EMOCIONES
EMOCIONES
La docente lee el cuento “Monstruo triste, monstruo feliz”. La docente abre un espacio de
intercambio: ¿Qué pasa al monstruo cuando está de color…? ¿Por qué se siente así? ¿Qué
hace para sentirse mejor? En un afiche los niños registran mediante dibujos las emociones que
siente el monstruo y sus colores.
- La docente retoma las ideas del cuento “Monstruo triste, monstruo feliz” y les pregunta a los
niños: ¿cómo se sienten hoy? Realizar un juego para ordenar las emociones en recipientes: de
acuerdo a cómo se sienten, colocar una carita triste, enojada o contenta según responda
dentro recipiente del color que le corresponde. ¿Por qué estás contento/triste/enojado?
-La docente pregunta: ¿De qué color te sentís hoy? Volver a usar los recipientes de las
emociones.
- Jugar con el cubo de las emociones: Cada cara del cubo tiene una cara con diferentes
emociones: conversar sobre las diferentes caras, dar ejemplos de cuando están de esa manera
e imitar las mismas.
- Somos cuidadores emocionales: la docente les propone a los alumnos ser “cuidadores
emocionales de sus compañeros” a fin de estar atentos a aquel que necesite una ayuda
especial. Por ejemplo: estar atento si algún par necesita que lo ayude a atarse los cordones,
ponerse la campera o abrir el cierre de su mochila; si se lastimó y necesita que lo asistan; si
algún compañero está llorando porque no quieren jugar con él; si está solo en el patio; ayudar
a un compañero a encontrar una pertenencia perdida.
Al finalizar la jornada, se comparte en la Ronda de intercambio, si nos sentimos cuidados, en
qué oportunidades y le damos las gracias y un aplauso al cuidador emocional por su atención
especial. (esta actividad se repetirá a diario)
-Saludo inicial en la sala (para los últimos días del período de inicio): cuando los niños se
sientan en la ronda de inicio, un alumno por día, saluda al resto utilizando una manera
diferente. Por ejemplo: dándole la mano; dándole un abrazo (pensar en distintos tipos de
abrazos -de oso, de pájaro, de hormiga, etc.), “choque los 5” con las palmas.
-Juego del globo: sentados en ronda, la docente les propone a los niños pasar el globo,
previamente decorado con dibujos, de mano a mano lo más rápido que puedan. Después les
pide que lo pasen de mano a mano, pero lo más despacio que puedan y fijándose en las
características del globo, en los detalles que antes no pudieron ver: color, textura, dibujos. En
una tercera vuelta, los invita a pasar el globo y sonreír al compañero mirándolo a los ojos.
-La maestra les explica que para estar atentos es necesario entrenarnos y les propone
aprender a sentarnos y permanecer en la Postura de la mente atenta:
-La maestra presenta diez objetos cotidianos y da unos segundos para mirarlos todos. Los
cubre con una caja con una abertura y quita uno o dos objetos. Los destapa y pregunta: ¿Qué
falta?
- Sentados en ronda la maestra presenta un material que los niños deben ir pasándolo unos a
otros con mucho cuidado y atención, por ejemplo: Una campana que no debe sonar.
Luego, les pregunta si son capaces de estar tan quietos y silenciosos como una planta, como
una montaña o como una rana. Iniciar un temporizador (botella de la calma) y empezar el
juego escuchando música de relajación (música de cuencos). Les pregunta cómo se han
sentido, qué han escuchado.
-Organizar un rincón de las emociones entre todos: preparar botellas de la calma con la
colaboración de las familias, jugar con muñecos “abrazadores”, pintar mandalas…