¡FUNCIONA!

Si sabes lo que quieres

¡puedes tenerlo!
Autor Anónimo

Traducido por Aldo Lagrutta

y
Editado por Olga López
 FUNCIONA

Un plan de logro claro, definitivo y con sentido común. Con

reglas explicaciones y sugerencias para mejorar las condiciones
de tu vida.

El autor envió el manuscrito de este libro a un amigo para que lo

revisara. El amigo le devolvió el manuscrito con una nota que decía:
“¡Funciona!”

Esta valoración nacida de la experiencia, fue adoptada como el

título del libro

Si sabes lo que quieres puedes tenerlo

El hombre que escribió este libro es altamente exitoso y reconocido

por su generosidad y espíritu de asistencia. Él atribuye todo lo que
ha logrado en cuanto al control de las circunstancias, la acumulación
de riquezas y el ganar amigos, al trabajo simple de una poderosa
verdad que él comparte en su obra. Aquí te muestra de una manera
fácil el camino abierto a una vida más feliz. Sabiendo que los más
grandes beneficios vienen de ayudar a otros, sin esperar
compensaciones, el autor de este trabajo ha pedido que su nombre
permanezca anónimo.
¿Cuál es el verdadero secreto para obtener posesiones
deseables?

Algunas personas han nacido con buena estrella u otros encantos

que les permiten tener todo lo que parece deseable. Si no es así,
¿cuál es la causa de la diferencia en las condiciones bajo la cual los
hombres viven?

Hace muchos años sintiendo que debía haber alguna explicación

lógica a esa pregunta, decidí descubrir la respuesta, si ello fuera
posible. Encontré una respuesta que me satisfizo y por años he
compartido esa información con otros que la han usado
exitosamente.

Desde un punto de vista científico, psicológico o teológico, algunas

de las siguientes afirmaciones pueden ser interpretadas como
incorrectas. Aun así el plan ha traído los resultados deseados a
todos aquellos que han seguido sus instrucciones simples, y creo
honestamente que lo estoy presentando ahora en una forma que
traerá felicidad y posesiones a muchos otros.

“Si los deseos fueran caballos, los mendigos serían jinetes”, ésa es
la actitud que toma el hombre común en relación a las posesiones.
Ellos no son conscientes del poder tan cercano que se les escapa a
la vista. Tan fácil de operar, que es difícil de concebir. Y con
resultados tan seguros que no es usado conscientemente o
reconocido como la causa del fracaso o el éxito.
“Guau cómo desearía que fuera mío” es la exclamación de Juan, el
chico de los recados, cuando ve a un coche deportivo pasando
delante de él.

María, la telefonista, expresa el mismo pensamiento contemplando

un anillo desde el escaparate de una joyería.

El pobre anciano Tomás, el contable, en su paseo dominical, le

responde a su esposa: “Si cariño, sería precioso tener una casa
como esa, pero es impensable, tendremos que continuar alquilados”.

Paco, el vendedor, protesta porque, aunque es él quién hace todo el

trabajo, obtiene muy poco dinero y piensa en cómo uno de estos
días va a renunciar a su trabajo y encontrar uno que valga la pena.

Mientras tanto, el presidente, Francisco Javier, en su santuario

privado murmura una amarga diatriba en contra de su repetido
ataque anual de fiebre del heno.

En el hogar ocurren escenas similares. Anoche el padre de Clara

sostenía que su hija iba directa al desastre, y hoy, en casa, a su
madre le parecen insignificantes los problemas para llegar a fin de
mes, cuando proclama: “¡Ya no puedo más! El profesor de la escuela
de Roberto quiere verme esta tarde; ya sé que las calificaciones de
mi hijo son terribles, pero se me hace tarde para llegar a mi partida
de bridge. ¡El profesor va a tener que esperar hasta mañana!”

Y así continúan cascadas interminables de expresiones como estas,

de millones y millones de personas pertenecientes a todas las clases
sociales que no reparan en pensar lo que ellos verdaderamente
quieren y solo aspiran a obtener aquello a lo que creen que tienen
derecho o pueden esperar.

Si tu perteneces a estos millones de habladores irreflexivos, o eres

una de esas personas llena de deseos y te gustaría decidir cambiar
tu condición actual, puedes hacerlo, pero primero debes saber
exactamente lo que quieres, y esto no es un trabajo fácil.
Cuando puedes entrenar a tu mente objetiva (la mente que usas
todos los días) a decidir definitivamente las cosas o condiciones
quieres, habrás tomado el primer paso para obtener y asegurar
todo aquello que quieres.

Obtener lo que deseas, no es más misterioso o incierto que todas

las ondas de radio que te rodean. Sintoniza correctamente y
obtendrás un resultado perfecto, pero para hacer esto, por
supuesto que necesariamente debes conocer tu equipo y tener una
estrategia.

Dentro de ti, tienes a un imponente poder dispuesto y deseoso a

servirte, un poder capaz de darte todo aquello que desees muy
seriamente.

El Dr. Thomson Jay Hudson Ph.D, LL.D, autor de “The Law of

Psychic Phenomena”, describe a este poder como la mente
subjetiva. Otros escritores eminentes usan diferentes términos,
pero todos están de acuerdo en que es omnipotente. En
consecuencia yo llamo a este poder Enmanuelle (Dios en nosotros).
Sin importar el nombre de ese gran poder o la admisión consciente
de Dios, ese poder es capaz - y está dispuesto a llevar a cabo y con
perfecto resultado - los deseos sinceros y serios de la mente
objetiva, pero debes ser muy serio respecto a lo que quieres. Los
deseos ocasionales y superficiales no forman una conexión perfecta
o comunicación con tu poder omnipotente; tienes que ser muy serio,
sincero y verdadero al desear ciertas condiciones o cosas,
mentales, físicas o espirituales.

La razón por la que tu capaz y maravilloso poder interno no funciona

siempre, es porque tu mente objetiva y tu voluntad son tan
vacilantes que usualmente sólo deseas de manera superficial.

La mayoría de los deseos son simplemente expresiones vocales.

Juan, el chico de los recados, no pensó seriamente en la posibilidad
de poseer ese coche deportivo.

Paco el vendedor no estaba verdaderamente pensando en otro

trabajo... ni siquiera estaba pensando. El presidente Francisco
Javier, sabía que tenía la fiebre del heno, y de hecho, esperaba
tener la fiebre del heno.

El negocio del padre era muy exitoso, y sin ninguna duda la madre
trajo a casa el primer premio de su partida de bridge. Pero ninguno
de ellos tenía una clara y fija idea de lo que realmente querían que
sus hijos lograran, y en efecto, estaban contribuyendo a crear las
condiciones de infelicidad que ya existían.
Si tú tienes seriedad con respecto a cambiar tu condición actual,
aquí tienes un plan conciso, definitivo y seguro, con reglas,
explicaciones y sugerencias.

EL PLAN

Escribe en un papel, en orden de importancia, las cosas y

condiciones que realmente quieres. No temas el querer demasiado,
llega hasta el límite de escribir lo que deseas.

Trabaja en tu lista diariamente, añadiendo o borrando de ella, hasta

que sientas que está correcta. No te desanimes por los cambios,
esto es natural. Siempre habrán cambios y adiciones con los logros
e incrementos de tus deseos.

TRES REGLAS POSITIVAS PARA EL EXITO

1) Lee la lista de lo que quieres tres veces al día: mañana, tarde

y noche.

2) Piensa en lo que quieres, tan a menudo como te sea posible.

3) No hables con nadie, respecto a tu plan, excepto con el gran

poder que hay dentro de ti, y que revelará a tu mente objetiva el
método para lograr todos tus deseos escritos.

Es obvio que no vas a tener fe al principio. Algunos de tus deseos,

desde todo punto de vista lógico pueden parecerte positivamente
inalcanzables, sin embargo escríbelos en tu lista, en el
correspondiente lugar de importancia para ti. No hay necesidad de
analizar como este gran poder dentro de ti, va a lograr tus deseos,
ese proceso es tan innecesario como el tratar de saber el porqué de
un grano de maíz enterrado en tierra fértil, brota un cáñamo verde,
florece y produce mazorcas que contienen cientos de granos, cada
uno capaz de realizar lo que el primer grano enterrado hizo.

Si tú sigues este plan definitivo y aplicas las tres simples reglas del
método, los logros se abrirán para ti, misteriosamente, como las
mazorcas aparecen del cáñamo; y en la mayoría de los casos, más
pronto de lo que tú esperas.

Cuando te asalten nuevos deseos que superen a los límites de

aquellos que hay en tu lista, entonces puedes estar seguro de que
estás progresando correctamente.

El eliminar de tu lista los deseos que tú al principio pensaste que

eran importantes, es otra segura indicación de progreso.

Es natural ser escéptico y tener dudas, falta de confianza y todo

tipo de cuestionamientos, pero cuando estos pensamientos surgen,
saca tu lista, léela completa o si las has memorizado, habla con tu
Verdadero Yo acerca de tus deseos, hasta que las dudas que
interfieren con tu progreso hayan desaparecido.

Recuerda, nada puede impedirte que obtengas aquello que

sinceramente deseas, otros poseen estas cosas ¿Por qué tú no?
El poder omnipotente dentro de ti, no entra en argumentos
controversiales, está esperando y deseoso de servirte cuando tú
estás listo. Pero tu mente objetiva es tan susceptible a la sugestión
que es casi imposible hacer ningún proceso satisfactorio, mientras
estés rodeado de escépticos.

En consecuencia, elige a tus amigos cuidadosamente y asóciate con

aquellas personas que ahora tienen eso que tu quieres, pero no
discutas con ellos sobre el método que vas a utilizar para lograrlo.

Escribe en tu lista de deseos cosas materiales como dinero, casa,

coche o lo que sea, pero no te detengas allí, se más preciso, si
quieres un coche, decide que clase de coche, precio, estilo, color y
todos los otros detalles incluyendo cuando lo quieres. Si quieres una
casa, planifica la estructura, las bases, y amuéblala, decide la
localidad donde la quieres y el costo.

Si quieres dinero, escribe la cantidad.

Si quieres romper un récord en tu negocio, escríbelo. Puede ser un

récord de ventas, si es así, escribe el total, la fecha requerida, el
número de artículos que debes vender y también haz una lista de
todos tus clientes potenciales, colocando al lado de cada uno de sus
nombres la cantidad que esperas de ellos.

Esto puede parecerte muy tonto al principio pero nunca podrás

realizar tus deseos si no sabes exactamente y en detalles lo que
quieres, el qué, y cuando lo quieres.
Si no puedes decidir esto, no eres realmente serio en tu deseo,
debes ser definitivo, y cuando lo eres, los resultados serán
sorprendentes y casi imposibles de creer.

Un viejo y natural enemigo, sin duda aparecerá cuando tengas los

primeros resultados, este enemigo es el descrédito en la forma de
pensamientos tales como “esto no puede ser posible”, “ocurrió por
casualidad” o “que coincidencia tan fantástica”.

Cuando estos pensamientos ocurran, agradece y dale crédito por

sus logros a tu poder omnipotente. Al hacer esto ganarás seguridad
y más logros, y eventualmente te probarás a ti mismo que hay una
ley que de hecho funciona siempre, cuando estás en sintonía con
ella. Las gracias sinceras y fervientes no pueden ser dadas sin el
sentimiento de gratitud, y es imposible estar agradecido y
satisfecho sin estar feliz.

En consecuencia, cuando le agradezcas a tu más grande y mejor

amigo, tu omnipotente poder, por los regalos recibidos, hazlo con
toda tu alma y permite que se refleje en tu rostro. El poder y lo que
hace está mucho más allá de la comprensión, no trates de
comprenderlo pero acepta sus logros con gratitud, felicidad y fe
reforzada.

ADVERTENCIA

Es posible querer y obtener aquello que te hará miserable. Aquello

que destruirá la felicidad de los otros, aquello que causará
enfermedad y muerte, aquello que te robará la vida.
Puedes obtener cualquier cosa que quieras, pero debes tomar todo
aquello que viene con lo que quieras. Cuando planifiques lo que
quieres, planifica aquello que estás seguro que te dará a ti y al
resto de la humanidad lo mejor aquí en esta tierra, preparando el
camino para esa futura esperanza más allá de la pálida comprensión
humana.

Este método de asegurar lo que quieres aplica a todas las cosas que
eres capaz de desear, y el rango puede ser tan grande, que te
sugiero que tu primera lista consista en sólo aquellas cosas, con las
cuales estas bien familiarizado, tales como el logro de una cantidad
de dinero, o la posesión de cosas materiales. Tales deseos, son
mucho más rápidos y fáciles de obtener que el eliminar malos
hábitos, el bienestar de los otros, o la sanación mental o corporal.

Logra las cosas más básicas primero, luego toma el próximo paso, y
cuando lo hayas logrado buscarás los objetivos más altos y
realmente importantes en la vida, pero mucho antes de que alcances
este estado de progreso, muchos deseos valiosos encontrarán su
lugar en tu lista. Uno de ellos será el ayudar a otros como tú has
sido ayudado.

Es grande la recompensa para aquellos que dan y ayudan de manera

desinteresada, como también es imposible ser desinteresado sin
obtener ganancias.
CONCLUSIÓN

Hace poco tiempo el Dr. Emil Coue vino a este país y le mostró a
miles de personas como curarse a si mismas; miles de otros se
burlaron de la idea, rechazaron su asistencia y están hoy
exactamente en el mismo lugar antes de la visita del Dr. Coue.

Lo mismo ocurre con lo que he afirmado en este escrito y plan.

Puedes aceptarlo o rechazarlo, puedes permanecer como estás o
tener cualquier cosa que desees, la elección es tuya, pero quiera
Dios que puedas encontrar en este pequeño volumen la inspiración
para elegir correctamente, seguir el plan y a través de él, obtener
como tantos otros lo han hecho, todas las cosas que deseas... lo que
sea que sea que deseas.

Lee este libro, una vez más, una vez más Y UNA VEZ MÁS.

Memoriza las tres simples reglas, ponlas a prueba ahora mismo, lo

que más quieres en este minuto. Este libro se pudo haber extendido
fácilmente por más de trescientas páginas, pero ha sido abreviado
deliberadamente, para hacerlo más fácil para ti, no solo para leerlo,
sino también para entenderlo y, especialmente, utilizarlo ¿Vas a
ponerlo en práctica?

Miles de vidas mejoradas darán testimonio al hecho de que

“¡Funciona!”.
UNA CARTA PARA TI DEL AUTOR.

Apreciado lector, las posesiones más grandes de la vida, son todo

DONES misteriosamente otorgados: La visión, la audición, la
respiración, el amor y la vida misma.

Lo mismo es cierto para las ideas, las más ricas de ellas nos son
dadas, como por ejemplo, la poderosa idea que este libro te ha dado
¿Qué vas a hacer con ella?

Te sorprenderías si te digo que lo más provechoso que puedes hacer

es que lo regales, y puedes hacer esto de una manera fácil y
práctica enviándolo a aquellos que tú sepas que lo necesitan.
De esta forma puedes ayudar en la distribución de este esfuerzo
valioso para mejorar, y hacer más felices la vida de los otros.

Tú conoces a personas que están paralizadas o preocupadas y

desanimadas. ¡Ésta es tu oportunidad para AYUDARLES A
AYUDARSE A SI MISMOS! Si tú retienes u ocultas este libro,
perderás la satisfacción consciente que proviene de hacer el bien.

Si te aseguras de que ellos obtendrán este libro entonces te pones

en sintonía con la ley de la vida que dice “recibes al dar” y puedes
correctamente esperar el logro y la prosperidad. Como mínimo,
tendrás la sensación interna de haber hecho el bien sin esperar
agradecimiento y tu recompensa te llegará secretamente en mayor
poder y mayor prosperidad en tu vida.

El Autor.