Editor
de la serie
James R. Krabill
La inmigración y la Biblia
M. Daniel Carroll R.
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Explorando la obra de Dios en el mundo
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Número 19
RedMennonita
de Misión
La agencia de misión de la Iglesia Menonita USA
Missio
Dei
Missio Dei
es una publicación de la Red Menonita de Misión que invita a la reflexión y al diálogo acerca de la misión de Dios en el mundo de hoy.
Algunos artículos de esta serie enfocan principalmente los fundamentos
bíblicos y teológicos de la tarea de la misión. Otros presentan estudios de casos o historias de intentos de personas por ser fieles al llamado de Cristo. Las perspectivas ofrecidas reflejan la pasión y el compromiso de la agencia:
declarar en palabra y demostrar en la vida el evangelio integral de Jesucristo,
“al otro lado de la calle, en el mercado y alrededor del mundo”. Director Ejecutivo:Stanley W. GreenEditor:James R. KrabillResponsable de Contenido:Karen Hallis RitchieDiseño:Rebeka MoeljonoEditora Consultiva:Paula KilloughProducción:Brenda Hessraducción:Milka RindzinskiDiagramación:Alexander Naula
Derechos de Autor © 2010 Red Menonita de Misión, PO Box 370, Elkhart,
IN 46515-0370.
La Inmigración y la Biblia
, M. Daniel Carroll R.
La Red Menonita de Misión, agencia de misión de la Iglesia Menonita USA,
existe para guiar, movilizar y equipar a la iglesia para su participación en el
testimonio integral de Jesucristo en un mundo quebrantado. Con oficinas en
Elkhart, Ind.; Newton, Kan.; y Harrisonburg, Va.; la Red de Misión apoya ministerios en más de 55 países y 31 estados de los Estados Unidos.La Red de Misión está comprometida en su carácter de agencia, a proveer recursos relevantes para la iglesia. Missio Dei es uno de estos recursos, que invita a reflexionar y conversar sobre la misión de Dios en contextos del siglo 21. Es ofrecido gratis a casi 1,000 pastores y líderes laicos suscritos. Más copias pueden ser adquiridas por $3.95 cada una, o $2.05 por canti-dades de 100 o más. ISBN 1-933845-25-2
Los materiales que aparecen en
Missio Dei
no pueden ser impresos o
reproducidos de cualquier otra manera sin permiso escrito.
Impreso en los Estados Unidos de América.
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La inmigración y la Biblia
M. Daniel Carroll R.
Hoy en día millones de personas de todo el mundo están
en movimiento. La migración ha sido una realidad a través
de la historia, pero la enorme cantidad de personas que
migran en busca de una nueva vida no tiene precedentes.
Muchas son las razones. Situaciones desesperadas
pueden hacer que la gente tenga que dejar sus hogares—
desplazamiento por causa de guerra, persecución política
o racial, desastres naturales, dificultades económicas
locales, o presiones de la economía mundial. El atractivo de las historias que llegan de enriquecimiento inmediato
y de vida más cómoda también incita a los individuos a
abandonar su lugar de origen. Algunos se ven forzados a partir aun corriendo riesgos, mientras que otros son capaces de encontrar un camino seguro. Cada historia es única, y la variedad de experiencias es infinita.
Vivimos en un mundo de gente “en movimiento”
La manera de referirse a estas personas refleja sus circunstancias. El
término “refugiado”, por ejemplo, se aplica a aquellos que se han visto
forzados a emigrar y buscar asilo en otra tierra, ya sea por sus propios
medios o por la intervención de agencias internacionales, como el Alto
Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Estas agencias trabajan con determinados países y organizaciones
locales para reubicar a las víctimas del sufrimiento ocasionado por
adversas circunstancias.
En contraste, se llama “inmigrantes” a individuos que han salido de
sus países de origen por decisión propia. Buscan residencia de corto o
largo plazo en otro lugar y cruzan fronteras de acuerdo con protocolos
establecidos en los puertos de entrada, y si eso no es posible, intentan entrar ilegalmente. Una tercera y última categoría es la de “personas
Gente en movimiento.
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desplazadas internamente”. Son aquellas que migran por las mismas
razones que los refugiados o inmigrantes, pero que permanecen dentro
de sus fronteras nacionales. El inmenso fenómeno demográfico actual de “gente en movi-miento” tiene repercusiones a todos los niveles en todos los países. Para
las comunidades cuyos miembros emigran, esa pérdida puede tener
como resultado la disminución de mano de obra, la fuga de cerebros, y la interrupción de la vida familiar. Para las comunidades que reciben
inmigrantes, la afluencia de recién llegados ocasiona pre-
siones imprevistas en mercados de trabajo, instituciones educacionales, centros de salud, y el cumplimiento de las leyes. Idiomas y expresiones culturales diferentes van
contra la corriente de identidades culturales ya estab-lecidas, lo que a su vez puede despertar sentimientos
etnocéntricos contra los forasteros.
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Al mismo tiempo, aquellos que acaban de llegar enfrentan una cantidad de difíciles desafíos. Luchan con su propia identidad y autoestima al tratar de sobrevivir económicamente e integrarse en un medio extraño.Los inmigrantes traen sus propias religiones, cristianas o de otras confesiones. En los Estados Unidos, millones de inmigrantes latinos tienen trasfondo católico o de alguna tradición protestante. Miles de iglesias inmigrantes de raíces latinoamericanas, africanas y asiáticas se
están estableciendo en los 50 estados. Cada una de las denominaciones más grandes está tratando de alcanzar a estos grupos, y la iglesia católica está experimentando un aumento de asistencia. Musulmanes, budistas,
hindúes y adherentes de otras confesiones que también llegan están haciendo un impacto.Sectores de los medios nacionales y locales pueden reaccionar en
forma bastante negativa hacia la gente que viene de otras tierras. ¿Cómo
van a responder los cristianos ante tal variedad de realidades descon-
certantes? ¿Dónde pueden hallar consejo las personas que confiesan seguir a Jesucristo para enfrentar el fenómeno de la inmigración? Este
pequeño libro afirma que los cristianos deben actuar a conciencia
como
cristianos
en cuanto a la inmigración, y que la
Biblia
debe ser su recurso
fundamental. Para expresarlo de otra manera, nuestras conversaciones
acerca de la inmigración deberían reflejar nuestra fe, tanto en tono
como en contenido. Los cristianos deben estar preparados para ofrecer
al debate nacional general una perspectiva cristiana bien informada. Y el lugar donde empezar es la Biblia. ¿iene la Biblia algo que decir sobre inmigración? ¡Por cierto que lo tiene!
La inmigración trae personas de diferentes expresiones culturales.