Ley 588 Servicios Profesionales
Ley 588 Servicios Profesionales
Ley 588 Servicios Profesionales
A sus habitantes,
SABED:
Que,
LA ASAMBLEA NACIONAL
Ha ordenado la siguiente:
CAPÍTULO I
DISPOSICIONES GENERALES
Artículo 1.- Objeto de esta Ley. La presente Ley es de carácter general y de orden público,
tiene por objeto promover las oportunidades de trabajo de los profesionales Nicaragüenses,
incentivando la colegiación profesional, la superación y actualización profesional, la adopción
de una cultura de prestación de servicios de calidad y de actuaciones éticas en el ejercicio
profesional, para beneficio y protección del usuario y posicionarlos en el mercado de trabajo,
permitiéndoles competir en mejores condiciones, con profesionales o empresas de servicios
profesionales extranjeras.
Art. 2.- Ámbito de Aplicación. La presente Ley será aplicable a todos los profesionales que
presten sus servicios en el territorio Nacional y a los Colegios Profesionales que se constituyan
al amparo de la presente Ley.
Art. 3.- Función Social. El ejercicio profesional cumple una función social y se regirá por la
presente Ley, su normativa interna, la Ley Creadora de cada Colegio, el Reglamento Interno y
el Código de Ética Profesional que dicte cada Colegio Profesional.
CAPÍTULO II
DE LOS PROFESIONALES Y DEL EJERCICIO PROFESIONAL
Art. 4.- Son Profesionales. Para los efectos de esta Ley, son profesionales, las personas con
Títulos Profesionales con grado académico mínimo de Licenciatura o su equivalente
legalmente extendido por una Universidad Nicaragüense autorizada por la autoridad
competente. También son profesionales las personas graduadas en el extranjero con Títulos
Profesionales que se hubieran incorporado legalmente en el País, de conformidad con la Ley
de incorporación de profesionales en Nicaragua, Decreto No. 132 del 25 de octubre de 1979,
publicado en La Gaceta, Diario Oficial No. 47 del 12 de noviembre de 1979.
Art. 5.- Colegios Profesionales. Los Colegios Profesionales son personas jurídicas de
derecho público, sin fines de lucro, creadas por ley, para que por su intermediación, se avance
en la consecución del objeto de esta Ley; para tal efecto están facultados para:
a) Organizar un registro de sus afiliados para que conste fehacientemente, el grado académico,
estudios de especialización y actualización profesional, dominio y experiencia en un área
determinada de su profesión.
La base de datos del registro profesional, certificará todos los documentos que consten en su
registro, fundamentalmente el título académico, teniendo dicha certificación valor de
Documento Público;
b) Mantener actualizada en la página Web del Colegio, las hojas de vida de aquellos
profesionales colegiados, que quieran prestar sus servicios al público a Empresas Privadas o al
Estado;
f) Todas aquellas gestiones o acciones que vayan en beneficio de los afiliados del Colegio
Profesional.
Art. 6.- Ejercicio Profesional. Se entiende por ejercicio profesional, para los efectos de esta
Ley, la realización habitual a título oneroso o gratuito de todo acto o la prestación de cualquier
servicio propio de cada profesión, incluyendo los servicios de consultoría y/o asesoría.
Art. 7.- Son Profesionales habilitados, los extranjeros que hubieren obtenido la autorización
para el ejercicio profesional de parte del respectivo colegio.
Art. 8.- El profesional solamente podrá ejercer la profesión o profesiones para las cuales fue
expresamente autorizado, con base en el título o títulos que posea, con las excepciones
establecidas en el artículo 69 de la Ley No. 292, “Ley de Medicamentos y Farmacia”, del 1 de
junio de 1998, publicado en La Gaceta, Diario Oficial No. 103 del 4 de junio de 1998.
Art. 9.- Los profesionales podrán prestar sus servicios en forma individual o colectiva, en este
último caso, los estudios o dictámenes deberán ser suscritos por un profesional Nicaragüense
debidamente certificado por su respectivo colegio quien será responsable de los documentos
que suscriba. El Colegio definirá en su Ley Orgánica, los documentos afectos al uso de los
timbres profesionales.
Estas empresas tendrán que contratar al menos un veinticinco por ciento de profesionales
Nicaragüenses colegiados.
Art. 13.- Profesionales Adecuados y Necesarios. Todos los servicios y trabajos prestados
por las empresas, relacionados con las profesiones, a que se refiere la presente Ley, deberán
realizarse con la participación de los profesionales necesarios y adecuados para garantizar la
eficiencia, calidad, seguridad y corrección de tales servicios y trabajos. Dichos profesionales
deberán estar autorizados para ejercer la profesión en Nicaragua.
Art. 14.- Obligaciones de los Profesionales que Ejercen Libremente su Profesión. Los
profesionales colegiados de conformidad con la presente Ley, que ejercen libremente su
profesión, deberán colocar visiblemente en el local donde ejerzan habitualmente, la constancia
que los acredite como colegiados, extendida por el Secretario de la Junta Directiva de su
respectivo Colegio. Los profesionales que optan a ingresar al servicio civil en calidad de
Funcionarios y Empleados Públicos en cargos que se requiera el conocimiento de determinada
profesión, deben presentar la respectiva constancia que lo acredite como colegiado.
CAPÍTULO III
LOS TIMBRES PROFESIONALES
Art. 15.- Creación del Timbre Profesional. En la Ley creadora de cada Colegio Profesional,
se podrá establecer la creación de un timbre profesional, como requisito legal obligatorio de
aplicación en los actos o documentos, dictámenes, o certificaciones que la misma ley señale,
emitidos o autorizados por profesionales colegiados o por empresas prestadoras de servicios
profesionales, inscritas en el colegio respectivo.
Art. 16.- Destino de los Ingresos por Venta de Timbres. La Ley creadora de cada colegio
determinará la forma de emisión, distribución y venta de sus timbres profesionales. Así como, el
uso y destino de los ingresos generados por tal actividad.
Art. 17.- Emisión y Aplicación de Timbres. Cada Colegio determinará en su Ley creadora las
escalas de aplicación de los timbres, los actos, documentos, dictámenes, opiniones, etc., que
se generen por el servicio profesional dentro del ámbito de su disciplina académica con
cobertura del Colegio, así como las características de los timbres.
CAPÍTULO IV
DE LOS TÍTULOS PROFESIONALES
Art. 18.- Expedición de Títulos. Las personas que hubieran concluido satisfactoriamente el
plan de estudios, de una determinada carrera y satisfecho los requisitos establecidos en las
instituciones de educación superior, debidamente autorizadas por la autoridad competente
tendrán derecho a que se les expida el título correspondiente. Los títulos serán expedidos
únicamente por la universidad donde cursó y aprobó las materias correspondientes al plan de
estudios.
Sólo serán reconocidos en Nicaragua, los grados, títulos y diplomas otorgados por
universidades legalmente autorizadas y organizadas para funcionar en el país.
Art. 19.- Derechos Acreditados por los Títulos. Los derechos adquiridos por el ejercicio de
las profesiones acreditadas por sus respectivos títulos deben ser respetados y no podrán
emitirse disposiciones legales que los limiten o restrinjan.
Art. 21.- Se entenderá por reconocimiento el acto mediante el cual se acepta y certifica que la
persona que posee un título profesional obtenido en el extranjero, acredita que los estudios
realizados corresponden a una formación profesional obtenida en instituciones extranjeras de
nivel universitario o superior.
CAPÍTULO V
DE LA AUTORIZACIÓN
Art. 23.- Facultades para Autorizar en el Ejercicio Profesional. Los colegios profesionales
son las autoridades facultadas por la Ley, para certificar y normar el ejercicio profesional de sus
afiliados. Los colegios Profesionales respectivos certificarán de sus miembros o profesionales
colegiados, lo siguiente: El título Profesional, estudios de postgrados, especialidades y/o
experiencias, cursos de actualización profesional y otras cualidades que establezca la ley
creadora del colegio respectivo.
Art. 24.- Requisitos Para Autorizar en Ejercicio Profesional. Los profesionales que se
colegien presentarán solicitud en el formato que al efecto elabore el respectivo colegio
acompañado de los siguientes documentos:
1. Título profesional expedido por una Universidad reconocida por el Consejo Nacional de
Universidades o reconocida por una Universidad Estatal si se hubiese graduado en el
extranjero.
4. Cédula de identidad.
El colegio constatará si la universidad que otorgó el título está autorizada para expedir títulos
profesionales; si el título efectivamente fue otorgado al solicitante. Efectuado este trámite el
Colegio otorgará la membresía con su respectivo carné y la certificación del profesional.
Art. 25.- Registro Nacional de las Profesiones. Declárese de carácter público e interés social
el Registro de los Profesionales. La normativa interna de cada Colegio, establecerá la
organización, funcionamiento, acceso y control de este Registro y los datos e información que
tienen que suministrar los profesionales a los colegios respectivos.
Art. 26.- El registro de profesionales que administra cada Colegio Profesional, será el
encargado de certificar los actos y documentos que se hayan inscrito en él. La Ley Creadora de
cada Colegio Profesional determinará los requisitos y procedimientos de inscripción
correspondientes.
No podrán ejercer la profesión en el país, los profesionales graduados en el exterior, que sean
representantes o funcionarios de Gobiernos Extranjeros, Organismos Internacionales
Gubernamentales o Multilaterales. Los profesionales extranjeros que laboren amparados en
convenios de cooperación, solamente podrán ejercer en las actividades profesionales definidas
en el convenio y durante la vigencia de los respectivos programas o proyectos de los mismos.
Art. 28.- El Estado sólo podrá contratar los servicios de profesionales extranjeros, en los
cargos de carácter técnico por tiempo determinado y para prestar servicios específicos,
solamente si no hay profesionales Nicaragüenses con tales calificaciones, para tal efecto se
consultará de previo con el Colegio Profesional respectivo.
CAPÍTULO VI
DE LOS COLEGIOS PROFESIONALES
Art. 29.- Concepto. Los Colegios Profesionales son personas jurídicas de Derecho Público,
apolíticas, no religiosas, sin fines de lucro, con personalidad jurídica propia y plena capacidad
para ejercer derechos y contraer obligaciones para el logro de sus fines y objetivos.
Art. 30.- Por Ministerio de la presente Ley, el Estado delega en los Colegios Profesionales la
ejecución y supervisión del cumplimiento de la presente Ley y la facultad para otorgar la
certificación profesional y el control del ejercicio profesional de sus afiliados y de los extranjeros
que puedan ejercer su profesión en Nicaragua.
Art. 31.- Proceso de Creación de los Colegios Profesionales. La Creación de los Colegios
Profesionales se realizará mediante Ley aprobada por la Asamblea Nacional.
El Colegio adquirirá su Personalidad Jurídica, una vez que entre en vigencia su respectiva Ley
Creadora y sea publicada en La Gaceta, Diario Oficial, su respectiva normativa Interna y
Código de Ética Profesional.
Se reserva el Nombre o Razón Social de Colegio Profesional exclusivamente para los Colegios
Profesionales constituidos mediante las disposiciones de la presente Ley. Se considera no
puesta la palabra “colegio” en las denominaciones de las Asociaciones de Profesionales
constituidas o regidas bajo la Ley No. 147, “Ley General Sobre Personas Jurídicas sin Fines de
Lucro”. Para los efectos del cumplimiento de la presente Ley, estas Asociaciones de
Profesionales deberán informar sobre su nueva denominación, en el plazo de un mes después
de la entrada en vigencia de la presente Ley, al Departamento de Registro y Control de
Asociaciones del Ministerio de Gobernación.
Art. 33.- Contenido de las Leyes Creadoras de Colegios Profesionales. La Ley Creadora
de los Colegios Profesionales deberá contener al menos lo siguiente:
5. Derechos y deberes de los colegiados con respecto al colegio y con los usuarios de sus
servicios;
8. Recursos de impugnación contra los actos o resoluciones de los órganos del colegio, tanto
internos como jurisdiccionales o administrativos; y
Art. 34.- Atribuciones de los Colegios Profesionales. Los Colegios Profesionales tienen las
siguientes atribuciones:
b) Velar por la calidad, ética y dignidad profesional de los colegiados y por que se respeten y
garanticen los derechos de los usuarios de sus servicios y de los ciudadanos en general;
g) Dirimir los conflictos por vía de la conciliación, mediación y arbitraje que en el ejercicio
profesional pudieran suscitarse entre profesionales y usuarios de sus servicios y entre los
profesionales entre sí o entre éstos y el Estado;
h) Dictar el reglamento de aranceles respectivo que se cobren por los servicios profesionales;
i) Firmar acuerdos de reciprocidad del ejercicio profesional con Colegios Profesionales de otros
países o con Organismos Internacionales;
j) Suscribir contratos de seguro colectivo de responsabilidad civil para responder por los daños
causados por la negligencia de sus miembros en el ejercicio profesional; y
k) Cualquier otro objetivo que se establezca en su Ley Creadora en beneficio del ejercicio
profesional y de la colectividad.
Art. 35.- Los Colegios Profesionales, determinarán en su ley creadora las facultades y medios
legales para el ejercicio de sus fines y objetivos.
Art. 36.- Órganos de Gobierno de los Colegios de Abogados. Son órganos de gobierno de
los Colegios Profesionales los siguientes:
Art. 37.- Los colegios profesionales tendrán patrimonio propio, el que estará constituido por
todos los Bienes, Derechos y Acciones, así como de los haberes que adquieran por cualquier
título.
Art. 38.- Los colegios profesionales tendrán la libre administración de sus bienes, derechos,
acciones y haberes patrimoniales, pero sólo podrán disponer de ellos para la realización de sus
propios fines y objetivos.
Los Colegios Profesionales podrán constituir un Consejo Nacional o una Federación de los
Colegios, en función de sus intereses, para lo cual entre ellos decidirán acerca de su
estructura, funcionamiento, atribuciones y financiamiento.
CAPÍTULO VII
DE LAS INFRACCIONES
a) Para efectos de esta Ley, se considera ejercicio ilegal de las profesiones, sujetos a sanción
las siguientes conductas:
ii) Quienes habiendo obtenido el título correspondiente, realicen actos o gestiones propias de
las profesiones sin haber obtenido la autorización de autoridad competente para el ejercicio
profesional.
iv) Quienes habiendo sido sancionados con la suspensión o desautorización del ejercicio
profesional, lo ejerzan durante el tiempo de la suspensión o desautorización.
ii) Si es relevado por la Junta Directiva del colegio y a petición del profesional, por estimar que
guardar el secreto profesional podría causar una lesión al propio profesional o a un tercero
notoriamente injusta; y
iii) Cuando el secreto encubra la comisión de algún delito o algún acto ilícito.
e) Por incurrir en omisión o negligencia en la prestación del servicio profesional que ocasione
lesiones en la vida, la moral, la salud o el patrimonio del usuario.
f) Por aceptar o prestar un servicio para cuya ejecución no esté capacitado en función de sus
conocimientos, experiencia y dedicación profesional.
CAPÍTULO VIII
DE LAS SANCIONES
Art. 40.- Las infracciones al ejercicio ilegal de las profesiones, se sancionarán con suspensión,
por el término de uno a tres años y en caso de reincidencia con multa de mil a diez mil
córdobas, sin perjuicio de la acción penal sí la conducta infractora, coincide con un tipo penal
establecido en la ley.
Art. 41.- Cuando se ejerza la profesión en áreas no autorizadas por el Título o en ejercicio
profesional colectivo sin respaldo de profesional certificado por el Colegio respectivo, se
sancionará con multa de mil a diez mil córdobas y amonestaciones escritas con copia a su
expediente profesional.
Art. 42.- La revelación del secreto profesional, las omisiones o negligencias o la aceptación
para prestar un servicio para cuya ejecución no está autorizado, se sancionará con multa de un
mil a cinco mil córdobas y amonestación por escrito con copia a su expediente.
CAPÍTULO IX
PROCEDIMIENTO DISCIPLINARIO
Art. 43.- El procedimiento disciplinario se iniciará por denuncia de parte interesada ante el
tribunal de honor del respectivo colegio y una vez iniciada se impulsará de oficio en todos sus
trámites. El Código de Ética Profesional de cada Colegio determinará el procedimiento
disciplinario y sus términos, el que debe ajustarse a las garantías del debido proceso.
Art. 44.- Los usuarios perjudicados por profesionales no colegiados interpondrán denuncia ante
el Ministerio Público en el caso de que las actuaciones del profesional estén tipificadas como
delito, para que este interponga la acción penal correspondiente. En el caso de daño y
perjuicio, podrán demandar directamente al profesional ante el Juez Civil competente.
Art. 45.- La resolución que dicte el Tribunal de Honor de cada Colegio, deberá ser notificada al
profesional en un plazo máximo de siete días hábiles y expresará motivadamente los hechos
comprobados que fundamentan la decisión de sancionar al profesional.
Contra las resoluciones del Tribunal de Honor cabrá el recurso de Apelación para ante la Junta
Directiva del Colegio Profesional.
Art. 46.- El Recurso de Apelación deberá interponerse ante el Tribunal de Honor dentro del
plazo de seis días, que se contarán a partir del día siguiente de la notificación de la resolución
definitiva.
Una vez admitido el recurso, el Tribunal de Honor emplazará a ambas partes a personarse y
expresar agravios ante la Junta Directiva del colegio en un plazo de tres días hábiles después
de notificado el emplazamiento. Una vez personado y expresados o contestados los agravios,
cualquiera de las partes podrá solicitar que se decrete la práctica de cualquier tipo de pruebas.
Concluido el plazo, dictará auto para que ambas partes pasen vista del expediente durante
cinco días, concluido el período de la vista. Las partes presentarán sus escritos de conclusión
en un plazo de diez días.
La Junta Directiva del Colegio dictará su resolución dentro de un plazo de treinta días después
de concluido el plazo anterior.
Art. 47.- Vencido el plazo para presentar escritos de conclusión, la Junta Directiva del Colegio
Profesional dictará su resolución definitiva, la cual tiene que ser motivada bajo pena de nulidad.
CAPÍTULO X
BENEFICIOS TRIBUTARIOS
Art. 48.- Los Colegios Profesionales gozarán de los mismos beneficios tributarios que las
Instituciones o Asociaciones sin fines de lucro.
Art. 49.- El Estado podrá dar asistencia económica a los Colegios Profesionales para el
cumplimiento de sus legítimos fines y objetivos.
CAPÍTULO XI
DISPOSICIONES FINALES
Art. 50.- La presente Ley es de orden público y obligatorio cumplimiento, no podrán celebrarse
convenios entre partes para eludir su cumplimiento, los derechos que en ella se establecen son
irrenunciables. Su aplicación es inmediata a partir de su vigencia, no requiriendo de
reglamentación para tal efecto.
Art. 51.- La presente Ley entrará en vigencia a partir de su publicación por cualquier medio de
comunicación social, sin perjuicio de su posterior publicación en La Gaceta, Diario Oficial.
El presente autógrafo de Ley contiene la Ley No. 588, “Ley General de Colegiación y del
Ejercicio Profesional”, aprobada el día veintisiete de junio del año dos mil seis y las
modificaciones del Veto Parcial presentado por el Presidente de la República en Secretaría de
la Asamblea Nacional, el veintiocho de julio del año dos mil seis, aprobado en la Continuación
de la Tercera Sesión Ordinaria de la XXIII Legislatura de la Asamblea Nacional, de conformidad
al Art. 143, parte infine de la Constitución Política de la República de Nicaragua, por lo que
hace al Art. 48, el cual se elimina y se corre la numeración.
Por tanto. Téngase como Ley de la República. Publíquese y Ejecútese. Managua, ocho de
enero del año dos mil ocho.- DANIEL ORTEGA SAAVEDRA, PRESIDENTE DE LA
REPÚBLICA DE NICARAGUA.