IyC2012Febrero PDF
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INVESTIGACIÓN Y CIENCIA
Nueve ideas
innovadoras
INSECTOS
Las hormigas
y el arte
Febrero 2012 InvestigacionyCiencia.es de la guerra
SALUD MENTAL
Epigenética
de la adicción
y la depresión
ORÍGENES DEL PENSAMIENTO | NUEVE IDEAS INNOVADORAS | EPIGENÉTICA DE LA ADICCIÓN Y LA DEPRESIÓN
FÍSICA
¿Se está
asomando
el Higgs?
Orígenes
del pensamiento
Genética,
neurología y evolución
de la cognición humana
N.o 425
FEBRERO 2012
00425
9 770210 136004
6,00 EUROS
uadernos ¡¡NUE
VO!!
Número 1 a la venta en febrero
Nueva colección
de monografías sobre
los grandes temas
de la psicología
y las neurociencias
PRÓXIMOS
Publicación cuatrimestral
TÍTULOS
Las emociones
www.investigacionyciencia.es
Desarrollo infantil
Ilusiones
Personalidad y conducta social
Las claves del sueño
Enfermedades neurodegenerativas
Febrero 2012, Número 425
40
4 Apuntes
Un circuito en cada célula. Proliferación de medusas.
Del polen al poliéster. El origen más remoto de los
mamíferos con placenta. ¿Tiene el universo un eje?
:_d|c_YWZ[Ñk_Zei[dkdWjWpWZ[YW\$I[diWY_ed[i
incorpóreas.
7 Agenda
7 8 Panorama
¿Está la partícula de Higgs asomando la cabeza?
Ihk:e[^kmh<ZlZl
9Wcfei[b[YjhecW]dj_YeiWhj_ÐY_Wb[i$IhkDZkbgZ
Cbfg^s@Zk\Z
Células solares biomiméticas. IhkKZeC'FZkmg&IZefZ%
?kZg\^l\h<abZ]bgbr:dae^laEZdamZdbZ
Un pez muy cerebral. IhkMbfK^jnZkma
Control biológico de la procesionaria. IhkEnbl<Zrn^eZ%
Chl:gmhgbhA]ZkrK^`bghSZfhkZ
46 Historia de la ciencia
Ciencia popular.
Ihk:`nlmGb^mh&@ZeZg
48 Foro científico
De linces y hongos.
Ihk;^kmZFZkmg&Ei^s
87 Taller y laboratorio
Energía, casi, gratuita.
IhkFZk\;hZ]Z
48
4 8
90 Juegos matemáticos
Limones y hospitales.
Ihk:`nlmgKZrh
92 Libros
Apoptosis. IhkEnbl:ehglh
La `kZg[Zee^lmZ de Leonardo da Vinci. IhkChZjnbg
:`nee;Zmee^
¿Era Galileo católico? IhkKZ_Z^e:'FZkmg^sKhf^h
96 Hace...
50, 100 y 150 años.
E N P O R TA D A
Durante los últimos años, la investigación sobre la evolución cog-
nitiva de nuestra especie ha recibido un nuevo impulso gracias a
los avances en genética, neurología y psicología, entre otras áreas.
Juntas dan forma a un prometedor campo multidisciplinar: la ar-
queología cognitiva. Ilustración de Homo neanderthalensisde Juraj
!ÇîD¦i#øäx¸lx/ßxäî¸ßClxC§§xā&_³CÇCßC§CĉßÔøx¸§¸C
90
ā§C/ßxäxßþC_¹³lx§!xCl¸äî¹ß_¸lx2C¥¸³Cĉ³C§îÍ
LAS RAZONES DEL ÉXITO EDUCACIÓN Y POBREZA uso de ponis poco adaptados al frío, en
Luis M. A. Bettencourt y Geoffrey B. ;d»9[h[XheiieXh[[Z_ÐY_ei¼Q?ĄČûĉĊÿý÷- lugar de los perros empleados por los no-
West, en «Grandes urbes: conseguir más ùÿĶĄ ď 9ÿûĄùÿ÷" noviembre de 2011], ruegos) provocaron penurias y retrasos
con menos» [?ĄČûĉĊÿý÷ùÿĶĄď9ÿûĄùÿ÷"no- ;ZmWhZ=bW[i[hZ[Ð[dZ[gk[bW[ZkYW- que les alejaron de las fechas con mayor
viembre de 2011], sostienen que en una ción se muestra más importante para la probabilidad de gozar de buen tiempo.
ciudad con rentas elevadas solo prospe- salud de una ciudad que los proyectos de Establecer pocos y mal señalizados depó-
rarán las actividades que aporten un va- infraestructuras. Su razonamiento es vá- sitos de víveres y guardar el queroseno
lor añadido. Se inicia así un ciclo en el b_Ze"f[heikf[hÐY_Wb$FWhWgk[kdWYeck- sin la estanqueidad necesaria constituye-
que más individuos con talento se sien- nidad pobre prospere necesita sin duda ron improvisaciones de consecuencias fa-
ten atraídos por la urbe, suben las rentas una educación gratuita y de calidad, pero tales. Y perder parte de un día en recoger
y crece la necesidad de actividades pro- la gente también necesita comer. fósiles cuando el éxito del regreso era du-
ductivas. Pero un aumento en el alquiler El artículo no menciona las barreras doso, nueve días antes del fallecimiento
de los locales comerciales implica conse- que en los últimos años se han interpues- de uno de los expedicionarios por agota-
cuencias negativas para numerosos pe- to para acceder a los dos valores que ofre- miento y escorbuto, fue una temeridad.
queños comercios, como peluquerías, tin- ce el desarrollo urbano: educación e in- Sin duda, Scott y su grupo realizaron
torerías o tiendas de ultramarinos. Hay novación empresarial. La universidad de una hazaña de auténticos héroes, pero sin
aún muchos servicios que no pueden ob- San Francisco, por ejemplo, resulta dema- la metodología que establecía el método
tenerse en Internet. siado cara para la mayoría de los residen- Y_[djÐYeo[bi[dj_ZeYecd$
HąĄ÷Ăú8ąċĈāû tes de Hunter’s Point, y los recortes en N÷ČÿûĈ8Ĉąĉ
Brooklyn personal y recursos la han convertido en Sabadell, Barcelona
ikf[hÑkWfWhWckY^ei$FehejhWfWhj["je-
A Bettencourt y West parece extrañarles dos propugnamos el espíritu emprende-
que el área de la bahía de San Francisco y dor, pero tropezamos con unas exigencias
la región de Boston superen en prosperi- cada vez más elevadas para acceder a
dad a conglomeraciones urbanas de tama- préstamos abusivos. Y sin dinero una em-
ño similar. Atribuyen el hecho a «cualida- presa no puede sostenerse. Glaeser tam-
des intangibles de dinámica social, más poco considera las clases pudientes, bien
que al desarrollo de infraestructuras ma- formadas y llenas de afán innovador, que
teriales». Sin embargo, por más que cen- están empujando hacia la periferia a los
tros como el Instituto de Tecnología de sectores menos favorecidos.
Massachusetts y universidades como Har- Si las personas con menos recursos
vard, Stanford o Berkeley inspiren sin duda l[dgk[bW[ZkYWY_db[iX[d[ÐY_W[dWb]e
cualidades intangibles en sus alumnos, son y les ayuda a alimentar a sus familias, la
también «infraestructura material», lo que buscarán con empeño. ¿Qué otra razón
probablemente explique gran parte del de- mejor?
sarrollo económico de esas zonas. C÷ĈďH÷ĊùĂÿüü
BûûEĊĊûĈþąĂĊ San Francisco Bay View
Laguna Beach, California
LA HAZAÑA DE SCOTT
La correlación entre patentes y número Discrepo de Edward J. Larson en su visión
de habitantes que establecen Bettencourt sobre las expediciones al Polo Sur en «Un
y West confunde causas y efectos. Las ciu- héroe de mayor gloria» [?ĄČûĉĊÿý÷ùÿĶĄď
dades crecen, sobre todo, porque el éxito 9ÿûĄùÿ÷, diciembre de 2011]. Al margen del
de las grandes compañías tecnológicas sentimiento de solidaridad con un grupo
atrae a trabajadores de todo el mundo, no de valientes que perdieron la vida en el
porque el entorno urbano estimule la in- [cf[e"bWh[Wb_ZWZZ[bei^[Y^eiYedÐh- Noviembre y diciembre 2011
novación. En Silicon Valley, donde resido, ma que fue Amundsen, y no Scott, quien
la mayor parte de la creatividad proviene i[]k_feh[bcjeZeY_[djÐYe$
de los suburbios situados entre San Fran- El fatal desenlace se debió a una pla-
C A R TA S D E LO S L E C TO R E S
cisco y la ciudad de San José. Y, tanto aquí d_ÐYWY_dd[\WijWoWde^WX[hWfhel[#
como en Dallas, las empresas se esfuer- Y^WZe [b YedeY_c_[dje Y_[djÐYe Z[ bW INVESTIGACIÓN Y CIENCIA agradece la opinión de sus
lectores. Le animamos a enviar sus comentarios a:
zan por construir grandes espacios abier- feYW$KdWWb_c[djWY_dZ[ÐY_[dj[bb[l
PRENSA CIENTÍFICA, S.A.
tos con aire de campus informal. La inno- al grupo de Scott a enfermar de escorbu- Muntaner 339, Pral. 1a , 08021 BARCELONA
vación surge de una combinación del afán to. Calcular mal las necesidades calóricas o a la dirección de correo electrónico:
emprendedor, la disponibilidad de capi- y no disponer de márgenes de seguridad [email protected]
tal riesgo, el acceso a la universidad, una les llevó a la muerte. Una mala elección La longitud de las cartas no deberá exceder los 2000
mano de obra diversa y con movilidad, y del material de abrigo y el uso de méto- caracteres, espacios incluidos. INVESTIGACIÓN Y CIENCIA
se reserva el derecho a resumirlas por cuestiones
un lugar donde la gente desea vivir. dos de transporte inadecuados y no pro-
de espacio o claridad. No se garantiza la respuesta
8ûĄHąøûĈĊĉ bados (como elementos de tracción mecá- a todas las cartas publicadas.
Sunnyvale, California nica que se estropearon con rapidez, o el
¿QUÉ ES ESTO?
Proliferación de medusas: Como depredadores, las medusas resultan lentas y pasivas. Incapaces de nadar y perseguir a sus presas, la
mayoría de ellas se dejan llevar por la corriente y crean pequeños remolinos que atraen la comida hacia sus tentáculos. Sin embargo, en
las aguas del mar de Japón o del mar Negro prosperan las medusas como las que se observan en la imagen, mientras que muchos de
sus competidores son eliminados por la sobreexplotación pesquera y otros efectos de la presencia humana. ¿Cómo han logrado estos
invertebrados dar la vuelta a millones de años de dominio de los peces, aparentemente de la noche a la mañana? José Luis Acuña, de la
Universidad de Oviedo, y sus colaboradores sugieren en la revista ScienceÔøx§DäxløäDäøxäîßD³ø³Dx`D`DxÔøÇDßDU§xD§Dlx§¸ä
peces en capturar a sus presas y convertirlas en energía. De hecho, han preparado el terreno para hacerse con el control del medio, un
xä`x³D߸lx³¸³Dl¸¸`yD³¸x§Dä¸Ç¸ßD§ø³¸ä`x³î`¸äÍ David Biello
C O S M O LO G Í A
FÍSIC A
³E`Dlxøl¸äx³ø³DîDąDlx`D y
NASA CXC/IOA/A. FABIAN ET AL. (imagen en rayos X); NRAO/VLA/G. TAYLOR (en radio); NASA/ESA/HUBBLE HERITAGE/
Hace poco, en un congreso de matemáticas, Rouslan Krechet- los movimientos del café podían descomponerse en grandes
STSCI/AURA Y A. FABIAN, UNIVERSIDAD DE CAMBRIGE (en el óptico); ANTHONY BRADSHAW, GETTY IMAGES (café)
nikov reparó en la manera en que los asistentes transportaban oscilaciones regulares, provocadas por el andar, así como en
sus tazas de café. ¿Por qué en unas ocasiones se derramaba y en movimientos más leves, irregulares y frecuentes, causados por
otras no? La pregunta, de apariencia trivial, dio origen a un las variaciones en la marcha y por factores ambientales, como
proyecto de investigación. Según explica Krechet- suelos irregulares o las distracciones del sujeto.
nikov, físico de la Universidad Que el café acabe derramándose o no depende en gran me-
de California en Santa Bárba- dida de la frecuencia natural de oscilación del líquido (el aná-
ra, en el fenómeno concurren logo a la frecuencia característica de un péndulo, determinada
numerosos aspectos: la diná- por su longitud). Cuando el período al que se suceden los pasos
c_YWZ[Ñk_Zei"bW[ijWX_b_ZWZZ[ del sujeto se corresponde con dicha frecuencia natural, se pro-
bWikf[hÐY_[Z[kdbgk_Ze"bWi_dj[- duce una resonancia y aumenta la amplitud de las oscilaciones
hWYY_ed[i[djh[kdÑk_ZeokdW[ijhkY- del café; el mismo fenómeno que observamos cuando impulsa-
tura mecánica, así como la compleja mos un columpio justo en el momento adecuado. También los
mecánica del caminar. movimientos pequeños e irregulares de la taza pueden coordi-
Junto a un estudiante de doctorado, dWhi[oWcfb_ÐYWh[blW_ldZ[bbgk_Ze$
Krechetnikov analizó varios vídeos de Ah[Y^[jd_aelWÐhcWgk["kdWl[pgk[i[[dj_[dZWd[dZ[-
alta velocidad con el objetivo de estudiar jWbb[bei\WYjeh[igk[_dÑko[d[d[bcel_c_[djeZ[bbgk_Ze"
el movimiento de las tazas de café y su podrán desarrollarse utensilios que eviten el derrame, como
relación con la velocidad y la marcha de h[Y_f_[dj[iÑ[n_Xb[ikejheifhel_ijeiZ[Wd_bbeiWbebWh]eZ[
cada individuo. Observaron que, una vez que su pared interior.
los sujetos alcanzaban una velocidad constante, —Charles Q. Choi
6 INV
INVESTIGACIÓN
NVE
NV EST
ES
STIGACIÓ
IGA
G CIÓ
CIÓN
N Y CIENCIA, febrero
o 201
20
2012
02
NEUROCIENCIA AG E N DA
www.efb-central.org/index.php/
syntheticbiology/C52
presentados el 13 de diciembre, la mayor Pero las colaboraciones ATLAS y CMS duda esperanzador. La probabilidad com-
parte de ese intervalo ya ha sido excluido ^WdeXj[d_ZeWb]ec|igk[bc_j[iZ[[n- X_dWZWZ[gk[WcXei[\[Yjeii[Z[XWdW
Yedkdd_l[bZ[YedÐWdpWikf[h_ehWb/+ clusión: han observado algunos indicios kdWÑkYjkWY_di[[ij_cW_d\[h_ehWb'feh
por cierto. Solo sobreviven dos «venta- gk[WfkdjWhWdWbW[n_ij[dY_WZ[kd>_]]i ciento.
nas» de masas posibles, una entre 600 y cuya masa rondaría los 125 GeV. Para cada Sin embargo, otras circunstancias in-
800 GeV —muy desfavorecida por otros valor posible de la masa de la partícula, el vitan a ser precavidos. El exceso de sucesos
resultados experimentales— y otra, muy ceZ[be[ij|dZWhdeiZ_Y[Yedgk\h[Yk[d- con dos fotones resulta mayor de lo pre-
estrecha pero interesantísima, entre 115 cia el Higgs debería desintegrarse de una dicho por el modelo estándar. Además, los
y 128 GeV. u otra manera. Para un Higgs cuya masa resultados obtenidos por CMS se mues-
Ese arrinconamiento constituye, por i[[dYedjhWi[[d[b_dj[hlWbegk[bei[n# jhWdc[deiYbWhei$7kdgk[[ij[[nf[h_-
sí solo, un éxito de primer orden para el perimentos no logran excluir, las señales mento también detectó más eventos de los
LHC. Que las posibilidades se restrinjan más claras provendrían de la desintegra- previstos (tanto con dos fotones como con
a un intervalo tan diminuto puede pare- ción de la partícula en dos fotones o en cuatro leptones) y con una energía similar
cer sospechoso: como si el Higgs hubiese cuatro leptones (dos pares electrón-posi- a la registrada por ATLAS, el acuerdo no
jugado a esconderse en el último refugio trón o muón-antimuón). [ijeZebef[h\[Yjegk[YWXhW[if[hWh$Feh
gk[b[gk[ZWXW$$$eYecei_de[n_ij_[i[" ;dYecfWhWY_dYedbegk[Z[X[hW- otro lado, se trata de resultados aún pre-
kdWfei_X_b_ZWZgk[[n_]_hWkdh[fbWdj[W- ceil[h[dYWieZ[gk[[b>_]]ide[n_i- b_c_dWh[i"ogk_p|bei[hheh[ii_ij[c|j_Yei
miento radical de nuestras concepciones tiese, el detector ATLAS observó un ex- sean mayores de lo estimado.
sobre la materia. ceso de sucesos con dos fotones cuya En cuestión de un mes dispondremos
I_d [cXWh]e" [iW f[gk[W l[djWdW energía apuntaría a un Higgs de 126 GeV. de análisis más completos. Y, con toda
aparece como la favorita desde un punto Sin embargo, la detección de esos suce- fheXWX_b_ZWZ"^WY_WÐdWb[iZ[Wei[^W-
de vista teórico y experimental. Los resul- sos «de más» no demuestra la existencia brán alcanzado resultados mucho más
jWZei gk[ [d ik ZW eXjkle [b B;F oW Z[b>_]]i"oWgk[jeZefeZhWZ[X[hi[W fh[Y_iei"fk[ijegk[bei[nf[h_c[djei^W-
apuntaban, de manera indirecta, a un kdWÑkYjkWY_d[ijWZij_YW$DeeXijWdj[" brán medido el cuádruple de colisiones y
Higgs en esa región de masas. Y, desde el bWfheXWX_b_ZWZZ[gk[[b>_]]ide[n_ijW bWÐWX_b_ZWZZ[beiWd|b_i_i[ijWZij_Yei
punto de vista teórico, los modelos super- y, aun así, se observe un exceso similar c[`ehWh|$I_bei_dZ_Y_eii[YedÐhcWd"[b
simétricos (una propuesta para ampliar para algún valor del intervalo de energías LHC habrá realizado un descubrimiento
el modelo estándar, muy sugerente desde plausibles ronda el 7 por ciento. ATLAS histórico. Permanezcan atentos.
numerosos puntos de vista) predicen, en detectó también un exceso de sucesos con —Alberto Casas
su versión más simple, un Higgs con una cuatro leptones. De nuevo, estos apunta- Instituto de Física Teórica
CERN
masa en torno a esos valores. ban a un Higgs de unos 126 GeV, algo sin Universidad Autónoma de Madrid/CSIC
E L E C T R O M AG N E T I S M O S I N CA R GA S
Un campo eléctrico E acelera las partículas cargadas a lo largo de sus líneas de campo, mientras que un campo magnético B lo hace en una direc-
ción perpendicular al propio campo y a la de movimiento de la partícula, lo que induce movimientos de rotación. De manera similar a como ocurre
con el campo gravitatorio, también E y B emergen a partir de las variaciones temporales y espaciales de un potencial vectorial subyacente, A.
Podemos comparar la dinámica de una carga qsometida a los efectos de un potencial electromagnético A con la de una partícula sumergida
x³ø³øl¸ÍøC³l¸xäîxäxx³_øx³îßCx³ßxǸä¸Éa, arribaÊix§¸þx³î¸lx§CÇCßî_ø§C³¸äxþxC
x_îCl¸Í/x߸äx§øl¸_¸x³ąCClxäǧC-
ąCßäxÉxälx_ßiääøǸä_¹³_CTC_¸³x§îxǸÊi§CÇCßî_ø§CxĀÇxßx³îCø³CC_x§xßC_¹³x³§Clßx__¹³lxl_¸ø¥¸Éb, arriba), al igual que
ocurre con una carga qTC¥¸§¸äx
x_î¸älxø³_CǸx§y_îß_¸Í2§CÇCßî_ø§Cäxx³_øx³îßC³xßäCx³ø³ø¥¸îøßTø§x³î¸Éāä¸xîl¸iǸßîC³î¸i
CþCßC_¸³xäxäÇC_C§xäÊixĀÇxßx³îCßDø³¸þx³î¸lx߸îC_¹³Éc, arriba), tal y como le sucedería a una carga qen presencia de un campo
magnético.
$øxäî߸äxĀÇxßx³î¸äC³lx¸äîßCl¸Ôøxl_¸äx
x_î¸äÇøxlx³Ç§xx³îCßäxx³ø³_¸³lx³äCl¸lx
¸äx³äîx³É
Êiø³xäîCl¸lx
la materia en el que todas las partículas se acumulan —o se condensan— en el mismo estado cuántico de mínima energía. Mediante el empleo
lx§DäxßxäiÇøxlxîßC³ä
xßßäx¸x³î¸C§¸äDälx§CøxäîßCÍ2x§Ç߸_xä¸äxßxC§ąClx§CC³xßCClx_øClCiÇøxlx³lø_ßäxx³x§§¸äø³C
l³D_Cly³î_CC§CÔøxxĀÇxßx³îCßCø³CÇCßî_ø§Clx_CßCq* en presencia de un potencial vectorial A*.
Las imágenes inferiores, obtenidas gracias a la técnica de absorción en resonancia, muestran la distribución de densidad de un condensado de
¸äx³äîx³x³þCßCääîøC_¸³xähx³ßxǸä¸Éa, abajoÊçC³îxäālxäÇøyälxx³xßCßø³_CǸx§y_îß_¸Cßî_C§E*Éb, abajo, donde se observa
Ôøx§¸äDääxC_x§xßC³x³§Clßx__¹³lx§_CǸÊiāîßCäCTxßCǧ_Cl¸ø³_CǸC³yî_¸Cßî_C§B*Éc, abajoÊͳxäîxù§î¸_Cä¸iäx¸T-
äxßþC§CCÇCß_¹³lxþ¹ßî_xäÉpequeños remolinosÊiC³D§¸¸äC§¸äÔøxx³xßCßCø³_CǸC³yî_¸ßxC§ä¸Tßxø³äøÇxßøl¸lxÇCßî_ø§Cä_¸³
carga eléctrica.
KARINA JIMÉNEZ GARCÍA (esquema); DE: «SYNTHETIC MAGNETIC FIELDS FOR ULTRACOLD NEUTRAL ATOMS», POR Y.-J. YIN ET AL.
aÎ0Dàï `ù¨DåĂù¦¹y´àyÈ¹å¹ bÎ0Dàï `ù¨Dåy´ù¦¹ù´¹à®y cÎ0Dàï `ù¨Dåy´ù¦¹´¹ù´¹à®y
EN NATURE VOL. 462, PÁGS. 628-632, DICIEMBRE DE 2009 Y «A SYNTHETIC ELECTRIC FORCE ACTING ON NEUTRAL ATOMS»,
Aceleració
n
POR Y.-J. YIN ET AL. EN NATURE PHYSICS VOL. 7, PÁGS. 531-534, MARZO DE 2011 (imágenes de absorción en resonancia)
Flujo
Aceleración
Flujo
50 μm
50 μm 50 μm
x=0
Para simular la interacción de la luz (flechas) con la frontera entre el aire y el En la primera etapa, se dirige un vapor
silicio, se desarrolló una matriz bidimensional de prismas paralelos. Cada prisma Yeb_cWZeZ[dgk[b[dkd[djehdeZ[Wbje
corresponde al arco de un círculo, decorado por arcos de círculos más pequeños. vacío hacia el «biopatrón» (córnea de in-
El grado de «decoración» define el orden de la textura. i[Yje"cedjWZe[dkdWfbWjW\ehcWgk[
permite una rotación rápida y oscilación
c_cj_YWigk[cWn_c_Y[dbWh[Yeb[YY_d tics en junio de 2010 y marzo de 2011, simultáneas. A los pocos minutos, se de-
de luz incidente. El objetivo fundamental _dZ_YWdgk[[bh[YkXh_c_[djeZ[kdWY- posita sobre el «biopatrón» una película
[iWZWfjWhbWYecfb[`Wikf[hÐY_[[nj[h_eh lula solar con estructuras biomiméticas de 250 nanómetros de espesor.
de los ojos compuestos de diversos insec- mejora la capacidad de colección de luz En el segundo paso, una capa de ní-
jeiWbWikf[hÐY_[Z[YbkbWiiebWh[i$:_- solar. gk[bZ[kdWi,&c_YhWiZ[[if[ieh[i[b[Y-
cho proyecto se ha dividido en dos fases troformada sobre la película crecida en
gk[i[[ij|dbb[lWdZeWYWXeZ[\ehcW Técnica Nano4Bio alto vacío para conferirle la integridad
simultánea. La segunda fase de nuestro proyecto de estructural necesaria para los pasos si-
investigación, publicada en Bioinspira- guientes.
Simulaciones numéricas tion & Biomimetics en septiembre de Se elimina luego el «biopatrón» origi-
En la primera fase de nuestro proyecto de 2010, consiste en la replicación, a escala nal mediante incineración por procesado
investigación hemos realizado simulacio- dWdecjh_YW"Z[bWikf[hÐY_[Z[e`eiYec- Z[fbWicW$Begk[gk[ZWYehh[ifedZ[W
nes numéricas de la interacción de la luz puestos de diversos insectos. Las dimen- kdcebZ[Z[dgk[bgk[fk[Z[kj_b_pWhi[
con la frontera entre el aire y el silicio. siones características de la morfología de a modo de matriz para el estampado, o
Comenzamos los cálculos a partir de un un ojo compuesto van desde unos 200 na- como un molde para la creación de múl-
modelo bidimensional bioinspirado. Se nómetros a pocos milímetros. La fabrica- tiples réplicas.
Yedi_Z[hgk[bWikf[hÐY_[[ijWXWYec- ción de estas estructuras constituye un El cuarto paso de la técnica Nano4Bio
puesta por una matriz de prismas parale- proceso tedioso, siendo además necesario nos ha permitido obtener réplicas del
los de una longitud decenas de miles de kd[gk_feh[ÐdWZeoYeijeie$ »X_efWjhd¼eh_]_dWbYedkdWÐZ[b_ZWZ[d
l[Y[icWoehgk[bWbed]_jkZZ[edZWjf_YW En nuestra aproximación hemos utili- la escala de unas 2 micras. Una gran ven-
de la radiación solar. Por encima del plano zado ojos compuestos reales, a modo de taja de esta técnica reside en la posibili-
de la base, la sección transversal de cada «biopatrones». Hemos desarrollado un dad de producir réplicas de forma simul-
prisma corresponde al arco de un círculo proceso híbrido de nanofabricación en tánea de múltiples «biopatrones» de gran
Z[Ðd_ZeYecej[njkhWZ[ehZ[dY[he"Z[- YkWjhefWiei"Z[dec_dWZeDWde*8_e"gk[ complejidad morfológica.
YehWZefehWhYeiZ[YhYkbeic|if[gk[ei permite la fabricación de múltiples répli- En resumen, hemos tomado la ruta
(textura de orden uno). También se consi- YWiZ[WbjWÐZ[b_ZWZ$;ij[fheY[iei[XWiW Z[bWX_ehh[fb_YWY_d[ddk[ijhWXigk[-
deraron texturas de orden superior. en la combinación de técnicas de deposi- da de una mejora del rendimiento de
Los resultados de las simulaciones, ción en alto vacío, electroplateado y es- células solares. En el futuro, esperamos
publicados en Bioinspiration & Biomime- tampado a escala nanométrica. explorar la utilización de diversos mate-
riales semiconductores y polímeros. La
biorreplicación resulta muy adecuada
para la fabricación de células solares
Ñ[n_Xb[i^[Y^WiZ[cWj[h_Wb[iXbWdZeio
i[WZWfjWjWcX_dWbWZkhWikf[hÐY_[
de silicio.
—Raúl J. Martín-Palma
Departamento de física aplicada
Universidad Autónoma de Madrid
Francesco Chiadini
Departamento de ingeniería
CORTESÍA DE LOS AUTORES
de la información y eléctrica
Universidad de Salerno
Imágenes obtenidas con un microscopio electrónico de barrido de la córnea de una Akhlesh Lakhtakia
mosca califórea (izquierda) y de una réplica polimérica (derecha) producida mediante Departamento de ingeniería y mecánica
la técnica Nano4Bio. Universidad estatal de Pensilvania
Y MÁS...
www.investigacionyciencia.es/blogs
Para hacer frente a la procesionaria resulta imprescindible tener en cuenta su ciclo biológico. Los tratamientos tradicionales de fumigación resultan
Ǹ_¸x_C_xäiāCÔøxäøx§x³ßxC§ąCßäxx³§¸ä¸x³î¸älxǧx³CxĀǧ¸ä¹³lx¸ßD_Clx§CxäÇx_xi_øC³l¸x§Cā¸ßlC¶¸xäîDx_¸Í2xßx_¸-
mienda, por tanto, aplicar medidas biológicas preventivas que eviten el crecimiento de superpoblaciones del lepidóptero.
DE INTERÉS PERMANENTE
www
www.investigacionyciencia.es
Ideas
que
cambian
el mundo Dk[lWijYd_YWigk[feZhWdj[d[hkdW_dÓk[dY_WZ[Y_i_lW
Las revoluciones son, a menudo, fruto de las ideas más sencillas. Cuando el
joven inventor Steve Jobs se propuso acercar la informática a personas sin
experiencia con ordenadores, ni especial interés en adquirirla, nos llevó des-
de el engorroso sistema de los procesadores centrales e instrucciones por lí-
nea de comandos hasta la novedad y frescura del Macintosh y el iPhone. Las
ideas de Jobs han contribuido a cambiar para siempre nuestra relación con
FOTOGRAFÍAS DE DAN SAELINGER
la tecnología.
¿Qué otras ideas, elementales pero revolucionarias, se esconden aún en
los laboratorios, esperando el momento oportuno para brotar con fuerza?
En las páginas siguientes describimos algunas de ellas. Sirva esta colección
de bienvenida al poder de las ideas sencillas.
Supervisor de salud
Un teléfono inteligente podría explorar nuestras constantes vitales
en todo momento y alertarnos de cualquier anomalía
9÷ĉÿĊąúąûĂăċĄúą÷ùċúû÷ĂăijúÿùąĉÿûĎĆûĈÿăûĄĊ÷úąĂąĈ obstante, los expertos en salud inalámbrica consideran que
torácico o si descubre un bulto sospechoso. Pero cuando constituyen el amanecer de una era en la que los sistemas
aparecen este tipo de signos ya suele ser demasiado tarde. móviles de supervisión médica funcionarán a coro y sin
La detección precoz de síntomas exige una supervisión con- rupturas, y proporcionarán a los usuarios y a sus médicos
tinua, tarea que podría realizar un teléfono móvil. Un sis- kdW_cW][dYed`kdjWZ[ikiWbkZ$»:[iZ[kdfkdjeZ[l_i-
j[cWZ[[nfbehWY_dgk[Wfhel[Y^Wi[[bYedj_dkeÑk`eZ[ ta técnico, es posible pulsar una tecla del teléfono y orde-
datos de los teléfonos móviles contribuiría a eliminar el dWh0Å:[i[eYedeY[hc_iYedijWdj[il_jWb[i[dj_[cfeh[WbƼ"
peligroso hiato que media entre la manifestación sintomá- asegura Eric Topol, director del Instituto Scripps de Cien-
tica y el diagnóstico. Asimismo, los dispositivos móviles cia Traslacional.
WokZWhWdWbeifhe\[i_edWb[iiWd_jWh_eiW_Z[dj_ÐYWhojhW- El gran obstáculo se halla en los sensores. Los moni-
tar las dolencias antes de que se tornasen demasiado gra- tores de glucosa tradicionales no pueden actuar sin per-
ves, y onerosas, para atenderlas con forar la piel, y pocas perso-
[ÐYWY_W$;dj[ehW"jWb[ii_ij[cWiZ[ nas están dispuestas a ir a to-
alerta permanente recortarían el 75 das partes con el manguito
por ciento de los gastos asociados al Z[kd[iÐ]cecWdc[jhee
tratamiento de las enfermedades cró- con electrodos adheridos a la
nicas. También prolongarían la vida piel. Pero la aparición de al-
de los pacientes, al atajar a tiempo ternativas menos incómodas
millones de situaciones potencial- resulta inminente. Hace poco
mente críticas. se han creado en Japón unas
La mayoría de las aplicaciones
CORTESÍA DE ALIVECOR (iPhone); ESTILISMO DE OBJETOS LAURIE RAAB, HALLEY RESOURCES; MAKOTO AOKI, SWELL NYC (circuito cerebral); ARREGLOS Y EFECTOS ESPECIALES: JANE CHOI, STOCKLAND MARTEL
ÐXhWiÑkeh[iY[dj[i_do[YjW-
para la salud que existen en el mer- bles que supervisan la gluco-
cado de los móviles apenas son más sa en sangre. Topol afirma
Mediciones sobre la marcha:
que meros reclamos; pero entre ellas que en el futuro una batería
El electrocardiógrafo para iPhone de
sobresalen dos o tres que podrían AliveCor informa de los ritmos cardíacos. de sensores basados en na-
ayudar a los usuarios a gestionar en- nopartículas, que actuarán
\[hc[ZWZ[iYhd_YWie_Z[dj_ÐYWhid- de interfaz para teléfonos in-
tomas graves. El electrocardiógrafo (ECG) para iPhone de j[b_][dj[i"fei_X_b_jWh|kdW_dif[YY_dc|iÐWXb[Z[bWi
AliveCor consiste en una funda de plástico, provista en el constantes vitales. Y lo que es más interesante todavía,
dorso de dos electrodos metálicos, que registra el ritmo permitirán la detección precoz de marcadores moleculares
cardíaco del usuario cuando sostiene el aparato con ambas Z[[d\[hc[ZWZ"YeceY_[hjeiWdj_Yk[hfei$:[[ij[ceZe"
manos o se lo aplica sobre el pecho. Los datos cardioeléc- beii[dieh[igk[_Z[dj_ÐYWhWd»cWhYWZeh[ijkcehWb[i¼fe-
tricos «en tiempo real» se envían por vía inalámbrica a los drían enviar un aviso inmediato a los dispositivos móviles,
pacientes, a sus familiares y a sus médicos, a quienes aler- lo que ofrecería a los pacientes la oportunidad de comen-
tan de posibles arritmias. «No solo proporciona un pron- zar con quimioterapia antes de que las células canceríge-
to aviso, sino que lo hace sin el coste que conlleva el ECG nas pudieran atrincherarse. Además, cuanto más sencilla
[ij|dZWh¼"WÐhcW:Wl_Z7bX[hj"[b_d][d_[heX_ecZ_Yegk[ resulte la supervisión móvil de la salud, más probable será
ha desarrollado el aparato. Análogamente, la compañía su contratación. Una encuesta realizada en 2010 indicaba
francesa Whitings ha creado un dispositivo que funciona que un 40 por ciento de los estadounidenses estaría dis-
con el iPhone para medir la tensión arterial. A los 30 se- puesto a pagar una suscripción mensual para un disposi-
gundos de colocarse el usuario su esbelto manguito blan- tivo móvil que informara a sus médicos sobre su tensión
co, saltan los valores en la pantalla del teléfono; si son anó- arterial, glucosa en sangre o ritmo cardíaco.
malos, emite también una señal de aviso. Y la aplicación Paul Sonnier, vicepresidente de Wireless-Life Sciences
:_WX[j[iCWdW][hZ[M[bb:eYfWhW[bYedjhebZ[bWZ_WX[- Alliance, señala que la corrección temprana de los proble-
j[i"WfheXWZWfehbW:_h[YY_d<[Z[hWbZ[<|hcWYeio7b_- mas de salud resultará más fácil todavía cuando la super-
mentos de EE.UU., permite a los enfermos introducir en visión se integre con el análisis genético. Si una persona es
su móvil varios datos en tiempo real, como las concentra- portadora de un gen que la predispone a la diabetes o al
ciones hemáticas de glucosa, los carbohidratos consumi- cáncer en los primeros años de vida, se le podría colocar
dos y los medicamentos tomados. El programa analiza un sensor poco molesto que comunicase a su teléfono mó-
esa información y ofrece al enfermo una recomendación vil eventuales anomalías. «Podría injertársele un sensor
(«inyéctese insulina», «coma algo») para mantener su glu- para anticiparse al primer ataque contra las células de los
cosa dentro de unos límites saludables. Según un ensayo islotes del páncreas, el primer tipo de célula cancerosa en
clínico publicado en septiembre pasado, los usuarios de presentarse», explica Topol. Si los sistemas móviles de su-
:_WX[j[iCWdW][hck[ijhWdkdc[`ehYedjhebZ[bW]bkYe- pervisión médica alcanzaran todo su potencial, servirían
sa a largo plazo que los no usuarios. de centinelas omnipresentes y nos protegerían antes inclu-
XXXXXXXX
Por el momento, esos nuevos sistemas operan por se- so de que nos supiéramos en peligro.
parado, y muchos de ellos se hallan aún en desarrollo. No —Elizabeth Svoboda
Billeteras
en la piel
Adiós a los pagos por teléfono.
Para admitir un cargo,
agite la mano
Õùy`¹®ÈàDààyåù¨ïyïD´E`¨`¹®¹DïDà¨D®D´¹Î
—Christopher Mims
Ordenadores
que no se bloquean
Nuevos programas administrarían los recursos que consumen
las computadoras y las mantendrían en servicio
;ĄČûĈú÷ú"ûĂĊûĂijüąĄą»ÿĄĊûĂÿýûĄĊû¼úû@ÿă>ąĂĊĄąûĉĊ÷ĄĂÿĉĊą$JÿûĄûċĄ÷÷ĆĂÿù÷ùÿĶĄù÷ĈĊą-
]h|ÐYWgk[b[i_hl[fWhW[dYedjhWhh[ijWkhWdj[i"f[heYkWdZe>ebjj[hc_dWbWXigk[ZW"bWWfb_-
cación continúa consumiendo tanta energía y memoria que ni siquiera puede hacer algo tan
sencillo como enviar un SMS.
Holt es ingeniero en Freescale Semiconductor, y su teléfono evidencia un problema habi-
tual en los sistemas informáticos actuales. Mientras los distintos programas consumen todos
los recursos que pueden, el sistema operativo no se percata de que la aplicación que el usua-
rio desea utilizar en ese momento apenas tiene con qué actuar. El problema no solo afecta a
los teléfonos, sino también a ordenadores personales y supercomputadoras, y se agravará cuan-
tas más máquinas con procesadores multinúcleo existan. A menos que los diversos componen-
tes de un ordenador aprendan a comunicarse unos a otros sus disponibilidades y necesidades,
puede que el futuro de la computación no llegue a la altura de su glorioso pasado.
Holt y sus colaboradores del Proyecto Angstrom, un consorcio de investigación encabeza-
do por el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), han dado con una solución: el or-
denador «consciente de sí mismo». En los ordenadores clásicos, el hardware, el software y el
sistema operativo (el correveidile entre uno y otro) apenas saben lo que están haciendo los
otros componentes, a pesar de que todos están funcionando en la misma máquina. Un siste-
ma operativo, por ejemplo, desconoce si una aplicación de reproducción de vídeo está force-
jeando por recursos, aunque quienes lo estén viendo se den perfecta cuenta de que la imagen
va a trompicones.
El equipo del MIT dio a conocer el año pasado Application Heartbeat, un programa que su-
f[hl_iWbWcWhY^WZ[bWiZ_\[h[dj[iWfb_YWY_ed[i$:[j[YjW"feh[`[cfbe"gk[bWWfb_YWY_dZ[l-
deo está operando a 15 fotogramas por segundo, y no a 30, el valor óptimo.
BW_Z[W"[dZ[Ðd_j_lW"Yedi_ij[[dbe]hWhi_ij[cWief[hWj_leigk[_Z[dj_Ðgk[di_bWiWfb_YW-
ciones están funcionando con una lentitud inaceptable y, en consecuencia, propongan posibles
remedios. Tal vez, con la batería del ordenador a plena carga, el sistema operativo asignaría a
bWWfb_YWY_dkdWcWoehYWfWY_ZWZZ[Ycfkje$:[dei[hWi"b[feZhWehZ[dWhgk[kj_b_pWi[
kdYed`kdjeZ[_dijhkYY_ed[iZ[c[dehYWb_ZWZ"f[hec|i[ÐY_[dj[$;bi_ij[cWef[hWj_lefe-
dría adquirir experiencia, de modo que la segunda vez que surgiera el problema lo soluciona-
ría con mayor rapidez. Y un ordenador «consciente» resolvería situaciones complejas, como
«haz funcionar estos tres programas, pero concede prioridad al primero» o «ahorra tanta ener-
gía como sea posible, mientras no estorbe la reproducción de la película que deseo ver».
El paso siguiente consiste en diseñar un sistema operativo que ajuste los recursos a las ne-
cesidades del programa. Si la reproducción del vídeo fuese lenta o con saltos, el sistema ope-
rativo le asignaría más potencia. Sin embargo, si estuviera corriendo a 40 fotogramas por se-
gundo, el ordenador podría desviar potencia hacia otro componente, porque el ojo humano no
Wfh[Y_Wc[`ehWWbfWiWhZ[)&W*&\eje]hWcWifehi[]kdZe$I[]d>[dho>e¢cWdd"ZeYje-
rando en informática del MIT que trabaja en el programa, la estrategia permitiría ahorrar el
40 por ciento de la energía que se consume con las prácticas actuales.
Los sistemas conscientes no solo harán que los ordenadores se vuelvan más «inteligen-
tes», sino que podrían resultar esenciales para gestionar los futuros ordenadores, cada vez
más complejos, opina Anant Agarwal, director del proyecto. A lo largo del decenio pasado, los
ingenieros han ido añadiendo cada vez más unidades básicas de cómputo, o núcleos, a los or-
denadores. Los ordenadores de hoy suelen contar con dos o cuatro núcleos, pero las máqui-
nas futuras podrán utilizar desde docenas a millares de ellos. La distribución de las tareas de
cómputo, que los programadores actuales efectúan explícitamente, se tornará casi imposible.
Un sistema consciente ahorraría tal esfuerzo al programador, al adaptar de forma automática
el uso de los núcleos al programa.
La capacidad para gestionar tantos núcleos permitiría alcanzar una mayor velocidad de
Ycfkjeofhei[]k_hYedbWj[dZ[dY_WZ[Yh[Whc|gk_dWiYWZWl[pc|ih|f_ZWi$»:WZegk[j[-
nemos un gran número de núcleos, hemos de contar con sistemas que posean cierto grado de
YedY_[dY_WZ[ic_icei¼"WÐhcW@e^dL_bbWi[deh"fhe\[iehZ[_d][d_[hW[bYjh_YW[dbWKd_-
versidad de California en Los Ángeles y participante en el Proyecto Angstrom. «Creo que ve-
XXXXXXXX
?ă÷ýīĄûĉûûĂĂûùĊąĈćċûûĄĊĈ÷ûĄċĄø÷ĈďĆÿúûûĂøąù÷úÿĂĂąúû ción, como Visa o PayPal. El sistema dota de poder a los usua-
la casa. Al pagar con algunos euros, la cajera le indica: «Muchas h_ei"deWbei_dj[hc[Z_Wh_eiÐdWdY_[hei$
gracias, pero necesito su nombre y dos apellidos, NIF, dirección Bitcoin se inspira en ideas bien conocidas en los programas
postal, número de teléfono y los diez dígitos de su cuenta ban- de criptografía. El programa le asigna a cada usuario dos códi-
caria». Casi todos protestaríamos vivamente ante una exigencia gos sin copia: una clave privada, que se oculta en el ordenador
así. Sin embargo, así es como pagamos los bienes o servicios que del usuario, y una dirección pública que todos pueden ver. La
adquirimos por Internet. clave y la dirección se hallan vinculadas matemáticamente, pero
No hay en la Red una moneda que posea el anonimato y acep- averiguar la clave privada a partir de su dirección resulta casi
jWY_dZ[bei[kheiebeiZbWh[i$DeiÐWcei[dYWcX_eZ[ik- imposible. Si poseo 50 bitcoins que deseo transferir a una per-
Y[Z|d[eiÐdWdY_[hei"YecebWiYecfWWiZ[jWh`[jWiZ[YhZ_- sona, el softwareYecX_dWc_YbWl[YedbWZ_h[YY_dZ[bX[d[Ð-
to, para gestionar nuestras transacciones (que se embolsan un ciario. Otras personas de la red pueden utilizar la relación en-
porcentaje de la venta, además de quedarse con nuestra infor- jh[c_YbWl[fh_lWZWoc_Z_h[YY_dfXb_YWfWhWl[h_ÐYWhgk[
mación personal). Todo esto podría cambiar con el nacimiento oefei[ebeiX_jYe_digk[Z[i[e]WijWh"jhWibeYkWbjhWdiÐ[h[d
del bitcoin, una moneda numérica con tanta liquidez y anoni- esos bitcoins mediante un algoritmo que abre el mensaje codi-
mato como el dinero en efectivo. «Es como si tomásemos un ÐYWZe$7bfh_c[hehZ[dWZehgk[j[hc_dWbeiY|bYkbeii[b[fh[-
euro, lo introdujésemos en nuestro ordenador y lo enviásemos mia de cuando en cuando con unos bitcoins, lo que recluta a un
por Internet a donde nos conviniera», asegura Gavin Andresen, variopinto colectivo de usuarios que mantiene el sistema.
uno de los líderes de la red Bitcoin. La primera compra efectuada con bitcoins de la que se tiene
BeiX_jYe_diiedYWZ[dWiZ[X_ji"h_ijhWiYeZ_ÐYWZWigk[ constancia fue una pizza, vendida por 10.000 bitcoins a princi-
pueden ser enviadas de un usuario a otro por una red p2p, de f_eiZ[b(&'&$:[iZ[[djedY[i"bWijWiWiZ[YWcX_e[djh[[bX_jYe_d
igual-a-igual. Mientras que la gran mayoría de las cadenas de o[bZbWh[ijWZekd_Z[di[^Wd_ZeÑkYjkWdZeYecebWidejWiZ[
bits pueden ser copiadas cuantas veces se quiera —lo que deja- kdiebeZ[`Wpp$:[X_ZeWbWlebWj_b_ZWZZ[[ijWZ_l_iW"h[ikbjWh|
ría sin valor a cualquier clase de dinero—, los usuarios solo pue- difícil hallar un comerciante que acepte ser pagado en bitcoins.
Z[dkj_b_pWhbeiX_jYe_dikdWl[p$I_ij[cWiYh_fje]h|ÐYeicko En este momento la comunidad Bitcoin es pequeña, pero suma-
robustos protegen a los bitcoins frente a posibles robos, y la red mente entusiasta. Como los primeros en adoptar Internet.
entre iguales elimina la necesidad de una central de compensa- —Morgen Peck
M AT E R I A L E S
menas ricas. Casi el 20 por ciento del cobre
Cultivos
plurianuales
Las variedades perennes pueden estabilizar los suelos y aumentar
las cosechas. Y mitigar incluso el cambio climático
7ĄĊûĉúûĂ÷÷ýĈÿùċĂĊċĈ÷"Ă÷ă÷ďąĈĆ÷ĈĊûúûĂĆĂ÷ĄûĊ÷ĉûþ÷ĂĂ÷ø÷ùċøÿûĈĊ÷ĆąĈČûýûĊ÷Ăûĉ
que vivían durante años. Estas plantas perennes se fueron sustituyendo gradualmente
por cultivos alimentarios que es preciso volver a sembrar tras la cosecha. Pero ahora
se está estudiando la posibilidad de invertir la situación mediante la creación de varie-
dades perennes de cultivos tan comunes como el trigo y el maíz. Si se lograse, podrían
obtenerse cosechas mucho más abundantes en las tierras cultivables de algunos de los
lugares más pobres del mundo. Y las plantas podrían también secuestrar parte del ex-
ceso de carbono que contiene hoy la atmósfera terrestre.
Los agrónomos llevan decenios soñando con reemplazar los cultivos, anuales o de
temporada, perecederos, por cultivos permanentes. Pero, hasta hace solo diez o quin-
ce años, no se disponía de las técnicas genéticas que lo hicieran posible, explica el agro-
ecólogo Jerry Glover. Las plantas perennes ofrecen numerosas ventajas sobre los cul-
tivos que deben sembrarse todos los años: sus hondas raíces protegen el suelo frente a
la erosión, que así retiene elementos esenciales como el fósforo, y exigen menos ferti-
lizantes y agua que los cultivos anuales. Mientras que los monocultivos tradicionales
contribuyen a aumentar las emisiones carbónicas a la atmósfera, las plantaciones per-
durables, al no requerir ser aradas, constituyen un sumidero de carbono.
Los campesinos de Malawi están obteniendo cosechas muy superiores plantando
hileras de guandúes (Cajanus cajan, una leguminosa arbustiva perenne) entre las hi-
leras de su principal alimento, el maíz. Los guandúes constituyen no solo una fuente
de proteínas, tan necesarias en una agricultura de subsistencia, sino que aumentan
también la retención de agua en el suelo y duplican en él los contenidos de nitrógeno
y carbono, sin reducir los rendimientos del cultivo primario.
DeeXijWdj["Z[X[h|h[Wb_pWhi[kd_cfehjWdj[[i\k[hpeY_[djÐYefWhWbb[lWhbeiYkb-
tivos perennes al siguiente nivel, esto es, su adopción a una escala que los equipare a
los tradicionales. Ed Buckler, experto en genética vegetal de la Universidad Cornell, se
propone desarrollar una versión perenne del maíz. Opina que harán falta unos cinco
WeifWhW_Z[dj_ÐYWhbei][d[ih[ifediWXb[iokdZ[Y[d_ec|ifWhWYedi[]k_hkdWY[fW
viable. «Incluso si se aplican todos los recursos técnicos disponibles estaríamos hablan-
do, casi con certeza, de unos 20 años, a contar desde el presente, para obtener un maíz
perenne», añade Glover.
El desarrollo de cultivos permanentes ha experimentado un empuje gracias a las
jYd_YWifkdj[hWiZ[][dej_f_ÐYWY_d$;dbWWYjkWb_ZWZi[fk[Z[dWdWb_pWh[dfeYej_[c-
po los genomas de plantas dotadas de características deseables y buscar asociaciones
entre los genes y dichos rasgos. Cuando una primera generación de plantas produce
semillas, se secuencian directamente las plántulas para buscar entre millares de ellas
las pocas que retienen las propiedades deseadas, en lugar de esperar al estado adulto,
que puede tardar años.
Cuando se obtengan las variedades perennes de los cultivos anuales, su implanta-
ción podría implicar grandes efectos sobre las emisiones carbónicas. La clave reside en
ikii_ij[cWihWZ_YkbWh[i"gk[i[Yk[ijhWhWd"[dYWZWc[jheYX_YeZ[ik[beikf[hÐY_Wb"
kdWYWdj_ZWZZ[YWhXede[gk_lWb[dj[Wb'fehY_[djeZ[bWcWiWZ[[iWj_[hhW$:ek]bWi
Kell, presidente del Consejo Británico de Investigación en Ciencias Biológicas y Biotec-
nológicas, ha calculado que si cada año se sustituyera el 2 por ciento de los cultivos
CORTESÍA DE JIM RICHARDSON
anuales de todo el mundo por cultivos perennes, se podría retirar de la atmósfera su-
ÐY_[dj[Z_n_ZeZ[YWhXedeYecefWhWZ[j[d[hikWkc[dje$Oi_jeZWibWij_[hhWiYkbj_-
Sol de invierno: Este girasol vables se dedicasen a cultivos perennes, el secuestro de dióxido de carbono alcanzaría
es un híbrido entre una variedad bWi''.fWhj[ifehc_bbd"YWdj_ZWZikÐY_[dj[fWhWh[ZkY_hbWYedY[djhWY_dWjcei\h_-
anual del girasol y un pariente ca de gases de efecto invernadero a valores preindustriales.
silvestre perenne. —Christopher Mims
Combustible
líquido
para vehículos
eléctricos
Un nuevo tipo de batería
permitiría sustituir
los combustibles fósiles
por «crudo nanotécnico»
L
A CLAVEÈDàDÕùy¨¹åÿy `ù¨¹åy¨z`ïà`¹åÈùy
dan recorrer cientos de kilómetros sin recargar
åyD¨¨Dy´y¨myåDà๨¨¹myUDïyà Dåmy®DĂ¹à
`DÈD`mDmÎ0yà¹`¹´¨Dïy`´¹¨¹ Dyāåïy´ïyj
los progresos en esa dirección solo se producen de
¹à®DàDmùD¨Ă¨¹åàD´myåDÿD´`yåÈDày`y´¨y¦D´¹åÎ
No obstante, un cambio en la composición interna
my¨DåUDïyà D容myà´Då¹ày`y¨DȹåU¨mDmmymù
Ȩ`Dà¨Dy´yà DÕùyÈùymyD¨®D`y´Dàåyy´y¨¨DåÎ
"DmyDåy¨y¹`ùààºD¨Èà¹yå¹à?yï$´D´j
my¨´åïïùï¹my5y`´¹¨¹ Dmy$DååD`ùåyïïåjmùàD´ïy
ù´D·¹åDUEï`¹y´À÷ñ3Ăåïy®åj`¹®ÈD· Dmy¨DÕùy
yåå¹`¹ù´mDm¹àÎ×?åùUyàDù´D¹à®Dmy`¹®U´Dà
¨Då®y¦¹àyå`DàD`ïyà åï`Dåmy¨DåUDïyà Dåmyù¦¹jÕùy
´ïà¹mù`y´y¨y`ï๨ï¹å¨ Õùm¹åy´¨D`z¨ù¨Dj`¹´¨D
my´åmDmy´yàzï`Dmy¨DåUDïyà Dåmy¨ï¹j`¹®¹¨Då
usadas en la electrónica de consumo?
"DåUDïyà Dåmyù¦¹D¨®D`y´D´¨Dy¨y`ïà`mDmy´
myȺåï¹åmyy¨y`ï๨﹨ Õùm¹Î0yà¹È¹åyy´ù´Dyå`DåD
my´åmDmy´yàzï`Djyåï¹yåj¨D`D´ïmDmmyy´yà D
almacenada por unidad de masa. Su mayor ventaja
reside en la posibilidad de aumentar la capacidad:
basta construir tanques mayores para los electrolitos.
Chiang y sus colaboradores han creado un prototipo
myUDïyà DÕùyȹåyyïD´ïDmy´åmDmy´yàzï`D`¹®¹
la de litio, pero cuyo medio de almacenamiento es esen-
`D¨®y´ïy¨ Õùm¹j`¹®¹y´¨Dmyù¦¹ÎD´¨¹¨¨D®D
«crudo de Cambridge»: una emulsión negra integrada
ȹà´D´¹ÈDàï `ù¨DåĂȹààE´ù¨¹å®yïE¨`¹åÕùyD¨®D
cenan electricidad. Si pudiéramos observar el crudo
myD®UàmyD¨®`à¹å`¹È¹y¨y`ïິ`¹ÿyà D®¹å
ÈDàï `ù¨DåÈù¨ÿyàù¨y´ïDåjmy¨¹å®å®¹å®DïyàD¨yåÕùy
`¹®È¹´y´®ù`DåUDïyà Dåmy¨ï¹j`¹®¹ºām¹my¨ï¹
Ă`¹UD¨ï¹ÊÈDàDy¨E´¹m¹ËĂàDï¹ÊÈDàDy¨`Eï¹m¹ËÎ
´ïyà`D¨DmDåy´ïàyyåïDåÈDàï `ù¨Dåày¨DïÿD®y´ïy
àD´myåjåùåÈy´mmDåy´ù´¨ Õùm¹jmyå`ùUàà D®¹å
´D´¹ÈDàï `ù¨Dåmy`DàU¹´¹jy¨´àymy´ïyåy`àyï¹
de esta innovación.
´yåïy®ym¹åy¹à®D´¨D®y´ï¹å¨ Õùm¹å
ÕùyjDÈ·Dm¹åj`àyD´ù´DyåÈy`ymyïy¦m¹yåȹ´¦¹
å¹Õùy`¹´y`ïD¨¹åàE´ù¨¹åmy¨DUDïyà Dj®ù`¹
mayores, donde se almacenan los iones y electrones.
¨àyåù¨ïDm¹yåù´¨ Õùm¹jy´y¨Õùyj´`¨ùå¹D¨ùàj
sus componentes nanométricos mantienen sin cesar
sendas por las que viajan los electrones entre gránulos
de almacenamiento.
Simular el planeta
en tiempo real
Si introdujéramos todos los datos relevantes del planeta
en un superordenador, ¿podría ayudarnos a predecir acontecimientos
futuros? Un experto que así lo cree quizá reciba
mil millones de euros de la UE para materializar el proyecto
David Weinberger
L
÷ùĈÿĉÿĉüÿĄ÷ĄùÿûĈ÷ćċûûĂ÷ĺąĆ÷ĉ÷úąù÷ĉĊÿýĶ÷=Ĉûùÿ÷ĈûČûĄĊĶĂ÷ĉùąĉĊċĈ÷ĉ
de la economía mundial. Tras acumular una deuda que jamás podría devol-
ver, el país se enfrentaba a un cúmulo de consecuencias nefastas. Los recortes
del gasto público avivaron las revueltas en las calles de Atenas y las amenazas
FOTOGRAFÍA DE DAN SAELINGER; ESTILISMO DE OBJETOS LAURIE RAAB, HALLEY RESOURCES
Z[gk_[XhW^_Y_[hedj[cXbWhbeic[hYWZeiÐdWdY_[hei_dj[hdWY_edWb[i$Dkc[-
rosos economistas recomendaron que Grecia abandonase el euro y devaluara
su divisa; algo que, en teoría, ayudaría a reactivar el crecimiento. «No nos
equivoquemos, una salida ordenada del euro será muy complicada», escribía en el Financial Ti-
mes Nouriel Roubini, economista de la Universidad de Nueva York, «pero mucho peor resulta-
rá contemplar el estallido lento y anárquico de la economía y la sociedad griegas».
EN SÍNTESIS
Un proyecto de investigación persi- Las diferentes simulaciones se nutri- Muchos piensan, sin embargo, que Otras propuestas abogan por una
gue construir un ordenador que ayude rían de las enormes cantidades de da- ningún modelo podrá dar cuenta de la «máquina del conocimiento» basada
a predecir todo tipo de situaciones a tos a las que hoy pueden acceder los gran complejidad que se deriva del en los principios de la web: interco-
escala mundial. expertos. comportamiento humano. nexión y debates.
E
ĄąùĊċøĈûúû(&&/"ċĄýĈċĆąúûûĄĊċĉÿ÷ĉĊ÷ĉúûĂ÷ûĎĆĂą-
ración espacial nos reunimos para estudiar a conciencia
las posibilidades de enviar tripulantes humanos al espa-
cio. El detonante de ese encuentro fue la comisión Augus- te la primavera y el verano siguien-
tine, un equipo de expertos convocados por el presiden- tes nos reunimos con otros exper-
te Barack Obama para analizar la viabilidad de la lanzadera tos que habían mostrado interés
por nuestros planteamientos, quie-
espacial y del proyecto que habría de sucederla. El panel había nes nos propusieron mejoras. Nos
concluido que los planes de la NASA para llevar a cabo misiones informamos sobre los experimen-
tripuladas parecían seguir «una trayectoria insostenible». Tras tos que habían realizado otros in-
vestigadores; desde ensayos con
haber trabajado en un fascinante programa de exploración ro- propulsores eléctricos de gran po-
bótica que ha ampliado los límites de la humanidad desde Mer- tencia hasta ligeros dispositivos
Ykh_e^WijWbeiYedÐd[iZ[bi_ij[cWiebWh"deifh[]kdj|XWceii_ iebWh[icko[ÐY_[dj[i$:[iZ[[d-
tonces, nuestras discusiones han co-
feZWcei^WbbWhiebkY_ed[ijYd_YWifWhWWb]kdWiZ[bWiZ_ÐYkb- brado cierta entidad y se han incor-
tades políticas y presupuestarias de la NASA. porado a una corriente innovado-
ra en la que participan miembros
de la agencia y de la industria.
Surgieron numerosas ideas: emplear propulsores iónicos Como resultado, hemos combinado las propuestas más pro-
para transportar los componentes de una base lunar; transferir c[j[ZehWiYedejhWi[ijhWj[]_WiZ[[ÐY_[dY_WfheXWZW[dkdfbWd
energía a los vehículos robóticos situados en Fobos, la luna mar- para enviar astronautas a 2008 EV5, un asteroide cercano a la
ciana; montar propulsores de efecto Hall de alta potencia en la Tierra, no más tarde de 2024. Este proyecto serviría como pre-
Estación Espacial Internacional (ISS) y ponerla en una órbita parativo para un viaje posterior a Marte. Además, ha sido conce-
que basculase entre la Tierra y Marte; situar con antelación mo- bido para que encaje en el presupuesto actual de la NASA y, lo
tores químicos a lo largo de la trayectoria interplanetaria para más importante, divide la empresa en una serie de hitos conse-
que los astronautas pudieran emplearlos a su paso; utilizar cáp- Ykj_lei"begk[fhefehY_edWhWbWÑ[n_X_b_ZWZd[Y[iWh_WfWhWWZ[-
sulas de exploración del estilo de las que aparecían en 2001: YkWh[bh_jceZ[bWc_i_dWbWÐdWdY_WY_dZ_ifed_Xb[$;dZ[Ð-
Odisea en el espacio, en lugar de trajes espaciales; o, en vez de nitiva, el programa intenta aplicar a la exploración humana todo
enviar humanos a un asteroide, traer uno de tamaño reducido lo que hemos aprendido durante las expediciones robóticas.
a la estación espacial. Tras los cálculos, hallamos que un pro-
yecto basado en la propulsión eléctrica (ya fuese por medio de PEQUEÑ̃OS PASOS, UN SALTO DE GIGANTE
motores iónicos o alguna técnica similar) reduciría en gran me- El informe de la comisión Agustine encendió una viva polémi-
dida la masa de lanzamiento necesaria para enviar misiones tri- ca que culminó con la decisión de delegar en empresas priva-
puladas hacia Marte o un asteroide. das el grueso de los vuelos orbitales tripulados [véase «Aerolí-
Salvo por el humo de los cigarrillos, aquello fue como regre- neas espaciales», por David H. Freedman; ?ĄČûĉĊÿý÷ùÿĶĄ ď
sar a la NASA de los años sesenta: hablábamos de lo que se ha- 9ÿûĄùÿ÷"\[Xh[heZ[(&''S$;i[fbWdZ[Ð[dZ[gk[bWD7I7i[Y[d-
llaba dentro de nuestras posibilidades y evitábamos complicar- tre en la investigación necesaria para proporcionar un nuevo
nos con lo que no. Tras ese análisis inicial, y a modo de sínte- horizonte a la exploración humana del espacio. Pero ¿cómo avan-
sis, improvisamos un seminario para nuestros compañeros del zará la agencia sin el apoyo político y los recursos de los que
Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA. Duran- disfrutaba en los días de las misiones Apolo?
EN SÍNTESIS
La nueva política espacial de EE.UU. ha puesto en Los autores han diseñado una propuesta innova- Su estrategia se basa en una sucesión de proyectos
duda el futuro de las misiones tripuladas a cargo de dora que persigue garantizar un progreso lento escalonados que llevarían astronautas cada vez más
la NASA, que ahora debe subcontratar los vuelos pero constante en el programa de exploración lejos, sin comprometer la inversión tecnológica de
orbitales. humana de Marte. la NASA.
TTierra
Luna
Tierra i
Órbita PPuntos A id
Asteroides A id
Asteroides 33ùÈyà`y
Órbita marciana; 3ùÈyà`y
lunar de Lagrange cercanos más lejanos de la Luna Fobos y Deimos de Marte
(rojo) a la Tierra
La exploración robótica se ha basado en una estrategia gra- y Marte por un amplio abanico de destinos. Comenzaríamos por
dual de avances escalonados. Más que intentar alcanzar metas los más próximos, como los puntos de Lagrange (posiciones en
únicas desde una perspectiva de «todo o nada», se combinan el espacio donde un objeto puede permanecer estacionario bajo
técnicas para lograr toda una variedad de objetivos. Desde lue- la acción de dos fuerzas gravitatorias) y los asteroides cercanos
go, el programa ha sido víctima de sus propios errores. Pero, al a la Tierra.
menos, no se estanca cuando sobrevienen cambios políticos ni KdWhkjWÑ[n_Xb[h[YbWcWl[^YkbeiXWiWZei[ddk[lWijY-
cuando la innovación técnica se rezaga. Nuestra conclusión es nicas, como la propulsión eléctrica. Nuestra propuesta inclu-
que las misiones tripuladas podrían inspirarse en esa estrate- ye propulsores de efecto Hall (un tipo de motor iónico) alimen-
gia. No se necesita comenzar con «un salto de gigante», como tados por paneles solares. Un sistema similar impulsó la astro-
hicieron las misiones Apolo. Antes bien, debería procederse en nave Dawn hacia el asteroide gigante Vesta y, en 2015, la
pasos modestos, cada uno sobre la base del anterior. llevará hasta el planeta enano Ceres [véase «Cohetes eléctri-
Para algunos, la verdadera lección de la exploración robóti- cos», por Edgar Y. Choueiri; ?ĄČûĉĊÿý÷ùÿĶĄď9ÿûĄùÿ÷"abril de
ILUSTRACIÓN DE PITCH INTERACTIVE, ADAPTADA DEL INFORME DE LA NASA SOBRE VUELOS TRIPULADOS; NASA (Tierra, Luna y Marte)
Adentrarse
en el espacio profundo
4 Antes de llegar a Marte, una meta intermedia podría consistir en
alcanzar el asteroide 2008 EV5. La propuesta de los autores hace
y³
Dääx³§DxĀU§lDllx§Dä¹³āx³äøxäîDU§lDl
ßx³îxD
xþx³îøD§lDlxäÍîD§³j§D%3ǸlßD`¸³äîßøßø³þx`ø§¸DÇî¸
para franquear las regiones orbitales que pudiera usarse repetidas
veces. Una fecha propuesta para el lanzamiento es 2024. El ensam-
blaje, los viajes de prueba y su puesta en camino procederían
Ó R B I TA en varias etapas, entre las cuales el vehículo permanecería
TERR
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5 a la espera en una órbita terrestre alta.
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El vehículo queda
a la espera en una
Propulsado por órbita alta
un motor iónico
de efecto Hall
6
1
7 10
Módulo de hábitat
ulsión iónica
Suministros
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Cohete de prop
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MINIATURAS
DESLUMBRANTES
Bajo el microscopio se percibe
la grandeza de los mundos pequeños
Gary Stix
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j[d[ceibWfei_X_b_ZWZZ[l[h$
PA R A S A B E R M Á S
Ciencia popular
La historia de la ciencia nos ayuda a comprender mejor la comunicación
entre expertos y profanos
De linces y hongos
Las políticas de conservación de la biodiversidad no se centran en las especies más
importantes, sino en las más carismáticas
Interruptores
ocultos
en la mente
Mediante cambios epigenéticos que activan o desactivan genes,
la experiencia puede influir en las enfermedades mentales
Eric J. Nestler
M ÷ĊĊûĉĆĈąüûĉąĈúûþÿĉĊąĈÿ÷$IċþûĈă÷ĄąýûăûĂą"=Ĉûý"
es drogadicto. (Los nombres se han cambiado para pro-
teger el anonimato.) Durante los años de juventud, trans-
curridos en Boston, ambos pasaron con éxito los ciclos
de educación media: eran buenos estudiantes y depor-
FOTOGRAFÍA DE PLAMEN PETKOV
tistas, y se llevaban bien con sus compañeros. Como muchos jóvenes, de vez
en cuando los hermanos tomaban cerveza o fumaban cigarrillos a escondidas.
También experimentaron con la marihuana. Más tarde, en la universidad, pro-
baron la cocaína. A Greg, la experiencia le desbarató la vida.
Al principio llevaba una vida normal. Asistía a clase y man- MÁS ALLÁ DE LOS GENES
tenía el contacto con sus amigos. Pero la droga se convirtió Nuestros esfuerzos por desentrañar el modo en que los factores
pronto en algo de suma importancia. Greg abandonó la escue- [f_][dj_Yei_dÑko[d[dbWi[d\[hc[ZWZ[ic[djWb[i[ij|dYed-
la y aceptó varios puestos de trabajo precarios. Raras veces tribuyendo a resolver enigmas, planteados desde hace decenios,
mantenía un empleo durante más de uno o dos meses, ya que sobre el origen genético de la adicción, la depresión, el autismo,
lo despedían por faltar al trabajo o discutir con los clientes y la esquizofrenia y otros trastornos psiquiátricos. Como la ma-
compañeros. Su comportamiento se hizo cada vez más impre- yoría de las enfermedades, las dolencias neurológicas pueden
visible, a veces violento, y fue detenido varias veces por robar heredarse: alrededor de la mitad del riesgo de adicción o depre-
para costearse la droga. Fracasó en los múltiples intentos de sión es genético, proporción superior al riesgo de padecer hi-
rehabilitarse y, a los 33 años de edad, cuando un juez le man- pertensión arterial o numerosos tipos de cáncer. Pero los genes
dó a un centro psiquiátrico para que fuera evaluado, era ya in- no lo son todo. Tal como vimos en el caso de Greg y Matt, inclu-
digente y vivía en la calle. Había sido repudiado por su familia so poseer genes idénticos no garantiza que dos individuos con-
y era prisionero de su adicción. traigan la misma enfermedad. Por el contrario, lo que desenca-
¿Qué hizo a Greg tan susceptible a la cocaína, hasta el punto dena trastornos psiquiátricos en personas con una predisposición
de que destruyera su vida? ¿Y cómo fue que su hermano gemelo, genética concreta son los estímulos ambientales, como la expo-
con quien comparte los mismos genes, se librara de tal destino? sición a drogas o al estrés, e incluso ciertos eventos molecula-
´FehgkbW[nfei_Y_dWkdWZhe]Wi_]d_ÐYWfWhWWb]kdeikdW res que se producen al azar durante el desarrollo. No existen
vida entera de adicción, mientras otros superan sus impruden- dos personas que presenten las mismas experiencias o trayec-
cias juveniles y siguen adelante llevando una vida productiva? toria de desarrollo.
;iWifh[]kdjWideieddk[lWi"f[heWbÐ`Whi[[d^WbbWp]eiZ[ Por tanto, deberíamos formularnos la siguiente pregunta:
ejhWiZ_iY_fb_dWi"beid[kheY_[djÐYei^WdYec[dpWZeWWZef- ¿Qué mecanismos determinan que esos estímulos desencade-
tar un nuevo enfoque para intentar resolverlas. Durante el úl- nen una enfermedad mental? La respuesta resulta obvia a cier-
timo decenio, los biólogos que estudian el desarrollo embriona- to nivel: la herencia y el ambiente convergen para dar forma
rio y el cáncer han descrito numerosos mecanismos molecula- a las células del cerebro. Las neuronas procesan todo lo que
res en los que el ambiente determina el comportamiento de los experimentamos (ya sea ver una película, recibir un abrazo, es-
genes sin cambiar la información que contienen. En vez de mu- nifar cocaína o preguntarnos qué hay para cenar) y comparten
jWh][d[i"[ijWiceZ_ÐYWY_ed[i[f_][dj_YWibeicWhYWdZ[jWb información unas con otras al liberar y reconocer ciertas sus-
manera que alteran su actividad, en algunos casos, durante toda tancias, los neurotransmisores. Estos estimulan o inhiben dis-
la vida. tintas neuronas, a la vez que activan o desactivan una serie de
Mi laboratorio y otros estamos descubriendo ahora indicios ][d[i$9edeY[hbei][d[igk[i[l[d_dÑk_ZeifehkdZ[j[hc_-
de que los cambios epigenéticos causados por el consumo de nado neurotransmisor nos ayudará a establecer el modo en que
Zhe]Wie[b[ijhiYhd_Yefk[Z[dceZ_ÐYWhbW\ehcW[dgk[[b una neurona responderá ante una experiencia y, en última ins-
cerebro responde a la experiencia. Esos cambios hacen que un tancia, moldeará la conducta de un individuo.
individuo reaccione con resiliencia o sucumba a la adicción, la Muchos de esos efectos son de duración breve. Por ejemplo,
depresión u otros trastornos psiquiátricos. Aunque todavía es- la exposición a la cocaína activa el centro cerebral de la recom-
tamos empezando a comprender esa interacción entre genes y pensa, lo que produce un estado de euforia transitoria. Este
ambiente, esperamos que los resultados nos permitan mejorar sentimiento se desvanece pronto y el sistema se restablece. La
los tratamientos de estas dolencias devastadoras. Incluso tal vez forma en que las drogas, el estrés u otras experiencias engen-
nos ofrezcan una nueva perspectiva sobre los mecanismos de dran efectos a largo plazo y hacen que un individuo sucumba
herencia de las enfermedades mentales. a la depresión o a la adicción representa todavía un enigma.
EN SÍNTESIS
Nuevos hallazgos indican que las ex- Los estudios con ratones demues- Los cambios epigenéticos pueden Aunque queda mucho camino por
periencias contribuyen a la enferme- ïàD´ y¨ ÈDÈy¨ my ¨Då ®¹m`D`¹´yå afectar también la conducta materna: recorrer, se espera que los nuevos
dad mental mediante la adición o eli- epigenéticas de larga duración en los las crías reproducen el comportamien- descubrimientos ayuden a mejorar
minación de señales epigenéticas en trastornos como la adicción y la de- to de la madre, aunque los cambios no el tratamiento de las enfermedades
los cromosomas. presión. se transmiten por línea germinal. mentales.
àùȹ
den a abrir la cromatina y a otras proteínas que promueven la ®y塀 ๮Dï´D
activación génica. Por el contrario, las histonas con numero-
sos grupos metilo atraen a lectoras que inhiben o promueven Gen activo:¹ïàDååy·D¨yåj`¹®¹¨¹åàùȹåD`y塀jïy´my´Dyåï®ù¨Dà
la transcripción, según la localización exacta de las señales ¨DD`ïÿmDmmy¨y´D¨DĂùmDàDmyåȨyDà¨D`๮Dï´DÎ
metilo. 0à¹ïy ´D
àùȹD`y塀
;bWcX_[dj[fk[Z[_dÑk_h[dbWWYj_l_ZWZ]d_YWc[Z_Wdj[
la regulación de la conducta de las escritoras y borradoras epi- y´D`ïÿ¹
genéticas, que a su vez determina la marcación y reestructura-
ción de la cromatina. A veces los marcadores persisten poco
tiempo, lo que permite a una neurona responder con rapidez a
de la adicción
Algunos estudios con ratones han demostrado
Ôøx§DxĀǸä`¹³`ß¹³`DD§D`¸`D³DÇ߸þ¸`Dø³ àùȹD`y塀
lxäxÔø§U߸x³§Dääx¶D§xäxÇx³yî`Dälx§¸ä 0à¹ïy ´D
x³xälx§`x³î߸`xßxUßD§lx§Dßx`¸Çx³äDÍ
Ese cambio vuelve a los animales más sensibles
D§¸äx
x`î¸älx§Dl߸DāEäÇ߸Çx³ä¸äD
y´´Um¹
convertirse en adictos.
àùȹ®y塀
¿Qué cambia exactamente? y´D`ïÿ¹
Incluso una única dosis de cocaína puede alterar el
Èyà¨yÈy´zï`¹my¨¹åy´yåy´y¨´ú`¨y¹D``ù®Uy´åj
una zona del centro de la recompensa. En ausencia
de droga ( a ) predominan las señales metilo, lo que
hace condensar la cromatina y silenciar sus genes.
La cocaína provoca un predominio de los grupos
D`y塀jÕùyD¹¦D´ la cromatina ( b ). Entonces se
D`ïÿD´´ù®yà¹å¹åy´yåÕùy`¹m`D´Èà¹ïy ´Då
implicadas en la respuesta placentera a la droga.
%ú`¨y¹D`ù®Uy´å
Baja
A B C D A B C D A B C D
Gen
Una semana después Una semana después
de haber consumido de haber consumido
droga, la actividad droga, algunos genes se
Efectos duraderos génica vuelve mantienen hiperactivos
La exposición inicial a la cocaína eleva de forma transitoria la actividad de muchos genes a la normalidad
(representado esquemáticamente por cambios en B, C y D, arriba a la izquierda), pero pronto
la actividad regresa a la línea base. No obstante, la exposición crónica produce efectos
más complejos: algunos genes se vuelven menos sensibles a la droga (A y B, arriba a la
derecha), pero esta estimula la actividad de otros a un nivel incluso superior al anterior
(C y D, abajo a la derecha). Algunos de los genes se mantienen hiperactivos durante un
A B C D A B C D
período de tiempo anormalmente largo.
la estimulación intensa al producir una onda sostenida de libe- UNA HUELLA ADICTIVA
ración de neurotransmisor. Pero a menudo los marcadores per- Los hallazgos relacionados con la adicción contribuyen a acla-
manecen activos durante meses o años, incluso a lo largo de rar el modo en que las drogas se hacen con el control del cen-
toda la vida del organismo. En la memoria, refuerzan o debili- tro de la recompensa en el cerebro. Numerosos estudios han
tan las conexiones neurales implicadas en el establecimiento de _Z[dj_ÐYWZekdYWcX_eZh|ij_Ye[dbWWYj_lWY_d]d_YWYece
los recuerdos. consecuencia del consumo de cocaína, opiáceos u otras sus-
La adición y eliminación de grupos metilo y acetilo (y otras tancias adictivas. Se observó que algunas de esas alteraciones
señales) ayudan, pues, al cerebro a responder y adaptarse a re- se mantenían incluso después de meses de abstinencia, si bien
tos ambientales y a la experiencia. Sin embargo, mi laborato- ha resultado difícil explicar los mecanismos responsables de
rio y otros estamos comprobando, en estudios con animales, esa persistencia. Dados los efectos a largo plazo que pueden
gk[[ijeifheY[iei[f_][dj_YeiX[d[ÐY_eiei\WbbWd[dbeijhWi- acarrear los cambios epigenéticos, hace unos diez años nos
tornos de adicción o depresión. En tales situaciones, una con- propusimos examinar si la cocaína podía alterar la actividad
Ð]khWY_dWbj[hWZWZ[bWii[Wb[iWYj_lWWdi_WiYecfkbi_lWi"_d- Z[bei][d[iZ[bY[djheY[h[XhWbZ[bWh[Yecf[diWWbceZ_Ð-
duce sentimientos de indefensión o predispone al animal a una car sus marcadores epigenéticos. Igual que en los humanos,
conducta inadaptada. El examen del tejido cerebral humano la cocaína causa una fuerte adicción en los animales, por lo
en la autopsia sugiere que el mismo fenómeno podría darse en que su efecto a largo plazo puede estudiarse con facilidad en
las personas. el laboratorio.
Mi madre y yo
§ø³¸äxäîøl¸äßxD§ąDl¸ä`¸³ßDîDäD³ßxþx§Dl¸Ôøx§DxÇx- ben los cuidados de una madre relajada y atenta, muchos de los
³yî`DÇøxlx³øßx³§D`¸³lø`îDDîxß³DÍ`¸x
x`î¸jÔøx ßøǸäxlxäDÇDßx`xßE³j§¸Ôøxlx¥DßED§¸äD³D§xäEä
D`îùD丧¸x³x§`xßxU߸lx§D`ßDjä³D§îxßDߧDä`y§ø§Däxß³D- `D§Dl¸äÍøD³l¸xäîDä`ßDäDløßx³jäx`¸³þxßîßE³Däøþxą
§xäjÇøxlxîßD³äîßäxlxø³Dx³xßD`¹³D§Däøx³îxÍøD³l¸ x³DlßxäîßD³Ôø§DäāDîx³îDäÍ%¸¸UäîD³îxjä§Dä`ßDä`ßx`x³
³D`x³§Dä`ßDäj§¸äx³xäǧ`Dl¸äx³§Dßxø§D`¹³lx§Dßxä- `¸³ø³DDlßxÇDäþDāîxx߸äDjäøäx³xääx§§x³DßE³lxäx¶D-
ÇøxäîDlx§D³D§D§xäîßyäǸäxx³äx¶D§xäx`¸³x
x`- §xäxç`øD³l¸Dløßx³jäx`¸³þxßîßE³îDUy³x³`ølDl¸-
Ul¸ßj§Dä`øD§xäDøx³îD³§Däx³äU§lDlD§xäîßyäÍ3§Dä`ßDäßx`- ras nerviosas y negligentes.
"D`à D`ày`yĂåy "D`à D®DmùàDĂåy
`¹´ÿyàïyy´ù´D®Dmày `¹´ÿyàïyy´ù´Èà¹y´ï¹à
Dïy´ïDĂày¨D¦DmD D´å¹å¹Ăȹ`¹Dïy´ï¹
"D`à D´D`y`¹´åy·D¨yå
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¨`y¨¹®Dïyà´¹ "D´y¨y´`D®Dïyà´D
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Las hormigas
y el arte
de la guerra
Las batallas entre estos insectos guardan una sorprendente
semejanza con las operaciones militares de los humanos
Mark W. Moffett
L
ąĉüċĈÿąĉąĉùąăø÷ĊÿûĄĊûĉüąĈă÷ĄċĄ÷
maraña por todas partes. La escala de la
violencia resulta casi incomprensible, la
batalla se extiende más allá de mi cam-
po visual. Decenas de miles de indivi- métodos de ataque y decisiones estratégi-
cas sobre cuándo o dónde empezarlo.
duos avanzan con rapidez y determina-
ción suicida. Entregados por completo DESCONCIERTO Y PÁNICO
a su deber, los luchadores jamás abandonan una confron- Esa semejanza en las artes bélicas resulta
sorprendente, si se tienen en cuenta las
tación, ni siquiera ante una muerte segura. Los enfrenta- acusadas diferencias entre hormigas y hu-
mientos son breves y brutales. De repente, tres soldados de manos, no solo en lo que respecta a la bio-
infantería agarran un enemigo y lo sujetan hasta que uno de logía sino también a la estructura social.
Las colonias de hormigas están formadas
los guerreros más grandes llega y parte el cuerpo del prisio- sobre todo por hembras estériles, que ha-
nero, que acaba destrozado y sangrando. cen de obreras o soldados; unos pocos ma-
chos de vida corta, que hacen de zánganos,
y una o más reinas fértiles. Los miembros
Me retiro con mi cámara, jadeando en el aire húmedo de la de la colonia operan sin necesidad de una jerarquía de poder o
selva malaya, y me recuerdo a mí mismo que estos rivales son de un líder permanente. Aunque las reinas son el centro de la
hormigas, no humanos. He pasado meses observando estas vida de la colonia, ya que se encargan de la reproducción, no li-
muertes con una cámara \eje]h|ÐYW que uso a modo de lupa, deran las tropas ni organizan el trabajo. Las colonias se hallan
pero a menudo me olvido de que lo que estoy contemplando más bien descentralizadas, con obreras que apenas saben tomar
son insectos minúsculos (en este caso se trata de Pheidologeton decisiones de combate por sí solas. Decisiones que, por otro
diversus, la hormiga merodeadora). lado, resultan efectivas cuando las hacen en grupo, sin que me-
Desde hace tiempo se sabe que algunas especies de hormi- die ningún tipo de supervisión. Este proceso se denomina inte-
gas (y de termitas) forman colonias muy cohesionadas cuyos ligencia colectiva. A pesar de la divergencia entre los estilos de
miembros se cuentan por millones y exhiben costumbres com- vida de hormigas y humanos, ambos luchan contra sus enemi-
fb[`Wi$;djh[iki^|X_jeiZ[ijWYWdbWh[]kbWY_dZ[bjh|ÐYe"[b gos por muchas de las mismas razones económicas, como el ac-
mantenimiento de la salud de la comunidad, la domesticación ceso a lugares habitables, el territorio, el alimento o incluso la
de cultivos y, lo que quizá resulte más fascinante, la guerra: un mano de obra, ya que algunas especies de hormigas secuestran
feroz enfrentamiento entre dos grupos en el que ambos se a sus rivales para usarlas como esclavas.
arriesgan a la destrucción total. En este y otros sentidos, los Las tácticas de guerra de las hormigas dependen de lo que se
JOHN DAWSON; ASESOR: STEFAN COVER, MUSEO DE ZOOLOGÍA
humanos modernos nos parecemos más a las hormigas que a halle en juego. Algunas ganan la batalla mediante una ofensiva
nuestros parientes vivos más cercanos, los simios, que viven YedijWdj["begk[deih[Yk[hZWbWWÐhcWY_dgk[^_pe[b][d[hWb
en sociedades mucho más pequeñas. Sin embargo, hasta hace Sun Tzu en su libro El arte de la guerra, del siglo Čÿ a.C.: «La ra-
COMPARATIVA, UNIVERSIDAD DE HARVARD
poco no se había apreciado la semejanza entre las tácticas de pidez es la esencia de la guerra». De tal modo actúan las hormi-
guerra de las hormigas y las nuestras. En ambas especies, la gas legionarias, cuyas especies viven en regiones cálidas de todo
guerra conlleva una asombrosa variedad de elecciones sobre el mundo, y también otras especies, como la hormiga merodea-
dora asiática. Cientos, o incluso millones, de sus individuos avan-
zan ciegamente en una falange compacta, atacando a presas y
Hormigas merodeadoras de una colonia atacan a un enemigos a medida que se cruzan con ellos. En Ghana fui testi-
miembro de una colonia rival, al que van desmembrando go del avance de una alfombra hirviente de obreras de la hormi-
lentamente. ga legionaria Dorylus nigricans a través de una zona de unos
EN SÍNTESIS
¨ù´¹åïȹåmy¹à®Då viven en colonias muy cohesionadas "DåÿDàDmDåïE`ï`Dåmy`¹®UDïy utilizadas por estos "D `DÈD`mDm de las hormigas
que albergan miles o millones de individuos. Estos se pelean con insectos muestran un asombroso parecido con las estra- para la guerra se ve potenciada
los de otras colonias por la obtención de recursos como el terri- tegias bélicas de los humanos, que varían según lo que por su inquebrantable lealtad a
torio o el alimento. se halle en juego. la colonia.
Franks, actualmente en la Universidad de Bristol, han demos- rando Lucas Partridge, de la Universidad de Bath, cuando las
trado que la violencia organizada de las hormigas legionarias hormigas amazonas actúan así, están siguiendo otra estrategia
y merodeadoras concuerda con la ley del cuadrado de Lanches- de Lanchester, también observada en los humanos. Esta ley
ter, una de las ecuaciones que el ingeniero Frederick Lanchester lineal, como se la denomina, propugna que cuando las batallas
desarrolló en la Primera Guerra Mundial para comprender las se desarrollan mediante enfrentamientos individuales (aquí fa-
posibles estrategias y tácticas de las fuerzas opositoras. Sus cálcu- vorecidos por la sustancia que provoca el caos), los mejores com-
los revelaron que, cuando en un lugar se libran múltiples bata- batientes tienen asegurada la victoria incluso cuando el núme-
Entrada sellada: Una hormiga constructora de puertas del género Stenamma (centro) utiliza una piedrecita para impedir que una
hormiga legionaria (izquierda) entre en su nido.
para mantener a los rivales fuera de su territorio. to o espacios habitables por los que valga la pena morir. En tiem-
Controlan hábilmente los grandes espacios entre los árboles feiZ[]hWdYedÑ_Yje[djh[]hkfei"[ijWi^ehc_]Wi"Wb_]kWbgk[
defendiendo unos pocos puntos críticos, como la base de los sus homólogos humanos, preferirán la huida a la lucha.
troncos. De modo estratégico, ubican en las copas «nidos ba- Las sociedades de tamaño modesto poseen más recursos
rracón», hechos con hojas, desde donde distribuyen las tropas para defender, pero aún no son lo bastante grandes como para
hacia los lugares donde más se necesitan. poner en riesgo sus tropas. Las hormigas melíferas del suroes-
El despertar
del pensamiento
En cooperación con antropólogos, genetistas y neurólogos,
los arqueólogos intentan reconstruir los orígenes de nuestro
pensamiento y, con ello, el inicio de nuestras sociedades,
tradiciones y culturas. Tales investigaciones constituyen
los pilares de un prometedor enfoque multidisciplinar:
la arqueología cognitiva
Karin Schlott
P
ċûúûćċûĊąúąûăĆûĐ÷ĉûþ÷ùûúąĉăÿĂĂąĄûĉďăûúÿą mienzos del Paleolítico, el encéfalo había ido incrementando
de años con un Australopithecus que, al mordis- paulatinamente su tamaño; algunas regiones cerebrales sufrie-
quear con mala fortuna una nuez, se partió un dien- hedYWcX_ei][dj_YeioWkc[djWhedik[ÐY_[dY_W$JeZe[bbef[h-
te. Quizá fue entonces cuando la necesidad des- mitió el desarrollo de facultades cognitivas extraordinarias: la
pertó al ingenio y, por vez primera, aquel remoto YWfWY_ZWZfWhWbWfbWd_ÐYWY_d"[bZ_i[eYh[Wj_lee[b^WXbW"Wi
antepasado nuestro decidió emplear una piedra para cascar el como la competencia para aprender nuevas técnicas y combi-
fruto. Y, ¿quién sabe?, tal vez al hacerlo se desprendiesen del gui- narlas. Todas esas facultades se encuentran asociadas a la evo-
jarro algunas esquirlas con las que, más tarde, aprendió a des- lución de nuestro cerebro.
membrar presas. Sin embargo —y a menos que, a falta de haber hallado otra
Así o de manera semejante pudo haber comenzado la histo- clase de objetos, contemos con una visión distorsionada de aque-
ria cultural del hombre. En cualquier caso, con tan revolucio- lla época—, parece que nuestros predecesores se limitaron du-
naria innovación (la fabricación intencionada de una herra- rante largo tiempo a aplicar dichas capacidades a la fabricación
mienta) dio comienzo el Paleolítico. Por entonces ya habían de utensilios de piedra y al uso del fuego. La diversidad cultu-
transcurrido unos cuatro millones de años desde que nuestros ral comenzó hace 300.000 años, después de que, según los cálcu-
primeros antepasados se separaron de la rama de los simios an- los actuales, el 90 por ciento de la historia evolutiva del hom-
tropomorfos y evolucionaron hasta convertirse en prehomíni- bre ya hubiera transcurrido. Entonces, nuestros antepasados
dos, o australopitecinos. Más tarde, de estos descenderían los aprendieron nuevas técnicas líticas, inventaron un pegamento
primeros homínidos que, con Homo ergaster, abandonaron el sintético y elaboraron diversos tipos de herramientas hasta en-
continente africano hace 1,9 millones de años. tonces desconocidas.
El proceso evolutivo que condujo a la aparición del hombre Hace 40.000 años, mucho después de que Homo sapiens ya
moderno no siguió una trayectoria lineal. Entre los australopi- hubiera adquirido sus rasgos anatómicos modernos, llegó a
tecinos se encontraban también especies más robustas, los Europa una revolución cultural. Provenientes de África, los hu-
«hombres cascanueces», cuya evolución continuó por una sen- manos comenzaron a agruparse en sociedades complejas, crea-
da independiente de la del género Homo. En vez de utensilios ron objetos artísticos, pintaron las paredes de sus cavernas y
líticos, usaban sus poderosas mandíbulas para partir los alimen- entonaron las primeras melodías musicales. Poco después, Homo
tos duros. Finalmente, solo los homínidos consiguieron adap- sapiens había desplazado a los últimos representantes contem-
tarse al entorno; un desarrollo que culminó hace 200.000 años poráneos de su propio género, los neandertales.
con la aparición de Homo sapiens.
Esos millones de años de evolución establecieron los requi- Karin Schlott es profesora de arqueología
sitos indispensables para el salto cultural del hombre. Desde co- en la Universidad de Heidelberg
PA L E O G E N É T I C A
Genética
de la cognición
La secuenciación del genoma humano avivó la esperanza de entender
mejor el desarrollo cognitivo de nuestra especie. Hoy, sin embargo,
las principales preguntas siguen aún sin respuesta
Miriam Noël Haidle
A
ĂąĂ÷ĈýąúûĂąĉúąĉİĂĊÿăąĉăÿĂĂąĄûĉúû÷ĺąĉ"ûĂùûĈûøĈąþċ-
mano ha triplicado su tamaño y, con ello, su complejidad neu-
ronal. Durante décadas, los expertos han intentado desentrañar
bWiYWhWYj[hij_YWiWdWjc_YWioÐi_eb]_YWiZ[bW[lebkY_d
Y[h[XhWb$BW][dj_YW^WXWfhec[j_Zeh[l[b|hi[bWi0[d(&&)
i[Z[iY_\h[b][decWYecfb[jeZ[b^ecXh[ceZ[hde1ZeiWeic|ijWhZ[
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,& fehY_[dje$JhWikdZ[Y[d_eZ[]hWdZ[iWlWdY[i"bW][dj_YWe\h[YWkdd-
c[he_dYWbYkbWXb[Z[fei_X_b_ZWZ[ifWhWi[]k_hbWf_ijWWbeh_][dZ[bWYe]d_-
ción humana.
=hWY_WiWbWYecfWhWY_dZ[dk[ijhe][decWYed[bZ[beifh_cWj[ioejhWi
[if[Y_[iWd_cWb[i"bei[nf[hjei[dfWb[e][dj_YW^WdfeZ_ZeYedÐhcWhgk[[b
][decW^kcWde^WYWcX_WZe[ddkc[heieiWif[YjeiWbebWh]eZ[bW[lebk-
Y_d$;c[h]_[heddk[lei][d[i"ejheiZ[iWfWh[Y_[hedoWb]kdeii[ceZ_ÐYW-
hed$I_d[cXWh]e"bWiYedi[Yk[dY_WiZ[[ijeiYWcX_eiWddei[Yecfh[dZ[d
X_[d1ieXh[jeZe"[dbegk[h[if[YjWWbW\kdY_edWb_ZWZZ[bei][d[iWieY_WZei$
IedfeYWibWieYWi_ed[i[dbWigk[i[^Wd[njhWZeYedYbki_ed[iZ[Ðd_j_lWi"
EN SÍNTESIS Yece^WeYkhh_Ze[d[bYWieZ[bei][d[igk[YedjhebWdbeih[Y[fjeh[ieb\Wj_-
lei[dWb]kdeifh_cWj[io"[dfWhj_YkbWh"[d[b^ecXh[$>eoiWX[ceigk[bW
Aunque hoy sabemos que el genoma hu-
mano ha cambiado de diversas maneras a [lebkY_dh[Zk`eikdc[he$I[Yh[[gk[[bbeeX[Z[Y[Wgk[dk[ijheiWdj[fW-
lo largo de la evolución, el origen de dichas iWZei\k[hedZ[f[dZ_[dZeYWZWl[pc[deiZ[bi[dj_ZeZ[beb\Wje"jWdjefWhW
®¹m`D`¹´yå`¹´ï´úDåy´m¹ù´®åïyà¹Î buscar comida como para interaccionar con otros miembros de su especie.
Se conocen numerosos genes relacionados IWX[ceijWcX_dgk[[dbW^_ijeh_Wj[cfhWdWZ[bW^kcWd_ZWZWfWh[Y_
`¹´D`ù¨ïDmyå`¹´ïÿDåÎåïDåjå´y®UDà- kd][dgk[_cfb_YkdWdejWXb[c[`ehWfWhWdk[ijheih]Wdeii[dieh_Wb[i$
¹jÈDày`y´¹Uymy`yàDD`ï¹àyå®Eå`¹®- 9ecejeZeibeiYWjWhh_dei"[b^ecXh[fei[[[dbWh[j_dWjh[if_]c[djeigk[
Ȩy¦¹åÕùy¨¹åm`ïDm¹åȹàù´ú´`¹y´Î fei_X_b_jWdbWl_i_dZ[bYebeh$;bh[ijeZ[beicWc\[hei"[dYWcX_e"iebeYk[d-
jWdYedZei$9WZWkdeZ[[ijeif_]c[djei[ii[di_Xb[Wkd_dj[hlWbeZ[bed-
Genes únicos
En el núcleo de cada célula somática
Secuencia HAR1
se encuentra toda nuestra herencia
Actúa sobre el cerebro y, bajo
genética, repartida en 23 pares de ciertas condiciones, resulta
cromosomas. Cada cromosoma cons- necesaria para el desarrollo
ta de una cadena de ácido desoxirri- de la corteza cerebral, muy
bonucleico (ADN), cuya estructura desarrollada en Homo sapiens.
toma la forma de una doble hélice.
En ella se suceden las bases adenina, Genes FOXP2 y SRPX2
guanina, citosina y timina, dispuestas Facilitan la articulación
en pares cuya secuencia determina y el habla.
toda la información genética. Ciertas
porciones de esta cadena, denomina- Gen MAOA
lDäx³xäj`¸l`D³Ç߸îx³Däçxäî¸ä Controla el metabolismo
de los neurotransmisores.
constituyen en torno al 1,5 por ciento
del genoma. Poseemos más de
Gen ASPM
20.000 genes, aunque se desconoce
Controla el tamaño
el número exacto. Algunos de ellos cerebral y el desarrollo
desempeñan funciones de especial del habla.
relevancia cognitiva.
]_jkZ[iZ[edZW$IebejhWibWZkfb_YWY_dofeij[h_ehceZ_ÐYW- F[heYed[bj_[cfebb[][bZ[i[dYWdje$7d|b_i_iYecfb[c[d-
Y_dZ[b][dgk[YedjhebWXWbWl_i_dZ[bWibed]_jkZ[iZ[edZW jWh_eiceijhWhedgk["i_X_[d[b][dFOXP2 afecta al desarrollo
c[Z_WiYec[dp[b^ecXh[Wf[hY_X_hbed]_jkZ[iZ[edZWcW- cerebral y conforma las bases neuronales implicadas en el ha-
oeh[i$:[[ijWcWd[hWfkZeZ_ij_d]k_h"WZ[c|iZ[bWpkbo[b XbW"jWcX_d_dÑko[ZkhWdj[bW\Wi[[cXh_edWh_W[dejheih]W-
l[hZ["jWcX_d[bhe`e$;bbeb[f[hc_j_Z_\[h[dY_Wh[dbWZ_i- dei"Yece[bfkbcd"[bYehWpdo[b_dj[ij_de$FehjWdje"de
jWdY_Wbei\hkjeicWZkheiZ[beil[hZ[i"begk[ikfkiekdWl[d- gk[ZWYbWhegk[\[Yjeiikfki_[hedbWickjWY_ed[iZ[Z_Y^e
taja importante en la batalla diaria por la alimentación. ][dfWhWbei^kcWdei"oWgk[[ijWiWfWh[Y[d[dbk]Wh[iZ_ij_d-
EjhWickjWY_ed[igk[ZWdckY^ec|ib[`eiZ[dk[ijhWYec- jeiZ[beieXi[hlWZei[dbW\Wc_b_WA;$7Z[c|i"beijhWijehdei
fh[di_d"fehde^WXbWhZ[Wgk[bbWigk[Z[iYedeY[ceifehYec- [dbWfheZkYY_do[bWXehWY_dZ[b^WXbWckofeYWil[Y[ifk[-
fb[je$;d[b|cX_jeZ[bWYe]d_Y_d^kcWdW"kd[`[cfbegk[^W Z[dh[c_j_hi[W[ij[][d0Z[iZ[[djedY[i"i[^WZ[iYkX_[hjegk[
h[Y_X_Ze[if[Y_WbWj[dY_dbefhefehY_edWdbWiceZ_ÐYWY_ed[i [d[bfheY[ie_dj[hl_[d[djWcX_dejhei][d[i$FOXP2 no es el
Z[beifWh[iZ[XWi[iZ[b][dFOXP2$;ij[Z[if[hjkd]hWd_d- ][dZ[b^WXbW"i_dekdYecfed[dj[c|iZ[bYecfb[`eYed`kd-
j[hijhWibWi_dl[ij_]WY_ed[igk["[d'//."bei[nf[hjeiZ[b>ei- jeZ[\WYjeh[igk[Yed\ehcWddk[ijhWYWfWY_ZWZfWhW^WXbWh$
f_jWbHWZYb_¢[Z[En\ehZbb[lWhedWYWXeieXh[kdW\Wc_b_Wbed- ;djh[jWdje"bei_dl[ij_]WZeh[i^WdYedÐhcWZegk[FOXP2
Z_d[di["YedeY_ZWZ[iZ[[djedY[iYece»\Wc_b_WA;¼$7kdgk[ defhejW]ed_pbWZ_\[h[dY_WYbWl[gk[i[fWhWHomo sapiens
jeZeiikic_[cXhei]epWXWdZ[f[h\[YjWiWbkZc[djWb"ckY^ei Z[bh[ijeZ[beifh_cWj[ioWi[]khikn_je$;d(&&-"FXeZ[-
de ellos padecían trastornos del habla. Estos se debían a una ceijhgk[beid[WdZ[hjWb[iceijhWXWdbWic_icWiZ_\[h[dY_Wi
ckjWY_dZ[b][dFOXP2gk["[djh[ejheiidjecWi"fheleYWXW ][dj_YWi[dFOXP2gk[[b^ecXh[ceZ[hde$;ijWickjWY_ed[i"
Wbj[hWY_ed[i[d[bYedjhebZ[beicel_c_[djeiZ[bWXeYWo[dbW fk[i"Z[X_[hedZ[ZWhi[^WY[[djh[*&&$&&&o)&&$&&& WeiYece
elaboración mental del habla. cd_ce"ckY^eWdj[iZ[begk[i[ikfedW$
:WZegk[[b^WXbW]kWhZWkdldYkbecko[ijh[Y^eYed[b 9WZWWe"bei[nf[hjei_Z[dj_ÐYWdc|ih[]_ed[i\kdY_edWb[i
Z[iWhhebbeYkbjkhWbZ[b^ecXh["bei[nf[hjei[dfWb[e][dj_YW Z[][d[ih[bWY_edWZeiYed[bZ[iWhhebbeYe]d_j_leZ[b^ecXh[$
Z[B[_fp_]oEn\ehZZ[Y_Z_[hed[d(&&(YecfWhWh[bZ[iWhhe- 7b]kdeiYWcX_ei][dj_Yeii[h[cedjWdWbWXWi[Z[b|hXeb][-
bbeZ[b][dFOXP2[d[bY^_cfWdY"[behWd]kj|d"[b]eh_bW"[b d[Wb]_YeZ[beifh_cWj[i1ejheieYkhh_[hedc|ijWhZ["ZkhWdj[
cWYWYeo[bhWjd$9edÐhcWhedgk["[d[bYWieZ[bi[h^kcW- bW[lebkY_dZ[b]d[heHomo$FeYeWfeYe"i[lWdZ[iYkXh_[d-
no, habían ocurrido tres cambios en la sucesión de pares de Zedk[lWi\kdY_ed[iZ[][d[iobWi_dj[hWYY_ed[igk[[n_ij[d
XWi[i$:eiZ[[iWickjWY_ed[iWfWh[Y_[hedZ[ifkiZ[gk[bW [djh[[bbei$F[he"[d[bfheY[ie"iebe^[ceifeZ_ZeZWhWb]efeh
bd[WZ[bY^_cfWdYi[i[fWhWi[Z[bW^kcWdW$;ij[][dik\h_ Y_[hje0de[n_ij_kdWd_YWceZ_ÐYWY_d][dj_YWgk["Z[iZ[
WZ[c|ikdW\k[hj[i[b[YY_d"begk[i_]d_ÐYWgk["]hWY_WiWZ_- kdfkdjeZ[l_ijWYe]d_j_le"deii[fWhWi[Z[dk[ijhWi[if[Y_[i
chos cambios, nuestros antepasados pudieron adaptarse me- hermanas.
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`ehWbc[Z_e$;d(&&("Wb]kdWi[ij_cWY_ed[ifWh[YWd_dZ_YWh
gk[jWb[iceZ_ÐYWY_ed[i^WXhWdj[d_Zebk]WhZkhWdj[beib- 0 2 3
2 $ 3
j_cei(&&$&&&Wei"fehbegk[i[[dYedjhWhWdb_]WZWiZ[cW-
The derived FOXP2 variant of modern humans was shared with neandertals. »!ÍDæÒr
nera muy directa al éxito cultural del hombre anatómicamen- rÜD»r§Current Biologydè«»®Öd§»oä®d§«èr¡OÍrfräððÖ»
j[ceZ[hde$;b»][dZ[b^WXbW¼i[^WbbWXWZ[h[f[dj[[dXeYW Genetic basis of human brain evolution. » »<Dr§frÍd%»$rr
«OÍ«èë
»5»"D§
de todos. en Trends in Neurosciencesdè«»Þ®d§»o®ädfZr¡OÍrfräððs»
La evolución
cerebral
de los homínidos
Emiliano Bruner
EN SÍNTESIS
La paleoneurología humana estudia la evolución del Durante los últimos años, las técnicas digitales han La integración de estos avances con otras disciplinas,
sistema cerebral de los homínidos. Los moldes endo- revolucionado el proceso de obtención de moldes. Al como la arqueología o la neurociencia, ha permitido
craneales de las especies fósiles permiten deducir mismo tiempo, el tratamiento estadístico de los datos formular hipótesis novedosas sobre la relación entre
varios aspectos anatómicos del cerebro, como sus ha mejorado de manera notable los modelos evolu- la evolución anatómica del cerebro y los cambios
lóbulos, circunvoluciones o irrigación vascular. tivos del sistema cerebral. cognitivos en el género Homo.
1. Mediante tomografía computarizada 2. Se ensamblan luego las secciones 3. Por último, se obtiene el molde digital
se obtienen secciones bidimensionales para generar la reconstrucción virtual de la cavidad endocraneal (verde), con
del cráneo fósil. del cráneo. una precisión de décimas de milímetro.
cos o químicos demasiado agresivos. Solo si un fósil se encon- co (anchuras, longitudes, etcétera), como ha venido haciéndo-
traba muy fragmentado resultaba sencillo elaborar el molde, se durante dos siglos de estudios antropométricos, hoy se
pero entonces este no aportaba demasiada información. Y, ante jhWXW`WYedceZ[bei][ecjh_YeiZ_]_jWb[i$;ijeii[WdWb_pWd
un cráneo completo, fabricar un molde y extraerlo sin dañar el luego con métodos de estadística multivariante (un tipo de es-
primero ni deformar el segundo era un proceso que revestía tadística que analiza las correlaciones entre todos los elemen-
]hWdZ[iZ_ÐYkbjWZ[i$9edjeZe"ZkhWdj[[bi_]beĎĎ se desarro- jeiWbWl[pWÐdZ[_Z[dj_ÐYWhbeifWjhed[iZ[[ijhkYjkhWo\kd-
bbWhedjYd_YWiYWZWl[pc[`eh[i$;dkdfh_dY_f_ei[[cfb[Whed ción que se esconden tras un modelo biológico. Este tipo de aná-
cebZ[iZ[o[ie1Z[ifki"i[_djheZk`[hedh[i_dWioYecfk[ijei lisis espacial, denominado morfometría geométrica, constituye
plásticos. Sin embargo, la investigación con moldes físicos siem- en la actualidad el método principal para el estudio de la mor-
pre había limitado de manera considerable el grado de desarro- fología en biología evolutiva.
llo de la disciplina. Hoy, un laboratorio de paleoneurología es un laboratorio de
En este sentido, la paleoneurología vivió una verdadera re- WdWjecWZ_]_jWb0kdYed`kdjeZ[ehZ[dWZeh[iWfb_YWZeiWbWh[-
volución a mediados de los años noventa. Esta llegó de la mano construcción virtual de cráneos y cerebros de especies extintas,
del alto grado de desarrollo que, durante esos años, experimen- que analizan su variabilidad y que investigan los patrones evo-
taron los métodos de obtención de imágenes digitales biomédi- lutivos que han caracterizado los cambios neurales, con especial
cas. La tomografía computarizada y las técnicas de resonancia interés por aquellos con implicaciones cognitivas. Los conoci-
magnética alcanzaron un nivel de difusión que trascendió el ám- mientos necesarios son los de la biología, la paleontología, la
bito de la medicina; de repente, estas técnicas se encontraban al bioestadística y las técnicas digitales de reconstrucción anató-
alcance de cualquier laboratorio anatómico y paleontológico. mica. Todo ello forma parte de lo que ha dado en llamarse bio-
La elaboración de moldes endocraneales experimentó un logía in silico, que, en lugar de emplear modelos animales (in
progreso sin precedentes: por primera vez, podían construirse vivoeÐi_Yegkc_Yeiin vitro), lleva a cabo sus experimentos
moldes digitales sin tocar el fósil. Hoy en día, el proceso de ob- en un ordenador.
tención de moldes es rápido y versátil, y la correspondencia en- En el laboratorio de paleoneurología del Centro Nacional de
tre la anatomía original y la geometría del molde alcanza las dé- Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) de Burgos
cimas de milímetro. Cuando los fósiles se encuentran incom- [cfb[Wcei[ijWijYd_YWiYed[beX`[j_leZ[\ehckbWh^_fj[i_i
pletos o fragmentados, resulta posible emplear aplicaciones novedosas sobre la evolución del cerebro y el cráneo de los ho-
[ijWZij_YWiWÐdZ[c_d_c_pWhbWYecfed[dj[ikX`[j_lWZ[bW mínidos, así como sobre las relaciones anatómicas existentes en-
reconstrucción. A su vez, los moldes digitales pueden copiarse tre ambos. Muchas de las investigaciones que allí desarrollamos
o[dl_Whi[Yed]hWd\WY_b_ZWZ"YedbWil[djW`Wigk[[bbeikfed[ l[hiWdieXh[dk[ijhWfhef_W[if[Y_["Yed[beX`[j_leZ[_dj[hfh[-
para la colaboración entre laboratorios. tar después el registro fósil asociado al género Homo a la luz de
Al mismo tiempo que las técnicas de imagen digital propor- la variabilidad y los procesos evolutivos que han venido caracte-
cionaban nuevas herramientas para la obtención de datos pa- rizando a las especies humanas desde hace dos millones de años.
leontológicos, los avances informáticos revolucionaron también
la morfometría, la disciplina que, a través de la estadística, cuan- GRANDES CEREBROS
j_ÐYWoYecfWhWbWi\ehcWiWdWjc_YWi$;dbk]WhZ[c[Z_h\i_- De todos los datos que pueden extraerse a partir de un molde
camente las distancias entre los puntos de un sistema anatómi- endocraneal, uno de los que más atención ha recibido en el pa-
H. rhodesiensis
H. antecessor
H. sapiens
H. ergaster
H. erectus
A./H. habilis
A. anamensis
A./H. rudolfensis
H. sapiens
A. afarensis A. gahri
A. africanus
P. boisei
A. sediba
P. robustus
P. aethiopicus
P. boisei
A. africanus
sado ha sido el volumen. En parte, ello se debe a las grandes di- Los homínidos más abundantes en el registro fósil pertenecen
ferencias observadas en el volumen cerebral de los mamíferos a los géneros Homo (H), Australopithecus (A) y Paranthropus (P).
y, muy en particular, en el de los primates. De hecho, nuestra La subdivisión de esta familia en especies ha sido objeto de cons-
especie destaca en este sentido: un humano moderno posee en tante debate, por lo que muchas de las relaciones filogenéticas
torno al triple de masa neural que un primate de peso corporal propuestas no pasan de ser meras hipótesis. Las barras indican
fWh[`e$ el período cronológico aproximado en el que se cree que vivió cada
Con todo, no podemos ignorar otro de los factores que han grupo; los cráneos (reconstrucciones digitales) representan algu-
contribuido a aumentar la importancia que tradicionalmente nos fósiles clave de los tres géneros.
se ha asignado al tamaño cerebral: en términos estadísticos, se
trata de un dato aparentemente fácil de calcular. Durante déca-
das, se han llenado cráneos con semillas o se han introducido pacidad craneal empleados en zoología, como los que la calcu-
los moldes correspondientes en agua para medir el volumen lan con respecto al gasto energético u otros parámetros meta-
de la cavidad endocraneal. Aunque hoy en día se emplean mé- bólicos, no suponen en paleontología más que una aportación
todos digitales, a menudo estos tampoco se encuentran exen- estrictamente teórica.
tos de ambigüedades. La mayoría de los restos fósiles se com- Hoy sabemos que, a lo largo de la evolución humana, el pro-
ponen de fragmentos aislados de cráneo, en cuyo caso el volu- ceso de encefalización (el aumento relativo del volumen cere-
men cerebral solo puede calcularse de manera aproximada. Y bral) ha ocurrido en diferentes momentos y, con toda probabili-
si bien existen varios métodos empíricos para extrapolar su va- dad, en líneas evolutivas independientes. Algunas especies solo
beh"[bh[ikbjWZeÐdWblWhWckY^eZ[kdW[ij_cWY_dWejhW"kdW han experimentado un aumento del valor absoluto del tamaño
circunstancia que ha generado encendidos debates sobre la va- cerebral, acompañado de un incremento proporcional del volu-
lidez de las reconstrucciones. men del cuerpo. En otras, por el contrario, solo ha variado el ta-
Tras una época en la que se concedió gran importancia al va- maño del encéfalo, sin cambios corporales. Los australopitecos
lor absoluto de la capacidad craneal, se comenzó a prestar aten- contaban con un volumen cerebral similar o poco mayor al de
ción a su valor relativo. La propuesta, no obstante, desató nuevos los simios antropomorfos actuales, con un promedio de entre
problemas métricos. Por lo general, en zoología suele calcular- 400 y 500 centímetros cúbicos (cc). Los primeros humanos, como
se el volumen cerebral con relación al tamaño del animal. Pero Homo habilis y Homo ergaster, alcanzaban entre 600 y 800 cc.
los estudios paleontológicos adolecen de la limitación usual: no :[^[Y^e"WÐdZ[feZ[h_dYbk_hWHomo habilis en nuestro gé-
disponemos del cuerpo completo, sino solo de fragmentos de d[he"[dikcec[djei[Z[Y_Z_Ð`WhikYWfWY_ZWZYhWd[WbYece
esqueleto. Los métodos empíricos para estimar el peso corpo- el mínimo necesario para considerar humana a una especie; una
ral a partir del esqueleto han desembocado, a su vez, en nuevas suerte de «Rubicón cerebral» que marcase la frontera del géne-
controversias. Por lo demás, otros tipos de mediciones de la ca- ro Homo. Otras especies, como Homo erectus y Homo heidelber-
CORTE SAGITAL
Hueso frontal Hueso parietal
Huellas de la arteria
m
meníngea media
Fosa media
(lóbulos
temporales)
Hueso frontal
Foramina
Fosa posterior
(cerebelo)
Hueso parietal
Hueso occipital
BÓVEDA
Los cráneos no solo permiten reconstruir la cavidad endocraneal cunvoluciones, e incluso el sistema vascular superficial. Estas sec-
(el espacio ocupado por el cerebro), sino también los pasajes (fo- ciones muestran un corte sagital, la bóveda y la base del cráneo
ramina) de nervios y vasos, la forma y la posición de lóbulos y cir- de un hombre moderno.
Lóbulos occipitales
Órbitas
Cerebelo
Estudio de la variabilidad
Para estudiar las diferencias morfológicas entre dos individuos, primero se construyen modelos geométricos simples del cráneo y del
cerebro a partir de los puntos anatómicos de mayor relevancia funcional. Después, se emplean técnicas de estadística multivariante
(que analiza las relaciones de todos los elementos a la vez) para obtener el conjunto de reglas que, por razones de función o de estruc-
îøßDjx³xßD³x§ßxäø§îDl¸D³Dî¹`¸³D§Í0¸ßù§î¸j§DäþDßD`¸³xälx
¸ßDx³îßx§¸ä³lþlø¸äD³D§ąDl¸ääxÇ߸āx`îD³ä¸Ußxø³
espacio de dos o tres dimensiones.
j[hc_dWZWi|h[Wi$BWiZei|h[WiZ[bb[d]kW`[i[ck[ijhWdfhe- YWi$;bbei[Z[X[WbWZ_ÐYkbjWZZ[beYWb_pWhbc_j[iYeckd[io
porcionalmente más anchas en los humanos modernos y en los biológicamente homogéneos de estos lóbulos, caracterizados por
neandertales, algo que quizás apunte a la emergencia de nue- una gran heterogeneidad morfológica y funcional.
vas habilidades cognitivas en estos dos grupos. No obstante, la Al respecto, ya existían algunas hipótesis sobre un aumento
_Z[dj_ÐYWY_dZ[jWb[iYWcX_eideh[ikbjWjWdYbWhW"oWgk[kdW relativo de las áreas parietales en el género Australopithecus,
misma área cerebral puede hallarse involucrada en varias fun- lo que se habría debido a una retrocesión de un surco poste-
Y_ed[i$;bb[d]kW`["feh[`[cfbe"]kWhZWkdW[ijh[Y^Wh[bWY_d rior a estas, el sulcus lunatus. También se han hallado indicios
con nuestra capacidad para usar las manos. Al respecto, una de un incremento de las proporciones parietales —lateralmen-
pregunta abierta es si los simios antropomorfos cuentan con al- te, sobre todo— en Homo habilis (un grupo bastante debatido
gún equivalente de estas áreas humanas. y que quizás integrase a varias especies, no todas ellas perte-
A pesar del interés histórico que han suscitado las áreas aso- necientes al genero Homo). También en los neandertales se ob-
Y_WZWiWbb[d]kW`["bWigk[c|iWj[dY_d[ij|dh[Y_X_[dZeZk- serva una ampliación lateral de las regiones parietales inferio-
rante los últimos son los lóbulos parietales. En el estudio de es- res y superiores.
tas regiones y del sistema frontoparietal se centra otra de las Sin embargo, es en los humanos modernos donde el cambio
bd[WiZ[jhWXW`eZ[dk[ijhe]hkfe"oWgk["Yecel[h[cei"ik en las proporciones parietales reviste una magnitud tal como
evolución parece guardar una estrecha relación con la del cere- fWhWW\[YjWhWbW][ec[jhWZ[bY[h[Xhe[dikYed`kdje$7b]kdei
bro de Homo sapiens. cráneos fósiles de hace entre 100.000 y 150.000 años, hallados
El cerebro del hombre moderno posee una forma particular- en África Oriental y Oriente Próximo, ya evidencian esta mor-
mente esférica, debida, sobre todo, a la geometría de sus áreas fología. Sin embargo, otros fósiles africanos algo más antiguos
parietales. Esta diferencia con las especies extintas no obedece ogk[fheXWXb[c[dj[f[hj[d[Y_[i[dWbWbd[WÐbj_YWceZ[hdW
a un proceso gradual, sino que resulta exclusiva de nuestra es- no presentan estos cambios parietales tan evidentes. Ello sugie-
pecie. Tampoco puede explicarse a partir del proceso de ence- re que el origen de Homo sapiens quizá no se halle vinculado
falización, ya que los neandertales poseían un cerebro incluso de manera tan estricta al origen de un cerebro anatómicamen-
más grande que el nuestro, que, sin embargo, no exhibía dicha te moderno.
geometría globular. ¿Qué aspectos cognitivos podemos asociar a esas áreas pa-
Esa forma aparece como consecuencia de un proceso morfo- rietales? Las más profundas (aquellas que quizá guarden una
genético muy temprano en la vida del individuo, próximo al na- mayor relación con el cambio geométrico del cerebro moderno,
cimiento. Se trata de una etapa del desarrollo inexistente en los como el surco intraparietal) se hallan vinculadas a nuestra ca-
chimpancés o en los neandertales. A pesar de haber reconocido pacidad de simulación. A partir de la interacción entre la vista
desde hace tiempo que las áreas parietales humanas poseen com- y las actividades manuales, estas regiones representan una in-
ponentes diferentes de las que se observan en otros primates, terfaz entre el mundo externo y el interno. Generan un sistema
WddeZ_ifed[ceiZ[YecfWhWY_ed[iZ[jWcWec|i[if[YÐ- de coordenadas exterior y otro del individuo, los cuales compo-
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DE SARROLLO COG NITIVO
Polifacético, flexible
e ingenioso
De entre todas las especies que han aparecido a lo largo de la evolución
del género Homo, solo Homo sapiens ha conseguido perdurar
hasta nuestros días. ¿A qué se debe nuestro éxito?
xxxxxxxx
L
ąĉþċă÷ĄąĉĄąĉ÷ú÷ĆĊ÷ăąĉ÷ĂûĄĊąĈĄąúûă÷ĄûĈ÷ûĎĊĈ÷ąĈúÿĄ÷-
ria. Poblamos todos los continentes de la Tierra, somos capaces
de sobrevivir en cualquier zona climática y hemos explorado in-
cluso el espacio. Nuestras construcciones abarcan desde simples
chozas hasta gigantescos rascacielos. Igualmente diversa es nues-
tra dieta, que, gracias a la cocción, la fermentación o la molienda, incluye ali-
c[djeigk[Z[ejheceZeZ_][h_hWceiYedZ_ÐYkbjWZ$
El hombre es también un ser social. Nuestras comunidades con un pulgar que permitía un mecanismo de agarre fuerte y
abarcan desde estructuras de convivencia duraderas, como la preciso.
familia, hasta redes laxas que incluyen millones de miembros. Poco a poco, el cerebro aumentó de tamaño (de poco más
En estos grupos intercambiamos sin cesar información de todo de 500 centímetros cúbicos en los primeros representantes del
tipo y grado de complejidad; ya sea de forma directa, a través género Homo, alcanzaría una media de 1350 centímetros cú-
de palabras o gestos, o indirecta, con textos y dibujos. El ser hu- bicos en el hombre moderno). Esa transformación requirió in-
mano se caracteriza, ante todo, por usar herramientas. Con una crementar de manera notable el consumo de energía. Al mis-
piedra clavamos postes en el suelo. Mediante otras máquinas mo tiempo, sin embargo, se redujo la longitud del aparato di-
fabricamos piezas de metal y plástico con las que ensamblamos gestivo, por lo que nuestros antepasados se hicieron cada vez
después automóviles y ordenadores. más dependientes de una dieta que debía ser tan energética
Al preguntarnos por las características que otorgan a Homo como de digestión fácil. Con este telón de fondo, podríamos
sapiens su particular puesto en el reino animal, destaca la enor- pensar que los primeros representantes del género Homo no
c[Ñ[n_X_b_ZWZZ[bWgk[^WY[]WbWdk[ijhW[if[Y_[$;ijWi[Z[X[" gozaban de las condiciones más prometedoras para garanti-
sobre todo, a tres factores: una constitución física que nos ca- zar el éxito en la árida sabana africana. No obstante, fueron
pacita para llevar a cabo actividades de toda clase, un elevado ellos los primeros que, hace dos millones de años, abandona-
grado de desarrollo de las capacidades cognitivas y, por último, ron África.
una notoria necesidad de crear cultura. Aunque, a primera vista, algunos de los cambios físicos que
El género Homo existe desde hace unos dos millones de años. ocurrieron durante la evolución no impresionen demasiado,
En comparación con todo lo anterior, sus primeros represen- muchos de ellos fueron los responsables del fascinante aumento
tantes no nos causarían demasiada impresión. Al igual que sus que experimentaron nuestras capacidades cognitivas. Esas trans-
antepasados, los australopitecinos, caminaban erectos. Las po- formaciones abrieron todo un abanico de posibilidades en la
derosas mandíbulas de sus ancestros se habían reducido, lo que f[hY[fY_di[dieh_Wb"WiYecekdWZ_l[hi_ÐYWY_d[d[bYec-
les confería un aspecto menos amenazador. Su constitución portamiento social desconocida hasta entonces. Con ello, cier-
corporal se adecuaba más a la resistencia que a la fuerza físi- tas zonas de un cerebro cada vez más voluminoso se especiali-
ca. Y sus manos, en unos brazos cada vez más cortos, contaban zaron en la concatenación de procesos mentales, en la evalua-
ción emocional del entorno o en la elaboración y desarrollo del
lenguaje. Sin embargo, los cráneos fósiles no permiten recons-
truir sino de forma vaga la evolución de la estructura cerebral
[véase «La evolución del cerebro de los homínidos», por Emi-
liano Bruner, en este mismo número], por lo que, hoy por hoy,
aún desconocemos si la remodelación del cerebro trajo consigo
de inmediato un cambio de su función.
Los primates suelen tener menos descendencia que otros
mamíferos de tamaño similar. Sus períodos de gestación y lac-
tancia son también más largos. A lo largo de la evolución hu-
mana, la infancia (el período en que las crías dependen de la
protección de los padres) y la adolescencia (una época de gran
independencia) fueron alargándose de manera progresiva. Es-
tas etapas se caracterizan por la facilidad con la que los jóve-
nes adquieren experiencia y aprenden formas de comporta-
AFRONTAR PROBLEMAS
BWiYWhWYj[hij_YWijWd[if[Y_Wb[iZ[bZ[iWhhebbeYkbjkhWbobWÑ[-
xibilidad del género Homo se hacen patentes en su manera de
manipular herramientas. El empleo de utensilios no solo brin-
dó nuevas posibilidades, sino que planteó también todo un de-
safío intelectual.
El empleo de herramientas no es, sin embargo, exclusivo del
hombre. Si un chimpancé desea comer una nuez, se apartará
durante un tiempo de su objetivo para buscar una piedra con
la que cascar el fruto. La capacidad para resolver problemas
de manera indirecta rara vez forma parte del comportamiento
_dij_dj_leYeZ_ÐYWZe[dbei][d[i1YeceeYkhh[YedWb]kdWi
avispas de arena, que emplean pequeñas piedras para cubrir
los nidos de sus crías. Por lo general, los animales toman deci-
i_ed[iYe]d_j_lWi0Wb]kdeiZ[bÐd[i"YkWdZeXkiYWdWb_c[dje
cerca del fondo marino, se cubren el morro con esponjas para
proteger esa zona del cuerpo, muy sensible. Son también nu-
merosos los animales que emplean herramientas para buscar
comida. Y los simios antropomorfos van más allá: utilizan pie-
ZhWiehWcWiYedejheiÐd[i"Yece_dj_c_ZWh"Z[\[dZ[hi["Z[i-
plazarse, limpiarse o jugar.
En el año 2007 se documentó un comportamiento asombro-
so en nuestros parientes más cercanos, los chimpancés: duran-
te la persecución de otros primates, se observó cómo empleaban
palos a modo de lanzas; en otras ocasiones, se les vio usar ramas
para buscar tubérculos y raíces. Hasta entonces, se consideraba
que tales comportamientos eran exclusivos de los humanos.
Sin embargo, hay una facultad mental fundamental que, has-
ta ahora, no ha sido documentada en ningún otro animal: el
Continúa en la página 85
SCHÖNINGEN SPEAR VII, 1997 © PETER PFARR NLD.JPG
EN SÍNTESIS
El género HomomyåDà๨¨ºù´Dy´¹à®yyāU¨mDmmy`¹®È¹àïD®y´ï¹
Ă ù´Då D`ù¨ïDmyå `¹´ïÿDå ú´`DåÎ
Un salto clave åy Èà¹mù¦¹ `ùD´m¹ y¨ ¹®Uày DmÕùຠ¨D ´¹ïDU¨y DU¨-
mDm my ùï¨ĆDà ù´D yààD®y´ïD ÈDàD DUà`Dà ¹ïàDÎ Cerca de Schöningen, los arqueólogos recuperaron en 1995 ocho
La ornamentaèDåÈ´ïùàDåàùÈyåïàyåDïyåïùD´¨Dyāåïy´`Dmyù´D lanzas de madera de hasta 2,5 metros de longitud entre huesos de
`¹´`yÈ`º´ `¹®È¨y¦D my¨ ®ù´m¹Î animales. Unos 400.000 años antes, un grupo de cazadores había
abatido allí una manada de caballos salvajes.
3
Orrorin PRIMEROS HOMÍNIDOS
tugenensis ~ 800.000
80 años
Australopitecinos robustos PRIMEROS HUMANOS
(«hombres cascanueces»)
Género Homo
3 ¡Hágase la luz!
H. erectus
"¹åDàÕùyº¨¹¹ååïúD´¨¹åÈà®yà¹å´m`¹åmy¨ùå¹my¨ùy¹
D`y~ĈĈÎĈĈD·¹åjy´y¨ĂD`®y´ï¹ÈD¨y¹¨ ï`¹my¨Èùy´ïy
my¨Då¦Dåmy D`¹Ujy´åàDy¨Î"¹ååùy´ïyåÿyåï¹åmDïD´ 1
myD`yĈÎĈĈĈD·¹åÎ
~ 2,6 Ma
~ 300.000 6 8
4 ~ 200.000 7 10
~ 40.000
~ 400.000
12
H. sapiens ~ 100.000 ~ 18.000
Hombre de Denisova
9
H. neanderthalensis ~ 40.000
11 ~ 30.000
H. heidelbergensis
>$Óeh[i_[di_i
Óeh[i_[di
[ _i
1 .000
18
~ 18.000
H. erectus 1
13
INDUSTRIA LAMINAR
MUSTERIENSE Producción estandarizada
ACHELENSE Preparación de los núcleos de lascas laminares.
¹´ùàD`º´my para la obtención de lascas Mejor aprovechamiento
OLDUVAYENSE grandes lascas para de tamaño y formato de la materia prima. Con
Primeras la obtención de útiles predeterminados. la misma cantidad de
herramientas de bifaciales, como el Producción de lascas material se obtiene más
piedra. Lascas hacha de mano. estandarizadas. ¨¹`¹àïD´ïyÎ
`¹´¨¹å
cortantes.
Evolución paralela
El esquema muestra la evolución paralela de la vayenses que datan de la misma época que algu- humanos modernos debido a su mayor tamaño
INVESTIGACIÓN Y CIENCIAj38%%Î2
3
tecnología lítica y las capacidades cognitivas nas industrias laminares. corporal. Homo habilis fue el primer fabricante
de nuestros ancestros según el registro arqueo- En cuanto a los homínidos, el esquema solo conocido de útiles de piedra y el primer repre-
lógico. Las fechas indican el momento de apari- muestra la especie contemporánea de cada tipo de sentante de nuestro género. El interrogante en su
ción de cada tipo de industria, así como de cada tecnología lítica, sin connotaciones genealógicas cronología se debe a que los restos fósiles atribui-
especie de homínido (Ma denota millones de años; de ningún tipo. La cifra bajo el nombre de cada es- bles al género Homo se documentan a partir de los
ka, miles de años). La aparición de una nueva pecie indica la capacidad craneana media de cada 2,4 millones de años, pero estos no pueden asig-
industria lítica no implica la desaparición de la una, en centímetros cúbicos. Homo neandertha- narse de manera inequívoca a Homo habilis sino
anterior. Por ejemplo, se han hallado útiles oldu- lensis presentaba una capacidad mayor que los hasta hace unos 2 millones de años.
La invención cidad del lenguaje hace, como mucho, 400.000 años. Sin em-
bargo, si aquellas habilidades se transmitieron por medio del
del pegamento habla constituye una cuestión abierta al debate. En todo caso,
la sobresaliente capacidad de intercambiar información, ya fue-
Los representantes europeos del género se por medio de palabras o de imágenes, permitió continuar
'253$2%<%2%?2%3'Ý22'ÊcaracolasËè'253"$73'217'")'52'""372ÊflechaË
Homo fueron grandes innovadores. Hace acumulando conocimiento.
200.000 años ya fabricaban pegamento o =hWY_WiWikYedij_jkY_dWdWjc_YWoWbWÑ[n_X_b_ZWZgk[
a partir de la corteza del abedul: al esta proporcionaba, Homo sapiens amplió las posibilidades de
calentar en un hoyo (en una atmós- sus manifestaciones culturales hasta una dimensión inesperada.
fera pobre en oxígeno) fragmentos Hoy, algunos humanos todavía viven en condiciones similares
de corteza, se producía un tipo de a las que imperaban en la Edad de Piedra; otros dirigen multi-
brea. Esta se endurecía al enfriar- nacionales y vuelan alrededor del mundo. Los hombres pueden
se, pero podía volver a calentarse Wb_c[djWhi[Z[\ehcWWkjeikÐY_[dj[e^WY[hbeYedbWWokZWZ[
y ablandarse de nuevo. miles de empleados de la industria alimentaria, del embalaje y
Se han descubierto restos de brea de abedul en varios yaci- de la logística. La variedad de comportamientos que el hombre
mientos paleolíticos de Italia, Francia y Alemania. Otros pega- ceZ[hde[iYWfWpZ[jeb[hWhoikÑ[n_X_b_ZWZfWhWWZWfjWhi[Wb
mentos de la misma época han sido hallados en Siria y, sobre entorno no dependen de su capacidad para crear cultura. Esta
todo, en Sudáfrica. En estos casos, se trata de brea natural es idéntica en todos nosotros. Como especie, los humanos ha-
(betún) o de pegamentos compuestos a partir de una mezcla de Y[cei]WbWZ[kdWÑ[n_X_b_ZWZ[njhWehZ_dWh_W"fehc|igk[Yece
grasa animal, resina vegetal y almagre. individuos podamos, a veces, anclarnos en las tradiciones y des-
En Hornstaad, cerca del lago de Constanza, se ha recupe- echar toda novedad... algo que, sin duda, también forma parte
rado goma de mascar elaborada a partir de brea de abedul y de la adaptabilidad que caracteriza a nuestra especie.
datada en fecha mucho más reciente, entre los años 4400 a.C
y 3500 a.C. (Neolítico tardío). Se desconoce si esta goma fue
x§DU¸ßDlDÇDßD丧Dą¸ääxDäî`DUDD³lxDU§D³lDߧDÍ5D- 0 2 3
2 $ 3
bién Ötzi, el individuo cuya momia fue hallada en los Alpes en
Handbook of paleoanthropology. W. Henke y I. Tattersall (eds.). Springer-Verlag. Heidelberg,
1991, utilizó este pegamento hacia el año 3100 a.C.: las puntas
2007.
lxl¸älxäøäx`Dääxx³`¸³îßDUD³ÇxDlDä`¸³UßxDlxDUx- Working-memory capacity and the evolution of modern cognitive potential: Implications
dul (imagen). from animal and early human tool use. M. N. Haidle en Current Anthropology, vol. 51, n.o S1,
junio de 2010.
L a experimentación científica y la
práctica técnica nos conducen a ve-
ces a lugares inhóspitos y poco acoge-
color negro mate y lo aislé con espuma de
poliuretano, dejando tan solo expuesta
una cara lisa, perpendicular al sol. Con un
lWj_eifehc[jheYkWZhWZeZ[ikf[hÐY_[
sin excesivas complicaciones y en invier-
no, cuando el Sol brilla a pocos grados
dores. Ello se acentúa sobre todo en in- termómetro con dos sondas medí los in- sobre el horizonte y luce durante escasas
vierno, cuando el frío arrecia y nos encon- crementos de temperatura de la cara an- horas. Por otro lado, este experimento
tramos en un gélido taller. Así estaba yo a terior y posterior. Supuse que la tempera- puede realizarse con cualquier material
principios de este invierno, experimentan- tura media del disco era la comprendida Xk[dYedZkYjehZ[YWbeh[if[YÐYeYede-
do a solo 12 oC mientras en el exterior lu- entre las dos lecturas. cido y extenderse en el tiempo. Ello nos
cía radiante nuestra estrella, el Sol. Lo de En una primera aproximación, la tem- f[hc_j_h|bWc[Z_Y_dZ[bWÑkYjkWY_d
radiante no es solo una metáfora. Se trata peratura del disco depende solo de la ra- anual de la radiación térmica efectiva
Z[kdjhc_deY_[djÐYe$;bIebYedij_jko[ Z_WY_dgk[WXiehX[o[bYWbeh[if[YÐYe fWhWdk[ijhWi_jkWY_d][e]h|ÐYW$
una potentísima fuente de radiación en del material, ya que las diferencias de tem- En la actualidad existen captadores
una amplísima región del espectro elec- peratura entre la cara iluminada y la pos- termosolares con rendimientos de más
tromagnético. Las radiaciones que más terior solo vienen condicionadas por la del 80 por ciento. Por tanto, mediante un
contribuyen a caldear el ambiente son las conductividad térmica del material —mo- buen diseño, gran parte de ese calor podrá
ultravioletas, las visibles y, en especial, las tivo por el cual escogí el cobre—. Pero si aprovecharse. Pero, ¿qué tipo de diseño?
infrarrojas. acercamos la mano, comprobaremos que Sin duda, la mejor vía de aproximación a
Miremos al Sol y percibamos su calor, el disco emite calor, es decir, irradia a su la energía solar es la térmica. En concre-
kdÑk`e_d][dj[Z[[d[h]WhWZ_Wdj[gk[ vez parte de la radiación captada. La ab- to, la calefacción por aire caliente, ya sea
feZ[ceiWfhel[Y^Whi_dZ[cWi_WZWiZ_Ð- sorción y la re-radiación del material se- para un mayor confort o para otras apli-
cultades para ganar confort y reducir el rán, pues, factores críticos que deberemos caciones no menos interesantes (evapo-
YedikceobWi[c_i_ed[i$;ijWWÐhcWY_d considerar en este proyecto. Pero eso no es ración y cristalización, cultivo hortícola,
se hace más cierta cuando observamos todo. El disco pierde calor también por secado de ejemplares botánicos, terrarios,
nuestro universo tecnológico más cerca- conducción: por contacto con el aislante y etcétera). Las soluciones técnicas para la
no. Nos hallamos rodeados de materiales con la atmósfera. Para minimizar esta pér- captación de energía radiante, casi incon-
sofisticadísimos, que, combinados con dida, cubrí el disco con una tapa de plásti- tables, oscilan entre dos extremos: capta-
pragmatismo, sentido común y soporte co transparente. ción con almacenamiento de energía y sin
Y_[djÐYe"f[hc_j[dYWfjWhYWdj_ZWZ[ide- Con los datos obtenidos tracé una este. Puesto que una de las condiciones de
tables de energía. Para ello basta con poco ]h|ÐYW0bWj[cf[hWjkhWfWhjWZ['( oC y diseño que nos hemos impuesto pasa por
más de lo que puede encontrarse en un aumentaba de forma gradual hasta supe- una máxima simplicidad, prescindiremos
laboratorio escolar: dos termómetros idén- rar los 40 oC, momento en que desapareció del almacenamiento y nos centraremos en
ticos, a ser posible con una lectura de dé- el tenue sol invernal. bWeXj[dY_dZ[kdc|n_cecko[ÐYWp
cimas de grado, un sensor de tamaño re- Cuando un cuerpo absorbe energía del durante las horas de sol, interrumpiendo
ducido y una inercia térmica mínima. Con sol almacena calor o, mejor dicho, energía el suministro al ocaso.
ello ya podemos abordar un reto ambicio- térmica (que medimos en julios). Ello lo Empecemos por una somera descrip-
so: captar un máximo de calor solar con hace a lo largo de un tiempo, por lo que ción del captador solar. En esencia, este
un estipendio mínimo y un no menos re- resulta más útil conocer la energía por consiste en un elemento que absorbe la
ducido esfuerzo técnico. unidad de tiempo, o potencia, que se mide hWZ_WY_diebWhobWjhWdiÐ[h[WkdÑk_Ze
¿Qué cantidad de energía nos llega del en vatios (julios por segundo). Y en el caso que se encarga del transporte, aire en este
Sol? ¿Cuánta es la energía radiante dispo- de la irradiación solar, la cantidad más caso. Todo ello ocurre al amparo de una
d_Xb[5:WZegk[[ij[fWh|c[jheÑkYjW conveniente es la potencia por unidad de cubierta que impide que la radiación es-
con las estaciones y el estado atmosférico, ikf[hÐY_[m%c2), ya que para saber la po- YWf[oZ_ÐYkbjW[b[d\h_Wc_[djeZ[bi_ij[-
la cuestión es: ¿Cuánta energía podemos tencia captada solo hay que multiplicar ma por contacto y difusión con la atmós-
captar en la práctica? Midamos primero [ijWYWdj_ZWZfehbWikf[hÐY_[Z[bZ_ife- fera; ello aumenta la temperatura interior
el calor que podemos acumular por uni- sitivo empleado. Los resultados de la ex- por efecto invernadero y establece una
ZWZZ[ikf[hÐY_[$FWhW[bbekj_b_Ykd]hWd posición de esa masa de cobre me demos- circulación, por convección, del aire calen-
disco de cobre, de 16 kilos. Lo pinté de traron que podemos captar centenares de tado. Además, lo queremos construir a un
río
ef
Air
Película de polietileno
Disco de cobre
con el que se mide
la radiación
`D¨¹à `D
Fondo de PVC de 4 mm
Lana de vidrio
0¨D`Dàyy`ïD´ïy
coste mínimo y con materiales de fácil humo u óxido de níquel en polvo mezclado kj_b_pWhkdWXecX_bbW"Z[X[h[ceil[h_ÐYWh
acceso que seleccionaremos mediante un con una mínima cantidad de goma laca. que la iluminación de las muestras es per-
sencillo dispositivo adicional para realizar Conseguí la máxima absorción con fectamente homogénea (dos probetas
mediciones. un recubrimiento obtenido mediante la idénticas deberán mostrar un comporta-
Para captar la radiación, una placa me- aplicación del humo de una vela, muy miento idéntico, incluso al permutar sus
tálica puede ser la mejor opción. Lógica- mate, tras repetir la operación varias ve- posiciones varias veces).
mente, la pintaremos de negro (color que ces. Mostró tanta absorción que lo con- Según mis ensayos (oZl^eZ`kÖ\Z), la
WXiehX[YWi_jeZWbWhWZ_WY_dYWbehÐYW$ sideré un patrón sobre el que valorar el mejor opción corresponde a un recubri-
Ahora bien, ¿qué recubrimientos negros comportamiento de los otros recubri- miento suave con aerosol negro mate al
hay disponibles y hasta qué punto respon- mientos. Cuando el cielo se halla cubier- que se aplica, aun en húmedo, negro de
den de la misma forma? Deberemos hacer to por nubes que imposibilitan el ensayo, humo en polvo (cuyo exceso se elimina
una selección empírica de los pigmentos feZ[cei[ckbWhkdW[ijh[bbWWhj_ÐY_Wb luego con aire comprimido) y se remata
disponibles: expondremos cada uno de con una bombilla halógena de doscien- YedkdWYWfWZ[Ð`WZehfWhWYWhXedY_bbe$
ellos al sol durante un tiempo determina- tos vatios o más, o de infrarrojos. En el Mediante esta receta obtuve, a un coste
do y mediremos el incremento de tempe- primer caso, el espectro de emisión es mínimo, placas de aluminio de gran tama-
ratura. Para ello, prepararemos una caja óptimo para el uso de un fotómetro, lo ño recubiertas con un negro mate muy
aislada, por ejemplo, con poliestireno ex- que nos permitirá calibrar su potencia absoluto. Este recubrimiento presenta una
pandido y recubierta interiormente con real con respecto a la luz solar. ventaja: su coste es mínimo. Pero también
papel de aluminio, que habremos adherido El montaje, de gran simplicidad, se un inconveniente: es poco resistente. El
con un aerosol reposicionable. En su inte- complementa con algún mecanismo que lector puede ensayar también con placas
rior, ensayaremos unas probetas idénti- permita exponerlo perpendicularmente a anodizadas y recubrimientos galvánicos de
cas: placas metálicas altamente conducto- los rayos de sol: servirá un trípode de fo- cromo «negro», opciones mucho más re-
ras, de cobre o aluminio, de algún milíme- tografía o un atril, que soporte la caja ais- sistentes pero, eso sí, más caras. Piénsese
tro de espesor, redondas o poligonales, y bWZWoYed[bh[YkXh_c_[djeh[Ñ[YjWdj[Z[ que el margen de maniobra es muy amplio:
de unos 100 milímetros de extensión, que su interior perfectamente limpio. En su podemos experimentar con diversos aca-
pintaremos con aquellos materiales que interior se colocan las probetas armadas XWZeioj[njkhWiikf[hÐY_Wb[i"oZ_ij_djei
tengamos al alcance. En mi caso: negro con sendos termómetros. Las dispondre- soportes, como hierro, cinc o acero inoxi-
MARC BOADA
mate en aerosol, esmalte sintético mate, ceiieXh[jWYeiW_ibWdj[i"Ð`WZWiYedY_d- dable, que encontraremos en cualquier
esmalte de poliuretano satinado, negro de ta adhesiva de doble cara. En el caso de desguace.
Limones y hospitales
Un paseo por los mercados de información asimétrica
Apoptosis
Muerte celular programada
y otras formas de autoaniquilación
B I OLO GÍ A
FÍSIC A
La ciencia de la gloria
H. Moysés Nussenzveig
Uno de los más bellos fenómenos en
meteorología tiene una explicación
sorprendentemente sutil. Su estudio ayuda
además a predecir el papel que las nubes
desempeñarán en el cambio climático.
Claves de la
MOTIVACIÓN
t -BTEPTDBSBT
EFMFTUSÏT
t &QJMFQTJBSFTJTUFOUF
BMPTGÈSNBDPT
t -B[POBHSJT
EFMBWJPMFODJB
t -BFNQBUÓB
t *OUFSQSFUBDJØOFSSØOFB
EFMBTFTUBEÓTUJDBT
t &OUSFWJTUB
B1IJMJQ;JNCBSEP
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