Apuntes de Derecho Agrario PDF
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Miguel Alanís Fuentes: “Es una rama del derecho en general formada por un
conjunto de normas, leyes, reglamentos, principios, doctrina y jurisprudencia, que
tienen por objeto la resolución del programa agrario de México, es decir, el de la
satisfacción de las necesidades de la clase campesina, inspirándose en un espíritu
de justicia y equidad”.
Antonio Luna Arroyo: “El Derecho Agrario mexicano es una rama del derecho
público que regula la tendencia y economía de los ejidos, tierras comunales, nuevos
centros de población agrícola y en algunos aspectos, de la pequeña propiedad
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agrícola, ganaderos y forestales y algunos otros aprovechamientos colaterales, y la
mejor forma de llevarlos a cabo.
Luis Ponce de León Armenta: El Derecho Agrario “es una rama de la ciencia
jurídica que regula a través del conjunto de normas, principios y valores, la actividad
humana y su entorno natural, así como las relaciones que con motivo de la tenencia
de la tierra, la producción, explotación, comercialización y los procesos de
industrialización de la agricultura se dan, teniendo como finalidad hacer efectiva la
justicia social
NUESTRA PROPUESTA
Derecho Constitucional.
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Garantías individuales y sociales.
Amparo.
El amparo en materia agraria, contenido en el Libro Segundo de la Ley de Amparo,
establece un procedimiento especial del juicio de garantías para los campesinos,
donde se atiende precisamente a la protección de sus derechos sociales.
Derecho Administrativo.
A la materia administrativa le corresponde el estudio de la estructura, funciones y
actuación de la administración pública y la posición del gobernado frente a ella; en
nuestro caso, siempre pensando en las dependencias y organismos del Ejecutivo
encargados de la aplicación de la Ley Agraria, su normatividad reglamentaria y, en
general, la de las instancias gubernamentales participantes en la aplicación del
derecho agrario integral.
Derecho hidrológico.
Regulado por la Ley de Aguas Nacionales, publicada en el Diario Oficial de la
Federación el 1º de diciembre de 1992, la cual derogó a la Ley Federal de Aguas,
esta Ley es reglamentaria del Artículo 27 constitucional en la materia y tiene por
objeto regular la explotación, uso o aprovechamiento, distribución, control y
preservación de las aguas nacionales, sean superficiales o del subsuelo (artículos
1º y 2º).
Derecho forestal.
La Ley Forestal se publicó en el Diario Oficial de la Federación el 22 de diciembre
de 1992, con el objeto de regular el aprovechamiento de los recursos forestales del
país y fomentar su conservación, producción, protección y restauración (artículo 1º).
Formalmente, su aplicación es competencia de la Sagar (artículo 4º), actualmente
en transición por la reestructuración del sector forestal en la Secretaría de Medio
Ambiente, Recursos Naturales y Pesca (Semarnat).
Derecho Pesquero.
La Ley de Pesca es reglamentaria del Artículo 27 constitucional, en virtud de que el
párrafo cuarto de éste establece que le corresponde a la Nación el dominio directo
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de todos los recursos naturales de la plataforma continental y los zócalos
submarinos de las islas, en tanto que el párrafo sexto del mismo ordenamiento
señala que la explotación, uso o aprovechamiento de estos recursos por particulares
o sociedades, sólo podrán realizarse mediante concesiones otorgadas por el
Ejecutivo Federal, de acuerdo con las reglas y condiciones que establezcan las
leyes.
Derecho Minero.
Con fundamento en el Artículo 27 constitucional, párrafo cuarto, la minería es
también una actividad debidamente regulada, que guarda una estrecha relación con
el régimen de la propiedad rural por tratarse del subsuelo, que se encuentra sujeta
al régimen de la concesión que establece el párrafo sexto del citado ordenamiento.
Derecho Urbanístico.
Lo entendemos como un derecho relativamente nuevo, que nace de la
sistematización de elementos jurídicos dispersos relacionados con la
racionalización, ordenación y conducción de las ciudades, que sólo agrupados
aportan el perfil de su régimen legal, para dar solución a su problemática.3 Parte de
ésta son sin duda los asentamientos humanos irregulares y las reservas territoriales
indispensables para el crecimiento de las manchas urbanas.
Derecho Ecológico.
Deben observarse las disposiciones de la Ley General de Equilibrio Ecológico y
Protección al Ambiente en todos los aspectos que corresponden a los recursos
naturales en las tierras, bosques y aguas de los propietarios privados y sociales.
Derecho Fiscal.
Tiene relación con los derechos sociales que corresponden a los campesinos,
especialmente en su carácter de productores rurales y atendiendo a la necesidad
de impulsar el desarrollo del agrario, en materia tributaria se han establecido
disposiciones para un tratamiento especial.
Derecho Penal.
En materia de derecho penal resulta aplicable la clasificación tradicional de los
delitos en comunes y especiales, entendidos los primeros como aquellos que se
encuentran incluidos en el Código Penal, en tanto que los segundos son los que
están penados en leyes particulares por razón de la materia. Así pues, el derecho
penal tiene una presencia significativa en la materia agraria, ya que en ella tienen
lugar no sólo delitos comunes, específicamente tipificados, que ocurren en relación,
precisamente, con la propiedad inmueble de carácter rústico o de los semovientes
(ganado), sino que también existe una gran diversidad de los delitos especiales,
acorde con las distintas materias que también se relacionan con el campo y que,
por lo mismo, pueden ser aplicables a los propietarios sociales y privados.
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Derecho Procesal
Encontramos esta materia en la aplicación de los principios procesales en lo general
y en lo particular de aquellos que rigen al proceso agrario, denominado juicio
agrario, entendido como "el conjunto complejo de actos del Estado como soberano,
de las partes interesadas y de los terceros ajenos a la relación sustancial, actos
todos que tienden a la aplicación de una ley general a un caso concreto
controvertido para solucionarlo o dirimirlo".
Derecho Notarial.
Bajo los lineamientos del nuevo derecho agrario, la participación de la figura del
fedatario público es ya una exigencia de validez para determinados actos y
documentos y una conveniencia o necesidad para otros. Como ejemplo de los
primeros encontramos la celebración de asambleas de ejidatarios y comuneros, y
sus respectivas actas, que tengan por objeto los asuntos comprendidos en las
fracciones VII a XIV del artículo 23 de la Ley Agraria (artículo 28); y en el caso de
los segundos, encontramos la formalización ante fedatario público de la lista de
sucesión, como alternativa a su depósito ante el Registro Agrario Nacional (artículo
17), y ciertos contratos como el otorgamiento del usufructo de parcelas como medio
de garantía (artícu-lo 46), así como la notificación de enajenación de parcelas que
se debe realizar a los familiares del titular para efectos de ejercitar el derecho del
tanto (artículo 80).
Derecho Mercantil.
Su relación con el derecho agrario es ahora más estrecha, principalmente como
consecuencia de la derogación de la prohibición a las sociedades por acciones para
que adquieran el dominio de propiedad rural. Alrededor de las denominadas
sociedades civiles y mercantiles propietarias de tierras, la Ley Agraria ha creado
una estructura específica que debe ser cumplida, independientemente de la
normatividad que les corresponda a dichas personas morales por el Código Civil y
por la Ley General de Sociedades Mercantiles. Esta última es, además, de
aplicación supletoria en nuestra materia cuando se trata de vigilancia de las
sociedades (artículo 75, fracción V, LA).
Derecho Empresarial.
Como señalamos oportunamente, ahora las sociedades mercantiles pueden
adquirir la propiedad de tierras para destinarlas a su explotación comercial, por lo
que la empresa obtiene un redimensionamiento con su presencia en el campo.
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los núcleos indígenas, para quienes se ha exigido mayor respeto y presencia en la
vida nacional.
Derecho Laboral.
La Ley Federal del Trabajo señala que los trabajadores del campo son los que
ejecutan los trabajos propios y habituales de la agricultura, de la ganadería y la
silvicultura, al servicio de un patrón (artículo 279), y establece los derechos y
obligaciones de ambos.
Derecho Económico.
Le corresponde, entre otros múltiples aspectos, desentrañar y aplicar el concepto
del "desarrollo rural integral".9 que establece la fracción XX del Artículo 27
constitucional, a la que podríamos calificar como el capítulo económico
constitucional del campo, que tiene el propósito de generar empleo y garantizar a la
población campesina el bienestar y su participación e incorporación en el desarrollo
nacional, y de fomentar la actividad agropecuaria y forestal para el óptimo uso de la
tierra, con obras de infraestructura, insumos, créditos, servicios de capacitación y
asistencia médica, así como la regulación jurídica reglamentaria de este precepto
para planear y organizar la producción agropecuaria, su industrialización y
comercialización, por ser de interés público. En otras palabras, esta materia atiende
al régimen jurídico de la explotación y aprovechamiento del campo.
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garantías de respeto a la vida, libertad, propiedad, seguridad jurídica, legalidad,
igualdad, procreación, trabajo, pensamiento, petición, reunión y asociación,
posesión de armas, tránsito y correspondencia, religiosa y de libre concurrencia.
Las garantías sociales "son las disposiciones constitucionales que establecen y
regulan los derechos y prerrogativas de los grupos humanos, conforme a criterios
de justicia y bienestar colectivos. En tal sentido, son derechos del hombre, en su
característica de persona social, por quedar aquel vinculado ya sea a un grupo o a
una clase o bien a una comunidad determinada, y que el derecho garantiza con
sentido de integración, lo que impone un deber para el Estado, de suministrar
prestaciones específicas".
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La fusión de estos conceptos en el de reforma agraria se utiliza para hablar del
conjunto de las medidas económicas, sociales, políticas y legislativas que sirven
para modificar la estructura de la propiedad y de la producción de la tierra.
Estas reformas intentan evitar que la distribución de la tierra se halle en pocas
manos; porque en ese caso, los dueños (latifundistas) pueden especular con su
valor y no fomentan necesariamente su uso productivo.
No hay que olvidar que Zapata venía de regiones agrícolas donde el problema de
la tierra era secular. La reforma agraria zapatista es política, la primera reforma
agraria política del mundo.
ÉPOCA INDEPENDIENTE
A principios del Siglo XIX el número de indígenas desposeídos era ya muy grande,
llegaron a formar una masa de individuos oprimidos que consideraban a los
españoles la causa de su miseria; por eso la guerra de independencia encontró en
la población rural su mayor contingente; “esa guerra fue hecha por los indios
labriegos, guerra de odio en la que lucharon dos elementos: el de españoles
opresores y el de indios oprimidos
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El Problema Agrario surgió en México a raíz de las primeras disposiciones sobre
concesión de mercedes de tierra y reducciones de indios, porque ellas establecieron
el reparto entre indígenas y españoles sobre una base de desigualdad absoluta, la
que se acrecentó con el tiempo, hasta producir el malestar que impulsara a las
clases indígenas a iniciar y sostener la guerra de independencia. El Problema
Agrario, por tanto, nació y se desarrolló durante la época Colonial. Cuando México
logro independizarse llevaba ya este problema como una herencia de la época
Colonial.
Las primeras disposiciones que encontramos, dictadas por los poderes del México
Independiente, son las que tuvieron por objeto conceder a Esteban Austin, la
introducción de 300 familias en el territorio de Tejas, y dar los primeros pasos en la
colonización de nuestro país; para lo cual dictó La Junta Instituyente la primera ley
de nuestro gobierno en materia agraria, ley que fue suspendida poco tiempo
después por orden del Gobierno General.
Ligera huella imprime sobre esta materia, el decreto de 4 de Julio de 1823, que
concedía a los militares que probasen haber pertenecido al ejercito trigarante, en
recompensa de sus virtudes, una fanega de tierra y dos bueyes, en el lugar que
hubieren elegido para vivir. La mayor parte de las disposiciones legales sobre
terrenos baldíos y colonización, se hallan dominados por tres puntos:
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b) concesiones a los colonos extranjeros y
c) preferencia en la adjudicación de baldíos, a los vecinos de los pueblos cercanos
a ellos.
El 18 de Agosto de 1824, se dio el decreto más antiguo después del que dictó la
Junta Instituyente, en este decreto de ofrecía a los extranjeros, vinieran a
establecerse en México, ofreciendo seguridad en sus personas y sus propiedades,
con tal de que sujetaran a las leyes del País.
Pero en todos estos decretos aparece apenas como vaga y flotante la ¡idea de
utilizar los terrenos baldíos de la nación, sin pensar en establecer algún sistema
para el deslinde y fraccionamiento de dichos terrenos. Lo único que puede deducirse
de los referidos decretos, es que en ellos se da por sentado el principio de que, a la
Soberanía Nacional corresponde el dominio de los terrenos baldíos.
Teóricamente las leyes de colonización no eran malas, los legisladores parece que
hicieron la siguiente reflexión: En algunos lugares del País hay exceso de tierras
baldías y falta de Pobladores; en otros, al contrario, provocando una corriente de
inmigración de los puntos en que hay exceso de pobladores a aquellos en que
faltan, se lograra un perfecto equilibrio y la solución del problema agrario. Pero en
la práctica, las leyes a que hacemos mérito, fueron completamente ineficaces; lo
fueron, porque al dictarse no se tuvieron en cuenta las condiciones especiales de la
población rural mexicana, ni las que por el momento guardaba el país.
Las Leyes de colonización ni siquiera fueron conocidas por los indígenas, porque
los medios de comunicación eran retardados y difíciles, porque la mayor parte de
dicha población no sabía leer ni escribir, porque las revoluciones y asonadas, hacían
inconsistentes las disposiciones legales y por último, porque contradecían su
idiosincrasia. "El indio vive y muere en la miseria, pero en el pueblo de su nacimiento
al que se haya ligado por muchos lazos, la devoción al santo patrono de su pueblo,
las costumbres, las deudas etc, por estas razones fracasaron las leyes de
colonización."
Esta Ley es importante, porque autoriza los contratos del gobierno con empresas
de Colonización, a las que se conceden subvenciones y otras franquicias en favor
de las familias que lograsen introducir a la República, así como terrenos baldíos
para que se repartieran entre ¡os colonos con obligación de pagarlos en largos
plazos. La fracción V del artículo lo de esta ley, autoriza la formación de comisiones
exploradoras para medir y deslindar las tierras baldías, y la fracción IV del propio
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artículo, otorga a quien mida y deslinde un baldío, la tercera parte del mismo como
premio por el servicio.
Este empeño en colonizar nuestro territorio, lo analiza Don Wistano Luis Orozco, en
su Obra " Legislación y Jurisprudencia sobre Terrenos Baldíos": " Hemos visto
muchos actos legislativos emanados de nuestros gobiernos, que han tenido por
objeto distribuir y aumentar la Población del País. Este empeño en Colonizar nuestro
territorio obedece probablemente, como principal y más poderoso motivo, a un pueril
espíritu de imitación a los Estados Unidos.
Pero es seguro, que no han faltado al mismo tiempo ni buenos deseos ni buenos
propósitos al ánimo del Legislador. ¿Cuáles podían ser estos propósitos? Aumentar
en otro lugar las fuerzas sociales y materiales de la nación, con el contingente de
razas hermosas, fuertes y civilizadas traídas del Antiguo Mundo.
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propiedad raíz sea necesaria para la creación de nuevas empresas industriales." La
idea de restringir en vez de favorecer la inmigración extranjera la apoyaba Don
Wistano Luis Orozco en consideraciones de tipo nacionalista y se oponía a la
inmigración con los siguientes argumentos: " El aumento de la Población es un bien
para el Estado, si por la extensión de su territorio y por la sabiduría de sus leyes, los
medios de subsistencia crecen en igual o mayor proporción que la multiplicación o
aglomeración de la humana especie. De otra forma el crecimiento de la Población
es un mal Publico."
"No es lo importante tener una densa población, sino tenerla de hombres bien,
mantenidos, bien educados, sanos y fuertes." " El ideal de una sociedad feliz, seria
una agrupación de familias que disfrutaran sin exceso de todas las comodidades
honestas de la vida; donde la miseria y las enfermedades fueran cosas
desconocidas; donde no existiera el contraste de la opulencia orgullosa y de la
abyecta indigencia; donde el amor y las mutuas consideraciones formaran el vínculo
social; donde el ordenado reparto de las riquezas garantizara la dignidad e
independencia de cada uno, haciendo imposible la tiranía oligárquica de los unos y
la esclavitud mísera de los otros. Una sociedad en fin, culta, piadosa, alegre,
virtuosa, sana, fuerte y laboriosa, con abundantes medios materiales de
subsistencia, comodidades, goces y adelanto. Este ideal no se realizara nunca
completamente en el mundo. Pero acercarse a el cuanto sea posible, debe ser el
constante y decidido afán de todo gobierno ilustrado y justo."
En efecto, para que un propietario pudiera poner a salvo sus terrenos y no fueran
considerados como baldíos, al llegar las compañías, necesitaba presentar los títulos
que acreditaban su propiedad y su extensión, pero como la mayoría de los
propietarios, carecían de títulos perfectos, se vieron en la dura disyuntiva de
entablar juicios contra esas compañías, que casi siempre perdían, no podían tener
los recursos y la influencia de estas empresas que generalmente contaban con el
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apoyo oficial, incluso los mismos funcionarios del gobierno tenían interés en las
famosas compañías, finalmente entraban en composiciones, pagando ínfimas
cantidades por las extensiones de tierras que poseyesen sin título o con título
defectuoso.
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legislativas tendieron a ser más políticas que técnicas. Era obvio que con tales
medidas, no se distribuyera la tierra, ni la población, ni. se resolvería el problema
agrario. Lo más grave fue que con apoyo en la Colonización, se permitió la fatal
colonización extranjera en el norte de la República, que provoco el
desmembramiento del país; cara resulto la experiencia para que finalmente se
sentaran las bases mediante las cuales un extranjero pueda obtener tierras, porque
nos costo la mitad del territorio nacional, el sacrificio de muchos mexicanos y un
maligno precedente.
LA PROPIEDAD DE LA IGLESIA
Los bienes de la iglesia que ya eran cuantiosos durante la Colonia, en la época del
México Independiente continuaron acrecentándose, de acuerdo con la relación del
Doctor José María Luis Mora, la propiedad de la Iglesia podía clasificarse de la
siguiente manera:
- Correspondían también a los bienes del clero los edificios de templos, iglesias y
monasterios y los capitales adquiridos por concepto de diezmos, primicias y
limosnas.
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- Bienes destinados a Colegios, Seminarios, hospitales y en general a instrucción y
beneficencia Pública.
Todos estos bienes, según el Dr. Mora, alcanzaban hasta fines de 1832 una valor
de 1791163,754.00, Pallares considera que este es el cálculo más minucioso que
se haya hecho sobre el valor de los bienes eclesiásticos. Don Lucas Atamán, calculo
que los bienes del Clero eran del orden de los 300'000,000.00, y Don Miguel Lerdo
de Tejada, decía que los bienes del Clero andaban entre 250'000,000.00 a
300*000,000.00, no existen medios para precisar con exactitud el Monto del Capital
de la Iglesia, pero basta con observar los datos anteriores para darse una idea de
los bienes que la mano muerta había tomado en el país.
La situación económica del país empeoraba cada día a consecuencia entre otras
cosas, de la amortización eclesiástica y de las circunstancias políticas.
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Este es el panorama ambiental que nos presenta la existencia de un problema
agrario, que el tiempo y el crecimiento de la población, los errores técnicos y las
ineficaces leyes agrarias, agudizaron durante la primera etapa del México
Independiente, también son los antecedentes legales y políticos de las Leyes de
desamortización y nacionalización de bienes de la Iglesia que veremos en nuestro
siguiente capítulo.
DERECHO PUBLICO: que está constituido por los conjuntos de normas que regulan
las relaciones delos particulares con el estado.
DERECHO PRIVADO: que está constituido por los conjuntos de normas que
regulan las relaciones delos particulares con los particulares.
DERECHO SOCIAL: está constituido por los conjuntos de normas que regulan,
tutelan y protege la clase social más desprotegida. (Éste derecho nace en un
principio del derecho público)
A) El Derecho Agrario es una rama del Derecho Privado, porque sus instituciones
participan de la misma naturaleza, es decir, las relaciones de coordinación son las
que se encuentran presentes, incluso participa del carácter patrimonial propio de lo
privado.
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carácter mixto; o bien domina alguno de los aspectos antes señalados (posición
ecléctica).
Para esta triple concepción en torno a la clasificación del Derecho Objetivo (Rama
Pública, Privada y Social) tenemos una tesis, que ante las objeciones de la Doctrina,
presenta una mayor precisión.
En esta tercera rama, los intereses individuales y del Estado se conjugan, dando
lugar a relaciones jurídicas de naturaleza peculiar, que se denominan de
integración.
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Esta perspectiva trilateral, que ha puesto en crisis la división tradicional de la
Sistemática Jurídica, ha sido el origen de los siguientes conceptos:
DERECHO SOCIAL: Aquella rama del derecho formada por el conjunto de normas
e instituciones que establecen y desarrollan principios y procedimientos de carácter
protector en favor de grupos o sectores demográficos (y de las personas que forman
parte de ellos), que se encuentran en desventaja patrimonial respecto al conjunto
social; su objeto es lograr la convivencia de los diferentes estratos de la comunidad
en base a principios de equidad y equilibrio entre los diferentes poderes
económicos.
PRIMERO: El interés social al que da respuesta, un interés que se perfila por encima
del interés individual, cuantitativa y cualitativamente, pero que se encuentra en
desventaja con respecto al interés público. Su respaldo constitucional lo
encontramos en la consagración de garantías de tipo social al lado de las Garantías
individuales.
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TERCERO: La naturaleza de las relaciones que ha de regular, no puede ser
consideradas de coordinación (entre iguales), ni de subordinación (entre gobernante
y gobernado), por lo que es calificada de integración, a raíz de su carácter tutelar
para que con un grupo social cuantitativamente más importante que un particular,
pero que se presume cualitativamente más vulnerable. Las relaciones
fundamentales a regular por el Derecho Social pueden darse:
i) Entre el Estado y el grupo, o bien entre el Estado y alguno(s) de los miembros del
grupo.
ii) Entre los particulares y el grupo, o bien entre particulares y alguno (s) de los
miembros del grupo.
iii) Entre los diversos grupos, o bien entre los miembros de los mismos.
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Ley de Pesca;
Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente;
Ley de Asociaciones Agrícolas;
Ley de Asociaciones Ganaderas; Ley de Distritos de Desarrollo Rural;
Ley de Expropiación;
Ley de Fomento Agropecuario;
Ley Federal de Sanidad Animal;
Ley Federal de Sanidad Vegetal;
Ley Federal de Variedades Vegetales;
Ley Minera;
Ley Orgánica de los Tribunales Agrarios;
Ley Reglamentaria del Artículo 27 constitucional en materia nuclear; Ley
Reglamentaria del Artículo 27 constitucional en materia del petróleo
Ley Agraria.
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o Altepetlalli. Tierras propiedad del barrio.
o Calpulli. Tierras que se les repartieron a cada jefe de familia, para que las
cultivaran y sostuvieran.
o Miltchimalli. Con éstas tierras se sostenían al ejército.
o Teotlalpan. Eran las tierras de los dioses, el producto se destinaba al
mantenimiento de los gastos que originaba el culto.
La Desposesión de la Tierra
El siglo XIX fue tan conflictivo que la atención al campo y su desarrollo quedaron
relegados, surgiendo grandes y poderosos latifundistas que no fueron lo
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suficientemente sensibles y generosos para hacer participar de sus utilidades a los
campesinos y trabajadores. Por el contrario, lejos de alentarlos, los explotaban
El Inicio de la Revolución
Fue con el Plan de San Luis Potosí que se levantaron en armas la mayoría de los
campesinos, en tal Plan estaba mencionado la promesa de devolvérseles a éstos
las tierras que les fueron despojadas. Pero aunque el levantamiento triunfó, no se
cumplieron las promesas agrarias, lo cual generó inconformidad entre diversos
líderes y caudillos.
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Este proceso se inició con la Ley Agraria del 6 de enero de 1915, emitida por
Carranza en Veracruz, la cual recogió el aspecto nodal de la lucha zapatista, pues
ordenó la restitución de tierras arrebatas a raíz de una interpretación dolosa de la
legislación de julio de 1856 y estipuló la dotación para aquellos pueblos que
carecieran de ella.
Los años que van de 1920 a 1934 se caracterizaron por hegemonía que lograron
imponer los sonorenses Álvaro Obregón y Plutarco Elías Calles al resto de los
generales revolucionarios. Como presidentes de la República, ambos se
caracterizaron por considerar al ejido como una forma transitoria que deberían
culminar en la formación y consolidación de una pequeña propiedad.
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Durante los años de 1930 a 1966 la producción agrícola de México creció más
rápidamente que su población, contribuyendo significativamente al desarrollo
general del país.
PLAN EXTRACTO
1.- PLAN DE AYALA El Plan de Ayala fue una proclamación
política, promulgada y firmada por el
jefe revolucionario mexicano Emiliano
Zapata, dentro de la Revolución
mexicana el 28 de noviembre de 1911,
en el que desconoció el gobierno del
presidente Francisco I. Madero, a quien
acusó de traicionar las causas
campesinas
2.- DISCURSO DE LUIS CABRERA DE El licenciado Cabrera, según dijo en su
03 DE DICIEMBRE DEL 1912 notable discurso pronunciado el 3 de
diciembre de 1912 en la Cámara de
Diputados, expuso desde el mes de
abril de 1910, la conveniencia de
reconstruir los ejidos de los pueblos
como medio de resolver el problema
agrario que planteó con toda claridad.
Para esto, afirmo, es necesario pensar
en la reconstitución de los ejidos,
procurando que éstos sean
inalienables, tomando las tierras que se
necesitan para ello de las grandes
propiedades circunvecinas, ya sea por
medio de compras, ya por medio de
expropiaciones por causa de utilidad
pública con indemnización, ya por
medio de arrendamientos o aparcerías
forzadas.
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que igualen la pequeña propiedad con
la gran propiedad.
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reparto que estimen conveniente,
ajustándose a lo que en la ley dispone.
Se publica en el Diario Oficial la reforma que da por finalizado el reparto agrario para
otorgar certidumbre jurídica al campo; se suprimen todos los preceptos que
reglamentaban el reparto agrario y señalaban las instituciones encargadas del
mismo. A partir de ahora, con el mismo propósito de otorgar certidumbre jurídica al
campo, se crearán tribunales federales agrarios autónomos, integrados por
magistrados propuestos por el presidente de la República y designados por el
Senado, quienes tendrán bajo su plena jurisdicción los conflictos agrarios.
Asimismo, se crea una Procuraduría de Justicia Agraria. De este modo, la reforma
pretende proporcionar seguridad jurídica en la tenencia de la tierra, necesaria para
que la producción y la productividad aumenten y por lo tanto, el bienestar de las
familias campesinas.
Desde su primer informe de gobierno Carlos Salinas había expresado: “El reparto
masivo de tierras ha concluido. Quien afirme que todavía existen millones de
hectáreas por repartir está mintiendo”.Más tarde, el 1º de Noviembre de 1991, en
su tercer informe, Salinas anunció la decisión de impulsar una profunda reforma a
la Constitución y a las leyes en materia agraria. Tras intensos debates que
cimbraron la estructura del Partido Revolucionario Institucional PRI, porque se
abandonaba una de las instituciones emblemáticas de la Revolución Mexicana y se
afectaba seriamente uno de sus sectores fundamentales en los que cimentaba su
poder, el 7 de diciembre de 1991 la reforma fue aprobada por la Cámara de
Diputados y el 12 de diciembre del mismo año, por el Senado de la República.
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En el mes de febrero siguiente, se expedirá una nueva ley reglamentaria del artículo
27, que permitirá la asociación entre ejidatarios e inversionistas privados; la
enajenación de tierras ante instituciones de crédito para la obtención de recursos
económicos; la entrega de títulos de propiedad definitiva a los ejidatarios; y la
asociación entre ellos para ampliar la superficie cultivable de modo que sea
redituable la modernización de la explotación agrícola.
Para Edmar Salinas Callejas (Balance General del Campo Mexicano 1988-2002),
“lo que el presidente Salinas trató de lograr con esta reforma fue legalizar los predios
agrícolas para regular la propiedad y asegurar el patrimonio de los propios
campesinos. La razón de privatizar las tierras de labor fue atraer la inversión privada
al campo ya que en la situación de “inenajenabilidad” la tierra no podía ser garantía
de crédito; sin embargo, el carácter de “inenajenabilidad” fue para evitar un nuevo
proceso de reconcentración de tierras y es en este sentido que el espíritu de la ley
agraria ejidal fue trastocado…. Los regímenes revolucionarios no quisieron ni
supieron generar un proyecto que pudiera convertir a la institución ejidal en una
alternativa de desarrollo económico y bienestar social; se centraron en facilitar la
acumulación urbano industrial y mantener la dominación política. En este sentido el
sistema ejidal sirvió para reproducir un régimen de producción ineficiente que
alimentó su propio circulo vicioso de pobreza y, en esta situación, trastocar su
carácter de inenajenabilidad condena al ejido a su desmembramiento”.
Concluirá así el ciclo de la revolución agraria que se inició en 1910 y que creó el
ejido en 1917. Hasta antes de la presente reforma existía la obligación del gobierno
de dar tierra a todo el que la solicitara; sin embargo, el crecimiento de la población
rural estimulado por mejores condiciones de alimentación y salud que disminuyeron
la mortalidad infantil, así como la creciente escasez de tierras fértiles a repartir, sin
afectar las grandes propiedades en producción, fueron haciendo perder eficacia a
los propósitos originales del reparto agrario. Además, salvo el gobierno del general
Lázaro Cárdenas y quizás el de López Mateos, los demás presidentes confiaron
más en las empresas agropecuarias para satisfacer la demanda nacional y no
dieron oportunidad al ejido de probar sus bondades productivas. Fue así que el ejido
fue cayendo en el minifundio, a priori incapaz de absorber tecnologías modernas y
de lograr altos rendimientos, propios de una producción a mayor escala. Pero los
beneficios esperados de la presente reforma sólo llegarán para el sector
agroexportador; el grueso de los campesinos abandonará más rápidamente las
tierras de labor para emplearse en las ciudades o para emigrar a los Estados
Unidos.
11.- EL EJIDO
El Artículo 27 constitucional, fracción VII, reconoce la personalidad jurídica de los
núcleos de población ejidales y comunales
Pero ¿Qué es el ejido?
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Ejido (del latín exitus, "salida") es el "campo común de un pueblo, lindante con él,
que no se labra, y donde suelen reunirse los ganados o establecerse las eras".
En México, el ejido es una propiedad rural de uso colectivo aún existente, y que
fue de gran importancia en la vida agrícola del país.
Tierras de uso común: son aquellas que se encuentran entre los límites de otros
terrenos. Se trata de zonas comunes que todos los vecinos pueden utilizar pero que
no pertenecen a ninguno en particular.
Cabe mencionar que cuando tuvo lugar en México la Revolución Agraria, el Estado
expropió grandes fracciones de territorio a los Hacendados para poder repartirlas
entre los que carecían de vivienda, la gente más pobre. Dichos terrenos podían ser
trabajados pero no vendidos; aunque sí podían heredarse. A quienes recibieron
estas tierras se les conoció como ejidatarios.
Los ejidos operan de acuerdo con su reglamento interno, sin más limitaciones en
sus actividades que las que dispone la ley. Su reglamento se inscribirá en el
Registro Agrario Nacional, y deberá contener las bases generales para la
organización económica y social del ejido que se adopten libremente, los requisitos
para admitir nuevos ejidatarios, las reglas para el aprovechamiento de las tierras de
uso común, así como las demás disposiciones que conforme a esta ley deban ser
incluías en el reglamento y las demás que cada ejido considere pertinentes.
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¿Qué es el reglamento interno del ejido?
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II. Con el certificado parcelario o de derechos comunes; o
III. Con la sentencia o resolución relativa del tribunal agrario.
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II. Por renuncia a sus derechos, en cuyo caso se entenderán cedidos en
favor del núcleo de población;
III. Por prescripción negativa, en su caso, cuando otra persona adquiera sus
derechos en los términos del artículo 48 de la ley.
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XII. Terminación del régimen ejidal cuando, previo dictamen de la
Procuraduría Agraria solicitado por el núcleo de población, se determine
que ya no existen las condiciones para su permanencia;
XIII. Conversión del régimen ejidal al régimen comunal;
XIV. Instauración, modificación y cancelación del régimen de explotación
colectiva.
¿QUIEN CONVOCA A ASAMBLEA GENERAL DE EJIDATARIOS?
La asamblea podrá ser convocada por el comisariado ejidal o por el consejo de
vigilancia, ya sea a iniciativa propia o si así lo solicitan al menos veinte ejidatarios o
el veinte por ciento del total de ejidatarios que integren el núcleo de población ejidal.
Si el comisariado o el consejo no lo hicieren en un plazo de cinco días hábiles a
partir de la solicitud, el mismo número de ejidatarios podrá solicitar a la Procuraduría
Agraria que convoque a la asamblea.
La asamblea deberá celebrarse dentro del ejido o en el lugar habitual, salvo causa
justificada. Para ello, deberá expedirse convocatoria con no menos de ocho días de
anticipación ni más de quince, por medio de cédulas fijadas en los lugares más
visibles del ejido.
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fracciones VII a XIV del artículo 23, la que quedará instalada únicamente cuando se
reúna la mitad más uno de los ejidatarios.
En la asamblea que trate los asuntos detallados en las fracciones VII a XIV del
artículo 23 de la ley, deberá estar presente un representante de la Procuraduría
Agraria, así como un fedatario público.
Al efecto, quien expida la convocatoria deberá notificar a la Procuraduría sobre la
celebración de la asamblea, con la misma anticipación requerida para la expedición
de aquélla y deberá proveer lo necesario para que asista el fedatario público.
La Procuraduría verificará que la convocatoria que se haya expedido para tratar los
asuntos a que se refiere este artículo, se haya hecho con la anticipación y
formalidades que señala el artículo 25 de la ley. Serán nulas las asambleas que se
reúnan en contravención de lo dispuesto por este artículo.
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representante de la Procuraduría Agraria que asistan a la misma e inscrita en el
Registro Agrario Nacional.
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III. Convocar a asamblea cuando no lo haga el comisariado
¿Cómo se eligen a los miembros del comisariado ejidal y consejo de
vigilancia?
Los miembros del comisariado y del consejo de vigilancia, así como sus
suplentes, serán electos en asamblea.
El voto será secreto y el escrutinio público e inmediato.
En caso de que la votación se empate, se repetirá ésta y si volviere a empatarse
se asignarán los puestos por sorteo entre los individuos que hubiesen obtenido
el mismo número de votos.
¿Cuáles son los requisitos para ser miembro del comisariado ejidal y
consejo de vigilancia?
Para ser miembro de un comisariado o del consejo de vigilancia se requiere ser
ejidatario del núcleo de población de que se trate, haber trabajado en el ejido
durante los últimos seis meses, estar en pleno goce de sus derechos y no haber
sido sentenciado por delito intencional que amerite pena privativa de libertad.
Asimismo, deberá trabajar en el ejido mientras dure su encargo.
¿Cuánto duran en su encargo el comisariado ejidal y consejo de vigilancia?
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parte de Norteamérica, la “mesoamericana”. Esta región se caracterizaba por la
existencia de estados jerarquizados, clases sociales, religiones centralizadas
con castas sacerdotales y la práctica de una agricultura intensiva. Mesoamérica,
pues, estaba y está formada por una serie de áreas o regiones, que muestran
características específicas de cada cultura; por ello, hasta nuestros días, puede
hablarse del área maya, el área huasteca, el área zapoteca y el área mixteca,
entre otras, pero todas forman parte de la civilización mesoamericana.
Nuestro breve y sumario esbozo histórico no versará sobre la organización
político-social y agraria de todas las culturas o etnias que existieron en nuestro
territorio mexicano, tan sólo nos referiremos a dos culturas que por sus
contraposiciones de organización político social y agraria, destacaban antes de
la conquista; la organización de los tenochcas o aztecas que dominaban gran
parte del territorio nacional y que tenían una de las civilizaciones más
evolucionadas de la época precolonial, así como a la civilización maya, quienes
por las condiciones peculiares del suelo en que se desenvolvió presenta un
contraste en gran parte a la organización de los aztecas, lo que tiene como
propósito de dejar claro sobre el origen de la propiedad comunal en nuestro país.
La cultura azteca
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La organización política de los aztecas se funda en un principio democrático,
pues el supremo jefe, llamado tlacatecutli, era designado por elección, y se
seleccionaba tomando en consideración sus virtudes personales y sus hechos
guerreros. Según la tradición histórica, Acamapixtlí fue el primer gobernante que
se consigna.
El signo distintivo del gobierno indígena era la religión, que impregnaba a todas
las instituciones, tanto sociales como económicas y, por supuesto, políticas: el
jefe tlatoani o tlacatecutli, que los españoles le llamaron rey o emperador, era al
mismo tiempo el jefe religioso, en torno a él giraba el gobierno y en la vida
práctica era reverenciado. Su señorío apenas tenía como límite en su poder, la
influencia del consejo de ancianos.
• Cuarta categoría. Aquí figuran los pipiltzin, hijos, nietos y bisnietos de los
señores supremos. A los supremos señores, con pleno señorío y jurisdicción, les
estaban sujetos otros inferiores llamados comúnmente “caciques”
Sistema social
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La organización social de los aztecas o tenochcas estaba constituido por grupos
de personas emparentadas entre sí, formando barrios específicos, asentados en
áreas determinadas de la ciudad, que dieron origen a lo que se conoce como
calpulli, institución sociopolítica de los aztecas con un marcado carácter
totémico.
Sistema económico
Tierras públicas
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c) Mitlchimalli, tierras cuyos frutos se destinaban al sostenimiento del ejército y
a gastos de guerra.
Las referidas tierras se otorgaban para recompensar los servicios de los señores
y eran tierras cultivadas por los macehuales, labradores asalariados y aparceros
o mayeques.
Tierras comunales
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• Si el titular de una parcela dejaba de cultivarla por más de dos años
consecutivos, era amonestado y requerido para que la cultivase al año
siguiente y si no lo hacía perdía sus tierras retornando al calpulli.
• La menoría de edad, ser huérfano, enfermo o muy viejo, eran las causas
justificadas para no cultivar la tierra.
• Sólo por causa justificada el titular de una parcela podía ser desposeído de
ella.
La cultura maya
Con el dominio de las dinastías Cocom, Itza y Xiu, la vida de las comunidades
sufrió una profunda transformación: por el despojo de sus propiedades, por
la sujeción de parte de su producto a una condición tributaria, por la
conversión de macehuales a esclavos al servicio del señor.9 Con lo que se
presume la existencia de un sistema de derecho clasista en la formación
social y en la repartición de la tierra, y un poder político estrechamente ligado
a la religión como institucionalizadora del poder político y como sostén del
status quo social.
Sistema económico
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La base de su economía fue la agricultura y el maíz el producto más
importante, más no exclusivo: El reconocimiento de la existencia de otros
productos, no solamente el maíz, ha llevado a establecer la hipótesis de que
los mayas prehispánicos desarrollaron el policultivo, ya que este tipo de
técnica se adaptaba óptimamente a los problemas del agotamiento del suelo,
la maleza, las plagas y la escasez de tierras.
La comunidad
I. En sentido estricto podría confundirse esta voz con las figuras jurídicas
del ejido y con los núcleos de población que la ley crea o reconoce
como figuras fundamentales de la acción de reparto y restitución de
tierras. A veces, en la vida real llega a contraponerse comunidad
agraria, que sería la comunidad formada por aquellas personas que
fueron incluidas en el censo que sirvió de base para el reparto o
restitución individual de tierras y los restantes vecinos de la misma
población, que fueron expresamente excluidos del censo de referencia
o que no pertenecen sencillamente a dicho ejido, suscitándose no sólo
enconadas rivalidades, sino un trato desigual por parte del sistema
encargado de otorgar auxilios y beneficios a dichas comunidades
agrarias.
II. II. En sentido amplio, también significa o abarca a toda la población
rural, sean o no ejidatarios todos sus componentes. La misma ley da
pie para esta noción, toda vez que, por un lado, autoriza al ejido a
entregar lotes para vivienda a personas que no pertenezcan al ejido;
mientras que, por otro lado, la ley impone ciertas obligaciones de
solidaridad respecto de obras y servicios hechas por el ejido a las
demás personas avecindadas.
La comunidad es una modalidad en la configuración de la propiedad de los
núcleos agrarios. Esta denominación por lo general se identifica con la
comunidad indígena, lo cual no siempre es correcto ya que el término se
refiere específicamente al tipo de posesión de la tierra .
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cualquiera que sea su situación jurídica, conserven todas sus propias
instituciones sociales, económicas, culturales y políticas, o parte de ellas”.
Como elementos distintivos encontramos los siguientes:
• Un espacio territorial, demarcado y definido por la posesión.
• Una historia común que circula de boca en boca y de generación en
generación.
• Una variante de lengua del pueblo a partir de la cual identificamos nuestro
idioma común.
• Una organización que define lo político, cultural, social, civil, económico y
religioso.
• Un sistema comunitario de procuración y administración de justicia. Para
entender cada uno de sus elementos hay que tener en cuenta ciertas
nociones: lo comunal, lo colectivo, la complementariedad y la integridad, que
tienen las características que la definen y son:
• La tierra como madre y como territorio.
• El consenso en asamblea para la toma de decisiones.
• El servicio gratuito como ejercicio de la autoridad.
• El trabajo colectivo como acto de recreación.
• Los ritos y ceremonias como expresión del don comunal. Más que cosas
son personas, la geometría comunal
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mayor población indígena que mestiza, así como también hay comunidades
agrarias y ejidos con mayor población mestiza que indígena.
Las tierras que corresponden a los grupos indígenas deberán ser protegidas
por las autoridades, en los términos de la Ley que reglamente el artículo 4º y
el segundo párrafo de la fracción VII del Artículo 27 constitucional (artículo
106).
Deberán inscribirse en el Registro Agrario Nacional: Los títulos primordiales
de las comunidades, y en su caso, los títulos que las reconozcan como
comunidades tradicionales (art. 152, frac. III). En los juicios en que se
involucren tierras de los grupos indígenas, los Tribunales deberán de
considerar las costumbres y usos de cada grupo mientras no contravengan
lo dispuesto por esta ley ni se afecten derechos de tercero. Asimismo, cuando
se haga necesario, el Tribunal se asegurará de que los indígenas cuenten
con traductores (art. 164, segundo párrafo).
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de la sociedad con el fin de obtener las condiciones para la subsistencia y
reproducción de una colectividad y de cada una de las unidades que la
forman.
Mario Ruiz Massieu hace referencia al documento presentado por México en
la Segunda Conferencia Mundial de Reforma Agraria Rural celebrada en la
sede de la FAO en Italia, publicado en 1979, donde se señala que:
(…) La comunidad es el núcleo de población con personalidad jurídica y es
titular de derechos agrarios, reconocidos por resolución presidencial
restitutoria o de confirmación, sobre sus tierras, pastos, bosques y aguas, y
como unidad de producción cuenta con órganos de decisión, ejecución y
control, que funcionan de acuerdo con los principios de democracia interna,
cooperación y autogestión conforme a sus tradiciones y costumbres.
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Acciones agrarias de las que deriva el reconocimiento de un núcleo agrario
como comunidad
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en cultivos genéricos y cultivos específicos. Son cultivos específicos, el algodón,
plátano, caña de azúcar, café, henequén, hule, palma, vid, olivo, quina, vainilla,
cacao, agave, nopal o árboles frutales.
Por exclusión, son cultivos genéricos cualquier otro que sea diferente a los que han
sido consignados, vg. Maíz, trigo, hortalizas, etc. En cultivos genéricos, una persona
física, puede ser propietaria de una superficie de 100 Has, de tierras de riego, o 200
de temporal o 400 de agostadero de buena calidad, u 800 de monte o agostadero
en terrenos áridos,
Aquí es conveniente aclarar las diferencias que existen entre las diversas calidades
de tierra, así:
-Tierras de temporal: Son aquéllas cuya humedad, está sujeta a los ciclos
pluviométricos de la región, en el entendido de que estos son constantes, vg. La
parte sur de Tamaulipas, en la cual las épocas de lluvia y estiaje están
perfectamente definidas. La época de lluvias, abarca desde mayo a noviembre. y el
estiaje los meses restantes.
- Tierras de agostadero de buena calidad:Igual que las tierras de temporal, su
humedad depende de las lluvias, sólo que en estas regiones los ciclos
pluviométricos, no se encuentran tan definidos como en las tierras de temporal ya
que puede haber años o temporadas en que las lluvias no caen o caen
irregularmente.
- Tierras de monte o agostadero en terrenos áridos: En los terrenos de monte, puede
llover mucho, sólo que por su grado de pendiente o inclinación, hacen difícil la
posible la práctica de la agricultura. En tanto que las tierras de agostadero en
terrenos áridos, son regiones en las que casi nunca llueve.
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- 200 hectáreas en tierras de temporal. Este tipo de tierras, reciben su humedad por
medio de los ciclos pluviométricos de la región, o sea la lluvia, En estas regiones la
estación de lluvias está muy bien definida y es constante todos los años, sin
embargo como se sustentan a base de fenómenos meteorológicos imprevisibles por
exceso o por falta de temporales, la ley les asigna un menor valor que a las tierras
de riego y permite al propietario poseer hasta 200 hectáreas de tierra en esta
categoría.
- 400 hectáreas de agostadero de buena calidad. Al igual que las tierras de temporal,
la humedad de estas tierras está supeditada a las lluvias que caigan en la región,
sin embargo estas no caen en forma periódica, sus ciclos son irregulares, puede
llover un año y dejar de llover dos, por lo que la ley las considera de una categoría
inferior de las tierras de riego y de temporal, y como forma de compensar al
propietario, lo autoriza a poseer una extensión de hasta 400 hectáreas en esta
categoría de tierras.
- 800 hectáreas de monte o agostadero en terrenos áridos. Estas son las tierras
menos propicias para la agricultura: las tierras de monte, porque están ubicadas en
suelos cuya topografía es irregular, o dicho en forma coloquial son los cerros y las
montañas. Salvo contadas especies vegetales , no es factible el cultivo en terrenos
con pendientes mayores de 450 ., en tanto que el agostadero en terreno árido, es
una zona en que la lluvia ni es periódica, ni es constante, esta es ocasional y poco
frecuente, por tal motivo la ley permite que las personas físicas puedan ser
propietarias de terrenos con superficie hasta de 800 hectáreas.
El artículo 116, fracción II, de la Ley Agraria, reputa como tierras ganaderas, los
suelos utilizados para la reproducción y cría de animales mediante el uso de su
vegetación, sea esta natural o inducida.
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ganado mayor conforme a las equivalencias que determine y publique la Secretaría
de Agricultura, Ganadería Desarrollo Rural Pesca y Alimentación.
El artículo 116 frac. III, de la Ley Agraria, define este tipo de tierra corno los suelos
utilizados para el manejo productivo de bosques o selvas, en tanto que el artículo
119 de la misma Ley, considera que la pequeña propiedad forestal no debe exceder
de 800 has., sea cual fuere la calidad de las tierras.
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ENAJENACIÓN DE EXCEDENTES DE LA PEQUEÑA PROPIEDAD INDIVIDUAL
Y COLECTIVA
Tradicionalmente, los doctrinarios del derecho hacen una dicotómica división del
Contrato de Sociedad y así, diferencian las sociedades civiles y las sociedades
mercantiles, afirman que a las primeras las regulan los Códigos Civiles Locales en
tanto que a las segundas las regula la Ley General de Sociedades Mercantiles y la
Ley General de Sociedades Cooperativas.
SOCIEDADES CIVILES
Como antes expresamos, éstas son reguladas por la legislación civil de cada
entidad federativa.
SOCIEDADES MERCANTILES
El marco normativo de este tipo de personas morales, son la Ley General de
Sociedades Mercantiles y la Ley General de Sociedades Cooperativas y contempla
las siguientes figuras asociativas:
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y.- Sociedad en comandita por acciones
VI.- Sociedad cooperativa.
Rosenberg opina que: "la esencia del proceso civil moderno, se encuentra en una
comunidad de jueces y partes, en la que éstas deben preocuparse de facilitar al
juzgado el seguro hallazgo de la verdad, para restablecer en un procedimiento vivo,
la paz jurídica entre las partes en disputa, y con ello asegurar la paz de la
comunidad."
PRINCIPIOS PROCESALES.
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Inquisitivo y dispositivo.
Los procedimientos inquisitivos, doctrinalmente, son aquellos que se llevan de oficio
por parte del órgano jurisdiccional, los asuntos penales, en éstos, a actividad del
proceso no depende del estímulo de las partes, el Juez, promuevan o no las partes
en el juicio, impulsará éste hasta emitir la sentencia definitiva, el procedimiento
dispositivo, supone que el impulso procesal es responsabilidad de las partes en el
litigio.
DE LEGALIDAD.
Este principio se refiere a que todo tipo de actuaciones deberá fundarse en la Ley,
la Ley Agraria recoge este principio en el artículo 164 que establece: "en la
resolución de las controversias que sean puestas bajo el conocimiento de los
Tribunales Agrarios, éstas se sujetarán siempre al procedimiento previsto por esta
Ley, y quedará constancia de ello por escrito.
En los juicios en que se involucren tierras de los grupos indígenas, los Tribunales
deberán de considerar las costumbres y usos de cada grupo mientras no
contravengan lo dispuesto por esta Ley ni se afecten derechos de terceros."
Uno de los ideales de la ciencia jurídica es que dentro del proceso, tanto actor como
demandado, tengan las mismas oportunidades, el uno para probar la acción, y el
otro para probar su excepción, de esta manera el juzgador emitirá una sentencia
que refleje la verdad histórica, y no una mera verdad formal.
DE ORALIDAD
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otras pueden ser en forma oral, como se desprende de los siguientes artículos de
la Ley Agraria.:
ARTICULO 164.- "En la resolución de las controversias que sean puesta bajo el
conocimiento de los Tribunales Agrarios quedará siempre constancia de éstas por
escrito
ARTICULO 170 .- "El actor puede presentar su demanda por escrito, o por simple
comparecencia, en este caso, se solicitará a la Procuraduría Agraria, coadyuve en
su formulación por escrito de manera concisa"
ARTICULO 185.- "fracción 1.- Expondrán sus pretensiones por su orden, el actor su
demanda, y el demandado su contestación, y ofrecerán las pruebas que estimen
conducentes
DE PUBLICIDAD.
Dependiendo de la materia, los juicios pueden ser privados o públicos. Ejemplo del
primer tipo son los negocios civiles que sólo atañen a particulares y que en asuntos
de carácter familiar, involucran temas muy íntimos de ahí que la ley respete la vida
privada de los gobernados y no permita que sus controversias se ventilen
públicamente.
Por otra parte existen juicios de carácter público, los de carácter penal, y en nuestro
caso los de carácter agrario y expresamente el artículo 194 de la Ley Agraria señala:
ARTICULO 194.- "Las audiencias serán públicas, excepto cuando a criterio del
Tribunal pudiera perturbase el orden o propiciar violencia"
DE INMEDIATEZ.
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Si se lee con atención el artículo 185 de la Ley Agraria, se concluirá fácilmente que
el legislador ha querido la presencia constante y activa del Magistrado en la
audiencia del juicio agrario. Los secretarios pueden intervenir en la preparación de
la Audiencia, así como en los actos preliminares pero ha de ser el Magistrado quien
presida la Audiencia y reciba las pruebas".
DE CONCENTRACIÓN PROCESAL
Siguiendo al mismo autor, este señala: "Por lo que respecta al agrupamiento de los
actos procesales, se contraponen los principios de concentración y continuidad.
Aquel obedece al propósito —vinculado con la celeridad del procedimiento- de
congregar concentrar el mayor número de actos en una sola audiencia o en un muy
reducido número de audiencias, inmediatas entre sí; el segundo favorece, en
cambio, el desahogo espaciado de los actos procesales a intervalos más o menos
largos. En la legislación procesal agraria, hay un manifiesto propósito de
concentración, se pretende que la absoluta mayoría de los actos del procedimiento
con la excepción de la demanda y el emplazamiento, y la posible salvedad de la
contestación de la demanda, se realicen de una sola vez, es decir, en una sola
audiencia, que puede comenzar con la contestación de la demanda, y concluir con
la sentencia.- El artículo 185 de la Ley Agraria refleja el proyecto de concentración
procesal."
DE CELERIDAD
DE DEFENSA MATERIAL.
Existen dos puntos en controversia por la impartición de la justicia, por una parte el
apego del Juzgador al principio de estricto derecho, o bien el apego a la defensa
material que supone la búsqueda de la verdad histórica, lo cual conlleva la suplencia
del Juez en la deficiencia de una o ambas partes en el proceso.
Sergio García Ramírez, en su obra comentada, nos señala que: "El principio de
defensa material, no implica por supuesto, parcialidad del Juzgador sólo que éste
utiliza la amplia capacidad de indagación y corrección de deficiencias que la ley le
concede, en aras de la equidad".
DE EFICACIA PROCESAL
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Este tema se refiere a la validez y solidez de los actos procesales. Ya que sólo
podrán ser invalidados a través del recurso legal correspondiente, algunos cuando
se emita la correspondiente sentencia y otros, excepcionalmente por vía de amparo
indirecto
DE OBJETIVIDAD E IMPARCIALIDAD.
Los judicantes agrarios deben apegarse a los principios de objetividad e
imparcialidad, sus sentencias deben ser construidas sobre las pruebas allegadas al
juicio, ya sea por las partes o por el Tribunal mismo, sus decisiones no pueden ser
subjetivas, repetimos, sino que deben basarse en las pruebas rendidas, al respecto
la Ley Agraria señala:
Lo anterior no significa que sólo las personas mencionadas sean los únicos sujetos
en el Juicio Agrario, con carácter secundario o auxiliar, también intervienen con
carácter de sujetos, aunque de rango inferior, los testigos, peritos, etc,
b.- Ejidatarios
c.- Avecindados.
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Su personalidad se acredita con la Carta de Avecinamiento expedida por el
Comisario Ejidal o con el Acta de Asamblea donde conste su admisión al ejido
d.- Poseedores
De la manera siguiente:
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I.- De las controversias por límites de terrenos entre dos o más núcleos de población
ejidal o comunal, y de éstos con pequeños propietarios, sociedades o asociaciones;
Fracción reformada
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