Monografia Crisis Economica
Monografia Crisis Economica
Monografia Crisis Economica
TRABAJO MONOGRFICO:
LA CRISIS ECONOMICA
CURSO
DOCENTE
CARRERA
CICLO
:V
INTEGRANTES
AO
: 2015
NDICE
DEDICATORIA.... 03
INTRODUCCIN..04
sus
CONCLUSIONES.................
89
BIBLIOGRAFA.......................................................... 92
DEDICATORIA
INTRODUCCION
En el rea de Economa podemos hablar de recesin cclica, crisis econmica,
depresin. Segn el diccionario de la Real Academia Espaola:
Crisis: Situacin dificultosa o complicada. Escasez, caresta. Momento decisivo
de un negocio grave y de consecuencias importantes.
Recesin: Depresin de las actividades econmicas en general que tiende a ser
pasajera.
Depresin: Periodo de baja actividad econmica general, caracterizado por
desempleo masivo, deflacin, decreciente uso de recursos y bajo nivel de
inversiones.
Todos ellos son trminos que pueden ir desencadenndose uno tras otro y con
consecuencias diferentes y cada vez ms devastadoras, por ello es importante preverlas,
y tomar medidas a tiempo para controlarlas y evitar su expansin tanto en las
consecuencias como en la direccin.
A lo largo de la historia vemos que se dan circunstancias similares en los
comportamientos econmicos, y que desembocan en recesin, crisis o depresin.
Hay dos factores que parecen especialmente interesantes. Uno de ellos es el
comportamiento de la poblacin, en el que se pueden dar periodos de optimismo
desmedido en el que se saltan todas las normas mnimas de comportamiento, por
ejemplo, gastar por encima de sus ingresos, fiebre consumista, fiebre inversora, etc.
El segundo de los factores decisivos son las polticas gubernamentales, ya que la
existencia de una multiplicidad de choques econmicos, como una bajada de la
demanda con una produccin excesiva, pueden conducir a frecuentes fluctuaciones
cclicas. Es la reaccin el Gobierno quien tiene que tomar las adecuadas medidas
econmicas para controlar estas fluctuaciones y que no nos lleven a una crisis
econmica, y posteriormente, a una Gran Depresin. A lo largo de la historia parece
causa comn el que no se prevea y se tomen medidas adecuadas en el momento
oportuno.
Luego, qu importante es la adecuada formacin, preparacin, conocimientos,
organizacin y buena cabeza de los polticos para no incidir siempre por motivos
electorales en una prctica de malas polticas econmicas, que a lo nico que conducen
es al declive progresivo de un pas.
4
La crisis econmica es un problema que da con da afecta en nuestra sociedad que poco
a poco se deteriora en nuestras vidas, hoy tratamos de comprender por qu se da dicha
situacin y no solo eso; sino como solucionarlo y controlarlo.
En nuestro estudio es importante conocer las altas y bajas de nuestro mundo econmico
para as poder analizar y estar a la defensiva de los nuevos problemas que a diario se
dan en nuestro entorno. Algunos ejemplos serian: el incremento en el dlar y como este
afecta en la moneda mexicana y a su vez el incremento de las materias primas que da un
fuerte giro globalmente y principalmente a nuestro pas.
Tambin dentro de esta investigacin veremos cmo problemas antiguos se reflejan hoy
en nuestros das y como ha cambiado la economa en nuestro pas, dando as nuevas
ideas y pensamientos de cmo solucionar dichos problemas en la deflacin e inflacin
que hoy nos rodea.
generar
una
clientela
electoral
satisfecha
en
sectores
9
11
financieros.
Aunque la discusin sobre las causas ltimas de la crisis puede tener cierto
inters, semeja un debate un tanto escolstico, por cuanto para avanzar sera
obligado diferenciar entre causas necesarias y factores coadyuvantes de difcil
segregacin. Est claro que el exceso de ahorro crea un entorno propicio para
el desarrollo de la burbuja inmobiliaria, pero sin el concurso de unas
autoridades dispuestas a torcer la mirada frente a los excesos financieros, el
proceso hubiese adoptado otros perfiles; y, a su vez, esos excesos se hubiesen
visto menos estimulados en un contexto de poltica monetaria menos laxa o de
12
los pases en desarrollo, que sufrieron los efectos de la crisis en ocasiones por
vas distintas a la estrictamente financiera. Los canales ms centrales de
trasmisin de los efectos aparecen en este caso asociados a la aguda
contraccin del comercio internacional, que sufri una cada ms intensa que la
experimentada a comienzos de los aos 30 del pasado siglo. Los flujos
comerciales tuvieron en 2009 una cada en trminos reales algo superior al
10%. Semejante contraccin afect tanto al intercambio de bienes como de
servicios, en particular al turismo, que es una fuente de financiacin relevante
de una parte importante del mundo en desarrollo. Otra va a travs de la que se
trasmitieron los efectos de la crisis es la que deriva del enrarecimiento de las
condiciones de empleo en los mercados laborales de los pases desarrollados.
El incremento muy agudo del desempleo supuso no slo un freno de las
corrientes migratorias activadas durante la dcada previa, sino tambin una
contraccin de las remesas que los emigrantes envan a sus familias. Aunque
los efectos en este mbito han sido muy dispares segn los casos, en todos se
aprecia un retroceso en los flujos de remesas. A estos factores se une la cada
de otras fuentes de financiacin, ms acusadas en el caso de los flujos
privados que en los de naturaleza pblica (incluida la ayuda internacional que
hasta el momento ha sido slo ligeramente afectada por la crisis). En suma, no
ha sido el canal financiero la va preferente de transmisin de los efectos de la
crisis sobre los pases en desarrollo, sino otros canales de conexin
internacional, buena parte de ellos ms cercanos a la economa real.
Ahora bien, no slo fueron distintos los canales de transmisin de la crisis, sino
tambin sus efectos en trminos de evolucin del producto. Aunque las
previsiones han cambiado con el tiempo, las ltimas formuladas por el FMI
15
pueden servir de gua para hacernos un juicio. A nivel agregado cabra decir
que, en esta ocasin, se han visto mucho ms afectados los pases
desarrollados que los emergentes y en desarrollo. Un juicio que confirma la
localizacin del epicentro de la crisis en el sistema financiero occidental
(incluyendo a Japn) y que convierte en fenmeno preferentemente
trasatlntico la burbuja inmobiliaria subyacente. Entre los pases en desarrollo
son los de Asia los menos afectados, cualquiera que sea la subregin que se
considere. Tampoco frica ha sufrido un impacto elevado de la crisis, entre
otras razones por la sostenida demanda de materias primas activada desde
Asia. El efecto de la crisis sobre Amrica Latina ha sido relativamente menor y
se ha canalizado bsicamente a travs de la contraccin del comercio, las
remesas y la inversin privada. Con excepcin de algn pas de la regin
como Mxico, los datos apuntan a una cada del producto concentrada en la
primera mitad de 2009 y una recuperacin rpida posterior, que hace que el
continente presente tasas positivas y elevadas en 2010. Entre las economas
con mercados emergentes y en desarrollo, las regiones que ms han padecido
la crisis han sido las agrupadas en torno a Europa Oriental y CEI (incluyendo
muy especialmente a Rusia), que han sufrido una contraccin del producto en
2009 del 3,6% y 6,5%, respectivamente, y son las que parecen sumarse con
menor vitalidad a la recuperacin de 2010.
El anlisis realizado permite adelantar un juicio acerca de los factores que
otorgaron mayor severidad a los efectos de la crisis. Visto en conjunto, tres
factores parecen haber sido decisivos para amplificar las secuelas de la crisis:
(1) el grado de contagio de activos txicos adquirido por los sistemas
financieros nacionales y la capacidad que esos sistemas tuvieron para depurar
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crisis con notables desequilibrios previos de sus economas, que les obligaban
a depender acusadamente de la financiacin internacional. En este caso, el
efecto de la crisis se vio amplificado, acentundose como consecuencia del
ajuste los sntomas de la recesin.
La cada del empleo ha sido una de las manifestaciones socialmente ms
dolorosas de la crisis. Entre 1997 y 1999, todos los pases desarrollados, con la
excepcin de Polonia y Alemania, experimentaron un incremento en la tasa de
desempleo. En algunos casos Espaa, EEUU, Estonia, Irlanda e Islandia la
tasa se duplic en apenas dos aos y hay siete de la OCDE en los que la tasa
desempleo haba superado los dos dgitos en 2009. La experiencia revela que
el mercado laboral tiende a ser ms inercial que el PIB en las fases de
recuperacin, de tal manera que sigue con rezago en algunos casos, con
bastante rezago el inicial crecimiento del producto. La crisis ha abierto, por
tanto, para una parte de los pases de la OCDE una etapa de severos
problemas laborales. De nuevo, Espaa es un ejemplo. Dado que el desempleo
es una de las variables que ms inciden sobre la opinin ciudadana, para
muchos la crisis se presentar como un episodio de duracin prolongada, ms
all de que se hayan recuperado las tasas positivas de evolucin del PIB en
sus respectivas economas.
Cmo salimos de sta?
Desde su origen y hasta la actualidad, la crisis ha pasado por muy diversas
etapas, demandando de los gobiernos respuestas cambiantes. La primera
etapa estuvo asociada a los problemas en los mercados financieros que se
derivan de la desvalorizacin de activos asociados al mercado inmobiliario y a
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asimetra con que los gobiernos reparten los costes de las crisis. No cabe duda
que este sentimiento cre una corriente de desencanto en el seno de la
ciudadana, que tuvo su traduccin en la cada de la popularidad de los lderes
polticos al frente de los gobiernos.
Pese a la reaccin de las autoridades, lo cierto es que el efecto de la crisis
financiera se traslad de forma inmediata a la economa real, en forma de una
recesin aguda, que condujo las tasas de crecimiento de buena parte de las
economas del planeta con algunas excepciones a signos negativos en la
primera mitad del 2009, incrementando el desempleo de forma acelerada. De
nuevo, las autoridades reaccionaron con medidas excepcionales de estmulo
de la demanda, a travs del apoyo al consumo, del respaldo a sectores
estratgicos o de la reduccin de los impuestos. Esta reaccin la tuvieron no
slo las economas desarrolladas, sino tambin alguna de las consideradas en
desarrollo, que igualmente activaron la demanda para atenuar la cada de la
actividad econmica. Un ejemplo de este proceder lo proporciona China, que
se sum a las polticas de contencin de la crisis a travs de un masivo
paquete fiscal. Para muchos fue el renacer de la terapia keynesiana, tratando
los poderes pblicos de estimular la capacidad de gasto que los agentes
privados no estaban en condiciones de promover. Estas medidas condujeron a
las economas occidentales a agigantados dficit pblicos, que han superado
todo tipo de registros histricos previos. Lo cierto es que slo una parte de esos
dficit son debidos a los paquetes fiscales aludidos: en una buena medida el
incremento del dficit fue la consecuencia de la aguda cada de los ingresos
fiscales derivados de la recesin y del incremento de los gastos motivados
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reduccin de las demandas recprocas. Por ello, hay muchos que piensan que
las medidas que ahora se estn adoptando no harn sino prolongar la
depresin y alejar la recuperacin econmica.
DeLong (2010) lo sealaba de una manera irnica contraponiendo los
diagnsticos sobre la crisis con las seales que emanan del mercado. Como
este autor sugiere, no parece que la crisis y el desempleo respondan a un
problema estructural, por la va de la oferta, sino a un problema de cada aguda
de la demanda. El hecho de que coexista el desempleo con bajas tasas de
inflacin confirma este juicio, al tiempo que apunta a que ms all de reformas
que se puedan realizar en mercados laborales excesivamente rgidos o
segmentados (como el espaol), la solucin est ms bien en el estmulo de la
demanda (y no en su contraccin). Al tiempo, no parece que las presiones
sobre las condiciones de la deuda soberana se deban en muchas economas a
una sobreabundante deuda pblica ofrecida por los gobiernos, sino a los
excesivos niveles de deuda solicitada por los sectores privados como refugio
seguro a sus ahorros. Si la primera fuera la situacin efectiva, lo que se
esperara es una cada de los precios y unos crecientes tipos de inters en
cada nueva emisin; y lo que se observa es justamente lo contrario, precios
altos y bajos tipos de inters, lo que respalda la segunda de las
interpretaciones.
Lo
que
sugerira
que
existen
mrgenes
para
el
27
33
CAPITULO II
LA CRISIS GLOBAL Y SUS IMPLICACIONES PARA AMRICA LATINA
La crisis financiera internacional que se desat tras la cada de Lehman
Brothers marc un antes y un despus en la economa global. La crisis apart a
la economa mundial del sendero de alto crecimiento que vena transitando
para colocarla de manera abrupta en un sendero cuyas caractersticas
distintivas son los desbalances sistmicos y la incertidumbre monetaria y
financiera. Cuando se echa una mirada a las cifras, el efecto impacto de la
crisis no deja de sorprender. Hasta la crisis el desempeo era envidiable: con
una tasa de expansin anual mayor en un punto y medio al registro de dcadas
anteriores, la magia del inters compuesto hizo que la economa global se
expandiera bien por encima del patrn histrico: mientras en el perodo 20002008 el PIB mundial creci un 50%, en los 80 y los 90 lo haba hecho entre un
25% y un 30%. Despus del colapso de los mercados financieros de alto riesgo
en EEUU a fines de 2008, en cambio, la economa mundial se contrajo casi un
1% en 2009.
La evolucin de Amrica Latina no fue ajena a estos vaivenes. Entre 2003 y
2008 el producto por habitante se expandi de manera sistemtica en todos los
aos y a una tasa promedio del 4% anual. De la mano de este fuerte
crecimiento, la regin estuvo en condiciones de retomar el proceso de
convergencia con las economas avanzadas que se haba revertido desde la
crisis de la deuda de 1982. Una caracterstica remarcable fue que la expansin
fue bastante generalizada. Por ejemplo, todos los pases de Amrica Latina y el
Caribe registraron un crecimiento positivo en el bienio 2007-2008. Habra que
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40
sentido de que el desempeo relativo en Asia fue mejor durante la crisis, tanto
para los que les fue bien como para los que les fue mal.
La
dinmica
de
crecimiento
latinoamericana
tambin
muestra
50
52
otras dos del Sur (Argentina y Venezuela) registraban salidas de capitales con
anterioridad a la crisis internacional.
Si bien estos hechos se observan tanto en la regin LAN como en la LAS, la
reversin es ms pronunciada en Amrica del Sur. Mientras en esta ltima
regin la reversin hace que los flujos netos de capital se tornen negativos, no
ocurre lo mismo en el grupo LAN. Lo que s es cierto, no obstante, es que la
reversin es bastante generalizada. El alcance regional del fenmeno es similar
a los acontecimientos de los noventa (aunque no comparable a los 80). La
ocurrencia de sudden stops en varias economas, que muestra la proporcin de
economas sufriendo el fenmeno en cada subregin.
Vulnerabilidad macroeconmica
Un shock macroeconmico de magnitud y caractersticas dados puede tener
una incidencia muy diferente dependiendo del grado de vulnerabilidad de la
economa que lo recibe. Por lo tanto, tan importante como caracterizar los
shocks es evaluar los factores de riesgo que actan como determinantes del
grado de vulnerabilidad (Edwards, 2007; CEPAL, 2008; Ocampo, 2009). En el
caso especfico de los shocks externos, las investigaciones indican que la
vulnerabilidad se relaciona con un conjunto de indicadores relativos al frente
fiscal, el externo y el financiero (CEPAL, 2008). En lnea con esto, pasaremos
revista de una serie de indicadores regionales que se asocian con la
vulnerabilidad. Tomaremos, por supuesto, el perodo previo a la ocurrencia de
los shocks externos ya que la vulnerabilidad debe ser evaluada en trminos ex
ante.
53
implementaron
medidas
de
blindaje
contra
shocks
asimetras. De aqu que hay que tener en cuenta que las dos economas ms
grandes de la regin tienen niveles de exposicin externa algo ms altos que el
promedio. Mxico, por ejemplo, ostentaba una posicin de deuda neta por 25%
del PIB al inicio de la crisis y Brasil tambin era deudor neto a pesar de la
fuerte acumulacin de reservas. En ambos casos, buena parte del
endeudamiento neto proviene no del sector pblico como en las crisis de los
noventa, sino de las hojas de balance del sector privado.
En lo que respecta a los indicadores de vulnerabilidad basados en flujos, la
evidencia sobre la trayectoria de la balanza comercial muestra un cuadro
similar al stock de deuda neta: las mejoras son sensibles en Amrica del Sur,
pero no as en la regin LAN. Para los pases centroamericanos, ello no es otra
cosa que la contracara de la anemia exportadora y la excesiva dependencia de
las remesas provenientes de EEUU. Pero tambin es el caso de una economa
grande como Mxico, cuyo volumen de exportaciones creci un magro 3% al
ao en el perodo de bonanza 2003-2007.
En suma, juzgados de manera global, los indicadores de fragilidad revelan que,
al igual que en el caso de los indicadores fiscales, la vulnerabilidad externa de
la regin evolucion positivamente en el perodo inmediato anterior a la crisis,
aunque las heterogeneidades existen y deben ser tenidas en cuenta; mientras
la regin LAN no logr reducciones sensibles en el frente externo, las mayores
potencias regionales presentan una situacin algo ms vulnerable.
Pasemos, por ltimo, a analizar los cambios en la vulnerabilidad asociados con
la intermediacin financiera domstica. Al evaluar este punto hay que tomar en
cuenta que la regin presenta sistemas financieros poco profundos, que tienen
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un nivel de desarrollo menor que el que cabra esperar en funcin del PIB per
cpita (Torre et al., 2007). Ms all de lo que muestran indicadores
cuantitativos
como
M2/PIB
crdito
privado/PIB,
hay caractersticas
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60
CAPITULO III
REFLEXIONES FINALES Y PERSPECTIVAS
Hay tres puntos que nos gustara resaltar a modo de conclusin de los anlisis
que hemos realizado en el trabajo:
(1) Los shocks y episodios de inestabilidad asociados con la crisis subprime indican que Amrica Latina sigue siendo muy dependiente de la
evolucin de la economa global. Si bien los shocks y el contagio
afectaron a la regin en menor medida que en los 80 y los 90, los
efectos no dejaron de ser muy significativos.
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un
papel central
y que el
peso
de
la deuda
disminuy
operandi
capacidad
de
respuesta
de
una
cierta
realidad
enfrentan
tambin
una
crisis
de
legitimidad
de
efectiva
en
polticas
globales,
adolecen
de
una
cierta
crisis
de
en materia de agenda social, que requeriran una accin mas efectiva por parte
de los organismos multilaterales, ha sido tambin de alcance ms bien
declaratorio que real. En definitiva, es necesario incluir en la agenda de los G20 este bsico problema de gobernanza, referido a la construccin de su propia
institucionalidad y al peso efectivo de sus decisiones en el contexto mundial,
especficamente en cuanto a los organismos multilaterales.
Sobre la crisis y sus causas
Se ha apuntado a que las fallas en la regulacin y supervisin del sistema
financiero conjuntamente con una dbil gestin de las expectativas expusieron
debilidades fundamentales del sistema financiero en varios pases industriales,
particularmente EEUU. En efecto, el sector financiero protagoniz una rpida
expansin del crdito con clientes cada vez ms arriesgados y en ausencia de
respaldos (securitizacin) adecuada. La expansin del crdito fue, en gran
medida, producto del incentivo otorgado por la poltica pblica vigente basado
en un discurso poltico exitista y alejado de la realidad econmica,
especficamente destinado a obtener resultados electorales. Por lo mismo, hay
aqu un crucial tema de gobernanza que el G-20 ha reconocido como el factor
fundamental de la crisis, como tambin tiende a ser el consenso entre la
profesin econmica (G-20, 2009; Taylor, 2008). La dbil supervisin y
regulacin sobre un crdito que se expanda a velocidades y montos
insostenibles slo era parte de un modelo poltico basado en propiciar altas
expectativas sobre el ritmo de la economa. As, EEUU cay en una crisis
financiera significativa que tuvo como virtual cmplice al propio gobierno en sus
sucesivas administraciones puesto que, al fin y al cabo, resultaba muy costoso
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colectiva de los pases del G-20 es la fortaleza que debe explotarse en materia
de consistencia de polticas.
En particular, estos pases han acordado en la ltima reunin de Toronto:
(a) Insistir en una poltica basada en el estmulo fiscal, restringida por el
principio de equilibrio fiscal y monitoreando la sostenibilidad de la
expansin de la demanda privada para no llevar a distorsiones de
precios, objetivo este ltimo que ha de ser garantizado por una
adecuada poltica monetaria.
(b) Fortalecer una red de proteccin social y profundizar en la reforma de la
gobernanza corporativa, como tambin en el desarrollo del mercado
financiero, en la inversin en infraestructura y en una mayor flexibilidad
cambiaria en las economas emergentes.
(c) Comprometerse en perseguir una reforma estructural en materia
financiera en el caso de sus pases miembros para as aumentar y
sostener las perspectivas de crecimiento.
(d) Estrechar la brecha de desarrollo econmico existente considerando la
accin que sus polticas tienen en los pases de menores ingresos.
Aun tomando en cuenta la complejidad de esta amplia agenda de trabajo, los
G-20 reconocen que las medidas necesitan ser ajustadas a las condiciones
individuales de cada pas y que un sistema de monitoreo podr ser importante
para diagnosticar la marcha de las reformas y definir sus segundas instancias.
En todo caso, las definiciones que se han planteado se mantienen a un nivel de
excesivo generalismo. Por ejemplo, no se especifica el tipo de reforma
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79
80
Poltica macroeconmica
En el campo macroeconmico y de la economa global, se contemplan seis
compromisos relativos a la necesidad de efectuar ajustes fiscales para
restaurar el crecimiento, como en cuanto a sostener polticas monetarias
expansivas consistentes con la estabilidad de precios y a lograr el
establecimiento de criterios en materia de poltica fiscal de largo plazo y a la
definicin de un plataforma de polticas destinadas a restaurar el crecimiento
global. En esto ltimo se ha sealado explcitamente la necesidad de contar
con el apoyo del FMI y el Banco Mundial especialmente por medio del
mejoramiento del sistema de apoyo a la red social en los pases. Tambin se
contempla en estos acuerdos la necesidad de conducir las polticas
econmicas en los pases industriales considerando el efecto que las mismas
desatan en otras economas, como tambin en orden a restringir las
devaluaciones competitivas y promover un sistema financiero y monetario
internacional que funcione adecuadamente en el contexto de una gobernanza
econmica global. Agrega a esto el acuerdo de Londres en orden a alcanzar un
nuevo consenso global para promover una actividad econmica sostenible.
En cuanto a los avances reportados en esta materia, se describen acciones
orientadas
cumplir
con
los
objetivos
declarados,
tales
como
la
84
de
cooperacin
internacional
que,
sin
embargo,
se
restringe
adecuadamente)
en
el
caso
de
estos
pases
no
logra
conformar
CONCLUSIONES
90
93
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