Octavo Dia de Novena
Octavo Dia de Novena
Octavo Dia de Novena
Amén.
7.- Oración:
Padre Dios,
que amas tanto a los hombres y mujeres,
que nos diste a tu hijo Jesucristo como el mejor regalo de amor;
concédenos que al celebrar su nacimiento entre nosotros,
no lo busquemos entre bombillos brillantes y luces de colores,
sino en el encuentro con los hermanos y hermanas que sufren, que necesitan
nuestro cariño y solidaridad.
Te lo pedimos por el mismo Jesucristo Nuestro Señor.
Amén
Reflexión;
Los versículos del capítulo de Lucas tienen una extraordinaria importancia:
"Os doy una buena noticia: hoy os ha nacido el Salvador". Esta buena noticia
no podemos, guardarla sólo para nosotros, ya que Cristo ha nacido para todo el
mundo, es el Salvador universal, es el Redentor de toda la humanidad.
Pensemos que aún existen en el mundo muchos hermanos a los que todavía no
les ha llegado la noticia.
Oración:
Padre bueno, que nos has permitido conocer esta buena noticia del nacimiento
de tu Unigénito, Cristo Jesús, te suplicamos nos infundas en el alma un
espíritu misionero, capaz de anunciar a Cristo nuestro Señor a todos los que
todavía no lo conocen. Suscita muchas vocaciones misioneras y da fuerzas
y valor a las ya existentes,
a fin de que, perseverando en la proclamación del Evangelio, el mundo conozca
a Jesucristo, que vive y reina por los siglos de los siglos,
Amén.
Niño Jesús:
Tú que fuiste rechazado por los poderosos de la tierra,
ayuda a los tristes,
a los que no tienen trabajo,
a los que pasarán esta Navidad en una cárcel, a los enfermos sin esperanza.
Y a nosotros, que tenemos más que otros y que somos tan dichosos porque
Tú lo has permitido así,
danos un corazón agradecido
y ayúdanos a ser generosos
"Dulce Jesús mío mi niño adorado. ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes
tanto!". Ven ante mis ojos de ti enamorados, bese ya tus plantas bese ya tus
manos. Prosternado en tierra te tiendo los brazos y aún más que mis frases
te dice mi llanto.
"Dulce Jesús mío mi niño adorado. ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes
tanto!". Haz de nuestra patria una gran familia; siembra en nuestro suelo tú
amor y tú paz. Danos fe en la vida, danos esperanza y un sincero amor que
nos una más.
"Dulce Jesús mío mi niño adorado. ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!".
Ven Salvador nuestro por quien suspiramos ven a nuestras almas, ven no tardes
tanto. Amén
12.- ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS:
Jesús mío:
Tú padeciste, en esa noche helada y luminosa de diciembre,
ayuda a los necesitados.
Niño Jesús:
Tú que no tuviste sino un pesebre para dormir esa primera noche de tu vida terrenal, ayuda
a los que no tienen un techo que cubra sus sueños.
ORACIÓN EN AGRADECIMIENTO
Benignísimo Dios de infinita caridad que nos has amado tanto y que nos diste en
tu hijo la mejor prenda de tu amor, para que, encarnado y hecho nuestro hermano
en las entrañas de la Virgen, naciese en un pesebre para nuestra salud y remedio;
te damos gracias por tan inmenso beneficio. En retorno te ofrecemos, Señor, el
esfuerzo sincero para hacer de este mundo tuyo y nuestro, un mundo más justo,
más fiel al gran mandamiento de amarnos como hermanos. Concédenos, Señor,
tu ayuda para poderlo realizar. Te pedimos que esta Navidad, fiesta de paz y
alegría, sea para nuestra comunidad un estímulo a fin de que, viviendo como
hermanos, busquemos más y más los caminos de la verdad, la justicia, el amor y
la paz. Amén.