Guia Doctrina I
Guia Doctrina I
Guia Doctrina I
Nivel Básico
Guía
Doctrina I
ÍNDICE DE CONTENIDOS
BIBLIOGRAFÍA ............................................................................................................. 11
SAGRADAS ESCRITURAS............................................................................................... 14
BIBLIOGRAFÍA ............................................................................................................. 23
DIOS / PADRE.............................................................................................................. 24
BIBLIOGRAFÍA ............................................................................................................. 31
EL HOMBRE ................................................................................................................. 32
BIBLIOGRAFÍA ............................................................................................................. 41
BIBLIOGRAFÍA ............................................................................................................. 51
I. INTRODUCCIÓN A LA DOCTRINA
OBJETIVOS:
1.- Conocer la importancia de la Doctrina y su relación con el diario vivir del creyente.
2.- Definir conceptualmente Doctrina, Dogma y Teología.
3.- Discutir y participar en base al conocimiento propio sobre la salvación de Dios
y su pacto hecho con el hombre.
4.- Estudiar e indagar sobre la existencia de Dios, su auto revelación y su Palabra
como medio revelador de su voluntad.
5.- Investigar y auto evaluar nuestro desarrollo como creyente en base a
Romanos 12:1-4.
6.- Aprender como investigar doctrinas.
7.- Aprender y desarrollar conocimiento sobre las diferentes fuentes de doctrinas.
8.- Realizar un patrón de estudio doctrinal.
CONTENIDOS
• Objetivos de la Doctrina.
• Doctrina y Teología Evangélica. Posiibilidades y límites de la Doctrina y la Teología
Evangélica. Doctrina Histórica y Doctrina Moralista Evangélica.
• Los grandes temas de las doctrinas teológicas: Salvación y Pacto.
• Los grandes temas de las doctrinas teológicas: Un sistema para salvar. La Historia.
• El hombre formado por Jesús. Estudio de Romanos 12:1-4.
• Significado y sentido de Doctrina. Dogma. Relación entre la Doctrina y la Teología. El
propósito de la Doctrina. La necesidad de una sana Doctrina en la vida del creyente. Un
modelo para estudiar doctrinas.
• Las fuentes de doctrinas: las Sagradas Escrituras, las tradiciones, otros escritos y libros,
doctrinas de hombres, la sociedad y la cultura.
• El patrón Doctrinal.
• Articulado de la iglesia con respecto a la doctrina.
Objetivo 1.- Conocer la importancia de la Doctrina y su relación con el diario vivir del
creyente.
El primero consiste en aclarar la dirección en la vida, esto es, toda decisión y todo rumbo que en
nuestra vida tomemos, se fundamenta en aquellos principios doctrinales que expresamos y
profesamos. Nuestras decisiones deben estar condicionadas a nuestros criterios doctrinales,
pues estos son principios espirituales e integrales que tratan de darnos rumbo en lo que a
espiritualidad se refiere.
1.3 Por último, la Doctrina tiene como objeto hacernos entender la importancia de ser
discípulos de Cristo Jesús. A través de las doctrinas que estudiamos, logramos profundizar
nuestro entendimiento sobre lo que significa ser discípulo de Cristo. La doctrina nos lleva a
comprender los sentidos más profundos de ser creyente, discípulo, hermano, sacerdote,
embajador de Jesús. Por esa razón cuando estudiamos la doctrina enseñada por Jesús en el
Sermón del Monte (por ejemplo); esa enseñanza nos confronta en pleno, pues nos demanda
cambios radicales en cuanto a nuestra forma de pensar, decir y accionar las cosas. Nos exige
actitudes y respuestas que solamente un individuo arrepentido y converso de corazón puede
esforzarse para lograr. Pero para ello, es necesario aceptar su importancia para nuestra vida.
3.1. Salvación y Pacto, uno de los grandes temas de las doctrinas teológicas.
Los grandes temas de las doctrinas teológicas no son otros que los grandes temas de la
revelación bíblica. El tema central es la cruz de Cristo, punto focal de toda teología y
doctrina, y a partir de ella, fluyen todas las demás realidades divinas. Como lo expresó una
vez Lutero: “La teología de la cruz es la teología de la luz”.
SISTEMA EDUCATIVO IEPLA 6
NIVEL BÁSICO- GUIA DOCTRINA I
El mensaje central de la Biblia es el Pacto de Dios con los hombres. A partir de este concepto
del Pacto hallamos el hilo conductor de toda la historia de la salvación, la cual toma en
ambos Testamentos tres aspectos fundamentales, que son:
• Existe un dador de la salvación.
• Existe un camino de la salvación y
• Existen los herederos de la salvación.
Esto mismo podemos expresarlo de otra manera, en términos de Pacto, así:
• Hay un mediador del Pacto.
• Las bases del Pacto están establecidas; y
• Hay un pueblo del Pacto.
Dios mismo es el Salvador de su pueblo; es él quien confirma su Pacto misericordioso. El
Mediador del Pacto, el Dador de la salvación, es Jesucristo, el Hijo de Dios. El camino de la
salvación, las bases del Pacto, lo constituye la gracia de Dios que demanda de su pueblo una
respuesta de fe y de obediencia. Los herederos de la salvación, el pueblo del Pacto, son el
Israel de Dios y la Iglesia de Dios.
El mensaje central de la Escritura, lo que le da su unidad básica y maravillosa, es el fruto de
la voluntad salvadora de Dios trino: el Padre que llama a la salvación a los hombres; el Hijo
que efectúa dicha salvación y el Espíritu Santo que la aplica, haciéndola fructificar para
santificación 1 de Pedro 1:2.
Objetivo 4.- Estudiar e indagar sobre la existencia de Dios, su auto-revelación y
su Palabra
4.1. Los grandes temas de las doctrinas teológicas: a) Un sistema para salvar
Los grandes temas de las doctrinas teológicas constituyen un sistema organizado para
ayudarnos a entender la salvación de Dios, en este sistema los temas son los siguientes:
• Hay un Dios que es hacedor y legislador de todo lo que existe. (La existencia de
Dios).
• Dios se ha revelado al hombre por medio de su Palabra, la Escritura como revelación
de Dios.
• Dios es un ser personal, puesto que en su naturaleza lo revela, en sus decretos y sus
obras.
• El hombre es creación de Dios, mantiene semejanza original con Dios y al pecar viene
su consiguiente depravación.
• La redención por medio de la obra de Cristo y por el Espíritu Santo, es directa al
hombre pecador.
• Tanto Jesús como su Espíritu, fundan la Iglesia y conforman su naturaleza.
• El final del estado presente de las cosas, ha de ser consumado en el Hijo y el
cumplimiento total de su Palabra.
Pablo llama en 2 de Timoteo 4:3, “sufrir la sana doctrina”, o sea, desear hacer realidad su
Palabra en nuestra vida. Pues siempre nuestra voluntad se encontrará no dispuesta para
hacerlo, sobre todo, con aquellas enseñanzas que nos confrontan con nuestras realidades y
principios del viejo hombre. Pablo nos insta a que tratemos con esfuerzo en vivir conforme a
la voluntad expresada del Padre, sin alterar su verdad a nuestra conveniencia.
Por último, Pablo en Tito 2:1, nos muestra el producto del proceso del propósito doctrinal,
Si nos sometemos a su voluntad y aprendemos de Él, entonces como producto y fruto final,
ha de ser que todo lo que hablemos y hagamos debe ser conforme o de acuerdo a lo que el
Padre dice que debe ser, puesto que hemos conocido de Él los errores que existen y como
debemos evitarlos. Él nos ha dado su autoridad proporcionalmente al conocimiento de su
voluntad y aplicación de la misma. Encontramos en el desarrollo del propósito doctrinal,
además, un desarrollo de nuestro carácter íntegro ante Dios, expresando su voluntad con
acciones vivenciales.
7.1. Las Sagradas Escrituras, los Cristianos, los Católicos, los Judíos, los Masones,
los Mormones, los Testigos de Jehová, los Santeros, los Quaquerianos y otros, mantienen
doctrinas que toman de las Escrituras, pero esto no es aval para creer que son doctrinas
netamente cristianas, por el hecho de tomarlas de allí.
7.2. Las tradiciones, éstas son fuentes de doctrinas basadas en los criterios sociales
y culturales de la humanidad, algunos grupos religiosos basan sus sistemas de enseñanzas
en la tradición, como los Católicos, los Adventistas, etc.
7.3. Otros escritos o libros, entre los cuales están la Atalaya, la Torre del Vigía,
Despertar, la Perla de Gran Precio, el Santo Misal, textos de Metafísica, libros de
Gnosticismo, los Evangelios Dorados, etc.
ASIGNACIÓN PERMANENTE:
• ¿Cuáles son los estatutos de fe, principios o normas en mi Iglesia, que hablan acerca de la
Doctrina?
BIBLIOGRAFÍA
OBJETIVOS
1.- Sentar bases sobre la voluntad de Dios para nuestra vida.
2.- Conocer la voluntad divina y su importancia para la vida en base a las
Escrituras.
3.- Estudiar el significado de la inspiración y de la revelación y su relación con
las Sagradas Escrituras.
4.- Definir revelación general y revelación especial: conceptos, elementos, sentid
sentidos, significados, ¿cómo obran?
5.- Compartir sobre la manera en que las Escrituras influyen en la vida del
creyente.
6.- Participar e investigar sobre los planteamientos doctrinales de la Iglesia en
relación a la autoridad de la Escritura.
CONTENIDOS
• La Biblia, Palabra de Dios. Dios ha hablado y ha hablado para salvar. Las Escrituras son
verdad de Dios. La postura bíblico-histórica.
• Introducción a las Sagradas Escrituras como medio revelador de Dios: expresan su
pensamiento, su obra, su voluntad, Jesús como la Palabra hecha carne (el Verbo), la
obligatoriedad del estudio de las Escrituras y la consideración de ellas como únicas.
• Evidencias: dice y demuestra ser Palabra de Dios. La inspiración de las Escrituras según
Pedro y Pablo. La opinión de Jesús sobre ellas. Autoridad y canonicidad de las
Escrituras. El cánon bíblico. Las Escrituras y los apócrifos. El Cánon Judío.
• Significado de revelación general y revelación especial. Las formas de la revelación, los
instrumentos de la revelación: los testigos y la tradición apostólica..
• El marco de influencia de las Sagradas Escrituras.
• Planteamientos doctrinales de la iglesia en relación a la autoridad de las Escrituras.
La inspiración divina ratificada por Cristo mismo o bien por alguna de las siguientes
señales:
La apostolicidad en el caso del Nuevo Testamento y el profetismo en el Antiguo
Testamento.
La autoridad en la doctrina.
La autenticidad de los escritos, es decir, su genuinidad, por lo que se refiere a autoría y
otros detalles textuales.
Objetivo 5.- Compartir sobre la manera en que las Escrituras influyen en la vida
del creyente.
5.1. El marco de influencia de las Sagradas Escrituras
Las Sagradas Escrituras influyen en nuestras vidas de diferentes formas y constantemente.
Cada vez que acudimos a Su Palabra para conocer Su voluntad, algo accionan ellas en
nuestro interior que nos llama a la renovación y transformación del corazón y del
pensamiento. Cuando leemos por ejemplo a Jeremías 5:14, Jeremías 23:29, Romanos
1:16, Efesios 6:17 y Hebreos 4:12, encontramos formas definidas de actuar de la
Palabra divina en nuestras vidas. Es Su Palabra la que nos ofrece luz y calor en los
momentos en que las tinieblas parecen oscurecer nuestro camino. Es Su Palabra la que tiene
la función de quemar nuestro pecado ante su luz, la que nos consume, purifica, destruye lo
que no proviene de Dios y transforma nuestro ser.
Es Su Palabra la que quebranta nuestro carácter, nos golpea con las más crudas realidades
de nuestra voluntad y sentimientos, es Su Palabra la que nos moldea y cambia conforme a
los propósitos divinos para nuestro andar. Es Su Palabra la que nos fortalece y anima a
seguir caminando. Es su Palabra divina, la que corta lo dañino en nosotros, la que penetra
hasta lo más profundo del ser, descubre lo oculto y nos llama al arrepentimiento.
ASIGNACIÓN PERMANENTE:
• ¿Cuáles son los estatutos de fe, principios o normas en mi Iglesia, que hablan acerca de
la importancia de las Escrituras como norma de fe?
• ¿Qué afirman y qué niegan?
• ¿Cuál es el basamento bíblico de mi Iglesia acerca del uso de las Escrituras y su
enseñanza?
BIBLIOGRAFÍA
Introducción a la doctrina, Autor: José Grau, Editorial CLIE, Curso de Formación Teológica
Evangélica Tomo I
Evidencias que exigen un veredicto, Autor: Josh Mc Dowell, Editorial Vida.
El mundo del Antiguo Testamento, Autores: J. I. Packer; Merril C. Tenney; William White Jr.
Editorial vida.
El mundo del Nuevo Testamento, Autores: J. I. Packer; Merril C. Tenney; William White Jr.
Editorial Vida.
OBJETIVOS:
1.- Ayudar a esclarecer nuestro conocimiento sobre el carácter de Dios, su persona, su obra
y cómo la realiza.
2.- Estudiar los diferentes argumentos que existen en cuanto a la existencia de Dios.
3.- Investigar sobre los elementos que indican cómo es la naturaleza de Dios.
4.- Estudiar y compartir acerca de la Trinidad.
5.- Participar en la investigación sobre la obra completa de Dios como Creador.
6.- Participar e investigar sobre los planteamientos doctrinales de la Iglesia en relación a la
existencia y obra de Dios.
CONTENIDOS
• La existencia de un hacedor y legislador de las cosas. El universo, testigo de la
presencia de un sabio legislador que hace la obra y crea sus leyes de existencia.
Reflexionando sobre las cosas grandes y pequeñas, testigos de la existencia de un
Creador. Falsas concepciones de Dios. Pruebas de la existencia de Dios. La auto
revelación de Dios.
• La confirmación de la existencia de Dios: según las Sagradas Escrituras, según las
evidencias existentes y según los argumentos Cosmológico, Teleológico, Antropológico e
Histórico.
• La naturaleza de Dios. Nombres de Dios. Atributos de Dios: definición y clasificación y
enumeración de los mismos.
• La Trinidad. Conceptos e imágenes que simbolizan la Trinidad. Historia de la Trinidad.
• La obra de Dios como Creador: el mundo invisible, visible, el acto creador en sí.
¿Creación o evolución?
• Articulado de la iglesia con respecto a la existencia y obra de Dios.
Objetivo 3.- Investigar sobre los elementos que indican cómo es la naturaleza de
Dios.
Su obra comprende:
• El mundo invisible
• El mundo visible
• El acto creador en sí
• Finalidad de la creación
• ¿Creación o evolución?
Todo lo creado, absolutamente todo, fue hecho por la intervención divina tanto del Padre,
como del Hijo, como del Espíritu Santo. Por Su voluntad el mundo visible, palpable, universo,
planetas, reino mineral, vegetal y animal existen. Por Su voluntad aún el mundo invisible, es
hecho, los ángeles, arcángeles, serafines y querubines, cielo e infierno, hogares celestiales y
todo lo demás, con propósitos claros según su parecer. Aunque en el Antiguo Testamento no
habla explícitamente de tres personas divinas, a la luz del Nuevo Testamento vemos que las
tres personas intervienen conjuntamente en la obra total de la creación, pero con diferentes
matices, ya esbozados en el Antiguo Testamento. Así, la creación es obra del Padre Génesis
1:1, por medio del Hijo, Proverbios 8:22-31; Juan 1:3; 1 de Corintios 8:6;
Colosenses 1:15-17 y Hebreos 1:2-3, en el aliento amoroso del Espíritu, que se posaba
sobre el abismo como un águila se posa sobre el nido para incubar, y después animar sus
aguiluchos a volar Deuteronomio 32:11. Una vez revelado el misterio de la Trinidad, es
claro que las tres personas han de obrar en común, por tener en común, por decirlo así,
todo el “instrumental”, Juan 5:19. Así creó Dios todo el mundo visible y el invisible,
incluyendo los ángeles. Por lo tanto, el fin de la creación es simplemente, que Dios decidió
hacerlo para Su gloria, Isaías 43:7. Las Sagradas Escrituras no son un libro de Geología, de
Paleontología ni de Biología. Es insensato pretender oponer la ciencia a la Biblia, como es
insensato oponer la Filosofía a la fe. Aquí, como en la separación de lo temporal y de lo
espiritual, hemos de dar al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios. En cuanto a
la creación versus la evolución, como creyentes reconocemos que Génesis capítulo 1 al 11,
es tan Palabra de Dios como el resto de la Escritura. Por tanto, los hechos que allí aparecen
como históricos no pueden ser relegados a la categoría de leyendas. Además, Dios es el
único Dios verdadero, autor de cuanto existe, no por emanación panteísta, sino por creación
de la nada, de acuerdo a Génesis 1:1.
El panteísmo, el ocultismo, la teosofía y algunos filósofos antiguos y modernos, han
mantenido que Dios creó el mundo por la necesidad de expansión de su ser o de su bondad.
Pero la Biblia nos dice que Dios lo ha hecho todo por el deliberado designio de su voluntad,
Efesios 1:11 y Apocalipsis 4:11 nos habla de ello. Puesto que no necesita de nada ni de
nadie Job 22:2-3; Hechos 17:25. La creación tuvo lugar en el tiempo. Dios obra siempre
desde su propio Ser, que es eterno; por tanto, el acto de crear tiene su principio en la
eternidad de Dios, que abarca y rebasa todo tiempo. Que el mundo fue creado en el tiempo
o, con el tiempo más exactamente, significa que el mundo comenzó a ser, o sea, tuvo su
primer instante. Esto nos da a entender que el mundo no ha existido siempre. Además, en la
Escrituras encontramos claramente que Dios hizo para su gloria todo cuanto existe, Isaías
43:7; Proverbios 16:4; Isaías 48:11; Ezequiel 36:22; Romanos 9:17; Romanos
11:36; 1 de Corintios 15:28; Colosenses 1:16; Efesios 1:5-6; Efesios 1:12; Efesios
3:9-10; Apocalipsis 4:11.
ASIGNACIÓN PERMANENTE:
• ¿Cuáles son los estatutos de fe, principios o normas en mi Iglesia, que hablan acerca de
la importancia y existencia de Dios?
• ¿Qué afirman y qué niegan?
• ¿Cuál es el basamento bíblico de mi Iglesia acerca la creencia en un Dios Hacedor y
Legislador de todo lo que existe?
BIBLIOGRAFÍA
Un Dios en tres personas. Autor: Francisco Lacueva, Editorial CLIE, Curso de Formación
Teológica Evangélica. Tomo II.
Evidencias que exigen un veredicto, Autor: Josh Mc Dowell, Editorial Vida.
OBJETIVOS:
1.- Participar en la investigación sobre el hombre como obra de Dios.
2.- Conocer el origen, la naturaleza y las características del hombre al ser creados por Dios.
3.- Analizar y discutir las consecuencias de la caída del hombre por el pecado.
4.- Conocer sobre la relación de hombre y mujer en la creación.
5.- Participar e investigar sobre los planteamientos doctrinales de la iglesia en relación al
hombre.
CONTENIDOS
• ¿Por qué estudiar sobre el hombre?. Salmo 8:4-8. El hombre, gloria y vergüenza del
universo.
• ¿Qué es el hombre?. Origen del hombre y de la mujer.
• La caída del hombre. Los pactos de Dios con la humanidad. Noción de pacto. Los
pactos en el Antiguo Testamento. El Nuevo Pacto. La ley de Dios y el pacto de obras. El
relato de Génesis sobre la caída. El pecado personal: noción de pecado, el pecado en
contraste con la santidad, origen, naturaleza y universalidad del pecado, La depravación
causada por el pecado. Culpa y castigo del pecado. Clasificación del pecado. El remedio
al pecado Los efectos de la caída en el hombre y en la mujer. El valor del ser humano.
Características del ser humano antes de la caída. Comparación entre la vida árida y la
fructífera
• Constitución de la naturaleza del hombre y la mujer. Tipología del hombre según las
Escrituras. Naturaleza moral del hombre. Estado original del hombre.
• Articulado de la iglesia con respecto al hombre.
Objetivo 2.- Conocer el origen, la naturaleza y las características del hombre al ser
creado por Dios.
Objetivo 3.- Analizar y discutir las consecuencias de la caída del hombre por el
pecado.
3.1. La caída del hombre. Los pactos de Dios con la humanidad.
a) Noción de pacto
El vocablo que el hebreo del Antiguo Testamento usa para “pacto” es berith de la raíz brh
que significa cortar y comer, término que connota el rito con que se formalizaba un pacto, y
tiene un sentido más amplio que el vocablo griego diatheke, aunque el contenido es el
mismo. El término diatheke expresa la condición unilateral de los pactos divinos, en los
cuales Dios es el único que concierta el pacto, y el hombre es el único beneficiario, puesto
que Dios obtiene la gloria, pero no favor ni beneficio de parte del hombre, Hechos 3:25;
Hebreos 8:10; Hebreos 9:15-16, Hebreos 10:16.
b) Los pactos en el Antiguo Testamento
Los pactos divinos durante las dispensaciones anteriores a la encarnación del Hijo de Dios
son los siguientes:
- El Pacto Adámico. En el Paraíso Dios hizo con Adán un pacto implícito, asegurándole la
vida eterna a él y a su descendencia, bajo la condición de observar un precepto
determinado. Génesis 2:15-25
- El Pacto Prediluviano con Noé. Ante la universal corrupción de la humanidad, Dios
decide el fin de todo ser, Génesis 6:13-22, pero manda a Noé construir un arca para que
se salve él con su familia (en total, ocho personas), y le dice: “estableceré MI PACTO
contigo. Y entrarás en el arca tú, tus hijos, tu mujer, y las mujeres de tus hijos contigo”.
Noé observó fielmente este pacto.
encontramos allí, un grupo de diez principios que Dios valora en sí y por consiguiente en el
hombre, estos son:
• Valora la persona, versos 1-6.
• Valora el nombre, la reputación, verso 7.
• Valora el descanso, versos 8-10.
• Valora el trabajo, verso 11.
• Valora la familia, verso 12.
• Valora la vida, verso 13.
• Valora la pareja, verso 14.
• Valora lo ajeno, el respeto a la propiedad privada, Verso 15.
• Valora la verdad, verso 16 y
• Valora la propiedad, verso 17.
4.2. Tipología del hombre según las Escrituras: el hombre original, el hombre
natural, el hombre carnal y el hombre espiritual.
En el desarrollo de la doctrina sobre el hombre en las Sagradas Escrituras, encontramos
cinco tipos del ser humano, el primero es el que la Palabra divina llama o da a conocer
como el hombre original, este es Adán al ser creado, el ser humano antes de la caída.
Luego en su desarrollo vemos al hombre original al momento de caer y los efectos de la
caída, tanto en él como en su compañera. Luego tenemos al hombre natural, que
encontramos en 1 de Corintios 2:14: “Pero el hombre natural no percibe las cosas que son
del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de
discernir espiritualmente.” El hombre carnal es el hombre caído que vive en la carne, en
sus deseos y pasiones. Le sigue el hombre carnal, mencionado en 1 de Corintios 3:3,”
porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no
sois carnales, y andáis como hombres?” Este es aquél que vive no “en la carne” sino según
la carne, o sea, a conveniencia, según le parezca y a veces trata de vivir conforme a Dios. Y
por ultimo nos habla del hombre espiritual 1 de Pedro 2:5: “Vosotros también, como
piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios
espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.” Este es aquel hombre que se
arrepiente de su pecado, es regenerado por el Espíritu Santo y vive “en y según el Espíritu
Santo”, como Dios dictamine en Su voluntad.
ASIGNACIÓN PERMANENTE:
• ¿Cuáles son los estatutos de fe, principios o normas en mi Iglesia, que hablan acerca del
hombre?
• ¿Qué afirman y qué niegan?
• ¿Cuál es el basamento bíblico de mi Iglesia acerca del hombre como creación de
Dios?
BIBLIOGRAFÍA
El hombre su grandeza y su miseria, Autor: Francisco Lacueva, Editorial CLIE, Curso de
Formación Teológica Evangélica, Tomo III
OBJETIVOS:
1.- Estudiar las características de la persona de Jesucristo, su humanidad y su divinidad.
2.- Comprender la obra de Jesucristo para la redención del ser humano.
3.- Participar e investigar sobre los planteamientos doctrinales de la Iglesia en relación a
Jesucristo.
CONTENIDO
• Jesús según Isaías y el mesianismo: Isaías 9, 11, 42, Y 53. El Mesías sufriente, el
Mesías soberano y el que viene a tomar nuestro lugar. La persona de Jesucristo:
Jesucristo como modelo de hombre. La plenitud de los tiempos: su advenimiento. Jesús
y su humanidad. Jesús como representante y sustituto. Jesús el Primogénito. Jesús
como cabeza. Jesucristo y su conciencia de su divinidad. Los nombres dados a Jesús en
las Sagradas Escrituras. Los estados de Jesús. Diferencia entre estado y condición. La
humillación del Hijo de Dios. La necesidad de la encarnación del Verbo. La concepción
virginal de Jesús. Nacimiento, infancia y bautismo de Jesús. Los sufrimientos del
Salvador. El descenso de Jesús al Hades. El estado de exaltación. Los oficios de Jesús:
Profeta, Rey y Sacerdote
• La obra de Jesucristo. Introducción y establecimiento del Reino de Dios. Salvación y
redención del ser humano.
• Articulado de la Iglesia con respecto a Jesucristo y su obra.
c) Jesús y su humanidad
Lo primero que encontramos al abrir el Evangelio según Mateo, es decir, al comienzo mismo
del Nuevo Testamento, es el árbol genealógico de Jesús como Israelita, descendiente del
padre de los creyentes, Abraham Mateo 1:1-17. Lucas, el Evangelista del Salvador,
introduce una genealogía distinta que, empalmando con el mismo Adán, enraíza a Jesús en
nuestra raza humana, Hebreos 2:11, 14, 17. Entre los textos sagrados que mencionan en
Jesús su cualidad de hombre, tenemos Mateo 4:4; Mateo 11:19; Juan 1:14; 8:40:
Hechos 2:22; Romanos 5-15; 1 Corintios 15:21; 1 de Timoteo 2:5; 1 de Juan 4:2.
Jesús poseyó una verdadera humanidad. En efecto, vemos que en Jesucristo había los
elementos integrantes de una naturaleza humana. Un cuerpo humano, Mateo 26:26, 28;
Marcos 14:8; 1 de Timoteo 3:16; Hebreos. 2:14; 1 de Juan 1:1. Este cuerpo es una
realidad manifiesta, incluso después de la resurrección, como puede verse por Mateo 28:9;
Lucas 24:39-40, Juan 20:17,27. Un alma humana, Mateo 26:38; Marcos 14:34. Un
espíritu humano, Lucas 23:46, Juan 11:33; Juan 19:30. Actividades realmente humanas,
ya que Jesucristo: padeció hambre Mateo 4:2, sed Juan 19:28, cansancio Juan 4:6,
sueño Mateo 8:24, miedo Mateo 26:37, tristeza Mateo 26:38, llanto Juan 11:35,
Lucas 19:41, sufrimientos físicos y morales Mateo 27:46; Hebreos 2:16; 5:7, muerte
cruenta Juan 19:30; Hechos 3:15; 5:30. Tuvo emociones: amor Juan 11:5, Marcos
10:21, amistad Juan 11:3, ira Juan 2:15, compasión entrañable Mateo 9:36, enojo,
mezclado con tristeza Marcos 3:5, sorpresa Lucas 7:9. Estuvo sujeto a las leyes del
crecimiento Lucas 2:52, de la obediencia Lucas 2:51, de la limitación Marcos 6:5;
13:32, de la tentación Marcos 1:13; Lucas 4:2; Hebreos 4:15, aunque sin pecado ni.
Hubo que enseñarle a hablar, a andar, a leer y a escribir; preguntaba para saber y se
asombraba de lo que no sospechaba, pues en cuanto hombre no lo sabía todo, Lucas 9:18;
Juan 4:52; 11:34; Mateo 8:10; Lucas 7:9.
Jesús tenía naturaleza perfecta, modelo del ideal humano. Su perfección humana resalta
cuando se compara el Salmo 8:4-8 con Hebreos 2:6-10. También se ve en 1 de
Corintios 15:45, 49; 2 de Corintios 3:18, Filipenses 3:21; Colosenses 1:18; 1 de
Pedro 2:21, como modelo cuyas huellas debemos seguir. Hay quienes ven en la frase de
Pilato: “He aquí el hombre” Juan 19:5, la expresión de la ejemplaridad de Cristo, como si el
gobernador romano hubiese dado testimonio de que Cristo era el hombre por excelencia. El
sentido verdadero es el siguiente: “¿Qué os parece? ¿No ha sufrido ya bastante este hombre
inocente?” Su encarnación y hombría se ve demostrada a través de la manifestación de su
encarnación, su genealogía y sus necesidades físicas.
e) Jesús el Primogénito
Mientras que, como Dios, aparece Jesús como Unigénito Juan 1:14, 18; 3:16, 18; 1 de
Juan 4:9, en cuanto hombre aparece como Primogénito, Romanos 8:29. Ahora bien, este
epíteto de Primogénito, aplicado a Jesús, reviste distintos matices, según el contexto: a. En
Un estudio de la literatura sobre ese pasaje revela que cada comentarista tiene su propia
solución, y lo interpreta según sus predilecciones teológicas. Brevemente, he aquí algunas
de las interpretaciones, que afirman que Cristo:
- Antes de su encarnación, predicó a los espíritus ahora en prisión. Esto fue hecho por el
Espíritu Santo en la predicación de Noé, pero sólo Noé y su familia creyeron.
- Predicó a las víctimas del Diluvio que se volvieron a Dios antes de perecer en las aguas
del cataclismo.
- Fue en su espíritu al reino al cual sólo pueden ir los espíritus y proclamó que eran
juzgados con justicia, por no creer en la predicación de Noé.
- Fue en el poder del Espíritu y proclamóse a Sí mismo como Vencedor, y condujo a los
santos del Antiguo Testamento “prisioneros de esperanza”, Zacarías 9:12, a las alturas
Efesios 4:8-10.
- Fue en la modalidad no corpórea de su existencia, en la cual entró inmediatamente
después de su muerte y proclamó la victoria sobre los provocadores y destructivos ángeles
caídos, cuyo poder seductor había contaminado al mundo antediluviano.
- Fue en su espíritu, no en su forma corporal, en el intervalo entre su crucifixión y su
resurrección, y proclamó el mensaje del Evangelio, para liberar a aquellos que, habiendo
sido desobedientes, creyeron en Él, después de haber muerto, al escuchar su predicación.
Estas interpretaciones difieren y por eso, sólo han sido bosquejadas. En ninguna parte
parece haber consenso sobre su interpretación. De los que podemos estar seguros es de
que el pasaje no encierra esperanza alguna para el impenitente, veda la noción de que
aquellos que durante esta vida terrenal rechazan el Evangelio de la gracia de Dios, puedan
tener una segunda oportunidad en el mundo más allá, y ser finalmente salvados.
Otras citas a considerar son: Lucas 23:46; 2 Corintios 5:8.
h) El estado de exaltación
Desde su muerte hasta la diestra del Padre
La exaltación de Cristo consistió en reasumir el ejercicio pleno de los atributos divinos que le
correspondía por el hecho mismo de la encarnación, pero que había dejado a un lado al
renunciar a su gloria y empequeñecerse en la forma de esclavo, en su exaltación, dejó de
estar bajo la Ley para pasar a un estado de soberanía con la posesión de las bendiciones
salvíficas que había ganado para la humanidad ya redimida, y su coronación a la diestra de
Dios en honor y gloria. Aquí es donde brilla en todo su esplendor, el estupendo destino de
nuestro Salvador. Un destino que ya había sido profetizado en Isaías 53:10-12 y que es
detallado en Efesios 4:10; Colosenses 1:15-19; Hebreos 12:2, entre otros lugares. La
Trina Deidad, que había acordado la más tremenda humillación de este Hombre con
mayúscula, hasta hacerle el sustituto de toda la humanidad en el descargo de la justicia
divina por nuestros pecados, le ha elevado también a la más alta posición que pueda
concebirse.
Objetivo 2.- Comprender a obra de Jesucristo para la redención del ser humano.
ASIGNACIÓN PERMANENTE:
• ¿Cuáles son los estatutos de fe, principios o normas en mi Iglesia, que hablan acerca de
Jesucristo?
BIBLIOGRAFÍA