ccunia AGOSTINIANA CARTA A LOS HERMANOS, HERMANAS ¥ LAICOS AGUSTINOS (Queridos hermanos y hermanas,fateiades y grupos agustinos de lics; Vivimos tempos difcles, Las noticias que nos legen cada di ablan de enfermedad y muerte, Parece como sila ascuridad,el dolor y la tristeza, se hubieran apoderado de nuestro mundo. Y Ja belleza dela creacién pereciese frente al drama del mal, ‘Ante esta compleja realidad quiero recordar nuestro seguimiento de Jess, auestto ser discipulas. Y me pregunto si estamos también en la noche del silencio del diseipulo (ef Jn 18,25-27), loqueades ante los acontecimientos que parecensuperarnosysin aber hacia dnd ir frente a las situaciones dolorosas que nos agobian. (Nos encontramos también nosotros paralizados? {Vivimos enmudecidos ante una realidad que se nos impone? Por eso quiero ‘agradecer a tantos hermanos y hermanas, laios yreligioss, que ante Ia oscuridad provocada por la muerte y la enfermedad del Covid 19, son luz de esperanza y semilla de Resurescén, Gracias por vuestrotestimonio; por ser vozy presencia de Dios. Permitdme algunas reflexiones sobre este momento, sobre nuestro hoy, la hz de la Pascua. Mientras dure el hoy [EI Covid 19 nos ha hecho ver més de ceea nuestra fagilidad y Mnitud. Muchas personas han falleido inesperadamente: familiares, amigos, ancianos, jvenes... la muerte no distingue ni ‘quiere entender de edades, riquezas, clases... Esto nos hace considerar la importancia det tiempo que se nos ha dado y en el que vivimos: tan leno de pesbilidades pero ala ver, tn Timitado, tan fugaz. La experiencia de este tiempo, regalo maravilloso de Dios, nos ensefia que lo nico que tenemos seguro en nuesras manos ese hoy. Igualmente aprendemos que los dias de nuestra vida estin contados (Sal 39,4), aunque no conazeamas el dia y la hora de nuestro trnsito. Vivimos en el espacio y en el tempo, sin adverts que ambos expeesan Ia fagilidad de a condicén humana. Y quisiamos huir de ella, ‘negarla, Peto es imposible. Ser conscentes del imitacién y fntud de la propia via no suele resulta trea fil, porque se requiere mucha humildad para entrar en nosotros mismo y tomar ‘conciencia de ello. Creo que debidramos tenela muy presente, para aprovechar mejor el empo ‘que se nos ha dado; aprovechar, de verdad, la vida, tan fugaz hoy como airs Eloy esl tiempo de Dios, airs, tempo de gracia especial Somos peregrnos hacia la Patria verdadera (ef. San Agustin, Sermén 346B).¥ hacia ella avanzamos enel amor. Pusimos nuestra ‘usin en el hacer y shora, parade Ia actividad, podemos preguntaros: (tenia sentido? El sentido lo encontramos siempre en ota realidad superior el amor. No se trade volearnos al actvisme, en ocasiones triste reflejo dele vanidad y la soberbia, sino de evangelizar, de ser presencia de Cristo en el mundo, abrindonos de modo concreto a la misericorda y laccompasion. Se trata, sobre todo, de testimoniar el amoral prejimo, al cercano que nos interpela, “porque sino amamos a los hermanos a quienes vemos zeémo vamos a amar Dios a quien no vemos?" (1 Jn 4,20), \Viviren el amor, es goat ya dela Bteridad de Dios. Este es el gran regalo de la Resureccion 4e Jess Por eso Pablo nos invita a vivir en Ia luz y en ls obras del Espirit (ef. 5,8; Rom 8.9), porgue el tiempo de las tnielas y dela oscuridd ha terminado (ef. Rom 13,12) ste es tiempo del Amor y, portant, el tiempo dela Vid, ET hoy como vispera NNo salgamos del hoy, no vivamos fuera del ahora, Pero en camino hacia Dios, siempre conscientes de que somos civdadanos del Cielo (Fil 320), Dice el Papa Francisco: “El Sefor os llama 8 alzarnos, a levantarnos de nuevo con su Palabra, « miar hacia arba ya creer que ‘estamos hechos para e! Ciel, no para la tera; para las atures dela vide, no para las bajezas 4e la muerte: por qué busedis entre los muertos al que vive?” (Homilia en le Viglia Pascual, 20 de abril de 2019). EI hoy, aunque debamosvivilo en la cruz, es la antesalade la gloria junio ‘Dios, ¥ esto nos abe a la esperanza, jh Dios y Sefior nuestro! Esperemes al abrigo de tus alas y rotégenosy lévanos. Porque nuestra frmeza, cuando eres ti entonces es frmeza; mas cuando es nuestra, entonces es deblidad, Nuestro bien vive siempre contign” (San Agustin, Confesiones 4.1631) [La Pascua: un hoy sn fin ‘Cantamos en la Vigilia pascual: “Este es el dia que ha hecho el Ser, sea nesta alegsia y ‘nuestro goz0".;Qué dan de amor! En la Pascua vivimos la Resureccin dl Hijo de Dios. En 41 la muerte ha sido vencia y In Vida en Dios rena paa siempre, Todos nosotros tenemos fe cen la Resureceién y subemos que, en Cristo Resuetado, también nosotrs somos etemos Esperamos el di sn ocaso y Ia exstencia renovada (ef. Ap 21, 1-). Mientras, caminamos por la vide en esperanza, sabiendo que Jess Resuitado nos ha precedio en el camino, Si hemos ‘muerto con también resuetaremos como él (Rom 6,8). Po so, la muerte ahora es diferente, ha sido tansformada, Ya no se resuolve en la nada y el silencio, sno que se abre a la infnita aleria ya Ia etenidad en ef Amor. También en estos tempos difcles. Queridos hermanos y hermanas:Feliz Pascua de Resureccién! En unidad de almas y Dado en Roma, en la Curia General de ta Orden 9 de abril de 2020, Jueves Santo DCCLXIV aniversario de la Gran Unién de ia Orden i ge Mom bw feel foe os 4 Alejandro Moral Artin Prior General OSA Prox 6220 S SNe