que senta que su


tutor slo le perteneca a ella, no deseaba pensar que pudiera contraer matrimonio.
El tiempo empeoraba conforme pasaban los das, pero a Dominique pareca no importarle ya que sala
muy de maana a pasear en la yegua que montara el primer da que pas en Grey Witches. Algunas veces
Melanie le haca compaa, y otras, incluso se les una James. Cuando cabalgaba sola, no se alejaba mucho
de la casa recordando los consejos de su tutor.
Una maana sali a dar su acostumbrado paseo, y se detuvo a descansar un poco para permitirle a
Rosie, la yegua, que comiera algunas hierbas frescas, cuando vio a un jinete que se diriga hacia ella. Sinti
un gran alivio al comprobar que era el administrador que la seora Mannering le haba presentado.
Hola! exclam amablemente . Esta s que es una sorpresa.
Lo que es extrao es que no le haya visto nunca por aqu dijo Dominique soltando las riendas de
Rosie.
Frecuentas mucho estos lugares? pregunt mientras se bajaba del caballo.
Vengo casi todas las maanas asinti Dominique.
Creo que yo debera hacer lo mismo aadi sonriendo . Y hasta dnde llegas?
Slo hasta aqu, el mar es algo que-nunca me canso de admirar aadi mientras sus ojos recorran
el paisaje que tenan ante ellos.
Entonces, no has bajado a la playa? Seguro que no conoces Whitby o Scarborough.
No respondi Dominique . No he tenido oportunidad de conocer esos lugares. El seor
Mannering tiene muchas ocupaciones, no dispone de tiempo para pasear; adems, yo tambin trabajo,
ayudo a Melanie en el cuidado de la granja.
Trabajas all? pregunt sorprendido . Me imagino que tu tutor no lo sabe.
En realidad no lo s. Pero no creo que tenga mucha importancia que ayude un poco, despus de todo
no tengo nada que hacer.
Pienso que s la tiene, no son ocupaciones que te correspondan.
Lo s, pero lo hago con gusto y adems disfruto ayudando
respondi con una sonrisa, y mirando hacia el mar aadi :
Todo esto es maravilloso! No le parece? Este lugar se ha convertido en mi sitio favorito, aqu se

respira una inmensa paz.


Eres una chica muy especial dijo mirndola a los ojos , generalmente cuando se tiene tu edad se
pasa el tiempo de otra manera, en bailes, reuniones y diversiones. No cre que James Mannering
consiguiera retenerte en este lugar.
No le es muy difcil, apenas se da cuenta de que existo murmur bajando la cabeza.
Fumas? pregunt, ofrecindole un cigarrillo . Me imagino que no permanecers mucho tiempo
en Grey Witches, tengo entendido que James deber regresar a Londres dentro de unos cuantos das, la
obra que van a emitir por televisin estar lista muy pronto.
No estoy enterada de las producciones de James asever , y no saba que tena que regresar a
Londres se dio cuenta de que hablaba de su tutor con mucha familiaridad, pero ya era tarde para
retractarse.
Me imagino que ir para dar los toques finales a la obra respondi un poco molesto.
Sentir mucho tener que marcharme tan pronto.
En realidad, lo nico que senta era dejar el ambiente familiar que haba esperado tener durante
muchos aos y que ahora gozaba en compaa de Melanie. Pero lo fundamental, era la presencia de James.
No le vea mucho y conviva poco con l, pero le senta cerca y eso era lo nico que importaba.
El galope de un caballo les interrumpi la conversacin, Dominique volvi la cabeza y vio a James
acercarse. El corazn le empez a latir deprisa, su presencia despertaba sentimientos nuevos y
desconocidos para ella.
As que aqu es donde te metes! exclam dirigindose a Dominique bruscamente . Melanie me
dijo que habas salido a montar t sola.
As lo hice, hasta que hace un rato ha llegado el seor Morley.
Desde cundo cabalgas por las maanas, Vincent?
Debo admitir que no lo hago con frecuencia respondi con calma.
Nos vamos, Dominique? pregunt James secamente.
Cuando quieras respondi, mientras montaba a Rosie.
Yo tambin me voy dijo Vincent , nos veremos otro da, seorita Grainger.
Dominique sonri y asinti con la cabeza, se dispona a galopar, cuando James cogi las riendas de su

yegua y le dijo:
Espera Dominique, deseo hablar contigo.
Por qu no hablamos en casa?
Ese es el lugar menos apropiado para mantener una conversacin entre nosotros, no deseo que mi
madre interfiera en lo que voy a decirte.
No entiendo porque crees que nos va a interrumpir.
Parece que no te has mirado en el espejo durante los ltimos das dijo mirndola a los ojos . La
vida en el campo te sienta maravillosamente. Ya no eres la misma nia que traje hace unas semanas.
Eres muy amable, gracias replic sin darle mayor importancia a sus palabras.
Sigeme, Dominique.
Cabalgaba muy cerca de l; la llev por lugares desconocidos para ella y no quera perderse. La
condujo hasta una pequea cabaa, seguramente utilizada por los pastores o por algn granjero que pasara
por all cuando empezara a empeorar el tiempo.
Al llegar, James desmont y aguard a que ella tambin lo hiciera. Entraron en la cabaa. A Dominique
le pareci que haba un ambiente acogedor. Era una sola habitacin con una mesa y un banco de madera; en
un rincn, la chimenea esperaba que alguien la encendiera.
Dominique camin hasta detenerse cerca de la mesa, deseaba guardar cierta distancia con su tutor.
De qu se trata todo este misterio? Acaso vas a decirme que tenemos que volver a Londres?
Quin te ha dicho tal cosa, Dominique?
El seor Morley me lo ha dicho hace un momento y haciendo una pausa aadi : Tienes que ir all
para dar los ltimos toques a tu obra, no es as?
En efecto respondi dando un puntapi al banco . No deseo tener problemas con mi madre por
todas las llamadas que hago, son demasiadas, as que ir durante unos das. Adems, es conveniente que
supervise personalmente el comienzo del programa.
Lo entiendo.
Y tengo que comunicarte que no irs conmigo. -Cmo?
Que no vas a venir conmigo repiti . Te quedars en Grey Witches.

Si la idea de vivir aqu, ha sido tuya, no entiendo por qu ahora cambias de opinin y quieres
dejarme sola dijo indignada. Yo deseaba permanecer en Londres, nunca haba pensado venir tan lejos.
Entindelo, Dominique replic con calma . M o puedo llevarte, recuerda que vivo solo.
Y eso qu importa! exclam.
Claro que importa! Es que no piensas lo que dir la gente? Se extender el rumor de que vivimos
juntos.
Sera la verdad respondi.
S, pero no diran slo eso hizo una pausa , sino tambin que dormimos juntos no comprendes?
Est bien acept, sintiendo que el rubor le suba a sus mejillas , s que soy una chiquilla y no
debo esperar que me trates como si no lo fuera.
No has odo lo que acabo de decirte? Ya no eres la nia que lleg a Grey Witches hace unas
semanas. Y por ese motivo he tomado esta decisin.
Qu amable! exclam . Eres muy considerado.
No te entiendo, Dominique, qu quieres decir?
No s! Respondi , lo nico que puedo decir es que el to Henry no me trataba as, siempre me
consider como una compaera suya.
No lo dudo recalc James , a sus setenta aos pareca un chico de quince.
Eres injusto! le reproch . Slo porque se hizo cargo de una hurfana sin tener obligacin?
No es eso, Dominique dijo con paciencia , no me interpretes mal, pero he tomado una decisin y
no la cambiar, disclpame.
Se acerc a ella, la cogi por los hombros y continu:
Mira comenz a decir , no deseo lastimarte, comprendo cmo te sientes, pero creme que
volver muy pronto, antes de lo que imaginas.
Y seguramente me traers un mueco de peluche para que duerma con l, verdad? trat de
ocultar las lgrimas y el temor que senta.
Te mereces unos azotes por tu actitud.
Y quin va a drmelos? Contest retndole , t?

Si es necesario, lo har y aadi enfadado : Ten mucho cuidado durante mi ausencia, no se te


ocurra desaparecer porque te encontrar en cualquier lugar que te escondas.
Dominique se apart de su lado y se dirigi hacia la pequea ventana, con tristeza mir el paisaje, la
soledad que perciba era igual a la de su alma. Se senta sola y desamparada al pensar que James partira
y estara lejos de ella, sin saber cunto tiempo. No faltaba mucho para que llegara la Navidad y por
consiguiente su cumpleaos, y no estaba muy segura de que su tutor llegara a tiempo para pasar con ella
esas fechas, el mundo en que viva le absorbera por completo privndola de su compaa en esos das tan
significativos.
De pie ante la ventana y sin mirarle dijo:
No puedes impedir que vaya a Londres por mi cuenta.
Te quedars aqu, Dominique! exclam violento . O es que no he hablado con claridad?
Por supuesto que has hablado claro, y yo tambin! respondi enfadada . Me sacaste del
convento y me has enseado un mundo que yo desconoca, ahora deseas que me vuelva a encerrar y que lo
haga sin protestar. Pues no lo conseguirs! grit, abriendo la puerta y corri en busca de la yegua.
Mont en Rosie y vio a James de pie en la puerta de la cabaa, arre al animal y se alej tan
rpidamente como la velocidad de ste se lo permita. El aire fro golpeaba su rostro, pero pareca no
molestarle, el dolor y la angustia que la invadan acaparaban todos sus sentidos.
Galopaba sin rumbo por lugares desconocidos para ella, cuanto ms rpido corra el animal ms
satisfaccin senta. El aire le solt unos mechones del cabello. Su respiracin era agitada llegndose a
confundir con la del animal.
El terreno era muy irregular, Rosie estuvo a punto de caer, pero la pericia de Dominique lo impidi.
Quiso detenerla, o al menos que aminorara la velocidad, pero la yegua no responda a su mandato, pareca
disfrutar de la desenfrenada carrera. Dominique sinti miedo y sin soltar las riendas se abraz al cuello
del animal rogando que de esa manera la obedeciera. Rosie pareci entender los deseos de quien la
montaba y se detuvo en un claro. Dominique se baj, sintiendo que no conseguira mantenerse de pie, las
piernas le temblaban y respiraba con dificultad. Aspir profundamente, tratando de calmar la agitacin y
el miedo que haba sentido cuando Rosie no la obedeca.
Oy el galope de un caballo muy cerca de ella, volvi la cabeza y vio a James detenerse y saltar de la
silla, se acerc a ella y la sacudi con fuerza reprochndole:
Ests loca? Pudiste haberte matado cuando Rosie tropez. Qu es lo que te propones? Si piensas
qu comportndote de esa manera me retractar de lo que te he dicho antes, te equivocas.
Dominique no pudo articular palabra, retir el mechn de cabello que tapaba sus ojos y le mir

sorprendida. Era intil tratar de justificarse, no podra hacerlo. Observ sus ojos, la mirada fra e
indiferente de momentos antes haba desaparecido, ahora, vea en ellos una expresin distinta, el enfado
haca que brillaran oscureciendo el color gris que tanto le gustaba.
Espero una explicacin, o es que an no te has repuesto del susto que te has llevado?
Ella neg con la cabeza y James cerrando los ojos durante breves segundos, repiti en un tono de voz
que ella desconoca:
Pudiste haberte matado, Dominique.
Lo... lo s respondi titubeando , te pido que me disculpes, creo que te he hecho pasar por un
mal momento.
Vaya! Y piensas que de esa manera solucionas todo, dijo cogindola por el cuello suavemente al
tiempo que mova la cabeza , no s que har contigo.
Sinti que un escalofro le recorra la espalda, James no perciba que la nia que haba sacado del
convento haca apenas unas semanas, era toda una mujer, y aunque las emociones que senta al estar cerca
de su tutor eran nuevas para ella, su instinto le deca que no dejaban de ser naturales cuando se
relacionaba con alguien como James. Se daba cuenta de que James era para ella algo ms que un simple
guardin de su seguridad.
No dese saber ms, e intentando pensar en otra cosa, le dijo: Quisiera regresar a casa, tengo
fro.
La solt, y sin decir nada, mont en su caballo y le orden: Sigeme hasta Grey Witches.
Dominique tuvo dificultad para montar de nuevo a Rosie, porque las piernas le temblaban de fro, se
senta insegura; a pesar de todo, le sigui hasta llegar a los establos. Una vez dentro, procedi a quitarle
la silla a la yegua, lo haca con dificultad, el fro la entumeca. Sin que se lo esperara, James apareci
frente a ella y al ver la dificultad con la que se mova le sugiri:
Deja eso y entra en la casa, te vas a congelar.
Dud un poco antes de obedecer, y despus, corri hasta la casa y subi la escalera muy despacio,
estaba cansada y deprimida, no poda enfrentarse a James y eso la molestaba.

Captulo

JAMES no sali de su despacho durante el resto del da, el que no comiera con la familia ya era algo
muy comn, as que no les extraaba como al principio. Aquella noche, las tres mujeres, cuando terminaron
de cenar, pasaron al saln, solan charlar durante un buen rato, antes de irse a dormir.
Sabas que James sale para Londres maana? pregunt Geraldine dirigindose a Melanie.
No, no tena la menor idea de sus planes respondi , pero no me extraa, porque nunca me
comenta nada aadi bromeando y mir a Dominique que estaba hojeando una revista . Y Dominique,
va con l?
No, ella se queda con nosotras respondi Geraldine.
Cmo puedes estar tan segura? James de hoy a maana puede cambiar de opinin y llevarla con l
insisti Melanie.
Te digo que Dominique se queda contest la seora Mannering molesta, y mirando a la pupila de su
hijo aadi : Dominique, seras tan amable de acercarme un cigarrillo?
Se levant y lentamente se acerc a la mesa, cogi la cajetilla y le ofreci uno, se lo encendi y
Geraldine sonriendo pregunt:
Fumas, Dominique?
Alguna vez respondi, volviendo a su asiento . En el convento lo haca sin que las hermanas lo
supieran, nos tenan prohibido fumar dentro del recinto.
Es normal y tratando de parecer indiferente, pregunt . Conoces las razones que movieron a
Henry a sacarte del orfanato?
Creo que eso no tiene importancia, ta intervino Melanie, ltimamente siempre defenda a
Dominique de los comentarios maliciosos de Geraldine.
Yo opino lo contrario, sobrina y mirando a Dominique, insisti : Y bien, Dominique?
La joven suspir echando la cabeza hacia atrs, cerr la revista y dijo tranquilamente:
Supongo que lo que le indujo a obrar de esa manera fue el parentesco que le una a mi padre, como
usted sabe ste era su sobrino.
Lo s contest con irona , estoy al tanto de la relacin familiar que te una a Henry, pero no

entiendo ese repentino inters; por lo que s, nunca mantuvo relaciones con tus padres.
A decir verdad, tenamos noticias suyas slo en Navidad, todos los aos nos felicitaba las fiestas
coment Dominique.
Entonces estars de acuerdo conmigo en que fue muy extrao su comportamiento cuando te
quedaste hurfana.

Cuando murieron mis padres, me imagino que pens que era cuando su presencia haca falta.
No consigo entender sus motivos insisti Geraldine.
Y usted piensa qu debi tener alguno? pregunt Dominique.
Por supuesto! Si le hubieses conocido tan bien como yo, pensaras lo mismo.
Melanie mir a Dominique y pens que haca falta su intervencin.
Tal vez le acosabas tanto, que lo hizo para alejarse de ti dijo en tono burln . Con James est
sucediendo lo mismo - recalc Melanie.
Cllate! orden la seora . Sabes que tu primo tiene que viajar a Londres por su trabajo.
De veras? Pregunt Melanie, retndola con la mirada. l sabe muy bien que si sale de su
despacho, t te encargars de que Yvonne lo sepa y se convierta en su sombra.
Cmo te atreves? Exijo que te disculpes por lo que has dicho.
De acuerdo contest Melanie cruzando las piernas y apoyndose en el respaldo , creo que he
hablado demasiado, pero sigo pensando que a las personas les molesta estar tan controladas. Y a ti te
encanta controlarlas.
Nadie control nunca a Henry Farriday! exclam Geraldine tratando de calmar su nimo.
Puede ser. Pero insisto en que hacindose cargo de su sobrina, encontr una buena excusa para
alejarse de Grey Witches.
Dominique las escuchaba resignada, ta y sobrina se pasaban la vida discutiendo constantemente, y el
tema de sus discusiones era James. Ella estaba de acuerdo con Melanie, Geraldine era una mujer
ambiciosa, sobre todo cuando se trataba de su hijo.
Espero que las intenciones que movieron a Henry fueran slo esas aadi Geraldine.

Y qu otras podran ser? pregunt Dominique.


Cualquiera sabe! dijo Melanie sonrindole . Mi ta cree que el resto del mundo piensa como ella.
Melanie! Exclam la seora , te suplico que si no puedes abstenerte de emitir tu opinin,
desaparezcas de mi vista.
Melanie no se inmut por las palabras de su ta, se acomod en el silln y se dispuso a hojear la revista
que haba dejado Dominique minutos antes. sta estaba incmoda por la discusin que presenciaba; su
nimo ya haba decado lo suficiente al saber que James partira para Londres como para presenciar las
peleas rutinarias de las dos mujeres, con las que viva.
Se puso de pie dispuesta a abandonar la habitacin.
Dnde vas, Dominique? pregunt Geraldine.
A mi habitacin.

Supongo que ya te han fastidiado las respuestas de Melanie.


Estoy un poco cansada respondi, no deseando iniciar otra discusin.
Se dispona a abrir la puerta cuando James irrumpi en el saln.
Llevaba un pantaln beige y un suter marrn. La combinacin era acertada y estaba muy atractivo;
Dominique sinti que el corazn le lata ms deprisa.
La mir a la vez que preguntaba:
Pasa algo? Me pareci or una acalorada discusin.
Nada importante respondi Melanie, levantando los ojos de la revista que hojeaba , es tu madre
que trata de imponer su voluntad, como siempre.
Esto ya es insoportable, James dijo Geraldine levantndose con rapidez . Hasta cundo vas a
permitir su presencia en esta casa? pregunt sealando a Melanie.
Sabes perfectamente que sin mi prima, Grey Witches se vendra abajo, mam. Ella es indispensable
para que todo marche bien.
"Hijo!
No he dicho ms que la verdad coment, mientras meta las manos en los bolsillos . He decidido

llevar a Dominique conmigo, as no tendr que soportar vuestros comentarios.


Dominique no daba crdito a lo que oa, James la llevara a Londres!
Eso es imposible! Exclam su madre , no puede vivir contigo.
Por qu razn?
T lo sabes mejor que yo!respondi sorprendida . Adems... Melanie necesita su ayuda en las
faenas de la granja y mirndola le pregunt : no es as Melanie?
La joven se limit a encoger los hombros. Dominique se dio cuenta de que le disgustaba tanto como a
su ta, la idea de que James se la llevara.
No se preocupe, seora Mannering, no ir con su hijo a Londres. Prefiero... quedarme en Grey
Witches.
No mientas, Dominique intervino James mirndola a los ojos.
Es cierto afirm observando la expresin de alivio en el rostro de Melanie , yo no sera ms que
un estorbo, teniendo en cuenta que t vas a trabajar.
Dominique tiene razn, James intervino su madre, mientras se diriga hacia l.
Prefieres quedarte aqu? insisti incrdulo.
La joven sinti deseos de gritar y decirle que lo que ms deseaba en el mundo era acompaarle, pero
saba que con eso le hara mucho dao a Melanie, despus de todo, conoca sus sentimientos hacia James.
Adems, l slo lo haca para evitar que escapara, no deseaba cargar con la culpa de que algo le sucediera.
Y qu podra hacer ella en Londres, aparte de representar una carga para su tutor?
S, seor Mannering. Deseo quedarme.
Como quieras! respondi molesto, y sin aadir ningn comentario, sali de la habitacin.
En cuanto James se march a Londres, Dominique se arrepinti de su decisin. Se lo imaginaba al
volante, slo, por esos caminos que recorrieron juntos. Para intentar distraerse y no caer en una profunda
depresin, se dedic intensamente a ayudar a Melanie en las tareas de la granja. De forma que al
atardecer se encontraba tan exhausta, que lo nico que deseaba era ir a la cama a descansar.
Conforme pasaban los das se preguntaba cundo regresara su tutor. Pero no permita que la
melancola hiciera presa de su nimo, trabajaba a diario sin descansar, hasta que el sol se ocultaba.
Lleg el da en que se emita la obra de James. Aquella noche, la cena fue modesta y se sirvi mucho

antes de lo acostumbrado, la seora Mannering deseaba tanto como ella, ver la obra de su hijo.
A Dominique le encant. Nunca haba visto una obra parecida. Era diferente a todas las que conoca.
Realista y dramtica, dejaba en el espectador un sabor agradable y el deseo de que sta continuara.
Cuando termin, Geraldine pidi una conferencia a Londres, deseaba felicitar a su hijo. Mientras, las
dos chicas prepararon algo para celebrarlo.
No me extraara que mi ta le felicite slo de su parte coment Melanie . Lo que peor me
sienta, es que pidiera que admitieran a Yvonne en la cabina de transmisin.
No entiendo, por qu lo hace coment Dominique sintiendo que se le oprima el corazn . Es que
no se da cuenta de que a James no le interesa?
Eso lo sabemos t y yo y compartimos la misma opinin, pero la ta Geraldine piensa que la
insistencia puede hacer milagros. Cree que si James tiene a Yvonne junto a l constantemente, despus no
podr prescindir de su compaa. Hace unos meses crey ganar la batalla. Salieron durante un tiempo,
pero James se cans pronto de la compaa de Yvonne. Es muy sosa. l necesita otra clase de mujer a su
lado, ella fsicamente parece una modelo, totalmente vaca. Lo nico que le interesa, es tener buena ropa y
viajar mucho Melanie continu hablando con expresin de tristeza . Hace algn tiempo pens que
James me pedira que me casara con l hizo una pausa y continu : Creo que ya he perdido toda
esperanza, no slo de casarme con l sino con cualquiera. Lo que l necesita es alguien que le comprenda y
ayude en su trabajo, no es tan insensible aunque se desenvuelva en ese medio mir a Dominique y
haciendo una pausa le dijo : Me gustara conocer tu opinin sobre mi primo.
La joven titube y le dio la espalda a Melanie, para sacar la caja de galletas del armario, no deseaba
confesarle sus sentimientos.
Es un hombre muy bondadoso. Quiero decir que... que sin tener ninguna obligacin se hizo cargo de
m, alguien a quien ni siquiera conoca.
S, es bondadoso, pero a la vez su temperamento puede ser violento y agresivo; tambin es
encantador, y t sabes que a la gente encantadora se le perdona todo. Y a propsito por qu no quisiste
acompaarle a Londres? pregunt tratando de descubrir algo en su mirada.
No... no s confes , por qu me lo preguntas?
Vamos, Dominique, conozco tus sentimientos, te aseguro que son los mismos que yo tuve hace algn
tiempo. Cuando tena tu edad.
No insines que soy pequea! Sabes que no lo soy.
De acuerdo, no lo eres, pero para James sigues sindolo. No te has dado cuenta que con la edad

que tiene podra ser tu padre?


Creo que exageras un poco.
No mucho, l tiene alrededor de los cuarenta aos y t slo diecisiete, haz cuentas, con veinte aos
James Mannering pudo haber sido tu padre.
Tengo casi dieciocho murmur en voz baja . Adems no veo el objeto de esta discusin. No
pienso enamorarme de l y te aseguro que a James jams se le habr ocurrido verme como a una posible
candidata.
Lo s, Dominique y creme que lo nico que lamentara es que sufrieras por ello, como creo que
suceder.
No seas tonta! exclam y sealando la cafetera le dijo : Mira, el caf est listo.
Melanie apag el fuego, y coloc la cafetera en el carrito que iba a llevar al saln, mir a Dominique y
le coment:
No eres la misma chica flaca y desanimada que lleg a Grey Witches, en muy pocas semanas has
cambiado; la vida en el campo y la buena comida han contribuido a mejorar tu apariencia hizo una pausa
y en voz baja aadi : no permitas que James te haga dao y empujando el carrito sali de la cocina.
Dominique poda haberle dicho a Melanie que su consejo llegaba tarde, James ya haba empezado a
hacerla sufrir.
Despus de una par de semanas sin ver a su tutor, el nimo de Dominique comenzaba a decaer, el
trabajo ya no surta el efecto de antes. Una maana se present Vincent y la invit a dar un paseo hasta
Scarborough, donde le dijo que viva su madre. Aunque no le apeteca mucho, por otra parte, pens que le
ira muy bien para distraerse, y tambin, as conocera los alrededores.
La seora Mannering insisti en que aceptara la invitacin, y aunque a Dominique no le agradaba dejar
a Melanie con todo el trabajo, sta tambin la anim a que le acompaara.
Es una persona muy agradable dijo Melanie , y te aseguro que te divertirs ms acompandole,
que quedndote a limpiar los gallineros.
Acept gustosa, al pasar por el pueblo aprovechara para hacer algunas compras. Le haca ilusin ir
comprando los regalos de Navidad, ya quedaba muy poco para que llegara.
Salieron despus de comer, Dominique se encontraba muy a gusto en compaa de Vincent y tuvo
ocasin para conocerle durante el recorrido. Su actitud actual era muy diferente a la de la tmida
jovencita que haba llegado haca pocas semanas a Grey Witches. Al menos, el convivir con la seora

Mannering y Melanie le haba dado cierta seguridad en su manera de comportarse.


Al llegar a Scarborough, Dominique se sorprendi al ver la cantidad de tiendas dedicadas
exclusivamente a ropa. Haba boutiques para todos los gustos y edades. Entr en una de ellas, se prob un
abrigo beige y le gust mucho cmo le quedaba, aunque no era tan elegante como el de Yvonne; eligi un
vestido azul, se lo puso, y pareca hecho a su medida, acentuaba las formas de su cuerpo sin ser
provocativo. Despus entraron en una zapatera y se compr unas botas, un bolso y unos guantes. Cuando
terminaron, pusieron todos los paquetes en el maletero del coche, y enseguida se dirigieron hacia la costa,
pero no pudieron entrar por el camino que los llevara hasta el mar, haba sido cerrado debido al mal
tiempo. Dominique se desilusion.
Dieron la vuelta y se dirigieron hacia Peasholm Park. Al llegar al pueblo fueron a la casa de la madre
de Vincent. Como estaba viuda viva sola, pero a diferencia de la seora Mannering tena un carcter
amable. Los recibi muy contenta, ofrecindoles t y pastas hechas por ella misma. Dominique sinti
mucho tener que salir tan pronto. La seora Morley le inspiraba confianza y cario.
No tardes mucho en volver a visitarme le dijo con dulzura . Vincent se encargar de traerte
verdad que lo hars, querido?
Por supuesto, mam! Esta es la primera vez que Dominique viene a Scarborough y no he podido
ensearle los alrededores. Volveremos cuando el tiempo mejore.
Tienes razn, hijo dijo su madre , espero que sea muy pronto.
Ai volver, Dominique se senta tranquila.
La seora Morley es una persona muy agradable. Creo que rene todas las cualidades que debe
tener una madre.
Tambin t le has cado muy bien coment Vincent sonriendo . Pero cada vez que le presento a
una chica, piensa que hay boda en perspectiva. Es terrible.
Dominique se ruboriz, pero por suerte, Vincent no se dio cuenta.
No es que le haya trado muchas chicas aadi sonriendo, a mi madre no le puedo presentar a
cualquier chica, y de todas formas tampoco tengo mucho tiempo para salir. A la mujer que ms a menudo
veo es a la que me hace la limpieza en casadijo con franqueza.
Dominique prefiri cambiar de tema de conversacin, pese a lo que l opinara, pensaba que su madre
deseaba que formalizara sus relaciones con alguna chica y ella no tena deseos de ser elegida. Miraba el
cielo por la ventanilla del coche, vea alguna que otra estrella que centellaba en lo alto, su pensamiento
vol hasta Londres. Se preguntaba dnde estara James en esos momentos. En todo el tiempo que llevaba
fuera de Grey Witches no haba recibido ninguna carta suya, ni siquiera un mensaje por medio de su

madre. Esta s que hablaba con su hijo a menudo.


Melanie supona que los planes de su ta para James no daban el resultado deseado. Para mayor
frustracin de Geraldine, las revistas publicaron un comentario sobre un posible romance entre James
Mannering y una tal Luca Mercinello. sta era la viuda de un conocido hombre de negocios que se haba
suicidado cuando su industria fue a la quiebra. A la seora Mannering no le agradaba para James, no slo
porque careca de capital, sino tambin porque su nombre estaba ligado al escndalo.
Dominique no poda emitir su opinin, porque desconoca la historia y saba muy poco de la vida de esa
gente. Lo que le preocupaba y la mantena despierta hasta altas horas de la noche, era la incertidumbre
de no saber qu hacer cuando cumpliera dieciocho aos, la fecha estaba muy prxima.
Llegaron a Grey Witches y Vincent la dej en la puerta -principal.
Saldremos juntos otro da, verdad Dominique?
Cuando quieras, Vincent asinti . Te agradezco tu paciencia mientras hice las compras y te doy
las gracias por presentarme a tu madre.
Al contrario, las gracias te las doy yo por aceptar mi invitacin y entregndole los paquetes aadi
: buenas noches, Dominique.
Adis Vincent se despidi mientras se diriga a la puertay, gracias nuevamente!
l se dirigi a su coche. Antes de montarse, se volvi y la observ mientras empujaba la puerta y
entraba en la casa. Se arrepinti de no haber intentado besarla, pero ya era tarde, haba desaparecido.
Durante los das siguientes, Dominique y Vincent salieron juntos tres veces; la invit al cine,
asistieron a una carrera de motocicletas y en la tercera, la llev a cenar. En esa ocasin, Dominique se
puso la ropa que se haba comprado en Scarborough. Se sorprendi al notar el cambio que la ropa nueva
daba a su apariencia. Melanie le cort las puntas del pelo, y la pein. No saba que su amiga tuviera
habilidad para esa clase de tareas.
Cuando Vincent fue a buscarla le agrad ver la expresin en sus ojos, al verla tan bien arreglada. Le
abri la puerta del coche a la vez que le deca:
Debera tener un coche deportivo para sacarte a pasear.
Sera lo apropiado para ti, pero mis posibilidades...
No te preocupes, no tiene importancia la clase de vehculo que poseas.
Eres maravillosa le dijo tocando su mano . Esta noche ests encantadora, no s... ese conjunto
te sienta estupendamente.

Eres muy amable, gracias murmur. Dominique no comprenda cmo permaneca soltero, era una
persona a la que sera fcil amar. Su carcter y su manera de ser resultaran atractivos para cualquier
muchacha.
Sin embargo, pensaba que la vida a su lado sera un tanto aburrida, desech esos pensamientos,
despus de todo era algo que a ella la tena sin cuidado. Eran slo buenos amigos, ella se ira pronto y tal
vez no le volvera a ver.
El restaurante se encontraba cerca de la carretera que conduca a York. Era muy acogedor, y la
comida exquisita, la nica que la superaba era la que haba tomado en casa de James, la primera noche que
durmi all. Despus de cenar, bailaron un poco, y pasaron una velada muy agradable.
El regreso a Grey Witches fue tranquilo y Dominique pudo disfrutar del paisaje. La luna iluminaba la
noche. Al llegar a la casa, vieron un coche aparcado en la entrada principal.
Es el coche de James? pregunt Vincent.
S, creo que s, no pens que regresara tan pronto respondi sintiendo que el corazn le lata
apresuradamente.
Nadie conoce sus decisiones, Dominique dijo cambiando el tono de voz , te molesta no haber
estado en casa para recibirle?
Claro que no! Exclam inquieta , no tengo por qu tenerle al tanto de todo lo que hago.
Te aseguro que estar enfadado contigo por haber salido conmigo coment en voz baja , y
tiene toda la razn, ests bajo su tutela y es responsable de ti.
No soy una nia, creo que puedo cuidarme yo sola.
Estoy de acuerdo y sonriendo le pregunt : Deseas mi ayuda para enfrentarte a James?
No la considero necesaria respondi negando con 1^ cabeza , y no creo que sea muy oportuna tu
presencia en este momento, supongo que estar cansado y sin ganas de ver ^ nadie.
Como t digas, de cualquier forma vendr maana, me gusta tenerle al corriente de todo cuanto
sucede.
Aparc el coche al lado del de James y Dominique mientras abra la puerta para bajarse le sugiri:
No te molestes en bajar, lo har sola, nos veremos maana? pregunt mientras sala del coche y
cerraba la puerta.
Por supuesto! respondi presuroso . Hasta maana: Dominique entr en la casa, estaban

encendidas todas las luces y haba varias maletas en el vestbulo. Eran demasiadas para ser slo de
James, por lo que saba, siempre viajaba con el equipaje indispensable, seguramente alguien le haba
acompaado en esta ocasin. Levant la cabeza y le vio de pie, en la mitad de la escalera. Le agrad ver la
forma en que la miraba, l tambin notaba el cambio operado en ella. La ropa y la manera en que iba
peinada, la hacan parecer un poco mayor. La diferencia entre la colegiala y la chica que ten a delante, era
notable.
Dnde has estado, que llegas tan tarde?
Su voz era autoritaria y por el tono en que se dirigi a ella, supo que estaba enfadado.
Dominique sinti que sus palabras la heran, por qu le hablaba tan duramente despus de no haberla
visto durante varias semanas?
Tu madre no te dijo dnde fui?
Baj los escalones restantes y se acerc a ella. Estaba muy atractivo con su traje oscuro, le vio tan
decidido que tuvo miedo de enfrentarse a l.
S, me lo comunic respondi molesto . Pero an no has contestado a mi pregunta, te he
preguntado qu hacas fuera de casa a estas horas, son casi las doce. No es el momento ms adecuado
para pasear, no crees?
Se tarda un buen rato en llegar aqu desde York dijo con indulgencia , adems, no tena ningn
conocimiento de que hubiera toque de queda esta noche.
No seas insolente! Exclam violento , mi madre tambin estaba preocupada.
Le molestaba el tono en que se diriga a ella, despus de todo, era la primera vez que regresaba tan
tarde.
Eso es todo? pregunt deseando apartarse de su presencia.
No, an no he terminado aadi furioso . Qu es lo que has hecho con tu imagen?
T mismo me dijiste que necesitaba un cambio murmur , no recuerdas?
Quin te ha cortado el pelo? pregunt mientras meta las manos con fuerza dentro de sus
bolsillos.
Melanie, pero no me lo ha cortado, tan slo me lo ha retocado, tena las puntas muy estropeadas.
No te entiendo! Pensaba que te agradara que cambiara algo mi imagen, deseaba que cuando volvieras, no
me encontraras con mi apariencia descuidada.

Nunca me lo pareci respondi , tu ropa es nueva?


S respondi y tratando de cambiar su humor, aadi : Me imagino que no te gusta, pero a m
me fascina y a Vincent tambin.
Quin te ha enseado a hablar en ese tono, Melanie? le pregunt enfadado . Con quin crees
que ests hablando?
Otra vez comienzas a comportarte paternalmente, James dijo, dndose cuenta de la presencia
de una mujer que sala del saln. Era muy bella, no tan joven como Yvonne, pero s elegante y bien vestida.
El cabello le caa sobre los hombros; era delgada y de baja estatura. Al observarla, vio sus suaves
facciones, sus manos bien cuidadas que adornaba con un anillo en cada .uno de sus finos y largos dedos.
Sucede algo, James? pregunt mientras se acercaba .

sta es tu pupila?

James se volvi hacia ella e impaciente respondi:


En efecto, Luca, esta chica es mi pupila, Dominique Grainger y mirando a Dominique aadi :
ella es la signora Marcinello.
Dominique se acerc a ella y en tono corts la salud:
Encantada de conocerla, Ha tenido usted buen viaje?
Todo lo bueno que puede ser un viaje por las carreteras inglesas respondi pasndose una mano
por la frente . Me has conseguido las aspirinas? le pregunt a James.
James vio la expresin de asombro en el rostro de Dominique y exclam:
Lo haba olvidado! Dnde me dijiste que estaban?
En la guantera, querido musit con voz lnguida . Siento mucho darte tantas molestias.
James fue hasta la puerta y baj los escalones que le separaban del coche, dejando a las dos mujeres
solas. Luca cogi del brazo a Dominique y la condujo al saln.
Tena ganas de conocerte, James me coment que su pupila no era ms que una chiquilla.
Mi tutor est un poco mal de la cabeza contest sonriendo , considera que las personas
menores de veinte aos an son lactantes y deben ser tratadas como tales termin rindose.
Luca la mir sorprendida.
Piensas que James te considera una nia pequea? Creo que te equivocas; eres muy joven pero de
ninguna manera una criatura.

Cunto tiempo se quedar con nosotros? pregunt Dominique.


No lo s, respondi sentndose en un cmodo silln . No tengo idea de lo que har, despus de
lo que sucedi a mi esposo, no he tenido un momento de paz. La prensa me acosa donde quiera que est y
James pens que ste era un buen escondite para evitarme malos ratos dijo en el momento en que l
entraba y le daba las aspirinas. Luca retuvo su mano entre las de ella preguntndole : No es as,
querido?
Esperamos que as sea y apartando su mano se dirigi al encuentro de Melanie que entraba
empujando el carrito de servicio con caf y pastas.
Gracias dijo mientras le coga el carrito y lo llevaba cerca de Luca , ha sido muy amable por tu
parte.
No tienes nada que agradecer respondi indiferente . Si me disculpan me retiro, maana tengo
que madrugar.
No nos acompaas? Pregunt Luca , despus de todo, te has tomado muchas molestias.
Muchas gracias, pero no puedo quedarme y mirando a Dominique, le salud : Hola, te has
divertido?
La joven asinti con la cabeza y la sigui hasta la puerta.
Dominique! Grit James dnde crees que vas?
A dormir.
Cmo tan pronto? pregunt Luca.
Yo tambin tengo que levantarme temprano y sin esperar respuesta, sali, y cerr la puerta.
Por el pasillo alcanz a Melanie y le pregunt:
A qu hora llegaron?
Un poco antes que t.
Y dnde est la seora Mannering?
Le dio un fuerte dolor de cabeza y tuvo que irse a su habitacin murmur sonriendo . Esto no le
agrada.
Me lo imagino.

Melanie la mir y cogindola por los hombros le dijo:


Vamos, Dominique, no te desanimes. Mientras preparaba el caf he odo tu discusin con James, y
por lo que he deducido no le ha gustado mucho tu nueva apariencia.
No solamente no le agrada, sino que la desaprueba dijo suspirando , t sabes por qu razn ha
trado a esa mujer a Grey Witches?
Imagino que por el motivo que ella misma expuso.
Y cree que es... no se atreva a terminar la frase , bueno, que es la... amante de James?
Melanie la condujo escalera arriba.
No lo creo, Dominique, James es una persona seria y la signora acaba de enviudar. Creo que ella dijo
la verdad.
Dominique sinti un gran alivio al escuchar las palabras de Melanie. Prcticamente desde que le haba
conocido, su tranquilidad dependa del comportamiento de su tutor.

Captulo

A la maana siguiente, Melanie y Dominique estaban realizando sus faenas de costumbre cuando
James entr en el establo. Dominique se preguntaba si la signora Mercinello encontrara en Grey Witches
la paz que buscaba. Ella pensaba que todo ira bien si se mantena alejada de la seora Mannering.
Dominique llevaba dos cubos de agua cuando James la vio.
Desde cundo trabajas de esta forma? pregunt irritado.
De qu forma? Respondi molesta , slo ayudo a Melanie en sus tareas, te refieres a eso?
-S.
Lo hago desde que llegu y crea que t lo sabas.
Por supuesto replic , pero no crea que eran trabajos tan pesados, ni que los hicieras desde tan
temprano y mirando a Melanie pregunt : Qu tienes que decir a esto?
Lo hace porque lo desea.
Dominique estaba furiosa:
Por supuesto que lo deseo, pensabas que me quedara cruzada de brazos mientras estuviera aqu?
En el convento haba mucho que hacer y lo hacamos con gusto, no creas que es la primera vez que trabajo
le mir y para concluir le dijo :
Adems, t vienes poco por aqu, as que no creo que te importe mucho cmo ocupe mi tiempo.
Tan pronto como termin de hablar se arrepinti de sus palabras, haban sido demasiado duras y sin
razn justificada. Melanie la mir sorprendida, y James le dijo encolerizado:
Un momento, Dominique! No voy a permitir esta clase de insolencias. Segn parece han sucedido
cosas raras en mi ausencia y mirando a Melanie le pregunt : Qu le has contado a esta nia?
Nada respondi , lo que sucede es que est despertando y dndose cuenta de muchas cosas, en
especial, del comportamiento de su tutor.
Qu insinas?
Nada... nada titube Melanie sonrojndose . Tengo mucho trabajo, as que si me disculpas...

aadi, y regres a sus labores.


Dominique se dispuso a seguirla, se agach para coger los cubos que haba dejado en el suelo
momentos antes, pero James la detuvo cogindola por las muecas.
Un momento, Dominique, quiero hablar contigo.
No puede ser en otra ocasin?
No! Tiene que ser ahora repuso violento . Ve a buscar tu caballo, daremos un paseo.
Dese negarse, pero supo que no le servira de nada, la expresin de James era adusta y le vio muy
decidido a que su orden fuese cumplida. Ensill a Rosie y sali a su encuentro.
El hecho de cabalgar ya disip un poco el mal momento que acababa de pasar en el establo.
Mir al cielo, no estaba el da muy despejado, haba grupos de nubes amenazadoras, el aire fro y la
niebla que cubra el valle, le daban al paisaje una apariencia misteriosa; todo ello sumado al hecho de que
se encontraba junto a la persona que acababa de discutir, no la haca sentirse muy tranquila. Cabalgaron
durante un rato, hasta que perdieron la casa de vista.
Nos detendremos aqu! Grit James , hay un escondite que descubr cuando era pequeo.
Haremos una hoguera y hablaremos tranquilamente.
Se baj del caballo y Dominique dud antes de seguirle. No tard mucho en bajarse de la yegua, coger
sus riendas y caminar tras l. Se dirigieron hacia un desfiladero, y con precaucin, caminaron cerca del
borde hasta llegar a una cueva natural. James at las riendas a unos arbustos y ella hizo lo mismo.
Entr en la cueva y ella le sigui lentamente. l encendi un cigarrillo, mientras Dominique se paseaba
nerviosa como si estuviera en presencia de toda una autoridad. Le comparaba con la imagen respetable de
la Superiora del convento, la nica persona que le impona cierto respeto.
Por qu no terminamos con esto de una vez? pregunt incmoda . Si lo que deseas es
humillarme, hazlo y vamonos de aqu.
Deja de tratarme como si fuera un enemigo dijo mirndola inquisitivamente . Qu te sucede?
Cuando llegamos a Grey Witches podamos conversar como seres civilizados.
Si t lo dices aadi dando una patada a una piedra , pero recuerda que fuiste t quien afirm
que el hombre y la mujer no pueden ser amigos.
Tomaste mis palabras al pie de la letra sonri , pero nuestra relacin es diferente.
Es verdad! Me olvid por un momento de que an soy una nia, tendr que sacar las muecas que

guard durante tu ausencia y suspirando inquiri en voz baja : Por qu me haces decir esas cosas?
Nunca podrs tratarme de otra forma?
. De acuerdo, Dominique haremos un trato, si te comportas como una persona adulta, te tratar
como tal los ojos de Dominique brillaron y l continu : Quisiera hablarte de Luca.
Lo dices en serio? pregunt sin dar mucha importancia a lo que le haba dicho, siempre que se
hallaba ante l experimentaba una sensacin muy peculiar.
S respondi . Qu piensas de ella?
No puedo creer que mi opinin sea importante.
Ya que ella va a quedarse aqu durante algunos das, me gustara que os llevarais bien.
No podremos hacerlo slo porque t lo desees respondi frotndose la nariz , te recuerdo que
no somos personajes de ninguna de tus obras.
Por lo que dices, me imagino que no te cae muy bien dijo con voz ronca.
Le gusta mucho llamar la atencin.
Fuiste muy grosera con ella, Dominique, ni siquiera le diste las buenas noches.
Cre que preferiras que me marchara cuanto antes replic.
Tratas de insinuar algo? -pregunto arrojando el cigarrillo al suelo.
Puedo hacerte una pregunta?
Pregunta lo que desees, aunque no te prometo contestar a todo.
Por qu la invitaste a venir?
T estabas delante, cuando ella explic que la prensa la tena acosada.
Te dio pena de ella?
Algo parecido.
Realmente es conmovedor respondi retndole abiertamente . Los titulares de todos los
peridicos deberan dar la noticia; James Mannering, famoso escritor, es ahora tambin conocido por
sus buenas obras. Acoge a mujeres desgraciadas y brinda asilo a una pobre hurfana sobrina de su...
se detuvo y con irona le pregunt : Cmo terminaras la frase? saba que sus palabras le heran, pero
algo dentro de ella la haca hablar de esa manera.

Eres... la cogi por la mueca con fuerza y dijo : Debera darte una paliza por lo que has dicho.
Es la segunda vez que me amenazas en vano respondi provocando su furia.
Dominique le mir asustada, la levant en brazos y la llev hasta el fondo de la cueva, donde se sent
sobre una roca, la coloc boca abajo sobre sus rodillas y comenz a darle unos cuantos azotes. Todos los
esfuerzos que ella hizo para soltarse, fueron intiles.
Cuando termin con su tarea la puso de pie, Dominique se senta humillada, y con los ojos arrasados
por las lgrimas murmur:
Eres una... bestia. Cmo has podido hacerme esto?
Ahora te sorprendes? Pregunt ponindose de pie , t te lo has buscado, recuerdas? y
mirndola aadi : Siento mucho haberte lastimado, pero entiende que...
Qu es lo que tengo que entender? le interrumpi . Es que el que est bajo tu tutela te da
derecho a pegarme?
Slo he querido darte un pequeo escarmiento.
Un pequeo escarmiento! repiti , estoy segura de que a tu amiga Yvonne o a Luca no te
hubieras atrevido a ponerles la mano encima, ni tan siquiera a Melanie se lo hubieras hecho.
No seas ridicula!
Ridicula? pregunt mirndole a los ojos . Pero claro, yo no poseo el encanto de tus amigas para
explicarte mis puntos de vista. Carezco de los medios adecuados para convencerte, y para defenderme,
tan slo poseo mis palabras, as que...
Te lo advierto, Dominique...
Qu? dijo tragndose las lgrimas . De qu otra manera me castigars? Me encerrars en
mi habitacin o me quitars la ropa nueva?
Basta! grit . Te he trado aqu para hablarte sobre Luca y de tu posible relacin con ella, y
mira lo que sucede! Te pones en contra ma con aseveraciones tan injustas como las que me imputa mi
madre.
Dominique contest sollozando:
T me provocas y yo... no termin de hablar, le dio la espalda y trat de contener el llanto.
Por favor, Dominique aadi impaciente . Lo siento, creme. Perd la paciencia pero fue porque

me provocaste aspir profundamente y continu diciendo : He pasado unos das muy malos, con mucho
trabajo y pocas horas de sueo, llego a casa para descansar y qu me encuentro? Ms problemas!

movi la cabeza . No trato de excusarme, slo de explicarte mi comportamiento y cogindola por un


brazo la puso frente a l . Me ests escuchando?
Todo lo que has dicho dijo en voz baja . Y si ya has terminado de explicar tus razones, creo que
podemos volver a casa.
Dominique! exclam . Te he pedido que me perdones, qu otra cosa quieres que haga?
Nada replic encogiendo los hombros con indiferencia y tristeza.
Mrame, Dominique! ella le mir sin muchos deseos de hacerlo . Me has perdonado?
No te dir que s slo para calmar tu conciencia respondi indignada.
La cogi por los brazos y la acerc hacia l con violencia.

Me ests provocando y t lo sabes

dijo mirndola .
Bien, Dominique, t lo has querido...
La acerc an ms, ella sinti el calor de su cuerpo, James levant su barbilla forzndola a mirarle;
tembl ante la mirada de su tutor, ya que sus ojos se oscurecan y brillaban de una manera extraa cuando
se exaltaba. La bes en los labios a la vez que la rodeaba con sus brazos. Solt su cabello y lo acarici
repetidas veces, besndola en las mejillas, en la frente y de nuevo en la boca, ella le correspondi,
abrazndole y acercndole ms a ella.
Perdi la nocin del tiempo, lo nico que comprenda era que le necesitaba y que en sus brazos
encontraba la paz que tanto anhelaba.
En aquel momento comenz a llover. Al darse cuenta de lo que suceda, James la apart bruscamente.
Menuda tormenta! exclam . Pero gracias a ella vuelvo a la realidad. Debo de estar loco para
comportarme as.
Dominique le mir temblando, su expresin la hizo estremecer. Una cortina de agua tapaba la entrada
de la cueva, oscureciendo el refugio a la vez que impeda la visibilidad hacia afuera. No llevaban la ropa
apropiada para un da de lluvia. James tratando de hablar con calma y naturalidad se dirigi a ella:
No veo razn para que nos mojemos los dos, Espera que vendr a buscarte en la camioneta.
No quiero quedarme aqu sola murmur, voy contigo.
Pero est diluviando! explic impaciente-, No tardar mucho en regresar. Si te llevo ahora

conmigo, cogers una pulmona y cambiando el tono de su voz aadi-, aqu estars a salvo.
-Djame ir contigo -le rog-. No quiero que vuelvas a enfadarte, pero fue tan desagradable el que me
besaras? Acaso no queras hacerlo? y haciendo una pausa aadi-: Dime, qu te sucede?
T sabes que quera respondi mirndola , pero me aborrezco por lo mismo.
Pero, por qu?
Porque eres mucho ms joven que yo, y porque soy tu tutor levantando un poco la voz concluy :
No puedo disculparme de nuevo, pero creme que he perdido el respeto que me tena a m mismo.
-Hace unos momentos admitiste que no soy una nia repuso Dominique.
Pas delante de ella, sali de la cueva y cogi la rienda de su caballo.
-S, Dominique, ya no lo eres -y montando sobre el caballo grit para que ella pudiera orle -, y me
haces actuar de forma diferente acorn quisiera hacerlo, pero te prometo que no volver a ocurrir.
Cmo puedes estar tan seguro? - pregunt sintiendo un dolor extrao en el pecho.
Porque no habr otra ocasin repuso mirndola brevemente, a partir de hoy entre nosotros
habr una distancia considerable.
Dominique baj la cabeza y le dijo titubeando: Crees que puedes planear nuestras vidas tan
framente?
Es que los sentimientos no cuentan para ti?
No mucho, adems no s a qu clase de sentimientos te refieres.
Al... amormusit.
Amor? su mirada era cruel al preguntar . No creo que conozcas ese sentimiento, al menos yo
no s cmo es. Nunca he tenido la oportunidad de conocerlo.
Tu madre te quiere, James.
Te equivocas, ella quiere el poder que sin pensar puse entre sus manos y soltando una carcajada
aadi : Si crees que el deseo de hace unos instantes era amor, ests equivocada, te sugiero que lo
olvides. Confieso que he tenido otra clase de deseos al besarte, pero me hubiera sucedido lo mismo con
cualquier otra chica y diciendo esto se fue galopando, perdindose de vista rpidamente.
Dominique le vio desaparecer bajo la lluvia, las lgrimas se confundan con el agua que le caa sobre su
rostro. Cmo poda ser James tan indiferente? Sera verdad que todos los hombres buscaban lo mismo

al acercarse a una chica?


Sali de la cueva y cogi las riendas de Rosie, si James crea que se iba a quedar esperndole, estaba
equivocado. No deseaba su compaa. Mont sobre la yegua y sin importarle el rumbo, comenz a galopar.
No le preocupaba llegar tarde a Grey Witches.
Melanie la vio llegar desde el establo. Dominique se baj del caballo y pidi a su amiga que alguien se
encargara de Rosie, le coment que estaba mojada hasta los huesos, no deseaba dar ms explicaciones.
Corri hasta la casa y entr. Al subir la escalera se encontr con la seora Mannering que bajaba en esos
momentos.
Dominique! exclam . Qu te ha pasado? Ests empapada, mira tu pelo, qu te has hecho?
Me... me enred en la rama de un rbol respondi evitando mirarla . Fue de una forma muy
tonta, pero llova tanto que cabalgu demasiado deprisa.
No habrs estado con Vincent, verdad?
Por supuesto que no dijo respirando con alivio.
Anoche llegaste muy tarde.
S, y le pido que me disculpe, no volver a suceder.
Est bien! Conociste a la signora Mercinello?
S, ayer, cuando regres a casa.
Y qu tal te ha cado? pregunt . James piensa que tiene la obligacin de traer a esta casa a
todas las personas desgraciadas que conoce.
Dominique no poda atribuir ese adjetivo a Luca, lo que menos pareca era una persona desvalida, tal
vez la seora Mannering tambin se refera a ella.
La signora necesita descansar, y este es un lugar tranquilo. Le vendr muy bien pasar aqu unos das.
Pues por el equipaje que ha trado, parece que piensa quedarse bastante tiempo. Si se piensa que
voy a estar pendiente de ella, est equivocada el tono de su voz aumentaba conforme hablaba . No s
cmo se le pudo ocurrir a James traerla, bastante trabajo tengo ya sin atender a sus huspedes.
Le importa que continuemos la conversacin ms tarde? Me estoy quedando helada y he mojado la
escalera repuso Dominique.
Como quieras respondi molesta . A nadie le importan mis sentimientos, ni siquiera a Melanie,

no le ha dado ninguna importancia a la presencia de la nueva conquista de James. La signora Mercinello


acaba de quedarse viuda contest temblando de fro. No creo que ese detalle le importe mucho a una
mujer como ella. Si creen que pueden llevar a cabo su romance bajo mi techo se equivocan! No permitir
que tal cosa suceda en esta casa.
Dominique le habra rectificado, le habra dicho que no era su casa, sino la de su hijo, pero se senta
tan cansada que se limit a sonrerle, y continu subiendo el resto de la escalera.
Entr en su habitacin y se prepar el bao. Estaba totalmente calada. Se quit la ropa y se meti en
la baera. Lily llam a su puerta para avisarle de que tena preparado el desayuno, pero Dominique ignor
el aviso y se relaj completamente dentro del agua caliente.
Durante media hora estuvo disfrutando de aquella tranquilidad, en la que record una y otra vez los
momentos que haba pasado junto a James. Se hubiera quedado sumergida en el agua durante todo el da,
pero no era posible, as que se aclar bien, y sali del agua. No poda olvidar la manera en que James la
haba abrazado y pensaba con tristeza que no sera la primera mujer ni la ltima en su vida. La misma
sensacin que la envolvi en la cueva, volvi a hacer presa de ella. El primer contacto fsico que haba
tenido con un hombre, haba despertado en ella a la mujer que dorma en su interior.
Cogi la toalla y empez a secarse. Tena fro, se puso una falda de lana con una blusa de manga larga
y una chaqueta, pero todava senta escalofros.
Sali de su habitacin y baj la escalera para dirigirse al comedor. En ese momento se encontr con
Melanie que acababa de entrar en la casa. Gracias al impermeable que llevaba, su ropa no haba llegado tan
mojada como la suya.
An llueve? pregunt limpindose la nariz.
S asinti . Qu pas, Dominique? De qu hablaste con James?
No tena deseos de explicarle lo sucedido as que respondi sonrojndose:
Nada de importancia. Estoy helada! Espero que la chimenea del saln est encendida.
Est bien; si no quieres decrmelo, no lo hagas dijo Melanie . Voy a darme un bao, no se puede
trabajar afuera con este tiempo. Por qu no has bajado a desayunar?
Cuando Lily me avis estaba dndome un bao. Dnde estn los dems?
La ta se encuentra en la cocina, y James le llev a la signora el desayuno a la cama.
Entiendo murmur sonriendo, y acercndose al saln. Se alegr de que no hubiera nadie, acerc
una silla al fuego y se sent para intentar calentarse un poco. Seguramente se habra enfriado y por eso

no se encontraba bien, pero comparado con el sentimiento de dolor que le oprima el corazn, el malestar
fsico era nfimo.
Por fin te encuentro, Dominique! Exclam la seora Mannering irrumpiendo en la habitacin .
No has desayunado, verdad?

Estaba en el bao cuando me dijeron que estaba listo explic de nuevo.


No importa -respondi sentndose en el sof . Lily me va a traer caf, podemos compartirlo.
Gracias repuso sonriendo, y se volvi a mirar las llamas que suban y bajaban entre los leos de la
chimenea.
Te has enterado? La signora Mercinello ha pedido que le llevaran el desayuno a la cama coment,
mientras hojeaba el peridico . Se lo llev James en persona.
Melanie me lo cont dijo sin mirarla.
Es bochornoso, no crees?, con esa actitud darn pie a comentarios de los sirvientes replic y
t, parece que ests resfriada, slo se te ocurre a ti salir a cabalgar con este tiempo! le rega
Geraldine.
Cuando salimos de aqu, no llova murmur.
Cuando salisteis?, quienes? pregunt. Dominique se dio cuenta de que haba hablado en plural.
James y yo explic incmoda.
James? Pregunt , estaba contigo? -S.
Ya veo respondi cruzando los brazos . Y me imagino que discutirais.
Por qu lo dice?
Porque pareca un len hambriento durante el desayuno replic , estaba furioso y su enfado no
tena nada que ver conmigo, as que dime, sobre qu discutisteis?
Yo no he dicho que discutiramos.
No tienes que decirlo, est claro que lo hicisteis. Supongo que fue por culpa de su invitada.
No! exclam Dominique.
Entonces, qu sucedi?

Nada... le aseguro que no sucedi nada importante respondi incmoda , y si no le molesta,


prefiero no hablar ms del tema.
No debera preocuparme tanto por ti dijo subiendo el tono de voz . En esta casa cada uno vive a
su aire, ninguno se preocupa por los dems. No parecemos una familia, James est siempre tan inmerso en
sus asuntos que nunca se preocupa por su madre, Melanie siempre habla mal de m, me contesta y me
insulta, cuando debera estar agradecida por todo lo que hago por ella afirm bajando la cabeza . A
nadie le importo.
Eso no es verdad! se oy una voz atrs de ellas, Dominique sinti que las piernas le temblaban .
Por qu dramatizas tanto, mam? Sabes muy bien que todo el mundo te quiere.
Pues no me haba dado cuenta y tratando de cambiar la conversacin pregunt : Has tardado
mucho en bajar. La signora Mercinello, ya ha desayunado?
James ignor el comentario de su madre y se dirigi a Dominique:
Por qu te has sentado tan cerca del fuego? Ests enferma?
Acabo de baarme respondi evitando su mirada , e intento calentarme un poco, tena fro.
Se acerc y se puso frente a ella. Dominique no se atrevi a levantar los ojos y encontrarse con su
mirada. Observaba sus manos y se dio cuenta de que sus piernas estaban muy cerca de sus dedos, las
retir un poco, no quera tocarle aunque lo deseaba.
Tenas que haber esperado a que te fuera a buscar. Me has hecho perder el tiempo.
No estaba dispuesta a esperar dijo levantando la cabeza.
De qu estis hablando? pregunt Geraldine sorprendida.
De nada importante, mam respondi, y mientras Dominique bajaba de nuevo la cabeza, se acerc
a su madre y sacando la cajetilla de cigarrillos le ofreci uno . Me voy maana temprano aadi.
Dominique reprimi el impulso de volverse para mirarle, slo escuch la voz alterada de la seora
Mannering.
Te vas, dejando a esa mujer aqu?
Se quedar en esta casa durante varias semanas replic con calma.
No quiero que se quede aqu dijo su madre impaciente, no pienses que vamos a estar pendientes
de ella en tu ausencia.

No seas egosta, mam repuso . Recuerda que sta es mi casa y sin el dinero que aporto para su
mantenimiento, no existira. Lo nico que te pido es que trates a mis invitados con amabilidad. Y no te
preocupes, entre Luca y yo no existe ninguna relacin. Su esposo era amigo mo, y nada ms.
Cuanto tiempo estars fuera? pregunt enfadada . Te vas a Londres?
No, esta vez voy a Roma.
A Roma? Repiti Geraldine Qu tienes que hacer all?
Me voy a encargar de solucionar algunos asuntos que Giulio dej pendientes. Luca no confa ms que
en m. As que le har el favor con gusto respondi impaciente.
Dominique le escuch y record que le haba dicho que se separara de su lado. Sera esa la nica
razn que le impulsaba a viajar de nuevo?
De acuerdo, James. Si deseas que se quede, se quedar. Pero insisto en que no eres muy
considerado, pronto ser Navidad o es que lo has olvidado?
Por supuesto que no, y no veo el por qu ha de interferir Luca en nuestra celebracin.
Regresars para las fiestas?
Estar aqu, no te preocupes y mirando a Dominique, aadi : No me parecera justo dejar a
Dominique con tres mujeres que no se llevan bien, celebrando esa fecha tan importante.
Dominique no contest, se acurruc en la silla pensando que realmente no le importaba cmo celebrara
la Navidad, si l deseaba regresar que lo hiciera, pero saba que no lo hara por ella.
No puedo cambiar tus planes, aunque lo intente. Estoy segura dijo Geraldine suspirando .
Dominique, podras traerme mis gafas?, me las he dejado sobre la mesita del pasillo.
Ahora mismo respondi saliendo del saln.
Deseaba desaparecer de la vista de James, no soportaba su mirada fra y persistente. Al coger las
gafas, James, que la haba seguido, la cogi de la mueca y la detuvo frente a l.
Espera, Dominique susurr en voz baja, no deseaba que su madre le oyera , es necesario que
olvides lo que sucedi esta maana, s que no debi haber pasado, pero ahora, necesito estar seguro de
que lo olvidars la mir a los ojos y ella sinti que algo aprisionaba su garganta.
Ya lo hice murmur , y ahora, sultame.
Ests haciendo las cosas ms difciles, Dominique asever furioso . Si crees que me dedico a

provocar esta clase de situaciones, ests equivocada.


De veras? Pregunt, mirndole a los ojos , pues para ser un aficionado lo haces muy...
Dominique! la interrumpi, a la vez que la soltaba al darse cuenta de que Melanie se acercaba.
Vaya, vaya dijo con irona . Qu sucede? y mirando a Dominique le dijo : Parece que tienes
fiebre, ests muy sonrojada.
Creo... creo que me he enfriado titube . Seras tan amable de llevarle estas gafas a tu ta? Yo
ir a tomarme una aspirina replic mientras se las daba.
Por supuesto repuso sonriendo , vienes conmigo, James?
l observ a Dominique correr escalera arriba, a la vez que le deca a Melanie sin mirarla:
S, supongo que s y la sigui ,hasta el saln.
En su habitacin, Dominique estuvo llorando, nunca en su vida se haba sentido tan miserable. El
pensar que James partira al da siguiente aumentaba an ms su desesperacin.

Captulo

EL resto del da, Dominique lo pas encerrada en su habitacin, no tena deseos de ver a nadie y se
senta incapaz de ocultar sus sentimientos ante James. La fiebre le haba subido un poco y su malestar
aumentaba.
A la maana siguiente no se pudo levantar porque se encontraba muy dbil. Cuando Lily entr en su
habitacin, la encontr muy plida y observ que tena bastante dificultad para respirar.
Necesita que la vea un mdico, seorita dijo angustiada , le dir a la seora Mannering que llame
al doctor Rivers, y no tardar nada en venir.
No orden Dominique tosiendo . Estoy bien, si descanso el resto del da, te aseguro que maana
estar mejor.
No, seorita, maana puede que est peor, se lo dir a la seora insisti.
Lily, por favor musit , no deseo que el seor Mannering posponga su viaje, slo diles que estoy
resfriada. No quiero causar ms molestias.
Lily la tap con las mantas, y tocando su frente dijo:
Pero, es que est hirviendo, seorita.
En cuanto el seor Mannering se vaya, se lo dirs a la seora, antes no, de acuerdo?
No cree que l lo debera saber? Pregunt dudando despus de todo, usted est bajo su
responsabilidad.
Qu es lo que debo saber. Lily? dijo una voz que provena de la puerta. Al ver a Dominique
coment:
As que tena razn, te has enfriado.
La joven se sobresalt al verle avanzar hacia ella.
No es nada contest con dificultad.
Me alegro de que haya venido, seor dijo Lily juntando las manos , la seorita tiene mucha
fiebre y creo que tendramos que llamar al mdico.

Pienso lo mismo Sabes el nmero de telfono del doctor Rivers?


S. replic.
Llmale inmediatamente orden , no importa que la seorita Grainger se oponga, necesita que la
vea un mdico.
S seor respondi saliendo de la habitacin.
Por qu no queras que supiera que estabas enferma?

pregunt mientras la observaba.

Te vas hoy de viaje y no... Quera que te preocuparas murmur.


Sabes que no me ira dejndote enferma. Es que an no me conoces? y suspirando aadi : la
culpa la tengo yo, lo s.
Dominique le dio la espalda y replic: Yo soy la nica culpable, no deb regresar sola.
De acuerdo, pero si yo no hubiera insistido en que me acompaaras, no te habras enfriado aadi
caminando hasta la ventana, un aire fro soplaba agitando los rboles con fuerza.
Dominique no poda estarse quieta, tena ganas de toser pero no quera que James se percatara de su
debilidad.
Ahora puedes irte sugiri Dominique tratando de parecer indiferente , ya has cumplido con tu
obligacin haciendo que llamaran al mdico.
James la mir con dureza y detenindose al pie de la cama dijo; No me des rdenes, ahora me voy,
pero cuando venga el mdico volver a entrar.
Cerr los ojos, no deseaba verle ms, y tal vez as l pensara que necesitaba dormir un poco. Sali
cerrando la puerta con cuidado.
En cuanto llamaron al timbre, Dominique se levant con torpeza y se dirigi al tocador. Pens que
realmente tena mala cara, cuando vio su imagen reflejada en el espejo. Hubiese preferido que James no
la viera en ese estado. Normalmente aunque se arreglara un poco, ella pensaba que no poda compararse
con Yvonne o con Luca, con que mucho menos estando tan plida y ojerosa. Pero qu importancia tena?
l no se fijaba en ella ni siquiera cuando se pona sus mejores vestidos. La tos hizo que regresara a la
cama, y mientras lo haca pens que tena muy mala suerte.
Si se hubiera puesto mala un da ms tarde, James se hubiera marchado sin enterarse de nada.
Buenos das, Dominique dijo el mdico al entrar en su habitacin.

Buenos das salud Dominique, y comenz a toser.


El doctor Rivers afirm que padeca bronquitis, y aadi que haba tenido suerte de que no fuera
pulmona. Tardara unos das en reponerse.
Dominique reciba bastantes visitas al da, pero se encontraba tan mal, que casi le molestaban. James
no se march a Roma, y la vea con frecuencia. A Dominique no le agradaba tenerle tan cerca porque
pensaba que todas sus atenciones eran fingidas, que era amable por obligacin.
De todas formas, durante esos das, le conoci muy bien. Le hablaba de sus problemas, y le contaba
cosas de su trabajo. Ella le haca muchas preguntas. Llegaron a hacerse buenos amigos. l la dejaba leer
sus obras, y despus escuchaba sus opiniones con mucho inters. Dominique se senta feliz. Melanie
pasaba con ella muchas horas. Le comentaba ancdotas del da, de cmo su ta y Luca se enfrascaban en
discusiones tontas y que James no les haca caso. La echaba bastante en falta.
Vincent preguntaba mucho por ella, le mandaba flores, bombones y alguna que otra revista, no saba
por qu, no le permitan verla. Cierto da le mand un maravilloso ramo de rosas. Cuando James entr en su
habitacin, se qued mirando las flores y sorprendido pregunt:
De dnde han salido esas flores?
Vincent me las ha mandado dijo temerosa , son preciosas, no crees?
Preciosas! exclam saliendo de la habitacin.
Dominique qued sorprendida por su actitud. Aunque con l se senta nerviosa, disfrutaba de su
compaa.
Su salud mejoraba, cada da tosa menos, as que el doctor le permiti levantarse y descansar un poco
de la cama. El comer y dormir haban hecho que aumentara de peso. Su aspecto haba cambiado, estaba
ms guapa con ese par de kilos que haba engordado. Ahora se peinaba de otra forma, ya no llevaba el
cabello recogido. Melanie le haba prestado una diadema, y este cambio le favoreci. Se pasaba el da
sentada en un silln frente a la ventana, tapada con una manta, hasta que Melanie le facilit una bata, que
aunque no era nueva, la calentaba lo suficiente.
Una tarde la signora Mercinello le hizo una visita, a decir verdad, no la esperaba.
Camin hasta ella y le puso sobre su regazo una caja envuelta en papel de regalo.
Qu tal te encuentras? pregunt.
Mucho mejor, gracias. No tena que haberse molestado. No es nada, Dominique. Quera tener un
detalle contigo. Dominique abri su regalo y se llev una sorpresa al ver una bata de color salmn de seda

natural. Mir a Luca y le dijo:


Es preciosa..., pero no puedo aceptarla y titubeando aadi : es usted muy amable, pero es nueva
y yo... no...
Tonteras! Interrumpi Luca , intentas decirme que no aceptas mi regalo?, por qu?, acaso
no es digno de ti?
Por supuesto que s respondi , slo que es demasiado para m, no puedo, ni debo aceptarlo.
Si no lo haces, me ofender, Dominique dijo Luca . Es un color que a m no me favorece, y te
aseguro que no la necesito, as que hazme el favor de quedarte con ella.
De acuerdo dijo sin quedarse muy convencida , pero insisto-en que no tena que haberse
molestado.
Luca se sent junto a ella, frente a la ventana, contempl el paisaje y cruzando las manos sobre su
regazo le coment:
Este lugar es impresionante, no crees?, la soledad me asusta y haciendo una pausa continu :
Estoy acostumbrada a vivir en grandes ciudades y la verdad es que no consigo habituarme a tanta
tranquilidad. No podra vivir en un sitio as. A ti te complace, no es cierto? James me cont que has sido
educada en un convento.
S Dominique asinti cuando fallecieron mis padres, el to Henry se hizo cargo de mi educacin.
El padre de James Dominique la mir sorprendida . No te extraes, conozco el parentesco y no
me sorprende, esta clase de situaciones son muy comunes. Lo que s me sorprende y admiro es el talento
de James. De quin pudo heredarlo? Seguro que no fue de su madre, esa mujer es muy rara.
Es muy ambiciosa en cuanto a su hijo se refiere le coment Dominique, no deseaba hablar sobre la
postura de la seora Mannering.
Yo la llamara posesiva dijo negando con la cabeza . Desea que su hijo haga todo tal como ella
quiere, no se da cuenta de que James es un hombre que no se deja llevar por ninguna mujer, incluyndola a
ella.
Dominique no quera continuar con el tema que Luca abordaba, as que pregunt:
Qu tal se ha encontrado en Grey Witches?
Dominique se fij en ella mientras le responda. Llevaba un vestido verde que la haca muy atractiva,
se preguntaba cmo habra sido su esposo. Seguramente haba disfrutado de su compaa, Luca era una
mujer llena de vitalidad y resultaba agradable para cualquier hombre. Su estancia en casa de los

Mannering seguramente le haba resultado un poco aburrida y montona, sobre todo, en compaa de una
mujer como la madre de James. Not que cuando Luca hablaba de James, un brillo inusitado apareca en
su mirada, no supo la razn.
La casa es desagradable, la calefaccin, aunque es anticuada, tengo que admitir que es efectiva
comenz . Creo que una vez que te acostumbras a esta soledad, puedes disfrutarla, pero resulta que la
seora me impide hacerlo con los constantes altercados que tenemos aadi incmoda . Imagino que
lo que no le gusta, aparte de que yo sea viuda, es la forma en que muri mi marido, pero no piensa que para
m tambin ha sido algo muy desagradable se estremeci al recordarlo , lo que sucede es que la seora
Mannering no lo comprende levant la mano para evitar que Dominique la interrumpiera . No es
necesario que lo niegues, lo s, no me acepta como no me aceptaran las personas que me conocen, le
disgusta el escndalo en que me vi envuelta, y sobre todo, mi ruina econmica.
Hizo una pausa y continu:
No soy de su agrado, eso es todo mir a Dominique y dijo : Cambiemos de tema, todo eso no
tiene importancia. Dime, cules son tus planes para el futuro?
No tengo muchos.
Tal vez James te pueda conseguir trabajo en el teatro o en la televisin. Hace aos estuve metida
en ese ambiente, es fascinante. Dur poco en el medio porque a Giulio no le gustaba, deca que era
degradante sonri y aadi : Pienso que puede ser degradante si tu ambicin te lleva a despreciar y
pisotear a los. dems compaeros, hay que saber controlarse la observ detenidamente . Eres una
chica atractiva y ensendote cmo vestir y maquillarte, podras convertirte en una modelo, qu te
parecera?

Eso es ridculo, no lo dir en serio, replic moviendo la cabeza.


Por qu? Claro que s, Dominique, y "pensndolo bien creo que eso es lo que har. Montar una
agencia de modelos y haciendo una pausa aadi : Hoy en da las modelos estn muy solicitadas,
anmate.
No creo que pudiera ser modelo contest , pero le agradezco que se interese por m.
Tengo el presentimiento de que tu tutor tiene otra clase de planes para ti, as que no me
agradezcas nada.
Le ha comentado algo relacionado con mi futuro? pregunt tratando de parecer indiferente.
Algunas veces respondi . Por qu me lo preguntas?

Me gustara saber si... el me... bueno yo... no encontraba la forma adecuada de decirlo, as que
opt por callarse.
Creo que s lo que me quieres preguntar dijo Luca acomodndose en la silla , deseas saber lo
que tu tutor piensa de ti, no es as?
Pues s replic ruborizada , recuerde que le impusieron el que se ocupara de m.
Tal vez, pero poda haberte dejado en el convento hasta que cumplieras dieciocho aos, y no lo hizo.
Supongo que s acept Dominique.
Quiso ofrecerte un hogar, sacarte de esa institucin, que aunque buena, no sera mucho ms
agradable que el orfanato.
Tambin sabe usted que estuve en un orfanato?
James y yo hemos hablado de muchos asuntos, incluyendo lo concerniente a ti. Nos conocemos hace
muchos aos, siendo amigo de mi esposo, tuvimos oportunidad de conversar en muchas ocasiones y llegar a
conocernos bien. Pienso que sinti pena por la forma en que su padre te mantuvo alejada de su hogar
durante tantos aos, tratando de mantener las apariencias. El seor Farriday no poda traerte a vivir aqu,
sin explicarte muchas cosas. Cmo hubieras reaccionado cuando l te hubiera dicho lo que ahora sabes?
No lo s respondi tocando sus mejillas con ambas manos.
Lo supona. Hubieses pensado de otra manera y dudado de su generosidad contigo. Al parecer, tu to
tranquiliz su conciencia hacindose cargo de ti.
Puede ser musit.
En cuanto a tu futuro, James tomar parte activa en l. No creo que te abandone en cuanto cumplas
tus anhelados dieciocho aos, ya eres parte de su familia.
Eso es algo que slo yo debo decidir dijo . Legalmente ser libre a partir de esa fecha.
Legalmente! exclam Luca alterada . Las leyes slo las utilizan los abogados. Cuando se trata
de familiares y de seres humanos, stas se dejan a un lado, lo nico que importa son los sentimientos se
acerc a ella y le cogi su mano . Hazme caso, Dominique, no seas tan agresiva con James, no hay muchas
personas como l. Podas haber ido a parar bajo la tutela de un hombre sin escrpulos.
Dominique se levant, Luca dio por terminada su visita, dej su asiento y le dijo:
Te ver luego, Dominique. Voy a ver si puedo ayudar a la seora Mannering en alguna tarea, tal vez
as cambie su opinin sobre m y sonriendo aadi Pinate y ponte la bata que te he regalado, estars

muy guapa, adems tienes una gran ventaja, eres muy joven y diciendo esto sali de la habitacin.
Cuando se qued sola, Dominique mir detenidamente la bata, era preciosa. Se quit la que llevaba
puesta y se la puso, cepill su cabello, y se volvi a poner la diadema. Se mir en el espejo, el cambio era
notable, la bata delineaba su joven figura, se at el cinturn que pona de relieve su pequea cintura.
Record lo que Luca le haba dicho y aunque nunca sera tan bella como ella, le agrad el cambio que
contempl ante su imagen.
Luca era una mujer agradable y si James decida contraer matrimonio con ella, lo pasara bien, porque
posea cualidades para hacerle feliz. Pero Dominique no quera pensar en eso, an no estaba preparada
para aceptar que pudiera casarse con Luca o con cualquier otra.
Por la tarde, James estuvo con ella, pero para su desilusin no hizo ningn comentario sobre su nueva
apariencia. Cuando le dio el manuscrito para repasar una escena difcil, Dominique sinti deseos de
destrozarlo, pero se contuvo, no quera demostrar su decepcin. Le escuch con inters, olvidando sus
inquietudes. La obra era interesante, se iba a emitir en seis captulos. Se titulaba: Los Libertinos. La
trama levantara controversias ya que era un tema actual, sobre la juventud que se rebela contra toda
norma de conducta.
El protagonista era un joven, hijo de padres trabajadores, dedicados por entero a su familia. El chico
era presa del juego. Esto ocasionaba mltiples problemas en la familia. Era una obra realista, triste, llena
de momentos dramticos. Dominique valor muy positivamente la capacidad que posea James como
escritor. Esta obra llegara al corazn del espectador. Analizaba psicolgicamente a cada uno de los
personajes, dando una clara idea de sus personalidades. La intencin del autor quedaba patente.
Dominique sin darse cuenta, se adentr en la obra, y escuchaba a James embelesada, como siempre lo
haca. Cuando terminaron de revisar lo previsto, record su desilusin. James guard los papeles en su
carpeta mirando su reloj, eran ms de las nueve de la noche, se levant y cuando se dispona a marcharse,
Dominique le dijo:
No entiendo cmo es que an no te has marchado a Roma, crea que los asuntos de la signora
Mercinello no podan esperar dijo Dominique con petulancia.
Ya ests aburrida de nuestras conversaciones? pregunt.
Pienso que te resultarn bastante insulsas, comparadas con tus diversiones de Londres repuso
Dominique mientras se miraba sus uas, una por una, no deseaba mirarle.
No has contestado a mi pregunta.
Ni t a la ma asever ella.
Quieres que me marche, no es as? Mi presencia te molesta.

Claro que no. Esta es tu casa murmur suspirando.


Qu es lo que te pasa, Dominique? Desde que he entrado en la habitacin, te noto diferente. Te
encuentras mal?
No, estoy perfectamente.
Dej la carpeta a un lado y se puso frente a ella.
Entonces, qu pasa? pregunt, observndola detenidamente . S qu Luca ha hablado contigo,
qu te dijo para que te comportes as?
Fue muy amable hacindome compaa, es ms, me trajo un obsequio.
Lo s. Te regal esa bata.
Lo sabas y no me has dicho nada? dijo indignada, a la vez que se levantaba.
No s que esperabas que te dijera, sabes tan bien como yo que te sienta maravillosamente.
Maravillosamente! repiti bajando la cabeza . Eres muy amable.
Cuando le mir de nuevo, se sorprendi al ver la expresin de su rostro. Pareca que algo le
preocupaba, y pens que tal vez se imaginaba a Luca dentro de aquella prenda que ella tena puesta.
Por qu insistes en comportarte de esa manera? Nuestra relacin todava no est clara, sabes que
intento cambiar la imagen que estpidamente hice que vieras en m. Deseo mejorar nuestra amistad, pero
tu agresividad impide que lo consiga respir profundamente para proseguir : Necesito que veas en m
al hombre que soy, no a la bestia que conociste en una cueva, de aquello trato de no acordarme y quisiera
que t lo olvidaras.
Es eso lo que quieres? pregunt dolida por su respuesta.
Es que no hay otro remedio repuso violento . No deseo torturarme ms, sintindome culpable.
Tengo que cambiar de actitud para redimirme ante m mismo.
As que esa es la razn por la que pasas tanto tiempo a mi lado, intentas reparar tu falta dijo en
voz alta . No te has dado cuenta de que ese sentimiento que sembraste en m aquella maana, an
persiste?
Qu es lo que te propones, Dominique? pregunt pasndose la mano por el cabello . T no sabes
absolutamente nada de mis sentimientos.
Se acerc a ella y por un momento tuvo miedo de que intentara pegarla. Se detuvo y continu

dicindole:
Y los tengo, sabes? Pero no la clase de sentimientos que t dices tener. Crees que es fcil para m
estar cerca de ti, da tras da? De qu crees que estoy hecho? su voz se oa ronca . Has despertado
en m lo que ninguna mujer haba conseguido nunca. Espero que con mi confesin te sientas satisfecha,
pienso que queras escucharla, no es as?
Tienes un mal concepto de m, James. No puedes creer lo que dices dijo sorprendida del tono en
que le hablaba.
Claro que lo pienso! Es la verdad y t lo sabes. Soy muy mayor para una adolescente como t, que
slo busca la admiracin de un hombre de mi edad.
No es verdad! grit.
Entonces; cul es la verdad?
Ests utilizndome cmo pretexto para tranquilizar tu conciencia respondi retorcindose las
manos Desde que me conoces no has hecho otra cosa que usar mi edad como defensa. Por qu? Acaso
no puedes aceptarme como mujer?
Por Dios, Dominique, ya basta! Me alejar de tu vida, no podr enmendar mi error como cre poder
hacerlo diciendo esto se inclin para recoger su carpeta. En el momento de cogerla, una hoja se cay al
suelo. Instintivamente, Dominique se agach para drsela, l se adelant, sin querer la empuj, y se cay
al suelo. Inmediatamente olvid su folio y se dispuso a ayudarla.
Djame! dijo, sintiendo que las lgrimas brotaban de sus ojos.
Dominique, por favor, no te pongas as. Sabes que lo ltimo que deseo es hacerte dao.
Me cuesta trabajo creer en tus palabras respondi sin mirarle.
No hagas que me odie a m mismo murmur haciendo girar su cabeza con un movimiento suave.
Pens... que era a m a quien odiabas musit.
Cmo has podido pensar eso? susurr muy cerca de sus labios, besndola con la intensidad que
Dominique ya conoca. Ella correspondi al beso con infinita ternura. Sus caricias eran dulces, la besaba en
la frente, en las mejillas. Fueron momentos en que Dominique sinti que todo el amor que llevaba dentro
afloraba en unos cuantos segundos. En ese momento, James intent desabrocharle la bata, y ella volvi a
la realidad, fue

entonces cuando se dio cuenta de lo que hacan, y se levant deprisa, no deseaba

arrepentirse ms tarde de haberse dejado llevar por la pasin del momento.


Le empuj apartndole a un lado y corri hacia el cuarto de bao. Cerr la puerta y se apoy en ella.

Su respiracin era agitada y senta que el calor envolva todo su cuerpo, no poda ser por la fiebre, ya que
esta no tena el poder de alterarla de esa manera. Se pas la mano por la frente y murmur para s:
Qu es lo que he hecho? Qu vergenza, cmo he podido...!
Pasaron varios minutos antes de que oyera la voz de la seora Mannering que la llamaba:
Dominique! Ests ah? pregunt llamando a la puerta del bao.
S... estoy aqu respondi con dificultad.
El doctor Rivers desea verte.
Se enjuag el rostro, tratando de borrar toda huella que pudiese delatarla. Se cepill el cabello y
colocndose bien la bata, entr en la habitacin.
No le esperaba, doctor dijo tratando de sonrer.
Estaba muy cerca de aqu le dijo con amabilidad , Morley me invit a jugar al ajedrez y estando
tan cerca pens en aprovechar para venir a ver que tal sigues. Por lo que veo ests mucho mejor. Creo que
maana ya te puedes vestir y salir a dar un paseo. Necesitas que te d el aire.
Dominique asinti, forzando una sonrisa. Era lo que menos deseaba, se encontrara con James, y no
podra mirarle despus de lo sucedido. Toda relacin con l, haba quedado destruida para siempre.
Al da siguiente, Lily le dio la noticia. James sala para Londres, y despus se ira a Roma para
solucionar los asuntos de la signora Mercinello. Dominique se alegr, por lo menos, estara tranquila
durante algunos das.

Captulo

DOMINIQUE volvi muy pronto a su vida normal. Ingres a sus tareas, pero siempre bajo la vigilancia
de Melanie, sta no le permita hacer muchas cosas, o que se cansara innecesariamente. Geraldine, al no
estar su hijo, se reocupaba poco porque Dominique se restableciera del todo, la trataba sin delicadeza, y
le encomendaba las mismas tareas que sola llevar a cabo antes de caer enferma. Le asign entre otras
obligaciones, el que se encargara de llevarle el desayuno a la signora Mercinello a su habitacin. Lo hizo
una sola vez, ya que Luca para no darle trabajo a la joven, a partir de entonces, baj a desayunar con los
dems. Dominique pasaba la mayor parte el da en la granja, daba de comer a los caballos y los sacaba a
pasear, Melanie no le permita hacer ms. Pareca que la presencia de Dominique alegraba el lugar, los dos
hombres que e encargaban de la granja le dieron la bienvenida desendole un completo restablecimiento.
Luca pasaba la mayor parte del tiempo en su habitacin. De vez en cuando iba hasta el pueblo, alquil
un coche y con l se desplazaba. Muchas veces le deca a Dominique si quera que fueran a dar un paseo,
pero ella no poda soportar la compaa le Luca, ya que pensaba que sera la futura esposa de James. Su
tutor negaba tener algn inters especial en ella, pero sus palabras distaban mucho de su forma de
actuar. De cualquier forma, pensaba, que si no fuera Lucia o Yvonne, sera cualquier otra mujer que le
aceptara, era un soltero muy codiciado para las mujeres que queran casarse y estas las haba en todo el
mundo.
Dominique se resista a pensar en lo que hara cuando regresara, no faltaba mucho, la Navidad se
aproximaba y ella no deseaba estar all cuando l volviera. Pero no poda marcharse porque careca de
dinero para subsistir mientras consegua un empleo. Alquilar una habitacin en una pensin no era ninguna
solucin, porque le pediran el alquiler por adelantado, as que no tena ms remedio que resignarse a
permanecer en Grey Witches.
Quince das despus de que James se haba ido a Londres, se le present la oportunidad de resolver
sus problemas. Vincent la haba llevado al cine y cuando la acompaaba a la casa, le propuso matrimonio. Al
principio pens que era una broma, pero cuando vio la expresin de su rostro, se dio cuenta de que el
joven hablaba en serio.
Apenas nos conocemos, Vincent. Cmo puedes estar tan seguro de tus sentimientos?
l aparc el coche a un lado del camino y encendi las luces interiores.
Estuve seguro desde el primer da que salimos juntos, eres una chica muy especial. Seria, no te
agradan las diversiones frivolas, y eso es muy importante para la clase de trabajo que desempeo.

Dominique no saba cmo responder sin herir sus sentimientos. Nunca se haba dado cuenta de que
Vincent la amaba.
Yo no te amo respondi ella.
Eso no es tan importante ahora, el amor vendr despus replic . Pienso que las parejas que se
casan no se aman realmente, creen hacerlo, pero el amor es algo que va creciendo conforme pasan los
das, los meses. Amar es compartir muchas cosas, alegras, tristezas, no se ama hasta que se vive con la
otra persona y se le conoce profundamente.
Dominique esboz una sonrisa, su concepto del amor era muy diferente al de Vincent.
Creo que confundes la simpata con el amor, murmur la joven , para m el amor es un
sentimiento avasallador, que te hace necesitar a la persona que amas, pensando que sin ella no puedes
vivir, que tu existencia lejos de ella es intil.
Eso no es amor, Dominique, es ms bien capricho. Cmo puedes saber tanto sobre el amor? A
menos, claro est, que ests enamorada de alguien y hayas sentido en tu propia carne todo lo que acabas
de decir.
Puede ser admiti sonrojndose , pero de lo que estoy segura es de que no te amo. Tal vez
Melanie te hara feliz, es una chica con muchas cualidades y es dichosa viviendo en el campo.
Melanie? pregunt alzando el tono de la voz . A ella no le interesa nada ms que sus caballos.
Adems, a mi madre no le agradara.
Dominique pens que resultaba gracioso estar en medio del camino discutiendo el futuro de su amigo.
Por qu es tan importante para ti que tu madre apruebe a la mujer con la que te cases, Vincent?
Ella se morir algn da, no deseo que eso suceda pronto, pero piensa que Sebes vivir tu propia vida, no la
que tu madre te elija. No olvides lo que te he dicho sobre Melanie. Es una muchacha estupenda, te hara
feliz siendo una buena esposa y buena madre.
Vincent estaba confundido.
Pero es que no deseo casarme con Melanie, aunque pienses que me conviene. Con la nica persona
que deseo contraer matrimonio es contigo.
No puede ser, lo sientodijo bajando la cabeza.
Quieres decir que amas a otra persona?
Tal vez.

A quin? pregunt mirndola inquisitivamente . No me dirs ahora que ests enamorada de


James Mannering.
Dominique sinti que el rubor invada sus mejillas. Por qu piensas en l? pregunt, tratando de
parecer indiferente.
Porque l y yo somos los nicos hombres con los que tratas, y en quienes podras interesarte, no hay
ningn otro candidato por aqu.
Puede ser alguien a quin conoc cuando estaba en el convento.
No lo creo. Tu explicacin es ridicula. No has pensado que James es diez aos mayor que yo y que
yo pronto cumplir veintinueve.
Eso no tiene importancia.

Te equivocas, Dominique. La seora Mannering tiene en

mente otros proyectos para su hijo.

Conoces a la seorita Park?


S, pero James no se casar con ella.
Por qu ests tan segura?
Llevaras a una mujer a tu propia casa, si tus intenciones fueran las de casarte con otra?
Te refieres a la signora Mercinello?
Exactamente!
Debe ser excitante poseer dinero y tener a tu disposicin mujeres tan bellas respondi Vincent
suspirando . Y t que hars?
Al cabo de los seis meses, el seor Mannering me ayudar a conseguir un empleo lejos de aqu. No
me agrada el norte.
Si ests decidida no insistir, pero te suplico que lo pienses, Dominique, lo hars?

Lo tendr

en cuenta, pero estoy decidida, Vincent. Bueno, en ese caso, me gustara seguir siendo tu amigo. - Por
supuesto!
Vincent sonri, y continuaron hacia Grey Witches. Dominique pensaba en los dos hombres que ms le
haban impactado en su vida: James y Vincent; eran tan diferentes... Vincent le haba propuesto
matrimonio, cuando ni siquiera haba intentado besarla, en cambio, James, a quien casi se entreg, no la
quera.

Al da siguiente Dominique se hallaba, como de costumbre, paseando a los caballos, cuando se encontr
con el cartero, que todos los das llevaba la correspondencia a Grey Witches.
Si quiere dme las cartas, seor Meridew, yo las llevar a casa se ofreci Dominique.
Te lo agradecer dijo separando las que correspondan a esa direccin . Hace una maana
esplndida, crees que tendremos mucha nieve para Navidad? pregunt sonriendo.
Eso esperodijo Dominique.
Yo deseo lo contrario contest , mi trabajo se hace ms difcil con los caminos llenos de nieve.
Dominique cogi las cartas y se despidi del seor Meridew. Cabalg hasta el establo, desmont y
mir los sobres. Revis la correspondencia, haba una carta dirigida a ella, no era de Susan, la nica
persona que le escriba. El sobre estaba escrito a mquina y tena el remite impreso, lo que le daba un
carcter oficial.
Conoca bien a los abogados de su to Henry y el nombre del que le escriba no le era familiar. La
misiva vena de Bognor y sin saber por qu, el corazn le dio un vuelco.
Guard el sobre en el bolsillo del pantaln y corri hasta la casa, dej la correspondencia sobre una
mesa del vestbulo, y subi a su habitacin. Una vez dentro, cerr la puerta y abri la carta.
La ley varias veces y cada vez que lo haca le pareca ms increble lo que tena ante sus ojos. Era una
carta breve, y muy bien redactada. Necesit leerla de nuevo para entenderla mejor, esta vez lo hizo en
voz alta, quera escuchar lo que lea:
Estimada seorita Grainger:
Recibimos noticias del seor Amos Lancer, dueo del hotel Crompton en Bognor, de que su cliente, el
seor Henry Farriday, no reserv como era su costumbre, la suite que ocupaba todos los aos. El seor
Lancer nos pidi que le informramos del motivo, y nuestras investigaciones nos llevaron hasta la firma
Grant, Campbell y Dawson. Ellos nos dieron la noticia del fallecimiento de su to, por lo que nos sentimos
en la obligacin de informarle de que el seor Henry Farriday, hizo un testamento posterior al celebrado
con la firma antes mencionada. En l la nombra a usted heredera universal de cuanto posea. De esa
forma, el primer testamento queda anulado, siendo el que obra en nuestro poder, el nico legtimo.
Haba ms datos en la carta, datos a los que Dominique no dio mayor importancia, con el papel en la
mano mir hacia la ventana, infinidad de ideas daban vuelta en su mente. As que su to, se vengaba de la
seora Mannering por todas las humillaciones recibidas.
Permaneca inmvil, sumida en sus pensamientos, cuando Lily llam a su puerta, avisndole de que el
desayuno estaba servido. Se arm de valor y guardando la carta en su maleta, baj al comedor. No se

atrevera a comentarle a Geraldine el contenido de la carta. No poda decirle que ya no era la duea de la
casa y sus alrededores, que la invitada en Grey Witches, era ella y que los papeles se invertiran a partir
de ese da. Durante el desayuno, pens en el asunto. Qu habra pasado por la mente del to, para haberla
nombrado su heredera? Cmo imaginaba que administrara todos sus bienes, sin conocer nada al
respecto?
Se sirvi una segunda taza de caf y le pidi a Melanie un cigarrillo. Esta se sorprendi un poco ante
tal solicitud, pero se limit a alcanzarle la pitillera junto con el encendedor. Cogi uno y lo encendi.
A qu se debe tu repentino deseo de fumar, Dominique? pregunt Luca . Nunca te haba visto
hacerlo.
Simplemente me ha apetecido repuso acercando el cenicero , eso es todo concluy sonriendo.
Te encuentras bien, Dominique? Pregunt la seora Mannering . Esper que no vuelvas a recaer.
Melanie mir a su ta y se dirigi a ella en tono agresivo:
Qu es lo que te preocupa, ta? Presientes algn problema?
Dominique se levant de la mesa, no se senta con el humor necesario para soportar las discusiones
habituales entre ta y sobrina. Sali del comedor, necesitaba hablar con alguien sobre su nueva situacin,
pero no saba con quin. Descartaba a Geraldine, sera la ltima persona a quien se lo dira; Melanie?, no,
ella no entendera. Pens en Vincent, pero a l tampoco deseaba decrselo.
La nica persona con la que poda hablar era Luca.
No estaba muy segura de poder confiar en ella, pero era la ms indicada, ya que vera las cosas desde
un punto de vista objetivo.
Regres al comedor y decidida se dirigi a la signora Mercinello:
Signora, podra hablar con usted un momento? pregunt en voz alta.
Melanie y la seora Mannering la miraron sorprendidas, Luca se levant asintiendo con la cabeza, y
sali del comedor detrs de ella con paso ligero.
Qu pasa?
Sera una buena idea dar un paseo en su coche respondi Dominique, mirando a su alrededor ,
deseo conversar con usted y ste no es el lugar apropiado.
Como quieras, pero tendr que subir a ponerme unos zapatos dijo sealando sus zapatillas.

Mientras lo hace, ir por mi abrigo.


Luca entr en su habitacin y Dominique en la suya. Cogi
su abrigo nuevo y sac la carta de la maleta. Se reunieron en el pasillo, y bajaron juntas la escalera.
Ya sentada en el coche, respir profundamente. La maana prometa ser hermosa, la bruma
comenzaba a disiparse y se poda ver el pueblo con las chimeneas y su humo caracterstico saliendo de
ellas.
Luca encendi el motor y se dirigi hacia una de las colinas. El silencio rein dentro del coche hasta
que ella lo aparc en la cima, desde donde la vista del mar era maravillosa. Le ofreci a Dominique un
cigarrillo, y se lo encendi para despus hacer lo mismo con el suyo.
Qu es lo que te preocupa? Acaso es James el motivo de tu angustia? pregunt exhalando el
humo del cigarrillo.
Por qu cree que es James, el que me preocupa? pregunt.
Y eres t quien lo pregunta! exclam . S que algo sucedi entre vosotros antes de que se
fuera .
Le... le coment algo? titube.
Luca neg con la cabeza y aadi:
Por supuesto que no. No es un hombre que consulte sus problemas con nadie y menos con una mujer
dijo mirndola , pero le not muy alterado, y supongo que tuvo una razn muy poderosa para salir tan
de repente.
Puede ser respondi suspirando , pero lo que quiero decirle me resulta un poco difcil.
Por qu? Creo que soy la ms indicada para poder ayudarte, ya que no pertenezco a la familia.
Dominique la observ detenidamente y le pregunt:
Luca ama usted a James?
Amarle? Estaba sorprendida , no, claro que no y para tu tranquilidad l tampoco me ama.
Entonces, por qu estn tan unidos?
Te he explicado ya que James era un buen amigo de mi esposo, aunque te confesar que no me
hubiera importado que tu tutor me hubiera mirado de otra manera y no como a la esposa de su amigo
levant los hombros y suspir . Nunca le he interesado como mujer. Ahora que he aclarado tus dudas,

dime qu te sucede? Por qu tanto misterio? Hizo una pausa y aadi: No estars embarazada,
verdad?
No! Grit , por supuesto que no.
Por qu te horrorizas? pregunt con calma . Eso significa que James no te ha hecho el amor.
No, nunca! respondi sorprendida.
Ahora entiendo su estado de nimo murmur , no debes sentirte tan molesta por mi pregunta.
No sabas que l deseaba hacerlo?
Cmo puede saber tanto sobre nosotros?
No te olvides que soy italiana dijo, respondiendo a su pregunta . Cuando compr la bata, pens...
La bata? Interrumpi Dominique , se refiere a la bata que usted me obsequi?
La misma. La verdad es que eres muy ingenua y James lo sabe. Estaba seguro de que no la
aceptaras si supieras que l te la haba comprado, as que me pidi que te la ofreciera de mi parte.
Dominique guard silencio, ahora comprenda muchas cosas, bajando la cabeza dijo:
Entiendo...
Ahora vas a decirme lo que te preocupa? Dominique sac el sobre que guardaba en el bolsillo y se
lo entreg. sta lo abri y sac la carta, la ley en silencio y cuando llegaba al final, emiti un ligero
silbido para aadir:
Esta s que es una sorpresa! Pobre Geraldine! Se llevar una gran desilusin cuando sepa que no es
la duea y seora de Grey Witches.
No deseo nada, Luca repuso en voz baja , James es el nico con derecho a esos bienes, l era su
padre. El to Henry me utiliz como pretexto. Ahora s por qu me sac del orfanato y pag mi educacin
y suspirando aadi : Todo est muy claro.
No hay razn para que te pongas as, eres una buena chica y no creo que el motivo de tu to haya
sido el que t piensas. Si no deseas conservar las propiedades, vndelas, despus puedes irte a Londres y
vivir cmodamente hasta que encuentres un buen chico con el que puedas contraer matrimonio.
No! grit . No quiero nada del to Henry. Ahora que entiendo las razones por las que hizo un
nuevo testamento, me resulta indigna la manera en que se comport aadi mirndola a los ojos . No
entiendes su juego, Luca? Todo lo plane para que se conociera el segundo testamento una vez que James
y su madre, se creyeran dueos de todo.

Tal vez ests en lo cierto concedi Luca -, pero tarde o temprano, ellos se enteraran de esto
dijo mostrndole el papel que sostena en su mano.
-No! -exclam ocultando el rostro entre sus manos . Sera lo ltimo que deseara que sucediera.
Qu hago signora, qu hago?
Lo nico que se me ocurre es que hables con tus abogados y les expliques tu posicin respondi
Luca tratando, de calmarla.
Pero si no deseo ser la heredera, qu puedo decirles n explicarles?
Supongo que puedes disponer de lo suficiente para poder vivir, reservando un poco para alguna
emergencia, mientras decides lo que vas a hacer en el futuro.
S asinti Dominique , creo que es lo ms lgico. Es lo nico que deseo. S que puedo valerme
por m misma, pero necesitar un pequeo capital mientras me establezco.
Entonces, todo est resuelto. Lo que debes hacer ahora, es ir a Bognor y hablar con los abogados.
Puedes hacerlo esta misma tarde.
No se me ocurre ninguna excusa para justificar mi viaje dijo Dominique . Qu les dir a la
seora Mannering y a Melanie?
Te dejar en la estacin, all cogers el tren que te lleve hasta Bognor, no tienes por qu decirles
nada, no sabrn que te has ido hasta que yo regrese. Cuando vuelvas y expliques todo, no te ser tan
difcil enfrentarte a la madre de James.
Es una magnfica idea, Luca! Exclam sonrojndose , perdn, signora rectific.
Puedes llamarme Luca, me agrada. Regresemos, estarn preguntndose dnde hemos ido, adems,
tenemos que pensar en alguna excusa para salir esta tarde.
De regreso, Dominique se senta ms tranquila y se poda decir que optimista.
En estos momentos me siento capaz de ensearle York si lo desea dijo Dominique.
Y me imagino que lo primero que visitaramos, sera la estacin, no es as? repuso Luca
sonriendo.
Haca tres das que Dominique haba llegado a Bognor, encontr el hotel Crompton tal y como estaba la
ltima vez que haba pasado all unas vacaciones con su to Henry, pero desech idea de hospedarse all.
Acudi a la firma, Hayman, Brown y Asociados al da siguiente de su llegada, y la recibieron
inmediatamente. El seor Irown, el abogado que se encargaba de sus asuntos, la escuch muy atento y

trat de entender su postura, pero an as la hizo recapacitar.


Segn me ha dicho, seorita, James Mannering, el escritor, es el hijo del seor Farriday, por lo
tanto no creo que necesite el dinero que usted no desea.
No se trata nicamente de dinero repuso Dominique , Lo que me preocupa es la propiedad, Grey
Witches. Le corresponde a l y a su madre. No puedo quitrsela a la seora Mannering, ahora que ya ha
tomado posesin de ella.
Lo entiendo aadi el abogado , pero usted es la heredera, no importa que el seor Mannering
haya sido el nico hijo de su to. Ha pensado en su posicin, si rehusa la herencia?
No, no lo entiende dijo Dominique impaciente . Mi to me utiliz hizo una pausa para aadir
: Quiero decir que fui el medio del que se sirvi para llevar a cabo su venganza, deseaba darle una
leccin a la seora Mannering por haberle rechazado. No quiso casarse con l.
Creo que exagera un poco las cosas repuso el abogado irown, encendiendo un cigarrillo . La
mayora de la gente no muere sintiendo el deseo de vengarse. Ni siquiera su to, que como usted dice,
haba sido humillado por esa seora.
Cmo puede estar tan seguro de que mi to no actu como to supongo? pregunt.
Es una suposicin repuso molesto , pero nos estamos desviando del asunto que nos interesa. Su
to hizo dos testamentos, supongo que deseaba crear confusin al hacerlo, y en el legtimo, usted es la
beneficiara. Se da cuenta de lo que eso representa en trminos monetarios?
No me interesa el dinero dijo impaciente . Slo deseo una cantidad para vivir mientras
encuentro empleo, lo dems no lo quiero. Le suplico que se comunique con Grant, Campbell y Dawson y d
las instrucciones necesarias, para que el primer testamento sea el nico vlido.
Muy bien, seorita respondi apagando el cigarrillo el cenicero . Har lo que me pide aunque no
est de acuerdo
Su to cometi un grave error, al no aadir una clusula prohibindole hacer esto. Si deseaba ver
realizada su venganza, como usted piensa, tena que haber hecho las cosas de otra manera.
Es posible que pensara, que al morir, yo quedara completamente abandonada coment , no saba
que su hijo posea ms calidad humana que la que l demostr tener. Al conocer el segundo testamento, si
hubiera quedado abandonado, lo hubiese aceptado y no habra mayores complicaciones. Har lo que me
pide. Cre que tendr todo preparado en un par de das. Dnde puedo localizarla para tenerla al tanto del
asunto? Estoy alojada en un hotel respondi. En el Crompton? No! Exclam, negando con la
cabeza , no estoy ah. Dominique le dio al abogado el nombre del hotel y sali de su despacho. Dos das
despus de que firmara los papeles necesarios para transferir su herencia a los Mannering, quiso visitar

de nuevo el hotel Crompton. Deseaba recordar las veces, que en compaa del to Henry haba estado en
aquel lugar. Se dirigi al saloncito donde en repetidas ocasiones, observ durante horas enteras al to
Henry jugar al ajedrez con un coronel retirado, que pasaba largas temporadas en Bognor disfrutando de
su jubilacin.
En esa poca del ao, los huspedes del hotel eran personas como el coronel, que por su edad
preferan tomar las vacaciones en dicha temporada, cuando los nios y jvenes se dedicaban a estudiar o
trabajar. As resultaba, un lugar bastante tranquilo.
Tom asiento cerca del ventanal, desde all poda mirar a la gente, deseaba distraerse un poco.
Seorita Grainger! exclam una camarera . Qu sorpresa! No cre que la volvera a ver, desde
que supe lo de su to dijo aadiendo de inmediato, temiendo haber sido indiscreta : Disclpeme si he
cometido una imprudencia.
No te preocupes, Josie respondi indiferente . Podras traerme una taza de t, y una cajetilla
de cigarrillos?
Cigarrillos? Repiti , qu chistoso! si usted no fuma, ro se los traer. Desea algn pastel?
No, Josie, slo tomar t respondi, sonriendo.
Observ cmo la camarera recorra el comedor y se perda dentro de la cocina.
Dominique permaneci sentada mirando las escenas que se desarrollaban fuera del hotel. Un hombre
se acerc hasta su mesa y se dirigi a ella, forzndola a cambiar la direccin de su mirada.
Se puede saber qu haces aqu, Dominique? Te he buscado en todas partes!
Podra preguntarte lo mismo, James replic confundida-. No deseas acompaarme? Me
servirn el t dentro de un momento.
No deseo tomar nada. Tengo que hablar contigo, as que vendrs conmigo ahora mismo.
No veo ninguna razn para que no podamos conversar aqu contest tratando de aparentar
tranquilidad.
Si es necesario, te sacar a la fuerza asever enfadado . sabes que lo har!
No...no te atrevers titube.
Entonces, no me provoques.
Dominique mir a su alrededor, las pocas personas que haba en el comedor, ya miraban sin perder

detalle de la discusin. Se levant molesta y se dirigi hacia la puerta. En ese momento, Josie sala de la
cocina con una bandeja.
Seorita, no va a tomar lo que ha pedido? pregunt la camarera levantando la voz.
La seorita se marcha respondi James . Puede enviar cuenta a los abogados del seor
Farriday, ellos la pagarn.
Co...Como usted mande, seor contest sorprendida, sin percatarse de que Dominique se hallaba
molesta.
Has conseguido sacarme del comedor dijo con furia, mirando a James pero no pienses que ir
contigo donde deseas.
Eso es lo que crees respondi sonriendo, la cogi del brazo y la condujo hasta el coche abrindole
la puerta para que entrara.
No puedes permanecer aqu, no permiten aparcar dijo Dominique.
Lo s, y no tengo intenciones de quedarme. Entra! orden.
Subi al coche sintiendo que no poda negarse.
James se sent a su lado y puso en marcha el coche. Recorri las calles cercanas al hotel, despacio,
Dominique no entenda el porqu de su presencia, pero no poda hacer nada para evitar su compaa.
Se dirigi a las afueras del pueblo y aparc el coche. Apag el motor y mirndola le dijo:
Eres una loca, una tonta, lo sabas?
Segn t, parece que desde que sal del convento no he hecho sino locuras. Quieres decirme a cul
te refieres en particular?
Sabes a qu me refiero contest sin dejar de mirarla . Al testamento de Henry.
Cmo te has enterado? pregunt con sorpresa.
Debiste suponer que como beneficiario del primer testamento, Grant, Campbell y Dawson tenan la
obligacin de informarme de los cambios existentes repuso con ms calma.
Pero, si estabas fuera del pas.
Volv hace unos das.
Has hablado con tu madre?

No tuve tiempo murmur . Adems me era difcil, dadas las circunstancias actuales.
GreyWitches es tu hogardijo Dominique.
Te equivocas, es tuyo.
El que est equivocado eres t, firm los papeles necesarios para transferir la herencia.
An no eres mayor de edad, por lo que tu firma no es vlida.
Hablaste con el seor Brown?
Hace algunas horas. Conversamos bastante rato sobre ti.
Oh, James! exclam bajando la cabeza, no deseo nada, la casa, ni el dinero. No puedo quitarle a tu
madre algo por lo le tanto luch, slo por satisfacer los deseos egostas del to Henry.
Dominique murmur pasando un brazo sobre sus hombros , por qu ese empeo en
menospreciarte? Nunca se te ha ocurrido pensar, que tal vez mi padre se encari tanto contigo, que
quiso que poseyeras todo lo que tena?
Y por qu pensar eso? tan slo soy una chica simple y sencilla, por qu tena que tomarse tantas
molestias?
No. es cierto, t lo sabes musit , eres una joven maravillosa, dulce, agradable y muy
inteligente. Mi padre te amaba al igual que yo.
Dominique le mir con incredulidad.
Slo pretendes ser amable conmigo dijo con tristeza , No deseo tu compasin.
James la acerc a su pecho y cogiendo una de sus manos la coloc sobre su corazn.
Sientes ese latido? Crees que es por compasin? pregunt cerca de sus labios, cogi su barbilla
y uni su boca a la de ella, suave y tiernamente . Eres adorable, Dominique, y estuve
punto de perderte por mi estupidez. No te imaginas lo que he sufrido estas dos semanas separado de
ti dijo tiernamente pero ste no es el lugar indicado para hablarte de mi amor, adems, primero hay
que arreglar algunas cosas.
Dominique se senta dichosa, James enmarc su rostro con ambas manos y ella las oprimi con las
suyas. La bes de nuevo y despus, apartndola suavemente le dijo:
No me hagas perder la calma, Dominique.

De acuerdo respondi cruzando los brazos , me portar bien, te lo prometo.


James le sonri y sacando un cigarrillo de su bolsillo, lo encendi.

En primer lugar, deseo que conserves el testamento tal como esta.


Por qu? pregunt.
Por la sencilla razn de que te pertenece. No puedes irte de all y vivir sola hasta que cumplas
dieciocho aos, no podra verte ni estar contigo.
Me es difcil entenderte replic.
Por favor, Dominique, no lo hagas ms difcil. Te amo y te necesito ms que a nada en el mundo, pero
eres muy joven. Cmo puedes estar segura de que es a m a quien realmente amas? No deseo arruinar tu
vida, una vez que seas mi esposa no estoy dispuesto a dejarte marchar.
Entonces qu es lo que deseas que haga? pregunt temerosa.
Esperaremos a que cumplas veinte aos.
Y si me niego?
Puedes hacerlo respondi aspirando profundamente el humo del cigarrillo.
Dominique no encontraba las palabras adecuadas para que James comprendiera que ella no necesitaba
esperar para estar segura. No tena las inquietudes de una adolescente, era diferente. Su nico deseo era
estar junto a l y cabalgar por el valle. Eso era lo que deseaba. Quiso ponerle a prueba, diciendo:
Vincent me propuso matrimonio. No le di ninguna respuesta, le dije que deseaba pensarlo antes de
aceptar.
James no hizo ningn comentario, estaba pensativo mirando el paisaje. Dominique observaba el perfil
del hombre que tanto amaba; el cabello oscuro, y esos ojos que la hacan temblar cuando la miraba.
Has odo lo que he dicho? pregunt ella.
La mir y pudo observar el cambio en su expresin.
S, te he odo. Y t?
Yo qu?
Ya has pensado tu respuesta?

S murmur arrepentida . Perdname, James! por favor, perdname, no quera hacerte dao.
Su actitud hizo que l la cogiera entre sus brazos y muy cerca del odo comenz a decirle:
Nunca pens que me amaras. Despus de lo ocurrido cre que te perdera para siempre. Luca me
aclar todo y me dio buenos consejos.
Cundo has hablado con ella?
Ayer por la tarde, hablamos por telfono la miraba . Me hizo comprender que era un idiota al
poner nuestra diferencia de edades como un obstculo entre nuestro amor.
No me dejes, James! exclam ocultando el rostro en su pecho
. Esperaremos hasta mi cumpleaos, si as lo deseas, pero despus de esa fecha ser mayor de edad
y si eso cuenta para muchas cosas, por qu no en mis decisiones?
De acuerdo, pero te advierto que no tengo un carcter fcil de aguantar. Me paso horas enteras
escribiendo y me altero cuando algo no sale como deseo dijo mirndola muy cerca . Puede que algunas
veces est tan enfadado que seas t con quien me desahogue.
Entonces, nos amaremos respondi besndole.
James le apret contra su pecho con ademn protector.
Creo que te am desde el primer da que estuviste en mi casa. Sent deseos de protegerte, de
tenerte siempre a mi lado.
Despus supe que debera cuidarme de m mismo la bes en el cabello y aadi : A pesar de lo que
pienso, no te dejar ir, te amo tanto!
Dominique le abraz con fuerza.
Tu madre podr conservar Grey Witches y Melanie sus caballos. Cuando tengamos hijos les
ensearemos a montar y amarn este valle tanto como yo...

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