Introducción Al Derecho - Jaime Cárdenas Gracia
Introducción Al Derecho - Jaime Cárdenas Gracia
Introducción Al Derecho - Jaime Cárdenas Gracia
Introduccin
entender posteriormente el contendido de cual- del sistema constitucional mexicano, el
quier rea de la dogmtica jurdica (el derecho civil, anlisis comparado del derecho latino-
americano y asuntos electorales.
mercantil, penal, internacional, social, etctera) y de
www.nostraediciones.com www.juridicas.unam.mx
Impreso en Mxico
Mxico | Espaa
Introduccin 15
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Presentacin
Introduccin
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Los propsitos de una Introduccin al estudio del derecho son los siguientes:
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7) Indicar que las normas jurdicas son diferentes a las morales, reli-
giosas y a los convencionalismos sociales.
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Captulo primero
Ser humano, sociedad y cultura
I. Ser humano
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II. Sociedad
Puede ser que hoy usted se haya contenido de ejercitar su agradable voz bajo
la ducha, recordando que vecinos con poca sensibilidad artstica podran hacer
valer ciertas ordenanzas contra los ruidos molestos; seguramente usted se ha-
br vestido al salir de su casa, porque entre otras razones, usted sabe bien que
hay regulaciones jurdicas que desalientan una excesiva ligereza en el vestir;
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Esos ejemplos y otros constatan que todas y cada una de las etapas por las
que pasa la vida de una persona: nacimiento, nombre, mayora de edad,
matrimonio, divorcio, jubilacin, muerte, son hechos o actos regulados mi-
nuciosamente por el derecho y a los que se asignan consecuencias jurdicas.
La omnipresencia del derecho no slo se advierte en hechos o actos im-
portantes sino en hechos o actos simples y cotidianos como el de respetar
los semforos que regulan el trnsito de las ciudades, comprar el peridico,
pagar el impuesto predial o los derechos por la tenencia de un vehculo au-
tomotor, pagar la renta a nuestro casero, o los servicios de agua, electricidad
o telfono que ordinariamente recibimos. Manuel Atienza indica que hasta
tal punto estn juridificadas nuestras sociedades que, con frecuencia, lo que
en principio aparece como alternativas al derecho resulta ser simplemente
otra forma de derecho; por ejemplo, la crisis de la administracin de justicia
est dando lugar a otras formas de resolucin de conflictos como el arbitraje,
la conciliacin o la mediacin, pero se trata slo de alternativas al mecanis-
mo judicial, no al derecho, pues esos procedimientos aunque sea en parte
estn regulados por el propio derecho.7 Todo parece indicar que cuando ms
desarrollada y compleja es una sociedad hay necesidad de mayor nmero de
instrumentos jurdicos.
La complejidad y el desarrollo de las sociedades no significa necesaria-
mente que su derecho sea ms justo. En las sociedades primitivas con un
derecho bsico y rudimentario podemos encontrar ejemplos de normas
y decisiones de autoridad mucho ms justas que las normas y las decisiones
de las autoridades de nuestro tiempo. La nocin de sociedad justa ms que
con la complejidad del derecho tiene que ver, segn criterios de nuestra
poca, con la manera en que la sociedad y el derecho de la misma, procu-
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1) La dimensin conflictualista.
2) La dimensin esencialista.
3) La dimensin funcional.
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III. Cultura
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IV. Recapitulacin
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Cuestionario
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Captulo segundo
Concepto de ciencia y ciencia jurdica
Las perspectivas o planos de anlisis del derecho son diversos, desde la menor
abstraccin de las ciencias jurdicas particulares a la mayor abstraccin con
pretensin totalizante de la reflexin filosfica centrada principalmente en los
fines del derecho desde una visin externa, pasando por los anlisis generales
y formales de la teora general del derecho que intentan responder al fen-
meno jurdico desde una visin omnicomprensiva pero interna al derecho.
En este captulo se describen esos planos y su relacin con otras ciencias
auxiliares del derecho.
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necesidad lgica, sostener leyes universales, dado que slo pueden someterse
lgica y necesariamente a verificacin enunciados particulares. La propia
teora de Popper sobre la falsacin puede ser puesta en duda,25 en tanto
que al no observarse los hechos en estado puro, pues se observan usando
teoras previas, es posible que posteriormente, por el progreso de la ciencia,
esas teoras que permitieron demostrar que el hecho era verdadero, correcto
o vlido, resulten falsadas a la luz de nuevas perspectivas tericas.
Ante la imposibilidad de caracterizar todo el conocimiento cientfico
con la observacin y la verificacin, algunos piensan que lo caracterstico de
la ciencia radica en que el conocimiento cientfico puede ser identificado por
el uso de un mtodo cientfico; sin embargo, no existe un mtodo vlido y
universal para acceder y analizar el conocimiento cientfico. Feyerabend26
considera que no hay mtodos, que en ciencia todo vale, que ninguno de
los llamados mtodos aseguran el trabajo cientfico. Otros, como Lakatos,27
proponen como definitorio del mtodo cientfico la manera en que trabajan
los cientficos por programas de investigacin, los que estn integrados por
hiptesis tericas generales el ncleo que se aceptan convencionalmen-
te y por hiptesis auxiliares y condiciones iniciales que sirven de cinturn
protector para proteger a las hiptesis generales de la falsacin. El programa
debe ser coherente racional y progresivo para permitir el descubrimien-
to de nuevos fenmenos. El problema con el mtodo de Lakatos es que no
resuelve los dilemas que suscitan programas de investigacin que manejan
hiptesis y teoras opuestas sobre un fenmeno, pues su teora no propor-
ciona una va segura para saber cul de las hiptesis y teoras en oposicin
y contraste es la mejor.
Algunos como Kuhn28 establecen que la ciencia lo es por su carcter
no dogmtico y abierto. Kuhn no acepta que el conocimiento cientfico
sea progresivo, es decir, que con la evolucin del mismo se logren explica-
ciones ms adecuadas y exactas. Kuhn prefiere distinguir entre la preciencia
y la ciencia normal. En la preciencia conviven distintos paradigmas en ri-
validad conjunto de leyes, supuestos tericos, metafsicos y ontolgicos
que los cientficos que postulan el paradigma aceptan sin discusin y du-
rante los periodos de ciencia normal uno de los paradigmas se constituye
como dominante. La ciencia se desarrolla cuando en etapas extraordinarias
se pone en duda el paradigma dominante, se entra en una etapa de rivalidad
entre distintos paradigmas, hasta que finalmente uno logra posicionarse
como dominante por cierto tiempo hasta ser desbancado por otro para-
digma dominante. Como se puede advertir, la teora de Kuhn no permite
saber qu paradigma es preferible porque no se tiene una teora general
que nos permita optar atemporalmente por uno.
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Como dice Carlos Nino,48 hay diferencias profundas entre el modo de ac-
tividad que cumplan los juristas del Imperio Romano, la de los glosadores
de la Edad Media y la investigacin jurdica contempornea. Igualmente
es notable la diferencia que media entre la investigacin que realizan los
juristas del common law y la que desarrollan los juristas del sistema continen-
tal europeo. Tambin hay diferencias entre las investigaciones jurdicas que
realizan las distintas ramas del derecho, por ejemplo, entre lo que realizan los
civilistas y otro tipo de juristas como los constitucionalistas. La dogmtica
jurdica es tpica de los pases en los que predomina el derecho legislado y
comenz a tener un desarrollo notable en el siglo xix con escuelas como la
histrica del derecho, la de la jurisprudencia de conceptos y principalmente
con la escuela de la exgesis que estuvo vigente durante todo el siglo xix
hasta aproximadamente 1880. Esta ltima escuela tuvo como objeto de es-
tudio del derecho la labor del legislador, y sus principales caractersticas fue-
ron: el culto a la ley, la identificacin entre ley y derecho, la concepcin de
la interpretacin como una bsqueda de la voluntad del legislador y como
operacin mecnica basada en el silogismo y la subsuncin, la reduccin del
derecho al que producen los rganos del Estado, y el culto a la autoridad y
el precedente judicial.
La exgesis fue dominante en Europa, principalmente en Francia, y
an en Mxico existen en nuestra poca evidentes vestigios formalistas
derivados de esta escuela. El modelo de la exgesis, como cualquier otro
modelo de ciencia jurdica comporta actitudes ideolgicas y elementos
racionales respecto al derecho positivo, por las funciones que cumple en
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1. La nocin kelseniana
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Mtodo
Casualidad Imputacin
Naturaleza 1) Ciencias naturales 3) Pensamiento primitivo
Objeto
Sociedad 2) Ciencias social- 4) Ciencias normativas
causales
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3. El modelo hartiano
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i. Jurisprudencia sociolgica
ii. Historia del derecho iii. Historia de la ciencia del derecho
iv. Teora general del derecho v. Dogmtica jurdica
vi. Lgica jurdica vii. Axiologa jurdica
viii. Epistemologa jurdica ix. Filosofa del derecho
x. Derecho comparado
Civil
Derecho privado Mercantil
etctera
Ciencia
dogmtica
jurdica Constitucional
Derecho pblico Fiscal
Penal
etctera
Historia del derecho
Derecho comparado
Ciencias auxiliares de la ciencia
Metodologa
dogmtica jurdica
Teora general
del derecho
Como puede apreciarse de los dos esquemas, el primero coloca a la dogm-
tica o ciencia jurdica al mismo nivel que el resto de las dems ciencias. En
el segundo, subordina las disciplinas jurdicas a la dogmtica jurdica. Estima-
mos que es preferible el primer esquema porque le da a cada ciencia el nivel
que corresponde y porque todos esos saberes, entre otros, contribuyen al
conocimiento del derecho. El fenmeno jurdico, no es entonces, ni exclu-
sivamente normativo ni fctico ni axiolgico, es tambin lgico, histrico,
comparado, poltico, econmico, psicolgico y tcnico.
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3. El derecho comparado
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4. La antropologa jurdica
Se dice, no sin cierto dejo de visin colonialista y hasta xenofbica, que esta
disciplina estudia los sistemas jurdicos de los pueblos primitivos o de tecno-
loga sencilla, pertenezcan o no a una poca pasada. Son estudios que datan
del siglo xix, cuando las grandes potencias europeas colonizaron enormes
territorios en Asia y frica. Es una disciplina que ha cobrado gran impor-
tancia en nuestro pas y otros latinoamericanos por el auge de los estudios
en materia de derecho indgena y sobre el multiculturalismo, a raz de la
reivindicacin poltica y social que los pueblos indgenas han hecho sobre
sus derechos.103 Desde luego que esta disciplina no puede entenderse como
en el pasado, desde una visin colonialista y para permitir la exclusin o la
explotacin de las comunidades tnicas, sino como posibilidad para generar
condiciones de pluralismo jurdico y de convivencia entre sistemas jurdicos
diversos en un mismo territorio. En Mxico, la antropologa jurdica se en-
cuentra en pleno desarrollo desde que el movimiento zapatista en 1994 dio la
alerta sobre los niveles de miseria y explotacin en la que se encuentran las
comunidades y pueblos indgenas en nuestro pas. Aunque tuvimos una re-
forma constitucional en 2001,104 el debate sobre las maneras de hacer conci-
liables los derechos indgenas con el derecho nacional no ha concluido y el
marco jurdico nacional an requiere de reformas para lograr la convivencia
armnica entre los sistemas jurdicos estatales y los indgenas.
5. La psicologa jurdica
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7. Lgica jurdica
La lgica jurdica forma parte de la teora general del derecho. Tiene dos
grandes campos: la lgica del derecho y la lgica de los juristas.106 La lgica
del derecho consiste en el anlisis formal, prescindiendo de su contenido, de
las normas y de los sistemas normativos, se le conoce tambin como la l-
gica de las normas o lgica dentica. La lgica de los juristas por su parte
consiste en el anlisis lgico de los razonamientos de los juristas, tanto en la
creacin de las normas como en la interpretacin y aplicacin de las mismas.
Es importante sealar que la argumentacin jurdica no slo emplea la lgica
formal basada en el silogismo sino tambin otras formas de razonamiento
que tienen relacin con la retrica, y que adems, la argumentacin jurdica
no puede ser constreida exclusivamente a la lgica porque los argumentos
son contextuales, es decir toman en cuenta el contexto y las habilidades del
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8. La informtica jurdica
9. Tcnica legislativa
Toma como dato a las normas jurdicas ya existentes, junto con las nece-
sidades sociales, las peculiaridades del lenguaje jurdico, los propsitos po-
lticos, etctera, y con esos elementos trata de producir la optimizacin en
la produccin o creacin de normas: leyes, normas administrativas y hasta
convenios y contratos entre los particulares. Tiene como fin incrementar la
racionalidad del derecho.108
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Es parte de la filosofa del derecho que se ocupa de los valores o fines ju-
rdicos. Tambin se denomina axiologa jurdica. Se refiere a aqullos ele-
mentos de carcter tico que constituyen el ideal regulativo y correctivo
del derecho, que lo orientan, pero que tambin sirven para guiar su elabo-
racin, interpretacin y aplicacin. Son las metas jurdicas ltimas que estn
presentes en todo fenmeno jurdico, de suerte que el derecho no podra
concebirse sin fines relacionados a la libertad, la igualdad, la solidaridad o
la justicia. La tica jurdica adems permite algn nivel de conexin entre
el derecho y la moral.
VII. Recapitulacin
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Cuestionario
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Captulo tercero
Definicin de derecho
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Son muchas las razones que hacen difcil definir el derecho. Al menos tres
son los motivos que han dificultado a los tericos del derecho definirlo: 1) el
carcter histrico del derecho que impide prescindir para su definicin de
las categoras de espacio y tiempo; 2) la complejidad del fenmeno que pro-
duce una variedad de perspectivas, y 3) el carcter prctico, valorativo y en
ocasiones emotivo del derecho.116
El carcter histrico del derecho nos sita en el espacio y en el tiempo.
Si queremos definir el derecho desde algunas caractersticas del derecho de
nuestra poca esencialmente estatal, normativo, coactivo, etctera ten-
dramos problemas para incorporar esas caractersticas o propiedades a algu-
nas formas de derecho anteriores a la vigente o a otras que aun cuando sean
contemporneas, no presentan con la misma calidad las caractersticas que
hemos escogido para definirlo. Pensemos en el derecho primitivo, que no
tena las caractersticas del actual, por ejemplo, su carcter estatal o la confu-
sin que en l haba entre las normas morales y religiosas con las jurdicas,
y analicemos si podemos extender la definicin que hicimos del derecho
contemporneo al derecho de esas pocas.
Igual nos ocurre con el problema del derecho internacional, porque
ste para su aplicacin no cuenta con los mismos instrumentos del nacional
al no haber un Estado mundial y las personas a las que suele aplicarse no
son individuos sino Estados soberanos. En el derecho internacional pblico,
aunque existen instituciones parecidas, no abundan instituciones semejantes
a las legislaturas, a la jurisdiccin, a la polica. Los mecanismos de creacin
del derecho internacional residen ms en los acuerdos o convenios entre
los pases que en leyes aprobadas por legislaturas; sus medios de solucin
de controversias no descansan en la jurisdiccin de los tribunales sino en
la negociacin entre los estados, la mediacin, el arbitraje, y las sanciones
son muy diferentes al derecho interno, consisten, entre otras, en la condena
pblica y el no reconocimiento de los actos del Estado sancionado, aunque
desde luego existen represalias de otro tipo que por cierto son contrarias
al derecho internacional actual como las invasiones o las guerras.117
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sindicatos, las iglesias, etctera, que permiten el ejercicio del poder a travs
de la produccin del consenso, lo que Foucault llamar ms tarde, discipli-
namiento o normalizacin. La cuestin de la hegemona, entonces, plantea
la pregunta crucial acerca de cmo podr enfrentarse el poder, cuando ste
se ha transformado en sentido comn, cuando circula en nuestras prcticas
cotidianas y se halla inscrito en la propia textura de nuestra experiencia, en
lugar de ser percibido como opresivo y ajeno.122 Entre las perspectivas del de-
recho ms comunes con sesgo ideolgico habra simplemente que referirnos
a las iusnaturalistas, las positivistas, las realistas o las marxistas, entre otras.123
Entre los iusnaturalistas, pues hay varios tipos de iusnaturalismo (clsico
o helnico, medieval o tomista, racionalista, de la naturaleza de la cosa,
etctera), el derecho del Estado debe guardar correspondencia con un
derecho justo de origen divino, racional, o derivado de la naturaleza de las
cosas.124 Si el derecho del Estado no se subordina a esa idea de derecho
justo no es derecho.125
Los positivistas, que tambin son muy diversos,126 opinan que el derecho
est fundamentalmente integrado por normas coactivas emitidas por el Es-
tado, de carcter bilateral, heternomo y externo.127 Los realistas entienden
el derecho desde la perspectiva de lo que hacen los tribunales, para ellos el
derecho son las conductas sociales institucionalizadas y prescritas por los
rganos del Estado que interpretan y aplican el derecho.128
Para los marxistas el derecho es un instrumento de control social, un
mecanismo de la clase dominante puesto a su servicio. El derecho es con-
secuencia de una estructura econmica determinada una superestructu-
ra y por ello expresa y sirve a los intereses del status quo. Marx postul
que en la sociedad comunista, el derecho y el Estado desaparecern, pues en
ella, no existirn clases sociales ni relaciones de produccin que impliquen la
hegemona de una clase sobre otras.129
Como establecimos al principio de este epgrafe, definir el derecho tam-
bin es complicado por su carcter prctico y valorativo. Lo prctico se refie-
re a la conducta, el derecho regula la conducta de las personas pero tambin
valora esas conductas. El derecho determina qu conductas son aceptables y
cules no. En los pases democrticos, los juicios de valor sobre las conductas
de las personas que se derivan del derecho y de los rganos que lo aplican,
coinciden aproximadamente con lo que piensa la mayora de los ciudadanos,
aunque no siempre porque la mayora as lo considere, esa valoracin es la
ms correcta o aceptable. Como puede advertir el lector, es difcil establecer
cules son los valores plausibles y cules no, en ocasiones pueden existir
disputas jurdicas y sociales sobre los valores que deben prevalecer en esa
sociedad y en el derecho vigente. Tambin el carcter prctico y valorativo
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del derecho, nos lleva a una cuestin capital respecto a su definicin, sobre
si sta debe ser descriptiva cmo es el derecho o prescriptiva lo que
debera ser.
Adems de las razones expuestas, definir el derecho es difcil por la
carga emocional y emotiva de muchos de los fines que persigue. Se suele
relacionar al derecho con valores como la justicia, la libertad, la igualdad, la
solidaridad, la seguridad, etctera. Lo que significa que las personas pueden
utilizar la expresin derecho con esos sentidos y exaltarlos emocionalmente.
Como cuando decimos: no hay derecho no es justo que mueran los
nios en la calle!
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axiolgica respecto de las otras dos, y las corrientes sociolgicas del derecho
colocan al hecho social por encima de las otras perspectivas.
Entre los presupuestos de la teora tridimensional de Reale podemos
mencionar los siguientes:
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bre otros, pero esto no significa que los que no son prevalecientes
queden permanentemente excluidos. Existe as una pluralidad de
modelos de organizacin y conducta que tienen un grado mximo
de integracin y unidad en el derecho objetivo del Estado.
10) Los valores del derecho no son ideales, estn referidos a la historia
concreta. La teora tridimensional postula un historicismo axiol-
gico.
11) Los valores del derecho tienen una triple funcin. La ntica porque
los valores son parte de la realidad; la gnoselgica porque permi-
ten la comprensin de esa realidad, y la deontolgica, en tanto que
los valores del derecho postulan derechos y deberes que orientan la
conducta humana.
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Definicin tridimensional
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cional del Estado porque recobra para la Constitucin toda su fuerza nor-
mativa, y desde el punto de vista de la democracia entiende que sta no es
slo la expresin de la regla de las mayoras, sino tambin es, y de manera
preponderante, la garanta ms plena para los derechos humanos, los de li-
bertad, pero en alto grado los de igualdad.
Una definicin de derecho ms o menos aceptable debe tomar en
cuenta las normas, los hechos y los valores como lo hace la teora tridimen-
sional del derecho, pero no slo eso, es necesario ir ms all de la estructura
la norma, su funcionalidad los hechos y las conductas de quien apli-
ca las normas, o su idealidad los valores, es necesario comprender
la cultura y la sociedad en donde lo anterior se expresa, es necesario que
el derecho proponga una idea de correccin o de justicia, es necesario
entender el derecho en movimiento y funcionamiento al interior de la
sociedad, esto es, saber cmo opera. Una de las ltimas concepciones del
derecho, fundamento entre otros, de movimientos como los del neoconsti-
tucionalismo, y que deriva de la obra de autores como Ronald Dworkin,154
MacCormick,155 Alexy,156 Raz,157 Nino,158 Ferrajoli,159 Atienza,160 y algunos
ms, propone una idea que se denomina argumentativa. Esta concepcin
del derecho como cualquier otra que pretenda ser ms o menos integral
intenta dar respuesta a una serie de cuestiones fundamentales en relacin
con el derecho, a saber: 1) cules son los componentes bsicos del derecho;
2) qu se entiende por derecho vlido y cmo se trazan los lmites entre el
derecho y lo que no es derecho; 3) qu relacin guarda el derecho con la
moral y con el poder; 4) qu funciones cumple el derecho en la sociedad,
qu objetivos y valores deben o pueden alcanzarse con l; 5) cmo puede
conocerse el derecho, de qu manera puede construirse el conocimiento
jurdico, y 6) cmo se entienden las operaciones de produccin, interpreta-
cin y aplicacin del derecho.161
Esta concepcin no slo intenta integrar las perspectivas jurdicas de las
corrientes ms habituales del derecho de nuestra poca sino que se nutre de
una filosofa de tipo pragmtico que supone la aceptacin de las siguientes
tesis: 1) la necesidad de considerar el derecho y los problemas jurdicos en
relacin con el contexto social, econmico, poltico; 2) tener en cuenta
que cualquier corriente, concepcin o teora jurdica se elabora con algn
propsito y van dirigidas a un determinado auditorio; 3) el rechazo de una
concepcin demasiado abstracta del derecho, lo que no significa que se
est en contra de la teora, sino de teoras de gran abstraccin; 4) una vi-
sin instrumental y finalista del derecho, esto es, entender que el derecho es
un instrumento para resolver conflictos y conseguir fines sociales, y recono-
cer que el derecho tiene fines internos que derivan de su carcter o de su
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Los anteriores elementos para ser derecho deben ser reconocidos como
tales, no slo por las autoridades que reconocen y dicen lo que es a travs de
procedimientos de creacin y aplicacin del derecho, sino por los diversos
sectores de la sociedad. Slo de esta manera el derecho ser obedecido, y
para esto se requiere que las normas creadas por la autoridad provengan de
procedimientos democrticos y que su contenido sea congruente con los
fines y valores del sistema.165
Para que el derecho tenga impacto en la sociedad y en las personas
requiere de autoridades, estas pueden ser las del Estado (derecho nacional,
federal o local), las supraestatales como los organismos internacionales en el
derecho internacional, y autoridades de carcter social, cuando se admite
el pluralismo jurdico,166 esto es, derecho que no surge necesariamente de
las instancias estatales. Adems en la aplicacin de reglas jurdicas, la autori-
dad puede hacerlas valer coactivamente; sin embargo, no todas las normas
jurdicas principios y valores previstos en la Constitucin contienen
sancin, por lo que el acatamiento de las normas ms importantes del sis-
tema jurdico no puede entenderse exclusivamente desde la coercin sino
desde la legitimidad, esto es la confianza y respaldo de los ciudadanos hacia
el ordenamiento jurdico.
La argumentacin permite comprender el derecho, ste se entiende y se
vive argumentalmente tanto en las instancias del Estado ante autoridades
y jueces, por ejemplo como en la vivencia cotidiana en la sociedad. La
argumentacin es una superacin de las teoras tradicionales de la inter-
pretacin. En las teoras de la argumentacin importa cmo se motivan las
decisiones, cmo se descubren los argumentos, cules son sus tipos y cmo
se puede evitar la manipulacin de los instrumentos retricos. En toda argu-
mentacin es fundamental la parte justificativa de las decisiones, sobre todo
si son de autoridad. Justificar un argumento significa demostrar por qu
el escogido o los escogidos son mejores y ms plausibles que los otros. Se
considera que es importante dar razones para sostener nuestras pretensiones,
y las razones que debemos dar no slo implican apelar a la autoridad y al
procedimiento, entraan apelar a su contenido para que mediante la ponde-
racin sea posible optar por las razones ms convincentes. La argumentacin
est presente en cualquier momento del derecho: en la creacin, interpreta-
cin y aplicacin. El razonamiento jurdico no es un proceso mecnico rea-
lizado por autmatas. El discurso jurdico implica la obligacin de razonar
intersubjetivamente las decisiones en trminos de derecho vigente y vlido
para vincular el juicio particular al sentido de justicia del ordenamiento.
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VII. Recapitulacin
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Cuestionario
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Captulo cuarto
La norma jurdica
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En una segunda clasificacin distingue a las normas jurdicas por sus fun-
ciones denticas. As habla de normas afirmativas u obligaciones, normas
negativas o prohibiciones, y permisos positivos y negativos.184
La tercera clasificacin menciona a las normas categricas e hipotticas.
Las categricas establecen que una determinada accin o conducta debe
ser cumplida incondicionalmente (las normas morales) y las hipotticas son
las que establecen que una cierta conducta debe ser ejecutada si se verifica
determinada condicin.185
Los criterios que utiliza Garca Mynez son: 1) por el sistema a que pertene-
cen; 2) por su fuente; 3) por su mbito espacial de validez; 4) por su mbito
temporal de validez; 5) por su mbito material de validez; 6) por su mbi-
to personal de validez; 7) por su jerarqua; 8) por su sancin; 9) por su cua-
lidad; 10) por sus relaciones de complementacin, y 11) por sus relaciones
con la voluntad de los particulares.186
Por el sistema al que pertenecen son nacionales, extranjeras y uniformes.
Las nacionales se aplican en principio en el territorio nacional aunque ex-
cepcionalmente podran aplicarse en territorio extranjero en algunos su-
puestos derivados de los conflictos de leyes. Las extranjeras rigen en prin-
cipio para un territorio no nacional aunque existen tambin excepciones
y en determinados supuestos pueden ser aplicadas en territorio nacional.
Las de derecho uniforme son normas comunes a sistemas jurdicos de diver-
sos pases; en las ltimas dcadas en Europa y por virtud de los tratados de la
Unin Europea existen normas comunes a diversos territorios nacionales.
103
Por su fuente formal, entre otras, las normas pueden tener origen en
actos del Poder Legislativo que se llaman leyes. Tambin pueden tener su
fuente en la jurisprudencia, es decir, en decisiones obligatorias de los tribu-
nales. Pueden tener origen en la facultad reglamentaria del Poder Ejecutivo.
O su fuente puede ser la costumbre que es reconocida como derecho.
Por su mbito espacial de validez, que es la porcin del espacio en que
un precepto es aplicable, las normas en un pas como Mxico pueden ser
federales, del Distrito Federal, estatales o municipales. Esta clasificacin se
fundamenta en los artculos 39, 41, 42, 43, 115, 116 y 122 de la Constitucin,
que dan competencia a poderes y rganos federales, estatales y municipales
para crear normas.
Por su mbito temporal de validez, que est constituido por el lapso
durante el cual conserva la norma su vigencia, las normas pueden ser de
vigencia determinada o indeterminada. En las de vigencia determinada su
mbito de validez temporal se encuentra previsto de antemano. En las de
vigencia indeterminada no tienen plazo de vigencia definido.
Por su mbito material de validez, que se refiere a la materia que regula,
las normas jurdicas en Mxico suelen clasificarse en normas de derecho
privado (civil y mercantil), de derecho pblico (constitucionales, adminis-
trativas, penales, procesales e internacionales), y de derecho social (laboral,
agrario, seguridad social). Esta clasificacin tiene un inters prctico para
efectos, por ejemplo, de interpretacin de las normas; as, el artculo 14 de la
Constitucin seala que en los juicios de orden criminal queda prohibido
imponer, por simple analoga y aun por mayora de razn, pena alguna que
no est decretada por una ley exactamente aplicable al delito de que se trate,
y en los juicios del orden civil, la sentencia deber ser conforme a la letra o
a la interpretacin jurdica de la ley, y a falta de sta se fundar en los prin-
cipios generales del derecho. Es decir, la naturaleza de las normas penal
o civil puede determinar formas y mtodos distintos de interpretacin.
Por su mbito personal de validez, las normas pueden ser generales y
particulares. Las generales se refieren a distintos sujetos normativos a to-
dos los comprendidos dentro de la clase designada en la norma, tal como
ocurre con las leyes o a un sujeto individualizado como en las sentencias,
en donde se particulariza a los sujetos normativos. Las particulares pueden
ser pblicas o privadas. Las pblicas entraan actos de autoridad una sen-
tencia, un acuerdo administrativo. Las privadas derivan de actos como los
convenios, contratos, testamentos, etctera.
Por su jerarqua, las normas pueden ser del mismo rango relaciones
de coordinacin o pueden ser de distinto rango relaciones de supra
o subordinacin. La teora moderna de la jerarqua normativa se debe a
104
Adolph Merkl y a Hans Kelsen. Este ltimo autor precis que el sistema
jurdico es un sistema dinmico, en donde las normas de menor jerarqua son
aplicacin o consecuencia de las normas de mayor jerarqua. El orden jur-
dico es una larga jerarqua de preceptos, cada uno de los cuales desempea
un doble papel: en relacin con los que le estn subordinados tienen carcter
normativo; en relacin con los supraordinarios son un acto de aplicacin.
Las nicas normas que no tienen un doble carcter son la norma base o
fundamental del sistema que slo tiene carcter normativo, y la norma ms
inferior del sistema de la que no puede derivarse otra norma y que slo
constituye un acto de aplicacin.187 Por su jerarqua las normas en Mxico
suelen clasificarse, de mayor a menor jerarqua, entre: 1) normas constitucio-
nales, 2) tratados internacionales y leyes generales expedidas por el Congreso,
3) leyes federales, estatales y del Distrito Federal, y 4) normas municipales.
Esta clasificacin deviene de la interpretacin que el mircoles 13 de febre-
ro de 2007 la Suprema Corte de Justicia de la Nacin realiz al artculo 133
de la Constitucin que consagra el principio de supremaca constitucional
y que dice:
Esta Constitucin, las leyes del Congreso de la Unin que emanen de ella, y
todos los tratados que estn de acuerdo con la misma, celebrados y que se ce-
lebren por el presidente de la Repblica, con aprobacin del Senado, sern la
ley suprema de toda la Unin. Los jueces de cada Estado se arreglarn a dicha
Constitucin, leyes y tratados, a pesar de las disposiciones en contrario que pue-
da haber en las Constituciones o leyes de los estados.
Por su sancin, las normas pueden ser perfectas, leyes ms que perfectas, leyes
menos que perfectas y leyes imperfectas. Las leyes perfectas son aquellas cuya
sancin consiste en la inexistencia o nulidad de los actos que vulneran o en
la imposicin de un castigo. Las leyes ms que perfectas implicaran en caso
de violacin adems de la inexistencia o nulidad del acto o la sancin, una
reparacin pecuniaria. Las leyes menos que perfectas son las que su violacin
no entraa que el acto deje de producir efectos jurdicos pero que, sin em-
bargo, hacen al responsable acreedor a un castigo.Y por lo que ve a las leyes
imperfectas son aqullas que no estn provistas de sancin.
Por su cualidad, las normas se dividen en positivas (permisivas) y nega-
tivas (prohibitivas). Son positivas las que permiten cierta conducta, ya sea
accin u omisin, y negativas, las que prohben determinado comporta-
miento (accin u omisin). Segn Garca Mynez, las normas obligatorias
son positivas, pues es evidente que permiten lo mismo que mandan.188
105
106
107
debe tenerse en cuenta que una validez puramente fctica representa una
zona intermedia que no permitira ni el cumplimiento total de las normas
la confusin con las leyes de la naturaleza ni su incumplimiento abso-
luto la inexistencia de positividad del derecho.
Finalmente hay quien sostiene una validez desde el plano axiolgico, en
donde la validez viene dada por los contenidos de las normas, pero no los
contenidos jurdicos de las normas constitucionales, sino externos al orden
jurdico relacionados con el nivel de justicia, solidaridad, libertad o igualdad
que una norma o conjunto normativo promueve. Para realizar el anlisis es
obvio que necesitaremos un catlogo de valores externos al derecho que nos
permitan evaluarlo. Estos anlisis son propios de las distintas teoras del de-
recho natural pero tambin de otras posiciones jurdicas como el marxismo,
la teora del uso alternativo del derecho o los Critical Legal Studies.
En Brasil Miguel Reale196 y en Mxico, entre otros, Garca Mynez han
combinado los diversos sentidos de la validez, y as Reale ha elaborado su
teora tridimensional: el derecho no es puro hecho, ni pura norma, ni puro
valor; el derecho es el hecho social en la forma que le da una norma jurdica
de acuerdo con un determinado sistema de valores ticos. Garca Mynez ha
concebido la teora de los tres crculos en donde destaca siete diversos tipos
de normas: 1) formalmente vlidas, sin eficacia (Garca Mynez utiliza como
sinnimo positividad y eficacia) y sin valor intrnseco; 2) intrnsecamente
valiosas, dotadas de vigencia o validez formal, pero carentes de eficacia; 3)
normas intrnsecamente vlidas pero no formalmente vlidas y carentes de
eficacia; 4) formalmente vlidas, sin valor intrnseco pero eficaces; 5) nor-
mas eficaces, formal e intrnsecamente vlidas; 6) normas intrnsecamente
vlidas, eficaces pero sin validez formal, y 7) normas eficaces, sin vigencia
formal ni validez intrnseca.197
Derecho Derecho
formalmente intrnsecamente
vlido valioso
Derecho
eficaz
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justifican como mecanismos para ganar tiempo, para ahorrar trabajo o para
reducir el riesgo del error al decidir lo que debe hacerse.202
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X. Recapitulacin
121
122
Cuestionario
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Captulo quinto
El ordenamiento jurdico
125
126
127
128
entre las normas jurdicas y otras normas como las de la moral, y 3) la jerar-
quizacin de las normas dentro de un sistema complejo de fuentes jurdicas.
La coherencia alude en la aspiracin normativa de que las normas entre
s no sean contrarias o contradictorias. La realidad normativa, sin embargo,
es bien distinta y presenta abundantes contradicciones entre normas de un
mismo ordenamiento, lo que presenta problemas porque en materia de re-
glas, el cumplimiento de una de las normas implica el incumplimiento de
las otras, y en colisiones entre principios o valores, el problema consiste en
cmo hacerlos compatibles para ponderarlos respecto al caso concreto.
La plenitud tambin es una aspiracin del ordenamiento y corre paralela
al intento de control y de monopolizacin del derecho por parte del Estado,
que se resiste a admitir fuentes no oficiales del derecho. Uno de los proble-
mas capitales de la plenitud es si el espacio jurdico es pleno o si hay espacios
jurdicos vacos. Los espacios vacos, no regulados, se llaman lagunas, y vere-
mos cmo se intenta llenarlos, principalmente con mtodos de autointegra-
cin como la apelacin a la analoga y a los principios generales del derecho
o con mtodos de heterointegracin como el uso del derecho comparado, el
derecho natural, el romano o principios ticos.
En cuanto a los conflictos de ordenamientos debe sealarse que exis-
ten gneros diversos: algunos existen al interior del Estado y son parte del
pluralismo jurdico, cuando diversos ordenamientos conviven con el estatal;
tambin hay conflictos entre ordenamientos estatales, y conflictos entre or-
denamientos estatales y el derecho internacional de carcter universal. Los
procedimientos para resolver estos conflictos consisten principalmente en el
uso de la recepcin y en el reenvo.
129
tencia previa de otras normas que pertenecen a ese sistema, ya sean inde-
pendientes o dependientes (desde las normas constitucionales a la sentencia
y el contrato). En general se acepta que el trmino validez se emplea para
expresar la pertenencia a un sistema de las normas dependientes, pues no
tiene sentido predicar la validez de las normas independientes: la validez
versa principalmente sobre una relacin entre normas, y no sobre los crite-
rios que permiten distinguir un sistema jurdico de otro.232
Una de las primeras teoras sobre la pertenencia de las normas a un siste-
ma es la de John Austin (1790-1859), quien seal que una norma pertenece
a un sistema jurdico si ha sido dictada directa o indirectamente por un legis-
lador soberano. Las normas jurdicas son imperativas o mandatos emanados
de un soberano y dirigidos a los sbditos en el mbito de una sociedad pol-
tica independiente. Un mandato es la expresin de un deseo de que alguien
haga u omita algo acompaado de la previsin de un dao en el caso de que
tal deseo no sea satisfecho. Esta posicin fue criticada por Hart en El concepto
de derecho, pues el modelo de Austin no puede dar cuenta de algunas normas
como la costumbre y no puede explicar la continuidad del derecho cuando
un soberano sucede a otro, ni puede identificar al soberano en muchos Es-
tados modernos.233
En Kelsen la validez o pertenencia de una norma jurdica se fundamenta
en otra superior y as sucesivamente hasta llegar a la norma fundamental. El
sistema jurdico es dinmico y en l existe una delegacin de autoridad, no
por razn de contenidos, sino de autorizaciones entre las normas superiores
y las inferiores, de tal suerte que las normas inferiores son consecuencia de
la ejecucin o cumplimiento de las superiores. Para ello la autoridad prevista
en las superiores ha seguido el procedimiento previsto en las superiores y
crea o establece las nuevas normas inferiores.
El problema obvio de la teora kelseniana reside en la norma primera o
fundamental. La norma fundamental carece tambin de contenidos e histo-
ria, es en Kelsen una hiptesis lgico-epistemolgica y podra enunciarse en
los siguientes trminos: Es preceptivo comportarse de acuerdo con lo que
la Constitucin prescribe.234 La norma fundamental no puede por tanto
hacerse confundir con la Constitucin, ya que es anterior y fundamenta la
validez de la primera Constitucin.
Kelsen ha sido cuestionado por su teora sobre la norma fundamental
y en algunas de sus obras admite que no puede ser totalmente formal, que
requiere de algn elemento o principio de eficacia para que haga viable el
sistema dinmico a que da lugar su teora. Adems Kelsen ha sido refutado
porque intenta darle carcter normativo a la norma fundamental cuando no
lo tiene, pues es un presupuesto lgico-epistemolgico segn su teora.
130
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1. Antinomias de reglas
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Total total
Parcial parcial
Total parcial242
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138
Existe una gran variedad de tipologas sobre las lagunas. Por los motivos
que las originan podemos clasificar a las lagunas en subjetivas u objetivas. Las
subjetivas son las que dependen de la voluntad del legislador de manera in-
tencional para que los rganos inferiores ejecuten las acciones trazadas por el
legislador o para que los particulares ejecuten las acciones trazadas por aqul;
tambin son lagunas subjetivas las que son producto de la negligencia del
legislador. Las lagunas objetivas son independientes de la voluntad del legis-
lador y se deben a diversos factores como el envejecimiento de los cdigos, el
desarrollo de las relaciones sociales o la evolucin cientfica o tecnolgica.
Otra clasificacin de las lagunas atiende a la particularidad o generali-
dad de las normas. Se habla as de lagunas praeter-legem y lagunas intra-legem.
Las primeras tienen lugar cuando las reglas expresas son tan concretas que
no comprenden todos los casos a nivel de particularidad. Las intra-legem se
presentan cuando las normas jurdicas son tan generales que en su interior
hay grandes vacos a colmar; por ejemplo, las lagunas voluntarias que se
remedian delegando a otras autoridades para que formulen nuevas normas
dentro de las expresas.
Una clasificacin ms es la que distingue entre lagunas de conocimien-
to y de reconocimiento. La laguna de conocimiento es la que resulta de la
ausencia de informacin sobre los hechos del caso. Por su parte, la laguna de
reconocimiento surge como producto de la indeterminacin semntica por
vaguedad del caso.
Hay quien clasifica las lagunas en totales y parciales. Una laguna total es
producto de la ausencia de normas obligatorias y de permisivas negativas.
Una laguna parcial es el resultado de la ausencia de normas permisivas ne-
gativas, pero no de permisivas positivas.
Tambin se han distinguido las lagunas en ideolgicas o impropias y
lagunas propias o reales. Las lagunas ideolgicas implican la ausencia de una
solucin satisfactoria, es decir, de una norma justa relativa al caso. Las lagu-
nas reales o propias entraan la ausencia normativa o de criterios adecuados
referentes al caso.
La idea de plenitud tiene sus orgenes en la Edad Media cuando los
juristas medievales conocieron y recibieron el derecho romano. Se entendi
que el Corpus Iuris era un derecho acabado, definitivo y completo. Con la
escuela de la exgesis del siglo xix y la codificacin, se perfeccion la idea
de plenitud del ordenamiento. El Cdigo decimonnico era el nico de-
recho y contena todos los preceptos jurdicos elaborados racionalmente, lo
que negaba otras fuentes jurdicas y rechazaba cualquier interpretacin que
no realizara el legislador (la interpretacin autntica).
139
140
141
Una primera aproximacin nos dir que los conflictos entre ordenamien-
tos pueden darse: 1) al interior de un Estado cuando se admite el plura-
lismo jurdico, es decir, ordenamientos que existen y conviven al interior
de un Estado junto al ordenamiento estatal y que son producto de diversas
instituciones, entendiendo por institucin un grupo social organizado (el
ordenamiento de partidos, sindicatos, organizaciones empresariales, iglesias,
etctera); 2) conflictos entre ordenamientos estatales que son propios del de-
recho internacional, tanto pblico como privado; 3) conflictos entre ordena-
mientos estatales y el derecho internacional universal, y 4) conflictos entre el
ordenamiento del Estado y ordenamientos antiestatales como el de las sectas
y las asociaciones ilcitas.258
En los ordenamientos existen distintos tipos o gneros de relaciones. Una
inicial clasificacin toma en cuenta la jerarqua para resolver posibles con-
142
143
el derecho estatal. En otros casos, el reenvo se hace presente, esto es, el proce-
dimiento por medio del cual un ordenamiento no se apropia del contenido
de las normas de otro ordenamiento, como ocurre en la recepcin, sino que
se limita a reconocer su plena validez en su propio mbito. A nivel federal
en Mxico y a partir de la reforma en materia indgena de 2001, el derecho
mexicano reenvo en ciertas materias algunas del artculo 2 de la Constitu-
cin a los sistemas jurdicos indgenas.261
Bobbio tambin clasifica las relaciones entre ordenamientos tomando
en cuenta los mbitos temporal, espacial y material. Distingue tres tipos
de relaciones: 1) dos ordenamientos tienen entre s en comn el mbito
espacial y el material, pero no el temporal. Se trata del caso de dos ordena-
mientos estatales que temporalmente se suceden en un mismo territorio,
por ejemplo entre el Cdigo Civil vigente y el Cdigo Civil de 1884; 2) dos
ordenamientos tienen en comn entre s el mbito temporal y el material,
pero no el espacial. Se trata de la relacin entre dos ordenamientos contem-
porneos, vigentes al mismo tiempo, y que regulan grosso modo las mismas
materias, pero en dos territorios diferentes, por ejemplo dos cdigos civiles
de distintos pases o de diferentes entidades federativas, y 3) dos ordena-
mientos tienen en comn entre s el mbito temporal y el espacial, pero no
el material. Se trata, por ejemplo, de la relacin caracterstica entre el orde-
namiento estatal y el ordenamiento de la Iglesia catlica.262
El caso de conflictos entre ordenamientos en el tiempo tiene relacin
con interesantes debates sobre la persistencia de normas anteriores de or-
denamientos previos en el ordenamiento vigente, principalmente a nivel de
normas constitucionales; as se dice, por ejemplo, que algunas normas de las
Constituciones de 1824 o 1857 que no se oponen a la vigente, pueden aun
tener vigencia y validez. El problema terico en el pasado tena que ver con
el tratamiento jurdico de las revoluciones, pues se supona que el cambio
de ordenamientos se produca necesariamente a travs de una revolucin,
hoy en da, las transformaciones profundas en los ordenamientos y aun su
sustitucin, no necesariamente ocurren a travs de medios violentos sino
empleando el acuerdo y el consenso poltico, lo que se conoce en la ciencia
poltica como transiciones a la democracia por reforma pactada.263 No obs-
tante, a nivel jurdico, los conflictos entre ordenamientos que se suceden en
el tiempo permanecen, por lo que muchas veces los nuevos ordenamientos
suelen establecer qu partes de los sistemas jurdicos anteriores pueden tener
vigencia en el nuevo. En este sentido conviene tener presente lo sealado en
el artculo 72, inciso f, de la Constitucin que dispone que en la interpreta-
cin, reforma o derogacin de las leyes o decretos, se observarn los mismos
trmites para su formacin, y en lo regulado en el artculo 9 del Cdigo
144
Civil para el Distrito Federal que dice: La ley slo queda abrogada o de-
rogada por otra posterior que as lo declare expresamente o que contenga
disposiciones total o parcialmente incompatibles con la ley anterior.
Es importante distinguir entre abrogacin y derogacin. El trmino
abrogacin proviene del latn abrogatio, del verbo abrogare que significa anu-
lar. La abrogacin entraa la supresin total de la vigencia, obligatoriedad
y efectos de una ley. En cambio, la derogacin alude a la prdida parcial de
una ley y no a la prdida total de la vigencia de una ley como en el caso
de la abrogacin.
La abrogacin puede ser de tres tipos: 1) abrogacin expresa directa
cuando la ley expresamente declara que otra ley ha dejado de tener vigencia;
2) abrogacin expresa indirecta ocurre cuando la ley establece expresamente
su periodo de vigencia, o bien, cuando la ley se ha dictado para regir una
situacin transitoria, y 3) abrogacin tcita se da cuando la entrada en vigor
de una ley implica la abrogacin de otra por regular una misma materia,
conforme al principio lex posterior derogat priori o cuando una ley que entra
en vigor establece una regulacin opuesta a otra de anterior vigencia.
Un tema fundamental de conflicto de ordenamientos en el tiempo es el
de la retroactividad. La prohibicin de aplicacin retroactiva de las normas
entraa que el ordenamiento jurdico rige para el futuro y que las normas del
presente no pueden modificar o afectar hechos ocurridos bajo el imperio
de normas anteriores. Nuestra Constitucin en el prrafo primero del ar-
tculo 14 establece que a ninguna ley se le dar efecto retroactivo en perjuicio
de persona alguna. Lo que significa que cuando beneficia a los gobernados
se puede aplicar a favor.
En materia penal la ley puede aplicarse retroactivamente en los siguien-
tes supuestos: 1) cuando la aplicacin de la pena prevista por la ley posterior
a la perpetracin del delito, implique la disminucin o extincin de la san-
cin al inculpado o al sentenciado, se aplicar la de la nueva ley, salvo que la
de la anterior disposicin implique un beneficio al inculpado con relacin
a la reduccin o supresin de la pena; 2) cuando en sentencia ejecutoriada
(firme), la ley posterior reduzca la pena dictada en la misma, nada impide
que se aplique el trmino ms favorable al reo que resulte de la ejecucin
de la nueva ley, si el mximo y el mnimo de la misma se encuentra ms
reducido que el de la anterior disposicin, y 3) cuando el sujeto hubiese
sido sentenciado a una pena entre el trmino mnimo y el mximo, se estar
a la reduccin que resulte en el trmino medio aritmtico conforme a la
nueva norma.264
La materia procesal civil tambin presenta excepciones a la prohibicin
de aplicacin retroactiva de las normas. As, los negocios de jurisdiccin con-
145
146
Los actos jurdicos, en todo lo relativo a su forma, se regirn por las leyes del
lugar donde pasen. Sin embargo, los mexicanos o extranjeros residentes fuera
del Distrito Federal quedan en libertad para sujetarse a las formas prescritas
por este cdigo cuando el acto haya de tener ejecucin en la mencionada
demarcacin.
Para muchos autores, las normas de derecho internacional privado dan lugar
a un reenvo, pero ms importante an, es que las normas de derecho in-
ternacional privado son esencialmente normas para la produccin jurdica,
esto es, no se regula una materia dada sino a la fuente que la regula.
En los conflictos en materia de derecho internacional privado el artcu-
lo 12 del Cdigo Civil Federal establece que las leyes mexicanas rigen a todas las
personas que se encuentren en la Repblica, as como los actos y hechos ocu-
rridos en su territorio o jurisdiccin y aquellos que se sometan a dichas leyes,
salvo cuando stas prevean la aplicacin de un derecho extranjero y salvo,
adems, lo previsto en los tratados y convenciones de que Mxico sea parte.
Lo anterior significa, salvo las excepciones de la norma citada y las previstas
en los artculos 13, 14 y 15 del mencionado cdigo, que nuestro derecho
consagra un principio de territorialidad del ordenamiento mexicano. El C-
digo Civil Federal indica en sus artculos 13, 14 y 15 lo siguiente:
147
148
Los delitos cometidos por mexicanos o por extranjeros en alta mar, a bordo de
buques nacionales; los ejecutados a bordo de un buque de guerra nacional surto
en puerto o en aguas territoriales de otra nacin y, esto se extiende al caso de
que el buque sea mercante, si el delincuente no ha sido juzgado en la nacin
a que pertenezca el puerto; los cometidos a bordo de un buque extranjero surto
en puerto nacional o en aguas territoriales de la Repblica, si se turbare la tran-
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150
VII. Recapitulacin
151
Cuestionario
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153
Captulo sexto
Las fuentes del derecho
En trminos contemporneos, sobre las fuentes del derecho existen tres en-
foques: el explicativo o social; el justificativo o valorativo y el sistemtico
o formalista. El explicativo o social da cuenta de los factores sociales que expli-
can la gnesis y el contenido de las normas jurdicas; el justificativo o valorativo
entraa los valores o bienes que justifican a las normas jurdicas, y el sistemtico
o formalista implica el rgimen jurdico de la creacin de las normas jurdicas.
I. Introduccin
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157
158
159
La ley est en relacin con otras fuentes como la Constitucin, los tratados,
las decisiones judiciales y el carcter argumentativo del derecho.
De lo expuesto queda en evidencia que la disciplina de las fuentes del
derecho se extiende actualmente a la consideracin del proceso global de
produccin y aplicacin del derecho supranacional, nacional y subna-
cional, en donde las normas de produccin jurdica o de cambio, en la
terminologa de Hart, deben ser la materia principal de objeto y de anlisis
de cualquier teora de las fuentes. Igualmente, la interpretacin, la aplicacin
y el razonamiento jurdico desempean un papel central en la teora de las
fuentes, pues la interpretacin y aplicacin de las normas son fuentes en s
mismas y no pueden ser entendidas en un sentido mecanicista. El concepto
de fuentes no debe limitarse a contemplar las diversas categoras normati-
vas por su origen, sino que debe analizarlas en virtud de su relacin con
otras categoras, es decir, la confluencia de varios rganos, diversidad de pro-
cedimientos de produccin, etctera. Lo que significa que cualquier teora
de fuentes es parte de la teora del ordenamiento, en la que la Constitucin
como fuente principal del sistema, desempea funciones de unificacin, va-
lidacin y de supremaca respecto al resto de las otras fuentes.280
Debe decirse que la teora de las fuentes del derecho pone tambin sobre
la mesa los modelos que sobre el derecho existen. Josep Aguil en un ejer-
cicio de sntesis y a propsito de las fuentes y del modelo de derecho preferi-
ble, propone dos modelos de derecho que son antagnicos: en el primero, el
derecho es visto como un conjunto de normas, y en el segundo, el derecho
es considerado como argumentacin, como razonamiento justificativo.281
Las teoras del primer modelo principalmente Hart construyen
la unidad del derecho desde las normas desde arriba, desde la regla de
reconocimiento. Consideran que el legislador es el protagonista central
del derecho, que el origen del deber jurdico se halla en la relacin de suje-
cin y/o de autoridad, y que el derecho tiene su origen en la autoridad del
Estado. Estas teoras estiman que el gnero subalterno en el derecho es la
moral y han tratado de excluir la moral del derecho. En consecuencia, han
enfatizado la distincin entre estndares jurdicos y no jurdicos y han ten-
dido ha sostener que el carcter jurdico de un determinado estndar puede
independizarse de su calidad moral. Para poder cerrar o unificar el derecho
por abajo recurren a la discrecionalidad, esto es, las indeterminaciones del
derecho son vistas bsicamente como delegaciones de poder para que las
autoridades jurisdiccionales acten como legisladores. En estas posiciones
resulta central la idea de que el orden jurdico es un orden social, es decir,
la estructura y el contenido del orden jurdico dependen del uso que la
160
gente hace del mismo: el derecho es una prctica social. Esta prctica social
incorpora los criterios ltimos de validez de las normas jurdicas y suele
desembocar en el reconocimiento de ciertas autoridades ltimas, que son
las autoridades no delegadas, autoridades soberanas, como el pueblo en las
Constituciones democrticas, que son autoridades reconocidas. Lo bsico
en el derecho es la convergencia en el reconocimiento de la legitimidad de
las autoridades ltimas; todo lo dems ya es secundario, interno, derivado,
relativo o, en definitiva, convencional. La funcin del jurista prctico es ser
el guardin de las estructuras legtimas de poder normativo, y por otro ser el
reproductor de la convencin social que es producto de aqullas. Sobra decir
que todas las fuentes del derecho en el primer modelo derivan de la regla de
reconocimiento y de las sucesivas delegaciones normativas de autoridad que
existen a partir de la misma.282 Es decir, las fuentes del derecho en sentido
tcnico son las normas que regulan la produccin jurdica.
El segundo modelo se distingue por construir la unidad del derecho
desde las soluciones de los casos desde abajo y se asume que el gnero
rector del derecho es la moral Dworkin. En consecuencia el protagonis-
ta central del derecho es el juez, el sentido del deber jurdico es la proteccin
de ciertos bienes y/o valores morales, el derecho tiene naturaleza axiolgica,
y que son jurdicos aquellos estndares que proveen la solucin correcta y
coherente para el caso que se trata de resolver. En el segundo modelo se
desdibuja la distincin entre moral y derecho y el ordenamiento jurdico
es una prolongacin del razonamiento moral. Estas teoras han considerado
que el gnero subalterno en el derecho es la poltica y han tratado de cerrar
el derecho por abajo, en la decisin judicial, a la discrecionalidad. Las su-
puestas indeterminaciones del derecho y las lagunas normativas no son tales,
los estndares jurdicos no provienen slo de actos de poder realizados por
autoridades, el derecho se cierra por arriba a travs de los elementos axiol-
gicos que en el derecho existen o que provienen de la moral. La coherencia
o la unidad valorativa es el criterio para identificar los estndares jurdicos.
El carcter jurdico de una norma no puede independizarse de la moral. El
derecho tambin aqu es una prctica social, en donde el derecho es el re-
sultado de la convergencia de los miembros de la sociedad en torno al reco-
nocimiento de ciertos bienes y/o valores morales bsicos, los cuales no son
constituidos por el derecho sino reconocidos por l. El papel del jurista es ser
el guardin de los valores y/o bienes morales. En cuanto a las normas y la re-
lacin entre ellas, no es que no importen, pero son un elemento secundario
que depende a fin de cuentas de la coherencia valorativa de los elementos
jurdicos. Las fuentes del derecho en este modelo son desde luego axiolgi-
161
Existen diversas clasificaciones de las fuentes del derecho. Una primera dis-
tingue entre fuentes directas e indirectas. Las directas son las que encierran
en s la norma jurdica, las que la contienen.Tradicionalmente, las directas se
reducan a dos: la ley y la costumbre. Algunos agregan los principios genera-
les del derecho. Hoy son parte, entre otras, de las fuentes directas: la Consti-
tucin, los tratados, los precedentes judiciales, adems de la ley, la costumbre
y los principios generales del derecho, los contratos, etctera. Las fuentes in-
directas son las que ayudan a la comprensin y conocimiento de las normas
jurdicas. Son los documentos y publicaciones a travs de los cuales se puede
conocer el derecho o la doctrina que permite la comprensin de las normas
jurdicas legisladas o contenidas en los precedentes judiciales.284
Otra clasificacin alude a las fuentes internas y externas. Esta precisin
proviene de Gny que seal por un lado las fuentes formales internas ley,
costumbre y tradicin, y por otro las fuentes no formales o externas que
incluyen todos los elementos objetivos que se conocen por la libre investi-
gacin cientfica y que funciona sobre dos clases de elementos: los raciona-
les que son los principios revelados por la razn, y los objetivos, que surgen
de la naturaleza de las cosas.285
Una tercera clasificacin distingue entre fuentes estatales y fuentes ex-
traestatales. Las primeras suponen la creacin directa del derecho por los
rganos del Estado a travs de sus rganos y procedimientos. En tanto que
las extraestatales provienen de mbitos e instancias de carcter no estatal,
tales como la propia sociedad la costumbre, sectores sociales de la mis-
ma como el derecho de los pueblos indgenas o de organizaciones polticas,
sindicales, empresariales, eclesiales, etctera.
Otra clasificacin distingue entre fuentes-acto y fuentes de hecho. Se
habla de fuentes-acto para hacer referencia a las normas que regulan la
produccin normativa y que tienen por propsito crear o modificar el
derecho vigente y obtener, consiguientemente, las correspondientes mo-
dificaciones en el comportamiento de los destinatarios de las mismas. Son
fuentes-acto la Constitucin, la ley, el reglamento y las normas que esta-
blecen el reenvo a otras normas u ordenamientos, como las relativas al de-
162
163
1. La Constitucin
Esta Constitucin, las leyes del Congreso de la Unin que emanen de ella
y todos los tratados que estn de acuerdo con la misma, celebrados y que se
celebren por el presidente de la Repblica, con aprobacin del Senado, sern
la ley suprema de toda la Unin. Los jueces de cada Estado se arreglarn a
dicha Constitucin, leyes y tratados, a pesar de las disposiciones en contrario
que pueda haber en las Constituciones o leyes de los estados.
164
que posee legitimidad,291 esto es, porque ha sido reconocida por gober-
nantes y ciudadanos como la norma jurdica suprema. Ese reconocimiento
deviene en los Estados democrticos de los contenidos normativos de la
propia Constitucin y del procedimiento democrtico de su aprobacin;
entre otros, la creencia de que el origen y fin del poder pblico y del orden
normativo reside en la soberana popular, el establecimiento y garantas a los
derechos humanos, la promocin de los procedimientos democrticos, la
divisin del poder, etctera. El carcter obligatorio y vinculante de la Cons-
titucin, significa que sta no contiene un catlogo de buenas intenciones
sino que sus disposiciones normativas reglas, principios y valores son de
inmediata vinculacin y cumplimiento por parte de las autoridades y ciuda-
danos, obviamente en los trminos que la propia Constitucin establece.
Los actos y omisiones de autoridades y particulares en contra de la Cons-
titucin son inconstitucionales. Para enfrentar las inconstitucionalidades las
Constituciones prevn una serie de mecanismos procesales para ser defen-
didas. Esos instrumentos de impugnacin y procedimientos son llamados
medios de control de constitucionalidad. En muchos pases del mundo,
esos mecanismos se encargan al conocimiento de cierto tipo de tribunales
que se conocen como tribunales o cortes constitucionales, en el caso de
Mxico y hasta ahora, la encomienda la tiene el Poder Judicial de la Fede-
racin. En nuestro pas, los ms importantes medios de control de cons-
titucionalidad son: el juicio de amparo previsto en los artculos 103 y 107
constitucionales, las controversias constitucionales establecidas en el artcu-
lo 105 fraccin i de la Constitucin, y las acciones de inconstitucionalidad
contempladas en la fraccin ii del artculo 105 ya citado.
En el derecho comparado, la constitucionalidad de las normas y dispo-
siciones jurdicas se verifica tambin comprobando su conformidad con las
normas formalmente constitucionales. En ocasiones, los tribunales constitu-
cionales europeos utilizan normas secundarias como parmetro para medir
la constitucionalidad de otras normas secundarias. Esta paradjica situacin
recibe el nombre de bloque de constitucionalidad.
La nocin bloque de constitucionalidad surge de la doctrina francesa
a comienzos de la dcada de los sesenta del siglo xx para designar el con-
junto de normas situadas en el nivel constitucional cuyo respeto se impo-
ne a la ley. Segn el derecho constitucional francs, componen el bloque
de constitucionalidad la Constitucin francesa de 1958, la Declaracin de
Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789, el Prembulo de la Cons-
titucin francesa de 1946 y los principios fundamentales reconocidos en las
leyes de la Repblica.292
165
166
2. Los tratados
De acuerdo con los artculos 89, fraccin x; 76, fraccin i, y en relacin con
el artculo 133 de la Constitucin, los tratados celebrados por el presidente y
que sean ratificados por el Senado son parte del ordenamiento nacional. Has-
ta hace muy poco, los tratados eran considerados despectivamente por mu-
chos mbitos jurdicos. En nuestros das, son una de las fuentes formales ms
importantes del sistema jurdico. Ello es consecuencia de la crisis de la sobe-
rana que se vive en muchos pases del mundo y del fenmeno de la globa-
lizacin que tambin impacta al derecho.
La concepcin de los Estados nacionales que los entenda como fortale-
zas cerradas sin vnculos con el exterior ha quedado superada.Tanto interna
como externamente la idea de soberana, entendida como autodetermina-
cin se ha modificado. Como dice Gustavo Zagrebelsky:
Desde finales del siglo pasado actan vigorosamente fuerzas corrosivas, tanto
interna como externamente: el pluralismo poltico y social interno, que se
opone a la idea misma de soberana y de sujecin; la formacin de centros
de poder alternativos y concurrentes con el Estado, que operan en el campo
poltico, econmico, cultural y religioso, con frecuencia en dimensiones total-
mente independientes del territorio estatal; la progresiva institucionalizacin,
promovida a veces por los propios Estados, de contextos que integran sus po-
deres en dimensiones supraestatales, sustrayndolos as a la disponibilidad de los
Estados particulares; e incluso la atribucin de derechos a los individuos, que
pueden hacerlos valer ante jurisdicciones internacionales frente a los Estados a
los que pertenecen.293
167
168
3. La ley
En un sentido muy amplio y vago, la palabra ley designa a toda norma ju-
rdica emanada del poder pblico, es decir, de los rganos del Estado. En un
sentido estricto, la ley es la norma jurdica aprobada por el Poder Legislativo.
Las leyes histricamente han sido aprobadas por autoridades en forma de
preceptos escritos, con lo que las leyes se contraponen a las costumbres, pues
stas surgen del pueblo y se manifiestan espontneamente a travs del uso. La
costumbre es una fuente hallada, en cambio la ley es una fuente creada
ex novo por rganos del Estado, especficamente y en su sentido contempor-
neo por los rganos del Poder Legislativo. La expresin escrita de las normas,
no le confieren a stas el carcter de ley, ya que pueden existir costumbres
que se recogen por escrito y no tienen por ello la naturaleza de ley, esto
es, de ser creadas por rganos del Estado el Legislativo, sino que se tratara
de normas descubiertas o halladas, que se han originado en la sociedad.296
169
170
Son diversas las razones que explican por qu la ley sigue siendo una
fuente importante del ordenamiento. En primer lugar, porque emana de au-
toridades que han sido elegidas por eleccin popular a diferencia de muchas
autoridades administrativas y judiciales que no cuentan para su designacin
con el respaldo directo de los ciudadanos. En segundo lugar, porque la ley
sigue garantizando el principio de divisin de poderes e impide en princi-
pio que otras autoridades sin razn o justificacin alguna integren o creen
derecho. En tercer lugar, porque evita la arbitrariedad de las autoridades
va el principio de legalidad las autoridades slo pueden hacer lo que
la ley les faculta aunque en sistemas jurdicos diferentes al mexicano, se
prefiere hablar de un principio de juridicidad que determina que las auto-
ridades deben actuar de conformidad con la totalidad del ordenamiento y
no necesariamente con fundamento en alguna disposicin de una ley espe-
cfica.298 En cuarto lugar, porque existen ciertas materias que slo pueden
ser normadas en ley y no a travs de otro gnero de fuentes; en Mxico, los
delitos, las penas y las contribuciones impositivas slo pueden estar previs-
tos en ley a esta institucin se le conoce en la teora del derecho como
reserva de ley.299 En quinto lugar, la ley se debe elaborar para evitar la
aplicacin retroactiva de las normas, pues segn el artculo 14, primer p-
rrafo de la Constitucin, a ninguna ley se dar efecto retroactivo regular
situaciones previas a la entrada en vigor de la ley con la ley que entra en
vigor en perjuicio de persona alguna. En sexto lugar, la ley previene con-
tra las disposiciones privativas aprobadas con el propsito de menoscabar
derechos fundamentales de personas especficas que prohbe el artcu-
lo 13 de la Constitucin. En sptimo lugar, porque se supone que la ley
emana de un procedimiento deliberativo, pblico y abierto, superior a otros
procedimientos normativos que carecen del nivel de deliberacin, discusin,
transparencia y apertura que tiene el procedimiento legislativo. En sntesis, la
ley reconoce al Poder Legislativo su carcter representativo de los intereses
de la nacin, tal como seala el artculo 51 de la Constitucin que establece
que los diputados son representantes de ella.
El procedimiento legislativo federal en Mxico est compuesto por siete
etapas de cumplimiento necesario para que la ley tenga en principio validez,
pues todava debe comprobarse si tiene correspondencia con la Constitu-
cin cuando es sometida a revisin constitucional va las acciones de in-
constitucionalidad, las controversias constitucionales y el juicio de amparo.
Estas siete etapas son: la iniciativa, la discusin, la aprobacin, la sancin, la
publicacin, la iniciacin de la vigencia y el refrendo ministerial. El fun-
damento constitucional del procedimiento legislativo federal se encuentra
en los artculos 70, 71, 72 y 92 constitucionales y a nivel secundario en los
171
artculos 3 y 4 del Cdigo Civil que fijan las reglas sobre la iniciacin de la
vigencia de las leyes.
De acuerdo con el artculo 71 de la Constitucin, tienen facultad de ini-
ciativa el presidente de la Repblica, los diputados y senadores al Congreso
de la Unin, y las legislaturas de los estados. La Constitucin seala que las
iniciativas presentadas por el presidente de la Repblica, por las legislatu-
ras de los estados o por las diputaciones de los mismos pasarn a comisiones;
en cuanto las presentadas por diputados o los senadores de la Federacin, se
sujetarn a los trmites que designe el Reglamento de Debates. A nivel fe-
deral, en nuestro pas no existe la iniciativa legislativa popular o ciudadana
que fortalecera los derechos ciudadanos y el nivel de debate en nuestro
pas.300 Tambin se echa en falta que el Poder Judicial federal no tenga fa-
cultad de iniciativa en las materias de su competencia o, que otros rganos
previstos en la Constitucin, como los electorales carezcan tambin de ella.
La discusin consiste en los actos y procedimientos en los que los miem-
bros de ambas Cmaras deliberan acerca de las iniciativas, para determinar si
deben o no ser aprobadas. El primer prrafo del artculo 72 constitucional
establece: Todo proyecto de ley o decreto, cuya resolucin no sea exclusiva
de alguna de las Cmaras, se discutir sucesivamente en ambas, observndose
el Reglamento de Debates sobre la forma, intervalos y modo de proceder
en las discusiones y votaciones. La discusin de las leyes o decretos puede
comenzar en cualquiera de las cmaras, con excepcin de los proyectos que
versen sobre emprstitos, contribuciones o impuestos, o sobre reclutamien-
to de tropas, los que deben discutirse primero en la Cmara de Diputados,
segn lo seala el artculo 72, fraccin H, de la Constitucin. La fraccin i
del artculo 72 constitucional indica que las iniciativas de leyes o decretos
se discutirn preferentemente en la Cmara que se presenten, a menos que
transcurra un mes desde que se pasen a la Comisin dictaminadora sin que
sta rinda dictamen, pues en tal caso el mismo proyecto de ley o decreto
puede presentarse y discutirse en la otra Cmara.
En Mxico se ha cuestionado la ausencia de deliberacin en los recin-
tos legislativos, as como la falta de transparencia en las deliberaciones de los
legisladores. Es obvio que el proceso legislativo requiere ajustes en aras de
lograr mayor eficacia y eficiencia en los trmites parlamentarios, pero so-
bre todo mayor nivel de deliberacin y transparencia en las discusiones y
debates legislativos.
La aprobacin es el acto por el que las cmaras aceptan un proyecto de
ley, ya sea de manera total o parcial. Las votaciones en las cmaras de leyes o
decretos deben ser nominales, es decir, uno por uno de los legisladores debe
pronunciarse por el proyecto respectivo, ya sea a favor, en contra o con una
172
abstencin, segn reza la ltima parte del inciso C del artculo 72 constitu-
cional. Las reglas sobre aprobacin total o parcial se encuentran previstas en
las fracciones D, E y G del artculo 72 constitucional.
Se entiende por sancin la aceptacin o aprobacin de una iniciativa
por el Poder Ejecutivo. La sancin debe ser posterior a la aprobacin del
proyecto por las cmaras. El presidente de la Repblica puede negar su san-
cin a un proyecto aprobado por el Congreso por ambas Cmaras. Esta
facultad recibe el nombre de veto y se encuentra regulada en las fracciones
A, B, C y J del artculo 72 y en el ltimo prrafo del artculo 70 constitucio-
nal. Los vetos pueden ser superados por las dos terceras partes del nmero
total de votos de cada una de las Cmaras.
La promulgacin consiste en el reconocimiento formal por parte del
Ejecutivo de que la ley ha sido aprobada conforme a derecho y debe ser
obedecida por sus destinatarios. Esta etapa se ha prestado a confusiones, pues
para muchos autores la promulgacin equivale a la publicacin formal de la
ley. Otros aceptan una distincin que desde nuestro punto de vista es pro-
blemtica;301 sin embargo, la fraccin C del artculo 72 constitucional alude
expresamente a la promulgacin.
La publicacin es el acto por el que la ley ya aprobada por el Congreso,
sancionada y promulgada por el Ejecutivo, se da a conocer a quienes deben
cumplirla. La publicacin se hace en el Diario Oficial de la Federacin y en los
estados en los diarios o gacetas oficiales. Sin la publicacin, la ley no pue-
de entrar en vigencia. En el sistema federal mexicano el artculo 120 de la
Constitucin precisa que los gobernadores de los estados estn obligados a
publicar y hacer cumplir las leyes federales.
En nuestro derecho existen dos sistemas de iniciacin de la vigencia:
el sucesivo y el sincrnico. El primero se da cuando la ley en sus artculos
transitorios no fija fecha precisa para el inicio de su vigencia. En ese caso,
el artculo 3 del Cdigo Civil para el Distrito Federal establece la regla
general de que la ley entra en vigor tres das despus de su publicacin en
el Diario Oficial.302 El sistema sincrnico, por el contrario, se contempla
en el artculo 4 del Cdigo Civil para el Distrito Federal, mismo que con-
siste en la determinacin precisa que el legislador hace de la fecha en que
debe regir una ley con tal de que la publicacin haya sido anterior. En am-
bos sistemas, el lapso comprendido entre el momento de la publicacin y
aquel en que la norma entra en vigor recibe el nombre de vacatio legis. Este
plazo se brinda en atencin a los destinatarios, para que estn en condiciones
de conocer la ley y de cumplirla. Lo anterior es muy relevante porque la
ignorancia de la ley no sirve de excusa para su cumplimiento,303 aunque el
artculo 21 del Cdigo Civil para el Distrito Federal indica que los indivi-
173
duos que incumplan las leyes que ignoraban por su apartamiento de las vas
de comunicacin o por su miserable situacin econmica, pueden ser exi-
midos de las sanciones en que hubieren incurrido o, de ser posible, conceder-
les un plazo para que las cumplan, siempre y cuando el Ministerio Pblico lo
solicite y se trate de leyes que no afecten directamente al inters pblico.
Un elemento fundamental para que cualquier ley sea obedecida adems
de su publicacin y del cumplimiento de la fecha para su entrada en vigor,
consiste en el refrendo ministerial. ste se encuentra previsto en el artcu-
lo 92 de la Constitucin que seala: Todos los reglamentos, decretos,
acuerdos y rdenes del presidente debern estar firmadas por el secretario
de Estado o jefe de Departamento Administrativo a que el asunto corres-
ponda, y sin este requisito no sern obedecidos.
La ley se encuentra en vigor mientras otra ley no la abrogue o derogue.
El artculo 9 del Cdigo Civil para el Distrito Federal indica: La ley slo
queda abrogada o derogada por otra posterior que as lo declare expre-
samente o que contenga disposiciones total o parcialmente incompatibles
con la ley anterior. La abrogacin implica la supresin total de un cuerpo
normativo y la derogacin la eliminacin de algunas partes del mismo.
Es importante sealar que la derogacin afecta a la vigencia de las nor-
mas limitando o constriendo en el tiempo su aplicabilidad o capacidad
regulativa. El efecto derogatorio consiste en circunscribir la eficacia de las
normas derogadas desde el momento en que entra en vigor la norma de-
rogatoria; se trata, pues, de un efecto ex nunc o pro futuro, por eso, las rela-
ciones que se hayan constituido al amparo de la norma derogada antes de
la derogacin siguen siendo reguladas por ella. A ese fenmeno se le llama
ultraactividad de las normas derogadas.
La derogacin de las normas es diferente a la anulacin de las normas
por declaracin de inconstitucionalidad de las mismas. Entre las diferen-
cias ms importantes podemos anotar las siguientes: 1) la anulacin de las
leyes en los sistemas de control concentrado de constitucionalidad puede
producir efectos ex tunc (retroactivos), la derogacin opera siempre ex nunc
(o pro futuro); 2) en la inconstitucionalidad de normas, en principio, no es
posible la ultraactividad de la ley anulada; 3) puesto que cabe aplicar ultraac-
tivamente la ley derogada, aun es posible anularla, mientras que no tiene
sentido anular (de nuevo) una ley que ha sido anulada; 4) en los sistemas
de constitucionalidad concentrados, la inconstitucionalidad o anulacin de
las normas surte sus efectos slo si media declaracin previa del Tribunal
Constitucional; en cambio, los efectos de la derogacin surgen de manera
automtica desde la entrada en vigor de la ley derogatoria, con lo que cual-
quier juez puede inaplicar sin ms la ley derogada.
174
4. La jurisprudencia
La ley fijar los trminos en que sea obligatoria la jurisprudencia que esta-
blezcan los tribunales del Poder Judicial de la Federacin sobre interpretacin
de la Constitucin, leyes y reglamentos federales o locales y tratados interna-
cionales celebrados por el Estado mexicano, as como los requisitos para su
interrupcin y modificacin.
175
Cuando una Sala del Tribunal Electoral sustente una tesis sobre la inconstitu-
cionalidad de algn acto o resolucin o sobre la interpretacin de un precepto
de esta Constitucin y dicha tesis pueda ser contradictoria con una sostenida
por las salas y el Pleno de la Suprema Corte de Justicia, cualquiera de los mi-
nistros, las salas o las partes, podrn denunciar la contradiccin, en los trmi-
nos que seale la ley, para que el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la
Nacin decida en definitiva cul tesis debe prevalecer. Las resoluciones que se
dicten en este supuesto no afectarn los asuntos ya resueltos.
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177
5. El reglamento
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sin este requisito no sern obedecidos. Al igual que las leyes y otras disposi-
ciones, los reglamentos deben ser publicados, para que se conozcan y sean
cumplidos, en los diarios y gacetas oficiales, segn lo prevn los artculos 3
y 4 del Cdigo Civil para el Distrito Federal.
No slo el Ejecutivo tiene la facultad reglamentaria. Existen otras ins-
tancias, poderes, rganos y niveles de gobierno que emiten reglamentos o
disposiciones generales que no tienen carcter de ley. Por ejemplo, el artculo
94, prrafos quinto, sexto y sptimo de la ley fundamental dan competencia
a diversos rganos del Poder Judicial para emitir disposiciones generales y
acuerdos generales en el mbito de sus competencias. El Congreso general
y las legislaturas de los Estados emiten reglamentos de organizacin, funcio-
namiento y debates. El artculo 41, base iii, de la Constitucin confiere atri-
buciones al Instituto Federal Electoral para emitir el Estatuto del Servicio
Profesional Electoral y el artculo 82.1, inciso a, del Cdigo Federal de Insti-
tuciones y Procedimientos Electorales, determina la competencia del Con-
sejo General para emitir los reglamentos interiores necesarios. El artculo
115, fraccin ii, de la Constitucin establece que los ayuntamientos tienen
competencia para aprobar, de acuerdo con las leyes en materia municipal, los
bandos de polica y gobierno, los reglamentos, circulares y disposiciones ad-
ministrativas de observancia general dentro de sus respectivas jurisdicciones,
las que tienen por propsito organizar la administracin pblica municipal,
regular las materias, procedimientos, funciones y servicios pblicos de su
competencia, y asegurar la participacin ciudadana y vecinal.
6. La costumbre
180
que guarda con los preceptos legales: costumbre secundum legem (segn la ley,
en el mismo sentido que lo hace la ley); costumbres contra legem (contra la
ley), y costumbres praeter legem (fuera de la ley, regula una situacin que la ley
no ha previsto y sirve para colmar lagunas legales).
En el derecho mexicano, el artculo 10 del Cdigo Civil del Distrito
Federal establece: Contra la observancia de la ley no puede alegarse desuso,
costumbre o prctica en contrario. En Mxico no puede existir costumbre
derogatoria o contra legem. En ese mismo cuerpo normativo diversos precep-
tos aluden a la costumbre y en ocasiones a los simples usos, pero siempre en
el sentido de fuente autorizada por la ley, subordinada a la ley y de carcter
supletorio (praeter legem). Algunos ejemplos son los siguientes:
181
que deriven de dichos ordenamientos, los principios generales del derecho, los
principios generales de justicia social que derivan del artculo 123 de la Cons-
titucin, la jurisprudencia, la costumbre y la equidad.
Los actos y las operaciones a que se refiere el artculo anterior, se rigen: i. Por
lo dispuesto en esta Ley, y en las dems leyes especiales relativas; en su defecto,
ii. Por la legislacin mercantil general; en su defecto, iii. Por los usos bancarios
y mercantiles y, en defecto de stos, iv. Por el derecho comn, declarndose
aplicable en toda la Repblica, para los fines de esta Ley, el Cdigo Civil del
Distrito Federal.
182
En resumen, podemos decir que los principios generales del derecho son
la consecuencia del proceso de integracin del derecho, es decir, de una
actividad creadora de normas, y tanto ms creadora cuanto menor es el n-
mero de disposiciones expresas que pueden aducirse como justificacin de
la validez de un cierto principio.
8. La doctrina
183
V. Recapitulacin
184
problema del origen de las normas. Las normas que nacen democrticamen-
te, coinciden con el sentir social, y se orientan a la proteccin de los derechos
humanos, tienen ms posibilidades de ser acatadas y respetadas por los ciuda-
danos que aquellas otras que no tienen ningn vnculo con estos factores.
Al analizar la expresin fuente del derecho desde su terminologa jurdica
formal podemos encontrar tres significados. En el primero, podemos referir-
nos a fuente como facultades o poder de creacin normativa de autoridades
y particulares. En el segundo, fuente como norma de segundo grado para la
produccin de nuevas normas o fuente como el derecho objetivo mismo. En
el tercero, fuente como origen del conocimiento jurdico. Generalmente se
emplea la expresin fuente en su segunda acepcin, esto es, como las normas
de derecho objetivo que permiten la produccin de otras normas jurdicas
o, como el tipo de regulacin normativa Constitucin, ley, tratado, regla-
mento, etctera y hasta como las manifestaciones especficas de los tipos
de regulacin normativa (la ley X o el reglamento Y).
Las teoras de las fuentes del derecho ponen sobre la mesa los modelos
que sobre el derecho existen. Josep Aguil en un ejercicio de sntesis y a
propsito de las fuentes y del modelo de derecho preferible, propone dos
modelos de derecho que son antagnicos: en el primero, el derecho es
visto como un conjunto de normas y en el segundo, el derecho es consi-
derado como argumentacin, como razonamiento justificativo.
La Constitucin como fuente del derecho implica dos cuestiones: la pri-
mera es la funcin de la Constitucin como fuente de fuentes, como norma
normarum, esto es, como el vrtice de las normas que da validez y unidad a
todo el ordenamiento, y la segunda, que entiende a la Constitucin como
fuente del derecho en sentido estricto, en el sentido que ella contiene nor-
mas materiales por ejemplo sobre derechos humanos o fundamentales
directamente aplicables por las autoridades a diversas relaciones jurdicas.
El fundamento normativo de la superioridad de la Constitucin en
Mxico, respecto del resto de las normas, no slo se encuentra en el artculo
133 de la misma, sino en una serie de disposiciones que contienen normas
sobre la produccin normativa que establecen los procedimientos de crea-
cin de nuevas normas.
Hasta hace muy poco, los tratados eran considerados despectivamente
por muchos mbitos jurdicos. En nuestros das, son una de las fuentes for-
males ms importantes del sistema jurdico. Ello es consecuencia de la crisis
de la soberana que se vive en muchos pases del mundo y del fenmeno de
la globalizacin que tambin impacta al derecho.
En la actualidad, la ley como fuente del derecho no tiene la importancia
que tuvo en el pasado, se encuentra subordinada a la Constitucin. La ley ya
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Cuestionario
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Captulo sptimo
Conceptos jurdicos fundamentales
y divisin tradicional de la dogmtica jurdica
Los conceptos jurdicos son instrumentos para el estudio y la prctica del de-
recho, adems de ser la base terica para la construccin de otros conceptos.
Su carcter bsico hace que sean empleados en las explicaciones que se desa-
rrollan en distintas ramas del derecho, de ah que se distingan de expresiones
que tienen uso restringido. La dogmtica jurdica se divide para su estudio
entre derecho interno y externo. Otra distincin, precisa las diferencias entre
derecho vigente y derecho eficaz.
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193
Dice Kant que la relacin tiene que ser externa y prctica de una perso-
na con otra, en cuanto sus acciones pueden tener mediata o inmediatamen-
te, como hechos, influencia recproca.Tambin afirma que esta relacin para
ser jurdica, debe ser una relacin entre dos arbitrios, y no entre el arbitrio de
uno y el simple deseo de otro, esto es, no puede haber en la teora kantiana
relacin entre una persona y una cosa. Para Kant hay cuatro tipos posibles
de relacin de un sujeto con otros: 1) la relacin de un sujeto que tiene dere-
chos y deberes con un sujeto que slo tiene derechos y ningn deber (Dios);
2) la relacin de un sujeto que tiene derechos y deberes con un sujeto que
tiene slo deberes y ningn derecho (el esclavo); 3) la relacin de un sujeto
que tiene derechos y deberes con un sujeto que no tiene derechos ni debe-
res (el animal, las cosas inanimadas), y 4) la relacin de un sujeto que tiene
derechos y deberes con un sujeto que tambin tiene derechos y deberes (el
hombre). De las cuatro relaciones slo la ltima es una relacin jurdica.317
La teora del derecho concibe de tres formas generales la relacin jurdi-
ca. Una entiende por relacin jurdica una realidad intranormativa, otra de-
nota la relacin que existe entre las normas del ordenamiento y los sujetos
destinatarios de las normas, y una tercera, explica la relacin jurdica que se
da entre personas o sujetos jurdicos, fruto de la aparicin de determinados
hechos naturales o actos de voluntad de personas fsicas o morales contem-
plados por las normas jurdicas.
En la primera postura, la relacin jurdica se refiere a algo existente en
la misma norma jurdica, en concreto la relacin entre el antecedente y la
consecuencia jurdica de la norma establecida mediante el deber ser, es decir,
se entiende la relacin jurdica como la categora imputativa que hay entre
el supuesto normativo y la sancin. En la segunda forma de entender la
relacin jurdica se alude a dos formas de concebirla: 1) como una relacin
ideal y abstracta entre la norma y sus destinatarios que no trasciende ms all
de la esfera normativa, y 2) como la relacin formada entre la norma como
unidad total que incluye todos sus determinantes, tanto de contenido y de
personas, y a los sujetos realmente existentes designados por la norma. La
tercera forma de entender la relacin jurdica es la de Savigny, que compren-
da a la relacin jurdica como los vnculos entre las personas determinados
por la norma jurdica.
La relacin jurdica es a partir de esta tercera concepcin a) un vnculo
jurdico entre sujetos de derecho o personas jurdicas (fsicas y morales);
b) nacido de hechos naturales o de actos de voluntad de las personas; c) que
se encuentra definido por las normas jurdicas; d) que establecen situacio-
nes jurdicas correlativas, es decir, entre derechos y deberes; e) cuyo objeto
194
Artculo 1827. El hecho positivo o negativo, objeto del contrato, debe ser:
I. Posible;
II. Lcito.
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V. El derecho subjetivo
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La teora jurdica acepta hoy que los enunciados de deber jurdico no pueden
ser analizados como enunciados empricos descriptivos de ninguna clase de
estados mentales ni acciones o estados de cosas, ya que entenderlos como tales
distorsiona el sentido en que son usados.329
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203
Artculo 26. Las personas morales pueden ejercitar todos los derechos que
sean necesarios para realizar el objeto de su institucin.
Artculo 27. Las personas morales obran y se obligan por medio de los r-
ganos que las representan, sea por disposicin de la ley o conforme a las
disposiciones relativas a sus escrituras constitutivas y de sus estatutos.
204
aptitudes mnimas que establecen las leyes penales se les considera responsa-
bles de sus actos, en caso de actualizar un tipo penal. En sentido contrario, a
los incapaces no se les puede exigir adecuar su comportamiento al conteni-
do de las normas penales, y en este sentido son inimputables, lo que significa
que no son susceptibles de ser sancionados penalmente. Se suele decir que
la capacidad en materia civil es una habilitacin para hacer o no hacer y, en
el derecho penal, la capacidad entraa imputabilidad. Ambas capacidades se
regulan negativamente, es decir, en principio los individuos son capaces ex-
cepto en los casos que establece la ley.
La competencia se parece a la capacidad porque las dos son o entraan
autorizaciones para dictar normas. La diferencia est en que la capacidad se
refiere a una facultad dirigida a auto-obligarnos, la capacidad civil se desen-
vuelve en el mbito privado y corresponde a las personas. En cambio, la com-
petencia consiste en una facultad para obligar a otras personas, se manifiesta
en el derecho pblico y corresponde a las autoridades.
As, la competencia es la capacidad de las autoridades para obligar ju-
rdicamente a otras personas; o sea, para dictar normas heternomas. Se
es competente para dictar una ley, una sentencia, un reglamento, que son
normas jurdicas que no se refieren, fundamentalmente, al individuo que las
dicta. De esta suerte, la competencia es la facultad para regular jurdicamen-
te la conducta de los dems.334
Para que un individuo tenga competencia para dictar normas vlidas,
en relacin con un sistema jurdico, debe estar autorizado por una norma
vlida del sistema, esto es, por una norma dictada por otro funcionario
competente, y as sucesivamente; sin embargo, en el caso de los funcionarios
originarios encontraramos que no son autorizados por normas previas v-
lidas, tal es el caso del constituyente originario.
Debe aclararse que la competencia no se agota en un permiso para dic-
tar o aplicar normas, tambin puede estar vinculada a un deber jurdico de
hacerlo. Tal es el caso del carcelero que no slo est obligado a mantener a
alguien detenido, sino que tambin tiene el deber de hacerlo por disponerlo
as una resolucin judicial.
205
las normas que estipulan penas. La accin antijurdica representa una situa-
cin tpica del derecho penal, aunque el delito no agota todos los posibles
supuestos de actos antijurdicos.335 Existen ilcitos o actos antijurdicos en
todos los mbitos del derecho. Lo anterior es as, porque en el positivismo
tradicional no se conciben conductas malas en s mismas como en el ius-
naturalismo, sino exclusivamente la mala prohibita, en donde un comporta-
miento slo es malum cuando es prohibitum.
No obstante lo dicho, las designaciones del acto antijurdico como
aquellas acciones prohibidas por el derecho positivo no deben llevarnos a
pensar que el acto prohibido contradice la norma. Las designaciones del
acto antijurdico como ilcito, contrario a derecho, violatorio del derecho,
expresan una idea ampliamente difundida en el pensamiento jurdico y que,
en opinin de Kelsen, resulta equvoca. Para el autor de la teora pura, el
ilcito que aparece en el enunciado de una norma es el antecedente o con-
dicin, y no la negacin del derecho. La situacin de hecho a que alude esta
condicin es descrita por una proposicin hipottica que enuncia que si se
presenta determinada conducta, por accin u omisin, debe llevarse a cabo
determinado acto coactivo. Como dicen algunos autores puede afirmarse
que la norma hace de la conducta contraria a la que menciona (y a la que
enlaza el acto coactivo) algo interno al propio derecho, determinado por
ste y, por tanto, algo que slo puede ser conceptualmente concebido como
derecho y no de forma externa, o frente al derecho.336
La nocin kelseniana de que el acto antijurdico o ilcito es la conducta
de aquel hombre contra quien, o contra sus allegados, se dirige la sancin,
ha sido criticada ampliamente. Carlos Nino seala que ese concepto deja
sin resolver la cuestin de las conductas que, siendo realizadas por el mismo
sujeto autor del ilcito y destinatario de la sancin, no pueden ser calificadas
como delito, aun cuando su comisin es presupuesto necesario del mismo,
pinsese, por ejemplo, en que para la ejecucin forzosa de un contrato son
indispensables dos conductas: la celebracin de ste y su posterior incum-
plimiento, en donde esta ltima, sin embargo, es la nica que parece ser
calificada de antijurdica.337
Kelsen no logr dar una definicin satisfactoria del concepto de acto
ilcito. El principal problema de la definicin kelseniana de acto antiju-
rdico reside en su falsa idea de considerar que todas las normas tienen la
estructura si es A debe ser B y creer que las normas prohibitivas del tipo
prohibido A eran superfluas porque no estn enlazadas con una sancin.
Por ello, para algunos autores los actos antijurdicos son las conductas que
actualizan las normas prohibitivas de los sistemas jurdicos338 o bien, como
206
dicen Manuel Atienza y Juan Ruiz Manero, los ilcitos son las conductas
humanas contrarias a las normas regulativas de mandato.339
Hart, como sabemos, indica que el sistema jurdico est constituido
por dos tipos de normas: las primarias y las secundarias. Seala que las pri-
meras tienen por funcin establecer aquellos patrones de conducta, y las
secundarias, la de especificar lo que los funcionarios del sistema deben hacer
cuando una norma primaria es infringida. De la distincin anterior, depen-
de, segn Hart, que pueda atribuirse sentido a la nocin delito o ilcito, y
esto ltimo parece la cuestin ms sencilla de todas: Anunciar a la sociedad
que estas acciones las que infringen normas primarias no deben ser
llevadas a cabo, y asegurar la realizacin del menor nmero de ellas.340
El concepto de sancin hace referencia a las medidas que un orden
normativo dispone a fin de reforzar el respeto a las normas, y de remediar
los efectos de su inobservancia. Esto es, por sancin se entiende en un
sentido negativo amplio la consecuencia o el castigo que se produce tras
la inobservancia de las reglas de conducta. Hay sanciones morales como el
remordimiento o el arrepentimiento, sanciones sociales como el rechazo
del grupo y sanciones jurdicas como la privacin de la libertad o la repa-
racin del dao.
Bentham pensaba que la sancin era la consecuencia del incumplimien-
to de los deberes y, para l, la eficacia del derecho obedeca a que la sancin
era el nico motivo para que los seres humanos actuaran de acuerdo con las
normas jurdicas. En Bentham, la sancin no es parte de la norma sino que
es el motivo para obedecer la norma. John Austin, por su parte, establece
que la sancin es un elemento constitutivo del mandato del soberano. En
Kelsen, como sabemos, la sancin es un elemento esencial de la norma, se
trata de un elemento interno a la misma y constituye la consecuencia de
toda norma jurdica.341
Los expedientes a los que acude el sistema normativo para reforzar el
respeto de las normas jurdicas son diversos. As existen medidas preventivas,
de disuasin, de intimidacin, de restitucin y las propiamente represivas que
pueden consistir en la reparacin del dao o las de carcter estrictamen-
te punitivo de privacin de la libertad. Aunque de manera ms amplia es
totalmente posible sealar que no slo existen sanciones negativas que pre-
vengan o repriman, sino que tambin existen sanciones positivas que promo-
cionen o premien.
En este sentido, la doctrina ha elaborado el concepto de sanciones po-
sitivas. Gavazzi seala que son aquellas consecuencias agradables o aquellos
bienes que el derecho promete a quien se acomoda a ciertos esquemas de
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X. Responsabilidad
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XII. Recapitulacin
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Cuestionario
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Captulo octavo
Valores jurdicos y derechos humanos
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1. La justicia
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cada uno segn sus mritos; 3) a cada uno segn sus obras; 4) a cada uno
segn sus necesidades; 5) a cada uno segn su rango, y 6) a cada uno segn
lo que le atribuye la ley. El problema con estos criterios es que es difcil
determinar quin pertenece a la misma categora y cmo deben ser trata-
dos los que no pertenecen a ella. El iusnaturalismo material tiene distintas
vertientes, as el iusnaturalismo tomista postula que lo justo es lo que es
conforme al derecho natural; en cambio, el iusnaturalismo contemporneo,
por ejemplo en la obra de Rawls, conjuga la dimensin formal de la justicia
la justicia como exigencia de imparcialidad en la eleccin de las reglas y
principios de justicia con la dimensin material de justicia expresada en
dos principios: 1) distribucin de porciones iguales de libertad para todos, y
2) admisin de desigualdades cuando contribuyen a maximizar el bienestar
de los ms desfavorecidos.357
En la filosofa jurdica y poltica se habla de distintos tipos de justicia:
justicia general, justicia particular, justicia conmutativa, justicia distributi-
va (utilitarista y basada en los derechos humanos) y justicia social. La justicia
general garantiza la conservacin de la sociedad y la posibilidad de que sta
pueda cumplir sus fines. La justicia particular es la virtud que tiende a dar
a cada quien lo suyo, sea por parte de la autoridad (justicia distributiva) o en
el seno de las relaciones privadas (justicia conmutativa).
La justicia conmutativa regula relaciones entre personas iguales y esta-
blece la proporcin entre lo que se debe dar y recibir en las relaciones entre
privados. La regla bsica es la de una estricta igualdad basada en el criterio
de equivalencia. Este tipo de justicia debe guiar las relaciones de intercam-
bio y es el fundamento del derecho privado: civil y mercantil.
Sobre la justicia distributiva, debe sealarse que es la que establece los cri-
terios para repartir los bienes y cargas pblicos entre los miembros de la co-
munidad. Entre los criterios, habra que recordar los que anteriormente men-
cionamos como el mrito, las necesidades, el trabajo, etctera. La preferencia
por cualquiera de los criterios depende de las distintas ideologas y formas
de organizacin poltica. La teora de la justicia distributiva est relacionada
con cuestiones de poltica econmica y con distintas corrientes filosficas,
entre las que destaca el utilitarismo y diversas posturas en la filosofa poltica
contempornea que rescatan la importancia de los derechos humanos como
elemento base para realizar el reparto de los bienes y cargas pblicas.
El utilitarismo considera que no son criterios de justicia distributiva
adecuados los que se apoyan en ideales o principios apriorsticos. Los utili-
taristas miden el carcter de lo justo en funcin de las consecuencias que re-
presentan las polticas pblicas en trminos de utilidad o bienestar emprica-
mente verificables en la vida de la colectividad. La mxima que se promueve
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2. La dignidad
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3. La libertad
Para muchos filsofos y autores la libertad es conditio sine qua non de lo que
Javier Muguerza ha llamado el imperativo de la disidencia368 y que por
ello se entiende como el primer derecho fundamental de la persona. En
la filosofa por libertad se comprenden distintas cosas. De manera sinttica
podemos decir que la libertad ha sido entendida como: 1) autonoma, in-
determinacin o ausencia de vnculos, presiones o coacciones externas del
Estado o de otros individuos o grupos (libertad negativa); 2) posibilidad para
realizar determinadas actividades o conductas, principalmente es el poder
para participar en la designacin y en el eventual control de los gobernantes
y en la elaboracin de las leyes, supone participacin de los individuos en
la cosa pblica (libertad positiva), y 3) las relaciones interpersonales o de
interaccin intersubjetiva en las que se resuelve la dimensin social de la
libertad; por lo que esta libertad expresa que el Estado debe poner los me-
dios que permitan al individuo y a los grupos dotar de contenido a las otras
libertades (libertad material o real).369
Es comn que estas tres formas de libertad entren en conflicto. As pue-
de haber anttesis entre la libertad del individuo que reclama no ser coac-
cionado ni por el Estado ni por individuos370 y las exigencias de libertad
social o comunitaria que obligan al Estado a tomar decisiones que pueden
eventualmente recortar la libertad negativa; entre la libertad para que las
personas puedan disfrutar de determinadas prestaciones que hacen necesaria
la accin positiva o activa del Estado con la libertad entendida como parti-
cipacin poltica y control al gobernante.
A pesar de las tensiones entre estos tres tipos de libertad, las tres son
necesarias para contar con una sociedad democrtica y un Estado de dere-
cho. As, sin presupuestos para las universidades pblicas o los museos, poco
sentido tiene hablar de acceso a la educacin o la cultura.Tambin carece de
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4. La igualdad
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5. La solidaridad
Entraa la cooperacin entre los miembros de una sociedad o entre las so-
ciedades. Integra este valor dos dimensiones: a) la tico-poltica, entendida
como actitud que tiende a compartir e identificarse con las necesidades aje-
nas, y b) jurdica, que supone un compromiso de los poderes pblicos por
hacer efectiva la igualdad material. Por ejemplo, los artculos 2 y 3 de la
Constitucin italiana estiman que la solidaridad es un sustrato de los dere-
chos y deberes entre todos los miembros de la colectividad que dimanan de
la igualdad en su dimensin material o sustancial. Los derechos humanos
de la tercera y cuarta generacin, tales como el derecho al desarrollo, la paz
o los derechos ecolgicos se fundamentan en este valor.373
227
6. La seguridad jurdica
228
7. El bien comn
Del hecho de que los seres humanos tengamos una dimensin social y con-
vivamos colectivamente surge la pertinencia para que cada sociedad cuente
con modelos de convivencia poltica que busquen satisfacer las necesidades
bsicas de todos y la felicidad del ser humano. Esos fines a los que aspira toda
comunidad reciben el nombre de bien comn.
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nos normativos y valorativos supone que son razones para actuar de deter-
minada manera, razones para considerar justificada una conducta especfica y
para criticar otras conductas.
El concepto de derechos humanos es vago tanto intensional como ex-
tensionalmente. Intensionalmente es vago porque no es fcil sealar cules
son sus caractersticas. Entre las caractersticas que suelen mencionarse se ha-
bla de la universalidad, inalienabilidad, el carcter absoluto e individual de
los derechos humanos. No obstante, cada una de esas caractersticas genera
dudas. La universalidad entraa que los derechos humanos los tenemos por
ser personas, sin embargo, no siempre es fcil determinar cundo se em-
pieza a ser persona, o si ciertos animales tambin pueden ser sujetos de es-
tos derechos, o si las personas de generaciones futuras tambin son titulares
de derechos humanos. En cuanto a la inalienabilidad que significa que no
se puede renunciar a los derechos, encontramos que muchos derechos hu-
manos son renunciables, tales como los derechos humanos procesales de
defensa; sin embargo, a ello se podra argumentar que a lo que se renuncia
es al ejercicio de los derechos no al derecho en s. Si decimos que los dere-
chos humanos tienen un carcter absoluto, eso podra implicar que un de-
recho humano podra desplazar a otros derechos humanos, lo que no parece
ser correcto, es preferible pensar que absoluto hace alusin a que los dere-
chos humanos son las exigencias ms fuertes dentro del sistema normativo y
que, por tanto, estn por encima de otros derechos e intereses que no tienen
ese carcter. Adems, sealar que los derechos humanos son individuales no
resuelve el problema de si las minoras o determinados grupos como los
indgenas poseen derechos humanos de naturaleza colectiva.388
Extensionalmente el concepto de derechos humanos es tambin muy
vago porque existen dudas sobre su campo de aplicacin. Por ejemplo, si
hay derechos humanos de las generaciones futuras, de los animales, de las
minoras o de los pueblos.Tambin hay dudas sobre si el aborto, la eutanasia,
el consumo de drogas son derechos humanos, entre otros muchos problemas
que dificultan dilucidar y delimitar su campo de aplicacin.
Respecto a la fundamentacin de los derechos humanos,389 que tiene
que ver con las razones ltimas porque no dependen de otras que
justifican que los derechos humanos sean los que legitiman al derecho po-
sitivo o con las que sealan que es bueno comportarse conforme a ellos,
existen tambin variadas posiciones. Antes de mencionar algunas de ellas, es
importante indicar que la fundamentacin de los derechos humanos es de
naturaleza moral y que la misma se opone al relativismo y al escepticismo
tico.390 Decir que la fundamentacin es moral implica dar buenas y ltimas
razones que se obtienen consensual y discursivamente en una sociedad
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III. Recapitulacin
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rial o real). Las tres libertades son necesarias para contar con una sociedad
democrtica y un Estado de derecho.
La igualdad puede ser material o formal. La material se identifica con la
equiparacin y el equilibrio de bienes y situaciones econmicas y sociales,
con la exigencia de la igualdad del mayor nmero de individuos en el mayor
nmero de bienes. La igualdad formal o jurdica supone el respeto al princi-
pio de igualdad ante la ley. La igualdad ante la ley puede ser entendida como
generalidad, equiparacin y diferenciacin. La exigencia de generalidad nos
indica que los individuos deben ser sometidos a las mismas normas y tribu-
nales. La equiparacin implica no igualar arbitrariamente aquellas cosas entre
las que se den diferencias relevantes y no establecer diferencias entre aquellas
situaciones cuyas divergencias son irrelevantes. La diferenciacin consiste
en el tratamiento desigual de circunstancias y situaciones aparentemente
semejantes pero que requieren un tratamiento jurdico distinto. Dentro del
valor igualdad es importante destacar la discriminacin positiva para que
ciertas minoras transitoriamente reciban ventajas sociales a fin de lograr en
el mediano o largo plazo circunstancias de igualdad efectiva entre los grupos
de la comunidad. Igualmente, debe ser mencionada la igualdad poltica que
procura que los procedimientos democrticos no produzcan una sociedad
desigual en donde el poder poltico sea detentado permanentemente o por
un largo tiempo, por una minora.
El valor que entraa la cooperacin entre los miembros de una sociedad
o entre las sociedades es la solidaridad. Existen dos dimensiones de ella: la
tico poltica y la jurdica. La primera es una actitud humana que tiende a
compartir e identificarse con necesidades ajenas. La segunda supone un com-
promiso de los poderes pblicos por hacer efectiva la igualdad material.
La seguridad jurdica engloba tres significados: 1) como principio ins-
pirador de todo el ordenamiento jurdico que sustenta la legitimidad del
derecho y del Estado apoyndose en otros valores como la libertad, la igual-
dad, la justicia o el pluralismo jurdico; 2) como certeza, conocimiento de
las normas y previsibilidad en la actuacin de las autoridades, y 3) como
ausencia de riesgo en el ejercicio de las libertades que todo ciudadano tiene,
es decir, como proteccin personal y seguridad ciudadana.
El bien comn se manifiesta en un doble plano: el descriptivo que da
cuenta de objetivos sociales realizados en una sociedad al menos para el
grupo mayoritario de ciudadanos, y el prescriptivo que asume el bien co-
mn como un deber ser, como un modelo ideal de convivencia a realizar.
En relacin con su significacin poltica se suele hablar de un bien comn
ptimo que es el mejor bien comn posible realizado o a realizar en una
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Cuestionario
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Captulo noveno
El Estado de derecho
Los elementos del Estado son el territorio que es la porcin del espacio en
que el Estado ejercita su poder; la poblacin que est constituida por los seres
humanos que pertenecen a un Estado; el poder que es la capacidad que tiene
un individuo o grupo para afectar el comportamiento de otros, y la cultura
que entraa la incorporacin al Estado de la Constitucin normativa en la que
tienen vigencia efectiva los derechos fundamentales y la democracia.
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La nueva palabra Estado designa certeramente una cosa totalmente nueva por-
que, a partir del Renacimiento y en el continente europeo, las poliarquas, que
hasta entonces tenan un carcter impreciso en lo territorial y cuya coherencia
era floja e intermitente, se convierten en unidades de poder continuas y recia-
mente organizadas, con un solo ejrcito que era, adems de permanente, una
nica y competente jerarqua de funcionarios y un orden jurdico unitario,
imponiendo adems a los sbditos el deber de obediencia de carcter general.
A consecuencia de la concentracin de los instrumentos de mando, militares,
burocrticos y econmicos, en una unidad de accin poltica fenmeno que
se produce primeramente en el Norte de Italia debido al ms temprano desa-
rrollo que alcanza all la economa monetaria surge aquel monismo de poder,
relativamente esttico, que diferencia de manera caracterstica al Estado de la
Edad Moderna del territorio medieval.397
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Como hasta aqu llevamos explicado, el Estado moderno tiene que ver con
un dominio o poder de carcter institucional y jurdico que en un territorio
monopoliza la fuerza fsica legtima respecto a una poblacin. Lo anterior,
sin embargo, plantea problemas en torno a la legitimidad del dominio o del
poder. Esto es, si es vlido admitir cualquier forma o manifestacin del poder
o, si el poder, para ser vlido y respetado, debe orientarse a determinados fines
y ejercerse mediante lmites y controles de carcter racional. Uno de los pri-
meros tericos que intent explicar el problema de la legitimidad del poder
fue Bodin. Este autor emancipa la idea del poder soberano de toda conexin
teolgica y funda, as, la teora constitucional. Para Bodin el Estado es el rec-
to gobierno de las familias y de lo que les es comn, con potestad soberana.
La soberana, principal atributo del Estado, se ejerce, segn Bodin, contra los
enemigos interiores y exteriores del Estado, y su expresin especfica y esen-
cial consiste en la capacidad para elaborar leyes generales, las que no pueden
atentar respecto al derecho de propiedad y la familia. En otras palabras, el
poder requiere dirigirse hacia determinados fines valiosos no hacia cual-
quier fin y ste debe estar siempre limitado por determinados derechos de
las personas para poder considerarse como legtimo.402 Alessandro Passerin
dEntrves comenta que en el pensamiento de Bodin, el soberano, aunque es
tcnicamente legibus solutus, ello no quiere decir que su poder sea arbitrario
ni desordenado, pues esto implicara una contradictio in terminis, pues el so-
berano est sujeto a la ley divina y a la natural, debe respetar la propiedad y las
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1. El territorio
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Artculo 43. Las partes integrantes de la Federacin son los Estados de Aguas-
calientes, Baja California, Baja California Sur, Campeche, Coahuila, Co-
lima, Chiapas, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo,
Jalisco, Mxico, Michoacn, Morelos, Nayarit, Nuevo Len, Oaxaca,
Puebla, Quertaro, Quintana Roo, San Luis Potos, Sinaloa, Sonora,
Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz, Yucatn, Zacatecas y el Distri-
to Federal.
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2. La poblacin
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3. El poder
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bilidades polticas de los altos servidores pblicos del Estado a que se refiere
el artculo 110 de la Constitucin, o puede efectuar actos materialmente ad-
ministrativos o ejecutivos, por ejemplo, cuando licita alguna obra o servicio.
Lo mismo podemos predicar de los otros dos poderes, cuyas competencias
todas formalmente sern jurisdiccionales o ejecutivas, pero material-
mente algunas de ellas por su naturaleza, contenido o sustancia correspon-
deran a cualquiera de los otros dos poderes.
La cultura para Hberle est constituida por los elementos ideales y reales
referidos al Estado y a la sociedad los cuales no se han alcanzado al
mismo tiempo en prcticamente ningn Estado constitucional, pero que
apuntan tanto a una situacin ptima de lo que debe ser como a una situa-
cin posible de lo que es. Esos elementos integrantes de la cultura son:
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La presente Constitucin puede ser adicionada o reformada. Para que las adi-
ciones o reformas lleguen a ser parte de la misma, se requiere que el Congreso
de la Unin, por el voto de las dos terceras partes de los individuos presentes,
acuerde las reformas o adiciones, y que stas sean aprobadas por la mayora de
las legislaturas de los Estados. El Congreso de la Unin o la Comisin Perma-
nente, en su caso, harn el cmputo de los votos de las Legislaturas y la decla-
racin de haber sido aprobadas las adiciones o reformas.
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VII. Recapitulacin
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Cuestionario
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Captulo dcimo
Interpretacin, aplicacin y argumentacin
I. Introduccin
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no slo la ley. Las decisiones deben ser orientadas tambin por principios
y no slo por reglas. La reforma judicial en Mxico no entraa exclusiva-
mente un cambio en el modelo argumentativo judicial, pero que el modelo
argumentativo basado en principios s modificara en nuestro pas la con-
cepcin de derecho. No debemos aspirar a jueces ideales pero si preguntar-
nos si los actuales cumplen las exigencias que la sociedad demanda, jueces
que no slo conozcan el derecho sino que asuman la conciencia moral del
momento histrico. La argumentacin, afortunadamente, no es patrimonio
exclusivo de los aplicadores del derecho. Nos corresponde tambin a la so-
ciedad. En otras palabras, es momento de construir en Mxico una sociedad
abierta de los intrpretes constitucionales y jurdicos, en donde una de las
variables para medir al nivel de democracia sea la amplitud con la que se
argumente y delibere el derecho.
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principio carece de valor de verdad, lo que hace muy difcil, contra lo que
suele pensarse, el clculo lgico, tal como se produce en las matemticas.
Lo aqu dicho no presupone un rechazo a los instrumentos de la lgica
racional en la interpretacin sino slo asignarle un papel ms acotado para
que tome en cuenta sistemas lgicos, normativos, especficos y apropiados
para el derecho que permitan reconstruir con alguna fidelidad el razona-
miento jurdico.456
La anterior problematizacin de la interpretacin literal no termina
aqu, bien se podran agregar otros temas ya canonizados en la teora del de-
recho como los hace tiempo estudiados por Hart respecto a las condiciones
del lenguaje jurdico. En concreto, los conceptos de textura abierta de las
expresiones lingsticas y las zonas de penumbra e incertidumbre en el
derecho, que impiden sostener de manera tajante la divisin simplista entre
formulaciones normativas claras y formulaciones normativas equvocas.457
Casi cualquier formulacin normativa exige interpretacin en su sentido
argumentativo-discursivo, sobre todo si debe justificarse la decisin como
suelen prescribirlo los ordenamientos jurdicos.
Lo que hace que el significado de un texto resulte dudoso puede deberse
a distintos factores; entre ellos, que el autor emplee expresiones imprecisas,
ambigas o vagas, que exista un problema de laguna o antinmico, que no
sea clara la intencin del autor, que exista contradiccin entre el texto y las
finalidades o valores de la norma. Para interpretar existen una serie de tcni-
cas o cnones, que remiten siempre a una concepcin ontolgica, epistemo-
lgica y valorativa del derecho. En otras palabras, contestar a las preguntas de
qu es interpretar, por qu se interpreta y para qu se interpreta reconduce
a las teoras de la interpretacin. En general, podemos decir que existen dos
tipos de teoras interpretativas: por un lado, las formalistas y las escpticas, y
por otro, las objetivistas y las subjetivistas. Las formalistas entienden la labor
interpretativa como una manera de desentraar el significado de la norma,
esto es, una funcin meramente cognoscitiva. Las escpticas consideran que
la interpretacin es siempre una creacin del juez, es decir, producto de un
acto de voluntad y no de conocimiento. Las objetivistas entienden la inter-
pretacin como una expresin de la voluntad de la ley, y las subjetivistas la
conciben como una manifestacin de la voluntad del juez.
De lo anterior habra que decir que en ocasiones la interpretacin es
una actividad de conocimiento, y en otras implica que en el juez o en la
autoridad que interpreta existe una capacidad de reformulacin o de crea-
cin de significados. Todo depender de la precomprensin del intrprete,
la concepcin del derecho dominante en esa cultura jurdica, de si se trata
de un caso fcil o difcil, incluso trgico. Lo importante ser que el juez o la
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La aplicacin del derecho ha sido confundida por algunas escuelas con la in-
terpretacin. Principalmente el pensamiento derivado de la escuela francesa
de la exgesis, o de la escuela histrica alemana de Savigny suelen identificar
ambos asuntos. Los juristas decimonnicos sostenan que los cdigos no
dejaban nada al arbitrio del intrprete, pues ste no tena por misin hacer
el derecho dado que el derecho ya estaba hecho. Esta visin racionalista e
identificadora de la interpretacin con la aplicacin, tiene su gnesis en el
pensamiento de Montesquieu cuando deca:Los jueces de la nacin no son
ms que el instrumento que pronuncia las palabras de la ley, seres inanimados
que no pueden moderar ni la fuerza ni el rigor de las leyes.460 Identificar
interpretacin con aplicacin significa asumir que el nico con capacidad
creadora es el legislador. El resto debemos conformarnos con cumplir sus
mandatos y aplicar las normas cuando se tiene competencia jurdica para
ello. Es decir, actualizar mecnicamente la ley para el caso concreto median-
te la subsuncin y el silogismo es la tarea de los jueces y autoridades.
Las versiones ms contemporneas de la teora de la interpretacin no
suelen sostener el pensamiento de la exgesis, ni de la escuela histrica, ni
del positivismo ideolgico. Muchas concepciones de la interpretacin como
la posicin analtica de Hart, la teora del caso correcto de Dworkin, las es-
cuelas procedimentalistas de la argumentacin, o las escuelas que premian el
sentido hermenutico y prudencial de la interpretacin, distinguen con pre-
cisin la actividad interpretativa y el producto interpretado con el que la au-
toridad determina la norma con sentido prescriptivo para el caso concreto.
La labor de aplicacin queda supeditada a la interpretacin como activi-
dad y como producto de carcter previo. La aplicacin es una tarea exclusiva
de las autoridades, no tiene por objeto textos normativos sino normas.
Algunos autores como Vigo, que sostienen una aproximacin pruden-
cial-retrica de la interpretacin, sealan que cumplida la etapa cognoscitiva
e interpretativa de la prudencia que tiene dos fases, deliberacin y juicio, se
posibilita el momento culminante, esto es, el momento preceptivo o pres-
criptivo, con el que se agota la creacin jurdica. En ese momento se actua-
liza la norma, se aplica el derecho. La dimensin prescriptiva de la prudencia
manda o aconseja aquella conducta que se determina como la mejor.461 Los
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Motivar una decisin es expresar sus razones y por eso es obligar al que la
toma, a tenerlas. Es alejar todo arbitrio. nicamente en virtud de los motivos
el que ha perdido un pleito sabe cmo y porqu. Los motivos le invitan a com-
prender la sentencia y le piden que se abandone durante demasiado tiempo
al amargo placer de maldecir a los jueces. Los motivos le ayudan a decidir
si debe o no apelar o, en su caso, ir a la casacin. Igualmente le permitirn no
colocarse de nuevo en una situacin que haga nacer un segundo proceso. Y
por encima de los litigantes, los motivos se dirigen a todos. Hacen comprender
el sentido y los lmites de las leyes nuevas y la manera de combinarlas con las
antiguas. Dan a los comentaristas, especialmente a los comentaristas de senten-
cias, la posibilidad de compararlas entre s, analizarlas, agruparlas, clasificarlas,
sacar de ellas las oportunas lecciones y a menudo tambin preparar las solucio-
nes del porvenir. Sin los motivos no podramos tener las Notas de jurispru-
dencia y esta publicacin no sera lo que es. La necesidad de los motivos entra
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tanto dentro de nuestras costumbres que con frecuencia traspasa los lmites del
campo jurisdiccional y se va imponiendo poco a poco en las decisiones sim-
plemente administrativas cada vez ms numerosas.463
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IV. La argumentacin
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posible prever, con bastante certeza, cmo usar la autoridad sus poderes
coercitivos en determinadas circunstancias y planear los asuntos de los indi-
viduos con base en este conocimiento.480
Otros conceptos de Estado de derecho como los de Raz o Summers
incluyen de manera ms o menos clara la interpretacin de normas como
parte de l. Raz elabora algunos principios conformadores del Estado de
derecho: todas las disposiciones jurdicas deben ser prospectivas, abiertas y
claras; las disposiciones jurdicas deben ser relativamente estables; el estable-
cimiento de disposiciones jurdicas particulares debe ser guiado por dispo-
siciones jurdicas abiertas, estables, claras y generales; la independencia del
Poder Judicial tiene que ser garantizada; los principios de justicia natural tie-
nen que ser observados; los tribunales deben tener poderes de revisin sobre
la implantacin de los otros principios; los tribunales deben ser fcilmente
accesibles, y a los rganos de prevencin criminal dotados de discreciona-
lidad no se les debe permitir pervertir el derecho.481 Por su parte, Summers
delinea como principios del Estado de derecho a los siguientes: que todo
tipo de derecho tiene que ser autorizado de manera adecuada conforme a
los criterios de validez establecidos; que los criterios para determinar la va-
lidez del derecho deben estar claros generalmente y deben incluir criterios
para resolver los conflictos entre normas jurdicas vlidas; que el derecho de
origen estatal relativo a una materia debe ser uniforme dentro de los lmites
del Estado; que, en la medida de lo posible y de lo apropiado, debe adoptar
la forma de reglas generales definidas aplicables a clases de sujetos, conduc-
tas, circunstancias, etctera, y que, cuando sea apropiado, debe aplicarse por
igual a las autoridades y a los ciudadanos; que todas las formas de derecho
deben ser apropiadamente claras y estar determinadas en su sentido; que
el derecho de creacin estatal y otras formas normativas apropiadas, deben
tener forma escrita y ser promulgadas, publicadas, o de otro modo puestas
en conocimiento de sus destinatarios; que las normas y sus cambios deben
ser generalmente prospectivas y no retroactivas; que las conductas exigidas
por el derecho deben estar dentro de lo que puedan cumplir los destina-
tarios de las normas; que las normas en relacin con una materia, una vez
emitidas y puestas en funcionamiento, no deben de modificarse con fre-
cuencia, de modo que los destinatarios no tengan problemas para confor-
mar su conducta a ellas y puedan planificar su conducta a largo plazo; que
los cambios en el derecho deben llevarse a cabo mediante procedimientos
apropiados, por instituciones, autoridades o personas debidamente autori-
zadas para ello; que las distintas formas de derecho deben interpretarse o
aplicarse de acuerdo con mtodos interpretativos uniformes, respetuosos
de la forma de expresin y del contendido del tipo de derecho en cuestin;
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en los casos en los que una parte es acusada de un delito o ilcito significa-
tivo, en el caso de no contar con medios para su defensa, dicha parte ser
provista por el Estado de tal defensa.482
El Estado de derecho como dice Pisarello en su polmica con Euse-
bio Fernndez483 implica por un lado, el sometimiento del propio Estado a
su legalidad, y que es indispensable proteger la libertad de los ciudadanos de
la injerencia ilegtima de los poderes pblicos, sin importar que stos cuen-
ten con el apoyo coyuntural de la mayora, sobre todo frente a fenmenos
de corrupcin o de terrorismo de Estado; pero, por otro, significa controles
para los poderes privados, para el mercado, y garantas de derechos socia-
les de prestacin para todos los ciudadanos, que los protejan de las desigual-
dades de hecho que el propio mercado, librado a su propia lgica produce.
Adems de lo que dice Pisarello, el Estado de derecho hoy en da es consti-
tucional, lo que entraa su carcter democrtico, promotor de la participa-
cin y deliberacin ciudadana sobre todos los asuntos de relevancia pblica,
por ello est orientado hacia la proteccin de los derechos fundamentales,
tanto de libertad como de naturaleza social, econmica y cultural, as como
incluyente con derechos fundamentales de nuevas generaciones, que se ins-
cribe en un contexto de sociedades pluralistas, multiculturales y heterog-
neas dentro de procesos de globalizacin. Igualmente, el Estado de derecho
contemporneo no concibe al derecho exclusivamente como conjunto de
reglas, sino tambin de principios jurdicos expresos e implcitos que subor-
dinan el derecho infraconstitucional al constitucional, pero que debido a la
indeterminacin y la fuerza expansiva de los principios, es imprescindible
la argumentacin de todo el ordenamiento. Bien podramos decir que el
derecho de nuestro tiempo es argumentacin; el Estado de derecho no es ya
el imperio de la ley sino el imperio del derecho, esto es, de la Constitucin,
de los principios y de la labor de los intrpretes y argumentadores.484
303
rdico. Por tener los jueces y autoridades la obligacin de resolver todos los
casos que se someten a su consideracin, suelen acudir a diversos tipos de
argumentos interpretativos, sealadamente aunque no exclusivamente, al ar-
gumento analgico. ste consiste en trasladar la solucin legalmente prevista
para un caso, a otro caso distinto, no regulado por el ordenamiento jurdico,
pero que es semejante al primero.486
Para autores como Kelsen, el ordenamiento jurdico est constituido
en su mayora por normas positivas, el ordenamiento contiene una norma
implcita de carcter negativo que se denomina norma de clausura, la que
permite regular casos en forma negativa.487 Por ejemplo, la norma positiva
las autoridades slo hacen lo que las norma les faculta viene acompaa-
da por una implcita de clausura que dir los particulares pueden hacer
todo aquello que las normas no prohben. La norma de clausura permite
a Kelsen desconocer la existencia de lagunas, ste considera que las lagunas
son axiolgicas, esto es, de carcter valorativo por la ausencia de una norma
justa o correcta, pero no de conocimiento, es decir, no son reales, porque la
regulacin existe aunque no es satisfactoria en opinin del intrprete. En
la teora del profesor viens slo se admiten las lagunas tcnicas que son
provocadas por la omisin del legislador de algn elemento necesario para
aplicar la norma. En ese caso, el juez tendra que colmar la laguna tcnica.
As, en el derecho mexicano, aunque un reglamento no establezca la garan-
ta de audiencia a favor del gobernado (posibilidad de defenderse, ofrecer
pruebas y alegar a favor de su derecho) afectado por un acto de autoridad,
la autoridad administrativa tendra que conceder ese derecho a pesar de la
omisin del autor del reglamento.
Hart, a diferencia de Kelsen, admite la existencia de lagunas, tanto por
ignorancia relativa a los hechos (los legisladores no pueden conocer todas
las circunstancias inherentes a los casos cuando legislan) como por indeter-
minacin de propsitos (los fines u objetivos de la norma no son precisos).
Las tcnicas que propone Hart para resolver estas lagunas son: 1) el uso del
estndar general para delegar a una autoridad inferior la regulacin de su-
puestos no previstos en las normas generales, y 2) el uso del estndar varia-
ble, para dejar que sea el juez o la autoridad, a partir de las circunstancias del
caso, quien determine las precisiones, las vaguedades o armonice los fines
normativos en conflicto.488
Ms all de las concepciones tericas de estos dos autores, los juristas
prcticos enfrentan los problemas de indeterminacin normativa y de lagu-
nas con argumentos interpretativos; stos actan como pautas interpretativas
generales y ocupan el lugar de la premisa inicial, indicando el modo como
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VI. Recapitulacin
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Cuestionario
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La obediencia del derecho est ligada con la obligacin poltica y con la legiti-
midad de los sistemas polticos y jurdicos. Las razones legales no son suficien-
tes para obedecer el derecho porque son tautolgicas; en cambio, las razones
morales entienden que el derecho se obedece porque se considera es justo y
emana de autoridades legtimas y de procedimientos democrticos. El derecho
como obra humana debe ganarse la obligacin de ser obedecido por la justeza
de sus normas.
I. Introduccin
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314
derecho que se deben tomar en cuenta para que ste tenga la pretensin de
ser legtimo o justo,496 es decir, se dice que el derecho como obra humana
debe ganarse la obligacin de ser obedecido por la justeza de sus normas.
El problema de la obediencia al derecho tiene una liga con la obligacin
poltica; por eso, una vez establecidos los tres tipos de razones que existen
para obedecerlo, nos parece que se deben tambin exponer las diferentes
especies de obligacin para relacionar a las razones morales con la obligacin
poltica. Geoffrey Marshall alude a tres especies de obligacin jurdica: jur-
dica, moral y poltica. La obligacin jurdica se corresponde con las razones
legales ya mencionadas. La obligacin moral se origina en la conciencia
moral autnoma, voluntaria y libre del individuo, es una obligacin no in-
teresada, impuesta por el respeto al deber y que va ms all de las fronteras
de la obligacin legal. Este tipo de obligacin se identifica con las razones
morales. La obligacin poltica perfecciona a la obligacin moral individual,
pues se apoya en razones morales pero conectadas ntimamente con el sis-
tema poltico. La obligacin poltica presupone la vida en sociedad, la con-
vivencia poltica, la necesidad de una autoridad. La obligacin poltica es la
suma de las obligaciones legales y morales, en donde las ltimas cuestionan
a las exclusivamente legales.497
La obligacin poltica atiende a las llamadas paradojas de la autoridad
para disolverlas. Dice Raz que:
Las paradojas de la autoridad pueden adoptar diferentes formas, pero todas ellas
se refieren a la alegada incompatibilidad de la autoridad con la razn y con la
autonoma moral. Estar sometido a la autoridad, se argumenta, es incompatible
con la razn, puesto que sta exige que siempre se acte en base a la balanza
de razones de las que uno est consciente. Es de la naturaleza de la autori-
dad requerir su misin an cuando se piense que lo que nos es requerido es
contrario a la razn, por lo tanto, el sometimiento a la autoridad es irracional.
Similarmente el principio de autonoma implica que se acte con base en el
propio juicio en todas las cuestiones morales. Como la autoridad algunas veces
requiere que se acte en contra del propio juicio, exige, as el abandono de la
autonoma moral. Como todas las cuestiones prcticas pueden implicar con-
sideraciones morales, toda autoridad prctica niega la autonoma moral y es,
consecuentemente, inmoral.498
Desde nuestro punto de vista estas paradojas son slo aparentes como el
mismo Raz reconoce, y quedan desvirtuadas cuando se sostiene que es ab-
surdo afirmar que la relacin individuo autonoma moral y autoridad
es incompatible, puesto que si esgrimimos la tesis de que la autoridad slo
315
El derecho tiene autoridad legtima cuando cuenta con la autoridad moral que
le otorga el ser un derecho justo y lo es suficientemente en el caso de que se
cumpla con los dos requisitos combinados de haber sido producido democr-
ticamente segn el principio de legitimidad contractual y si respeta y garantiza
los derechos fundamentales del hombre.499
Rawls502 sostiene que existe una obligacin moral de obedecer las leyes jus-
tas, pero igual que autores como Herbert Hart, Joel Feinberg, Harry Beran
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Lo anterior nos lleva a concluir que Rawls considera que existe un deber
natural de obedecer el derecho justo pero no una obligacin para hacerlo.
Aunque, si admitimos que Rawls acepta como requisito del derecho justo
su legitimidad contractual, y esta legitimidad presupone acuerdos volun-
tarios y ventajosos para todos, entonces es dable opinar que si existe en el
pensamiento rawlsiano la obligacin moral de obedecer el derecho justo.
Rawls, sin embargo, sostiene que existe el deber de obedecer leyes injus-
tas. Manifiesta que la injusticia de una ley, no es, por lo general, una razn
suficiente para no cumplirla, como tampoco la validez legal de la legisla-
cin es una razn suficiente para aceptarla.507 Afirma que cuando la es-
tructura bsica de la sociedad es razonablemente justa hemos de recono-
cer que las leyes injustas son obligatorias siempre que no excedan ciertos
lmites de injusticia. Entre los razonamientos adicionales que proporciona
para defender su posicin est el que se apoya en el deber de urbanidad que
impone la aceptacin de los defectos de las instituciones, y ciertos lmites
para poder beneficiarnos de estos defectos. Sin el reconocimiento de este
deber la fe y la confianza mutua estn expuestas a desaparecer. Por tanto, en
un estado prximo a la justicia, existe normalmente el deber (y para algunos
tambin la obligacin) de obedecer las leyes injustas.508
No podemos compartir la visin rawlsiana en este punto. En un Estado
democrtico casi justo, es importante seguir mejorando los niveles de jus-
ticia, a travs de los correctivos institucionales que provee el Estado de de-
recho pero tambin por medio de instrumentos como el de la resistencia y
la desobediencia civil que se realizan por medios pacficos y no violentos.509
La obediencia a un sistema jurdico es siempre prima facie, sujeta a la manera
en que se desarrollan los procedimientos democrticos y las caractersticas
y condiciones de los resultados que arrojan esos procedimientos. Tambin
debemos sealar que la teora de Rawls es dbil respecto a sus aspectos de-
liberativos, pues el conocimiento moral, an en la posicin originaria, es
fundamentalmente individual. Rawls no prest suficiente inters al consenso
deliberativo para alcanzar decisiones morales debidamente justificadas.510
318
bsicos y naturales. De esta premisa bsica y fuerte sobre los derechos, en-
tiende que el deber general de obediencia o el deber social de lealtad al
derecho, no se repite sin ms de la doctrina tradicional sobre la obligacin
poltica.512 Considera que slo cuando el derecho es producto de un Estado
democrtico, y es fruto tambin del respeto a los derechos individuales, bsi-
camente a la dignidad y a la igualdad, podemos hablar de un deber moral de
obediencia. El deber se caracteriza por ser individual, en conciencia, por eso
seala que la conducta del ciudadano no es injusta mientras se gue por su
propia opinin, considerada y razonable, de lo que exige la ley,513 y ello por
la peculiaridad del sistema constitucional de los Estados Unidos que, segn
Dworkin, reside en el hecho de remitir la cuestin de la obediencia concreta
a la decisin individual. Es cada ciudadano quien debe decidir, contrastan-
do los argumentos que apoyan o no la obediencia, lo que exige en ltima
instancia que exista un mnimo de consenso social sobre los criterios de la
conducta. El individualismo en este sentido no es arbitrario. Dworkin expre-
sa que para que la opinin individual sea considerada y razonable, no podr
dejar de examinarse el precedente judicial, y ello no porque sea por fuerza
el procedimiento correcto para la decisin justa, sino porque se trata de lo
coherente con la peculiaridad del sistema jurdico en cuestin. Es decir, para
sostener el modelo de reconstruccin racional en lo referente al razona-
miento jurdico, que es otra de las tesis centrales de Dworkin, es necesario
confrontar, utilizar los elementos que nos proporciona el derecho: normas,
reglas, principios y resoluciones judiciales; quien rechace sin ms o no argu-
mente de modo suficiente el por qu de su rechazo al precedente, no podr
tener a su favor, por ejemplo, la presuncin de que la propia opinin es con-
siderada y razonable.514 Lo anterior lleva a la conclusin de que, si persiste
la duda, debe seguirse el propio juicio, deben prevalecer los derechos, o, en
otras palabras, que el criterio ltimo es la prioridad de los derechos morales
porque as lo exige la tesis de los derechos fuertes.
La teora de Dworkin no deja dudas sobre la existencia de un deber
moral de obedecer el derecho cuando ste es el resultado de un procedi-
miento democrtico y del respeto a los derechos humanos. Dworkin sos-
tendr que cuando las normas del derecho positivo no son satisfactorias
o cuando stas son insuficientes, siempre existe el recurso a bucear en la
totalidad del derecho para encontrar la nica solucin correcta, de hecho
a travs de los principios que forman parte de la realidad jurdica, aunque
sean principios morales, se puede identificar el contenido del derecho para
el caso concreto, por lo que la tesis de la separacin conceptual entre la
realidad normativa del derecho y de la moral es falsa.515 El individuo tiene
un derecho a la desobediencia cuando la autoridad desconoce un derecho
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que esta situacin slo puede darse en condiciones ideales, pero en tr-
minos kantianos podramos decir que constituye un principio o una idea
regulativa. En el terreno de los hechos y, aunque el nivel de obediencia al
derecho de los funcionarios y jueces sea superior al de los ciudadanos, es
totalmente posible y tico pretender una especie de punto de vista inter-
no para los ciudadanos. Ello es posible cuando stos se sienten plenamente
identificados con su sistema normativo porque lo estiman valioso y respeta
su autonoma personal.555
La obligacin de obedecer al derecho es siempre una obligacin prima
facie, condicionada, nunca definitiva, a posteriori, pues el ciudadano y la socie-
dad en su conjunto siempre tienen el inalienable derecho de mostrar su des-
acuerdo con las normas y de desobedecerlas556 cuando stas no provienen
de procedimientos democrticos o no respetan debidamente los derechos
humanos. La adhesin al sistema normativo no puede ser incondicionada
ni absoluta porque se pondran en duda los principios de inviolabilidad y
autonoma de las personas, se vulnerara la consideracin de que cada su-
jeto, cada persona, es un ente con libertad que no ha cedido ni un pice
su dignidad. Es por tanto la obligacin de obediencia, una obligacin que
se ejerce desde la crtica, la reflexin individual o colectiva de los ciuda-
danos, que debe desarrollarse de preferencia desde la deliberacin de los
asuntos pblicos, incluyendo normas e instituciones.557
Esta obediencia condicionada y crtica al derecho depende de la exis-
tencia o no de procedimientos democrticos. En un sistema donde las nor-
mas y las instituciones provienen de condiciones no democrticas,558 carece
de sentido hablar de una obligacin moral de obedecer el derecho por-
que el sujeto no es libre, su autonoma, su inviolabilidad estn asfixiadas.
El derecho en esos sistemas se impone por la fuerza o la manipulacin. La
obligacin de obediencia al derecho tiene bases en la democracia porque
ah las personas ejercen su libertad, su crtica, su voluntad de consenso o de
disenso. Por estas razones, la democracia debe ser ampliada, perfeccionada,
y su calidad debe ser promovida. Una democracia representativa, en donde
la separacin entre el gobernante y el gobernado es abismal y no existen
controles efectivos para la rendicin de cuentas ni horizontales ni sociales,
poco se puede sostener una obligacin moral de obediencia al derecho.
Bien podramos establecer una ecuacin como la siguiente: a mayor nivel y
profundidad de la democracia mayor es la obligacin moral de obediencia
al derecho. Si queremos que los ciudadanos se sientan obligados por su
sistema normativo perfeccionemos la democracia, habr mayores exigen-
cias para ellos. Con los niveles actuales de democracia no se podr pedir
una obligacin en un sentido fuerte. A este respecto conviene recordar a
335
Giovanni Sartori cuando dice lo que la democracia es, no puede estar se-
parado de lo que la democracia debe ser.559
Tambin el tipo de Estado de derecho, su conformacin y caractersticas
tienen su parte en esta tarea. Un Estado de derecho de pura legalidad sin
un referente fuerte a la Constitucin y a mecanismos universales y ciuda-
danos de control de constitucionalidad o sin efectiva divisin de poderes,
sin un Poder Judicial independiente, o con una inexistente administracin
pblica profesional, no genera condiciones para una obligacin moral de
obediencia al derecho. Cuando el ciudadano sabe que cualquier reclamo
puede ser planteado ante un Poder Judicial independiente o que existe una
administracin civil de carrera que le brinda apoyo y proteccin, que la
Constitucin es algo ms que un documento poltico y que constituye
una norma directamente esgrimible por l ante los tribunales y que cuenta
con amplios medios de defensa a su alcance para proteger sus derechos y
la constitucionalidad de las decisiones de las autoridades, existen las bases
para poder hablar de una obligacin moral de obediencia al derecho. Cuan-
do el Estado de derecho es distante del ciudadano, y no le brinda protec-
cin, cuando se carece de vas efectivas para la exigencia de rendicin de
cuentas, cmo poder sostener que hay una obligacin moral de adhesin
al sistema normativo. Igual que en el caso de la democracia, si queremos
plantear el asunto en trminos de una obligacin moral de obediencia al
derecho, luchemos por perfeccionar el Estado de derecho, hagamos que sea
efectivo el control de constitucionalidad, la rendicin de cuentas, la divisin
de poderes, etctera.560
En el caso de los derechos humanos, de libertad y de igualdad, y de las
siguientes generaciones, debemos tambin decir que una obligacin de obe-
diencia moral al derecho es exigible slo en aquellos casos en donde los
derechos humanos son efectivamente garantizados. Si el sistema normativo
abandona a los derechos humanos no hay ninguna obligacin moral de aca-
tarlo. Slo existe esta obligacin ah donde las normas tienen un contenido y
una orientacin compatible con los derechos humanos. La visin garantista
de Ferrajoli561 a este respecto es explcita con lo que aqu se dice. Slo desde
una visin de los derechos humanos en donde stos cuentan con garantas
y mecanismos efectivos de proteccin podemos referirnos a una obligacin
moral de obediencia al derecho, en los dems casos es como si predicramos
la obligacin moral de obedecer el derecho en la Alemania nazi, en la Italia
fascista o en la Sudfrica del apartheid.
Cmo generar los hbitos de obediencia al derecho? Por un lado, como
aqu se ha sealado, es necesario perfeccionar la democracia, el Estado de
derecho, orientar las normas hacia una visin garantista562 con la ms am-
336
plia proteccin a los derechos humanos, pero por otro, tambin se requiere
ir construyendo una ciudadana ms informada, reflexiva y crtica con sus
instituciones y normas. Este ltimo aspecto exige que exista una conviccin
fuerte y firme para promover el Estado de derecho, un compromiso sin am-
bages. En casi ningn pas del mundo ha existido una poltica consistente de
parte del gobierno o de la sociedad para insistir en la importancia del Estado
de derecho. Por el lado de la educacin en contra de la corrupcin, habra
que mencionar que existen al menos dos dimensiones: una de mera instruc-
cin, que hace referencia a la enseanza tcnica y, la otra, que implica una
educacin cvica, una enseanza en los valores. En la parte de la instruccin,
la educacin se relaciona con reglas tcnicas, es decir, con los medios para
alcanzar el fin deseado, esto es, proporcionarle al ciudadano la informacin
sobre los mecanismos a su disposicin de control institucional y social, mos-
trarle el impacto negativo de la desobediencia al derecho, de la corrupcin en
la economa o en las relaciones sociales, indicarle que los actos u omisiones
que constituyen corrupcin entraan el rompimiento de normas jurdicas,
ensearle las normas y cuerpos jurdicos que se infringen con la corrupcin
y la manera de denunciarla, etctera. Por lo que ve a la educacin cvica, el
ciudadano debe ser educado en los valores morales, sobre todo en aquellos
temas que constituyen restricciones al autointers y que favorecen el auto-
dominio; el ciudadano debe saber que las instituciones y normas jurdicas no
expresan exclusivamente relaciones de poder o de dominio, sino que deben
estar orientadas hacia el desarrollo de fines como el respeto a la autonoma
personal, la libertad, la igualdad; que las normas jurdicas y las instituciones
en general deben ser producto de procedimientos democrticos con parti-
cipacin ciudadana efectiva, deliberacin de los asuntos pblicos, publicidad
de los procedimientos y de las decisiones, etctera; se le debe inculcar la im-
portancia de una relacin fuerte entre el gobernante y gobernado, y cmo
la rendicin de cuentas permite esa relacin para controlar al poderoso y
evitar los desvos del poder. La finalidad de la educacin cvica debe ser el
desarrollo de un punto de vista interno del ciudadano hacia las normas, que
ste sepa que tiene una obligacin de obedecerlas cuando son justas, esto es,
que su establecimiento fue el resultado de procedimientos democrticos y
su finalidad es el respeto de los derechos humanos.563
Parte de la educacin cvica debe consistir en mostrar las razones lega-
les, prudenciales y morales para obedecer el derecho y tambin para des-
obedecerlo. Insistir que la adhesin al sistema normativo no es gratuita, que
depende en buena medida de cmo ha realizado su labor la clase poltica al
momento de emitir y aplicar las normas. En pocas palabras, que la obliga-
cin de obedecer las normas es siempre condicionada y crtica, que el ciu-
337
dadano debe estar en permanente dilogo crtico con las instituciones y con
las normas, y que los gobernantes no tienen un cheque en blanco para hacer
lo que quieran. La educacin cvica debe apartarse de cualquier fetichismo
en torno a la ley, expresiones como se debe obedecer la ley porque es la ley
deben dejase de lado, y sustituirlas por otras como es obligado obedecer la
ley cuando sta fue producto de un procedimiento democrtico y es justa
porque promueve y garantiza derechos humanos.
En cuanto al ciudadano, si las personas comienzan a tener comporta-
mientos honestos, con independencia de las consecuencias para sus intereses
ser posible prever comportamientos futuros. Estas actitudes no slo sern
morales sino estratgicas, en el sentido que los dems podrn ajustar sus
conductas a las de las personas honestas. Como dice Malem, se inicia un
proceso de circularidad causal, donde un comportamiento moral genera
como respuesta un comportamiento de igual calidad moral, lo que a su
vez genera un nuevo comportamiento moral, tales participantes se identi-
ficaran mutuamente como agentes morales y tendern a cooperar entre s.
Este mercado de la virtud produce esquemas de cooperacin y confianza
social, que no slo refuerzan las virtudes personales sino que tienen conse-
cuencias en los beneficios econmicos que las personas reciben.564
Cmo generar ese mercado de la virtud? A travs de la educacin cvi-
ca de los ciudadanos. En Mxico y de acuerdo a lo previsto en el artculo 41
de la Constitucin, corresponde al Instituto Federal Electoral la educacin
cvica. No obstante, muchas instituciones pblicas y privadas tienen a su
cargo la educacin cvica; sta es un proceso que se adquiere durante la vi-
da de una persona. Los ciudadanos tambin recibimos educacin cvica a
travs del comportamiento de la clase poltica. Si los polticos de un pas
son virtuosos trasladarn al resto de la poblacin, tal vez no mecnicamen-
te, pero si con el ejemplo, comportamientos morales. Un poltico educa
a los ciudadanos si respeta las normas y no es corrupto, si lucha contra la
corrupcin, no basta un comportamiento retrico, los ciudadanos toman
en cuenta los hechos. Si los ciudadanos observan que sus gobernantes y
polticos incumplen con las normas y se corrompen, los mensajes de stos
no tendrn impacto entre la poblacin, en cambio s tendr relevancia para
mal, un comportamiento corrupto del gobernante, pues manda la seal a
la sociedad en favor de esas prcticas. Igualmente, es pedaggico que los
gobernantes corruptos sean castigados. Nada hace ms dao a la democracia
que las conductas ilcitas de un mal gobernante queden impunes. De nada
sirven las campaas a favor del Estado de derecho en los medios de comu-
nicacin, o los esfuerzos educativos, si despus no hay sanciones a los po-
lticos que transgreden las normas. En este mismo sentido es, por ejemplo,
338
IV. Recapitulacin
Hemos sostenido en este captulo que el Estado de derecho slo ser po-
sible si los ciudadanos se sienten obligados no slo jurdicamente a
cumplir las normas. El cumplimiento de las normas por parte de los ciuda-
danos no entraa un acto de fe, si los ciudadanos respetan las normas de su
pas, es porque adems de conocerlas y de tener nocin de la importancia
de su cumplimiento, saben que esas normas tienen un origen democr-
tico y que estn orientadas a salvaguardar sus derechos fundamentales y
humanos, que no estn diseadas para el beneficio de los poderosos o de
las autoridades.
El tema de la obediencia del derecho est ligado con el de la obligacin
poltica y con la legitimidad de los sistemas polticos y jurdicos. Las razones
legales no son suficientes para obedecer el derecho porque son tautol-
gicas; las prudenciales se fundamentan en el clculo, en el temor, en las ven-
tajas o desventajas de las normas y, por tanto, no son razones morales. En
cambio, las razones morales entienden que el derecho se obedece porque
se considera que el derecho es justo y emana de autoridades legtimas y de
procedimientos democrticos. El derecho como obra humana debe ganar-
se la obligacin de ser obedecido por la justeza de sus normas.
La obligacin poltica en las sociedades no es el resultado de la fuerza ni
de la imposicin, sino que en todo caso es una respuesta de los ciudadanos,
siempre condicionada a los procedimientos democrticos y a los resulta-
dos que garantizan derechos fundamentales, al poder poltico basado en el
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hay sanciones a las autoridades que transgreden las normas. En este mismo
sentido es terriblemente daino para el sistema jurdico y el Estado de de-
recho que los actos jurdicos que se celebran al amparo de la corrupcin y
la impunidad se mantengan firmes y no sean anulados jurdicamente.
342
Cuestionario
343
Notas y referencias
1 Martnez Roldn, Luis y Fernndez Surez, Jess A., Curso de teora del derecho,
Barcelona, Ariel, 1997, pp. 7-10.
2 Una persona en el sentido jurdico contemporneo es un centro de imputacin
normativa, un sujeto con derechos y obligaciones determinados por el orde-
namiento jurdico positivo.
3 Peces-Barba, Gregorio, Introduccin a la filosofa del derecho, 2a. ed., Madrid, De-
bate, 1984, pp. 59 y 60.
4 Aristteles, Poltica, trad. de Julin Maras y Mara Arajo, Madrid, Centro de
Estudios Polticos y Constitucionales, 2005, pp. 3-5. (1253 a).
5 Capella, Juan Ramn, Dos lecciones de introduccin al derecho, Barcelona, Universi-
dad Central de Barcelona, 1980, p. 5.
6 Nino, Carlos Santiago, Introduccin al anlisis del derecho, Buenos Aires, Astrea, 1988,
p. 1.
7 Atienza, Manuel, El sentido del derecho, Barcelona, Ariel, 2001, p. 17.
8 Cerroni, Umberto, Marx y el derecho moderno, Mxico, Grijalbo, 1975,
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9 Malinowski, Bronislaw, Crimen y costumbre en la sociedad salvaje, Barcelona, Ariel,
1982.
10 Betegn, Jernimo y otros, Lecciones de teora del derecho, Madrid, McGraw-Hill,
1997, p. 91
11 Martnez Roldn, Luis y Fernndez Surez, Jess A., Curso de teora del derecho,
cit., pp. 7-10.
12 Kennedy, Duncan, Libertad y restriccin en la decisin judicial. El debate con la teora
crtica del derecho, Bogot, Ediciones Uniandes, 2002.
13 Weber, Alfred, Historia de la cultura, Mxico, Fondo de Cultura Econmica,
1945.
14 Peces-Barba, Gregorio, Introduccin a la filosofa del derecho, cit., p. 81.
15 Hberle, Peter, Teora de la Constitucin como ciencia de la cultura, Madrid, Tecnos,
2000, pp. 24-27.
16 Sobre este proceso histrico ver el importante trabajo de Berman, Harold J.,
La formacin de la tradicin jurdica de Occidente, Mxico, Fondo de Cultura
Econmica, 1996.
17 Hberle, Peter, El Estado constitucional, Mxico, unam, 2001.
347
18 David, Ren, Tratado de derecho civil comparado, Madrid, Revista de Derecho Pri-
vado, 1953, pp. 5 y ss.
19 Zagrebelsky, Gustavo, El derecho dctil. Ley, derechos, justicia, Madrid,Trotta, 1995,
pp. 9 y 10.
20 Tamayo Salmorn, Rolando, Elementos para una teora general del derecho (Intro-
duccin al estudio de la ciencia jurdica), Mxico, Themis, 1998, pp. 240 y 241.
21 Calsamiglia, Albert, Introduccin a la ciencia jurdica, Barcelona, Ariel, 1986,
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22 Bolaos Guerra, Bernardo, Argumentacin cientfica y objetividad, Mxico, unam,
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23 Popper, Karl, La lgica de la investigacin cientfica, Madrid, Tecnos, 1965, pp. 29 y ss.
24 Atienza, Manuel, Introduccin al derecho, Barcelona, Barcanova, 1985, p. 219.
25 Calsamiglia, Albert, Introduccin a la ciencia jurdica, cit., pp. 34 y 35.
26 Feyerabend, Paul, Tratado contra el mtodo, Madrid, Tecnos, 2000, pp. 1-52.
27 Lakatos, I., La metodologa de los programas de investigacin cientfica, Madrid, Alian-
za Editorial, 1983.
28 Kuhn, Thomas S., La estructura de las revoluciones cientficas, Mxico, Fondo de
Cultura Econmica, 1987, p. 36 y ss.
29 Hernndez Gil, Antonio, Problemas epistemolgicos de la ciencia jurdica, Madrid,
Cuadernos Cvitas, 1981, p. 61-62.
30 Mugerza, Javier, Nuevas perspectivas en la filosofa contempornea de la cien-
cia, Teorema,Valencia, nm. 3, 1973.
31 Atienza, Manuel, Introduccin al derecho, cit., p. 224.
32 Vega, Jess, La idea de ciencia en el derecho, Oviedo, Biblioteca Filosofa en espaol,
2000, pp. 17-344.
33 Garca Mynez, Eduardo, Introduccin al estudio del derecho, Mxico, Porra, 1978,
p. 126.
34 Bunge, Mario, La ciencia, su mtodo y su filosofa, Buenos Aires, Siglo xxi, 1971,
y Bunge, Mario, La investigacin cientfica, Barcelona, editorial Ariel, 1969,
captulo i.
35 Lvi-Strauss, C., Criterios cientficos en las disciplinas sociales y humanas, Valencia,
Cuadernos Teorema, 1978, y Hernndez Gil, Antonio, Problemas epistemolgicos
de la ciencia jurdica, cit., pp. 34-61.
36 Piaget, Jean, La situacin de las ciencias del hombre dentro del sistema de las
ciencias, Tendencias de la investigacin en las ciencias sociales, Madrid, Alianza
Universidad, 1976.
37 Ibidem, pp. 50 y ss.
38 Bueno, Gustavo, Idea de ciencia desde la teora del cierre categorial, Santander, Uni-
versidad Internacional Menndez y Pelayo, 1976.
39 Kirchmann, J. H., La Jurisprudencia no es ciencia, Madrid, Civitas, 1983, p. 29.
348
40 Segura Ortega, Manuel, Teora del derecho, Madrid, editorial Centro de Estudios
Ramn Areces, S. A, 1990, p. 58.
41 Atienza, Manuel, Introduccin al derecho, cit., p. 281.
42 Calsamiglia, Albert, Introduccin a la ciencia jurdica, Barcelona, Ariel, 1986, p. 49.
43 Larenz, Karl, Metodologa de la ciencia del derecho, Barcelona, Ariel, 1980, pp. 26
y 35.
44 Wroblewski, Jerzy, Normativit della scienza giuridica, en Scarpelli, U. (ed.),
Diritto e analisi del linguaggio, Miln, Comunit, 1976, p. 335.
45 Calsamiglia, Albert, Introduccin a la ciencia jurdica, Barcelona, Ariel, 1986, p. 68.
46 Nino, Carlos Santiago, Consideraciones sobre la dogmtica jurdica, Mxico, unam,
1989, pp. 9-39.
47 Larenz, Karl, Metodologa de la ciencia del derecho, Barcelona, Ariel, 1980, p. 228.
48 Nino, Carlos Santiago, Introduccin al anlisis del derecho, cit., pp. 321 y 322.
49 Cerroni, Umberto, Marx y el derecho moderno, Mxico, Grijalbo, 1975,
y Atienza, Manuel y Ruiz Manero, Juan, Marxismo y filosofa del derecho,
Mxico, Fontamara, 1993.
50 Novoa Monreal, Eduardo, El derecho como obstculo al cambio social, Mxico,
Siglo xxi editores, 1981, pp. 19 y ss., y Foucault, Michel, La verdad y las
formas jurdicas, Barcelona, Gedisa, 1980.
51 Kennedy, Duncan, Libertad y restriccin en la decisin judicial, Bogot, Uniandes,
2002, y Prez Lled, Juan A., El movimiento Critical Legal Studies, Madrid,
Tecnos, 1996.
52 Kelsen, Hans, Teora pura del derecho, 2a. ed., trad. de Roberto J.Vernengo, Mxi-
co, unam, 1981; id., Qu es la teora pura del derecho?, Mxico, Fontamara, 1992,
y, entre otras, id., Contribuciones a la teora pura del derecho, Mxico, Fontamara,
1991.
53 Kelsen, Hans, Teora pura del derecho, cit., pp. 83 y ss.
54 Kelsen, Hans, Qu es la teora pura del derecho?, cit., pp. 7-27.
55 Kelsen, Hans, Contribuciones a la teora pura del derecho, cit., pp. 58 y 59.
56 Kelsen, Hans, Qu es la teora pura del derecho?, cit., pp. 16-34.
57 Atienza, Manuel, Introduccin al derecho, Barcelona, Barcanova, 1985, p. 235.
58 Kelsen, Hans, Teora pura del derecho, cit., pp. 71 y ss.
59 Ibidem, pp. 114 y ss.
60 Kelsen, Hans, Qu es la teora pura del derecho?, cit., pp. 30-56.
61 Nino, Carlos Santiago, Introduccin al anlisis del derecho, cit., p. 87 y 88.
62 Zagrebelsky, Gustavo, El derecho dctil. Ley, derechos, justicia, Madrid,Trotta, 1995,
pp. 120 y ss.
63 Ferrajoli, Luigi, Derecho y razn.Teora del garantismo penal, Madrid, Trotta, 1997,
pp. 871-876.
64 Nino, Carlos Santiago, Introduccin al anlisis del derecho, cit., pp. 94 y 95.
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350
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352
353
123 Para tener una idea panormica de las distintas escuelas y corrientes jurdicas
vase Bodenheimer, Edgar, Teora del derecho, Mxico, Fondo de Cultura Eco-
nmica, 1976, y Casanovas, Pompeu y Moreso, Jos Juan (eds.), El mbito de lo
jurdico. Lecturas de pensamiento jurdico contemporneo, Barcelona, Crtica, 1994.
124 El iusnaturalismo actual se puede estudiar en Vigo, Rodolfo L., El iusnaturalismo
actual. De M.Villey a J. Finnis, Mxico, Fontamara, 2003.
125 Radbruch, Gustav, Leyes que no son derecho y derecho por encima de las
leyes, Derecho injusto y derecho nulo, trad. de J. M. Rodrguez Paniagua, Ma-
drid, Aguilar, 1971.
126 Nos dice Norberto Bobbio que hay al menos tres aspectos del positivismo
jurdico: 1) como un modo de acercarse al estudio del derecho; 2) como una
determinada teora o concepcin del derecho; 3) como una determinada
ideologa de la justicia. Bobbio, Norberto, El problema del positivismo jurdico,
Mxico, Fontamara, 1991, pp. 39-40.
127 El ms importante de los positivistas es Hans Kelsen, entre sus obras es obligado
leer Teora pura del derecho, cit.
128 Casanovas Pompeu y Moreso, Jos Juan (eds.), El mbito de lo jurdico. Lecturas
de pensamiento jurdico contemporneo, cit., pp. 235-293.
129 Cerroni, Umberto, Marx y el derecho moderno, Mxico, Grijalbo, 1975, y Atienza,
Manuel y Ruiz Manero, Juan, Marxismo y filosofa del derecho, Mxico, Fon-
tamara, 1993.
130 Es importante distinguir entre el trmino derecho, el concepto derecho y el
objeto derecho. Los trminos aunque no todos designan conceptos que
pueden tener o no una referencia emprica u objetiva, es decir, los trminos
se quedan en un nivel puramente lingstico. Los conceptos implican una
elaboracin intelectual y aluden a fenmenos que son descritos, analizados
o determinados a travs del lenguaje, con o sin referencia emprica nivel
conceptual. Los objetos son las cosas mismas. Atienza, Manuel, Introduccin
al Derecho, Barcelona, Barcanova, 1985, pp. 5-7.
131 Para conocer las distintas clases de definiciones vase Atienza, Manuel, Intro-
duccin al derecho, cit., pp. 6-9.
132 El artculo 192 de la Ley de Amparo seala en su segundo prrafo que las
resoluciones constituirn jurisprudencia, siempre que lo resuelto por ellas se
sustenten en cinco sentencias ejecutorias ininterrumpidas por otra en con-
trario, que hayan sido aprobadas por lo menos por ocho ministros si se tratara
de jurisprudencia del pleno, o por cuatro ministros, en los casos de jurispru-
dencia de las salas.
133 Atienza, Manuel, El sentido del derecho, cit., p.53.
134 Vase, por ejemplo, Kelsen, Hans, Teora general del derecho y del Estado, Mxico,
unam, 1995, pp. 90-105.
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355
356
158 Nino, Carlos Santiago, Los fundamentos del control judicial de constituciona-
lidad, Cuadernos y debates, Madrid, nm. 29, 1991.
159 Ferrajoli, Luigi, Epistemologa jurdica y garantismo, Mxico, Fontamara, 2004.
160 Atienza, Manuel, El derecho como argumentacin, Barcelona, Ariel, 2006.
161 Atienza, Manuel, El sentido del derecho, Barcelona, Ariel, 2001, pp. 9-11.
162 Atienza, Manuel, El derecho como argumentacin, cit., p. 57.
163 Ibidem, pp. 55-56.
164 Muchos autores conciben al derecho como cultura.Vase Hberle, Peter, Cons-
titucin como cultura, Bogot, Instituto de Estudios Constitucionales Carlos
Restrepo Piedrahita, 2002, y Hberle, Peter, El Estado Constitucional, Mxico,
unam-Instituto de Investigaciones Jurdicas, 2001.
165 Nino, Carlos Santiago, La constitucin de la democracia deliberativa, Barcelona,
Gedisa, 1997, pp. 16-17.
166 Una de las obras seminales en la materia es la de Gurvitch, Georges, La idea
del derecho social, Granada, Comares, 2005.
167 Kennedy, Duncan, Libertad y restriccin en la decisin judicial, Bogot, Uniandes,
2002.
168 Atienza, Manuel, El sentido del derecho, Barcelona, Ariel, 2001, pp. 37 y 38.
169 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, Madrid, Debate, 1992, pp. 15-31.
170 Mendonca, Daniel, Introduccin al anlisis normativo, Madrid, Centro de Estudios
Constitucionales, 1992, p. 21.
171 Mendonca, Daniel, Introduccin al anlisis normativo, cit., pp. 22-23.
172 Betegn, Jernimo et al., Lecciones de teora del derecho, Madrid, McGraw-Hill,
1997, p. 120.
173 Cceres Nieto, Enrique, Lenguaje y derecho. Las normas jurdicas como sistema
de enunciados, Mxico, Cmara de Diputados, LVII Legislatura-unam, 2000,
pp. 18-24.
174 Von Wright, G.H., Norma y accin. Una investigacin lgica, Madrid, Tecnos,
1979, captulo primero, Atienza, Manuel, El sentido del derecho, cit., p. 65.
175 Von Wright, G.H., Norma y accin, cit., cap. primero. Vase tambin Men-
donca, Daniel, Introduccin al anlisis normativo, Madrid, Centro de Estudios
Constitucionales, 1992, p. 27-29.
176 Garca Mynez, Eduardo, Introduccin al estudio del derecho, Mxico, Porra,
1978.
177 Ibidem, p. 14.
178 Ibidem, p. 15.
179 Ibidem, p. 22.
180 Ibidem, p. 22.
181 Ibidem, pp. 34-35.
357
358
200 Alchourron, Carlos y Bulygin, Eugenio, Anlisis lgico y derecho, Madrid, Cen-
tro de Estudios Constitucionales, 1991, pp.3-301.
201 El desarrollo clsico de estas ideas est en Dworkin, Ronald, Los derechos en
serio, Barcelona, Ariel, 1984, pp. 61-145.
202 Raz, Joseph, Razonamiento prctico, Mxico, Fondo de Cultura Econmica,
1988; id., La autoridad del derecho, Mxico, unam, 1985.
203 Atienza, Manuel y Ruiz Manero, Juan, Las piezas del derecho.Teora de los enun-
ciados jurdicos, Barcelona, Ariel, 1996.
204 Idem.
205 Guastini, Riccardo, Distinguiendo. Estudios de teora y metateora del Derecho, Bar-
celona, Gedisa, 1999, pp. 143-171.
206 Esta discusin se dio principalmente en Europa en el perodo de entreguerras, y
se expone de manera muy clara por Zagrebelsky, Gustavo, El Derecho dctil.
Ley, derechos, justicia, Madrid, Trotta, 1995, pp. 111-114.
207 La Suprema Corte de Justicia de la Nacin haba sealado antes de la reforma
constitucional de 2008, que la presuncin de inocencia no era un principio
explcito en el ordenamiento constitucional si era un principio implcito en
la Constitucin. Vase Presuncin de inocencia. El principio relativo se
contiene de manera implcita en la Constitucin federal. Instancia: Ple-
no, Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta, novena poca, t. xvi, agosto
de 2002, p. 14. Tesis aislada.
208 Esta clasificacin puede encontrarse en Prieto Sanchis, Luis, Sobre principios y
normas. Problemas del razonamiento jurdico, Madrid, Centro de Estudios Cons-
titucionales, 1992, pp. 129-149.
209 Perez Luo, Antonio-Enrique,Los principios generales del derecho: un mito
jurdico?, Revista de Estudios Polticos, Madrid, nm. 98, octubre-diciembre
1997, pp. 9-24.
210 Dworkin, Ronald, Los derechos en serio, Barcelona, Ariel, 1984, pp.146-208.
211 Prieto Sanchis, Luis, Constitucionalismo y positivismo, Mxico, Fontamara, 1997,
p. 52.
212 Ibidem, p. 63.
213 Ferrajoli, Luigi, Derecho y razn.Teora del garantismo penal, Madrid,Trotta, 1997,
pp. 920-931.
214 Mortati, Costantino, La Constitucin en sentido material, Centro de Estudios
Polticos y Constitucionales, Madrid, 2000.
215 Prieto Sanchis, Luis, Sobre principios y normas. Problemas del razonamiento jurdico,
Madrid, Centro de Estudios Constitucionales, 1992, pp. 146-149.
216 Guastini, Riccardo, Distinguiendo. Estudios de teora y metateora del derecho, Bar-
celona, Gedisa, 1999, pp.162-167.
359
217 MacCormick, Neil, Legal Reasoning and Legal Theory, Oxford University Press,
1978.
218 Alexy, Robert, Teora de los derechos fundamentales, Madrid, Centro de Estudios
Constitucionales, 1997, pp.81-172.
219 Cceres Nieto, Enrique, Lenguaje y derecho. Las normas jurdicas como sistema de
enunciados, Mxico, unam, Cmara de Diputados, lvii Legislatura. 2000, p. 35.
220 Martnez Roldn, Luis y Fernndez Surez, Jess A., Curso de teora del
derecho, Barcelona, Ariel, 1997, p. 81.
221 Raz, Joseph, The Morality of Freedom, Oxford, Clarendon Press, 1986. Vase el
prefacio.
222 Kelsen, Hans, Teora pura del derecho, Mxico, unam, 1981, pp. 201 y ss.
223 Ibidem, pp. 123 y ss.
224 Kelsen, Hans, Qu es justicia?, Barcelona, Ariel, 1991, p. 63.
225 Hart, H. L. A, El concepto de derecho, cit., pp. 99-123.
226 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, cit., pp. 153-270.
227 Ibidem, p. 164.
228 Dworkin, Ronald, Los derechos en serio, Barcelona, Ariel, 1984, pp. 61 y ss.
229 Wright, G. H. Von, Problemas abiertos en filosofa del derecho, Doxa, Ali-
cante, nm. 1, 1984, p. 266.
230 Betegn, Jernimo et al., Lecciones de teora del derecho, Madrid, McGraw-Hill,
1997, p. 147.
231 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, obra citada, p. 164.
232 Caracciolo, R., El sistema jurdico. Problemas actuales, Madrid, Centro de Estu-
dios Constitucionales, 1988, p. 57.
233 Hart, H. L. A., El concepto de derecho, cit., pp. 63-97.
234 Kelsen, Hans, Teora pura del derecho, cit., p. 210.
235 Hart, H. L .A., El concepto de derecho, cit., p. 137.
236 Ruiz Manero, Juan, Jurisdiccin y normas, Madrid, Centro de Estudios Constitu-
cionales, 1990, pp. 113 y ss.
237 Raz, Joseph, The Concept of a Legal System. An Introduction to the Theory of Legal
System, Oxford University Press, 1970.
238 Dworkin, Ronald, Los derechos en serio, cit.
239 Caracciolo, Ricardo, El sistema jurdico. Problemas actuales, cit., pp. 57 y ss.
240 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, cit., pp. 189-219.
241 Gavazzi, G., Delle antinomie, Torino, Giappichelli, 1959, p.53. Gavazzi seala
que los presupuestos de las antinomias son: que sean normas jurdicas, que se
encuentren vigentes, que pertenezcan al mismo sistema, y que formen parte
del mismo ordenamiento jurdico.
242 Gavazzi, G., Delle antinomie, cit., pp. 69-73.
360
243 Ruiz Sanz, Mario, Sistemas jurdicos y conflictos normativos, Cuadernos Bartolom
de las Casas, Universidad Carlos III de Madrid, Dykinson, 2002, pp. 86-89.
244 Gascn, Mariana, La coherencia del ordenamiento. El problema de las an-
tinomias, en Betegn, J. et al., Lecciones de teora del derecho, Madrid, Mc
Graw-Hill, 1997.
245 En Mxico se discute mucho por la doctrina si existen o no atribuciones
concurrentes. Muchos autores como De la Cueva o Carpizo lo niegan. De
seguir este punto de vista, no podra existir en nuestro derecho la aplica-
cin del criterio de prevalencia. Cardenas, Jaime, Una Constitucin para la
democracia. Propuestas para un nuevo orden constitucional, Mxico, unam, 2000,
pp. 203-206.
246 Mario Ruiz Sanz, elabora el siguiente cuadro de conflicto entre criterios, in-
corporando los criterios de competencia y de prevalencia. Las situaciones
que podran presentarse segn este autor son las siguientes: 1) conflicto entre
el criterio jerrquico y el de competencia. Tendra lugar entre una norma
superior e incompetente y otra norma inferior pero competente. Si se aplica
el criterio jerrquico vale la primera norma; en cambio si se usa el de com-
petencia, sirve la segunda; 2) conflicto entre el criterio cronolgico y el de
competencia. Procedera entre una norma posterior e incompetente, frente a
otra norma anterior y competente. Por cronologa prevalece la primera; por
competencia, la segunda; 3) conflicto entre el criterio de especialidad y el
de competencia. Acontecera entre una norma especial pero incompetente
frente a otra norma general con respecto a la primera y competente. Por
especialidad se aplicara la primera, por competencia, la segunda; 4) conflicto
entre el criterio jerrquico y el de prevalencia. Sucedera entre una norma
superior y no prevalente, frente a otra norma inferior y prevalente. Con je-
rarqua se aplicara la primera norma; con prevalencia, la segunda; 5) conflicto
entre el criterio cronolgico y el de prevalencia. Estara presente entre una
norma posterior y no prevalente frente otra norma anterior y prevalente. Con
cronologa aplicaramos la primera; con prevalencia, la segunda; 6) conflicto
entre el criterio de especialidad y el de prevalencia. Se dara entre una nor-
ma especial y no prevalente y otra norma general con respecto a la primera
pero prevalente. Aplicando especialidad se dara la primera; con el criterio de
prevalencia se priorizara la segunda, y 7) conflicto entre los criterios de com-
petencia y prevalencia. En caso de una norma competente y no prevalente,
frente a otra norma incompetente pero prevalente. Desde competencia se
tendra en cuenta la primera; desde prevalencia, la segunda.Vase Ruiz Sanz,
Mario, Sistemas jurdicos y conflictos normativos, Cuadernos Bartolom de las
Casas, Universidad Carlos III de Madrid, Dykinson, 2002, pp. 91 y 92.
361
247 Engisch, K., Introduccin al pensamiento jurdico, trad. de Ernesto Garzn, Madrid,
Guadarrama, 1967, pp. 204-205.
248 Prieto Sanchs, Luis, Justicia constitucional y derechos fundamentales, Madrid, Tro-
tta, 2003, pp. 183-184.
249 Ruiz Sanz, Mario, Sistemas jurdicos y conflictos normativos, cit., pp. 119 y 120.
250 Zagrebelsky, Gustavo, El derecho dctil. Ley, derechos, justicia, editorial Madrid,
Trotta, 1995, pp. 122-126.
251 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, cit., pp. 230-233.
252 Ibidem, pp. 234-238.
253 Alchourron, Carlos y Bulygin, Eugenio, Introduccin a la metodologa de las
ciencias jurdicas y sociales, Buenos Aires, Astrea, 1974, y Atria et al., Lagunas en el
derecho, Madrid, Marcial Pons, 2005.
254 Martnez Roldn, Luis y Fernndez Surez, Jess A., Curso de teora del
derecho, cit., pp. 112-113.
255 Tambin se considera como heterointegracin acudir a otras fuentes dentro del
sistema diferentes a la dominante. As, si se fundamenta la decisin en fuentes
como la costumbre, la equidad o la doctrina, algunos podran estimar que se
trata de heterointegracin y no de autointegracin.
256 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, cit., pp. 247-248.
257 Alexy, Robert, Teora de los derechos fundamentales, Madrid, Centro de Estudios
Constitucionales, 1997, pp. 81-172.
258 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, cit.,p 255.
259 Crdenas Gracia, Jaime, Crisis de legitimidad y democracia interna de los partidos
polticos, Mxico, Fondo de Cultura Econmica, 1992.
260 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, cit.,p. 259.
261 As dice el artculo 2 A fraccin II de la Constitucin mexicana dice que: Esta
Constitucin reconoce y garantiza el derecho de los pueblos y las comuni-
dades indgenas a la libre determinacin y, en consecuencia, a la autonoma
para aplicar sus propios sistemas normativos en la regulacin y solucin de
sus conflictos internos.
262 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, cit., pp. 262-263.
263 Crdenas Gracia, Jaime, Transicin poltica y reforma constitucional en Mxico,
Mxico, unam, 1994.
264 Artculo 56 del Cdigo Penal Federal.
265 Los artculos segundo, tercero y cuarto transitorio del Cdigo de Procedimien-
tos Civiles para el Distrito Federal, dicen, por ejemplo:
Artculo segundo. La substanciacin de los negocios de jurisdiccin conten-
ciosa que estn pendientes en primera o nica instancia al entrar en vigor
esta ley, se sujetar al cdigo anterior, hasta pronunciarse sentencia. La
tramitacin de la apelacin contra el fallo que se dicte en esos negocios,
362
se sujetar a este Cdigo; pero para la procedencia del recurso, por razn
del inters, regirn las disposiciones de la ley anterior. La substanciacin de
los negocios de jurisdiccin se acomodar desde luego a las disposiciones
de este Cdigo.
Artculo tercero. La tramitacin y resolucin de las apelaciones pendientes, al
entrar en vigor este Cdigo, se sujetarn a las prescripciones del artculo
anterior.
Artculo cuarto. Si para la interposicin de un recurso o para el ejercicio de
algn otro derecho en la tramitacin de los negocios pendientes, al ex-
pedirse este Cdigo, estuviere corriendo un trmino, y el sealado en l
fuere menor que el fijado en la ley anterior, se observar lo dispuesto en
esta ltima.
266 Rojas Amandi, Vctor Manuel, Filosofa del derecho, Mxico, Harla, 1990, pp.
315-319.
267 Pereznieto Castro, Leonel y Ledesma Mondragn, Abel, Introduccin al estu-
dio del derecho, Mxico, Harla, 1989, pp. 116-118.
268 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, cit., pp. 267 y 268.
269 Garca Mynez, Eduardo, Introduccin al estudio del derecho, cit., p. 51.
270 Aguil Regla, Josep, Teora general de las fuentes del derecho (y del orden jurdico),
Barcelona, Ariel, 2000, p. 27.
271 Martnez Roldn, Luis y Fernndez Surez, Jess A., Curso de teora del
derecho, cit., 1997, p. 159.
272 Una descripcin minuciosa sobre las diversas teoras jurdicas que han tratado
el problema de las fuentes del derecho se encuentra en Ross, Alf, Teora de las
fuentes del derecho. Una contribucin a la teora del derecho positivo sobre la base de
investigaciones histrico-dogmticas, trad. de Jos Luis Muoz de Baena Simn,
Aurelio de Prada Garca y Pablo Lpez Pietsch, Madrid, Centro de Estudios
Polticos y Constitucionales, 1999.
273 Balaguer Callejn, Francisco, Fuentes del derecho, Madrid, Tecnos, 1991, p. 32.
274 Del Vecchio, Giorgio, Filosofa del derecho, Barcelona, Bosch, 1980.
275 Gny, Francisco, Mtodo de interpretacin y fuentes en derecho privado positivo, Gra-
nada, Comares, 2000.
276 Stammler, Rudolf, Tratado de filosofa del derecho, Mxico, Editora Nacional,
1980, pp. 169-181.
277 Betegn, Jernimo et al., Lecciones de teora del derecho, Madrid, McGraw-Hill,
1997, p. 296.
278 Cabo Martn, Carlos de, Sobre el concepto de ley, Madrid, Trotta, 2000, pp.
73-114.
279 Zagrebelsky, Gustavo, El derecho dctil. Ley, derechos, justicia, Madrid, Trotta,
1995, pp. 36 y 37.
363
280 Balaguer Callejn, Francisco, Fuentes del derecho, Madrid, Tecnos, 1991, p. 51.
281 Aguil Regla, Josep, Teora general de las fuentes del derecho, cit.,pp. 194-197.
282 Ibidem, pp. 195 y 196.
283 Ibidem, pp. 196 y 197.
284 Martnez Roldn, Luis y Fernndez Surez, Jess A., Curso de teora del derecho,
cit., pp. 161-162.
285 Gny, Francisco, Mtodo de interpretacin y fuentes en derecho privado Positivo, cit.,
pp. 409 y ss.
286 Betegn, Jernimo et al., Lecciones de teora del derecho, cit., pp. 214 y 215.
287 Pizzorusso, Alessandro, Lecciones de derecho constitucional, Madrid, Centro de
Estudios Constitucionales, 1984, vol. II, p. 421.
288 Betegn, Jernimo et al., Lecciones de teora del derecho, cit., pp. 217-218. Este
tipo de costumbre regula una situacin que la ley no ha previsto y sirve en
algunos sistemas jurdicos para colmar o llenar lagunas respetando el resto de
las fuentes.
289 Entre otras cosas, la Constitucin es suprema porque crea a los poderes y r-
ganos pblicos, delimita sus competencias, establece los procedimientos de
creacin normativa, reconoce y garantiza los derechos humanos y, establece
los valores jurdicos ms importantes de una sociedad. Rodrguez Bereijo,
lvaro, Constitucin y tribunal constitucional, Revista Espaola de Derecho
Administrativo, Madrid, nmero 91, julio-septiembre de 1996, p. 368.
290 Carbonell, Miguel, Constitucin, reforma constitucional y fuentes del derecho en
Mxico, Mxico, unam, 1998, p. 147.
291 Zagrebelsky, Gustavo, El derecho dctil. Ley, derechos, justicia, cit., p. 37.
292 Rubio Llorente, Francisco y Favoreu, L., El bloque de constitucionalidad, Madrid,
Civitas, 1991, pp. 17 y ss.
293 Zagrebelsky, Gustavo, El derecho dctil. Ley, derechos, justicia, cit., pp. 11 y 12.
294 El artculo 46 de la Constitucin de Guatemala de 1985, seala que en materia
de derechos humanos, los tratados y convenciones aceptados y ratificados por
Guatemala tienen preeminencia sobre el derecho interno. La Constitucin
de los Pases Bajos prev que para el caso de tratados contrarios a la Cons-
titucin se exijan dos tercios del parlamento para su aprobacin. En Espaa,
Francia, Austria, Per y Honduras se requiere para la incorporacin al orde-
namiento jurdico interno frente a un tratado que contradiga las disposicio-
nes constitucionales, un procedimiento similar al establecido para la reforma
de la Constitucin.
295 Con algunos matices porque durante el mes de febrero de 2007, el pleno de la
Suprema Corte de Justicia de la Nacin estableci la siguiente jerarqua nor-
mativa: Constitucin, leyes generales expedidas por el Congreso y tratados,
leyes federales, estatales y del Distrito Federal y, disposiciones municipales.
364
296 Martnez Roldn, Luis y Fernndez Surez, Jess, Curso de teora del derecho,
cit., p. 164.
297 Zagrebelsky, Gustavo, El derecho dctil. Ley, derechos, justicia, cit., pp. 115 y 116.
298 Otto, Ignacio de, Derecho constitucional. Sistema de fuentes, Barcelona, Ariel, 1987,
pp. 157 y 158.
299 Rubio Llorente, Francisco, La forma del poder. Estudios sobre la Constitucin,
Madrid, Centro de Estudios Constitucionales, 1993, pp. 222-267.
300 Crdenas, Jaime, Hacia otra democracia, en Valads, Diego y Carbonell,
Miguel (coords.), El proceso constituyente mexicano. A 150 aos de la Constitucin
de 1857 y 90 de la Constitucin de 1917, Mxico, unam, 2007, pp. 125-181.
301 Garca Mynez, Eduardo, Introduccin al estudio del derecho, cit., p. 61.
302 El artculo tercero del Cdigo Civil seala: Las leyes, reglamentos, circulares
o cualesquiera otras disposiciones de observancia general para el Distrito Fe-
deral, obligan y surten sus efectos tres das despus de su publicacin en la
Gaceta Oficial.
303 El artculo 6 del Cdigo Civil reza: La voluntad de los particulares no pue-
de eximir de la observancia de la ley, ni alterarla o modificarla. Slo pueden
renunciarse los derechos privados que no afecten directamente al inters p-
blico, cuando la renuncia no perjudique derechos de tercero.
304 Garca Mynez, Eduardo, Introduccin al estudio del derecho, cit., p. 69.
305 Rentera, Adrin, Discrecionalidad judicial y responsabilidad, 2a. ed., Mxico, Fon-
tamara, 2002.
306 Nieto Castillo, Santiago, Jurisprudencia e interpretacin jurdica en la
Constitucin mexicana. Evolucin e implicaciones en la cultura jurdica na-
cional, en Valads, Diego y Carbonell, Miguel (coords.), El proceso cons-
tituyente mexicano. A 150 aos de la Constitucin de 1857 y 90 de la Constitucin
de 1917, cit., p. 691.
307 Fraga, Gabino, Derecho administrativo, 42a. ed., Mxico, Porra, 2002, p. 104.
308 Novena poca, Pleno, Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta, XXV,
mayo de 2007, pgina 1515, tesis P./J. 30/2007, jurisprudencia en materia
constitucional.
309 Celano, Bruno, Dos estudios sobre la costumbre, Mxico, Fontamara, 2000.
310 Betegn, Jernimo et al., Lecciones de teora del derecho, Madrid, Mc Graw Hill,
1997, pp. 336 y 337.
311 Garca Mynez, Eduardo, Introduccin al estudio del derecho, Mxico, Porra,
1978, p. 76.
312 Martnez Roldn, Luis y Fernndez Surez, Jess A., Curso de teora del
derecho, cit., p. 177.
313 Austin, John, Sobre la utilidad del estudio de la jurisprudencia, trad. y estudio prelimi-
nar de F. Gonzlez Vicn, Madrid, Centro de Estudios Constitucionales, 1981.
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314 Stammler, Rudolf, Tratado de filosofa del derecho, Madrid, Reus, 1930.
315 Hohfeld, W. N., Conceptos jurdicos fundamentales, Mxico, Fontamara, 1991.
316 Nino, Carlos Santiago, Introduccin al anlisis del derecho, Buenos Aires, Astrea,
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317 Bobbio, Norberto, Teora general del derecho, Madrid, Debate, 1992, p. 27.
318 Martnez Roldn, Luis y Fernndez Surez, Jess A, Curso de teora del
Derecho, cit., pp. 180-183.
319 Jimnez Moles, Mara Isabel, La nueva ciencia y filosofa del derecho. Anlisis me-
todolgico, filosfico y metafsico sobre una teora integracionista del derecho, Mxico,
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320 Cruz, Juan Antonio, El concepto de derecho subjetivo, Mxico, Fontamara, 1999.
321 Hohfeld, W. N., Conceptos jurdicos fundamentales, Mxico, Fontamara, 1991.
322 Kelsen, Hans, Teora pura del derecho, Mxico, unam, 1981, pp. 138-157.
323 Ferrajoli, Luigi, Los fundamentos de los derechos fundamentales, Madrid, Trotta,
2001, pp. 25-29.
324 Garca Mynez, Eduardo, Introduccin al estudio del derecho, cit., pp. 198-214.
325 Ferrajoli, Luigi, Derecho y razn.Teora del garantismo penal, Madrid,Trotta, 1989,
pp. 912-915.
326 Soriano, Ramn, Compendio de teora general del derecho, 2a. ed., Barcelona, Ariel,
1993, p. 214.
327 Kelsen, Hans, Teora pura del derecho, trad. de Roberto Vernengo, 2a. ed. alemana,
Mxico, unam, Instituto de Investigaciones Jurdicas, 1979.
328 Hart, H. L. A, El concepto de derecho, cit.
329 Bayn, Juan Carlos, Deber jurdico, en Garzn Valds, Ernesto y Laporta,
Francisco (eds.), El derecho y la justicia, Madrid, Enciclopedia Iberoamericana
de Filosofa, nm. 11, Trotta, 2000, pp. 313-331.
330 Esquivel, Javier,La persona jurdica, en Carrillo Prieto, Ignacio et al., Concep-
tos dogmticos y teora del derecho, Mxico, unam, 1979, pp. 33-57.
331 Martnez Roldn, Luis y Fernndez Surez, Jess, A, Curso de teora del
derecho, cit., pp. 192-193.
332 Hart, H. L. A., Definicin y teora en la ciencia jurdica, en H. L. A. Hart,
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Aires, Desalma, 1962, pp. 93-138.
333 Esquivel, Javier, La persona jurdica, en Carrillo Prieto, Ignacio et al., cit., pp.
54 y 55.
334 Nino, Carlos Santiago, Introduccin al anlisis del derecho, Buenos Aires, Astrea,
1988, pp. 222-224.
335 Segn el artculo 4 del Cdigo Penal para el Distrito Federal, para que la accin
u omisin sean consideradas delictivas, se requiere que lesionen o pongan en
peligro, sin causa justa, al bien jurdico tutelado por la ley penal.
366
336 Betegn, Jernimo et al., Lecciones de teora del derecho, Madrid, McGraw-Hill,
1997, p. 191.
337 Nino, Carlos Santiago, Los lmites de la responsabilidad penal, Buenos Aires, Astrea,
1980, p. 176.
338 Zuleta, Hugo,Ilcito, en Garzn Valds, Ernesto y Laporta, Francisco (eds.),
El derecho y la justicia, cit., pp. 333-341.
339 Atienza, Manuel y Ruiz Manero, Juan, 100 preguntas sobre conceptos bsicos del
derecho, Alicante, Club Universitario, 1996, p. 33.
340 Hart, H. L A., Punishment and Responsability, Oxford, Oxford University Press,
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341 Lara Chagoyn, Roberto, El concepto de sancin en la teora contempornea del
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342 Gavazzi, G., Lonere.Tra la libert e lobbligo, Turn, Giappichelli, 1970, p. 163.
343 Bobbio, Norberto, Sanzione, Novissimo Digesto Italiano,Turn, Utet, 1969, vol.
xvi, p. 371.
344 Kelsen, Hans, Teora general de las normas, Mxico, Trillas, 1994, pp. 209 y ss.
345 Bobbio, Norberto, Contribucin a la teora del derecho,Valencia, Fernando Torres,
1980, p. 387.
346 Nino, Carlos Santiago, Introduccin al anlisis del derecho, cit., p. 168.
347 Hart, H. L. A, Punishment and Responsability, cit., 1968, p. 211.
348 Prez Carrillo, Agustn, La responsabilidad jurdica, en Ignacio Carrillo
Prieto et al., Conceptos dogmticos y teora del Derecho, cit., pp. 59-73.
349 Larraaga, Pablo, El concepto de responsabilidad, Mxico, Fontamara, 2000.
350 Ibidem, pp. 59-63.
351 Navarro, Pablo, Validez y eficacia de las normas jurdicas, en Garzn Valds
Ernesto y Laporta, Francisco J. (eds.), El derecho y la justicia, cit., p. 210.
352 Capella, Juan Ramn, Elementos de anlisis jurdico, Madrid, Trotta, 1997, p. 87.
353 Vzquez, Rodolfo, Teora del derecho, Mxico, Oxford University Press, 2007,
p. 49-53.
354 Prez Luo, Antonio-Enrique, Teora del Derecho. Una concepcin de la experiencia
jurdica, 3a. ed., Madrid, Tecnos, 2004, p. 213.
355 Ferrajoli, Luigi, Garantismo. Una discusin sobre derecho y democracia, Madrid,
Trotta, 2006.
356 Platn, La Repblica o de lo justo, Mxico, Porra, 1973, libro primero y segun-
do, pp. 435-454.
357 Rawls, John, Teora de la justicia, Mxico, Fondo de Cultura Econmica, 1985.
As los enuncia Rawls: primer principio: cada persona ha de tener un dere-
cho igual al ms amplio sistema total de libertades bsicas, compatible con un
sistema similar de libertad para todos. Segundo principio: las desigualdades
econmicas y sociales han de estar estructuradas de manera que sean para
367
368
369
370
420 Carbonell, Miguel et al. (comps.), Derecho internacional de los derechos humanos.
Textos bsicos, 2a. ed., Mxico, Comisin Nacional de Derechos Humanos,
Porra, 2003, t. II, p. 1311.
421 Alexy, Robert, Teora de los derechos fundamentales, trad. de Ernesto Garzn Val-
ds, Madrid, Centro de Estudios Polticos y Constitucionales, 2002.
422 Fix-Fierro, Hctor, Los derechos polticos de los mexicanos, Mxico, unam, 2006.
423 Crdenas Gracia, Jaime, Transicin poltica y reforma constitucional en Mxico, 2a.
ed., Mxico, unam, 2005, pp. 55-107.
424 Nar, Sami, Mundializacin, inters general y civilizacin, Claves de razn
prctica, Madrid, nm. 124, julio/agosto 2002, pp. 12-18.Tambin vase Held,
David, Hay que regular la globalizacin? La reinvencin de la poltica,
Claves de razn prctica, nm. 99, Madrid, enero/febrero 2000, pp. 4-11.
425 Vega Garca, Pedro de, Mundializacin y derecho constitucional: la crisis del
principio democrtico en el constitucionalismo actual, en Carbonell, Mi-
guel y Vzquez, Rodolfo (comps.), Estado constitucional y globalizacin, Mxi-
co, Porra-unam, 2003, pp. 165-219; Cosso Daz, Jos Ramn, Constitu-
cionalismo y globalizacin, y Ferrajoli, Luigi, Ms all de la soberana y
la ciudadana: un constitucionalismo global, ambos en Carbonell, Miguel
y Vzquez, Rodolfo, (comps.), Estado constitucional y globalizacin, cit., pp.
221-238 y 313-324.
426 Hberle, Peter, El Estado constitucional, trad. de Hctor Fix-Fierro, Mxico,
unam, 2001, pp. 1 y 2.
427 Ibidem, pp. 20-22.
428 Zagrebelsky, Gustavo, El derecho dctil. Ley, derechos, justicia, cit.
429 Loewenstein, Karl, Teora de la Constitucin, Barcelona, Ariel, 1963, p. 219.
430 Bryce, James, Constituciones flexibles y Constituciones rgidas, Madrid, Instituto de
Estudios Polticos, 1962, pp. 19-21.
431 Capella, Juan Ramn, La Constitucin tcita, Las sombras del sistema constitu-
cional espaol, Madrid, Trotta, 2003, p. 39.
432 Diaz, Elas, Estado de derecho y legitimidad democrtica, en Carbonell,
Miguel et al. (coords.), Estado de derecho. Concepto, fundamentos y democratizacin
en Amrica Latina, Mxico, unam, itam, Siglo xxi editores, 2002, p. 64.
433 Vega, Pedro de, Mundializacin y derecho constitucional: la crisis del prin-
cipio democrtico en el constitucionalismo actual, en Carbonell, Miguel
y Vzquez, Rodolfo (comps.), Estado constitucional y globalizacin, Mxico,
Porra-unam, 2001, pp.165-219.
434 Sastre Ariza, Santiago, Ciencia jurdica positivista y neoconstitucionalismo, Madrid,
McGraw-Hill, 1999.
371
435 En este sentido la obra de Luigi Ferrajoli expresa muy bien la importancia
que tiene un concepto fuerte de derechos humanos, tanto para el concepto
de Estado constitucional de derecho como para el de democracia. Vase
Carbonell, Miguel y Salazar, Pedro (eds.), Garantismo. Estudios sobre el pen-
samiento jurdico de Luigi Ferrajoli, Mxico, Trotta-unam, Instituto de Investi-
gaciones Jurdicas, 2005.
436 Ferrajoli, Luigi, Los fundamentos de los derechos fundamentales, Madrid, Trotta,
2001.
437 ODonnell, Guillermo, Amrica Latina Y el Estado de derecho?, Nexos,
Mxico, nm. 325, enero de 2005, pp. 19-27.
438 Ibidem, p. 23.
439 Prez Daz, Vctor, La esfera pblica y la sociedad civil, Madrid, Taurus, 1997, pp.
11 y ss.
440 Falcn y Tella, Mara Jos, La desobediencia civil, Madrid y Barcelona, Marcial
Pons, 2000, y Ugartemendia Eceizabarrena, Juan Ignacio, La desobediencia ci-
vil en el Estado Constitucional democrtico, Madrid y Barcelona, Marcial Pons,
1999.
441 Gargarella, Roberto y Ovejero, Flix, Democracia representativa y virtud
cvica, Claves de razn prctica, Madrid, nm. 105, septiembre de 2000, pp.
69-75.
442 Bckenfrde, Ernst Wolfgang, Estudios sobre el Estado de derecho y la democracia,
Madrid, Trotta, 2000, p. 158.
443 La hermenutica no es unvoca. Existen diversas posturas y concepciones acer-
ca de lo qu es la hermenutica, algunos autores conciben al menos dos
formas de hermenutica: la metafrica y la analgica. Sobre estos temas ver:
Beuchot, Mauricio, Hermenutica analgica y del umbral, Salamanca, San Este-
ban, 2003; Ricoeur, Paul, La metfora viva, Europa, 1980; Vattimo, Gianni, El
fin de la modernidad. Nihilismo y hermenutica en la cultura postmoderna, Barcelona,
Gedisa, 2000. Para una historia de la hermenutica vase Ferraris, Maurizio,
Historia de la hermenutica, Mxico, Siglo xxi, 2002. Tambin se recomienda
del mismo autor La hermenutica, Mxico, Taurus, 2001.
444 Atienza, Manuel, Cuestiones judiciales, Mxico, Fontamara, 2001, pp. 105-107.
445 Gadamer, Hans-Georg, Hermenutica, Verdad y mtodo, Salamanca, Sgueme,
1994, t. II, pp. 363-373.
446 Frosini,Vittorio, La letra y el espritu de la ley, Barcelona, Ariel, 1995, pp. 57-72.
447 Ibidem, p. 80.
448 Linares Quintana, Segundo V., Tratado de interpretacin constitucional, Buenos
Aires, Abeledo-Perrot, 1998, pp. 41-43. En esas mismas pginas Linares Quin-
tana sostiene un dilogo sobre esta cuestin con el jurista peruano Domingo
Garca Belande, y recuerda como la voz hermenutica proviene del sus-
372
tantivo griego hermeneia, que a su vez viene del verbo rmeneum, que proba-
blemente tenga alguna vinculacin con el Dios Hermes Hermes, hijo de
Jpiter y Maya, hija de Atlas, era el intrprete o el mensajero de los dioses.
Hermeneia signific desde muy pronto proclamar, interpretar, explicar, tra-
ducir, mediar, etctera, en fin, hacer algo comprensible o inteligible.
449 Viola, Francesco, La crtica dell ermeneutica alla filosofia analitica italiana
del diritto, en Jori, Mario Ermeneutica e filosofia analitica, Turn, Giappichelli,
1994.
450 Wroblewski, Jerzy, Constitucin y teora general de la interpretacin jurdica, Madrid,
Cvitas, 1985, pp. 21-26.
451 Atienza, Manuel,Estado de derecho, argumentacin e interpretacin, Cues-
tiones Judiciales, Mxico, Fontamara, 2001, p. 74.
452 Gianformaggio, Letizia, Lgica y argumentacin en la interpretacin jurdica
o tomar a los juristas intrpretes en serio, Doxa, nm. 4, 1987, pp. 87-108.
453 Guastini, Ricardo, Estudios sobre la interpretacin jurdica, Mxico, unam, 1999,
pp. 9-10. Guastini distingue interpretacin y aplicacin en funcin de que las
autoridades son las nicas que aplican el derecho, en tanto que todo sujeto
con inteligencia puede interpretar, igualmente diferencia la aplicacin de la
interpretacin en tanto que en la primera el objeto son las normas y en la se-
gunda los textos normativos, tambin seala que la aplicacin presupone una
interpretacin. La aplicacin sera el producto o resultado de la interpretacin
que realizan las autoridades con competencia para ello.
454 Guastini, Ricardo, Estudios sobre la interpretacin jurdica, cit., pp. 3-5. El concepto
amplio y restringido de interpretacin de Guastini se refiere a textos o for-
mulaciones normativas exclusivamente. Es decir la interpretacin est confi-
nada al mbito lingstico, aunque Guastini adecuadamente sostiene que no
existe algo as como el significado propio de las palabras: las palabras tienen
slo el significado que les viene atribuido por quien la utiliza o por quien las
interpreta. Por tanto, el significado es mutable, y cada decisin interpretativa
es siempre, si bien en distinta medida, arbitraria.
455 Atienza, Manuel, Estado de derecho, argumentacin e interpretacin, Cues-
tiones judiciales, Mxico, Fontamara, 2001, p. 80.
456 Vase Vernengo, Roberto, La interpretacin literal de la ley, Buenos Aires, Abe-
ledo-Perrot, 1971; id., La interpretacin jurdica, Mxico, unam, 1977; id., In-
terpretacin del derecho, Garzn Valds, Ernesto y Laporta, Francisco J.
(eds.), El derecho y la justicia, Madrid, Trotta, 1996, pp. 239-265.
457 Hart, H. L. A., El concepto de derecho, trad. de Genaro R. Carri, Mxico, Edi-
tora Nacional, 1980, pp.160-161. Es conocido su ejemplo sobre la regla de
que no pueden entrar vehculos en un parque, y las dificultades lingsticas
para determinar a que tipo de vehculos se refiere la regla, si al automvil, al
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556 Rawls, John, Teora de la justicia, cit, p. 140 y Habermas, Jrgen, Conciencia moral
y accin comunicativa, Pennsula, 1985, pp. 110 y ss.
557 Nino, Carlos Santiago, La constitucin de la democracia deliberativa, cit., 1997; id.,
Un pas al margen de la ley. Estudio de la anomia como componente del subdesarrollo
argentino, Buenos Aires, Emec, 1992.
558 Linz, Juan J., Totalitarian and Authoritarian Regimes, en Greenstein, Fred I.
y Polsby, Nelson W. (eds.), Handbook of Political Science, vol. 3, Macropolitical
Theory, Massachusetts, Addison-Wesley Publishing Company, 1975.
559 Sartori, Giovanni, Democratic Theory, Detroit, Wayne State University Press,
1962, pp. 4 y 5.
560 No cualquier sistema normativo da lo mismo ni tampoco cualquier sistema
constitucional es igual. Nino nos recuerda diferentes niveles de desarrollo con-
ceptual del constitucionalismo. Entre ellas menciona:i) La concepcin menos
robusta quiz se encuentre asociada a la idea de rule of law, que implica la pre-
servacin de algunas reglas jurdicas fundamentales que limitan en cierta me-
dida lo que un rgano particular de gobierno, democrtico o no, puede hacer;
ii) Un concepto un poco ms robusto sera ms especfico respecto del modo
en que el gobierno se encuentra limitado por normas jurdicas, requirien-
do generalmente de una constitucin, aunque no necesariamente materiali-
zada en un documento escrito. Cualquiera sea su contenido, esta constitucin
est protegida desde el momento en que su reforma o derogacin exigen pro-
cesos ms complejos que el requerido para modificar la legislacin ordinaria, y
se considera suprema respecto de esas normas; iii) un concepto aun ms robus-
to de constitucionalismo contiene restricciones formales que la constitucin
impone a las leyes sujetas a su supremaca, requiriendo que stas sean, por
ejemplo, generales, precisas, pblicas, no retroactivas, estables y que se apliquen
imparcialmente sin distincin alguna que la misma ley no haga; iv) Podramos
robustecer aun ms el concepto si le agregamos la idea de separacin de po-
deres, con especial nfasis en la independencia del poder judicial de los r-
ganos legislativos; v) una dimensin fundamental se le agrega al concepto de
constitucionalismo cuando la constitucin reconoce derechos individuales
que no pueden ser coartados por ningn rgano del Estado; vi) Cuando
se agrega el control judicial de constitucionalidad, el constitucionalismo se
hace an ms robusto ya que la justicia independiente se convierte en la
nica institucin capaz de proteger esos derechos y cuenta con el poder de
anular la legislacin que los amenaza; vii) El concepto se ampla enorme-
mente cuando se agrega la democracia a los requerimientos mencionados,
para juzgar el origen de algunas instituciones del gobierno; viii) Por ltimo,
la robustez del concepto de constitucionalismo depende del modelo parti-
cular de democracia que se tome y sus instituciones especficas, tales como la
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