Dora Barrancos - Violencia de Género
Dora Barrancos - Violencia de Género
Dora Barrancos - Violencia de Género
Violencia patriarcal1
Dora Barrancos
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Con modificaciones, este trabajo recoge notas publicadas en las revistas Puentes – UNLP - agosto de
2015 y Desde la Patagonia, Difundiendo Saberes -Universidad Nacional del Comahue, nº 22, 2016
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norte argentino. Es probable que la ley sea una de las más integrales, pero
se impone una acción mancomunada en la región para combatir el delito de
la reducción. Finalmente, con relación a las nuevas normas, aludiré al
cambio de la ley penal que ha admitido la figura del “femicidio” - aunque
el término correcto es “feminicidio”, tal como lo adoptó la destacada
feminista mexicana Marcela Lagardeviii. La Argentina se ha integrado al
conjunto de países que agrava la pena por ocasión de la muerte de una
mujer por razones de género, tal como lo han hecho otros países
latinoamericanos, entre otros México, Chile, Perú, Guatemala y Costa Rica.
De acuerdo a la Ley 26.791 de 2012, se establece la pena de “reclusión
perpetua o presión perpetua” a quien victime a una mujer por su condición
generizada, esto es, porque se trata de una mujer. Debe decirse que la
penalidad se agrava igualmente con relación a muertes cometidas por odio
xenófobo, de género – en clara referencia a los cambios de las personas
“trans” - de orientación sexual.
Los crímenes contra las mujeres tienen hoy una visibilidad que ni por
asomo se apreciaba hace apenas unas décadas. Los homicidios “pasionales”
del pasado son interpretados hoy día como crímenes que remiten al
sentimiento de patrimonialidad del cuerpo femenino y aunque se asiste a
una discusión entre las feministas, creo que no podemos sostener que el
flagelo del feminicidio haya aumentado en forma severa pues carecemos de
datos que permitan comparar diferentes periodos. ¿Cómo estimar la
violencia de hoy si un siglo atrás el propio orden jurídico justificaba al
homicida? ¿Contra qué datos contrastar las muertes que hasta hace muy
poco resultaban producto de la “emoción violenta”? Debemos a Rita
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Segato uno de los exámenes más lúcidos y más comprehensivos acerca
de la “naturaleza” de las agresiones que padecen universalmente las
mujeres, cualquiera sea su condición social, y se le deben conceptos como
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Por último, deben considerarse los efectos de las movilizaciones del “Ni
una menos” sobre las propias mujeres. Aunque tampoco tengamos
estadísticas fiables (he aquí una cuestión fundamental), sabemos que
aumentaron considerablemente las denuncias ante muy diversas oficinas en
todo el país. Hubo una oleada de autopercepciones, de auscultamientos que
habían sido demorados, y también de decisiones insurrectas. Muchas se
animaron a salirse de sus calvarios dando pasos que no imaginaban. Hay
que indagar el destino de tales insurgencias, si las denunciantes llegaron a
ser debidamente escuchadas y asistidas. Se sabe que los organismos
receptores – comisarías, servicios jurídicos, servicios especializados
comunales, etc – están desbordados y que en algunos casos la incuria es
soberana y el resultado fatal. El alarido colectivo ha resonado muy fuerte
en algunos lugares, y es necesario reconocer el trabajo de años de algunos
servicios que se han visto fortalecidos a propósito del acontecimiento, hay
muchas congéneres dedicadas a la atención de las humilladas y lastimadas
cuya tarea no siempre puede vislumbrarse. Pero se tiene la certeza de la
desarticulación y en muchas circunstancias, de la imposibilidad del
acompañamiento que permita que las afectadas encuentren una dársena
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i
J.J. Bachofen, “El Matriarcado. Una investigación sobre la ginecocracia en el mundo antiguo según
Naturaleza religiosa y jurídica”, Madrid, Akal, 1987
ii
Lewis Morgan, La sociedad primitiva, Madrid, Ayuso, 1971
iii
Fedrico Engels, El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado, Moscú, Progreso, 2002.
iv
Kate Millet, Política Sexual. Col. Feminismos. Madrid; Cátedra, 1995
v
Celia Amorós, Hacia una crítica de la razón patriarcal, Madrid, Anthropos, 1991
vi
Gerda Lerner La creación del patriarcado, Barcelona, Crítica, 1991
viii
Marcela Lagarde, “Antropología, feminismo y política. Violencia feminicida y derechos humanos de
las mujeres” en Margaret Bullen, Carmen Diez Mintegui (Coord) Retos teóricos y nuevas prácticas, San
Sebastian, Ankulegui, 2008
ix
Rita Segato, Las estructuras elementales de la violencia. Ensayos sobre género en la antropología, el
psicoanálisis y los derechos humanos, Bernal, Prometo/UNQ, 2003