Ensayo Del Coronel No Tiene Quien Le Escriba
Ensayo Del Coronel No Tiene Quien Le Escriba
Ensayo Del Coronel No Tiene Quien Le Escriba
Tema General:
La Pobreza
Tema Específico:
Similitudes que hay de pobreza en
nuestro país, con la obra “El Coronel
no tiene quien le escriba”.
I. OBJETIVO GENERAL
Relacionar las condiciones que se presentan en nuestro país con la obra “El
Coronel no tiene quien le escriba”.
Conocer la situación que enfrentan las personas de bajos recursos o pobres
en nuestro país.
III. INTRODUCCIÓN
Hay muchas maneras de expresar y de representar la lectura de la obra “El coronel
no tiene quién le escriba” de Gabriel García Márquez, lo que se podría resumir en
estado de humor, personalidad, opinión del autor y emociones. Pero eso sería
insuficiente pues allí hay muchos símbolos que representan acciones,
pensamientos, esperanzas, sueños, anhelos, espera, acción, violencia, desinterés
y toda una derivación más, aunque no estén literalmente expuestas en la obra.
Al leer por primera vez “El coronel no tiene quién le escriba” es posible que no se
descubra la cantidad de símbolos que hay detrás de esa obra, pero sí se logra captar
el mensaje más importante de esta creación literaria, pues a pesar de haber sido
creada hace más de 50 años, la situación y vivencias parecen actuales, pues de
hecho es un reflejo de muchas sociedades latinoamericanas.
Esta obra no representa a un solo lugar ni al coronel solamente, sino que se refiere
a todos los países injustos y al pueblo que tiene que sufrir, pero que no hace los
intentos mínimos por oponerse al sistema y alzar su voz, mucho menos pedir ayuda
ni cambiar la opresión de la cual es víctima.
Este aspecto lo podemos comparar también con “El Coronel no tiene quien le
escriba”. La pobreza en la se encontraba el coronel, ya que era una persona de
edad avanzada, y también siendo un veterano de guerra que esperaba su sueldo
de pensión. Esto lo podemos ver en la obra cuando dice “durante cincuenta y seis
años –desde cuando termino la última guerra civil- el coronel no había hecho nada
distinto a esperar”. (El coronel no tiene quien le escriba, p.1). Sabiendo muy bien la
situación en la que se encontraba, el coronel hacía todo lo posible por ajustarse y
limitarse en no gastar lo poco que tenían, para poder mantenerse ambos, su mujer
y él. Esto lo podemos leer, cuando nos dice que “durante nueve meses habían
gastado ese dinero centavo a centavo, repartiéndolo entre sus propias
necesidades...” (El coronel no tiene quien le escriba, p.20), y también cuando
menciona que su mujer también se amoldaba en hacer ella misma los quehaceres
para no gastar dinero “Con su asombrosa habilidad para componer, zurcir y
remendar, ellas parecía haber descubierto la clave para sostener la economía
doméstica en el vacío”. (El coronel no tiene quien le escriba, p.21).
Aún en nuestro país, podemos ver en las calles a personas de edad avanzada. Ya
sea pidiendo dinero, o en los mercados. Algunas de estas personas no tiene familia
que le puedan ayudar a poder mantenerse. Y otras, sus familias se han olvidado de
ellas. Es por eso, que los ancianitos se ven obligados a sustentarse o valerse por
ellos mismos. Esto, hace un incremento a la pobreza que se vive en nuestro país.
También podemos decir que las viviendas en las que habitan, pueden no ser aptas
o adecuadas para poder soportar las tempestades del clima tan cambiante de
nuestro país. En especial, cuando se acerca la época de invierno. Su bajo estado
económico no les permite construir una vivienda adecuada para vivir. Normalmente
estas personas hacen sus casas de tablas o de plástico con techos de pajas o de
zinc viejos y con agujeros, que las personas ya no ocupan. Así mismo, su situación
no les permite tener la suficiente ropa, en la que puedan andar. A veces, ellos
utilizan las mismas ropas y cuando se les rompe las remiendan, o hacen sus propias
ropas con telas de otras ropas que ya no les sirve, porque no tienen el dinero
suficiente para poder comprar una nueva.
En otra parte, nos podemos dar cuenta en donde vivían y como era su casa, cuando
menciona “Vivían en el extremo del pueblo, en una casa de techo de palma con
paredes de cal desconchadas”. (El coronel no tiene quien le escriba, p.7).
Además, que a pesar de que tanto su esposa como el coronel, estaban enfermos.
No podían pagar como era debido al doctor que los atendía. Incluso, el coronel llega
a expresarse “… el día que me sienta mal no me pongo en manos de nadie. Me
boto yo mismo en el cajón de la basura”. (El coronel no tiene quien le escriba, p.19).
No tenían tampoco el dinero suficiente para comprar ropa, usaban ropas que
remendaba la mujer del coronel “Sentada entre las begonias del corredor junto a
una caja de ropa inservible (...).Hizo cuellos de mangas y piños de tela de la espalda
y remiendos cuadrados, perfectos, aun con retazos de tela de diferente color”. (El
coronel no tiene quien le escriba, p.19).
Como vemos, hay algunas similitudes que se presentan tanto en el coronel como
en nuestro país. No podemos solo decir que solo aquí sucede esto, si no en muchas
otros lugares del mundo. Y pese al esfuerzo que hace el gobierno e instituciones no
gubernamentales para erradicar el efecto que tiene la pobreza sobre Nicaragua, se
necesita una gran cantidad de inversión en empresas que proporcionen a su vez
grandes porcentajes de empleo, estabilización de precios en la canasta básica,
proyectos de expansión para el agua potable, de salud, educación y vivienda pero
no es un problema que desaparecerá de la noche a la mañana si no con más trabajo
y esfuerzo de quienes tienen esa gran responsabilidad nosotros lo ciudadanos.
V. CONCLUSIÓN
Al leer el libro “El Coronel no tiene quien le escriba” nos dimos cuenta de muchas
similitudes que presentan los personajes, con situaciones o vivencias que también
pasamos en nuestro país. Como el tema de la pobreza, que hay personas que no
poseen el suficiente ayuda económica para satisfacer sus necesidades básicas, de
salud y de vivienda. Y aunque este tema no lo abordamos a profundidad en nuestro
ensayo, también nos muestra la realidad social de las personas que son
injustamente oprimidas por parte del gobierno, en cuanto al desinterés que hay por
parte de las personas mayores con pensiones. Ya que no valoran el esfuerzo y
sacrificios que hicieron en su época de trabajador.
Nos hace pensar lo afortunados que somos algunos de tener lo necesario para
sobrevivir, pero a la vez el apreciar el esfuerzo que hacen nuestros padres por
proveernos de lo más básico para poder vivir. Como el tener una casa con techos
buenos y comida todos los días, así como ropas buenas y demás. También, a no
dar por sentado que siempre tendremos de todo esto, porque no sabemos qué
pasará después en un futuro. Y que por alguna razón tengamos que pasar por la
misma situación que el coronel.
VI. BIBLIOGRAFÍA
García Máquez, G. (1985). El coronel no tiene quien le escriba. (1a ed.). España.
Editorial Bruguera, S.A.
Rafaél, M. (13 Abril 2011). El coronel no tiene quien le escriba. [Online]. Disponible
en: http://miguelrafael.blogspot.com/2011/04/el-coronel-la-vio-atracar-con-una.html
Castro Amaya, J. (2015). Ensayo del coronel no tiene quien le escriba. [Online].
Disponible en:
http://www.academia.edu/14260236/Ensayo_del_coronel_no_tiene_quien_le_escri
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