La producción de maní en Guinea portuguesa floreció entre 1840 y 1880 debido a la demanda creciente en Europa. Los comerciantes luso-africanos expandieron las plantaciones de maní y desarrollaron una economía basada en este cultivo. Sin embargo, la producción de maní decayó rápidamente después de 1880 debido a una combinación de factores como malas cosechas, caída de los precios en Europa y la competencia de otros aceites. Esto tuvo un impacto económico devastador en Guinea portuguesa y marcó el fin de su
0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
70 vistas2 páginas
La producción de maní en Guinea portuguesa floreció entre 1840 y 1880 debido a la demanda creciente en Europa. Los comerciantes luso-africanos expandieron las plantaciones de maní y desarrollaron una economía basada en este cultivo. Sin embargo, la producción de maní decayó rápidamente después de 1880 debido a una combinación de factores como malas cosechas, caída de los precios en Europa y la competencia de otros aceites. Esto tuvo un impacto económico devastador en Guinea portuguesa y marcó el fin de su
Descripción original:
Resumen BOWMAN - Comercio legítimo y producción de maní en la Guinea portuguesa, 1840-1880
Título original
BOWMAN - Comercio legítimo y producción de maní en la Guinea portuguesa, 1840-1880
La producción de maní en Guinea portuguesa floreció entre 1840 y 1880 debido a la demanda creciente en Europa. Los comerciantes luso-africanos expandieron las plantaciones de maní y desarrollaron una economía basada en este cultivo. Sin embargo, la producción de maní decayó rápidamente después de 1880 debido a una combinación de factores como malas cosechas, caída de los precios en Europa y la competencia de otros aceites. Esto tuvo un impacto económico devastador en Guinea portuguesa y marcó el fin de su
La producción de maní en Guinea portuguesa floreció entre 1840 y 1880 debido a la demanda creciente en Europa. Los comerciantes luso-africanos expandieron las plantaciones de maní y desarrollaron una economía basada en este cultivo. Sin embargo, la producción de maní decayó rápidamente después de 1880 debido a una combinación de factores como malas cosechas, caída de los precios en Europa y la competencia de otros aceites. Esto tuvo un impacto económico devastador en Guinea portuguesa y marcó el fin de su
Descargue como DOCX, PDF, TXT o lea en línea desde Scribd
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 2
Bowman: Comercio legítimo y producción manicera en Guinea portuguesa: 1840-1880
La transición de la trata de esclavos al comercio legítimo introdujo cambios fundamentales en
las condiciones políticas, económicas y sociales de las sociedades costeras a lo largo de toda África. La revolución industrial hizo que los comerciantes europeos se interesaban por materias primas para las industrias florecientes de las metrópolis en lugar de esclavos. Productos derivados de la palma, clavo, goma y algodón. Maní principal producto de exportación de la Guinea portuguesa → se usaban para fabricar aceite de cocina, lubricantes para maquinas industriales, jabón y velas. Desde finales del s.XV las clases gobernantes y comerciantes participaban en la red comercial atlántica, intercambiando esclavos, goma, marfil, tinturas y cueros por productos europeos. Para el siglo XIX, las élites estaban muy comprometidas con el sistema de comercio exterior, por lo cual la abolición de la trata impactó directamente sobre las economías locales. Hacia 1840 la demanda se centró en el maní. Entre 1840 y 1865, desarrollaron establecimientos tipo plantaciones llamados feitorias.
Los comienzos de la producción manicera
Maní → desde América al África Occidental por traficantes de esclavos en el siglo XVI. Hacia principios de 1850, condiciones cambiantes del mercado europeos y abolición de la trata en Brasil → nuevas oportunidades económicas. Senegambia → región más importante de producción manicera en África Occidental. A comienzos de los 1840 mercaderes de Senegal y Guinea Portuguesa comenzaron a enviar maníes a Europa. Las décadas de 1830/40 cruciales en el proceso de transición de la trata negrera al “comercio legítimo”. Los comerciantes incrementaron sus dominios agrícolas y usaron a los esclavos que ya no podían vender en el comercio atlántico para producir cultivos comerciales como aroza y maní, todo factible de vender a los europeos. Entre 1830/50 la escuadra británica trató de detener el tráfico negrero en la región de la Guinea portuguesa con incursiones sobre las propiedades de los traficantes más prominentes, por ello debían suspender las actividades durante buen tiempo, por los daños infligidos.
La economía manicera en Guinea portuguesa
En la Guinea portuguesa existía el deseo de promover el desarrollo para establecer una compañía comercial y agrícola, con el propósito de mejorar y desarrollar las relaciones comerciales entre Portugal y Guinea. Sólo después de la abolición efectiva de la trata brasilera en 1850, que África cobró atractivo nuevamente, coincidió con un aumento de la demanda de aceites vegetales en Europa, especialmente en Francia, abrió nuevas posibilidades para los comerciantes portugueses y luso-africanos (luso-africanos son personas de origen portugués que nacieron en África o entonces personas que nacieron en Portugal pero pasaron buena parte de sus vidas en tierras africanas). Los comerciantes luso-africanos comprendieron las posibilidades potenciales del maní y extendieron las zonas de cultivo. A medida que aumentaba la demanda internacional, comerciantes franceses, portugueses y euro-africanos se establecieron en la zona, intentando acceder a tierras para cultivo. Con la firma de tratados con los jefes locales, con numerosos ítems sin explicar, con consecuente perjuicio y sufrimiento para los poderes locales y sus súbditos. Gracias a estos tratados se construyeron imperios comerciales. Luego de 1878 diferentes factores contribuyeron a que la producción manicera en Guinea portuguesa decayera rápidamente.
Organización del trabajo en las feitorias del río Grande.
Las feitorias eran propiedades agrícolas y puestos comerciales. Sus dueños eran comerciantes exitosos, que supieron hacer la transición entre la trata negrera al “comercio legítimo”, y la rentabilidad dependió de conseguir mano de obra africana barata, combinaban el trabajo esclavo con el trabajo por contrato, la diferencia entre ellos era que los trabajadores contratados eran migrantes y tenían limitados derechos individuales, aunque las condiciones de trabajo eran casi como las de los esclavos. Aún después de abolir la trata y la esclavitud en 1878, continuaron utilizando el trabajo esclavos. El trabajo migrante provenía, en su mayoría, de trabajadores que lo hacían con traficantes de esclavos y se vieron afectados por la abolición de la trata. Los trabajadores migrantes recibían las semillas, utensilios de labranza y provisiones por un precio convenido y que debían pagar al final de la cosecha, lo que les sobraba al pagar lo adeudado era para comprarse bienes y otras necesidades, pero por lo general, lo que le quedaba luego de la cosecha de maní era muy poco. Pero seguían manteniendo sus vínculos con sus hogares. El sistema crediticio jugaba en contra de los trabajadores en Guinea portuguesa, ya que no podían negociar el precio de los maníes, además por contrato no podían vender a otros propietarios. Las condiciones de trabajo de los esclavos eran similares, pero no podían elegir para quien trabajar, ni por cuanto tiempo, ni acumular capital propio, y además carecían de derechos sobre sus personas.
El dominio comercial francés a lo largo del río Grande
A pesar de la presencia portuguesa desde el s. XV, para 1840 su influencia política y económica era limitada, los comerciantes franceses dominaban el negocio de exportación del maní. Los franceses eran responsables de la compra-venta y embarque de los productos a Europa, especialmente a los molinos aceiteros de Fr. Sin embargo, el rápido crecimiento del cultivo de maní en la zona fue en gran parte obra de comerciantes luso-africanos. Además el acceso a los barcos franceses permitió a los comerciantes y dueños de feitorias expandir sus tierras de cultivo. Para 1880 varias firmas francesas dominaban el comercio de maní en la zona del río Grande y Senegal. Los comerciantes portugueses en la zona dependían de bienes importados y créditos que proveían las casas francesas. Los africanos preferían comprar a los comerciantes franceses cuyos precios eran más bajos. Los comerciantes de río Grande, sin importar su nacionalidad, tenían muchos motivos de queja contra el gobierno portugués. A partir de 1870, los comerciantes franceses también se quejaban de las restricciones impuestas por el gobierno portugués.
Decadencia de la producción manicera en Guinea portuguesa
La caída de las exportaciones de maní significó un desastre económico en la colonia. La caída de la producción manicera y el cierre de las feitorias en la década de 1880 → combinación de factores internacionales y locales → malas cosechas; caída de la agricultura; caída del precio en los mercados europeos; falta de seguridad; recesión económica en Europa entre 1873-1896 que afectó la producción de cultivos de exportación; la recesión arruinó la economía de Portugal, por lo cual se trató de eliminar la competencia francesa en Guinea portuguesa, como primeras medidas se realizaron restricciones al transporte, luego se aumentaron los impuestos a importaciones y exportaciones. La demanda de maní también disminuyó, por la llegada de otras oleaginosas más baratas desde América (semillas de algodón) y la India (semillas de sésamo). Pero fue difícil poner en práctica leyes restrictivas por la escasa presencia administrativa portuguesa. Entre 1879 y 1889 hubo mucha inestabilidad económica debido a las guerras que asolaron Guinea, reflejando los problemas políticos y económicos que enfrentaba Portugal en la metrópoli y sus colonias. Portugal fue incapaz de controlas las regiones que reclamaban como colonias. Consecuencia del fin del boom manicero fue la decadencia de centros comerciales en la zona. La región del río Grande era la más importante en términos económicos de la Guinea portuguesa, la rápida caída de la producción llevo a la colonia a una enorme crisis. Comerciantes de distintas nacionalidades no dependientes de la producción manicera se mudaron hacia el sur, buscando áreas tranquilas. Para Portugal la destrucción de su sistema agrícola-comercial significo el fin de su potencial económico.