Gelatina
Gelatina
Gelatina
Los huesos se tratan con una solución ácida para extraer los
minerales (fosfato de calcio) sin afectar los contenidos orgánicos.
Después de un lavado, este producto llamado “oseína”, se vuelve
flexible. Los fosfatos se separan por precipitación con cal. La oseína y
las pieles se procesan con ácidos para su hidrólisis a temperatura
ambiente por un tiempo relativamente corto. Por otra parte, los
cueros y la oseína se ponen en contacto con una solución de cal
durante 5 a 10 semanas a temperatura ambiente. Luego se ajusta al
pH requerido para la extracción de gelatina propiamente dicha.
La extracción es un proceso discontinuo, en batch (porciones),
obteniendo un licor del 6 al 10 % de gelatina. Luego se filtra y
concentra en forma continua en un evaporador al vacío. La solución
se esteriliza a 145°C y se enfría rápidamente para gelificar la solución.
Este gel es extrusado en forma de granos y secado con aire filtrado y
aséptico. Finalmente, se muelen los granos hasta obtener el tamaño
de partícula necesario. Deben almacenarse en condiciones
adecuadas, ya que son fácilmente alterables en solución o
humedecidos. Se pueden adquirir también, en forma de hojas o
láminas. Estas láminas son rectangulares, amorfas, delgadas,
flexibles, de fractura neta, transparentes o ligeramente amarillentas,
inodoras y con sabor especial muy débil.