Analisiscprg
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Artículo 2º.- Deberes del Estado. Es deber del Estado garantizarle a los habitantes
de la República la vida, la libertad, la justicia, la seguridad, la paz y el desarrollo
integral de la persona.
"Al referirse a los deberes del Estado respecto a los habitantes de la República, le impone
la obligación de garantizar no solo la libertad, sino también otros valores, como son los de
la justicia y el desarrollo integral de la persona, para lo cual debe adoptar las medidas que
a su juicio sean convenientes según lo demanden las necesidades y condiciones del
momento, que pueden ser no solo individuales sino también sociales”
“El principio de seguridad jurídica que consagra el artículo 2º. De la Constitución, consiste
en la confianza que tiene el ciudadano, dentro de un Estado de Derecho, hacia el
ordenamiento jurídico; es decir, hacia el conjunto de leyes que garantizan su seguridad, y
demanda que dicha legislación sea coherente e inteligible; en tal virtud, las autoridades en
el ejercicio de sus facultades legales, deben actuar observando dicho principio,
respetando las leyes vigentes, principalmente la ley fundamental”
TITULO II
Derechos Humanos
CAPITULO I
Derechos individuales
“Nuestra Constitución agrupa los derechos humanos dentro del Título II de la misma, pero
claramente se distingue que en el capítulo I, bajo acápite de Derechos Individuales,
figuran los que la doctrina divide en civiles y políticos, mientras que en el Capítulo II,
denominado Derechos Sociales, agrupa los derechos humanos que se conocen como
económico -sociales- culturales. Los derechos individuales muestran claramente su
característica: unos, los civiles, con un contenido negativo que implica obligaciones de no
hacer y los otros, los políticos, el reconocimiento de la facultad que los ciudadanos tienen
para participar en la organización, actuación y desarrollo de la potestad gubernativa”
"Esta Corte advierte que los derechos individuales contenidos en la parte dogmática de la
Constitución, no se conciben en forma absoluta, sino que las libertades están sujetas a la
ley, la que establece los límites naturales que dimanan del derecho real e incontrovertible
de que el individuo vive en un régimen de interrelación".
- Artículo 3º.- Derecho a la vida. El Estado garantiza y protege la vida humana
desde su concepción, así como la integridad y la seguridad de la persona.
“el derecho a la vida está contemplado en el texto supremo (artículo 3) como una
obligación fundamental del Estado, pues el propio preámbulo de la Constitución afirma la
primacía de la persona humana como sujeto y fin del orden social, y de allí que en la ley
matriz también se regule que el Estado de Guatemala debe organizarse para proteger a la
persona humana (artículo 1) y que por ello, debe garantizar a los habitantes de la
República (entre otros aspectos) la vida y su desarrollo integral (artículo 2) por lo que este
derecho constituye un fin supremo y como tal merece su protección.”
Artículo 4º.- Libertad e igualdad. En Guatemala todos los seres humanos son
libres e iguales en dignidad y derechos. El hombre y la mujer, cualquiera que
sea su estado civil, tienen iguales oportunidades y responsabilidades.
Ninguna persona puede ser sometida a servidumbre ni a otra condición que
menoscabe su dignidad. Los seres humanos deben guardar conducta
fraternal entre sí.
"el principio de igualdad, plasmado en el artículo 4o. de la Constitución Política de la
República impone que situaciones iguales sean tratadas normativamente de la misma
forma; pero para que el mismo rebase un significado puramente formal y sea realmente
efectivo, se impone también que situaciones distintas sean tratadas desigualmente,
conforme sus diferencias. Esta Corte ha expresado en anteriores casos que este principio
de igualdad hace una referencia a la universalidad de la ley, pero no prohíbe, ni se opone
a dicho principio, el hecho que el legislador contemple la necesidad o conveniencia de
clasificar y diferenciar situaciones distintas y darles un tratamiento diverso, siempre que
tal diferencia tenga una justificación razonable de acuerdo al sistema de valores que la
Constitución acoge
“La cláusula precitada reconoce la igualdad humana como principio fundamental, que ha
sido estimado en varias resoluciones de esta Corte. Al respecto debe tenerse en cuenta
que la igualdad no puede fundarse en hechos empíricos, sino se explica en el plano de la
ética, porque el ser humano no posee igualdad por condiciones físicas, ya que de hecho
son evidentes sus desigualdades materiales, sino que su paridad deriva de la estimación
jurídica. Desde esta perspectiva, la igualdad se expresa por dos aspectos: Uno, porque
tiene expresión constitucional; y otro, porque es un principio general del Derecho.
Frecuentemente ha expresado esta Corte que el reconocimiento de condiciones
diferentes a situaciones también diferentes no puede implicar vulneración del principio de
igualdad, siempre que tales diferencias tengan una base de razonabilidad”
Artículo 5º.- Libertad de acción. Toda persona tiene derecho a hacer lo que la
ley no prohíbe; no está obligada a acatar órdenes que no estén basadas en
ley y emitidas conforme a ella. Tampoco podrá ser perseguida ni molestada
por sus opiniones o por actos que no impliquen infracción a la misma.
“los derechos individuales contenidos en la parte dogmática de la Constitución no son
concebidos en forma absoluta; así, el exceso de libertad no es libertad pues importa su
ejercicio para unos y la negación del igual derecho que a tal ejercicio tienen los demás. La
doctrina del Derecho Constitucional afirma que no pueden existir libertades absolutas y
que los derechos individuales son limitados en cuanto a su extensión; ninguna
Constitución puede conceder libertades sin sujeción a la ley que establezca los límites
naturales que devienen del hecho real e incontrovertible de que el individuo vive en
sociedad, en un régimen de interrelación”
"El artículo 5 de la Constitución Política de la República se refiere a órdenes que no estén
basadas en ley y no a resoluciones judiciales que, no solo tienen que estar legalmente
fundamentadas, sino razonadas conforme al criterio de quien resuelve, pudiendo todo
aquél que se estime afectado y que no se encuentre de acuerdo con lo resuelto, hacer
uso de los medios de impugnación que la ley establece para el efecto"
Artículo 6º.- Detención Legal. Ninguna persona puede ser detenida o presa, sino por
causa de delito o falta y en virtud de orden librada con apego a la ley por autoridad judicial
competente. Se exceptúan los casos de flagrante delito o falta. Los detenidos deberán ser
puestos a disposición de la autoridad judicial competente en un plazo que no exceda de
seis horas, y no podrán quedar sujetos a ninguna otra autoridad. El funcionario, o agente
de la autoridad que infrinja lo dispuesto en este artículo será sancionado conforme a la
ley, y los tribunales, de oficio, iniciarán el proceso correspondiente.
Artículo 7º.- Notificación de la causa de detención. Toda persona detenida
deberá ser notificada inmediatamente, en forma verbal y por escrito, de la
causa que motivó su detención, autoridad que la ordenó y lugar en el que
permanecerá. La misma notificación deberá hacerse por el medio más rápido
a la persona que el detenido designe y la autoridad será responsable de la
efectividad de la notificación.
Cuando hay personas detenidas de inmediato se notifica de forma verbal o escrita el por
qué fue aprehendida.
Artículo 8º.- Derechos del detenido. Todo detenido deberá ser informado
inmediatamente de sus derechos en forma que le sean comprensibles,
especialmente que pueda proveerse de un defensor, el cual podrá estar
presente en todas las diligencias policiales y judiciales. El detenido no podrá
ser obligado a declarar sino ante autoridad judicial competente.
El detenido tiene la oportunidad de saber sobre los derechos que tiene, jamás podrá ser
obligado a declarar sino ante autoridad judicial competente.
Artículo 9º.- Interrogatorio a detenidos o presos. Las autoridades judiciales
son las únicas competentes para interrogar a los detenidos o presos. Esta
diligencia deberá practicarse dentro de un plazo que no exceda de
veinticuatro horas. El interrogatorio extrajudicial carece de valor probatorio.
“Respecto del plazo referido, el artículo 9° de la Constitución no precisa a partir de qué
momento debe computarse, bien fuera del momento de la consignación al tribunal o de la
detención de la persona. Esta duda quedó legalmente despejada a tenor del artículo 87
del Código Procesal Penal, que lo determina a partir del momento de la aprehensión. Esto
significa, que descontando las seis horas que la autoridad ejecutiva tiene como máximo
para consignar a un detenido, quedarían dieciocho horas para hacer comparecer al
aprehendido a efecto de que preste su declaración. Estos tiempos, por precarios que
parezcan dentro de una realidad de sobrecarga de asuntos a resolver (algunos que
exigen la inmediación personal del juez) no exime para que se cumpla con ellos, por
tratarse de derechos públicos subjetivos de razonable exigibilidad. La normativa
constitucional y la legal persiguen que la detención preventiva o cautelar se prolongue lo
menos posible, articulando para ello medidas que, de no ser por conductas específicas,
permiten en general un régimen de libertad controlada mediante las denominadas
medidas sustitutivas, a fin de hacer prevalecer los valores de la libertad y de presunción
de inocencia”
Artículo 11.- Detención por faltas o infracciones. Por faltas o por infracciones
a los reglamentos no deben permanecer detenidas las personas cuya
identidad pueda establecerse mediante documentación, por el testimonio de
persona de arraigo, o por la propia autoridad. En dichos casos, bajo pena de
la sanción correspondiente, la autoridad limitará su cometido a dar parte del
hecho a juez competente y a prevenir al infractor, para que comparezca ante
el mismo dentro de las cuarenta y ocho horas hábiles siguientes. Para este
efecto, son hábiles todos los días del año, y las horas comprendidas entre
las ocho y las dieciocho horas. Quienes desobedezcan el emplazamiento
serán sancionados conforme a la ley. La persona que no pueda identificarse
conforme a lo dispuesto en este artículo, será puesta a disposición de la
autoridad judicial más cercana, dentro de la primera hora siguiente a su
detención.
Por infracciones a los reglamentos no deben permanecer detenidas las personas las
cuales comprueben su identificación con su documentación en orden. Salvo que la
persona no pueda identificarse conforme lo manda la ley, será puesta a disposición de la
autoridad judicial más próxima, dentro de la primera hora siguiente a su detención.