Ley Dominical
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INTRODUCCIN . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2
INTRODUCCIN
del pueblo y a los legisladores tratar de asegurarse el favor pblico doblegndose a las
exigencias populares por una ley que imponga la observancia del domingo.- CS 635-
636, 650 (1911). EUD 132
La cuestin del da de reposo ser el tema de disputa en el gran conflicto en que
todo el mundo tendr una parte. [Se cita Apoc. 13:4-8, 10.] Todo el captulo es una
revelacin de lo que con seguridad habr de suceder [se cita Apoc. 13: 11, 15-17]
(MS 88, 1897). E. de White, Comentario Bblico Adventista, t. 7, p. 990.
17 y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre
de la bestia, o el nmero de su nombre.
18 Aqu hay sabidura. El que tiene entendimiento, cuente el nmero de la bestia, pues
es nmero de hombre. Y su nmero es seiscientos sesenta y seis.
Sern desatados los cuatro ngeles del Eufrates (ro de Babilonia) (ver
estudio sobre las trompetas; pdalo si no lo ha recibido an).
Apoc 9: 12-15:
12 El primer ay pas; he aqu, vienen an dos ayes despus de esto.
13 El sexto ngel toc la trompeta, y o una voz de entre los cuatro cuernos del altar de
oro que estaba delante de Dios,
14 diciendo al sexto ngel que tena la trompeta: Desata a los cuatro ngeles que estn
atados junto al gran ro Eufrates.
15 Y fueron desatados los cuatro ngeles que estaban preparados para la hora, da, mes y
ao, a fin de matar a la tercera parte de los hombres.
Los pocos que quieran seguir guardando el sbado sern odiados por todo
el mundo.
Una vez que el sbado llegue a ser el punto especial de controversia en toda la
cristiandad y las autoridades religiosas y civiles se unan para imponer la observancia del
domingo, la negativa persistente, por parte de una pequea minora, de ceder a la
exigencia popular, la convertir en objeto de execracin universal.- CS 673 (1911).
EUD, p. 141.
suplir la falta. Para obtener popularidad y apoyo, los legisladores cedern a la demanda
de una ley dominical. Los que temen a Dios no pueden aceptar una institucin que viola
los preceptos del Declogo. Sobre este campo de batalla se produce el ltimo gran
conflicto de la controversia entre la verdad y el error. Y no se nos deja en duda en
cuanto al resultado. Ahora, como en los das de Mardoqueo, el Seor vindicar su
verdad y su pueblo. 2JT p. 150.
c. La IASD se unir con los poderes del mundo para colocar la marca de la
bestia sobre los hijos de Dios, y procurar obligarlos a renunciar a su fidelidad a la
ley de Dios:
La Iglesia apostatada se unir con los poderes del mundo y el infierno para
colocar en la frente o en la mano, la marca de la bestia, y prevalecer sobre los hijos de
Dios para hacer que adoren a la bestia y a su imagen. Procurar obligarlos a renunciar
a su fidelidad a la ley de Dios y a que rindan homenaje al papado. Vendrn tiempos
que pondrn a prueba las almas de los seres humanos, porque la confederacin apstata
exigir que los sbditos leales a Dios renuncien a la ley de Jehov, y repudien la verdad
de su Palabra. Entonces el oro ser separado de la escoria, y ser evidente quines son
los piadosos, quines son los leales y fieles, y quines son los desleales, la escoria y el
oropel. Qu nubes de paja sern aventadas entonces por el ventilador de Dios! Adonde
ahora nuestros ojos ven solo montones de trigo limpio, habr paja que ser aventada por
el ventilador de Dios. Todo aquel que no est centrado en Cristo fracasar en la dura
prueba de ese da. Mientras los que estn vestidos con la justicia de Cristo permanecern
11
firmes a la verdad y el deber, aquellos que han confiado en su propia justicia se alistarn
bajo la bandera negra del prncipe de las tinieblas. R & H, 8 de Noviembre de 1892.
(D. Mansell, El perfil de la crisis venidera, p.132)
Por eso el consejo inspirado es salir de las ciudades ANTES de ese da:
El partido del domingo se est fortaleciendo en sus pretensiones falsas, y esto
significar opresin para los que decidan guardar el sbado del Seor. Debemos
ubicarnos en un lugar donde podamos cumplir plenamente con el mandamiento del
sbado. El Seor declara: "Seis das trabajars, y hars toda tu obra; mas el sptimo da
es reposo para Jehov tu Dios; no hagas en l obra alguna" (Exo. 20: 9, 10). Y debemos
tener cuidado de no colocarnos en un lugar donde ser difcil para nosotros y nuestros
hijos observar el sbado.
Si en la providencia de Dios podemos conseguir lugares lejos de las ciudades,
el Seor quiere que lo hagamos. Nos esperan tiempos difciles (Manuscrito 99, 1908).
Cuando el poder con el que se inviste a los reyes es aliado de lo bueno, ello se debe a
que el que lleva la responsabilidad est bajo la influencia divina. Cuando el poder est
aliado con la maldad, est ligado con los instrumentos satnicos, y obrar para destruir a
los que son propiedad del Seor. El mundo protestante ha establecido un da de reposo
idoltrico en el lugar donde debera estar el sbado de Dios, y va en pos de las pisadas
del papado. Por esta razn veo la necesidad de que las familias del pueblo de Dios se
trasladen fuera de las ciudades, a lugares apartados del campo, donde puedan cultivar la
tierra y cosechar los productos que ellas mismas siembren. De este modo podrn criar a
sus hijos con hbitos sencillos y saludables. Veo la necesidad de apresurarse a fin de
tener todas las cosas dispuestas para la crisis (Carta 90, 1897). Mensajes Selectos,
13
tomo 2, p. 412.
Antes que el azote venga como avenida de aguas sobre los habitantes de la
tierra, el Seor exhorta a todos los que son israelitas de verdad a prepararse para aquel
suceso. A los padres hace llegar este grito de alarma: Juntad a vuestros hijos en vuestros
hogares; separadlos de aquellos que desprecian los mandamientos de Dios, que ensean
y practican lo malo. Salid de las grandes ciudades tan pronto como os sea posible.
Joyas de los Testimonios, tomo 2, pg. 454
dificultad. Consagrad el domingo al Seor para la obra misionera. Llevad los alumnos
afuera, para celebrar reuniones en diferentes lugares y hacer trabajo mdico-misionero.
Encontrarn la gente en casa, y tendrn as una magnfica ocasin de presentar la
verdad. Esta manera de emplear el domingo es siempre agradable al Seor."
Ensead a nuestros miembros a conformarse, en todas las cosas, a las leyes del
estado cuando puedan hacerlo sin entrar en conflicto con la ley de Dios. (Testimonios
Selectos, tomo 5, pp. 277 282)
El mensaje del tercer ngel est adquiriendo las proporciones del fuerte clamor y
no debis sentiros con libertad de descuidar el deber actual y aun albergar la idea de que
en algn tiempo futuro seris los recipientes de una gran bendicin, cuando ocurra un
maravilloso reavivamiento sin ningn esfuerzo de vuestra parte... Habis de tener hoy
vuestro vaso purificado, para que est listo para el roco celestial, listo para los
aguaceros de la lluvia tarda; pues la lluvia tarda vendr, y la bendicin de Dios llenar
toda alma que est purificada de toda contaminacin. Es nuestra obra hoy en da rendir
nuestras almas a Cristo, para que estemos preparados para el tiempo del refrigerio de la
presencia del Seor: preparados para el bautismo del Espritu Santo. . . (El
Evangelismo, pp. 508, 509)
Vi que nadie podr participar del "refrigerio" a menos que haya vencido todas las
tentaciones y triunfado del orgullo, el egosmo, el amor al mundo y toda palabra y obras
malas. Por lo tanto, debemos acercarnos ms y ms al Seor y buscar anhelosamente
la preparacin necesaria que nos habilite para permanecer firmes en la batalla, en el
da del Seor.- PE 71 (1851).
Nos toca a nosotros remediar los defectos de nuestro carcter, limpiar el templo
del alma de toda contaminacin. Entonces la lluvia tarda caer sobre nosotros como
cay la lluvia temprana sobre los discpulos en el da de Pentecosts.-2JT 69 (1882).
No hay nada que Satans tema tanto como que el pueblo de Dios despeje el
camino quitando todo impedimento, de modo que el Seor pueda derramar su Espritu
sobre una iglesia decada y una congregacin impenitente... Cada tentacin, cada
influencia opositora, ya sea manifiesta o secreta, puede ser resistida con xito, "no con
ejrcito, ni con fuerza, sino con mi Espritu, ha dicho Jehov de los ejrcitos" (Zac. 4:
6).-1MS 144-145 (1887).
Vendr la lluvia tarda y la bendicin de Dios llenar cada alma que est
purificada de toda contaminacin. Nuestra obra hoy es rendir nuestra alma a Cristo para
que podamos ser hechos idneos para el tiempo del refrigerio de la presencia del Seor:
idneos para el bautismo del Espritu Santo.-1MS 223 (1892). EUD, pp. 196, 197.
Cuando realmente se desate la tormenta de la persecucin sobre nosotros las
verdaderas ovejas oirn la voz del verdadero pastor. Se realizarn esfuerzos abnegados
para salvar a los perdidos, y muchos que se han descarriado del redil volvern de nuevo
a seguir al gran Pastor. Los hijos de Dios avanzarn juntos y presentarn al enemigo
una frente unido. . . El amor de Cristo, el amor de nuestros hermanos, testificar ante el
mundo de que hemos estado con Jess y hemos aprendido de l. Entonces el mensaje
del tercer ngel se acrecentar hasta llegar a ser un fuerte pregn, y toda la tierra ser
iluminada con la gloria del Seor. (Testimonies, tomo 6, pg. 401. Ao 1900). El
Evangelismo, pp. 502, 503.
Que el Seor te ayude poderosamente en la prueba que vendr sobre todo el pueblo
de Dios. Amn