La Mano de Dios

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LA MANO DE DIOS Salmo 19:1 y Juan 10:27-29 Introduccin.

Hacer notar el gran nmero de veces que la expresin mano aparece en la Biblia, y que en su mayora se refieren a Dios.
Antropomorfismo Atribucin y caractersticas especficamente humanas, a cosas no humanas.

La figura es adecuada, porque cualquier idea de nuestra mente la realizamos con nuestras manos. La expresin mano significa facultad de poder. No podemos imaginarnos a Dios como un hombre, pero nos ayudar a comprender a Dios (es decir, lo que l es, lo que hace y se propone) el estudio de esta grfica expresin en la Biblia. I. Las manos de Dios son GRANDES. (Salmo 19:1). Los cielos cuentan la gloria de Dios y la expansin denuncia la obra de sus manos Hay billones de estrellas en el Universo, pero no circulan sin ton ni son. El .Universo se habra destruido a s mismo si la fuerza que mueve los astros fuera un impulso ciego e ininteligente. Lo que llamamos leyes de la Naturaleza, demuestra un Legislador. Por esta razn los astrnomos pueden predecir el eclipse, o el paso de un cometa dentro de un centenar de aos, con la precisin de da, hora y minuto. II. La mano de Dios es SABIA. (Salmo 118:16) La diestra de Jehov hace maravillas. Considrese el cerebro humano, comparndolo con el complicadsimo instrumento inventado por la ciencia del hombre. Obsrvese: a) Su pequeo tamao comparativo. b) Su material: clulas de carne, en vez de voluminosos aparatos de metal, plsticos, cristal, c) Sus variadsimas disposiciones y los numerosos rganos del cuerpo que controla. De nada podemos decir: Es imposible, sin la mano Dios. III. La mano de Dios es PODEROSA. (Deuteronomio 5:13). Con mano fuerte y con brazo extendido Lo que para el hombre es completa imposibilidad es sencillsimo para los recursos de Dios. Ilstrese comparando los recursos de un troglodita y los del hombre civilizado, haciendo observar cmo los avances de la civilizacin tienen como base las leyes sabias de la Naturaleza. El poder del hombre no es sino una dbil consecuencia y reflejo del poder y sabidura de Dios. (Aplquese a esta lgica, seca por s misma, los recursos de la elocuencia para revestir tambin esta parte del mensaje con belleza oratoria.) IV. La mano de Dios puede ser RESISTIDA. Los tomos y molculas del Universo entero obedecen dcilmente a la voluntad del Todopoderoso; pero no es as con los seres espirituales. Dios tiene servidores convencidos de su sabidura y amor (los ngeles), no robots. Comprese Isaas 53:1-2 con el vers. 3. La mano que nos cre con imponderable sabidura y poder y nos redime del poder de Satans no ha anulado nuestra voluntad. Podra aplastarnos, pero nos respeta; respeta nuestro yo malo, lo redime y colabora con nosotros en la formacin de un nuevo carcter apto para el Reino de los Cielos. Esto nos lleva a declarar que: V. La mano de Dios es DELICADA. Habis visto la mano de un escultor? Podra sacar kilogramos de piedra de un solo golpe y saca miligramos. Habis visto la de un cirujano? Nosotros cortaramos nervios y tendones, venas y arteras; l sabe por dnde tiene que hacer pasar su bistur y hasta dnde tiene que llegar.
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En el terreno espiritual leemos: Fiel es Dios que no os dejar ser tentados ms de lo que podis llevar... (1.a Cor. 10:13). Su obra en nosotros sigue por toda la vida y proseguir hasta el ms all. Y conoceremos y proseguiremos en conocer a Jehov (Oseas 6:3). ...Ahora conozco en parte, entonces conocer como soy conocido... (1.a Cor. 1:13). VI. La mano de Dios debe ser ACEPTADA. Nos ponemos en las manos del mdico. As debemos hacerlo en el terreno espiritual (Santiago 4:10 y Job 34:32). Slo as daremos a Dios la ocasin de manifestar su gloria en nosotros. VII. La mano de Dios es PROTECTORA.
Salmos 91:12 En las manos te llevarn, Para que tu pie no tropiece en piedra.(B)

La diestra que nos ha creado, nos cuida y nos moldea, tambin nos guarda (Juan 10:27-30). Obsrvense en este pasaje dos manos unidas en el mismo: unas invisibles, las otras tangibles; si bien forman parte de un cuerpo glorificado (Juan 20:27). Una razn porque Dios no puede abandonar a los suyos se halla en Isaas 49:16. Lo que era mera hiprbole en cuanto a Israel es realidad en nuestro caso, sus manos horadadas son testimonio perenne de su amor. Cmo podra olvidarnos si le costamos tanto? VIII. Una ltima hiprbole GLORIOSA: Is. 62:2-3. Es una referencia a los gruesos anillos de los monarcas orientales. El pueblo redimido del Seor ser un da como diadema de Reino en la mano de Dios. (Vase Efesios 1:12.) Conclusin o recapitulacin. Somos moldeados hoy por la mano fuerte, sabia, poderosa y delicada de nuestro Creador y Redentor para que podamos venir a ser un da ejemplo y motivo de alabanza,
Mar 1:41 Y Jess, teniendo misericordia de l, extendi la mano y le toc, y le dijo: Quiero, s limpio.

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LA MANO DE DIOS
Salmo 19:1 y Juan 10:27-29

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