Una Aproximación Al Mundo de La Historieta y Su Innegable Trasfonde Ideológico. Alberto Salazar PDF
Una Aproximación Al Mundo de La Historieta y Su Innegable Trasfonde Ideológico. Alberto Salazar PDF
Una Aproximación Al Mundo de La Historieta y Su Innegable Trasfonde Ideológico. Alberto Salazar PDF
htm
Contenido:
1.- La Historieta o "Comic" es una mezcla de dos artes.
2.- La historieta, otra forma más para divulgar mensajes y ganar dinero.
3.- El género se diversifica y trasnmuta
4.- El gobierno estadounidense advierte el potencial de influencia
5.- La convergencia de medios de comunicación es otra forma de sostener a la
historieta
6.- Los otros países responden lentamente con su propio estilo
7.- ¿Qué hacer entonces frente a la avalancha ideológia?
8.- Otra información en:
forma que este género integra imágenes y texto. Sea con globos o con rectángulos
llenos de caracteres, se mezclan la estética visual de un dibujo con un mensaje
escrito para narrar una historia. La pregunta obvia es ¿esa mezcla de expresiones
puede estar desprovista de significado?. Decir no sería negar la existencia misma del
género.
Luego, puede presentarse otra cuestión, ¿ese significado puede conllevar algún
trasfondo ideológico?. Resulta casi imposible expresar que el monólogo gráfico que
incorpora un mínimo necesario de párrafos y expresiones textuales, y que concibe un
artista o la industria de la historieta carezca de trasfondo cultural, que no tenga
significado alguno, de ideas. De nuevo, responder que ello es posible es negar la
existencia del mismo objeto
Muchos conocedores del tema fechan la época de inicio del "comic" -historietas,
tiras dibujadas, tebeos- en 1897, bajo el patrocinio del muy criticado magnate
periodístico William R. Hearts; aquel sombrío personaje, padre del periodismo
amarillista, que el genial Orson Welles magistralmente retrató en su célebre filme
"El ciudadano Kane". Para ese entonces, Hearts apuntó a que en su diario "New
York Journal" aparecieran periódicamente "The Katzenjammer Kids" que por estos
lares se conocieron como "El Capitán y los Cebollitas". La idea era reducir al lector
el esfuerzo de leer y proveerle de gráficas que facilitaran la comprensión de un
mensaje principalmente humorístico. Algo que ya se había experimentado
exitosamente con el género de la caricatura. Dicha forma de expresión había sido
ampliamente empleada por siglos para ridiculizar oponentes en la lucha por el poder
y divulgar ideas casi siempre de tinte político. "No hace falta leer, basta con mirar
una imagen con un mínimo de palabras para comprender bien cualquier problema"
es pues el componente filosófico que sostiene al para entonces naciente género. Así
pues se esperaba que el lector comprendería más sin realmente leer los mensajes ya
que los visualizaría, y lo haría con mayor facilidad; también quedaría más a gusto y
compraría más periódicos.
De ese modo, con experiencias como la caricatura y los dibujos publicitarios para
vender, fueron naciendo las primeras historietas, cuyo propio nombre ya disminuía
su importancia y lo rodea de un aura de inocencia y fábula. Ese mismo pensamiento
se mantiene con la traducción de "comic" a "comiquita", haciendo creer que si es
risible está desprovisto de ideología. Nada más falso; contrario a esa creencia la
sabiduría popular sostiene que se dicen muchas cosas serias a través de los chistes.
"La historieta de dibujos es, sin duda, un nuevo medio de expresión, consecuencia
de la rapidez de la lectura necesaria al hombre de hoy" sostiene el tomo 2 del
Diccionario Universal del Arte de Pierre Cabanne. Señal no despreciable de que es
un arte e importante. Cosa que muchos no creen por pensar, equivocadamente, que
está dirigida exclusivamente a niños. O tal vez que no existe una industria con
especialistas que elaboran y refinan el producto, llegando a veces a emplear
estrategias deliberadas para influenciar a sus lectores
También hay espacio para artistas de gran talento que se aventuran por sí solos. Si la
suerte y el gusto del público les favorece, pueden llegar a tener su propio espacio de
dibujos que cuenta la historieta en canales como HBO ("Spawn" de Todd
MacFarlane). Posteriormente Hollywood también le concedió su favor. Otros casos
más extraños son el de los artistas contraculturales. Robert Crumb con su particular
estilo de figuras rollizas y mujeres de glúteos y piernas enormes, vendió su trabajo
en la calle directamente al público para poder sobrevivir. De hecho era mal visto y
perseguido en los años sesenta, porque el gobierno estadounidense lo veía criticando
la lucha en Vietnam, defendiendo a los Hippies y el derecho a fumar Marihuana.
Hoy en día sus personajes como Mr. Natural, WhiteMan y el Gato Fritz, a quienes
dió vida, se consideran íconos del anticonformismo. Paradójicamente, cualquier
joven alienado puede llevar una franela con la figura de WhiteMan mientras que
Crumb se cansa de burlarse de quienes usan ropas con sus personajes mientras
desconocen los mensajes e ideas que los mismos proclaman.
En otros casos el éxito financiero proviene del importante rol de los coleccionistas
de historietas. Existe todo un mercado monetario sobre ejemplares pasados. Incluso
el mismo se mueve también gracias a la Internet, que acerca a compradores y
vendedores de todo el planeta. También acerca a los autores con sus lectores. Se da
paso así a la oportunidad para que un coleccionista les solicite y obtenga alguna obra
original y exclusiva de su propiedad. Y si el maestro se niega, no faltará otro artista
que esté dispuesto a copiar el estilo del primero para constituir el producto deseado.
Todo según lo permita su sólido bolsillo. Ya se han dado casos donde dibujantes son
amenazados por la industria debido al hecho de que ilustren o hagan historietas con
versiones que la corporación juzga viola sus derechos de propiedad de explotación
comercial. Zimmerman tiene cientos de dibujos de alto contenido sexual con la
mayoría de los personajes de historietas y dibujos animados que el mundo conoce.
Se le ha advertido que no siga mostrando la vida sexual e intimidades de esos
personajes que llegan a la mente infantil, pero se sospecha que el problema radica en
que el ilustrador está obteniendo buen dinero por mostrarle a muchos el lado que ha
estado oculto de esos personajes. Es decir, con su lápiz satisface las fantasías de
alguna gente dispuesta a pagar por su habilidad.
Los primeros grandes maestros del comic se nutrieron del arte tradicional y entre
ellos del cine. Harold Foster estudió pinturas completas de Michelangelo Buonarroti
antes de ilustrar "Tarzán de los Monos", obra del gran escritor Edgar Rice
Burroughs, que lamentablemente se desdibujó en su concepción de crítica social y
dió paso a la idea de un blanco superior que salva y guía a un continente de negros
primitivos. Alex Raymond y Milton Caniff copiaron las siluetas del cinematográfo
en blanco y negro en sus viñetas. Fijaron el lenguaje gráfico y la técnica del género.
Con el pasar del tiempo varios de sus personajes fueron llevados a las pantalla (Flash
Gordon imagen de la supremacía de los rubios ante Ming el desalmado, de claros
rasgos mongoles). El Agente Secreto X9 que espiaba para los EEUU). El maestro
Will Eisner estudió la literatura del género policial y vió muchos filmes de gangsters
para dar luz al "Spirit", luchador clandestino y fuera de la ley que combate la
delicuencia citadina bajo la vista gorda del jefe de policía Nolan, que curiosamente
es un autoretrato del mismo Eisner. La idea de trasfondo es que a veces el dominio
del crimen es de tal magnitud, que la sociedad requiere emplear a personajes que la
defiendan casi con los mismos métodos de los malvados. En otras palabras el bien y
el mal pueden llegar a ser casi lo mismo; esa misma justificación fué nuevamenter
empleada por los guionistas de los libros de Batman en los noventa para borrar la
imagen de homosexual que el héroe adquirió tras la proyección seguida de su exitosa
serie de los sesenta. La serie fue bastante fiel al personaje original de Bob Kane, que
nació a finales de los treinta. En un mundo post Watergate la cercanía con Robin
lucía sospechosa.
Pero el origen de justificar, sin no poca contradicción, las acciones reñidas con la ley
para defenderla, fue anteriormente expresado con "El Spirit", obra maestra que
mezclaba las aventuras, el romance y la justicia bajo el parecer del "american way of
life". A partir de entonces la referencia de Eissner se hace obligatoria de estudiar, su
obra es rica en creaciones, fabulosa por imaginación y técnica, y su estilo pictórico
propio revela un conocimiento profundo del lenguaje fílmico. Ese gran talento, que
en su tiempo original pasó desapercibido y fue solo hasta los ochenta que se le
reconoció su valor artístico. Casualmente coincidió con la llegada de Ronald Reagan
a la Casa Blanca en Washington. Para ese entonces se hizo una película de corto
presupuesto para la TV que pasó sin pena ni gloria.
Por otro lado, Supermán, Batman entre otros héroes del género norteamericano,
representan a seres excepcionales que sin explicación alguna deciden quién es bueno
y quién es malo. Combaten a los supuestos malos y los entregan a las autoridades
políticas, militares o las policiales del "establishment" para su seguro castigo.
Resultan pues harto conservadores del orden social y bajo el pretexto de que solo
ellos estan facultados para salvar al resto, se les provee de completa inmunidad para
ser jueces y ejecutores. Nadie se queja de que ellos sean parte en el juicio; lo de
Supermán con Luthor es ya un asunto personal. Y cualquier problema se sublima
bajo el pretexto de tener un malo tan malo que no existe nadie que dude en forma
alguna de que el sujeto realmente lo es. El arquetipo del favorecido con la imagen,
colabora sustancialmente en hacer ver el rol de cada quién. Así el bello es bueno de
por sí y el feo está condenado a ser malvado. Un código tan simple que cualquiera
puede entenderlo y no amerita pregunta alguna.
Luego, ¿para qué hacerles un juicio justo si ya todos saben que es malo?. Es que
Para quien vió la serie de TV original "Zorro" deberá recordar que el Capitán
Monasterio es defenestrado de su puesto solamente cuando ataca a los hacendados
de los Angeles. Cuando toca a la oligarquía. Allí se le dice hasta aquí te aguantamos.
Nuevamente la excusa es que Monasterio es un tirano que maltrata a todos y en
especial no se cansa de patear e insultar al inepto García. Con el éxito de la serie, el
personaje saltó a los libros de historietas donde habilidosamente Disney agregó otros
capítulos en los cuales Zorro luchaba contra Monasterio y se mantenía la misma
perspectiva. La serie y los comics fueron magistralmente elaborados y fuera de ese,
no poco importante trasfondo ideológico, ha sido el disfrute de generaciones
completas, entre los cuales me cuento.
Algo parecido sucede cuando se incluye el elemento del erotismo gráfico en las
viñetas. La imagen femenina puede resultar un disfrute visual y la revelación
absoluta de quién es la buena del cuento. ¿Quién va a dudar de que Marvila es
realmente la buena? La cadena televisora estadounidense se aseguró con la ex Miss
América Linda Carter de despejar cualquier duda cuando llevó al personaje a TV.
Los ratings crecían mientras la vestimenta de Linda se reducía. Entonces la idea
básica del dibujante es que uno quede embobado mirando lo que no tapa el cada vez
más diminuto traje de la Mujer Maravilla y no se le pregunte a ella quién la facultó
para lanzarle una soga que atrapa a cualquiera y de paso le obliga a decirle la verdad
de cualquier pregunta que ella haga. Mucho menos preguntarle porqué le partió la
mandíbula de un solo golpe al árabe o al negro que le respondió groseramente. Si
uno duda de sus buenas intenciones bastará con mirar las estrellas que tapan sus
caderas o el águila que le sirve de sostén. Se comprenderá entonces que ella defiende
los intereses estadounidenses, luego está garantizado que realmente combate a los
malos. Tan buenota y estadounidense... umm nada más hay que preguntar. También
resulta de provecho recordar que La Mujer Maravilla aparece en sus inicios
combatiendo a los nazis y que en su doble rol de personalidad secreta, trabaja con
los militares.
Todas esas obras han sido muy bien elaboradas, tan maravillosamente hechas que
casi nadie cuestiona su trasfondo ideológico. Grandes artistas como Kane, Kirby y
Falk fueron quienes concibieron y dieron vida, en forma magistral, a todos esos
personajes. Y el producto resultó de primera calidad. Tanto que el gobierno
norteamericano lo empleó deliberadamente para soportar la moral de sus soldados
de infantería durante la segunda guerra mundial. Para aquellos más rebeldes, que
veían un contraste significativo en su teatro de operaciones real y no terminaban de
aceptar la versión de la historieta -la que el gobierno pedía se divulgara con dibujos-
estaban las Pin-Ups.
"Hulk" -rechoncho- es un científico que trabaja para los militares de EEUU y cuyo
accidente lo coloca en contraposición con los mismos. Una relación de amor odio
con ese cuerpo militar. "Iron Man" es un exitoso rico que decide defender a su país,
obviamente EEUU, y se hace construir un traje especial con tecnología de avanzada.
Su principal archienemigo originalmente es "El Mandarín" de evidente estereotipo
chino. "Thor" el dios del trueno es una adaptación desfigurativa del personaje de la
mitología germánica. Y ahora resulta común que si usted le pregunta a un ciudadano
estadounidense por "Thor" pensará en el personaje de la historieta y desconocerá la
mitología real. ¿Quién dice que la historieta no puede llevar su mensaje a las masas
y trastocar otro previo ?
Todas esas obras nacen bajo el sello de "Marvel Comics" quien impone un nuevo
estilo en el dibujo, con mayor acción y que llega a su cúspide con los "X-men".
Historieta de gran éxito que ha terminado de proveer más ganancia a la corporación
con su saga de tres historias en el cine.
Incluso hay parodias gráficas y obras escritas en paralelo de ciertos super héroes que
se consiguen fácilmente en la red. Relatos de Batichica violada o versiones de "Jane"
-la compañera de tarzán- ilustrada por un artista ruso que copió a la perfección el
estilo de la heroína que dibujaron en Disney son ejemplos de este hecho.
Así pues, la convergencia de otros medios con mayores recursos audiovisuales para
representar figuras originales del papel periódico, permite aumentar su trasfondo
ideológico mientras que muchos adultos presumen de que si es para niños es que no
posee un mensaje filosófico inherente. Creencia absurda porque muchos de ellos han
sido receptores pasivos de ese tipo de mensajes y no poseen conciencia de ello. El
medio resulta entonces más poderoso de lo que parece. Transmite ideas y parece
para la mayoría no hacerlo de modo alguno.
sustituído por una heroína de curvas generosas. Así es como en lo sesenta aparecen
Barbarella -que Roger Vadim plasmó en el celuloide con una Jane Fonda que
entonces se iniciaba-, Valentina de Crepax, que revolucionó la estructura de viñetas
y páginas y, en los noventa la espectacular Druuna de Serpieri que ya tiene su juego
para PC. Druuna mezcla una excelente historia de ciencia ficción, un altísimo
contenido erótico y un grafismo que replica la realidad casi fotográficamente.
Mientras, en los EEUU, se había desarrollado un fenómeno parecido y casi paralelo
con "Wanda la Perversa" que publicaba Penthouse como un inserto en su revista
pornográfica y que satirizaba la política y cultura del momento.
Es así como artistas como Crepax, Moebius, Pratt, Azpiri, Altuna, Manara y otros,
que se cansaron de hacer obras para editoriales de segunda consiguen tiempo para
desarrollar sus propias historias. Trabajos en donde conforman desde el guión hasta
la obra final lista para reproducir. Se presentan pues, personajes como "Tin-tin",
"Giussepe Bergman", "Corto Maltés" y obras como "El Click", "El perfume de lo
invisible", "Necrón", "Ficcionario", etc. "Totem" y "Metal Hurlant" son ejemplos de
publicaciones que lograron obtener una no despreciable reputación y periodicidad
seria. "Kizz Comics" de un corte pornográfico ha sobrevivido todavía.
En américa latina la respuesta también fue de caracter propio. Una primera etapa de
la tira diaria fue de un predominio humorístico. Grandes artistas sureños concibieron
personajes como "Avivato", "Ramona", etcétera. Y algunos que lograron escaparse
fueron Quino con su célebre "Mafalda" y Fontanarrosa. En los noventa publicaciones
como "Fierro" dieron paso a otra generación de dibujantes. Breccia y otros más
lograron ser conocidos fuera de su tierra. Colombia y la Editorial Cinco intentó
explorar su propio camino a la vez que reproducía los clásicos de los héroes de la
Marvel. Es así como aparecieron "Kalimán el hombre icreíble", "Tamakún" y
muchos otros héroes que aunque de fisonomía aria llevaban prendas de vestir
hindúes y nombres foráneos.
En los últimos años una industria poderosa en México ha dado paso a una serie de
publicaciones para adultos con una variedad de temas que van desde el Oeste, hasta
el Erotismo subido de tono, pasando por las historias cómicas. "Las Chambeadoras",
"Bellas de Noche", etc. son ejemplos del esteriotipo de hembrón humilde que por
gracia o desgracia debe apelar a su feminidad para progresar en la vida. Y no pocas
veces la mala suerte la acompaña. Las obras son de un mensaje muy cuestionable,
pero algunas facturas del dibujo y coloreados resultan de altísima calidad.
En los sesenta surgen esfuerzos loables con la revista tricolor "Kari" -un indígena
que defendía el bien en el amazonas-, "El Sute José La Cruz" -llanero que no
Más tarde Jorge Blanco crea un grupo de seguidores con su célebre "Naúfrago" que
poseía un estilo propio que le hacía inconfundible. Jesús Torrealba combina
erotismo y humor para difundir "La Yuleisy" en la Internet, lugar en que pueden
aparecer personajes de heroínas que se desnudan con facilidad, "Andrea Sade" es
otra de sus invenciones que pasó del folletín "La Guacharaca" a la red. En Internet se
puede leer las aventuras de alto contenido sexual de "Carmen Futura", producto del
artista Seneco. "El Ranchito", "El Patriota" y "Victoria sin sostén" son obras del
fructífero Omar Cruz que salta de la ilustración a la historieta según se requiera.
"Venezuela en Comics" es una reciente iniciativa de publicación que ha retomado el
banderín de otros intentos que cayeron en el olvido como "Click". Tampoco se puede
dejar de mencionar que en Octubre del 2004 el Museo de Bellas Artes de Caracas
presentó entre sus exposiciones una llamada -Sala Triple X- en la cual varios
dibujantes de historietas eróticas o pornográficas pudieron divulgar parte de su obra.
Caso aparte es la industria japonesa. Su triunfo ha sido tal que un sub-género fue
acuñado "manga". Así por ejemplo una familia o un artista único produce cientos de
páginas de un personaje que se venden a bajo costo en una edición rústica con
muchos otros personajes. Si alcanza un éxito suficiente, salta a su propia publicación
y si sigue la ganancia de reales, a una serie de dibujos animados en TV conocida
como "animé". "Astro Boy" -Tesuwan Atom en su idioma original-, "Mazinger Z",
"Los Caballeros del Zodíaco" son ejemplos de esto. En la red se consiguen grupos de
seguidores que discuten sobre cualquier detalle de lo que sucede con ellos. El
dominio parece amanezar a la industria estadounidense y ya no pocas voces en los
EEUU se han alzado para prevenir sobre la "invasión asiática ideológica" con
sustancial apoyo de su estable industria de dibujos animados para TV.
Tampoco se puede olvidar a algunos estudiosos que opinan que en cierto modo se
está construyendo algo parecido a una mitología moderna. Supermán, Batman y El
Hombre Araña se nutren de los comentarios y críticas que millones de seguidores
escriben en la Internet sobre su evolución diaria. Cualquier libro o película es de
inmediato revisada y contrastada por fanáticos que tratan de conseguir coherencia o
contradicciones con cualquier aventura del pasado. Y muchos ciudadanos saben
reconocerles pero no a Jimmy Carter o J. F. Kennedy. Para el resto del globo hay
tristes ejemplos de países en donde el Hombre de Acero es más conocido que su
prócer de independencia.
La solución no puede ser aplicar censura. Eso sería como vetar alguna obra literaria
y la historia ha desmostrado que lo más seguro es que eso resulte muy
contraproducente. La gente insistirá en leerla. Por el contrario se debe permitir la
divulgación pero acompañar esa distribución del material con una educación que
convierta al espectador pasivo de la historieta en un ser consciente de que existen
intereses detrás de la obra, y lo más importante, en un ser con juicio crítico frente al
contenido del mensaje transmitido. Que sepan también que cada vez que compran un
ejemplar de Supermán, El capitán América, La Mujer Maravilla y otros más, parte
de su dinero está dirigido a mantener la tropas estadounidenses invadiendo a Iraq -en
la portada misma se expresa eso-.