Concurrencia de Acreedores
Concurrencia de Acreedores
Concurrencia de Acreedores
Cdigo: 20134892
INTRODUCCIN
El presente trabajo tiene por finalidad acercar al lector a qu consiste la
concurrencia de acreedores, los tipos de concurrencia de acreedores que
existen. As tambin dar a conocer acerca de la buena fe que reviste la
concurrencia de acreedores y responder preguntas que se irn formando a lo
largo del presente trabajo.
A manera de comenzar, el Derecho debe determinar de una manera muy clara
los procedimientos a seguir por una persona que desea ser considerada
propietaria o detentadora sobre determinado bien. (Hernndez 1993: 185). Es
as que la concurrencia de acreedores busca resolver el problema cuando varios
acreedores tienen un mismo derecho sobre un bien determinado.
1
Nombre: Paul Steven Cabana Aguilar
Cdigo: 20134892
2
Nombre: Paul Steven Cabana Aguilar
Cdigo: 20134892
Pblico dando fe de la misma, tales como las Escrituras Pblicas, las minutas
con fecha o firma legalizadas y los contratos privados (que no revistan la forma
de minutas) con fecha o firmas legalizadas, adems de aquellos en los cuales
ha sobrevenido la muerte o incapacidad fsica de uno de los otorgantes. (1994).
Es as que la figura de Concurrencia de Acreedores establecer el orden con
fecha cierta ms antigua cuando existan los documentos mencionados, siempre
que haya intervenido un notario pblico.
TIPOS DE CONCURRENCIA DE ACREEDORES
CONCURRENCIA DE ACREEDORES DE BIENES INMUEBLES
Artculo 1135: Cuando el bien es inmueble y concurren diversos acreedores a
quienes el mismo deudor se ha obligado a entregarlo, se prefiere al acreedor de
buena fe cuyo ttulo ha sido primeramente inscrito o, en defecto de inscripcin,
al acreedor cuyo ttulo sea de fecha anterior. Se prefiere, en este ltimo caso, el
ttulo que conste de documento de fecha cierta ms antigua.
Felipe Osterling seala que el precepto seala que ser preferido el acreedor
de buena fe cuyo ttulo haya sido inscrito o, en su defecto, aqul cuyo ttulo sea
de fecha anterior, salvo, en este ltimo caso, que el de alguno conste de
documento de fecha cierta ms antigua. (2007: 49).
Carlos Cdernas Quirs plantea el siguiente ejemplo:
Imaginmonos que D se obliga a transferir la propiedad de un bien
inmueble perfectamente individualizado a X, por documento privado, el 1
de julio de 202; a Y, por escritura pblica de 7 de agosto de 2002: y a Z,
tambin por escritura pblica de 15 de septiembre de 2002, la que se
inscribe en el Registro de la Propiedad Inmueble. Los tres actos son
compra-ventas. De acuerdo con el artculo 1135 del Cdigo Civil, a quien
deber preferirse en este caso ser a Z, siempre que se trate de un
acreedor de buena fe y en la medida en que se ha producido la inscripcin
correspondiente en el Registro. [] Lo que sucede en este caso es que
producida la declaracin de preferencia a favor de Z, ello determinar
automticamente que los otros ttulos que corresponden a actos
perfectamente vlidos- decaigan, se tornen inoponibles, ineficaces,
respecto del de Z. As, X, que hasta ese momento era el propietario
conforme al artculo 949 del Cdigo Civil, dejar de serlo. Su ttulo tendr
que ceder ante el de Z. (2004: 746-747).
De lo expuesto podemos concluir que se elegir a Z debido a que fue el nico
que inscribi su derecho, hacindolo pblico.
Javier Armaza Galdos, con respecto al que ha inscrito su derecho, menciona lo
siguiente
Tratndose de la venta realizada a varios compradores, en la que uno de ellos
haya inscrito su derecho, el hecho que finalmente se <<prefiera>> a quien,
obrando de buena fe, haya inscrito su derecho, no es una solucin que adviene
debido a la aplicacin de las normas sobre concurrencia de acreedores, sino que
el mrito a dicha solucin proviene de la observancia al principio de buena fe
registral (2014: 252 -253).
3
Nombre: Paul Steven Cabana Aguilar
Cdigo: 20134892
4
Nombre: Paul Steven Cabana Aguilar
Cdigo: 20134892
Es de advertir que lo establecido en el artculo 1670 presenta un orden
de preferencia distinto del contemplado en los artculos 1135 y 1136, pues
si bien se otorga la preferencia en primer trmino al arrendatario de buena
fe cuyo ttulo hubiera sido primeramente inscrito, como lo hace el artculo
1135, en defecto de inscripcin prefiere al arrendatario que ha empezado
a poseer el bien, es decir, aquel al que se le ha entregado, como lo hace
el artculo 1136. En defecto de posesin, se opta por preferir al
arrendatario cuyo ttulo sea de fecha anterior, salvo que el de alguno
conste de documento de fecha cierta, en que se entiende prevalecer el
de fecha cierta ms antigua, aun cuando el artculo 1670 no lo seale as,
como s lo hacen en cambio los artculos 1135 y 1136. (Crdenas
2004:751)
BUENA FE
Tanto los artculos 1135 y 1136 que nos hablan de concurrencias de acreedores
en bienes inmuebles y muebles mencionan acerca de la buena fe, que lo que se
proteger siempre es la buena fe.
Es aqu que debemos hacer mencin a lo dicho por Felipe Osterling Parodi,
Se ha afirmado con acierto que es principio elemental que la
garanta de los Registros no ampara ni puede amparar la mala fe.
[] el artculo IX del Ttulo Preliminar del Reglamento General
citado prescribe que las normas sobre los Registros no amparan la
mala fe, lo que concuerda con el inciso C) de su artculo 173, segn
el cual la nulidad que se declare respecto de una inscripcin puede
afectar al tercero adquiriente de un derecho, cuando se comprueba
que ha procedido de mala fe. [] ser preferido el acreedor cuyo
ttulo haya sido primeramente inscrito, siempre que hubiera
actuado de buena fe. (2007: 50).
La buena fe constituye en un principio rector del ordenamiento que cmo hemos
visto se encuentra dentro los mencionados artculos 1135 y 1136 e incluso que
tambin se toma en cuenta en el artculo 1670.
Y es que la funcin de la buena cumple con 3 funciones: tales como lo seala
Jos Luis Gil y Gil, interpretativa (adiuvare), completiva (supplere) y limitativa
(corrigere). En virtud de la primera funcin, el contrato ha de interpretarse segn
el parmetro de la buena fe [] En la funcin interpretativa, el acento se pone
en el papel del juez. La segunda funcin permite al juez completar las clusulas
y obligaciones contractuales, mediante deberes accesorios, que constrien al
deudor a ejecutar la prestacin de forma til. [] En tercer lugar, la funcin
limitativa permite al juez impedir el ejercicio de un derecho o poder. (2003: 121).
Como se pude ver, el papel de la buena fe puede crear interpretaciones, llenar
vacos y limitar derecho o poderes. Del mismo modo, Gastn Fernndez Cruz
reconoce la importancia de la buena fe, refirindose de la siguiente forma: Para
nosotros pues, la buena representar un principio jurdico: Principio en cuanto
vale en s mismo como un modelo, patrn o gua, y Jurdico porque cuando es
recogido por el Derecho suministra criterios de valorizacin y/o cambios de
situaciones preexistente" (1987: 167).
5
Nombre: Paul Steven Cabana Aguilar
Cdigo: 20134892
6
Nombre: Paul Steven Cabana Aguilar
Cdigo: 20134892
mximo para los derechos que recaigan sobre bienes registrados. La
posesin ser el signo de recognoscibilidad mayor para los derechos que
existan sobre bienes no registrados. (Hernndez 1993: 190).
De lo mencionado por Juan Luis Hernndez no cabe duda que posesin y
registro deben forman parte de la formulacin de los artculos 1135 y 1136, por
razones de seguridad y menos costos.
La importancia del Registro, segn Gunther Gonzales Barrn, es constituir en
sustito de los orgenes inciertos de la propiedad por otros de carcter cierto, y
con el aadido de la publicidad. De esta forma, el Estado organiza un sistema
que permite contar con un ttulo formal de prueba de los derechos, por cuya
virtud, el comprador, o el acreedor hipotecario, podr tener certeza de la
adquisicin. (2016: 47- 48).
De las palabras de ambos autores, entendemos la importancia del Registro, ya
que brinda informacin a terceros acerca de quin es el titular de un bien y que,
por otro lado, dota de certeza a estos terceros. Por lo que nos conduce a pensar
que el Registro va de la mano con la seguridad jurdica. Por estas razones, tanto
la posesin y el registro formularan los artculos 1135 y 1136.
Adicionalmente, esto radica de la publicidad de los derechos. Ac, nuevamente,
debemos hacer mencin de Juan Luis Hernndez, En atencin a lo antedicho,
consideramos que para poder gozar de un derecho en forma exclusiva tienen
que darse la condiciones necesarias para que el resto pueda tener la informacin
a su alcance de que tal derecho no les pertenece y, por lo tanto hacerlo oponible
erga omnes. (1993: 188).
ESTANDO CON NUESTRA FORMULACIN DE LOS ARTCULOS 1135 Y
1136, EXISTEN SITUACIONES QUE NO PREVEAN?
Carlos Crdenas Quirs nuevamente nos introduce al tema con un ejemplo.
D se obliga a transferir la propiedad de un automvil perfectamente
individualizado a X, por documento privado del 1 de julio de 2002; a Y, por
escritura pblica de 7 de agosto de 2002; y a Z, por escritura pblica de 15 de
septiembre de 2002, la que se inscribe en el Registro de Propiedad Vehicular.
A quin se prefiere en este caso? El artculo 1136 resulta insuficiente para
resolverlo. En tal supuesto, corresponde apelar a la analoga para resolver la
situacin y aplicar la regla del artculo 1135. Corresponder, en consecuencia,
preferir en el caso planteado a Z. (2004: 750 751).
Segn el artculo 1136 de nuestro Cdigo Civil, no hubiera existido problema si
es que el bien ya se hubiese entregado. Sin embargo, con el ejemplo planteado
por Carlos Crdenas resulta evidente que solo aplicando el artculo 1136 sera
insuficiente para resolver este caso debido a que se presentan documentos con
escritura pblica ms un Registro. Por lo que es necesario recurrir al artculo
1135 de bienes inmuebles para poder resolver el problema del asunto.
7
Nombre: Paul Steven Cabana Aguilar
Cdigo: 20134892
CONCLUSIONES
Podemos concluir como aspectos relevantes del trabajo en que la concurrencia
de acreedores forma parte de las obligaciones de dar bienes ciertos. Esta figura
surge cuando un deudor se compromete a entregar dicho bien cierto a diversos
acreedores, lo que lo distingue de entregar un bien cierto a un grupo de
acreedores originando la copropiedad.
La funcin principal de la concurrencia de acreedores es establecer un orden
entre todos los acreedores que reclaman su titularidad sobre el bien, a travs de
los documentos de fecha cierta, en su defecto, cuando se presenten varios
titulares, se preferir al documento con fecha cierta ms antiguo, es decir, que
haya existido presencia de un notario.
Dentro de nuestro ordenamiento se encuentra regulado 2 tipos de Concurrencia
de Acreedores sobre bienes inmuebles y muebles. Sin embargo, el tercer tipo,
sobre concurrencia de arrendatarios conforma la frmula perfecta debido a que
esta ltima recoge a la posesin y al registro. Debido a que la posesin ya genera
una informacin haca los terceros y, adicionalmente, el registro dota de mayor
publicidad en la titularidad, otorgando informacin ms certera de quin posee la
titularidad.
As tambin se ha visto que la buena fe impregna a todos los tipos de
concurrencia de acreedores, esto debido a que representa un principio jurdico,
una gua, un modelo. Adems de que no se puede amparar dentro de nuestro
ordenamiento la mala fe, es decir, premiar a aqul sujeto que actu de mala fe.
Tambin qued demostrado que a travs de los artculos 1135 y 1136 existen
situaciones que no las pueden resolver de forma separada, tal es el caso que se
necesita una interpretacin conjunta de ambos artculos. Por lo que, finalmente,
se debe seguir el modelo del artculo 1670, incorporando a la Posesin y al
Registro. Es decir, se debera optar por un solo tipo de norma que regule y
asimile estas 2 formulaciones (Posesin y Registro) y pueda dar solucin a
cualquier tipo de problema que se le plantee.
Esto debido a que compartimos la creencia que propone Juan Luis Hernndez
Gazzo, debido a que el autor reconoce que existe un sesgo por parte del
legislador en considerar que solo los bienes inmuebles se registran y los muebles
solo deben ser protegidos por la posesin. En ese sentido, el artculo 1670
incorpora estas 2 formulaciones, por lo que se debera dejar utilizar los artculos
1135 y 1136 para crear un solo artculo, que incorpore al registro y a la posesin
tanto para bienes registrables y no registrables. Ya que como lo seal Crdenas
Quirs, tanto el artculo 1135 y 1136, de forma independiente, no logran
responder ciertos vacos.
8
Nombre: Paul Steven Cabana Aguilar
Cdigo: 20134892
BIBLIOGRAFA
ARMAZA, Javier
2014 Derecho de las Obligaciones. Lima: Editorial Korif E.I.R.L.
CRDENAS, Carlos
2004 Notas acerca de la concurrencia de acreedores sobre un mismo
bien inmueble o inmueble. En DE BELANDE, Javier; BULLARD, Alfredo;
PIZARRO, Luis y Carlos Soto (editores). Homenaje a Jorge Avendao.
HERNNDEZ, Juan
1993 Reflexiones para una propuesta en materia de concurrencia de
acreedores. Ius et Veritas. Lima, ao 4, nmero 7, pp. 185-193.
FERNNDEZ, Mario
1987 La buena fe en la concurrencia sobre bienes inmuebles. En
Revista de Derecho PUCP. Lima, nmero 41, pp. 159 226.
GONZALES, Gunther
2016 Los principios registrales en el Conflicto Judicial. Lima: Segunda
edicin, Gaceta Jurdica.
GIL, Jos
2003 Principios de la buena fe y poderes del empresario. Sevilla:
Mergablum.
OSTERLING, Felipe
2007 Las Obligaciones. Octava edicin. Lima: Editora Jurdica Grijley
E.I.R.L.
OSTERLING, Felipe y Mario Castillo
1994 Tratado de la Obligaciones. Lima, Tomo 1, Fondo editorial Pucp.
OSTERLING, Felipe y Mario CASTILLO
2008 Compendio de Derecho de las Obligaciones. Consulta: 09 de julio
del 2017.
http://app.vlex.com.ezproxybib.pucp.edu.pe:2048/#WW/search/*/concurrencia+
de+acreedores/p2/WW/vid/378204254