ARIZA FRANCISCO - La Clausura de La Logia Masonica
ARIZA FRANCISCO - La Clausura de La Logia Masonica
ARIZA FRANCISCO - La Clausura de La Logia Masonica
FRANCISCO ARIZA
Como ya vimos en el nmero anterior de SYMBOLOS, la apertura de la Logia permite
la "creacin", o mejor, "re-creacin", de un tiempo y un espacio sagrados, un enmarue
protector dentro del cual los masones reali!an sus tra"ajos "a cu"ierto" del mundo
pro#ano $pro#anum% #uera del templo&, ejercitando el 'rte (eal o ")ran O"ra" de la
cosmogon*a+ Y todo ello en per#ecta correspondencia con los "planes del )ran
'ruitecto del ,niverso", a cuya ")loria" y "-om"re" se cumplen precisamente esos
tra"ajos, pues como se lee en el Li"ro Sagrado% "Si el .terno no edi#ica la casa en vano
tra"ajan los ue la edi#ican"+
Cuando /stos llegan a su #in, el Maestro de la Logia, ayudado por los dem0s O#iciales
del 1aller, procede a la clausura de los mismos, a su cierre y recogimiento $clausura, de
"clau", "llave"&, lo ue se 2ace, como todo en la Masoner*a, de manera ritual y
sim"lica+ Con esa clausura o cierre la Logia 2a cumplido su ciclo de mani#estacin,
2a"iendo desarrollado 2asta llegar a sus propios l*mites $se3alados por el tiempo
sim"lico& todas las posi"ilidades en ella contenidas, y la lu!, cuya irradiacin 2a
iluminado esos tra"ajos, se repliega progresivamente en s* misma, retornando as* al
origen o principio de donde "rot+ La 4ala"ra, el 5er"o, el Logos $de donde Logia&, esto
es el Ser, vuelve a concentrarse en el "Silencio" de lo ine#a"le e inmani#estado, siendo
/ste el sentido pro#undo ue tiene el "juramento del silencio" ue todos los miem"ros
del 1aller reali!an antes de a"andonar de#initivamente el 1emplo+
La Logia, imagen sim"lica del Mundo, rituali!a con ese do"le movimiento e6pansivo
$centr*#ugo& de la apertura, y contractivo $centr*peto& de la clausura, la cadencia del
ritmo universal, del e6pir y aspir csmico, pues esta es la Ley o -orma a la ue est0
sujeto todo lo mani#estado, ya se trate de un ser, un mundo o del conjunto entero de la
.6istencia ,niversal+ ' todo nacimiento le sigue un proceso de e6pansin y desarrollo,
alcan!ados los l*mites del cual se inicia un per*odo inverso de contraccin,
replegamiento y #inalmente e6tincin+ ' este respecto, la clausura de la Logia coincide
con la "Medianoc2e en punto", es decir con el "#in del d*a", el cual es en s* un ciclo
completo an0logo a ciclos m0s grandes, en los ue est0 incluido+
.l repliegue de la lu! al ue antes nos re#er*amos, est0 ritualmente representado por el
2ermano .6perto en el momento en ue cierra el Li"ro de la Ley Sagrada y recoge el
comp0s y la escuadra, esto es, las "1res )randes Luces" de la Masoner*a, pasando a
continuacin a "enrollar" o ""orrar" el cuadro de la Logia $ue el mismo .6perto
"desenrolla" o "di"uja" durante la apertura&, llamado as* porue en /l se plasman los
s*m"olos m0s importantes y signi#icativos del grado en ue la Logia est/ tra"ajando% ya
sea en el de aprendi!, en el de compa3ero o en el de maestro+ ' continuacin se procede
a la e6tincin de las "1res 4eue3as Luces" ue alum"ran en la sumidad de los pilares
de la Sa"idur*a, la 7uer!a y la Belle!a, e6tincin ue llevan a ca"o el Maestro de la
Logia y los dos 5igilantes $estrec2amente relacionados con la sim"lica de esos
pilares&, llamados las "1res Luces"+ Conta"ili!amos, por tanto, nueve luces en total, y
esto est0 en relacin con la idea de ciclo, pues el nueve es, como sa"emos, un nmero
c*clico por su directa vinculacin con la circun#erencia, la cual e6presa el desarrollo
completo de lo contenido virtualmente en su punto central, gracias al cual la
circun#erencia misma e6iste+ 's*, las nueve luces ue alum"raron y generaron el espacio
y el tiempo en el ue se desarrollaron los tra"ajos, se concentran, e#ectivamente, en el
centro de donde emanaron+
4or consiguiente, todo lo ue de"*a reali!arse y mani#estarse en la Logia, en el 1aller de
tra"ajo, ya 2a sido cumplido, pero antes de retirarse los o"reros reci"en su "salario",
recogiendo lo ue 2an sem"rado o edi#icado en s* mismos, y ue son los #rutos de su
accin, en de#initiva de su intencin, de lo ue ellos 2an contri"uido, y en u/ medida,
en la reali!acin e#ectiva de los planes del )ran 'ruitecto+ .ste es el sentido ue tiene
el "salario" masnico $o inici0tico&, pala"ra ue deriva de "sal", su"stancia ue en la
'luimia es considerada como la s*ntesis o el #ruto de la accin del a!u#re so"re el
mercurio, es decir el resultado de la unin o conciliacin de una energ*a celeste, activa,
yang, y de una energ*a terrestre, pasiva, yin+ Se trata, en suma, de "conciliar los
opuestos", o de "reunir lo disperso", y ue al igual ue el aluimista el masn de"e
operar en s* mismo, lo ue constituye la principal ra!n de su o#icio+
-o es entonces por casualidad ue los masones reci"an su salario en las columnas 8 y B
$situadas a la entrada y por tanto tam"i/n a la salida de la Logia&, pues ellas sim"oli!an
respectivamente el principio activo y el principio pasivo o receptivo+ Cuando la Logia
tra"aja en grado de aprendi!, el salario se reci"e en la columna B, y cuando lo 2ace en
grado de compa3ero en la columna 8+ '3adiremos ue am"as columnas aluden al
necesario "esta"lecimiento" o "#undamento" ue 2ace posi"le la edi#icacin del 1emplo,
construccin ue en realidad no es otra cosa ue el proceso mismo de la reali!acin
interior
$9&+ Los maestros, en cam"io, reci"en su salario en la "C0mara del Medio", o en
el "centro del c*rculo", pues su #uncin no est0 ligada directamente a esa construccin
$ue es la ue llevan a ca"o los aprendices y compa3eros&, sino a ela"orar sus planos de
acuerdo a los del 'ruitecto o Ser ,niversal, lo ue implica un conocimiento directo
$no mediati!ado& de la cosmogon*a y sus leyes, as* como del orden ontolgico y
meta#*sico
$:&+
4or todo ello, el salario masnico tam"i/n alude a la virtud de la justicia, ya ue cada
uno reci"e en su columna lo ue merece, ue en realidad es lo ue tiene, pues como dice
el .vangelio% "4orue a todo el ue tiene, se le dar0 y le so"rar0; pero al ue no tiene,
aun lo ue tiene se le uitar0" $Mateo :<, :=&, y en donde tam"i/n se a#irma% "ue el ue
tenga o*dos para o*r ue oiga"+ Slo entonces "los o"reros estar0n contentos y
satis#ec2os" y tendr0n "derec2o al descanso", pues la justicia de ue se trata no es otra
ue el re#lejo en el orden 2umano de la ley de euili"rio y armon*a ue rige el orden
csmico, re#lejo a su ve! de la 8usticia divina
$>&+ ?a"iendo reci"ido lo ue les
corresponde, los o"reros podr0n despedirse as* "en la li"ertad, el #ervor y la alegr*a",
pues 2a"r0n cumplido sus acciones, es decir su tra"ajo, en ""ien general de la Orden
$del Orden& y de la Logia en particular"+
4ero ui!0s el rito m0s signi#icativo e importante de la clausura es la "cadena de unin",
constituida por todos los miem"ros del 1aller "enla!ados" unos con otros alrededor de
los tres pilares de la Sa"idur*a, la 7uer!a y la Belle!a y del cuadro de la Logia, es decir
en el centro mismo del 1emplo+ Ciertamente, y como se dice en el ritual, esta cadena es
el s*m"olo de la #raternidad masnica, sin em"argo podr*amos preguntarnos en "ase a
u/ de"e su e6istencia dic2a #raternidad y por u/ se mani#iesta a trav/s de la cadena de
unin, pues sin duda alguna ella e6presa otra cosa "ien distinta a cualuier tipo de
"camarader*a" o cosa por el estilo+ 1al ve! la respuesta est/ en las pala"ras y gestos ue
reali!a el Maestro de la Logia momentos antes de #ormarse dic2a cadena% "?ermanos,
siguiendo la antigua costum"re $tradicin& no ueda m0s ue cerrar nuestros secretos en
lugar seguro y sagrado", y acto seguido lleva su mano derec2a al cora!n, como
indicando ue es a2*, en el cora!n, en el lugar m0s puro y central del ser y en donde
/ste comunica con su verdadera esencia, donde los "secretos" 2an de guardarse y
cerrarse+ Y ya se sa"e ue el cora!n es el ta"ern0culo del verdadero 1emplo, auel ue
segn las .scrituras "no es 2ec2o por mano de 2om"re", pues nada de individual o
particular puede penetrar en /l+ 4or tanto, esos secretos no son slo los ue se re#ieren
espec*#icamente a los de la Orden masnica y la Logia $y ue de"en ser salvaguardados
de las "miradas indiscretas de los pro#anos"&, sino tam"i/n, y podr*amos decir ue ante
todo, a la esencia $o "uinta-esencia"& misma de lo ue se 2a reci"ido de la ense3an!a
tradicional ve2iculada por los s*m"olos y los ritos, de auello ue verdaderamente se 2a
comprendido y asimilado en lo m0s interno de uno mismo de esa ense3an!a, en
de#initiva, de la e#ectiva e *ntima vinculacin ue cada ser mantiene con su 4rincipio
uno y eterno+ .sto ser*a, pues, lo ue "enla!a" o "une" a los 2ermanos entre s*, y por
esto ellos #orman la cadena de unin, ue es la unin con la ,nidad del S* mismo, y con
respecto a la cual las individualidades, por las propias limitaciones a las ue est0n
sujetas, no cuentan en a"soluto+ .n relacin con esto ltimo, ueremos se3alar ue al
comien!o de #ormarse la cadena no est0 completamente cerrada, es decir ue aparece
como "rota", a#irm0ndose ue ello es as* de"ido a "nuestras imper#ecciones" $o
limitaciones&, las ue slo desaparecer0n invocando los nom"res sagrados de la
Sa"idur*a $7e&, la 7uer!a $.speran!a& y la Belle!a $Caridad&
$@&, tras lo cual la cadena
aca"a cerr0ndose de#initivamente
$<&+
Sin em"argo, ue la cadena est/ sin cerrar tam"i/n indica $y au* tenemos un caso del
do"le sentido de los s*m"olos, ue siempre 2ay ue tener presente para poder
comprender sus diversos signi#icados& ue al mismo tiempo ella contina "a"ierta" a
todo auel ue uiera sumarse a ella, estando esto per#ectamente se3alado cuando en un
momento de la ceremonia de iniciacin al ne#ito o recipiendario se le reci"e
precisamente en la cadena de unin+ .sto nos da a entender, entre otras cosas, ue la
cadena contina viva y transmitiendo la ense3an!a y el Conocimiento, en este caso a
trav/s de la cosmogon*a e6presada por los s*m"olos y los ritos masnicos, pues
tradicin signi#ica e6actamente transmisin, y /sta 2a de continuar perpetu0ndose para
ue auella contine e6istiendo y sea una posi"ilidad siempre presente y actual
$A&+ '
ello alude e6presamente el Maestro de la Logia cuando al concluir el rito de la cadena
de unin e6clama% "BCue la Lu! ue 2a iluminado nuestros tra"ajos contine "rillando
en nosotros para ue terminemos #uera la o"ra empe!ada en este 1emploD", imagen,
volvemos a repetir, del Orden y la 'rmon*a ,niversal+
NOTAS
9+ Cueremos se3alar en este sentido, ue la pala"ra "#undamento" era sinnimo de
"5erdad" en algunas lenguas precolom"inas, como la 2a"lada por los antiguos
na2uas me6icanos, la ue tam"i/n esta"a en relacin con el 2ec2o de "estar de pie",
lo cual, curiosamente, tam"i/n guarda una estrec2a relacin con lo ue se entiende
por "columna" en la "Masoner*a"+
:+ Ee m0s est0 decir ue au* nos estamos re#iriendo a una estructura inici0tica ue es
la de la Masoner*a considerada en ella misma como organi!acin esot/rica y
tradicional, prescindiendo de ue esto sea considerado as* en las mltiples
O"ediencias y Logias actuales, en la gran mayor*a de las cuales la idea de una
reali!acin espiritual a trav/s de los s*m"olos y los ritos masnicos es tan
ine6istente como en cualuier organi!acin de tipo pro#ano+ So"re todo esto,
remitimos al lector al interesante estudio titulado "' propsito de la Masoner*a",
aparecido en el -o+ < de SYMBOLOS+
>+ .n este sentido, y para comprender esta sim"lica, 2ay ue tener en cuenta ue las
columnas 8 y B est0n situadas al Occidente de la Logia, al Oeste, el punto cardinal
por donde se oculta el sol $la lu! del d*a&, y ue se corresponde con el euinoccio de
Oto3o en el ciclo anual+ La tradicin jud*a cele"ra al inicio del Oto3o la #iesta del
")ran 4erdn" $la m0s importante junto a la 4ascua, cele"rada al comien!o del
euinoccio de 4rimavera&, periodo durante el cual se implora la justicia de Eios
tanto en el orden individual como social, y ue pre#igura el "8u"ileo" del ciclo
completo de la 2umanidad, pues es en Oto3o donde esta tradicin $en concordancia
con todas las tradiciones& sita el "#in de los tiempos" o el "retorno" al origen
primordial+ Fgualmente, la tradicin cristiana cele"ra en esta estacin la #estividad de
San Miguel $:= de Septiem"re&, el arc0ngel ue imparte la 8usticia divina durante el
"8uicio 7inal", pues /l "pesa" las almas y sita a cada una en el lugar ue le
corresponde dentro del orden universal, tal y como puede verse en la iconogra#*a
cristiana, en los dinteles de muc2as portadas rom0nicas y catedrales gticas+
@+ .stos nom"res o atri"utos divinos aluden directamente al vers*culo "*"lico ue dice
ue Eios todo lo 2i!o $el orden csmico o la o"ra de la Creacin& "en nmero, peso
y medida"+ 5emos pues ue lo ue invocan los masones en la cadena de unin no es
otra cosa ue la potencia o energ*a creadora del )ran 'ruitecto $"o 1odopoderoso
)ran 'ruitecto de los Cielos y la 1ierra"&, y e6presadas como "4ala"ra", "Lu!", y
"5ida"+
<+ 5er, a este respecto, el ltimo cap*tulo de S*m"olo, (ito e Fniciacin, de Siete
Maestros Masones+ .d+ O"elisco, 9==:+
A+ ' este respecto, la cadena de unin se e6tiende no slo a los "masones esparcidos
por toda la super#icie de la 1ierra", sino tam"i/n a todos los 2om"res de 2oy y de
siempre ue 2an cumplido, cumplen y cumplir0n su camino 2acia el Conocimiento,
pasando a ser entonces la cadena de unin masnica un s*m"olo de la cadena "0urea
e inmemorial", esto es de la 1radicin 4erenne y ,niversal+ 1am"i/n ueremos
a3adir ue el nom"re de cadena de unin se le asigna igualmente al cordel con doce
nudos ue rodea por su parte superior las paredes de la Logia, siendo esos doce
nudos una representacin de los doce signos del !od*aco, es decir ue se re#ieren
directamente a la sim"lica celeste y a su re#lejo en el orden terrestre+ So"re todo
esto ver el cap+ LG5 de los S*m"olos 7undamentales de la Ciencia Sagrada, de (+
)u/non+ 1am"i/n el art*culo ".l s*m"olo y el rito masnico de la cadena de unin"
aparecido en el -o+ > de SYMBOLOS+