Labras Heraldicas de Xinzo de Limia y Su Comarca

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LABRAS HERALDICAS DE XINZO DE LIMIA

Y SU COMARCA
AYUNTAMENTO DE XINZO DE LIMIA
LA VILLA DE XINZO DE LIMIA

Cumpliendo el encargo que le había sido efectuado por el X Conde de Monte-


rrey y XII Duque de Alba, don Fernando de Silva y Álvarez de Toledo, de confeccionar
una relación y descripción de los estados que la Casa de Monterrey tenía en Galicia, don
Pedro González de Ulloa, a la sazón Abad de la parroquia de Santa María de Covelas,
en su conocido manuscrito1, procede a la descripción de las villas y pueblos que habían
formado parte de los estados de la Casa de Monterrey, en la jurisdicción de Xinzo de
Limia, y lo hace —según dice— desde el mirador privilegiado de la torre de Pena, vol-
viendo su vista hacia los cuatro vientos y girando primero su mirada a poniente, co-
mienza por la villa de Xinzo, de la que dice lo siguiente:
«Desde este castillo de Pena sobre que estamos situados, mirando a poniente, a
distancia de media legua se está viendo la villa de Ginzo, capital de los pueblos límicos,
estados de la excelentísima Casa de Monterrey, jurisdicción del mismo nombre. Es po-
blación de noventa vecinos poco más o menos. No hay más
de doscientos años que ha tenido cerca de tres mil, según me
consta en un antiguo padrón que me enseñó el viejo escriba-
no Oxea.2
Está el lugar en sitio muy llano y por eso son sus ca-
lles por invierno un impuro lodazal. Hay varias casas anti-
guas que en sus viejos paredones y destrozados escudos dan
a entender su antigua robustez y opulencia de sus fundado-
res. En el recinto exterior del lugar se descubren muchas
piedras labradas y cimientos de arruinados edificios: de lo
que se infiere que ha sido población mucho mayor de lo que
es ahora.» Castillo- torre de Pena
No he encontrado en Xinzo de Limia muchas casas antiguas ornadas con labras
heráldicas, ni ruinas de otras que mostrasen escudos de armas destrozados, sino que la
mayoría de los escudos que he podido encontrar en sus calles y plazas, adornan casas
relativamente modernas, en las que, supongo, se habrán insertado algunos de los viejos
escudos que se salvaron del destrozo.

1
Pedro González de Ulloa: Descripción de los Estados de la Casa de Monterrey en Galicia. Santiago de Compostela. MCML
Editado y anotado por D. José Ramón Fernández Oxea.
2
No parecen ser muchos los vecinos de Xinzo que contabiliza el autor del manuscrito, pero en el Catastro del Marqués de la Ense-
nada, llevado a cabo en 1757, veinte años antes de ser escrito aquel, se cifran en ciento uno el número de vecinos que lo eran de la
villa. Tampoco explica la razón del extraordinario descenso de población, que dice ha sufrido la villa en los últimos doscientos años.
Me parece que D, Pedro, Abad de Santa María de Covelas cuando escribió el manuscrito, no quiso entrar en la espinosa cuestión de
la desaparición bajo las aguas de la laguna de Antela —por mandato divino, según alguna de las versiones— de la legendaria ciudad
de Antioquía límica y todos sus habitantes, menos una mujer caritativa; ciudad a la que, sin embargo, el propio Corregidor de la
villa y los demás vecinos de Xinzo que fueron convocados para contestar a las preguntas que contenía el interrogatorio del Catastro,
se refirieron y aseguraron real su antigua existencia, y contestando a la primera pregunta del interrogatorio:-¿Como se llama la
población?, indicaron que: «…cuyo nombre de Jinzo lo adquirió de un Emperador que hubo en ella en tiempo que hera
ciudad con el de Antioquia y se llamaba Jincio...».
IGLESIA PARROQUIAL DE SANTA MARIÑA

Conocida como la iglesia Vieja, las intervenciones arqueológicas que en ella se


han efectuado, hace algunos años, acreditan que ha sido construida sobre solar en el que
ya existía un yacimiento del alto imperio romano, y que las primeras obras para su cons-
trucción, en la forma actual, se remontan al siglo XII, aunque posteriormente ha sido
objeto de tantas obras de ampliación y reforma, que de la primitiva iglesia románica
prácticamente solo queda su pared del norte y su portada, que está formada por tres ar-
quivoltas totalmente lisas, aunque sus capiteles están adornados con motivos vegetales y
personas en oración.
Una de las reformas más importantes llevadas a cabo, a comienzos del siglo
XVII, fue la construcción de la torre campanario, cuyo segundo cuerpo está ornado con
dos labras heráldicas esquineras: El escudo de la izquierda, trae una banda y brochante
sobre el todo una cadena de ocho eslabones, que son las armas
de los Zúñiga. Timbrado con corona condal, pertenece al VI
Conde de Monterrey don Manuel Fonseca y Zúñiga, que como
sus antecesores fue pa-
trono de la iglesia. La
labra de la derecha lleva
esculpido en su campo
un jarrón con flores, que
según la heráldica ecle-
siástica es referencia ex-
presa a la Virgen María
Iglesia Santa Mariña Escudo de Zúñiga Jarrón de flores
En su interior, tiene la iglesia dos capillas funerarias, abiertas en el muro del
lado del Evangelio, ornadas ambas con sendas labras heráldicas.
La primera, que se encuentra inmediata al altar ma-
yor, está claramente descrita, y documentado quien fue su
fundador, el año de su fundación y quien en ella ha sido in-
humado. En el acta de la visita pastoral que el día 13 de oc-
tubre de 1628 efectuó el Sr. Obispo de Orense a la iglesia de
Santa Mariña, se hizo constar que: “Yten por cuanto su se-
ñoría alló una capilla de bóveda a modo de alcoba, que con
licencia del ordinario edificó en la dicha iglesia el Ldo. An-
tonio Vallejo de Luaces Abad de esta iglesia y Comisario del
Santo Oficio, en la capilla mayor al lado del Evangelio y por
haberse acabado a pocos días no tiene ornamentos, cáliz y
mas recados para en ella celebrar”.
El propio fundador ordenó esculpir, en el intradós del
arco de medio punto que constituye la portada de acceso a la
Capilla Vallejo Luaces
capilla, la siguiente inscripción: «Mandola hacer D. Antonio
Vallejo Luaces Comisario del Santo Oficio. Ano de 1628», y, además, en la lápida que
cubre el sepulcro que tiene esta capilla, figura el siguiente epitafio: « Ano de 1636.-
Acabó esta vida.- El Ldo Antonio Vallejo de Luaces natural de Parada de Riveira, Co-
misario del Santo Oficio.- La dotó»
En el frontal del muro interior de la capilla se encuentra insertado un escudo de
armas, español redondeado con su campo cuartelado por cruz flordelisada, que lleva; 1)
una luneta tornada, figurada con rostro humano, acompañada de siete estrellas de cinco
puntas, colocadas en orla, que es una de las modalidades de las
armas de LUACES; 2) tres fajas disminuidas, sumadas de lo que
semejan ser cinco panelas ranversadas colocadas en aspa, lo que
pudiera considerarse una variedad o referencia a las armas del
linaje VALLEJO, que ordinariamente llevan en su campo cinco
fajas disminuidas y una bordura cargada de armiños; 3), dos águi-
las, ambas pasmadas y afrontadas, picando en un salero, modali-
dad simplificada de las armas utilizadas por los SALGADO, y 4)
una figura que no he podido identificar. Timbrado de yelmo em-
penachado, adiestrado de brazo saliente de lo alto, empuñando una
Escudo Luaces y otros
espada, y ornado de lambrequines.
Mas difícil resulta determinar cuando se fundó y quienes fueron inhumados en
la segunda de las capillas que actualmente tiene la iglesia y de quienes son las armas
representadas en el hermoso escudo que adorna su frontispicio.
En la visita pastoral, que se deja indicada, de fecha 13 de octubre de 1628,
además de la fundada por Don Antonio Vallejo, se cita la
existencia de otra capilla, y en el acta levantada se hace
constar: «Yten por cuanto su señoría alló una capilla de Ntra.
Señora edificada junto al altar colateral del Evangelio en el
cuerpo de la Iglesia; la dicha capilla fundó con Licencia del
ordinario Catalina Colmenera viuda que había fincado del
Licenciado Antonio de Penín, en la cual sucedió Fructuoso
Gómez Colmenero, su universal heredero y hasta ahora no se
visitó».
En la inscripción que figura en el friso que discu-
rre debajo del frontón triangular cortado, que remata la
portada y bajo el que se abre la puerta con arco de medio
punto que da acceso al interior de la capilla, salvando
abreviaturas, dice lo siguiente:«ESTA OBRA MANDO HACER
EL LDO PENIN Y SU MUJER CATALINA COLMENERO” Tam-
Capilla Ntra. Sra. del Rosario bién está documentado que el sucesor en los derechos
sobre la capilla fue Fructuoso Gómez Colmenero, por donación a su favor efectuada por
su tía Catalina Colmenero, ya viuda y sin descendientes, en escritura otorgada con fecha
6 de marzo de 1619, cuyo testimonio está incorporado al libro de cuentas y visitas de la
Parroquia.
Durante los siglos XVII y XVIII, la titularidad sobre la capilla y las seis sepultu-
ras que contiene fue objeto de varias transmisiones, cuyo resultado final dejó detallado
el Ilmo. Señor D. Dámaso Iglesias y Lago, Obispo de Orense, que en la extensa acta de
su visita pastoral a la parroquia de Santa Mariña, efectuada el día 13 de junio de 1831,
hizo constar:
«Visitó asimismo los altares: el Mayor dedicado en honor de la Patrona de la Parro-
quia Santa Marina, Virgen y Mártir; el colateral del Evangelio de Nuestra Sra. del Carmen; el
de la Epístola del Santísimo Cristo; otro altar al lado del Evangelio dedicado a Nuestra Sra.
del Rosario en una capilla, que la mitad de seis sepulturas es del Sr. Conde de Gimonde, dos
sextas partes de los herederos del Párroco D. José Gómez de Opazo y la otra sexta parte de los
Herederos de D. Antonio Villarino, vecinos de esta villa excepto el Conde o su sucesora, que lo
es en la Ciudad de Santiago»
En el suelo del interior de la capilla, en las cabeceras de tres sepulturas, dos si-
tuadas a la derecha entrando y una a la izquierda, se encuentran colocadas tres losas
rectangulares, en las que figura la siguiente inscripción: «SOY DEL CONDE DE GIMON-
DE»
Seguramente las referencias efectuadas en la aludida visita
pastoral y las inscripciones que aparecen en las sepulturas, han
dado lugar a que algunos investigadores hayan estimado que allí
están enterrados los Condes de Ximonde, y que posiblemente es
de ellos el escudo que orna la fachada de dicha capilla, y esa ver-
sión aparece repetida en varias publicaciones, incluida Wikipedia,
que incluye ese dato en la biografía que ofrece de don Juan Anto-
nio Cisneros, I Conde de Ximonde, Losa con inscripción
Al tratar de estudiar las labras heráldicas que existen en la iglesia Vieja, como
las armas que contiene el escudo de la capilla de Nuestra Sra. del Rosario era evidente
que nada tienen que ver con las utilizadas por los Condes de Ximonde, y el texto de la
inscripción que figura en la cabecera de las sepulturas no tiene concordancia con las
usuales inscripciones de las lápidas o los frontales de las yacijas de los monumentos
sepulcrales, especialmente en los que han sido inhumados personajes pertenecientes a la
nobleza titulada, me pareció necesario investigar acerca de la realidad de aquellas in-
formaciones.
Basado en un documentado trabajo de Héitor Picallo Fuentes3, en el que realiza
un extenso estudio histórico del Condado de Ximonde y biográfico de sus titulares, y
también consultando otras fuentes documentales, he podido concretar los siguientes
hechos:
El Condado de Ximonde solamente ha tenido tres titulares:
—Don JUAN ANTONIO BERNARDINO CISNEROS DE CASTRO Y FIGUEROA, I
Conde de Ximonde, que falleció en Santiago el día 20 de noviembre 1798.
—Su hijo don PEDRO MARIA CISNEROS DE CASTRO Y ULLOA, II Conde de
Ximonde, que falleció en Santiago de Compostela el 12 de julio de 1824 y fue enterrado
al siguiente día en la Iglesia de San Agustín de dicha ciudad, según acredita su partida
de defunción, que transcribe el autor citado4. Y,
—Doña JACOBA DE CISNEROS DE CASTRO Y PUGA, III Condesa de Ximonde,
hija de don Pedro María, que falleció en Santiago de Compostela, el 7 de abril de 1860,
en estado de viuda de don José María Bermúdez, y sin dejar descendencia, con la cual
se extinguió el Condado.
Acreditado que el II Conde fue enterrado en la Iglesia de San Agustín de Santia-
go, y que la III Condesa, también se desprende que lo fue en Santiago, en la misma igle-
sia de San Agustín donde había sido inhumado su esposo, no aporta datos concretos, el
autor citado, acerca del lugar donde había sido enterrado el I Conde de Gimonde, pero
incluye en su trabajo una serie de datos complementarios, que llevaban a deducir que
había tenido que ser enterrado en Santiago.
Relata Héitor Picallo, que don Juan Antonio Cisneros, con la solicitud que diri-
gió al Rey Carlos III, interesando la concesión del título de Conde de Gimonde, —que
le fue concedido con fecha 17 de diciembre de 1765— en la relación acompañada de los
numerosos bienes y derechos que alegó poseer y disfrutar, incluyó los siguientes:

3
Héitor Picallo Fuentes. Maíndo (A Estrada Pontevedra): Espazo xeográfico, humano e histórico no dominio do Condado de
Ximonde.
4
Ibidem. Pág., 216
«(...) el derecho de presentar en veintinueve beneficios eclesiásticos; además de otras
distinguidas regalías, como son varias sepulturas, y dotaciones en la catedral de Santiago, y en
los conventos de Santo Domingo, San Francisco y San Agustín de la misma ciudad, con nichos,
y escudos de mayor antigüedad(…)» . Es de reseñar que no incluyó las tres sepulturas que
también tenía en la iglesia de Santa Mariña.
No parecía razonable pensar que quien disponía de sepulturas en la propia cate-
dral de Santiago y en varios de los más importantes conventos de la ciudad, fuese tras-
ladado desde Santiago, donde había fallecido, hasta la iglesia de Santa Mariña de Xinzo,
para ser inhumado en una capilla cuyo dominio compartía con varias familias.
Además, en los libros sacramentales de la parroquia de Santa Mariña, en los re-
gistros de difuntos, no aparece referencia alguna a la defunción de D. Juan Antonio
Bernardino Cisneros de Castro; en la visita que el Sr. Obispo de Orense realizó a la pa-
rroquia el día 13 de junio de 1831, cuando aún no habían transcurrido cincuenta años
del fallecimiento del I Conde, —corto espacio de tiempo para estos casos— la inhuma-
ción del I Conde de Ximonde en la capilla de los Dolores tenía que ser un hecho sobra-
damente conocido del párroco y del Sr. Obispo, y nada se hizo constar sobre ello, salvo
indicar que eran del Conde la mitad de las seis sepulturas que tenía la capilla; en las
losas que están colocadas en las tres sepulturas que le pertenecían, la inscripción que
figura en todas ellas solamente dice: «SOY DEL CONDE DE GIMONDE», referencia expre-
sa y terminante a su derecho de dominio sobre ellas, pero en ninguna se indica «AQUÍ
YACE DON JUAN ANTONIO CISNEROS, CONDE DE GIMONDE», ni se hace constar la fecha
del fallecimiento, o menciones similares existentes en prácticamente todos los monu-
mentos funerarios en los que hubiesen sido inhumadas personas pertenecientes a la no-
bleza; y, finalmente, el escudo que orna la fachada de la capilla, no lleva las armas del
Conde de Ximonde, ni está timbrado con corona condal, adorno exterior que utilizó el
Sr. Conde para timbrar su escudo, desde que el titulo le fue concedido.
El escudo adoptado por el I Conde de Ximonde tras la concesión del título, que
reproduce Héitor Picallo5 en su obra, contiene once cuarteles, en los que se reflejan las
armas de diez de los linajes de sus antepasados, y destacado, en el centro o corazón,
lleva el jaquelado de quince piezas, ocho de oro y siete de gules, que es el blasón de
las armas propias y principales del linaje CISNEROS, armas que también figuran desta-
cadas en el escudo, que igualmente reproduce el autor citado,6 que adorna la fachada del
palacio que los Condes de Ximonde tenían en la ciudad de Santiago.
Contando con todos esos datos y mediante un sencillo trabajo de investigación,
en los legajos que obran en el Archivo Histórico Diocesano de Santiago de Compostela,
pude confirmar que en la Capilla de Nuestra Sra. de los Dolores no había sido enterrado
ninguno de los Condes de Ximonde, porque en el fondo parroquial de Santiago S. Fiz de
Solovio,7 se encuentra un documento que copiado literalmente dice:
«En veinte y uno de Diziembre de mil setecientos noventa y ocho se dio sepultura en la
Yglesia del Convento de San Agustín de la ciudad de Santiago á Don Juan Cisneros y Castro,
Conde de Gimonde, vecino de esta Parroquia de San Felix de Solovio y viudo de Doña Manuela
de Ulloa y Cadorniga, el cual falleció el día de aier. Recivio los Santos Sacramentos de Peni-
tencia Eucaristia y Extrema Unción, y tenia otorgado testamento cerrado en cinco de mayo del
corriente año ante Don Pedro Astray y Caneda Escribano del Ayuntamiento, que fue abierto en
el día de la muerte por el Alcalde mas antiguo Don Agustín de Rón. No deja Fundación alguna;
y para que conste lo firmo =Doctor Don Martín Ordáz (rubricado)»

5
H.Picallo. Ob. cit. pág. 184.
6
Ibidem. Pág. 195
7
(AHDS) Parroquia de S. Fiz de Solovio. Libro sacramental P019635, folio 96 vto.
Aclarado el tema anterior, queda la labor de tratar de blasonar el escudo que
adorna la capilla, y determinar quien pudo ser su titular, lo cual determinadas complica-
ciones.
El escudo, colocado sobre cartela, es ovalado y tiene su campo cortado, aunque
sin línea de separación de cuarteles. Lleva: 1) cinco crecientes
tornados colocados en sotuer, adiestrado el central de una figura
que está dañada y no se puede identificar, pero en cualquier caso
parece claro que son armas de los OJEA, y 2) león adiestrado de
una espada colocada en banda con la punta alta, cuya empuñadu-
ra toca el león con las garras de su pata derecha, y está timbrado
con yelmo de hidalgo con visera de cinco grilletas.
Tal vez la identidad del titular del escudo la desvele la
escritura de dotación a una tercera capilla que existió en la igle-
sia, cuyo testimonio se encuentra entre los legajos del archivo de
Escudo de los OJEA
la iglesia de Santa Mariña, (Libro 17.7.1 fol. 152, Archivo Histó-
rico Diocesano de Orense) otorgada ante escribano público, el 25 de septiembre de
1630, entre doña María y doña Marina Feijóa, las dos hijas del licenciado Gabriel Ojea
Feijóo, acompañadas de sus respectivos maridos, y el licenciado Antonio Vallejo de
Luaces, abad de la iglesia, en la cual hicieron constar lo siguiente: « (…) que por cuanto
en la yglesia de Santa Marina desta villa junto a la puerta trabiessa entrando por ella a la ma-
no derecha junto al altar colateral de San Sebastián el dicho licenciado Gabriel Ojea su padre
y suegro avía hecho y fundado una capilla de arco como al presente está hecha y en ella puso
una ymagen de la gloriosa Santa Ana y al pie de la dicha capilla enfrente della hizo su entierro
y puso una losa con sus armas, en la cual sepultura como tal suya propia está enterrado el
dicho licenciado Gabriel Ojea Feijóo y Catalina Colmenera su mujer (…), indicando final-
mente que como dicha capilla y sus sepulturas hasta entonces estaban sin dotar, las do-
taban en dos almudes de pan centeno, a abonar cada año.
Esa tercera capilla y las sepulturas situadas al pié han desaparecido, seguramente
con motivo de las importantes obras de reforma llevadas a cabo en la década de los 70
del siglo XVIII, cuando se allanó todo el interior de la iglesia, porque en la visita del Sr.
Obispo, en el año 1831 ninguna referencia se hace sobre ella; y es muy posible que fue-
se en aquella remodelación cuando la losa con sus armas, que tenía la capilla fundada
por Gabriel Ojea Feijóo, fue colocada en su situación actual. En cualquier caso, lo que
es claro es que el escudo lleva en su primer cuartel las armas de los OJEA, y en el se-
gundo una espada —que también llevan las armas de Feijóo— y un león que la toca con
sus garras, siendo el león y la espada muebles utilizados en los escudos de los Colmene-
ro, por lo que pueden atribuirse las armas de ese segundo cuartel a Catalina Colmenera,
la esposa de Gabriel Ojea, cuyo nombre y apellido curiosamente coinciden con los de la
viuda del licenciado Antonio Penín, fundadora de la capilla de Ntra. Sra. del Rosario,
pero salvo el parentesco que pudiera unirlas no son la misma persona, ya que esta ulti-
ma falleció sin descendencia y testó a favor de Fructuoso Gómez y la esposa de Gabriel
Ojea, dejó dos hijas.
CASA EN LA RUA DA IGREXA, 10 - BLASONADA DE LUACES

En la rúa da Igrexa, 10, está ubicada la única casa blasonada, realmente vieja y
arruinada, que había encontrado en toda la villa de Xinzo. Debió haber sido propiedad
del Ldo. Antonio Vallejo de Luaces, porque el escudo que exhibía, a la derecha de su
fachada, era una copia, casi exacta, del que orna el sepulcro de quien había sido Abad
de la contigua iglesia de Santa Mariña. Hace ya más de diez años había tomado unas
fotografías de la vieja casa y de su labra heráldica, que dan constancia de su lamentable
estado; pero hace un año, en ocasión de una nueva visita que realicé al
lugar, comprobé que se había llevado a cabo una re-
habilitación adecuada y magnifica de aquel viejo edifi-
cio de Xinzo, dándole una nueva forma y aumentando
su altura, pero respetando totalmente el paramento en el
que se encontraba insertado el escudo, que cuidadosa-
mente limpio de líquenes y suciedad, sigue en el mismo
lugar en el que hace ya cuatro siglos había sido coloca-
do.
Rúa Igrexa 10, antes y después de rehabilitación

El escudo, español semicircular, lleva las mismas armas de los Luaces, Vallejo,
Salgado y otro sin determinar, y está timbrado de la misma forma
que el que se encuentra en la primera de las capillas existentes en
la iglesia vieja, aunque se aprecien entre ellos ligeras diferencias,
seguramente atribuibles a quien labró el más moderno. El cuartel
segundo de este escudo, solo lleva dos fajas, mientras que en el
otro lleva tres y las posibles panelas ranversadas de este no están
colocadas en aspa, sino que dos de ellas salen del flanco siniestro,
pero ninguna de esas diferencias altera las armas de los linajes que
se han representado en ambos escudos. Escudo de Luaces,Salgado y otros

CASA EN LA PLAZA MAYOR, BLASONADA DE SALGADO Y OTROS

La casa señalada con el núm.4, de la plaza Mayor, de construcción moderna,


tiene ornada su fachada con un escudo ovalado, medio cortado y partido que trae: 1) un
árbol arrancado, adiestrado de un guerrero que en su mano diestra empuña una espada y
en la siniestra sostiene la cabeza de un hombre al que ha degollado, superado de tres
lises mal ordenadas y siniestrado del cuerpo tendido del hombre degollado, surmontado
este de un cánido pasante; 2) escudete con cuatro bandas dismi-
nuidas; 3) castillo con dos torres, sumado de un salero y dos
águilas posadas que apoyan sus patas en
las torres y pican en el salero, armas de
SALGADO. Escudo sobre cartela, tim-
brado de yelmo empenachado terciado a
la siniestra, adornado con lambrequines,
que parecen ser sarmientos que parten de
lo alto y rodean todo el escudo terminan-
do en dos racimos bajo la punta.
Casa num.4 plaza Mayor Escudo de Salgado y otros
CASA BLASONADA DE SANTANA

También en la plaza Mayor, señalada con el núm. 5, se encuentra otra de las ca-
sas blasonadas de la villa, que como la anterior es de construcción relativamente recien-
te, y en su planta entresuelo tiene colocada, entre unas cristaleras, —lo que no favorece
su vistosidad — una bella labra heráldica, que debe proceder de algún edificio derruido,
posiblemente el que ocupaba el solar sobre el que
ahora se encuentra el nuevo. Español rectangular
su campo es partido y trae: 1) una torre donjonada
ardiente, y 2) árbol resaltado su tronco de dos
lobos afrontados y empinantes al mismo, con
bordura general que en el primer cuartel lleva
ocho aspas y en el segundo ocho veneras, todo
ello compone las armas que utiliza el linaje
SANTANA. Sobre cartela, está timbrado con
yelmo empenachado terciado al diestro y ornado
de lambrequines de roleos.
Escudo Santana Casa plaza Mayor, 5

CASA BLASONADA DE LOSADA Y OTROS


En la casa señalada con el núm. 2 de la rúa Galicia, que hace esquina con la pla-
za Mayor, se encuentra una labra heráldica, que parece haber sido allí colocada cuando
se construyó inicialmente el edificio, pero que ha sido mutilada con motivo de una pos-
terior reforma, llevada a cabo para añadir una galería a su fachada. El escudo, español
redondeado, con pequeña punta en su base, es mantelado y lleva: 1) torre donjonada,
acostada de dos leones afrontados y empinantes, uno en cada flanco, que pudiera ser de
los TORRE o DE LA TORRE, algunas de cuyas ramas utilizan esos muebles en sus
armerías; 2) dos lagartos contrapasantes y bro-
chante sobre ellos una losa, por LOSADA, supe-
rados de una luneta contornada, figurada con cara
humana (sin que pueda apreciarse, dado el muro
que lo tapa, si en el cantón siniestro de ese cuartel
llevaba otras figuras) y 3) ciprés arrancado, resal-
tado su tronco de león pasante. Enmarcado sobre
cartela, está timbrado de yelmo con penachos.
Casa en rúa Galicia 2
Escudo Losada y otros
CASA BLASONADA DE FEIJÓO

La última casa blasonada, que he encontrado en la villa de Xinzo, es la señalada


con el núm. 8 de la rúa Galicia; y, atendiendo a las armas que lleva el escudo que adorna
su fachada, pertenece o ha pertenecido a los Feijóo o Feixóo Tiene situado en su facha-
da un escudo de armas, que es partido y trae: 1) espada fijada, acos-
tada de seis bezantes, colocados en palo, tres a cada flanco, armas de
los FEIJÓO y 2) halcón posado, acompa-
ñado de tres flores de lis, y superado por
una cruz latina. Escudo sobre cartela, tim-
brado con yelmo empenachado, ornado de
lambrequines y acolado por cruz floretea-
da, posiblemente de Calatrava.
Casa en rúa Galicia 8
Escudo de los Feijóo
DAMIL
PAZO BLASONADO DE SANTANA, ARAUJO Y OTROS

Sobre esta localidad de Damil, anexa entonces a la feligresía de Xinzo de Limia,


González de Ulloa solo cita como casas importantes
las de Ordás y Cotilla. No he encontrado casas allí con
labras heráldicas de esos linajes. Solamente he encon-
trado el pazo, cuyo portalón de entrada al amplio patio
interior se encuentra adornado con dos escudos de ar-
mas, ambos españoles circulares con pequeña punta en
su base. El de la izquierda, es partido y trae: 1) torre
donjonada y 2) árbol resaltado su tronco de dos lobos
afrontados y empinantes al mismo, con bordura gene-
Portalón de entrada al pazo de Damil
ral que en el primer cuartel lleva ocho aspas y en el
segundo ocho veneras, que en su totalidad componen las armas plenas ya blasonadas de
SANTANA. Timbrado con yelmo terciado al diestro, empenachado y ornado de lam-
brequines de roleos. El de la derecha es cortado y lleva: 1) castillo acompañado de tres
lises, adiestrado de una banda, cargada en lo
alto de un sol radiante y al final de una lune-
ta tornada y, a la vez, adiestrada la banda
de dama que en su mano izquierda lleva un
pañuelo, pieza y figuras que forman una
modalidad de las armas de ARAUJO; y 2)
dos águilas pasmadas y afrontadas que pi-
can en un salero, también variedad de las
armas de SALGADO. Timbrado de yelmo
terciado al diestro, ornado con lambrequines. Escudo blasonado de Santana Escudo Araujo y Salgado
El pazo, hace ya más de un siglo que ha sido dividido entre tres familias, que
han llevado a cabo reformas y nuevas construcciones en su recinto, quedando única-
mente ahora del viejo pazo, entrando a la izquierda, una gran escalera de piedra, que era
la que daba acceso a la planta superior, y varias dependencias arruinadas, una de las
cuales estaba dotada de hermosa chimenea de piedra, que todavía se conserva.

PIÑEIRA-SECA
CASA DE GIL

Dice González de Ulloa, que Ababides «Tiene anexo el lugar de Piñeiraseca» y


cita como casas importantes de esta localidad, la de los Blanco, la de Gil y la de Rodrí-
guez Piñeira. Solamente he logrado encontrar la conocida como CASA DE GIL, que
sigue conservando, en medio de su amplia fachada, entre dos ventanales, un hermoso
escudo de armas, español redondeado, que lleva en su campo una torre
donjonada, adiestrada de un león rampante
contornado, empinante a ella, surmontada de
tres estrellas de seis puntas, armas usuales de
los GIL. Timbrado con celada frontal empe-
nachada, ornado de lambrequines de hojas de
acanto Escudo de Gil
Casa de Gil - Piñeira Seca
GUINTIMIL
CASA BLASONADA DE SALGADO, FEIJÓO Y OTROS

No cita González de Ulloa casas importantes en esta localidad, pero existe una
casa solariega, conocida como «casa de Biempica», de construcción seguramente poste-
rior a 1757 y que ha sido objeto de reformas más recientes, cuya fachada lateral está
ornada con un escudo semicircular, con su campo dividido en cuartelado en cruz, que
lleva: 1) damado de dieciséis piezas, 4 X 4, que es una modalidad generalmente utiliza-
da en sus armas por los BERMUDEZ; 2), sotuer, formado por dos cadenas de siete es-
labones cada una, acompañado a ambos lados de lo que
parecen ser tres lambeles, y brochante sobre el todo una
cadena de veinte eslabones colocada en orla, cuyo lina-
je no me ha sido posible
identificar; 3) torre donjo-
nada sumada de un águila
posada que pica sobre el
Casa de Biempica - Guintimil donjon, armas simplificadas
de los SALGADO, y 4) espada fijada acostada de seis be-
zantes colocados en dos palos de tres, uno en cada flanco,
armas de los FEIJÓO. Timbrado con yelmo empenachado
vuelto a la siniestra, posición que ordinariamente viene
siendo atribuida a bastardía del titular, está ornado de lam-
brequines Escudo Bermúdez, Salgado y Feijóo

GUDES (GUINTIMIL)
«En el lugar de Gudes —dice González de Ulloa, refiriéndose al año 1757, en el
que confeccionó su manuscrito—, es asimismo distinguida la hermosa casa de D. Anto-
nio Vallejo y Loaces» Se refiere a la casa que ha-
bía sido de esa persona, ya que, como antes hemos
indicado, D. Antonio Vallejo y Luaces, fue el
Abad de la parroquia de Santa Marina de Xinzo de
Limia y comisario del Santo Oficio, que fundó la
capilla situada al lado del altar mayor de la iglesia
Vieja, en la que había sido enterrado ya en el año
de 1630, y la casa pasó a ser de sus herederos, a
Pazo de don Antonio Vallejo favor de los cuales instituyó mayorazgo, del que
era titular, en el año 1831 don Juan Vallejo. Tiene presidida su
fachada por un escudo semicircular, con su campo dividido en
cuartelado en cruz y trae: 1) cuatro estrellas de seis puntas colo-
cadas en dos fajas, dos y dos; 2) cinco panelas colocadas en dos
fajas de tres y dos; 3) una luneta contornada, acompañada de
dos estrellas de seis puntas, que con las cuatro del cuartel prime-
ro componen las armas de los LUACES, y 4) tres fajas, segura-
mente por VALLEJO, que son las armas que también lleva el
escudo que orna la tumba del indicado Abad. Timbrado de yel-
mo frontal empenachado y ornado de lambrequines Escudo de Luaces, Rivera y otros
PENA

LA TORRE-CASTILLO DE PENA

La elevada torre, desde donde González de Ulloa contemplaba y describía los


antiguos estados de la Casa de Monterrey, ya no pertenecía a los Zúñiga Biedma cuando
aquel estaba escribiendo el manuscrito. Les había pertenecido durante más de dos si-
glos, desde que doña Elvira de Biedma, cuarta señora de Biedma, en 1406 contrajo ma-
trimonio con don Diego López de Zúñiga el Mozo, señor de Mon-
terrey y la había aportado con su matrimonio, junto con los estados
de la Limia, y los de Soto Bermud, Biedma y Rivera, que compo-
nían el mayorazgo que había heredado de su padre don Juan Rodrí-
guez de Biedma; pero habían perdido su dominio sobre ella en
1610, cuando se despachó ejecutoria de la sentencia definitiva dic-
tada por la Sala de Mil y Quinientas, en larguísimo proceso segui-
do entre las casas de Monterrey y de Lemos, según la cual, aunque
se confirmó la sentencia que había sido dictada por la Real Chanci-
llería de Valladolid, que había admitido íntegramente la demanda
Torre de Pena da Portela
interpuesta por el Conde de Monterrey, se exceptuaron algunos
bienes, que la comisión ejecutora de la sentencia definitiva, a la que fue encomendada la
labor de determinarlos, decidió incluir entre ellos, como del señor Conde de Lemos, la
jurisdicción de Pena de Portela y su torre, y también la jurisdicción de Calvos de
Randín.
Se pregunta González de Ulloa cómo fue posible que siendo fundada la torre por
Ruy Páez de Biedma, heredada por su hijo Juan Rodríguez de Biedma y de este por su
nieta Elvira de Biedma, que por su matrimonio la había unido a los territorios cuyo se-
ñorío ya tenían los Zúñiga de Monterrey, pasase a ser y estar en poder y posesión de la
Casa de Lemos, y extensamente relata8 el origen del proceso, sus vicisitudes y las de su
ejecución, quejándose de «Las tramoias, enriedos, documentos supuestos y otras trave-
suras que forjaron los agentes y apasionados de Lemos en el curso de este litigio”, y
termina manifestando su esperanza de que pronto, «por derecho de reversión volverán
estos dos miembros a unirse al cuerpo todo”
En la robusta torre, que era la del homenaje de
todo el recinto del castillo, algunos de cuyos restos
todavía quedan a su alrededor, no se aprecia actual-
mente ningún escudo de armas que indique quien era
su señor; pero en el dintel de su puerta de entrada, que
está apoyado en dos ménsulas decoradas con una flor,
se observan unas señales que parecen indicar que allí Puerta de la torre Escudo de Zúñiga

ha estado colocado un escudo de armas, que ha sido picado y eliminado. Mi tío Xesus
Taboada Chivite9, indica que en 1595 la torre todavía ostentaba el escudo de don Gas-
par de Acevedo, V Conde de Monterrey, del que disponía de un dibujo bastante preciso;
escudo que seguramente fue picado a raíz de la sentencia que otorgó la posesión de la
torre al señor Conde de Lemos. El escudo era cuartelado, y llevaba; 1) Zúñiga; 2) Pi-
mentel; 3) Fonseca, 4) Biedma y estaba timbrado con corona condal.

8
Ob. cit. pp. 140- 145. El proceso tuvo su origen en el hecho de que Dª Francisca de Zúñiga y Biedma, II Condesa de Monterrey,
casó en primeras nupcias con Diego de Acevedo y Fonseca, con quien tuvo un único hijo, don Alonso. Fallecido su esposo casó en
segundas nupcias con Fernando de Castro y Andrade, con quien tuvo una hija, doña Teresa, y decidió otorgar testamento, en virtud
del cual, en perjuicio de su primogénito, fundó mayorazgo a favor de su hija, dejando a esta bienes de los que no podía disponer.
9
Jesús Taboada. MONTERREY, Santiago de Compostela MCMLX. Instituto P. Sarmiento de estudios gallegos. Pág. 64.
TRANDEIRAS

CONVENTO DEL BUEN JESUS

Se refiere en varias ocasiones González de Ulloa a esta localidad y al convento


que en ella existía, indicando primero, al describir el curato de San Pedro Fiz de Solvei-
ra, que, «Es este uno de los curato más apetecibles que tiene mi Se-
ñor en este entorno, por estar inmediato al convento del Buen Jesús,
de Trandeiras, del Orden de San Francisco, por cuya circunstancia
no tiene el cura que confesar en todo el año, a menos que sea algún
enfermo”, y añade luego,al referirse al curato de Pena que, «Aunque
este convento seráfico es el “refugium peccatorum de toda la co-
marca; y sus individuos muy celosos del bien espiritual. Está tan
pobre como los moradores del país»
Iglesia del Buen Jesús Fundado el convento por don Alonso Piña, prior de la Cole-
giata de Xunqueira de Ambia, para ser regido por los frailes de la Orden Franciscana de
los Hermanos Menores, comenzaron las obras de su construcción en el año 1520 y llegó
a albergar una comunidad de 24 frailes profesos y 4 legos; pero en el año 1668 sufrió un
gran incendio y, aunque fue reconstruido, los destrozos sufridos durante la invasión
francesa; su posterior desamortización y la venta de la parte conven-
tual a personas particulares, han dado lugar a que en la actualidad
solamente se conserve en buen estado su hermosa iglesia, en cuya
portada gótico-plateresca, con tres arquivoltas bellamente decoradas,
se encuentra insertado un escudo, que por su forma, redondeado con
doble escotadura en jefe y pequeña punta en la base, puede datarse
del primer tercio del siglo XVI, lo que coincide con la época en la
que se comenzaron las obras de construcción de la iglesia y su con-
vento. El escudo lleva en su campo el monograma cristiano IHS,
Jesús salvador de los hombres. Escudo con monograma IHS

En el atrio del convento se encuentra un hermoso e interesante crucero, que en


su parte superior, acolado por su cruz, nos muestra la insignia o escudo principal de la
Orden Franciscana, que lleva dos brazos cruzados sobre una cruz, o una tau, represen-
tando el primer brazo, que se muestra desnudo, a Jesucristo y el segundo, vestido con la
manga de un hábito, a San Francisco de Asís, fundador de la Orden franciscana.
En medio del fuste de la columna del crucero, se encuentra un escudo semicircu-
lar, que lleva en su campo los cinco racimos de uva colocados en sotuer, que represen-
tan las cinco llagas de Cristo, insignia de los Hermanos Menores de la Orden Francisca-
na, que ordinariamente ocupa el segundo de los cuarteles de sus armas plenas.

Crucero en el atrio Escudo principal de la Orden franciscana Escudo Hermanos Menores


MOREIRAS
Del beneficio de Santo Tomé de Moreiras, dice González de Ulloa que «No
tiene casa rectoral y el cura habita en buena paz y amistad
en la que allí tiene D. Juan de Tejada que vive lo mas del
año en Calvos de Randín». Sigue existiendo esa casa y está
ornada con un escudo sencillo, que muestra las armas sim-
plificadas del linaje de los TEJADA, cuya histórica conce-
sión a don Sancho de Tejada y a sus descendientes, y su
blasonamiento completo, relataré al describir el pazo de los
Tejada en la localidad de Calvos de Randín, que está ornado
con un escudo que lleva las armas ple-
nas. El de esta casa de Moreiras es es-
pañol semicircular, con su campo divi-
Casa de Tejada dido en cuartelado en cruz, y lleva; 1º y
3º un castillo, y sobre la torre del homenaje una bandera de dos pun-
tas; 2) un creciente tornado, enfrentado a otro contornado, acompa-
ñados de trece estrellas y 4), un tejo, resaltado de un oso empinante
a su tronco. Timbrado con yelmo empenachado, lleva entre el escu-
do y el yelmo tres cruces de Santiago con una venera a cada lado.
Escudo de Tejada

AYUNTAMIENTO DE TRASMIRAS

ABABIDES
Entre las notas sobre heráldica de la Limia que tenía en su archivo mi tío Xesús
Taboada Chivite, se encontraba la referencia a una casa, conocida como la de los «Srs.
de BUSTAVALLE», que estaba ornada con un escudo de armas, del que disponía de un
dibujo en el que, entre interrogantes, había apuntado los posibles
linajes que en su campo estaban representados. Mucho me costó
encontrar finalmente esa casa, de cuyo nombre ya casi nadie
tiene memoria en el pueblo, porque su escudo de armas, como
ha ocurrido en otros muchos casos, desgraciadamente ha sido
mutilado y prácticamente está desaparecido. Ocurrió que, tras
dividirse la vieja casa solariega entre dos coherederos, el adju-
dicatario de una parte del patio común decidió construir en él
Parte visible del escudo una dependencia de planta baja, con una gran chimenea, con la
que cubrió la mitad de la labra heráldica que adornaba la fachada que la casa tenía hacia
el patio. Solo se encuentra visible, en la actualidad, la mitad
del escudo, pero por el dibujo que se encontraba en el archivo
de mi tío, pueden deducirse algunos de los muebles o figuras
que contiene la parte tapiada. Cuartelado en cruz, trae: 1) cua-
tro estacas puestas en palo y colocadas en faja, que pudiera ser
una variedad de las armas de los QUIROGA; 2) Parecen ser
siete roeles o bezantes, o quizás sean estrellas, colocadas en
dos palos de tres y una en medio. 3) un árbol arrancado suma-
do de una cruz y 4), seguramente se trata de una barca sobre
ondas, armas de los CADORNIGA. Timbrado de yelmo em-
penachado y ornado de lambrequines Dibujo completo del escudo
AYUNTAMIENTO DE SARREAUS

SARREAUS
Escudo que tenía en su fachada la conocida como CASA DE LOS MENDOZA,
en la localidad de Sarreaus y que actualmente también se encuentra en el denominado
Hotel Pazo de los Escudos, de Vigo, junto con otros muchos que hemos localizado, pro-
cedentes de esta comarca, y de otras varias zonas de Galicia. Español redondeado, con
pequeña punta en su base, su campo puede blasonarse como medio
partido y cortado y lleva: 1) seis roeles colocados en dos palos de
tres, armas de los CASTRO; 2) brazo diestro armado moviente del
flanco siniestro, que empuña un sable, que pudieran ser de LIRA,
PELAEZ, o cualquiera de los varios linajes que utilizan esas armas,
aunque con distintos esmaltes o colores, que en este caso no es po-
sible conocer. 3) una torre sumada de un halcón posado, armas de
los FALCON. Timbrado de yelmo empenachado y ornado de lam-
Escudo de los Castro brequines de roleos

LODOSELO
CASA SOLARIEGA DE LOS SOTELO

González de Ulloa, al referirse a esta localidad, indica que «Aquí es distinguidí-


sima la casa solariega de los Sotelos, señores de Sorga, junto a Celanova, Suatorre y
Caldeliñas en el valle de Monterrey, en la parroquia de Villamayor, unidos con los se-
ñores Acebedo de Verín», a cuya familia pertenecía don José Calvo Sotelo, conocido
político gallego que fue Ministro de Hacienda. Disponía de un buen dibujo del escudo
que ornaba aquella casa solariega, porque también lo tenía en su
archivo mi tío Xesús Taboada Chivite; pero cuando indagué en el
pueblo donde se encontraban la casa y su escudo, los vecinos a
quienes pregunté por ello, me dijeron que me podían enseñar la
casa, pero que el escudo lo había comprado un señor de Vigo. Fue
ese uno más de los escudos adquiridos por el Sr. Sensat en la pro-
vincia de Orense, que ahora se encuentra expuesto en el Hotel
Pazo de los Escudos, en la ciudad de Vigo.
Escudo Taboada, Sotelo y otros Español redondeado, tiene su campo cuartelado en cruz, y
lleva: 1) tres palos recortados y bordura cargada de ocho calderas, armas de TABOA-
DA; 2) un árbol, con bordura cargada de ocho lises; 3) tres bandas, que pudieran ser
TOUBES, LOPEZ o cualquiera de los muchos linajes que utilizan esas piezas en sus
armas, y 4) tres fajas, armas de los RIBERA. Sobre el todo, escusón con un árbol, acos-
tado de dos cabras enfrentadas, empinadas al tronco, armas de los SOTELO. Timbrado
de yelmo frontal empenachado y ornado de lambrequines.
AYUNTAMIENTO DE SANDIÁS
PEGAS - PAZO DO ESPIDO

Situado entre la capital municipal y el lugar de Pegas, el pazo de los Armada-


Araujo conserva todavía, en su portalón de entrada que se encuentra en parte derruido,
tres labras heráldicas que muestran las armas de los
primeros titulares del viejo pazo. Los tres escudos, so-
bre cartela, son españoles redondeados con pequeña
punta en la base, El primero por la izquierda, medio
partido y cortado, trae: 1) caballero armado esgrimiendo
una espada en su diestra; 2) castillo de cuyo homenaje
sale una dama agitando un pañuelo, cuyos cuarteles
forman las armas plenas de ARMADA10 y 3) una banda cargada
en lo alto de sol radiante; luego de cinco estrellas de seis puntas y
al final de una luneta tornada, figurada con cara humana, acompa-
ñada de tres estrellas debajo y superada de tres lises, armas de
ARAUJO11. Timbrado de yelmo empenachado, que está vuelto a
la siniestra, —para afrontarse con los otros dos que están en el
mismo muro, por conocida regla de cortesía heráldica— y el yel-
mo, a la vez, siniestrado de brazo senextrócero saliente de la gola,
armado de una maza. Ornado de lambrequines. Escudo de Armada Araujo
El escudo central, cuyas piezas están bastante deterioradas, es mantelado y trae:
1) y 2) ARMADA, y 3) dos espuelas colocadas en faja superadas de una caldera, que
son armas de PUGA. Le rodea una inscripción
que dice “ESTOS ESCUDOS Y POR NOM.
PUGA Y ARMADA PUSO” El tercero, situa-
do a la derecha, aunque en forma irregular,
puede estimarse como medio partido y cortado.
Trae en el 1º) árbol arrancado resaltado su tron-
co de dos lobos afrontados empinantes; 2º) torre
Escudo central Armada Puga donjonada, que con el anterior forman las armas
plenas de SANTANA y en el 3º) una banda, que pudiera ser de los Escudo Santana y Sandiás
Araujo, siniestrada de una cruz patada cantonada de dos rosas en su parte inferior, que
son armas de los SANDIÁS, aunque aquí falten las otras dos rosas cantonando su parte
superior. Lleva bordura general de ocho aspas o sotueres. Timbrado de yelmo empena-
chado, que en este caso está vuelto al diestro.
La edificación que se encuentra en el interior de la finca no
exhibe labras heráldicas. Próxima a ella se encuentra una capilla, dedi-
cada a Santa Maria Magdalena, cuyo muro lateral muestra un escudo,
esculpido en un solo sillar, pero las piezas y figuras que lleva en su
campo se encuentran tan deterioradas que solo pueden distinguirse las
del tercer cuartel. Se aprecia que es mantelado, y en él se reproducen
las armas que lleva el escudo central situado en el portalón de entrada. Escudo capilla del pazo

10
José S. Pozo. Blasones y Linajes de Galicia. Tomo I, pág. 208.
11
Estas mismas armas aparecen en la capilla de los Armada, en la catedral de Orense, donde está inhumado el Deán don Gonzalo
de Armada Araujo, y también en el escudo de la casa de los Armada en la praza do Eironciño dos Cabaleiros, de Ourense.
VILARIÑO DAS POLDRAS
PAZO DO PENEDO

Situado sobre una zona peñascosa de la localidad de Vilariño das Poldras, que se
eleva sobre la plana superficie que el terreno tiene en aquella zona, se encuentra el pazo
que, seguramente por ello, se le denomina «Pazo do Penedo». Iniciada su construcción
en el siglo XVI, fue luego objeto de amplias reformas
posteriores. Cerrada la finca por altos muros, tiene la
casa solariega una parte más antigua que cuenta con
amplio patio y, adosada a aquella, una parte nueva,
que es la que está ornada, en su fachada norte, con un
escudo sobre cartela, español redondeado, que en su
campo trae un pino arrancado y resaltado el tronco de
Pazo do Penedo, Fachada norte. un lebrel pasante atado al
mismo, acostado de cuatro estacas puestas en palo y colocadas
en faja, dos a cada lado. Aunque no he encontrado datos sobre
la genealogía de los primeros titulares del pazo, que permitan
asignar esas armas con seguridad, el lebrel atado a un pino y
las estacas colocadas en palo, son armas utilizadas por los
QUIROGA. Timbrado con celada empenachada, está ornado
de lambrequines.
El pazo tiene como anejo una capilla dedicada a la
Virxe da Luz, en cuya fachada existe una inscripción en la que
dice: «ESTA CAPILLA FUNDÓ FERNANDO GARCIA AÑO 1592»
En la actualidad el pazo pertenece a la familia Marquina. Escudo con las armas de Quiroga.

COUSO DE LIMIA

PAZO DO TELLEIRO

En la localidad de Couso de Limia, se encuentra el PAZO DO TELLEIRO, cuya


construcción fue iniciada por don Tomé Añel y su esposa doña Catalina Rodríguez de
Sandiás. Sus descendientes, que emparentaron con los Mondragón, Deza, Avalle, Cea,
Salgado, Falcón y otros lina-
jes, fueron acometiendo a lo
largo de los siglos diversas
obras de ampliación, hasta
darle el aspecto exterior que
conserva en la actualidad.
Fueron don Juan Añel y su
esposa doña María Deza12,
quienes colocaron el monu-
mental escudo barroco sobre
el portalón principal de en-
trada al pazo.
Pazo do Telleiro

12
María del Rosario Virgós de Cea. Estudios de Genealogía, Heráldica y Nobiliaria de Galicia. Boletín nº 4 - 2005
El escudo tiene su campo partido de un trazo y cortado de dos, y trae: 1º) cruz
de gajos adiestrada de palma y siniestrada de espada, armas del Santo Oficio, de cuya
institución fue familiar un ascendiente de los titulares del pazo; 2º) figuras de difícil
identificación, que se asignan a Ibáñez Mondragón; 3) cruz patada hueca cantonada de
cuatro rosas, una en cada cantón, que son las
armas más usuales de los SANDIÁS; 4), león de
cuyas zarpas cuelgan unas hojas, armas de
ROMAY; 5) dos águilas afrontadas que pican
en un gran salero, sobre el que están posadas,
armas de SALGADO; 6) torre sumada de un
halcón posado, seguramente por FALCON, y
escusón en la punta, con tres lises, figura que
llevan en sus armas los DEZA, AVALLE y
también los CEA, a cuyos linajes pertenecían
los dueños del pazo. Timbrado de corona, está
acolado por cruz de Santiago y ornado de profu-
sos lambrequines.
En el lateral derecho del edificio hay un
pequeño escudo, con una cruz en su campo, que
puede ser de Pereira. Escudo con las armas del Santo Oficio, y otros

AYUNTAMIENTO DE CALVOS DE RANDIN


CALVOS

PAZO DE TEJADA

El pazo, en su amplia fachada principal hacia la praza do Eiro, colocado sobre el


dintel de su portalón de entrada, está ornado con un espectacular y emblemático escudo
de armas. Lamentablemente, los líquenes que lo han invadido y ocultan las piezas y
figuras que contiene, impiden comprobar cómo se ajusta, casi exactamente, a lo que
había sido acordado, hace ya
más de mil años, cuando don
Ramiro I, Rey de Asturias y
León decidió premiar a don
Sancho de Tejada, y a sus
hijos y demás descendientes,
por la intervención que don
Sancho había tenido en la le-
gendaria batalla de Clavijo,
autorizándoles a utilizar en sus
casas, portadas y anillos, un
escudo que llevase las armas
que este contiene.
Pazo de Tejada –Fachada principal
Es una pena que sus dueños no lo limpien, con cuidado y los productos adecua-
dos para no dañar sus piezas, para poder disfrutar plenamente con la visión de los mu-
chos y curiosos detalles que contiene.13
El escudo se blasonaba, en la ratificación de aquel privilegio, que posteriormente
otorgó Enrique IV, en Real Cédula de 10 de septiembre de 1469, en la forma siguien-
te14: «… compónese el escudo de cuatro cuarteles, los que divide una cruz, de la forma
que lo es la de la Orden de San Juan; en el primer campo, a la mano derecha, dos cas-
tillos de piedra natural que significan los dos fuertes de Viguera y Clavijo, en cada cas-
tillo, sobre la torre del homenaje, una bandera con una cruz llana en cada bandera; en
el segundo campo, que es el alto a la siniestra, están dos medias lunas con trece estre-
llas alrededor de las medias lunas, las que significan el padre y la madre y por las trece
estrellas, los trece hijos; en el tercer campo, que es el bajo a la mano derecha, está un
león de sangre rampante; en el cuarto campo, está un árbol que se llama tejo y en él
está atado un oso con una cadena a la rama, cortada, que significa la que cortó Sancho
de Tejada cuando se le quebró la lanza. Todo el escudo está cercado con una orla con
trece veneras sobre la orla, y en cada venera un hábito del Señor Santiago, alrededor
de la orla trece banderas y en cada bandera una media luna con las puntas hacia aba-
jo, y por timbre sobre la celada, un león. A la mano derecha, sobre la celada y encima
de la celada, haciendo medio globo, el curso de la Epístola canónica del mismo Santia-
go que dice: Ecce beatificamus eos qui sustinuerunt. La cruz que divide los cuatro cam-
pos se la dio en señal de su mucha
cristiandad y religioso celo que el
valeroso Sancho Tejada tuvo en la
referida batalla y, a su imitación,
los descendientes caballeros hijos-
dalgo de dicho noble solar a los
cuales en memoria de tan maravi-
llosos hechos les dio y concedió a
sus hijos y descendientes de este y
demás solares infanzonados que de
él vienen y vinieren de los solares
de Tejada y Valdeosera. Le damos
y concedemos dichas armas para
que perpetuamente para siempre
jamás las pongan en sus escudos,
casas, portadas, anillos y demás
partes públicas y privadas a su
voluntad… » Escudo de armas de Tejada
El escudo está bellamente enmarcado, cuidadosamente cincelados los bordes ex-
teriores del marco, adornado todo él con lambrequines de roleos y lleva una flor de lis
en el centro de su parte inferior.

13
Tal como se encuentra actualmente el escudo, hace falta aumentar la imagen y examinarla con mucho detenimiento, para com-
probar la coincidencia de las figuras detalladas en la Cedula de ratificación del privilegio, tanto en el campo, orla y en la inscripción
que lleva encima de la celada, con la única diferencia de que este escudo, en el cuarto cuartel, en lugar de un oso atado a una rama
cortada del tejo, lleva lo que semejan ser dos osos afrontados empinantes al tronco del árbol, y no se aprecia la existencia del león
sobre la celada.
14
En lenguaje actual y suprimidas las referencias a colores de campos y piezas, que en las labras heráldicas no pueden ser refleja-
dos
VILAR DE COVELAS (OS BLANCOS

PAZO DE ARROXO

Al referirse a la parroquia de Santa María de Cobelas, dice González de Ulloa


que «En un corto lugarito, que llaman Villar, está la opulenta casa de Arrojo y Altamirano, de
que hoy es dueño D. Juan de Soto Altamirano, que percibe dentro de esta feligresía dos mil
ferrados de centeno de renta y cerca de trescientos fuera”.
Sigue existiendo el antiguo pazo, que fue vendido hace ya muchos años a un
vecino de Vilar y ahora ha sido dividido entre varios de sus des-
cendientes. Sobre el dintel del portalón
de entrada a la finca, tiene un escudo
ovalado, sobre cartela, que en su campo
lleva diez roeles, colocados en tres pa-
los de tres, cuatro y tres, que son las
armas de ALTAMIRANO.
Portalón de entrada La fachada posterior del pazo, está Escudo Altamirano
adornada con un escudo redondeado, sobre cartela, con particiones irregulares, pero
tomando como referencia las dos líneas horizontales que lo dividen en tres partes, aun-
que son desiguales, puede blasonarse como terciado en faja. Trae en el primero, que a la
vez es medio partido y cortado: 1) árbol acompañado de dos veneras y con un perro
pasante resaltado al tronco; 2) cinco crecientes colocados en sotuer, superados cada uno
de una estrella, que son las armas de los VILLAMARIN; 3) cinco cabezas de lobo dego-
lladas, colocadas en dos fajas de tres y dos, armas de los MOSQUERA. En el segundo,
que es partido; 1) equipolado, que sin conocer los
metales y colores de los nueve puntos no es posible
asignar a ningún linaje determinado y 2) un águila
adiestrada de una torre don-
jonada. En el tercero, tam-
bién partido: 1) dama sa-
liendo del homenaje de una
Fachada posterior del pazo con escudo de armas torre, empuñando en la dies-
tra una llave, siniestrada de un águila empietando a una per-
diz, armas simplificadas de los ARAUJO y 2), sobre tres fajas
recortadas, que pudieran ser de RIVERA, dos torres donjona-
das mazonadas , sumadas cada una de un águila posada, armas
de SUAREZ. Sobre el todo, escusón con cinco lises colocadas
en sotuer, que pudieran ser armas de los ALDAO, DEZA o de
alguno de los varios linajes que utilizan esas figuras en sus
escudos. Timbrado de yelmo empenachado, que está vuelto a
la siniestra, postura que según las normas heráldicas deben
adoptar los timbres de los titulares que procedan de filiación
ilegítima. Podría tener su explicación la postura del yelmo,
atendiendo a lo que indica González de Ulloa15, cuando señala Escudo Villamarín, Mosquera y otros
que «Los que pusieron los primeros cimientos a esta casa a mediados del siglo decimo
sexto, han sido tío y sobrino, abades, el uno de esta feligresía; el otro Juan Yáñez de
Lugo, hijo de Alvar Yáñez de Lugo, abad de Oímbra»

15
González de Ulloa. Ob. Cit. Pág. 157
XII.- AYUNTAMIENTO DE LOBIOS
PAZO DE LOBIOS

En el lugar de Pazos, muy cerca de la capitalidad de Lobios, ya en las estribacio-


nes de la sierra do Xurés, en zona perteneciente a la Limia baja fronteriza con Portugal,
se encuentra una casa solariega que está ornada con un escudo de armas que claramente
se aprecia no tiene las características propias de los escudos españoles. Indagando Ri-
vera Rodríguez16noticias históricas acerca de
ese pazo, sito en territorio español, pero bla-
sonado con una labra heráldica portuguesa,
cita a Vicente Risco17, quien indica que «(…)
en el lugar de Pazos existió el castillo de Sin-
de, de un noble portugués que era dueño de
los señoríos y cotos de Arauxo», y que
«…derruido el castillo y la capilla que tenía,
en su lugar se levantaron las construcciones
actuales».
Lo que indicaba Risco relativo al señorío sobre los cotos de Arauxo, contradice
las afirmaciones que hace González de Ulloa18, que incluye la jurisdicción de Arauxo
entre los estados que pertenecían a la casa de Monterrey, por privilegio concedido a don
Juan Rodríguez de Viedma por el Rey Enrique de Castilla, que fue ratificado por su hijo
Juan I, según consta en el documento que transcribe, en el que se indica que « Nos el
Rey, por hacer bien e merced a vos D. Juan Rodríguez de Viedma, nuestro vasallo da-
mos vos, por juro de heredad, cuatro lugares que nos habemos en tierra de Limia, los
cuales son Lobera. Entrimo, Araujo e Abelenda, con todo lo que a ellos pertenece».
En cualquier caso, según las indagaciones llevadas a cabo por Rivera Rodríguez,
consta que en el Catastro del Marqués de la Ensenada aparece, en el lugar de Pazos
(Lovios), don Francisco Araujo, del Reino de Portugal, como poseedor de una casa de
un alto, que da al camino y también que en 1808 y 1830 figura, como dueño de la casa
del pazo solar de los Araujo en Lovios, don José Gabriel de Araujo y Vasconcelos, ve-
cino de Braga, por lo que no cabe duda alguna de que el pazo perteneció a una rama de
los Arauxo, que procedente de España, donde tenían su solar, había pasado a Portugal.
Aclarado el linaje de los titulares del pazo, procede blaso-
nar la curiosa labra heráldica que se encuentra situada en el
tímpano del frontón triangular cortado, que corona el portalón
principal de acceso al recinto del pazo. El escudo, portugués cin-
turado con pronunciado pico en la punta, trae en su campo un
aspa o sotuer, cargada de cinco bezantes que son las armas de los
Arauxo portugueses, cuyo principal blasón es:19 « De prata, com
aspa de azul carregada de cinco besantes de ouro, postos em aspa.»
Timbrado con corona de marqués, lleva como cimera un busto de
hombre, que aquí no se aprecian bién sus detalles, pero que en la
heraldica portuguesa, suele figurar como busto de moro. El Escudo de Arauxo
escudo está adornado con lambrequines y el frontón con volutas.

16
Mª Teresa Rivera Rodríguez. Los pazos orensanos. Pág. 460.
17
V. Risco Geografía General del Reino de Galicia. Provincia de Orense. Pág. 416
18
Ob. Cit. Págs. 195-196
19
Anuario da Nobreza de Portugal.
AYUNTAMIENTO DE BALTAR
BALTAR

CASA DE LOS CUQUEJO

En el valle de Salas, a dos largas leguas de la torre de Portela, sitúa González de


Ulloa20 la localidad de Baltar, en la que dice «...es muy
distinguida la familia y casa de los Limia», y después
añade que «Aunque pobres son también hidalgos noto-
rios los Cuquejos, los Díaz y Carrascos”. En las notas a
pié de página que Fernández Oxea incluyó en la publica-
ción del manuscrito, indica que «Asimismo se conservan
todavía las casas de los Cuquejos y la de los Carrascos,
Casa blasonada de Baltar aquella con escudo.
Solamente he podido encontrar una casa blasonada en Baltar, que me han indi-
cado que había sido de los Cuquejos, cuya fachada tiene insertado un extraño escudo de
armas, que está cuartelado por una cruz, que aparece empuñada por la mano de brazo
naciente del flanco diestro del tercer cuartel, y que lleva, en el primero y segundo lo que
semeja ser un viento, siniestrado de león rampante; en el tercero, además del brazo na-
ciente, se encuentra un escudete cuyo campo se ve pleno y, en el
cuarto, aparecen cuatro fajas disminuidas. Colocado, a modo de
timbre, lleva lo que sería una torre almenada, pero que, en contra
de las reglas heráldicas, tiene tres ventanas en lugar de las dos
generalmente establecidas para este mueble, lo que parece dar a
entender que con ello se quiso representar una edificación mayor,
en este caso castillo. Como una modalidad de las armas de los
Cuquejo21, es un castillo de cuyas ventanas salen el rey y la reina,
es posible que se haya colocado esa pieza en esa inusual posi-
ción, para reflejar y destacar ese linaje. En cualquier caso el escu-
do es reciente, porque, justo encima, tiene una cartela en la que se Escudo de Cuquejo y otros
indica: Año 1890.

20
Ob. Cit. Pág. 174
21
Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica. 59

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