Síndrome de Rett
Síndrome de Rett
Síndrome de Rett
Síntomas
El primer síntoma del síndrome de Rett suele ser la pérdida de tono muscular, llamada
hipotonía. Debido a la hipotonía, las piernas y brazos del bebé se ven "flácidos".
Si bien la hipotonía y otros síntomas del síndrome de Rett también suelen presentarse en
etapas, algunos síntomas típicos pueden aparecer en cualquier etapa. Los síntomas pueden
variar de un paciente a otro e ir de leves a graves.
Síntomas típicos
Los síntomas típicos (que pueden ocurrir en cualquier etapa) son, entre otros:
Además, una persona con síndrome de Rett puede experimental uno o más de los siguientes
problemas asociados:
Dificultades para alimentarse solos, tragar y masticar alimentos. (En algunos casos,
también, a pesar de tener un apetito saludable, las niñas con síndrome de Rett no
logran subir de peso o tienen dificultades para mantener un peso saludable. Como
consecuencia, algunas niñas con síndrome de Rett deben alimentarse por un tubo de
alimentación.)
Los síntomas varían de una persona a la otra y según la etapa del trastorno. Los síntomas
también pueden mejorar en la "etapa de estabilización"
Causas
Los bebés incluso de 2 meses de vida y hasta los 2 años de edad pueden comenzar a tener
espasmos del llanto. Algunos niños tienen espasmos graves.
Los niños pueden presentar espasmos del llanto cuando están respondiendo:
Al miedo
A dolor
A un hecho traumático
A un susto o confrontación
Los espasmos del llanto son más comunes en los niños con:
Afecciones genéticas, como el síndrome de Riley-Day y el síndrome de Rett
Anemia ferropénica
Un antecedente familiar de esta afección (los padres pueden haber tenido espasmos del
llanto similares cuando eran niños)
Diagnóstico y exámenes
Análisis de sangre
La evaluación genética de una muestra de sangre puede identificar si el niño tiene una de
las mutaciones que se sabe causan el síndrome de Rett. Incluso si un niño tiene una
mutación del gen MECP2 (proteína fijadora de la metilcitosina), los síntomas del síndrome
de Rett no siempre se expresan, por lo que los profesionales de la salud también necesitan
evaluar los síntomas del niño para confirmar el diagnóstico.
Síntomas clínicos
Un niño debe cumplir con los siguientes cinco criterios para recibir un diagnóstico de
síndrome de Rett clásico:
Principales criterios de diagnóstico
Un patrón de desarrollo, regresión y luego recuperación o estabilización
Pérdida parcial o total de habilidades de uso intencional de las manos, tales como agarrar
con los dedos, tomar objetos o tocar cosas con un propósito específico
Pérdida parcial o total del lenguaje hablado
Movimientos repetitivos de las manos, como estrujarse las manos, frotarlas entre sí (como
al lavarlas), apretarlas, aplaudir o restregar
Anormalidades en el andar, como caminar en puntas de pie o con las piernas separadas y
rígidas o caminar de manera inestable
Entre los tres meses y los cuatro años, el crecimiento de la cabeza se enlentece, lo que
causa microcefalia, otra característica del síndrome de Rett que requiere considerarse para
el diagnóstico.
Los profesionales de la salud también tendrán en cuenta si hay evidencia de alguna de las
siguientes enfermedades. La presencia de cualquiera de los síntomas que se describen abajo
descartaría un diagnóstico de síndrome de Rett.
Síndrome de Rett atípico
Se han identificado mutaciones genéticas que causan algunas de las variantes atípicas del
síndrome de Rett. Después de realizar el análisis de sangre para confirmar la configuración
genética del niño, el profesional de la salud podría diagnosticarle un síndrome de Rett
atípico si el niño demuestra un desarrollo seguido de una regresión y luego recuperación o
estabilización. Además, el profesional de la salud confirmará al menos dos de los otros
cuatro criterios, y cinco de los 11 criterios de apoyo antes de dar un diagnóstico.
Tipos y fases
Existen dos tipos principales de síndrome de Rett: el clásico y el atípico.1 Estos difieren en sus
síntomas o en la mutación genética específica.
La mayoría de los pacientes con síndrome de Rett tiene la forma clásica, que suele desarrollarse en
cuatro fases. Los profesionales de la salud y los investigadores, a partir de criterios consensuados,
observan las siguientes etapas en el avance del síndrome de Rett clásico.
Inicio prematuro.
En esta etapa, el desarrollo se estanca o se detiene por completo. A veces, el síndrome avanza de
manera tan sutil que los padres y los profesionales de la salud en una primera instancia no lo notan.
Durante un tiempo, los investigadores pensaban que esta etapa empezaba alrededor de los 6 meses.
Sin embargo, después de analizar videos de personas con Rett filmadas desde el nacimiento, ahora
se sabe que algunos bebés con síndrome de Rett tienen un desarrollo totalmente normal solo en
apariencia. De hecho, estos bebés tienen problemas en etapas muy tempranas del desarrollo. En un
estudio, todos los bebés con síndrome de Rett mostraron tener problemas con los movimientos
corporales desde el nacimiento hasta los 6 meses. Otro 42% tenía movimientos estereotipados de las
manos durante este período.
Destrucción acelerada.
El niño pierde habilidades (sufre un retroceso) rápidamente. Los movimientos controlados de la
mano y el habla suelen ser las primeras habilidades que se pierden. Los problemas respiratorios y
los movimientos estereotipados de la mano como el estrujamiento (apretar o retorcer), la frotación
(un movimiento similar al de lavarse las manos) y los aplausos o golpes también suelen comenzar
en esta etapa.
Estabilización.
El retroceso del niño se enlentece y otros problemas parecen disminuir, e incluso pueden observarse
mejoras en algunas áreas. En esta etapa son comunes las convulsiones y otros problemas del
movimiento. Muchas personas con síndrome de Rett pasan la mayor parte de sus vidas en esta
etapa.
¿Por qué son tantas las mujeres y tan pocos los varones con síndrome de
Rett?
Hay dos tipos de cromosomas que determinan el sexo de un embrión: el cromosoma X y el
cromosoma Y. Las niñas tienen dos cromosomas X y los varones tienen un cromosoma X y un
cromosoma Y.
Dado que el gen mutado que causa el síndrome de Rett se ubica en el cromosoma X, las mujeres
tienen el doble de probabilidad de desarrollar una mutación en uno de sus cromosomas X. Las
mujeres con síndrome de Rett por lo general tienen un cromosoma X mutado y otro normal. En una
célula determinada, solo un cromosoma X permanece activo durante la vida y las células
determinan al azar cuál de los dos será el cromosoma X que permanecerá activo. Si las células
tienen un gen activo mutado con más frecuencia que un gen normal, los síntomas del síndrome de
Rett serán más graves. Este proceso aleatorio permite que la mayoría de las mujeres con síndrome
de Rett sobrevivan a la primera infancia.
Dado que la mayoría de los varones tienen solo un cromosoma X, cuando este gen tiene la mutación
que causa el síndrome de Rett, los efectos adversos no se ven suavizados gracias a la presencia de
un segundo cromosoma X normal. Como consecuencia, muchos varones con síndrome de Rett
nacen sin vida o no viven más allá de la primera infancia.
Algunos varones con síndrome de Rett, sin embargo, sí viven más allá de la primera infancia,
probablemente debido a una de estas tres razones:
Mosaicismo, una enfermedad en la que las células individuales de una misma persona
tienen una configuración genética distinta. Esto significa que algunos de los cromosomas
X en el cuerpo del niño tienen la mutación Rett, y otros genes no la tienen. Cuando un
porcentaje más bajo de genes tiene la mutación del síndrome de Rett, los síntomas no son
tan graves.
Un varón puede tener dos cromosomas X y un cromosoma Y (síndrome de Klinefelter).
Solo un cromosoma X estará activo en cada célula, por lo que si una X tiene la mutación
en el MECP2, la gravedad de los síntomas dependerá de cuántas células tienen ese X
mutado activo en el cuerpo.
La mutación genética es menos grave que en otras formas de mutaciones del síndrome de
Rett.9
La duplicación del gen MECP2 puede ocurrir en los varones y afecta el funcionamiento intelectual
y físico.
Tratamientos y terapias
La mayoría de las personas con síndrome de Rett se benefician de intervenciones bien
diseñadas a cualquier edad, pero cuanto antes se comience el tratamiento, más beneficioso
será. Con tratamiento y asistencia, las personas con síndrome de Rett pueden participar en
actividades escolares y comunitarias.
Estos tratamientos, formas de asistencia y opciones de medicamentos generalmente apuntan
a enlentecer la pérdida de habilidades, mejorar o preservar el movimiento y estimular la
comunicación y el contacto social. Abajo presentamos una lista de opciones de tratamiento.
Estos tratamientos serán necesarios según la gravedad de los diversos síntomas.
Fisioterapia/Hidroterapia
Mejora o mantiene la movilidad y el equilibrio
Reduce la deformación de la columna y los extremidades
Ofrece entrenamiento con pesas para pacientes con escoliosis (una curvatura anormal de la
columna vertebral)
Terapia ocupacional
Mejora o mantiene el uso de las manos
Reduce los movimientos estereotipados de las manos como estrujar, frotar (un movimiento
similar al de lavarse las manos), aplaudir, restregar o golpear
Enseña actividades de cuidado personal como vestirse y alimentarse
Asistencia alimenticia
Los suplementos de calcio y minerales fortalecen los huesos y enlentecen la escoliosis
Una dieta rica en calorías y grasa aumenta la altura y el peso
Inserción de un tubo de alimentación en caso de que la comida se vaya de manera
accidental a los pulmones (aspiración)
Asistencia física
Soportes ortopédicos o cirugía para corregir la escoliosis
Tablillas para ajustar los movimientos de las manos
Medicamentos
Para reducir los problemas respiratorios
Para eliminar los problemas de ritmo cardíaco anormal
Para aliviar la indigestión y el estreñimiento
Para controlar las convulsiones
Conclusión