Servir A Dios y A Los Demás
Servir A Dios y A Los Demás
Servir A Dios y A Los Demás
II. El Evangelio [7] nos relata la petición que hicieron Santiago y Juan a
Jesús de dos puestos de honor- en su Reino. Después, los diez comenzaron
a indignarse contra estos dos hermanos. Jesús les dijo entonces: Sabéis
que los que figuran como jefes de los pueblos los oprimen, y los poderosos
los avasallan. No ha de ser así entre vosotros; por el contrario, quien quiera
llegar a ser grande entre vosotros, sea vuestro servidor,- y quien entre
vosotros quiera ser el primero, sea esclavo de todos. Y les da la suprema
razón: porque el Hijo del Hombre no ha venido a ser servido sino a servir y
a dar su vida en redención de muchos.
Esta disponibilidad hacia las necesidades ajenas nos llevará a ayudar a los
demás de tal forma que, siempre que sea posible, no se advierta, y así no
puedan darnos ellos ninguna recompensa a cambio. Nos basta la mirada de
Jesús sobre nuestra vida. ¡Ya es suficiente recompensa!