Analizis The True Cost

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Análisis de caso “The True Cost”

Autor

Daniela Posada

Docente

Universidad XXXXXX
Facultad XXXXXXX
Ciudad XXXXX
2020
Análisis de caso “The True Cost”

The True Cost o el verdadero valor de la moda, es un documental del 2015 realizado por
Andrew Morgan, donde muestra la realidad que está viviendo el mundo en el día de hoy, da
cuenta de cómo la denominada “moda rápida” o “fast fashion” es producto de desgracias, de
malos tratos, de injusticias sociales, y en donde el hecho de vender productos a bajo costo y de
buena calidad está sacrificando la vida de las persona, tal como el evento ocurrido en una fábrica
de Bangladés, dando cuenta de la voz de los actores, de los implicados y de cómo en Bangladés y
otros países esta forma de consumismo está dañando el planeta y explotando a las personas.

Sin duda alguna el documental plantea una crítica al sistema capitalista que se está viviendo
en el siglo XXI y las formas de consumo, pues es una realidad de que el mundo está cambiando y
es necesario también que cambien algunas políticas de cómo se produce este capitalismo, cómo
las fabricas producen la ropa, los pagos de salarios y de cómo mejorar el medio ambiente, no
obstante son puntos que las grandes compañías textiles no tienen en cuenta, pues lo que es
relevante para ellos es la acumulación de dinero y poder.

Este trabajo cinematográfico permite ver una realidad imparable, de la desidia de países como
Bangladés, la India, Vietnam, de cómo el capitalismo está dañando la naturaleza, de la necesidad
del poder, de una manipulación de las masas, de la economía de los países y de cómo es
necesario que las personas sean más sensatas y menos egoístas. En imágenes de Black Friday es
impresionante como las personas prácticamente quieren acabar con las tiendas pero a su vez
desde la otra cara de la moneda deja en evidencia el sufrimiento de las personas en las fábricas
que hacen estos productos. Andrew Morgan permite dar cuenta de dos posturas, dos
perspectivas, por un lado está el consumidor y por el otro la realidad de quien lo produce, pero,
un aspecto realmente clave que da cuenta en el documental es que marcas como H&M, Zara,
Forever 21, ninguno de sus ejecutivos da la cara y expone sus opiniones al respecto, con ello es
posible preguntarse cuáles son nuestros hábitos de consumo y cómo podemos tomar consciencia
para mejorarlos.

Teniendo claro lo anterior, es posible manifestar que las grandes compañías textiles obran
para su propio interés, pero tal y como dice Thomas Hobbes también debe haber un obrar para
ayudar a los demás, pero este en el fondo es acerca del beneficio propio y de los intereses que
obtienen. Por tanto, en el documental, estas compañías están siendo egoístas con sus
trabajadores, que quienes son en ultimas los que permiten la comercialización y venta de estos
productos, es decir, realizan el producto final de las empresas y supuestamente están generando
empleos, pero a costa de que: de la muerte, de no respetar los derechos humanos, de dañar al
medio ambiente y en donde supuestamente están vendiendo prendas de bajo costo pero ello lo
consiguen con la explotación de trabajadores, sin brindarles las condiciones óptimas de trabajo y
sin un salario digno acorde con los derechos humanos internacionales.

Igualmente, según lo expuesto por Hobbes tampoco se trata de preocuparse más por el otro
que por sí mismo, pero tampoco se pretende que las acciones de interés propio le afecten a las
demás personas, es decir, la búsqueda está en encontrar un equilibrio entre las partes, para que
así este egoísmo moral no sobrepase en lo negativo, sino que desde un pensamiento propio
acerca de los intereses individuales se influye de forma positiva en un pensamiento colectivo,
que quiere decir esto, que las empresas textiles se beneficien pero que también piensen en el ser
humano, como un ser que piensa, siente, actúa, y que necesita buenas condiciones para trabajar,
pero, sin dejar de lado el medio ambiente, es decir, como lo explicaba la CEO de People Tree
que lo que busca es hacer capitalismo de forma diferente, inteligentemente pensando en el
recurso humano pero también en el ambiental.

Por otra parte desde los postulados del principio de la máxima felicidad, es decir, el
utilitarismo, según Michael Sandel da cuenta de la necesidad de maximizar la felicidad a través
del incremento del placer en relación con el dolor, acorde con el documental se puede identificar
esta postura utilitarista desde el punto de vista en cuanto a que entre mayor sea el dolor de
quienes fabrican estas prendas de vestir mayor será la felicidad de quienes las compran, o en
otras palabras: cuanto menos se pague por mano de obra menos se paga por el producto.

Ahora bien, desde una postura menos fuerte, es posible mencionar que al aumentar la
felicidad o el placer se previene el dolor, pero para el caso específico, como tal no hay un
aumento en la felicidad de los consumidores y mucho menos de la mano de obra, pues se puede
decir que hay un imaginario en los consumidores acerca de que ese producto los hará más
felices, pero en contraposición de lo que realmente sucede es que las empresas y países como
Estados Unidos lo que buscan es ser potencias mundiales económicas a través del consumo
excesivo, lo que con lleva ello es a tener personas más infelices, se le vende una falsa felicidad a
través de la ropa.

De acuerdo con Sandel, una de las debilidades del utilitarismo es el no respeto de los derechos
individuales, ya que únicamente se preocupa por la suma de las satisfacciones y esto puede
someter a los individuos, es decir, que en otras palabras esto puede tolerar que algunas personas
infrinjan las normas fundamentales en relación con la decencia y el respeto, por lo tanto siempre
y cuando las acciones con lleven a la felicidad no hay manera moralmente de que sean juzgadas.
No obstante, analizando el caso de la moda rápida, si bien es cierto el estar vestido a la moda,
ponerse lo que se quiere pero adicional a ello a un costo muy económico y de buena calidad, es
realmente lo que la felicidad significa, es en este punto donde es posible preguntarse ¿Qué es la
felicidad? es comprar una prenda de vestir la felicidad para algunas personas, donde está el vivir
tranquilamente, tener un hogar, condiciones sociales dignas, salud, educación, sin embargo, más
bien hay un conformismo por parte de los clientes y es allí donde es necesario replantear no el
sistema capitalistas sino la forma en la que consumen las personas.

La dignidad humana, es un derecho humano a nivel internacional, independientemente del


utilitarismo, hay un fundamento y es el de la vida digna, y esto también implica respetar y
valorar a los demás, implica que no depende ni de las necesidades ni de los deseos, que si bien es
cierto la felicidad es importante también es cierto que no hay que pasar sobre los demás para
obtenerla. Desde Sandel, es pertinente darse cuenta como el utilitarismo es conveniente para la
libertad de mercados, ya que defiende la libertad individual como un conductor a la felicidad
humana, pero también es una opción a la regulación estatal, que se evidenciado sin duda alguna
en aquello que viven muchas personas trabajadoras de fábricas textiles en diferentes países, pues
no hay un respeto de los derechos individuales de acuerdo con las objeciones al utilitarismo.

Al hacer parte del utilitarismo, significa ser miembro de una minoría oprimida, ya que el
utilitarismo es para el beneficio propio e individual, ligándose al egoísmo moral desde la
búsqueda de los intereses propios y en donde se hacen a partir de la libertad de expresión,
conduciendo a que las personas se consideren con el derecho de conservar toda la riqueza
acumulada; vista desde un marco socioeconómico en el cual los que ganan con ello son quienes
acumulan, pero que sucede con aquellas personas que son las que le permiten acumular estas
riquezas, pues para lograrlo no lo hacen de manera individual, necesitan de un trabajo en equipo
para ello y en este caso se evidencia con el trabajo que hacen los operarios en las fábricas para
que el dueño de una franquicia como H&M, Zara, entre otras marcas, puedan escalar y obtener
ganancias económicas acumulando su dinero en riquezas y beneficios individuales.

La acumulación de riquezas es justificada desde el punto de vista del egoísmo moral, pues las
personas están pensando de manera individual pero a su vez también son altruistas y piensan en
los demás, a través de la generación de empleos, responsabilidad social corporativa, ofreciendo
productos económicos y así le aportan al desarrollo del sistema capitalista, no obstante lo que
muestra The True Cost es una realidad pobre, consumista, obsesiva, desigual, inequitativa,
injusta, en donde desde lo moral se puede criticar y cuestionar. Sin embargo, la parte legal es
justificada por los países involucrados, pues a nivel legal y normativo no hay mucho que se
pueda hacer, pues aparentemente estas grandes empresas cumplen con la documentación para
ello, pero a nivel moral se puede decir que es cuestionable y necesario de investigar.

Ahora bien, de acuerdo con el recorrido que se ha hecho anteriormente se puede decir que,
desde la ética de cuidado, lo cual hace referencia al bienestar de los demás y a que hayan
derechos de bienestar para los que son excluidos (Cortez, s.f.r; Hamington y Sander, 2011) pero
está sucediendo esto realmente de acuerdo con el documental, se están preocupando las empresas
por el bienestar de sus empleados, quizás esto sucede por aquello que están en las tiendas y son
los que dan la cara al cliente, pero que pasa con aquellos que trabajan diariamente fabricando las
prendas de vestir y lo que reciben por este trabajo es $2 dólares por la hora y que según lo que se
vio en el video, muchos empleados de estas fábricas han protestado por un pago mejor,
condiciones dignas y lo que han obtenido son muertes, violencia, guerra con la policía de este
país, es decir, la fabricas son avaladas por el gobierno nacional.

Es preciso entonces tratar de comprender acerca de lo que están haciendo las entidades
internacionales de derechos humanos por mitigar esta problemática, donde se evidencia que no
hay una responsabilidad por el cuidado desde una postura ética, legal y justa por parte de estos
entes de control, y mucho menos hay una regulación que exija las condiciones de trabajo que
estos merecen, pues con ello lo que interesa es las ganancias económicas y convertirse en
potencias mundiales a través de la moda rápida. Por lo que, hay una falta de cuidado, pues no
hay una protección, bienestar o mantenimiento de las personas, sino de la economía, por lo que
analizando el caso y relacionándolo con lo expuesto por Cortes (s.f.r) este afirma que:
El cuidado debe ser visto como una práctica democrática y la ciudadanía democrática
debería garantizar a todas las personas un acceso igual al dar y al recibir cuidado,
debemos re-enfocar las normas de igualdad y el acceso a las prestaciones públicas, de tal
forma que cumplan los estándares básicos de la justicia social (p. 11).

Se logra comprender que no hay una justicia social para las personas que trabajan en estas
fábricas, tampoco hay una ética de cuidado para el medio ambiente y no hay una igualdad de las
normas, en este caso lo que se pide es que haya un cumplimiento de los derechos humanos,
incluyendo los laborales, sociales, económicos y a su vez ambientales, ya que gracias a los
desechos de las fábricas, los pesticidas en los cultivos de algodón, las basuras en los ríos (como
el caso de Kanpur en la India, en el rio Ganges, uno de los más importantes de esta ciudad y en
donde terminan todos los desechos de las fabricas) que se encuentran alrededor de comunidades
en donde las personas están sufriendo de enfermedades a causa de ello, no obstante esto no ha
sido reconocido por ningún ente de control y tampoco por las empresas.

Es posible cuestionarse y ante todo analizar desde una postura neutral acerca de la ética de
cuidado en esta situación que afecta no solo a Bangladés, la India, Hong Kong, Vietnam, o los
países donde estas fábricas tienen presencia, sino que es una problemática de todos, pues
aumenta el calentamiento global, hay una acumulación de riquezas para unos pocos, mayor
desigualdad social, la población media tendrá para comprar vestidos económicos pero no para
satisfacer las necesidades básicas como la salud, educación, ya que son costosos y lo que se hace
con la moda rápida es hacerle creer al cliente que está en un buen nivel social por consumir y
estar a la moda.

En resumen, desde una mirada del egoísmo moral no se trata de que las empresas dejen de
existir, sino de que haya un cambio de mentalidad en la forma en la que se fabrica y por tanto
buscar un consumo inteligente, por otra lado desde el utilitarismo lo ideal es que todos
individualmente sean felices sin perjudicar a los demás, no obstante con relación a la moda
rápida esta libertad lo que hace es que las personas piensen en sí mismas sin darse cuenta de los
perjuicios que están ocasionando y con relación a la ética de cuidado, es necesario cuestionarse si
las empresas o los gobiernos de los países están cuidado y protegiendo los derechos que
legalmente tienen los trabajadores en estas fábricas
En conclusión, The True Cost, permite observar la otra cara de la moneda y realizar un
análisis desde unas posturas filosóficas de la moral como fundamento para criticar y cuestionar
los acontecimientos recientes de la humanidad y de la forma en la que se está llevando a cabo el
capitalismo ya que está perjudicando al recurso humano y ambiental, principio básico en el
mundo que se debe proteger, ya que es un sustento vital de la humanidad. En cierta medida, la
película permite cuestionarse acerca de las formas de consumo propio y de cómo moralmente se
puede reflexionar acerca de la necesidad de tener, de estar a la vanguardia y de las formas de
acumulación que hay hoy en día en los diferentes países y de las empresas más influyentes en la
sociedad.
Referencias

Cortes, S. (s.f.r). El cuidado como objetivo político-social, una nueva mirada desde la ética del
cuidado. Los actores de las políticas sociales en contextos de transformación. III congreso
anual de la REPS.

Hamington, M y Sander-Staudt, M. (eds.). (2011). Applying care ethics to business. New York:
Springer.

Hobbes, T. (1980).  Leviathan. (2da Ed). Madrid: Editorial Nacional.

Sandel, M. (2011). Justicia: ¿Hacemos lo que debemos? Debate.

Egoísmo moral

Utilitarismo

Ética del cuidado

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