Claves para El Estudio Del Texto - Apéndice
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ÍNDICE GENERAL
Prólogo 9
CAPíTULO 1
El texto y la situación comunicativa
1. El proceso de la comunicación 15
2. El texto 21
2.1 El texto y la oración 21
2.2. El texto como objeto cultural 25
2.3. El texto lingüístico .: 26
3. Hablar, norma y sistema 31
3.1. Las competencias 35
4. El texto y el contexto 37
5. Los deícticos 42
5.1. Deícticos que designan a las personas de la
circunstancia comunicativa 44
5.2. Deícticos que se refieren al espacio de la
circunstancia comunicativa 46
5.3. Deícticos que se refieren al tiempo de la
circunstancia comunicativa 46
CAPíTULO 2 (
La Coherencia ~
1. La coherencia textual 53
1.1. La designación, el significado y el sentido 59
2. La progresión temática 64
3. El tema del texto 66
4. Las macrorreglas 67
5. Procedimientos de Cohesión 69
5. 1. Procedimientos gramaticales 69
5. 2. Procedimientos léxicos 76
211
CAPíTULO 3
APÉNDICE
Tipologías Textuales
Principales Corrientes Lingüísticas
1. Funciones del Lenguaje 89
del Siglo XX
2. Tipos de Textos según la estructura 95
1. Las bases del
2.1. Algunos intentos clasificatorios 97
Estructuralismo europeo: Saussure 179
2.2. Tramas textuales 98
1.1. El objeto de la lingüística: la lengua 179
2. 2. 1. Un enfoque particular de las
1.2. Lengua y habla ; 179
tramas narrativa y argumentativa 106 1.3. Caracteres del signo lingüístico 182
2.3. Formatos textuales : 113 1. 3. 1. Arbitrariedad 183
1. 3. 2. Linealidad 183
1. 3. 3. Inmutabilidad 184
1. 3. 4. Mutabilidad 184
CAPíTULO 4 1. 4. El valor linqúfstico 185
Actos de Habla 1.5. Relaciones sintagmáticas y asociativas 186
1. ¿Qué es la pragmática? 119 1.6. Sincronía y diacronía : 187
2. Teoría de los Actos de Habla 121 2. Tendencias Posteriores al
2. 1. Actos de habla directos e indirectos 128 Estructuralismo de Saussure 189
2. 2. Macroacto de habla 130 2. 1. De la estructura a la función:
3. Los contenidos implícitos 132 André Martinet 191
3. 1. Presuposiciones semánticas 137 2. 2. Del signo a la enunciación:
3. 2. Presuposiciones pragmáticas 137 Émile Benveniste 195
3. 3. Presupuestos y sobreentendidos 139 3. GramáticaGenerativo- Transformacional 198
4. Las modalidades 4. Lingüística del Texto 201
y 105 modalizadores : 142 Gramática del texto 205
Bib·li09~ 207
212 213
Principales
Corrientes Língüístícas
del Siglo XX
1. LAS BASES
DEL ESTRUCTURALISMO EUROPEO:
SAUSSURE
179
Si hay dos personas que conversan: A y B, el proceso comienza
en el cerebro de A donde se asocia un concepto a una imagen
acústica (fenómeno psíquico). El cerebro transmite un impulso a los
órganos articulatorios para que se produzca la fonación (fenómeno
fisiológico) y, posteriormente, las ondas sonoras se propagan de la
boca de A al oído de B (fenómeno físico). Luego, el circuito se cierra
en orden inverso: del oído de B a su cerebro, donde se asocia la
imagen acústica al concepto.
Audición Fonación
i = imagen acústica
- - - -~------
----~
Fonación Audición
A B
180
En síntesis, en este acto se combinan tres tipos de fenómenos:
psíquico (asociación de imágenes verbales y conceptos), fisiológico
(audición y fonación) y físico (ondas sonoras).
Frente a esta heterogeneidad del lenguaje, Saussure afirma
que no debe confundirse la lengua con el lenguaje, si bien es una
parte esencial del mismo. "Mientras que el lenguaje es heterogéneo,
la lengua así delimitada es de naturaleza homogénea: es un sistema
de signos en el que sólo es esencial la unión del sentido y de la
imagen acústica, y en el que las dos partes del signo son igualmente
psíquicas" (Saussure, 1994, p.41).
Si bien el lenguaje presenta siempre dos caras: lengua y habla,
el estudio de la lengua es fundamental y el estudio del habla es
secundario.
¿Cuáles son las diferencias principales entre lengua y habla?:
LENGUAJE
LENGUA HABLA
SOCIAL: es "la parte social" del len- INDIVIDUAL: es "un acto individual
guaje. Existe en virtud de una espe- de voluntad e inteligencia", es decir,
cie de contrato establecido entre los el uso del sistema por parte del ha-
miembros de una comunidad. No está blante.
completa en ningún individuo sino
que es la suma de lo que está depo-
sitado en el cerebro del conjunto de
individuos de una comunidad.
0
HOMOGÉNEA: es un sistema de sig- HETEROGÉNEA: incluye la f~ión,
nos de naturaleza psíquica. por lo tanto implica un estudio psico-
físico.
SISTEMA: es un "sistema" de signos EVOLUCiÓN: El habla hace evolu-
convencionales y arbitrarios que sir- cionar la lengua.
ve para comunicarse.
Imagen
Acústica ........... Significante
182
1. 3. 1. Arbitrariedad:
El signo lingüístico es arbitrario porque la relación entre el
significado y el significante es convencional, no hay ningún vínculo
natural que los una. Por eso, existen distintas lenguas y un mismo
significado puede tener diferentes significantes. Como ejemplifica
Saussure, el concepto de "árbol" se representa por: tree (inglés), baum
(alemán), árbol (castellano), arbre (francés) y albero (italiano).
La arbitrariedad del signo lingüístico no quiere decir que el
significan te surja de la libre elección de un sujeto hablante (un
individuo no puede cambiar nada en un signo una vez que éste
quedó establecido en un grupo lingüístico), sino que es inmotivado
respecto del significado, ya que no hay un vínculo necesario entre
ambos. Si entre ellos hubiese un lazo natural, todos los hombres
hablarían la misma lengua.
1. 3. 2. Linealídad:
"El significant , por s\ r de naturaleza auditiva, se desarrolla
sólo en el tiempo y ti ne lo caracteres que toma de él: a) representa
una extensión, y b) esa extensión es mensurable en una sola
dimensión: es una línea" (Saussure, 1994, p. 107).
Todo el mecanismo de la lengua depende de la naturaleza
acústica de los elementos lingüísticos que se suceden unos a otros
formando una cadena. Esta característica del signo lo diferencia de
los demás signos de los sistemas no lingüísticos de comunicación.
Cuando vemos una señal de tránsito o una bandera roja en la playa,
percibimos todo el signo en varias dimensiones simultáneas. En
cambio, al escuchar un enunciado o leerlo, vamos captando cada
uno de los signos sucesivamente, en una cadena de elementos
consecutivos. Por eso es imposible pronunciar dos fonemas al
mismo tiempo o escribir dos grafías en el mismo lugar.
En síntesis, el carácter lineal de los signos lingüísticos deriva
de la naturaleza vocal del lenguaje, por la cual los fonemas se
producen en el tiempo en forma consecutiva y el oído los percibe
como una sucesión.
183
1. 3. 3. Inmutabílidad:
El signo lingüístico, una vez aceptado por una comunidad y
heredado de generaciones anteriores, no puede ser modificado por
la acción voluntaria de un individuo ni por la masa social. "De hecho,
ninguna sociedad conoce ni ha conocido jamás la lengua de otro
modo que como un producto heredado de las generaciones prece-
dentes y que hay que aceptar tal cual" (Saussure, Ferdinand de,
1994, p. 110).
¿Por qué es imposible todo cambio lingüístico general y
súbito? Saussure da cuatro respuestas fundamentales a este inte-
rrogante:
1- Como el signo lingüístico es arbitrario no hay motivos lógicos
para preferir un significante u otro para determinado significa-
do.
2- Los signos lingüísticos son innumerables.
3- El sistema de la lengua es un mecanismo muy complejo que
necesita ser estudiado científicamente. Cualquier cambio im-
plicaría el trabajo de especialistas, gramáticas, lógicos, etc.
Hasta ahora ninguna injerencia de esa naturaleza ha dado
resultado.
4c La resistencia de la inercia colectiva a toda innovación lingüís-
tica, ya que la lengua pertenece a todos los individuos de la
comunidad que la utiliza y porque hay una solidaridad con el
pasado del cual se la hereda.
1. 3. 4. Mutabilidad:
El tiempo asegura la continuidad de la lengua, pero también
tiene sobre ella otro efecto aparentemente contradictorio ya que
altera más o menos rápidamente los signos lingüísticos. Por eso
puede hablarse de la mutabilidad e inmutabilidad del signo ya que
la lengua se transforma sin que los sujetos puedan transformarla.
Esa alteración que se produce se refiere a "un desplazamiento
de la relación entre el significado y el significante" (Saussure, 1994,
p.113).
184
Una lengua no puede defenderse de todos aquellos factores
que van desplazando la relación de ambos términos porque la
relación entre ellos es arbitraria. Además, es innegable que el
tiempo altera todo y no hay motivo para que las lenguas escapen a
esta ley general.
1. 4. El valor lingüístico
Si bien Saussure define al signo lingüístico como una entidad
psíquica formada por significado y significan te, aclara que para
comprender la idea de valor no se puede considerar sólo al término
(unión de imagen acústica con concepto) aislado del sistema del
cual forma parte. Así se cometería el error de creer que un sistema
lingüístico se forma a partir de la .suma de signos, cuando, por el
contrario, hay que empezar po(!a totalidad para llegar a los elemen-
tos que lo integran. ~
¿Cuál es la diferencia entre lo que se denomina valor y
significación de un signo? Como ya hemos visto, la significación
es la contrapartida de la imagen auditiva,es el concepto, dentro de
los límites de la palabra" considerada como un dominio cerrado, que
existe por sí mismo.
Significado
2. Saussure aclara que no se pueden considerar sinónimos los términos palabra y signo
lingüístico (o unidad lingüística) porque hay entre ellos diferencias. Hay palabras que
tienen subunidades (sufijos, prefijos, radicales) y, por el contrario, hay unidades más
largas que las palabras como por ejemplo: "sil vous plait" (por favor). Plantea como un
problema delicado la delimitación de las unidades lingüísticas e indica que esta dificultad
diferencia a la lengua de todas las demás instituciones semiológicas.
185
El valor resulta de la relación de la totalidad del signo con los
demás signos del sistema.
Significado
_ f--=-,,-::----I_ f-~- ---I _ t--------i
Significante
186
L
vocablos adquiere su valor por oposición a los que le anteceden o
le siguen o a ambos. Esta es una relación sintagmática (in
praesentia), entre los elementos presentes en un sintaqrna."
Por otro lado, fuera del discurso, las palabras que tienen algo
en común se asocian en la memoria formando grupos con relaciones
muy diversas. Por ejemplo, el término enseñanza -según Saussure-
evoca inconscientemente otra serie de palabras como enseñar,
enseñamos; aprendizaje, educación; templanza, esperanza; lanza,
balanza; etc. De una manera u otra tienen algo en común: el radical,
el siqniñcadc, el sufijo o la semejanza acústica. Estas relaciones se
llaman f1soc~ativas (in absentía) y unen términos en una serie
mnemórudvirtual (no presente en el sintaqrna)." Una palabra
siempre puede traer a la memoria todo lo que puede asociársele de
una forma u otra.
Así como en un sintagma los términos tienen un orden y un
número determinado, los elementos de una familia asociativa no
tienen nunca orden establecido y generalmente no tienen número
definido." Saussure ejemplifica estos dos tipos de relaciones que se
establecen en la lengua con una analogía arquitectónica: una
.columna se relaciona con el arquitrabe al que sostiene (dos unida-
des presentes en el espacio) y si la misma es de estilo dórico,
provoca la comparación mental con los otros órdenes: jónico y
corintio (elementos ausentes en ese espacio).
187
Según el lingüista, todo estudio científico (pero fundamental-
mente la lingüística) debe tener en cuenta dos ejes: .
1º) El eje de las simultaneidades (AB) que se refiere a las
relaciones de los elementos coexistentes donde queda excluida la
intervención del tiempo.
2º) El eje de las sucesiones (CD) en el que nunca se puede
considerar más que una cosa a la vez, pero en el que están situados
todos los elementos del primer eje con los cambios que les ha ido
produciendo el paso del tiempo.
A--------~-----B
188
un estudio sincrónico, la lingüística, hasta ese momento, ha estado
totalmente absorbida por la diacronía. Propone la vuelta al punto de
vista estático de la gramática tradicional utilizando nuevos procedi-
mientos.
Saussure reitera que la lengua es un sistema de signos en el
que todas sus partes pueden y deben ser estudiadas en su singula-
ridad sincrónica, es decir, en un momento dado de su evolución.
Este estudio se refiere a la relación de elementos simultáneos,
mientras que el estudio diacrónico analiza la sustitución de un
elemento por otro en el tiempo.
Por eje~lo: "La vocal "o" de la palabra rosa es igual a la vocal
"o" de la palabrr toro desde el punto de vista sincrónico; pero no lo
es desde el~to de vista diacrónico, ya que la "o" de rosa viene de
la o latina de rosa, mientras que la o de toro viene del diptongo 1atino
au de taurus" (Catinelli, Antonio (1965): Estructuralismo y Gramáti-
ca. Córdoba, Assandri, p.24). ..
2. TENDENCIAS POSTERIORES AL
ESTRUCTURALISMO DE SAUSSURE
Los principios básicos de la teoría saussureana fueron objeto
de estudio y discusión de diferentes corrientes lingüísticas euro-
peas: la Escuela de Praga, la Escuela de Copenhague y los estudios
del lingüista francés André Martinet.
La Escuela de Praga (Roman Jakobson y N. Trubetzkoy:
década del 20), a partir de la diferencia entre lengua y habla,
distinguió dos ciencias que las tenían como objeto de estudio: la
fonología que estudia los fonemas dentro del sistema de la lengua
y la fonética que estudia los sonidos producidos en el acto concreto
189
del habla. Esta nueva escuela, si bien parte de los lineamientos
fundamentales del estructuralismo, se llama a sí misma
funcionalista. El término función se refiere a la utilidad de la lengua
ya que sirve para la comunicación.
La Escuela de Copenhague (Louis Hjelmslev: década del 30,
creador de la doctrina lingüística llamada glosemática) diferenció
dos planos del lenguaje: contenido y expresión, los que correspon-
dían a los conceptos de significado y significante de Saussure.
Hjelmslev comienza a hablar de función para referirse a la
relación recíproca entre contenido y expresión. Utiliza este concep~
to en un sentido matemático, diferente a la significación que le ~
atribuye Jakobson. Hjelmslev trata de llegar a una formalización
absoluta de la lingüística para lo cual intenta un método exacto. La
descripción debe ser totalmente coherente, exhaustiva y todo lo
sencilla que sea posible. Esta escuela realizó importantes desarro-
llos en los estudios sobre sintaxis.
Con relación a los postulados que Saussure legó a estas
corrientes, se pueden considerar relevantes dos afirmaciones suyas
acerca de la lengua: "la primera, que la lengua es un "sistema de
oposiciones" (aquí se funda el estructuralismo de Trubetzkoy); la
segunda, que la lengua es "una forma, no una sustancia" (aquí se funda
el estructuralismode Hjelmslev)" (Catinelli, 1965, p. 29).
Por su parte, el lingüista André Martinet partió de la concepción
de función de la Escuela de Praga y dio prioridad en sus estudios
a la función comunicativa del lenguaje.
En el estructuralismo europeo se pueden distinguir dos
generaciones:
a) La primera generación incluye a las Escuelas de Praga y
Copenhague, las que, como ya dijimos, avanzaron en los
estudios fonológicos y sintácticos respectivamente.
b) La segunda generación estructuralista comienza a abrir los
estudios lingüísticos más allá de las fronteras específicas de
la lengua y empieza a tomar contacto con otras ciencias
sociales. Se incorporan otros tópicos de estudio como: el
sujeto, la sociedad, el cambio histórico, etc. Estos lingüistas
(Émile Benveniste, Oswald Ducrot, Michel Pecheux, entre
190
otros) inician la transición entre el estructuralismo y el análisis
del discurso, la teoría de la enunciación, la teoría de los actos
de habla y la gramática textual.
191
humano, ya que los animales o las plantas pueden tener códigos de
comunicación, pero no lenguajes.
Sólo el hombre posee la facultad del lenguaje que le permite
entenderse con sus semejantes por medio de signos vocales.
Martinet aclara que, si bien la escritura tiene un gran prestigio
porque permite la perduración de la palabra, no debemos olvidar
que los signos del lenguaje son esencialmente de carácter vocal,
que durante miles de años no existieron los signos gráficos y que,
todavía hoy la mayoría de los seres humanos saben hablar sin saber
leer ni escribir.
192
Sin embargo, sabemos que esto no es así, en cada comunidad
lingüística se organizan de una manera diferente los datos de la
realidad. Así como el francés, según ejemplifica Martinet, expresa
con un solo término bois un lugar plantado de árboles, la madera en
general, la madera de construcción y la madera de quemar; el danés
usa troe para designar al árbol y la madera en general, tommer, para
la madera de construcción, skov, para un lugar plantado de árboles
y broende para la madera de quemar; y el español cuenta con tres
vocablos: bosque, madera y leña, para nombrar esas realidades.
También es significativo el ejemplo del espectro solar, dentro
del Cual el español, como la mayoría de las lenguas occidentales,
distingue entre violeta, azul, verde, amarillo, naranja y rojo. Este
todo continuo se clasifica de manera diferente según las lenguas. En
bretón y galés - sigue diciendo Martinet - la palabra glas se aplica a
una zona del espectro que abarcaaproximadamente las partes del
azul y el verde. Algunas lenguas tienen sólo dos colores básicos que
corresponden a las dos mitades del espectro. (Por ejemplo el jalé de
Nueva Guinea).
También se sabe que hay términos como en inglés wisttul, en
alemán gemüt/ích o en ruso nícevó, que no corresponden a nada
específico en español.
"De hecho corresponde a cada lengua una organización par-
ticular de los datos de la experiencia". (Martinet, 1978, p. 19)
193
específica; sin embargo, cada uno d~ esos signos lingüísticos
puede ser empleado en infinitos contextos diferentes. Combinando
algunos millares de unidades como cada una de estas cuatro
mencionadas se pueden realizar más comunicaciones que las que
sería posible realizar con millones de gritos inarticulados diferentes.
Cada una de estas unidades de la primera articulación,
llamadas monemas, posee un sentido y una forma vocal, es decir,
un significado y un significante.
A su vez, estos monemas están formados por unidades
sucesivas que no poseen significado, pero sí pueden distinguir un
signo de otro. Por ejemplo, el monema 'beso" está formado por los
siguientes fonemas /beso/. Si cambiamos un solo tonerna, cambia
el monema, y, por lo tanto, el significado, por ejemplo: "peso" (1
peso).
Esta sucesión de fonemas que forman un monema es lo que
se denomina segunda articulación del lenguaje cuya economía
es tal que, gracias a ella, las lenguas utilizan sólo una cantidad
limitada de fonemas para producir un número ilimitado de monemas.
No se debe identificar "rnonerna" con "palabra" porque, por
ejemplo en la palabra "canto" hay un lexema simple cuyo lugar está
en el léxico y no en la gramática (designa cierto tipo de acción:
cantar) y un morfema "o" (designa la persona que habla - yo canto-)
que aparece en la gramática y no en el léxico. Es decir que un
monema puede estar formado por lexema y morfema.
Si bien todas las lenguas poseen la doble articulación, cada
una de ellas organiza los elementos de manera diferente según
cómo los usuarios analizan los datos de la experiencia y cómo
utilizan los órganos de la palabra.
La cantidad de monemas de una lengua es una lista abierta
mientras que la lista de los fonemas es cerrada. Así, por ejemplo,
el español peninsular posee 24 fonemas (el español de América, 22)
con los que puede realizar una cantidad ilimitada de monemas.
194
que "los enunciados vocales se desarrollan necesariamente en el
tiempo y el oído los percibe necesariamente como una sucesión"
(Martinet, 1978, p. 24).
No ocurre lo mismo cuando, por ejemplo, se observa un
cuadro o una señal de tránsito: el receptor capta el mensaje en su
conjunto y no sucesivamente. En cambio, los fonemas y monemas
se van presentando en forma sucesiva, uno detrás de otro.
195
lingüístico y la semántica que se identifica con el discurso. Cada
uno de estos dominios de la lengua requiere enfoques conceptuales
diferentes.
Benveniste considera que, así como Saussure sentó las ba-
ses del estudio científico del signo lingüístico, es tiempo de
empezar a investigar desde otra perspectiva (semántica) qué es la
enunciación o discurso; "es cosa precisamente de saber si es
posible pasar del signo al "habla", y cómo" (Benveniste, Émile(1985):
Problemas de Lingüística General 1/. México, Siglo XXI, p. 68).
Según este estudioso, hay que comenzar por diferenciar estos
conceptos: "Con lo semántica entramos en el modo específico de
significancia que es engendrado por el D I S C U R S O. Los
problemas que se plantean aquí son función de la lengua como
productora de mensajes. Ahora, el mensaje no se reduce a una
sucesión de unidades por identificar separadamente; no es una
suma de signos la que produce el sentido; es, por el contrario, el
sentido, concebido global mente el que se realiza y se divide en
"signos" particulares, que son las P A L A B R A S." (Benveniste,
1985, p. 67 - 68)
Así como lo semiótica (el signo) debe ser re con o cid o, lo
semántica (el discurso) debe ser c o m p re n d ido.
Para Benveniste, el lenguaje no puede ser considerado como
un "instrumento" de comunicación, ya que esta concepción simplista
es inexacta porque el lenguaje no es algo fabricado por el hombre
(como el arco, la flecha, la rueda, etc.) sino que está en la naturaleza
misma del ser humano. No somos sujetos que hablamos sino que
somos sujetos porque hablamos.
En este nuevo enfoque aparece la "subjetividad" del lenguaje.
Ya no es el sistema de la lengua lo que debe ser único objeto de
estudio de la lingüística, sino el funcionamiento discursivo del sujeto
en el acto mismo de la enunciación. El estudio de la lengua en sí
debe diferenciarse del estudio del empleo de la lengua. " La enun-
ciación es este poner a funcionar la lengua por un acto individual de
utilización." (Benveniste, 1985, p. 83)
La enunciación es el acto mismo a través del cual se produce
un enunciado y es diferente del texto del enunciado. Este último es
196
el resultado o producto de la enunciación. El objeto de estudio
lingüístico debe ser este aspecto no trabajado hasta el momento: el
acto lingüístico por medio del cual un locutor se apropia individual-
mente de la lengua y la convierte en discurso. Hay que analizar las
características formales del acto de enunciación y las situaciones
donde se realiza. "Antes de la enunciación, la lengua no es más que
la posibilidad de la lengua. Después de la enunciación, la lengua se
efectúa en una instancia de discurso, que emana de un locutor,
forma sonora que espera un auditor y que suscita otra enunciación
a cambio.
En tanto que realización individual, la enunciación puede
definirse, en relación con la lengua, como un proceso de apropia-
ción". (Benveniste, 1985, p. 84)
Todo enunciado nos remite al sujeto del discurso, a ese yo que
es el que lo produce. No se puede hablar sino en primera persona;
ante cualquier enunciado puede 'anteponerse la cláusula "Yo (te)
digo que ..." (Filinich, María Isabel (1998): Enunciación. Buenos
Aires, Eudeba, p. 15).
Si bien el locutor es indispensable para que se produzca la
enunciación, en cuanto éste se declara como tal y se apropia de la
lengua, sitúa al otro delante de él, ya que toda enunciación, de
manera implícita o explícita, supone un alocutario.
Los índices de persona (yo - tú) se producen sólo en la
enunciación y por ella, el yo refiere al que produce el discurso y el
tú a aquel que está presente como alocutario. También a partir de la
enunciación cobran significado los índices de os tensión (Ej: este,
aquí, etc.) referidos a los gestos que designan los objetos en un
determinado lugar y, además, los que hacen referencia al tiempo.
(cfr. con lo estudiado en el tema Deícticos del capítulo 1).
La relación de la enunciación con el paradigma temporal es
fundamental ya que la instauración de la categoría del presente
procede sólo y exclusivamente de la enunciación, y de la categoría
del presente nace la categoría del tiempo. "El presente es el tiempo
en el que se habla. Fuera del discurso el tiempo no tiene asidero"
(Filinich, 1998, p. 17).
197
En síntesis, si bien la teoría de Émile Benveniste no va más
allá de una introducción a los estudios del discurso, su aporte es
muy importante para la lingüística ya que evidencia la necesidad de
trascender el estudio de la lengua como sistema de signos y
propone el análisis del acto mismo de la enunciación, en el que
cobran relevancia los interlocutores y el contexto de la comunica-
ción.
Así, el paradigma del modelo estructuralista comienza a ser
reemplazado por otro que enfocará la lengua en uso, utilizada por
un individuo concreto (locutor) que se dirige a otro individuo
(alocutario) en una situación determinada de comunicación. Se
comienza a transitar el camino de la lengua al discurso.
3. GRAMÁTICA
GENERATIVO.TRANSFORMACIONAL
Esta corriente lingüística nace en Estados Unidos en la déca-
da del cincuenta como reacción a la teoría del estructuralismo
norteamericano de Bloomfield y Z. S. Harris.?
El creador de esta corriente fue Noam Chomsky (1950) quien,
si bien fue alumno de Harris, critica a sus predecesores el que hayan
sobreestimado la gramática de tipo analítico en desmedro del
estudio de los mecanismos psicológicos subyacentes en la cons-
trucción de los enunciados por parte de los hablantes.
7. Bloomfield y Z.S. Harris desarrollan, en las primeras décadas del siglo xx, las bases
del estructuralismo norteamericano. Esta corriente critica el estudio de la palabra
como unidad fundamental del análisis gramatical, insiste en los conceptos de
enunciado y morfema, emplea el criterio de distribución de las unidades lingüísticas
y propone el análisis en constituyentes inmediatos (la frase tiene una estructura
semejante a los árboles). Según los postulados de Bloomfield, el significado consiste en
la relación estímulo - respuesta, conceptos que quedan definidos en la doctrina
conductista de las primeras décadas del siglo xx. El estructuralismo norteamericano se
fue desarrollando con independencia del europeo, sin embargo ambos coinciden en la
necesidad de emplear rigor metodológico en los estudios lingüísticos.
198
La diferencia fundamental entre la lingüística bloomfieldiana y
chomskiana es que son conductista y logicalista respectivamente.
La primera descubre una gramática a través de la observación del
comportamiento de los hablantes (método inductivo) y la segunda
parte de una teoría general desde la cual pueden generarse oracio-
nes (método deductivo). Mientras que la corriente inaugurada por
Bloomfield, al insistir en los datos observables empíricamente se
acerca al campo de las ciencias naturales y sociales, la gramática
de Chomsky insiste en el aspecto formal, por lo que está más
relacionada con la matemática y la lógica. Sin embargo, ambas
corrientes son complementarias.
A la gramática de Chomsky se la denomina generativa porque
intenta explicar el mecanismo que subyace en la producción de
enunciados por parte de los hablantes. El número de enunciados
que pueden producir los hablantes .esinfinito, pero nace de una serie
finita de reglas de combinación que se aplican a un número finito de
elementos de base. Se denomina transformacional porque descri-
be las estructuras de superficie como resultado de transformaciones
operadas en las estructuras profundas que son universales.
Chomsky se refiere a la competencia lingüística como a una
realidad mental porque se trata del conjunto de reglas que existen
en la mente del hablante y que le permiten crear un número infinito
de frases. Por eso las gramáticas generativas son definidas como
mentalistas. "Según Chomsky (1965), la estructura lingüística es
una realidad mental en gran parte inaccesible a la observación
directa. De ahí que una gramática adecuada debe estar en armonía
con la intuición del hablante nativo" (Kovacci, Ofelia (1977): Tenden-
cias actuales de la gramática. Buenos Aires, Marymar, p. 120).
Al concepto de competencia le opone el de actuación,
términos que nos remiten a las dicotomías lengua / habla de
Saussure y sistema / proceso de Hjelmslev. Para la gramática
generativa de Chomsky, la actuación es un comportamiento lin-
güístico que consiste en la producción y la comprensión de enuncia-
dos concretos por parte de un hablante ideal, perteneciente a una
comunidad lingüística ideal. (cfr. Cuadro comparativo punto 1.
Capítulo IV)
199
El objeto de estudio de esta corriente es la competencia. Ésta
es universal ya que genéticamente la poseen todos los seres
humanos. Es el conocimiento innato que posee cualquier persona y
que le permite producir y comprender las oraciones de su lengua. La
performance o actuación, es decir la puesta en uso de la lengua en
situaciones determinadas, queda excluida de antemano del objetivo
de investigación de la gramática generativa.
Estos estudios no trascienden el nivel oracional ya que el
mismo Chomsky afirma la "imposibilidad de estudio científico del
uso del lenguaje". (Bernárdez, Enrique (1995): Teoría y epistemolo-
gía del texto. Madrid, Cátedra, p. 64).
Para el transformacionalismo la oración es el punto de partida,
el nivel sintáctico es aquel desde el cual se va analizando posterior-
mente el nivel morfológico y, por último, el fonológico.
Chomsky pone de relieve la distinción fundamental entre las
estructuras superficiales y las estructuras profundas, respecto
de las cuales afirma que las lenguas coinciden en estas últimas y no
en las estructuras de superficie.
Para este lingüista, una gramática es un mecanismo que se
utiliza para generar (o producir) las oraciones de una lengua, y la
sintaxis es el conjunto de principios y procesos que sirven para la
construcción de· oraciones. Estos mecanismos de la gramática
deben estar formulados en una teoría general formalizada de la
estructura lingüística ..
Es una condición fundamental para la concepción chomskiana
que la gramática produzca sólo oraciones "gramaticales", es decir,
aceptadas por los hablantes nativos. Por ejemplo, en español "El
niño corre" es gramatical y "El corre niño" no lo es.
En síntesis: "El transformacionalismo de Noam Chomsky es-
tableció una nueva dicotomía, competencia y actuación, y continuó
la tradición lingüística de limitarse al primer miembro de la dicotomía
y desechar el segundo. Así, la lingüística por muchos años se dedicó
al estudio del sistema (competencia), postergando decididamente el
habla (actuación). La oración fue concebida (por Saussure y Chomsky)
como el contexto máximo de análisis". (Ciapuscio, Guiomar Elena
(1994): Tipos textuales. Ed. Universidad de Buenos Aires, p. 15) .
.
200
4. LINGüíSTICA DEL TEXTO
La primera mención del término" Lingüística del Texto" se
encuentra en el capítulo de Eugenio Coseriu "Determinación y
Entorno" (Coseriu, Eugenio (1962): Teoría del lenguaje y lingüística
general. Madrid, Gredos, p. 289). Allí explica la necesidad de una
lingüística que se ocupe del "hablar" concreto de un individuo en
una situación determinada de comunicación.
Eugenio Coseriu plantea las tres corrientes de la lingüística
en la década del 70 (Coseriu, Eugenio (1977): El hombre y su
lenguaje. Madrid, Gredos, p. 241):
Estructural y Funcional
del Texto"
201
al hablar correspondiente a varias lenguas. De allí el reconocido
carácter de universalidad de esta gramática, la que reside en la
generalidad que le otorga la unidad del mundo extralingüístico.
La lingüística del texto: tiene por objeto el estudio del texto y por
lo tanto el sentido que sólo se produce en el discurso.
202
Siguiendo el ejemplo práctico que ofrece Coseriu, podemos
decir que si reconocemos en una habitación que ciertas personas
están hablando, aunque no identifiquemos cuál es la lengua que
hablan, estamos identificando el nivel universal del lenguaje. Es
decir que distinguimos la actividad de hablar como una actividad
humana diferente de la de cantar, gritar, saltar, caminar, etc.
Si nos acercamos más a esa habitación e identificamos cuál
es el idioma en que están hablando esas personas, reconocemos el
nivel histórico del lenguaje, por ejemplo, comprobamos que están
hablando portugués, están utilizando una técnica históricamente
determinada.
Si, por último, comprendemos que el que está hablando es
José, hemos reconocido el nivel individual del lenguaje.
A través de varias décadas, el lenguaje había sido definido por
diferentes corrientes lingüísticas c()mo una "actividad que emplea
signos", o como "la facultad de hablar", es decir, como saber o
potencia o bien habían considerado al lenguaje como "la totalidad de
las frases", o sea, como un producto. Coseriu integra estos puntos
de vista ya que considera que el lenguaje es, a la vez, actividad
creadora, saber y producto.
Si se combinan los tres niveles del lenguaje con estos tres
puntos de vista, se pueden esquematizar estas relaciones en el
siguiente cuadro:
~Niveles
Universal Hablar Saber Totalidad
en general elocucional de lo hablado
203
• En el nivel universal, el lenguaje considerado como activi-
dad es el hablar en general, una actividad humana diferente
de las otras; en cuanto saber o potencia es el saber hablar en
general (saber elocucional) de acuerdo con las leyes lógicas
del pensamiento y del conocimiento del mundo; y como pro-
·ducto es la totalidad de lo expresado.
• En el nivel histórico, el lenguaje considerado como activi-
dad es la lengua concreta, por ejemplo "el hablar español", "el
hablar ruso"; como saber o potencia es el sabertradicional de
una comunidad lingüística, es el saber utilizar correctamente
la gramática y el léxico de una lengua (saber idiomático); y
como producto, es la lengua abstracta, objetivada en una
gramática y en un diccionario.
• En el nivel individual, el lenguaje considerado como activi-
dad, es el discurso, el acto lingüístico concreto de un individuo
en una situación determinada; como saber o potencia es el
saber elaborar discursos de acuerdo con la situación
comunicativa (saber expresivo) y como producto es el texto
(hablado o escrito).
204
La lingüística del texto, según Coseriu, debe ser desarrollada
teniendo como objetivo fundamental el nivel individual del lenguaje.
Estos estudios ayudarían, por ejemplo, en la problemática que
plantea la traducción "puesto que lo que se traduce no es nunca sólo
y simplemente "lengua" sino siempre un t e x t o determinado"
(Coseriu, 1986, p. 279). No se puede traducir de una lengua a otra
simplemente con el estudio de la gramática y del léxico de ambas
lenguas (nivel histórico). Un ejemplo significativo son los modismos,
los cuales no pueden traducirse por lo que significan literalmente
sino por su sentido (nivel individual).
205
Las gramáticas del texto necesitan de la gramática de la
oración. "Pero para poder marcar sus tareas específicas, una gra-
mática del texto se concentrará enaquelias propiedades del discur-
so que una gramática de la oración no puede explicar adecuada-
mente" (Van Dijk, 1988, p. 21) La mayoría de esas propiedades se
refieren a las relaciones entre las oraciones de una secuencia. La
secuencia es una ordenación lineal de oraciones en el tiempo o en
el espacio.
Las gramáticas del texto estudian aquellos elementos
lingüísticos que sirven para cohesionar las distintas oraciones que
forman una secuencia. Por eso, los temas fundamentales se refie-
ren a recursos de cohesión (sinonimia, elipsis, encapsuladores,
elementos de referencia endofórica y exofórica, etc.) y progresión
temática (tema- rema).
El estudio de los elementos del sistema de la lengua está al
servicio de la producción y de la comprensión de textos.
Muchos de los elementos de la morfología (pronombres,
artículos, adverbios, adjetivos); de la sintaxis (sujeto tácito, predica-
do no verbal, nexos coordinantes y subordinantes) y de la semántica
(sinonimia, antonimia, hiperonimia) no se limitan a la oración, sino
que establecen relaciones entre oraciones que forman secuencias,
es decir, mantienen la coherencia superficial del texto que, general-
mente, garantiza la coherencia global del mismo.
206