Horno de Cerámica
Horno de Cerámica
Horno de Cerámica
Lo primero que se debe tener en cuenta antes de comenzar la construcción del horno, es la
ubicación que va a tener, con respecto a los vientos predominantes del lugar. Lo
conveniente es orientar la boca del horno en dirección al el viento predominante para que
esto ayude durante la cocción y no se convierta en un estorbo. En Bahía Blanca, por
ejemplo, los vientos predominantes son Norte – Sur.
De este modo, a la vez que se construye el horno, se está construyendo la chimenea por la
que circulan los gases de la horneada, por lo tanto nunca se debe cerrar completamente el
orificio, salvo una vez finalizada la misma.
Marcha de la horneada
Al ser un horno pequeño, la temperatura tiende a subir muy fácilmente, por lo que se debe
tener especial cuidado en que la subida no se realice bruscamente ya que podría rajar las
piezas.
La horneada se podría dividir en tres etapas de una hora, hora y media aproximadamente
cada una.
Medición de la temperatura
También se podrían utilizar pirómetros, pero no siempre nos ha dado buenos resultados,
ya que la temperatura que marca no representa la temperatura verdadera que hay dentro
del horno, ya que si se coloca en un lugar donde le da la llama
directa, esto modifica la medición de la temperatura y la hace
“infiel”, cosa que nos ha sucedido.
La leña que utilizo para hornear proviene de viejos pallets cortados en listones de 50 x 7 x1
cm. aproximadamente. Cuando deseo lograr una llama intensa, corto esos listones para
hacer una leña más fina, y cuando deseo una llama más moderada, utilizo los listones como
vienen. De esta manera, puedo controlar la temperatura, variando el tamaño de leña que
utilizo. Los cajones de verdura, generalmente son de madera fina de pino, por lo que se
debe tener cuidado ya que “prenden enseguida” y puede generar una llama muy brusca en
el comienzo de una horneada. Si se utiliza leña de poda, se debe dejar secar bien, caso
contrario generará mucho humo producto de la resina que contienen todavía en su interior.
Taller Chirimbolo – Anita Berón