Extracto Libro "Iglesias de Madrid", Carlos Osorio y Alvaro Benítez, Ed. La Librería
Extracto Libro "Iglesias de Madrid", Carlos Osorio y Alvaro Benítez, Ed. La Librería
Extracto Libro "Iglesias de Madrid", Carlos Osorio y Alvaro Benítez, Ed. La Librería
Ediciones La Librera
15x22,5 cm. 384 pginas. Rstica con solapas.
ISBN: 978-84-9873-262-7
Precio: 23,90
Los grandes estilos de nuestras iglesias son: el Mudjar, el Gtico tardo, un Renacimiento muy
marcado por la lnea herreriana, el importantsimo Barroco madrileo, el Neoclsico y el
Historicista.
El Mudjar
Del Mudjar sealaremos tres obras: La ermita de Santa Mara de la Antigua y las torres de
San Pedro el viejo y San Nicols. El Mudjar (siglos XII-XIV) es un estilo netamente espaol.
Partiendo de la tradicin constructiva rabe, tributaria de las culturas milenarias de
Mesopotamia y Persia, se crea un estilo tan musulmn como hispano, que va a ser enriquecido
con abundantes aportaciones del Romnico, el Gtico y el Renacimiento. Los arquitectos,
albailes, yeseros y azulejeros rabes, que se quedaron aqu despus de la Reconquista y que
fueron conocidos por la posteridad como los mudjares, trabajaron codo con codo con los
cristianos construyendo los nuevos templos.
El Gtico
En Madrid tenemos dos ejemplos del estilo gtico tardo: la Capilla del Obispo y la traza
originaria del templo de Los Jernimos. El gtico, estilo areo y luminoso, libera a la
arquitectura del rigor racional y de la simetra y le otorga vida y espontaneidad. El arco
apuntado y la bveda de crucera permiten la elevacin hacia el cielo de los edificios, cuya
ligereza hace necesaria la sujecin con arbotantes y contrafuertes. El Gtico tardo espaol,
desarrollado en la poca de los Reyes Catlicos, se enriqueci con la decoracin plateresca.
El Renacimiento
El Renacimiento nos lleg un poco tarde, debido a la fuerza que mantuvo en el tiempo el
Gtico tardo. Durante la primera mitad del siglo XVI, se desarrolla el Plateresco, arte que
combina elementos del gtico flamgero o Isabelino con elementos del Mudjar y del
Renacimiento italiano (platerescos son los cenotafios de la Capilla del Obispo)
De las exuberantes filigranas platerescas, pasamos al monumental y a la vez austero estilo
Herreriano (debido a Juan de Herrera, el arquitecto de El Escorial), que se impone en la
segunda mitad del XVI. El sobrio clasicismo escurialense perdura en la primera mitad del XVII
caracterizando algunos aspectos del primer barroco madrileo. Dos conventos renacentistas
herrerianos son La Encarnacin y Las Descalzas Reales.
Adems, existen elementos renacentistas en las iglesias de Vallecas, Viclvaro y otros pueblos
anexionados a Madrid.
El Barroco
Dedicaremos un captulo extenso al arte Barroco por ser Madrid una de las ciudades de
referencia de este estilo. Podramos distinguir entre un primer Barroco, influenciado por la
lnea herreriana de El Escorial, y un Barroco pleno, ms intenso y ornamental, que encuentra
un sello propio en Madrid gracias a nuestros arquitectos Churriguera y Ribera y que tambin
recibe la influencia italiana. El primer Barroco, prefiere la recta a la curva, y lo decorativo a lo
constructivo, poniendo todo el acento en la rica imaginera interior y en los retablos de
madera policromada. En el Madrid del XVII se construan muchos templos y conventos, debido
a la presencia de numerosas rdenes religiosas y a una cierta solvencia de la Iglesia gracias al
diezmo sobre las cosechas y a las rentas inmobiliarias. Pero el dinero no sobraba y en vez de
recurrir a piedras y mrmoles se construa con ladrillo, madera y yeso. En esta lnea se erigen
iglesias como Las Calatravas, San Plcido, San Gins, Las Comendadoras o Las Gngoras.
Excepcionalmente hubo algn templo con vocacin de grandiosidad como la colegiata de San
Isidro, hecha por los Jesuitas, o San Cayetano.
A medida que culmina el XVII, llega el Barroco pleno, que elimina los elementos herrerianos,
tan del gusto de los Austrias, e intensifica la ornamentacin, al gusto de los nuevos Borbones,
con marcadas influencias italianas, caso de Santa Brbara o San Miguel. Se usan ahora los
mrmoles, las grandes columnas y las fachadas con variedad de planos. De esta segunda etapa
es tambin una variante local originalsima, el Barroco Churrigueresco, creado por arquitectos
madrileos.
El Neoclsico
El oratorio del Caballero de Gracia, una parte de La iglesia de San Francisco el Grande y San
Antonio de la Florida o son templos de estilo Neoclsico. Este estilo se desarroll en Madrid
bajo los monarcas borbones Fernando VI, Carlos III, Carlos IV y Fernando VII. El Neoclsico se
inspira en los monumentos de la antigedad grecorromana, buscando la pureza de las lneas
arquitectnicas y la simetra, y queriendo sujetar las proporciones a las leyes de la medida y las
matemticas. Es una reaccin contra los efectos decorativos del barroco y el rococ. Hay un
gusto por la simplicidad, con predominio de lo arquitectnico sobre lo decorativo. Se recurre a
elementos bsicos de la arquitectura clsica: columnas, rdenes drico y jnico, frontones,
bvedas, cpulas, etc.
El Historicismo
El Historicismo arquitectnico, muy prximo al movimiento romntico, se desarrolla durante
todo el siglo XIX y principios del XX. Busca la recuperacin de los estilos arquitectnicos ms
notables de todos los tiempos: Gtico, Renacimiento, Mudjarincorporando las tcnicas
constructivas modernas y dotndolo de las caractersticas culturales de los nuevos tiempos.
Particular significado tuvo el Neogtico, que cuenta con notables ejemplos en Madrid, como la
Catedral de la Almudena o la iglesia de Santa Cruz, y responda a la consideracin del Gtico
como el mejor estilo creado por el hombre.
En Espaa se cre el Neomudjar, expresin de un estilo propio que evidencia la enorme
riqueza arquitectnica que brot del cruce de culturas en nuestro pas.
En el ltimo tercio del XIX y primero del XX hizo fortuna en Madrid un modelo de iglesia con el
exterior neomudjar y el interior neogtico.
El Historicismo se desarrolla en paralelo con el Eclecticismo, que es la mezcla de diferentes
estilos para conformar uno nuevo. Pese a los denuestos que las corrientes funcionalistas
arrojaron sobre el historicismo, la creatividad, la imaginacin y la belleza desplegada por este
movimiento siguen admirando a cuantos caminan por Madrid con los ojos bien abiertos.
El Funcionalismo
Las corrientes funcionalistas y racionalistas del siglo XX fueron impulsadas en buena medida
por la Bauhaus. La creencia de que la forma sigue siempre a la funcin lleva a la eliminacin de
toda ornamentacin artstica. Son sus caractersticas principales la renuncia a la imitacin de lo
antiguo y un tecnicismo estandarizador. Es el reino del acero y el hormign armado. Sin duda
se han producido valiosas aportaciones al arte religioso dentro de estas corrientes, como por
ejemplo la Iglesia de los Dominicos, o la Iglesia Mejicana. No obstante, el radicalismo con que a
veces se han aplicado sus postulados ha podido derivar en un desapego hacia la belleza que
sera importante revisar. La obsesin por la tcnica no debe hacer olvidar que la misin
fundamental del arte es elevar el espritu del ser humano, y esta elevacin nunca podrn
hacerla las gras, por muy altas que sean.
adecuada, pues esta es la forma que tiene ese gran anillo circular. Si el tambor tiene cierta
altura y en vez de tener forma circular es cuadrado u octogonal, se llama cimborrio. El
cimborrio puede estar, o no, rematado por una bveda, y siempre se asienta sobre cuatro
tringulos curvados hacia dentro que se llaman trompas. Frecuentemente, en el punto ms
alto de la cpula se abre una torrecilla cilndrica que deja pasar la luz, y que se conoce como
linterna.
Los machones son cuatro gruesos pilares de base cuadrada que cargan con el peso de la
cpula, Se denominan as porque han de ser muy machos para cargar con tanto peso. Las
pechinas son unos paramentos salientes lisos de forma casi triangular (como un tanga), que se
hallan situadas encima de los machones, y deben apechugar (pechina viene de pecho) con el
peso de la cpula.
Para definir correctamente los lados de la iglesia no solemos hablar de izquierda ni de derecha.
El lado que halla usted a su izquierda segn entra en la iglesia se llama lado del Evangelio, y el
lado derecho es el lado de la Epstola.
ndice:
INTRODUCCIN.
Pero, las iglesias de Madrid tienen verdadero inters? 11
Identificar los estilos arquitectnicos 13
Arquitectura religiosa madrilea 19
La herencia mudjar 21
Ermita de Santa Mara de la Antigua 22
San Pedro el Viejo 26
San Nicols de los Servitas 32
El gtico tardo 37
La capilla del Obispo 38
Los Jernimos 46
El renacimiento 55
La Encarnacin 56
Las Descalzas Reales 64
Iglesias de pueblo dentro de la gran ciudad 70
El barroco 73
El primer barroco madrileo 75
Las Carboneras 78
El Carmen y San Luis 82
Colegiata de San Isidro 88
Iglesia de las Maravillas y de los Santos Justo y Pastor 96
San Antonio de los Portugueses 101
San Plcido 112
San Andrs 116
San Gins 122
Las Mercedarias de Don Juan de Alarcn 128
Capilla del Cristo de los Dolores (San Francisqun) 130
Iglesia del Hospital de la Venerable Orden Tercera 132
Las Gngoras 136
Las Comendadoras 140
Las Trinitarias 142
Iglesia Catedral Castrense 146
San Martn 152
Iglesia del monasterio de Santa Isabel 154
La culminacin del barroco madrileo 155
Las Calatravas 156
San Cayetano 160
Montserrat 162
San Antn 164
San Jos 166
Virgen del Puerto 170
San Marcos 171
La Capilla Real 175
El barroco de los Borbones 177
Iglesia de Santa Brbara 178
Baslica de San Miguel 182
El neoclsico 189
Cmo conseguirlo?
Iglesias de Madrid es el resultado de un intenso trabajo a lo largo de los ltimos cuatro
aos. Hemos tratado de acercar el arte que encierran los templos madrileos, algunos de
ellos casi desconocidos, con un lenguaje comprensible y accesible, clasificndolos por
sus estilos ms representativos y estableciendo unas rutas para visitarlos. Todo ello
ilustrado con las impactantes imgenes de lvaro Bentez. La editorial ha hecho un gran
esfuerzo para que un libro como este, con 381 pginas ilustradas a todo color, haya
podido salir a un precio bastante accesible: 23, 90
El libro est disponible en la editorial:
Ediciones La Librera C/ Mayor, 80, Madrid. Y pronto en cualquier librera
madrilea.
Tambin puede adquirirse por internet.
Y adems, se lo puede facilitar el propio autor.
Carlos Osorio. Correo: [email protected]