Progreso en El Arte y Ciencia Dental y Bucal - Docx para MI
Progreso en El Arte y Ciencia Dental y Bucal - Docx para MI
Progreso en El Arte y Ciencia Dental y Bucal - Docx para MI
bucal.
Del ingenio a la tecnologa
Mallo-Prez,
Luciano
Mallo-Prez, Luciano*
Sanz-Serrulla, Javier*
*Doctor en medicina y ciruga.
Mdico estomatlogo.
Correspondencia
Resumen: Los avances en las artes y ciencias odontolgicas han sido espectaculares, sobre todo
en el ltimo medio siglo. Los autores analizan tal evolucin intentando descubrir qu parte del
progreso corresponde a las novedades en el conocimiento cientfico bsico y cunto es fruto de la
evolucin tcnica y tecnolgica. Con este fin, estudian separadamente cada una de las
especialidades odontolgicas, bajo un punto de vista histrico y objetivo. Los autores concluyen
que la mayor parte del progreso en las disciplinas dentales es atribuible al desarrollo tecnolgico,
habindose modificado muy poco las bases conceptuales de la odontologa.
Abstract: The evolution of the dental art and science has been spectacular in the past last half
century. The authors of this article analysed this evolution, trying to discriminate how much of the
evolution was due to basic scientific knowledge and how much corresponded to technic
development. So, the authors studied separately each odontologic speciality from an objective and
historical point of view, and concluded that most of the progress in dental disciplines was due to
technological improvement, while conceptual bases had been modified very little.
No importa el problema,
importa la solucin.
(AC,AR).
Introduccin
Est demostrado que el desarrollo de las ciencias y los conocimientos que dependen de un modo
ms o menos directo de los avances tecnolgicos sigue un ritmo de progresin geomtrico. As,
podemos asegurar que, sin duda, se ha progresado mucho ms en los ltimos 50 aos que en el
resto de los miles de evolucin humana en campos como la ingeniera industrial, la inteligencia
artificial o los materiales deportivos. Por lo que se refiere a la medicina, es frase acuada que se
ha avanzado ms en los ltimos 25 aos que en los ltimos 25 siglos, justamente desde el
comienzo de la medicina racional en Grecia; en buena medida se puede afirmar lo mismo para
la odontologa y la estomatologa. La capacidad para afrontar compromisos odontolgicos se ha
multiplicado y, sobre todo, se ha universalizado. En la actualidad se puede dar solucin a un
nmero importantsimo de problemas bucodentales, muchos de ellos imposibles o impensables de
solventar hace unas pocas dcadas, y adems se puede hacer de un modo previsible, en casi
cualquier lugar de la geografa de los pases occidentales y a un costo, en la mayora de los casos,
asumible.
Un importante nmero de profesionales sabe hacer las cosas, incluso las hace bien. Otro
aspecto bien diferente es que sepa el motivo por el que las hace de esa manera, convirtiendo una
tcnica, resultado ltimo de una cadena cientfica de base, en un mero acto, equiparable, salvando
las distancias, a cambiar una rueda de un automvil o a reparar el mecanismo de un reloj carrilln.
Es muy comn en las conversaciones informales de cursos, congresos y otras actividades
cientficas, escuchar, incluso de los primeros espadas, sentencias del tipo: lo hago y funciona,
pero no tengo ni idea del por qu (a veces con la coletilla ni me importa), pues aunque no
tenga base, en mis manos funciona , etc. Esta realidad nos sita cerca del empirismo, al tiempo
que nos aleja de lo que debe ser la ciencia.
No toda ciencia es cientfica. El que fabric las hachas de slex en el periodo chelense, careca de
ciencia y sin embargo cre una tcnica. La China lleg a un alto grado de tecnicismo sin sospechar
lo ms mnimo la existencia de la fsica. Slo la tcnica moderna tiene raz cientfica y de esa raz
le viene su carcter especfico, la posibilidad de un ilimitado progreso. Las dems tcnicas
mesopotmica, nilota, griega, romana, oriental se estiraron hasta un punto de desarrollo que no
pudieron sobrepasar, y apenas lo tocaron, comenzaron a retroceder en una lamentable
involucin. Esta cita, de alguien tan poco sospechoso como Ortega y Gassett 3, an siendo de
1938, conserva toda su vigencia e ilustra perfectamente nuestro objetivo. El progreso tecnolgico
nos ha brindado enormes posibilidades y, aunque es imprescindible, tambin nos ha hecho ms
dependientes y probablemente menos ingeniosos. Reducir la cuestin a nmeros es imposible,
pero creemos asumible hacer una aproximacin al desafo. sta.
Objetivo
Estudiar la evolucin de la odontologa y sus especializaciones desde un punto de vista cientfico y
con una perspectiva histrica e intentar separar lo que en la evolucin del arte y ciencia dental
corresponde al progreso en el conocimiento cientfico de la evolucin tcnica y tecnolgica.
Queremos expresar el respeto que nos merece tanto la profesin dental, como sus practicantes,
entre los cuales nos encontramos.
Sabemos que es imposible resumir en unas pocas pginas lo que en la literatura especializada
ocupa muchos millones, por lo cual asumimos que cualquier interpretacin es incompleta y parcial;
hemos intentado encarecidamente que este sesgo haya sido el menor posible.
Algo parecido puede decirse del trmino especialista. Si bien muchos emplean las palabras
especialista, superespecialista o subespecialista, su validez legal parece ser cuestionable. No
obstante es innegable la existencia de especializaciones odontolgicas, incluso dentro de ellas
mismas. Por estos motivos, utilizamos estos trminos repetidamente en el texto.
Los adverbios siempre y nunca, todo y nada carecen de significado absoluto en amor y
medicina. Su empleo a lo largo del texto se tomar con esta precaucin.
Esta divergencia en la manera de enfocar por un lado el arte y por otro la ciencia dental quedaron
reflejados en los currculos de las escuelas e institutos de odontologa aparecidos en ambos pases
y en otros que asimilaron ambos modelos. Pero esta diferencia tena tambin un importante
componente comercial. En Amrica muchos aparatos y materiales fueron patentados, por tanto con
gran provecho para aquel colectivo. Adems, muchas revistas dentales eran publicadas por
depsitos dentales y su literatura tuvo gran influencia en la odontologa. La relacin entre la
dentistera y las compaas comerciales comenz su declive en los comienzos del siglo XX, y entre
1930 y 1940 los Estados Unidos estuvieron en la vanguardia de la investigacin bsica y de la
tecnologa dental7. As pues, hay que partir del recuerdo histrico de esas dos maneras de
entender la odontologa: ciencia y arte, con predominio acusado, que no excluyente, de cada una
de ellas en uno u otro modelo. Sin embargo, y siempre refirindonos al mundo occidental en ste
anlisis, procede tener en cuenta otros factores8, al menos estos tres:
A/ La odontologa ha carecido de tradicin docente hasta tiempos muy recientes (en Espaa
concretamente, su estudio como carrera universitaria no lleg hasta el primer ao del siglo XX)
frente a los muchos siglos de antigedad de las Facultades de Medicina, por no hablar de las
escuelas mdicas medievales. Ello condujo, en el caso de la medicina, a un progreso investigador
imparable que se benefici, bien es cierto, de la simbiosis con la tecnologa hasta los lmites
actuales que no encuentran paralelismo con la odontologa.
La medicina de carcter universitario consolid su hegemona en el transcurso del siglo XIX como
consecuencia de su fundamentacin en las ciencias naturales (fsica, qumica y biologa las
mismas que cultiva Miller, no casualmente, para proceder al mejor estudio de la odontologa).
Bajo nuevas circunstancias esta medicina pas a basarse, por primera vez en su historia, en unos
supuestos conceptuales y metodolgicos admitidos de forma general por encima de los
desacuerdos de autores y escuelas; es decir, en una ciencia mdica que en sus elementos
fundamentales sigue an vigente. Siguiendo un reciente y brillante estudio de Arrizabalaga9, la
aportacin esencial de esta nueva forma de medicina en cuanto a su conceptualizacin de la
enfermedad fue la construccin, siempre mediante los recursos de las nuevas ciencias naturales,
de una explicacin de las enfermedades como trastornos corporales estructurales y dinmicos que
responden a causas naturales especficas y se manifiestan a travs de signos fsicos, qumicos y
biolgicos, objetivables y cuantificables en mayor o menor medida. El escenario de produccin de
nuevos conocimientos se traslad, en definitiva, de la sala del hospital al laboratorio experimental,
con presencia principal en Europa Occidental y en los Estados Unidos. La odontologa, a la vista
de la produccin cientfica recogida en libros y revistas, ha seguido el mismo camino?
Sinceramente creemos que no, mxime cuando, por diversas circunstancias, en no pocos lugares
opt por la va de la independencia y se alej de los centros de formacin y asistenciales, mdicos.
B/ El escaso nmero de dentistas con que cont la profesin en un primer momento y que no se
equilibr hasta bien avanzada la segunda mitad del siglo pasado, unido al aumento del nivel de
vida de la poblacin que permiti el acceso a los tratamientos dentales, hizo que la mayor parte de
los dentistas dedicaran principalmente su tiempo a la prctica dental, dejando a un lado la
investigacin, ms lenta, ms ingrata el propio Miller, paradigma del odontlogo cientfico, en la
cima de la profesin y con el mayor reconocimiento internacional, trabaj en unas instalaciones tan
penosas en Alemania que le llevaron a abandonar el pas - y menos rentable econmicamente. De
esta manera, la tarea de la mayora de los dentistas consisti antes en arte que en ciencia
(comprubese, por ejemplo, la escasa literatura cientfica que se produjo hasta las ltimas dcadas
del pasado siglo).
C/ Un tercer factor afecta a los dos anteriores. La gran demanda profesional hizo que, como queda
dicho, los dentistas se inclinaran hacia la prctica privada, quedando de ese modo los centros
docentes en manos de un profesorado que no encontr grandes dificultades para acceder a los
puestos acadmicos ms elevados. Una prueba infalible son las escasas tesis doctorales que se
realizaron en la primera mitad del siglo pasado (en las revistas profesionales espaolas, la defensa
de una tesis doctoral era noticia destacada hasta finales de los aos ochenta) pues el dentista
prefiri concentrarse en el ejercicio particular, ms satisfactorio desde el punto de vista econmico.
En la actualidad, precisamente a consecuencia de la pltora profesional, el nmero de licenciados
en odontologa que acceden a los estudios de doctorado ha crecido de forma extraordinaria, lo cual
llevar, en condiciones de imparcialidad, a una seleccin del profesorado tan competitiva como
nunca se ha conocido.
Con esta nueva situacin cabe esperar, paulatinamente, un crecimiento investigador importante en
las diferentes parcelas de la odontologa que, al menos, venga a equilibrar el acusado desfase que
a nuestro juicio se sigue dando a favor de la tecnologa, sobre todo en lo que se refiere a los
procedimientos teraputicos; esto es, una vez declarada la enfermedad en la cavidad bucal sobre
cuyo origen se sabe ms bien poco, las posibilidades reparadoras y rehabilitadoras son muy
variadas y estn bien aquilatadas, de ah que el prestigio de la profesin se sujete mayormente en
sus procedimientos teraputicos de carga tecnolgica.
Por resumirlo en una frase, no parece muy aceptable para la comunidad odontolgica que ms de
un siglo despus de la formulacin de la teora quimio parasitaria de Miller sobre la etiologa de la
enfermedad de mayor prevalencia en la especie humana, la caries, la mayora de nuestros
esfuerzos para prevenirla se concentren en instruir a nuestros pacientes en el correcto cepillado de
las superficies dentales para alejar de all el sustrato patgeno que constituyen los hidratos de
carbono.
Una serie de aportaciones tecnolgicas han contribuido a que la evolucin en operatoria dental
haya tomado cuerpo. Los sistemas de corte rotatorio actuales muy poco tienen que ver con los
existentes hace 100 aos; las turbinas impulsadas por aire comprimido permiten alcanzar unas
velocidades de giro impensables en el pasado, las fresas fabricadas con materiales que permiten
un corte rpido, ntido y preciso, la refrigeracin eficaz tanto de los dientes como de las fresas y la
disponibilidad de fuentes luminosas potentes y dirigibles son algunos de los responsables de las
adaptaciones en la mecnica operatoria a lo largo del tiempo11. En otras palabras, se corta mejor,
ms rpido, ms preciso y de manera menos yatrgena, aunque los resultados no tienen porque
ser necesariamente mejores.
El instrumental de mano apenas ha variado con el paso de los aos. La incorporacin de nuevos
materiales ha permitido la construccin de instrumentos ms ligeros, resistentes y tericamente
ms cmodos y ergonmicos, aunque no siempre ms efectivos. El oro ha dejado, prcticamente,
de utilizarse y la amalgama de plata an siendo el material de obturacin ms empleado, ha
perdido su papel hegemnico de lustros atrs. La irrupcin de las resinas acrlicas y su continuado
desarrollo ha permitido, en esencia, dos cosas: el cambio de la idea de la retencin mecnica
(macromecnica) por la adhesin (retencin micromecnica, idealmente qumica) y la posibilidad
de disponer de materiales que mimetizan perfectamente la esttica dental natural. En el aspecto
prctico, y como consecuencia de los dos anteriores, ha implicado el sobreseimiento de un buen
nmero de principios de preparacin cavitaria y un gran ahorro de tejidos dentales sanos. Ahora
bien, las dos bases fundamentales de la operatoria dental oclusin y proteccin dental siguen
inalterables y es que mientras no sea posible la regeneracin, pueden considerarse axiomas 12.
A finales de la dcada de los 60 comenzaron a darse los primeros pasos en odontologa adhesiva,
que tras sucesivas evoluciones ha sentado las bases que han llevado a la universalizacin de lo
que se ha venido a denominar odontologa esttica, cada vez ms simple, resolutiva y
predecible, y utilizada cotidianamente por la prctica totalidad de los dentistas. Esto ha supuesto
una autntica revolucin en el campo de la odontologa conservadora ya que se pueden realizar
trabajos imposibles o impensables con otros materiales, a un costo asumible y con unas garantas
importantes. Paralelamente la industria ha desarrollado la tecnologa especfica para estos
materiales adhesivos y estticos (de polimerizacin, de corte, de manejo, de pulido, etc.)
Durante dcadas y siglos, la odontologa no era, apenas, ms que extraccin, prtesis y operatoria
dental. El tiempo ha impuesto que algunas disciplinas se independizaran, bien sea por requerir de
tcnicas especficas (endodoncia, periodoncia, esttica) o un manejo especial (odontopediatra,
odontologa geritrica, prevencin). An as, actualmente la operatoria dental conservadora todava
ocupa la mayora del tiempo de trabajo de la comunidad odontolgica mundial11 y tambin de la
espaola.
Endodoncia
Las bases conceptuales de la endodoncia permanecen invariables desde hace casi un siglo. Son
tan simples como la eliminacin del contenido pulpar, alcanzar el mayor grado de desinfeccin que
sea factible (hablar de esterilizacin, como habitualmente se hace, es una quimera biolgica) y
proceder al relleno ms completo y hermtico que sea posible. A lo largo de los aos se han
aadido al campo primitivo de la endodoncia otras tcnicas (apicoformacin, tratamiento de
traumatismos, blanqueamientos, etc.) que no dejan de ser variaciones o complementos de los
tratamientos convencionales de conductos. stos ltimos apenas han cambiado en lo fundamental
en 50 aos. Uno de los clsicos de la endodoncia de finales del pasado siglo, Leonardo 13, despus
de advertir que el tratamiento endodncico no es solamente un problema de naturaleza tcnica,
sino que principalmente es biolgico, aade lo siguiente: las nuevas conquistas y los nuevos
conceptos debern ser prestigiados y seguidos, porque a pesar de las honestas investigaciones,
de las excelentes contribuciones y de las categricas afirmaciones de innumerables
investigadores, an son el empirismo y el desconocimiento lo que muchas veces orientan nuestros
procedimientos operatorios.
Por otro lado, los medios diagnsticos siguen invariables. La radiografa manda. Se puede uno
ayudar de complementos como los localizadores de pice, tecnologa informtica, etctera, pero
siempre como ayuda, no sustituto. Los instrumentos apenas han variado: son limas de calibres
ascendentes y descendentes, de mayor o menor conicidad y con diversos diseos de superficie. El
desarrollo tecnolgico nos ha brindado la posibilidad de disponer de nuevos materiales (p.e. nquel
titanio) o complementos mecnicos (sistemas rotatorios mecnicos, ultrasonidos) y ms que
vendrn (lser)15.
Resulta curioso observar cmo en los ltimos aos se est implantando la utilizacin de sistemas
de visin e iluminacin magnificados. Y es curioso porque clsicamente se ha sostenido que la
endodoncia era una disciplina predominantemente tctil y ahora parece querer transformarse en
predominantemente visual. Imaginamos que con tiempo se aclarar esta aparente paradoja, por
otro lado perfectamente compatible.
La desinfeccin qumica de los conductos es desde hace dcadas patrimonio del hipoclorito de
sodio y los dems (EDTA, CHX, Ca(OH)2, y tantos otros que ha habido y habr). Lo mismo puede
decirse de la obturacin del sistema de conductos pulpares. La gutapercha ha sido y es el material
de eleccin desde hace siglo y medio. Muchos otros materiales han quedado atrs y otros vendrn,
sobre todo del fascinante mundo de los compuestos acrlicos y las resinas, pero tendrn que
demostrar su bondad y su superioridad frente al estndar que ya ha pasado la prueba definitiva, la
del tiempo. Algo similar se puede decir de los cementos selladores; se han utilizado y se utilizan
muchos, lo cual quiere decir, es obvio, que no hay ninguno significativamente mejor que los dems
y que nuevos productos o combinaciones seguirn apareciendo15.
Periodoncia
Como en tantas otras facetas de la vida, la periodoncia es una disciplina que, al mismo tiempo,
puede considerarse sencillsima o altamente compleja. En esencia no consiste ms que en el
estudio de los tejidos de soporte dental en salud y enfermedad y de los medios y tcnicas para su
proteccin, prevencin, curacin y rehabilitacin.
Cualquier reunin de expertos o workshop que se precie propone una nueva clasificacin de las
enfermedades periodontales; en esencia todas son similares y por supuesto ninguna es perfecta
hubiese permanecido en el tiempo. Pero todas, es decir ms del 99%, las enfermedades
periodontales estn producidas por la placa dental en un paciente susceptible. Uno de los
experimentos ms reveladores de todo el mbito odontolgico demostr esta relacin directa: los
trabajos de Le y cols16 constituyen la piedra angular de la periodoncia cientfica, al mismo tiempo
que demuestran que con sentido comn, ideas claras y sin excesivos medios se pueden realizar
magnficos trabajos cientficos. La enfermedad periodontal o las enfermedades periodontales es
una infeccin oportunista cuyo inicio y severidad estn determinados por la respuesta del huesped,
que a su vez puede estar modulada por mltiples factores 17 y la disciplina Periodoncia no es sino
un combate contra la placa dental. La placa: millones de grmenes de cientos de tipos en un
magma orgnico o inorgnico. Se han identificado decenas de odontopatgenos, que no son los
mismos para todas las personas, ni para todos los momentos, incluso ni para todas las
localizaciones intrabucales. Existen miles de artculos, revistas y tratados sobre microbiologa
periodontal, mas no se puede sacar una conclusin directa causa efecto, equiparable a la que
ocurre en un importante nmero de enfermedades infecciosas del organismo (p.e. hepatitis y virus
de la hepatitis). Probablemente por este motivo la periodoncia, o los periodoncistas, se han
dedicado y se dedican a intentar conseguir la situacin de placa cero. Ante el diagnstico de
periodontitis, el tratamiento es, conceptualmente, nico: proveer races lisas, sin placa y accesibles
a la higiene personal motivada. Si las bolsas son poco profundas, la terapia se hace a cielo cerrado
y en caso contrario con alguna tcnica quirrgica de las muchas que hay descritas. Si se trata
de Prevotellas, se hace eso; si son Porphyromonas, tambin; si son A. actinomycetemcomitans, lo
mismo y as sucesivamente.
De ningn modo los autores pretendemos banalizar la disciplina; nada ms lejos de nuestras
intenciones. Las publicaciones de periodoncia son las de mayor impacto entre todas las
odontolgicas y su nivel cientfico est fuera de toda duda; ahora bien, el resultado prctico es ms
bien discreto y lento. Sin duda est pendiente una revolucin en ciernes: la gentica, la molecular.
Hasta la fecha la mayora de los esfuerzos se han dirigido hacia la placa y su localizacin; el tercer
elemento del trpode fisiopatolgico, el husped, su susceptibilidad y su resistencia, pide paso y
seguro que nos deparar, pronto, agradables sorpresas18.
La periodoncia clsica, es decir la que acaba de ser esbozada, queda claro que est a punto de
tocar techo, si no lo ha hecho ya: los periodoncistas raspan, alisan y dominan tcnicas quirrgicas
primorosamente. Poco margen para la evolucin es posible en este aspecto. Ante esta evidencia
se han abierto dos nuevos frentes teraputicos: la esttica y los implantes.
En una sociedad (la occidental) con unas demandas crecientes de esttica, es decir de juventud
prolongada, y muchas personas que pueden permitrselo, la sonrisa perfecta y la sonrisa bonita
son placeres deseados. Aqu entran casi todas las disciplinas odontolgicas, tambin la
periodoncia. Aunque existen tcnicas de periodoncia plstica desde hace tiempo, en los ltimos
aos se han perfeccionado, ampliado y aumentado su predecibilidad, sobre todo gracias a los
adelantos tcnicos: sistemas de magnificacin, iluminacin y corte mejorados, materiales
sofisticados, etc.
En este campo, al igual que en el de los implantes, que luego consideraremos, los avances estn
tantas veces ms cercanos al empirismo que a la ciencia. Son numerosas las publicaciones que
proponen una tcnica determinada o una modificacin personal de otra preexistente, basndose en
unos pocos casos en ocasiones uno slo y con un seguimiento corto, claramente insuficiente.
Un buen nmero son abandonadas, no volviendo a haber referencias de las mismas. Casi todas
carecen de investigacin bsica o con modelos animales, siendo los pacientes, a veces sin
saberlo, autnticos conejillos de indias o perros beagle, transgrediendo normas bioticas bsicas.
Y adems estn los pacientes tratados de forma cuasiexperimental sin publicaciones por medio o
los casos desfavorables que casi nunca figuran. Por supuesto y afortunadamente, existe una
significativa fraccin profesional cautelosa, cuidadosa y respetuosa con la ciencia y con los que se
sientan en el silln dental.
Los implantes y la periodoncia. Hace 15 aos eran minora los periodoncistas que se interesaban
por ellos, muchos incluso los que se autoexcluan de su manejo; eran periodoncistas, no ms. En
la actualidad todos (es decir, casi todos), incluso los que hace una dcada objetaban, los
periodoncistas realizan la parte quirrgica de colocacin de fijaciones implantolgicas. Con un
criterio conceptual lgico de lgica matemtica -, la implantologa dentro de la periodoncia no
puede ser compatible: una cosa no puede ser ella misma y su contrario. El xito en periodoncia se
fundamenta en conseguir un complejo periodontal sano, en hueso, cemento, ligamento y enca.
Por el contrario, el principal criterio de xito implantolgico es la anquilosis, es decir la total
ausencia de cualquier tipo de conexin no rgida entre el hueso y la superficie del implante. Las
sociedades cientficas de periodoncia (actualmente de periodoncia y osteointegracin) de
Espaa y un buen nmero de pases se han redefinido; loable y ante todo prctico, pero no
consistente desde el punto de vista conceptual. Todo es opinable, aunque no igualmente
fundamentado. Bien es verdad que los periodoncistas, siempre tan preocupados por el milmetro,
por la conservacin y la regeneracin, suelen ser mucho ms cuidadosos y delicados que otros
especialistas.
Odontopediatra
Partiendo del paralelismo y de la relacin existente entre medicina y odontologa, parece lgico
pensar que si existe la disciplina Pediatra debiera tambin haber su equivalente
Odontopediatra ; y as est asumido y sancionado por ese juez implacable que es el tiempo.
Ahora bien, esta sencilla regla de tres, no es tan fcil de sostener con una ptica mnimamente
crtica.
Bien es cierto que la pediatra posee un cuerpo disciplinario amplsimo y bien diferenciado de la
medicina comn, entendiendo por ella la de los adultos. Existen multitud de enfermedades,
procesos y padecimientos (cientos, miles) propios o exclusivos de la infancia, muchos de ellos
enormemente prevalentes y un porcentaje elevado de los padecimientos que afectan a toda la
poblacin sin marcas de edad presentan una fisiopatologa, curso y tratamiento diferenciado en la
edad infantil. No se puede sostener lo mismo a propsito de la odontopediatra. Se puede afirmar
que la denticin decidual es diferente de la permanente; es cierto, pero los procesos mrbidos y
tratamientos dentales infantiles no difieren en esencia de los aplicables a cualquier otra edad.
Ciertos tratamientos del complejo pulpar o algunas opciones protsicas son casi exclusivas de la
edad peditrica, pero ni su nmero, ni su frecuencia, ni su complejidad son tan grandes, graves o
especficas que requieran la necesidad de una disciplina independiente. Las enfermedades y
sndromes especficos de la infancia suelen ser congnitos, y afortunadamente poco frecuentes, y
su manejo suele requerir el concurso de especialistas hospitalarios y se escapan de las
posibilidades de una clnica dental infantil convencional.
Por otro lado, la explosin demogrfica profesional dental y la necesidad de captar y mantener
clientes hace que casi todos los dentistas generales realicen la mayora de los tratamientos
dentales infantiles y no es descabellado pensar que en un futuro no muy lejano, la figura del
odontopediatra quede relegada a la de un(a) dentista especializado en el manejo de nios
inquietos o problemticos y al tratamiento de procesos poco frecuentes y que dedique buena parte
de su jornada laboral a los tratamientos de ortodoncia.
Odontologa preventiva
El comienzo de la medicina como ciencia supuso la bsqueda de la etiologa de las enfermedades.
Lo mismo puede decirse en el campo de la odontologa. Dejando atrs teoras que hoy suenan casi
folclricas (vermicular, humoral, etc.), el origen microbiano de las enfermedades dentales ms
prevalentes, la caries y la enfermedad periodontal, est fuera de toda duda. Centrndonos en la
caries, que es la primera causa mundial de morbilidad, hay que decir que lo que hoy se sabe es
mucho, pero no aade demasiado a los conceptos establecidos hace ms de 50 aos. La
prevencin de los problemas bucales, especficamente los dentales, y en concreto de la caries, se
basa en tres pilares: higiene, hbitos alimenticios y fluoruros. Aunque estn descritas multitud de
tcnicas de cepillado, excepto en algn caso concreto, ninguna de ellas es significativamente mejor
o peor que las otras, siempre que se realicen correctamente. Existen, han existido y existirn
cientos de diseos de cepillos dentales, todos bsicamente similares, y respetando unas normas
mnimas de calidad, con validez tan equiparable como variable segn los estudios o quin los
financie.
La relacin dieta caries es conocida y est demostrada desde hace dcadas, y pocas novedades
significativas se han producido desde entonces. Realmente el tema no da para mucho ms; otra
cosa es que se sigan o no las recomendaciones dietticas.
Algo similar puede decirse de la prevencin de las enfermedades periodontales: instrucciones para
el control mecnico de la placa y en algunos casos qumico. Y lo mismo podemos observar al
considerar la evolucin en la prevencin de otros problemas dentales maloclusiones, fracturas,
prtesis y no dentales prevencin del precncer y cncer.
Aunque es una generalizacin, y ello siempre supone admitir un cierto grado de error, todos los
conceptos preventivos que aparecen en un buen manual de hace ms de 20 aos son
perfectamente aplicables en la actualidad, con mnimas variaciones 19. Probablemente ya se haya
alcanzado un notable estado de desarrollo, la cosa no d para ms, ambos, o haga falta un
cambio radical de punto de vista.
Otro tanto puede decirse de la odontologa comunitaria. El arraigo de los conceptos de comunidad,
grupos, atencin primaria, etc., a finales de la dcada de los 70, ha producido una autntica
explosin de esta disciplina, aunque desde el punto de vista odontolgico bien pudiera
considerarse simplemente como la aplicacin de los conceptos de la odontologa preventiva no a
los individuos aislados sino a las comunidades. Su valor prctico es innegable, con un fabuloso
descenso en los indicadores de prevalencia e intensidad de las caries y en menor medida de la
enfermedad periodontal. Aun a fuerza de ser injusto por la simplificacin, desde el punto de vista
prctico, nos ha aportado bsicamente dos cosas: un pilago de estudios epidemiolgicos y
multitud de estudios de campo sobre comunidades y grupos humanos en prevencin bucodental.
Por otro lado la odontologa preventiva es una disciplina acadmica bsica y esencial, pero sin
aplicacin clnica profesional directa; que sepamos no existe ninguna clnica dedicada
exclusivamente a la prevencin dental. Sin embargo todas las disciplinas clnicas utilizan
diariamente los contenidos preventivos. La odontologa comunitaria es patrimonio casi exclusivo de
los sistemas pblicos de salud.
Ortodoncia
La disciplina Ortodoncia emergi paralelamente a las artes de conservacin dental sin derivarse
directamente de las mismas, bien al contrario, por ejemplo, de la endodoncia. Las motivaciones
iniciales se mantienen en la actualidad: recolocar los dientes para mejorar la funcin y, sobre todo,
la esttica.
En esencia la ortodoncia no es otra cosa que la aplicacin prctica de la tercera ley de Newton.
Con el tiempo, la experiencia y, claro est, el progreso tecnolgico, se han ido diseando y
optimizando las maneras de sujetar y mover los dientes de la forma deseada (fijacin y aplicacin
de las fuerzas sobre los dientes con el vector deseado) y lograr que los movimientos y efectos
indeseables se reduzcan en lo posible (anclaje y estabilidad). Simplificando, no es ms que eso.
El desarrollo tecnolgico ha permitido que lo antes comentado pueda hacerse de formas cada vez
ms sencillas, rpidas y predecibles. Hasta hace medio siglo los sistemas de sujeccin dental eran
complicados, molestos, antiestticos y bastante yatrgenos. La aparicin de sistemas adhesivos y
las mejoras en la industria micrometalrgica proporcionaron el arrinconamiento de los embandados
exhaustivos, las soldaduras generalizadas, y la universalizacin de los brackets (una de las pocas
palabras sin traduccin reglada), cada vez ms pequeos, precisos y fciles de utilizar. Tambin se
han comenzado a utilizar materiales no metlicos (plsticos, cermicas, siliconas), ms estticos y
los aparatos invisibles (es decir, menos visibles).
Por otro lado, los elementos generadores de fuerzas y momentos, los alambres y los arcos, han
mejorado enormemente. Los nuevos materiales, muchos con casi impensables propiedades, los
diseos preformados, etctera, han permitido que los tratamientos sean cada vez ms predecibles
y universales, adems de reducir el tiempo de consulta y el nmero de visitas.
En las Escuelas y Facultades nos han enseado que lo fundamental en ortodoncia era el
diagnstico. Curiosamente, ste tampoco ha sufrido cambios en su naturaleza durante dcadas:
estudio de modelos, de imgenes y de radiografas. El desarrollo tecnolgico, especialmente la
revolucin informtica y digital, ha permitido que esta triada diagnstica pueda ser ms completa,
sobre todo ms impactante imgenes en movimiento, simulaciones informticas, previsiones,
lneas y colores ilimitadospero un milmetro sigue siendo un milmetro y el SNA-SNB sigue estando
en el padrenuestro de la ortodoncia. Los sistemas cefalomtricos son casi tantos como autores los
estudiaron. Todos aportan algo y todos tienen limitaciones, de manera que ninguno de ellos
arrincona a los dems y con todos o con la mayora se puede obtener un diagnstico competente.
Los conocimientos acerca del crecimiento facial, del movimiento dental y de la biologa sea han
progresado mucho, aunque su aplicacin prctica siga siendo muy limitada. En la prctica, nos
impresionamos cuando un ortodoncista nos muestra sus casos en varias pantallas, con antes y
despus, llenas de componentes y artilugios, y con unos resultados fenomenales. Todos, creo, nos
fijamos en la mecnica y en los trucos, pero nadie o casi nadie nos comenta o se interesa por lo
que pas en el micromundo oseoperiodontal. Todos, pacientes y dentistas, pensamos que un buen
ortodoncista es aquel que consigue buenos resultados. Menos importa que conozca o controle las
bases biolgicas de los movimientos. Dicho de otra manera, un buen ortodoncista ha de ser un
buen mecnico con una fundamentacin biolgica bsica; un profundo conocedor de la biologa del
movimiento dental y seo, pero con unas manos torpes nunca lo ser, ni a la vista de los
pacientes, ni los compaeros dentistas les derivarn los suyos.
Prtesis dental
La prtesis dental es tan antigua como las civilizaciones clsicas. Su fundamento est entre la
lgica y el instinto: cuando te falta algo necesario hay que intentar suplirlo de la mejor forma
posible. No creemos que los sumerios o los egipcios fuesen ms torpes o ms tontos que los
dentistas actuales; probablemente la diferencia estribe en las posibilidades tcnicas y tecnolgicas,
radicalmente diferentes.
Se puede considerar que la prtesis dental es la zona de encuentro entre unos conceptos bsicos
de ingeniera (seleccin y diseo de pilares y pnticos, resistencia de los mismos y distribucin de
fuerzas) y otros de biologa (estructura dental y periodontal, respeto seo y mucoso). Y puede ser
fija o extraible, sobre dientes, mucosas y recientemente sobre implantes, pero los conceptos
fundamentales estn consolidados desde hace lustros. Un buen libro de prtesis de hace 30 aos
puede estar perfectamente vigente en la actualidad, poniendo al da las opciones y posibilidades
tecnolgicas, que no las tcnicas.
Los modernos materiales permiten por un lado mayor respeto a las estructuras biolgicas y por otro
poseen unas propiedades mecnicas y especialmente estticas prcticamente naturales. Esto es
fruto del avance tecnolgico, tanto de la manipulacin dental instrumentos de corte precisos y
especficos, refrigeracin, iluminacin, magnificacin, como de los materiales protsicos nuevas
aleaciones, porcelanas, sistemas adhesivos, aplicaciones informticas, mas poco o nada de
nuevos conceptos bsicos. La prtesis extraible, ya sea parcial o completa, es exactamente igual
hoy que hace ms de un siglo, con la nica salvedad de las mejoras que se han producido en este
tiempo en los materiales.
Mencin aparte merecen los implantes dentales que han supuesto un autntico punto y aparte en
el mundo de la odontologa en general y de la prtesis en particular. Los implantes dentales
permiten una ampliacin conceptual nueva: las prtesis (fijas) no se apoyan en los dientes, sino en
un elemento artificial que se comporta de un modo similar al diente. No obstante, toda la prtesis
sobre implantes ha tomado su fundamentacin de la prtesis dentosoportada clsica, con una
variacin conceptual: los dientes se mueven, poco, pero se mueven; los implantes, si lo hacen,
malo. Hasta la fecha se ha adoptado una solucin salomnica al respecto, no conectar dientes con
implantes. Por el resto, los fundamentos mecnicos, si no son iguales, al menos son equiparables.
De algn modo se puede afirmar que la medicina oral se ocupa del estudio de todos los
componentes del aparato estomatogntico diferentes de los dientes. stos ltimos representan,
aproximadamente, el 20% de la superficie de la boca y anexos, aunque en la prctica odontolgica
habitual supongan ms del 95% de la carga del trabajo. El estudio de los procesos y enfermedades
que afectan a los tejidos blandos y duros del aparato estomatogntico y las manifestaciones orales
de los procesos generales es casi tan amplio como desconocido por la generalidad de los
practicantes, que con tanta frecuencia derivan estos pacientes a otros especialistas (ORL,
dermatlogos, internistas, cirujanos maxilofaciales). Adems de amplio podemos calificarlo como
de constante evolucin, equiparable al de la medicina general y sus especialidades. En los ltimos
aos los progresos en el conocimiento etiolgico, patognico y teraputico han hecho variar el
diagnstico, pronstico y la calidad de vida de tantos procesos y pacientes, y ello ha sido ms el
fruto de los progresos en las ciencias bsicas histopatologa, fisiologa, bioqumica, gentica
molecular, farmacologa que de un desarrollo tecnolgico especfico, que tambin ha tenido su
papel, bien al contrario de las novedades odontolgicas.
Bastante de lo mismo puede considerarse al referirnos a la ciruga oral. Son muy pocas las
tcnicas e instrumentos introducidos en los siglos XIX y XX o que se hayan modificado
sustancialmente22. La mayora de los avances y progresos provienen del mejor y ms completo
conocimiento de los procesos y enfermedades y, por ende, de la racionalizacin de su abordaje.
Tambin es cierto que los ltimos aos han incorporado mejoras notables en los procedimientos
teraputicos operatorios microciruga, endoscopia, lser. Al igual que ocurre con la ciruga que
es una disciplina cientfica puramente mdica que utiliza prioritariamente entre otras modalidades
teraputicas la intervencin quirrgica, la ciruga oral podra considerarse una versin de la
medicina oral con posibilidades de tratamiento intervencionista, y su evolucin deriva
esencialmente del mejor conocimiento de los procesos mrbidos, adems de un desarrollo
tecnolgico paralelo.
Exactamente lo mismo cabe decir de los materiales odontolgicos, cada vez ms sofisticados,
compatibles, estticos y generalmente resolutivos. El progreso en la ciencia de los materiales
odontolgicos ha permitido el avance teraputico en todas las disciplinas dentales; tambin es
posible pensar lo contrario, las necesidades clnicas han requerido el diseo y desarrollo de
materiales adaptados a las mismas. Convengamos que esta explosin tecnolgica es un tanto
desordenada y que adems de razones tcnicas tambin participa de otras comerciales. Como
ejemplo, podemos comentar que en la ltima megaexposicin comercial odontolgica espaola
(Expodental 2004) se coment que al mercado espaol salen una media de cinco productos
diarios, cifra imposible de digerir por el sector y que paralelamente supone la desaparicin de
cientos de ellos al cabo de poco tiempo.
Implantes
Los autores no dudamos que en poco tiempo la implantologa ser una especilidad odontolgica
independiente.
La implantologa tiene cientos de aos a sus espaldas, con muy pobres resultados hasta mediados
del siglo pasado en que comenz, tmidamente, la implantologa moderna, aunque el verdadero
punto de inflexin lo marcan los trabajos de Brnemark 23 de hace 30 aos que constituyen el
despegue de lo que podemos denominar implantologa predecible o actual.
Desde un punto de vista conceptual, la implantologa propone algo radicalmente diferente al resto
de la odontologa: no se trata de cuidar o reparar un diente, sino que se pretende hacer aparecer
una raz y un diente all donde no existe ms que hueso. Con esta visin, no estaramos ante un
campo odontolgico, sino ms bien metaodontolgico. Dejando a un lado disquisiciones filosficas,
si existe algo verdaderamente nuevo en odontologa en las ltimas dcadas, eso es, sin duda
alguna, la implantologa.
Tambin est la industria. Si hace 15 aos apenas haba unos pocos fabricantes y un nmero
limitado de opciones, hoy en da son cientos y miles, respectivamente. Ocurre que son todos
esencialmente iguales: un tornillo de titanio con espiras externas e internas. Los hay ms cortos y
ms largos, ms o menos anchos, con ms o menos espiras a veces ms y a veces menos
profundas, ms cnicos o cilndricos y sus combinaciones. Y lo mismo puede decirse de la tcnica,
lo ms atraumtica y asptica posible, intentando conseguir la mxima superficie de contacto entre
los implantes y el hueso. Est claro que hay casos favorables y sencillos y otros altamente
complejos y de peor pronstico, pero ninguno escapa a los principios bsicos.
Por otro lado y por tratarse de un campo nuevo, las innovaciones son constantes y hacen que
surjan continuamente diseos, protocolos y criterios, muchos de los cuales quedan obsoletos o
desfasados en poco tiempo. Sirva como ejemplo que a principios de los 90 se recomendaban y
utilizaban casi exclusivamente implantes de rosca totalmente lisa e implantes impactados; ambas
posibilidades prcticamente han desaparecido en la actualidad. Quiere ello decir que el desarrollo
comercial y tambin el tecnolgico avanza mucho ms deprisa que la investigacin cientfica
clnica, por definicin lenta. Esto produce la paradoja de que muchos as denominados sistemas
de implantes se recomienden, incluso se utilicen con cierta asiduidad para luego caer en el ms
absoluto olvido. Ello justifica la existencia de una ingente cantidad de artculos, normalmente en
publicaciones cuasidivulgativas, pero tambin en otras consideradas ms serias desde el punto de
vista cientfico, con series cortsimas, seguimientos claramente insuficientes y con notables errores
de diseo y, sobre todo, de inferencia. Adems existe otro factor destacable. Son muchos los
estudios que refieren algn grado de significacin estadstica y eso no tiene porque implicar
directamente significacin clnica. Con la debida cautela, hay algunos casos en que podra
pensarse en experimentacin sobre pacientes y que estaran en ese terreno cenagoso que separa
la ciencia de la ciencia ficcin.
Imaginamos que, al igual que ha ocurrido antes con otras disciplinas odontolgicas y mdicas, el
tiempo ser el verdadero juez y que se simplificarn, unificarn y protocolizarn las opciones
tcnicas, tecnolgicas y comerciales y se producir una autntica universalizacin (globalizacin)
de la implantologa. Por supuesto quedarn especialistas de referencia, cada vez ms resolutivos,
eficaces y efectivos, y seguramente la implantologa ser una materia curricular ms en los planes
de estudio odontolgicos.
Odontogeriatra
Sin duda nos encontramos ante una especialidad emergente. En la actualidad no se estudia
independientemente, aunque es altamente previsible que se haga en un futuro inmediato. En
realidad no existe una razn diferenciadora especfica que justifique su existencia autnoma;
incluso est perfectamente demostrado que la mayora de los cambios que ocurren en la boca de
los ancianos no se deben al envejecimiento en s, sino ms bien a los efectos secundarios o
acumulativos de enfermedades sistmicas, frmacos, radiaciones, etc. 24 Pero tambin es cierto
que existen razones de peso para su independencia tanto acadmica como profesional: a/
epidemiolgicas: envejecimiento de las poblaciones, aumento de la cantidad y calidad de vida; b/
bibliogrficas: miles de artculos, decenas de revistas y libros especializados en este colectivo; c/
comparativas: si la geriatra es una especialidad mdica reconocida, tambin podra serlo la
odontogeriatra. Las mismas razones que asisten la existencia de la odontopediatra justificaran la
odontologa geritrica, sin olvidar que otras razones acadmicas han contribuido a la
consolidacin de determinadas disciplinas nuevas como esta; es decir, la creacin de pequeos
reinos de taifas donde un responsable puede reinar a placer y con contribuciones significativas en
este campo, no lo discutimos ya que los grandes reinos estn ocupados y con muchos
pretendientes en la lista de espera preceptiva.
Desde un punto de vista objetivo, las alteraciones, trastornos y enfermedades de los dientes y la
boca de los ancianos no difieren demasiado de lo que acontece en los adultos, excepto en
prevalencia y severidad. Al igual que consideramos al referirnos a la odontologa peditrica, la
razn ms consistente para su consideracin acadmica y profesional aislada lo constituye la
personalidad del grupo de edad, entendiendo por ello el manejo de la conducta, las
discapacidades, la morbilidad, la polifarmacoterapia, etc.
La primera de ellas es una actividad en franca expansin, bien probablemente por la creciente
complejidad del mundo actual y del odontolgico en particular, pero principalmente por las
intrnsecas caractersticas histolgicas de las estructuras dentales. En resumen, la tan citada caja
negra de nuestro organismo, esto es, la dentadura resuelve problemas de identificacin
cadavrica como ningn otro rgano puede hacer; de ah que cada vez se reclame con mayor
insistencia la presencia de peritos odontolgicos. Peritajes, valoracin de daos, reclamaciones,
etc., forman parte del universo odontolgico presente y futuro, tan lleno de luces como de sombras.
Todo ello requiere, no puede ser de otro modo, de una disciplina basada en la evidencia cientfica
que regule con bases slidas materias ciertamente delicadas. Lo mismo ha ocurrido hace ya
tiempo en un espejo donde es conveniente de vez en cuando mirarse, la medicina.
Todo el sistema de relacin entre los maxilares superior e inferior es ciertamente complejo. Existen
dos articulaciones condleas que funcionan coordinadas e influyendo en todos sus movimientos
hasta 16 elementos altamente heterogneos y de superficies irregulares que se oponen a otros 16
elementos en el maxilar antagonista (oclusin). Para complicarlo ms, los 32 elementos no estn
soldados rgidamente, sino articulados (gonfosis) con los huesos maxilares. Y todava ms, los
dientes tienen dos generaciones, y se gastan, se rompen, se pierden y se reponen. Todo ello
coordinado por un montn de msculos, con delicados sistemas de fijacin ligamento tendinosos y
bajo la atenta mirada del trigmino. Sin duda un mundo apasionante que merece un estudio
especfico y diferenciado. Algunas sociedades odontolgicas hace tiempo ya lo predican.
Exactamente lo mismo puede decirse de la odontologa con lser: un avance tecnolgico permite
disponer de una herramienta de corte y coagulacin limpia, potente y estril, aunque
lamentablemente no universal. Tanto la odontologa con lser como la odontologa microscpica se
justifican por la utilizacin de un notable progreso tcnico y tecnolgico en distintas facetas
odontolgicas y, de alguna manera, reclaman su parcela docente autnoma. No se puede olvidar
que existen libros y publicaciones especficas y sociedades cientficas que lo respaldan.
La odontologa del deporte es otro campo pluridisciplinar, no siendo su nexo cohesivo ni una
disciplina clnica diferenciada, ni un avance tcnico concreto, sino una particularidad de la boca de
su poblacin diana: que practica algn deporte. La medicina del deporte es actualmente, y desde
hace muy poco, una especialidad regulada por el sistema de especializacin MIR; existen
msteres universitarios reconocidos y profesionales que se dedican a la medicina deportiva, por lo
que es imaginable que en un (poco) tiempo la medicina del deporte ser una especialidad mdica
con un espacio acadmico y laboral propio como cualquier otra. La odontologa, como tantas otras
veces, sigue un proceso paralelo, ms tardo. Es opinable si la odontologa del deporte tiene un
cuerpo doctrinal suficientemente diferenciado o suficientemente prevalente para justificar su
estudio individualizado, pero creemos que dada la especializacin en todas las artes odontolgicas
y su creciente sofisticacin y tecnificacin, es muy probable que pueda ser una materia
odontolgica ms. El bagaje bibliogrfico, las demandas de los deportistas, la poblacin y los
dentistas, y, por supuesto, el tiempo implacable, darn la solucin.
Conclusiones
La odontologa actual ha alcanzado un impresionante grado de progreso y capacidad resolutiva.
La mayor parte del progreso en las disciplinas dentales es atribuible al desarrollo tecnolgico,
habindose modificado muy poco las bases conceptuales de la odontologa.
El perfil actual del dentista est ms cercano al de un tcnico que trabaja para la salud que al de
una profesional de una ciencia mdica.
Bibliografa recomendada
Para profundizar en la lectura de este tema, el/los autor/es considera/an interesantes los artculos
que aparecen sealados del siguiente modo: *de inters **de especial inters.
1. Sackett DL. Medicina basada en la evidencia. Como ejercer y como ensear la MBE. Madrid:
Churchil Livingstone, 1997. [ Links ]
3. Ortega y Gassett J. La revolucin de las masas. Madrid: El Pais SA. Clsicos del siglo XX,
2002:150. [ Links ]
4. RAE. Diccionario de la lengua espaola. 21 ed. Madrid: Espasa Calpe SA, 1992. [ Links ]
7. Simon WJ. Higlights of operative dentistry in America, 1859-1959. Int Dent J 1960;2:173-
82. [ Links ]
10. Sturdevant CM, Barton RE, Sockwell CL, Strickland WD. Arte y ciencia de la operatoria dental.
Buenos Aires: ed. mdica panamericana, 1986. [ Links ]
11*. Seldin LW.(por el oversight committee, American Dental Associationof dentist report). El futuro
de la Odontologa. J Am Dent Assoc (ed. esp) 2002;5:9-21. [ Links ]
Anlisis completo, realizado por un comit de expertos de la ADA, referido a la situacin actual de
la odontologa en casi todos sus aspectos y previsiones para el futuro inmediato.
12*. Salsench J. Los retos de la odontologa clnica. (Editorial). J Am Dent Assoc (ed. esp)
2002;5:9. [ Links ]
Editorial realista y directa que postula que el progreso tcnico actual de la odontologa no puede ni
debe eludir los principios bsicos en los que se sustenta la disciplina, cada vez ms sofisticada.
13. Leonardo MR, Leal JM, Simoes Filho AP. Endodoncia. Tratamiento de los conductos
radiculares. Buenos Aires: ed. mdica panamericana, 1983. [ Links ]
14. Siqueira JF jr. Taxonomic changes of bacteria associated with endodontic infections. J Endod
2003;29:619-23. [ Links ]
17. Hugoson A, Ljungquist B, Breivik T. The relationship of some negative events and psychological
factors to periodontal disease in adult Swedish population 50 to 80 years of age. J Clin Periodontol
2002;29:247-53. [ Links ]
18. Abandar JM. Global risk factors and risk indicators for periodontal diseases. Periodontology
2000 2002;29:177-206. [ Links ]
19. Katz S, McDonald JL, Stookey GK. Odontologa preventiva en accin. Buenos Aires: ed.mdica
panamericana, 1986. [ Links ]
20*. Andrews LF. The six keys to normal occlusion. Am J Orthod 1972;62:296-309. [ Links ]
Artculo fundamental, origen del desarrollo de los aparatos ortodncicos de arco recto.
23*. Brnemark PI, Albrektsson T, Zarb GA(ed). Tissue integrated prostheses. Osseointegration in
clinical dentistry. Chicago: Quintessence, 1985. [ Links ]
Exposicin y desarrollo de los fundamentos de la implantologa actual, predecible.