Amor Sin StellaManaut PDF
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representación, tanto por compañías profesionales o de aficionados, sin haber solicitado autorización previa a la SOCIEDAD
GENERAL DE AUTORES DE ESPAÑA, a través del siguiente link:
http://www.sgae.es/clientes/escoge-tu-licencia/teatro-y-danza/representacion-de-obras-de-teatro-en-el-extranjero-excepto-italia-
y-america-del-sur-salvo-brasil/
Una vez dentro, el solicitante deberá elegir si se trata de una petición aficionada o profesional.
En caso de tener algún problema pueden ponerse directamente en contacto con la SGAE MADRID, a través del siguiente
correo: [email protected] o bien con Don Manuel Maciá tfno. 34.913499579. También pueden contactar con la autora en el
siguiente correo: [email protected] o el tfno. 34.685662830.
Todos los textos teatrales de Stella Manaut están protegidos, asimismo, por el Registro de la Propiedad Intelectual de Madrid.
El infringir cualquiera de los aspectos arriba mencionados puede ser constitutivo de delito contra la Propiedad Intelectual
(artículos 270 y siguientes del Código Penal español)
STELLA MANAUT
Duración: 30 m
Personajes
Una mujer y un hombre, ambos de mediana edad.
Decorado
El escenario se dividirá en dos. A la derecha, la casa de Carmen: salón-comedor con muebles discretos.
Todo ordenado y coqueto. Muy femenino. A la izquierda, la casa de Manolo: muebles más sobrios, todo en
un orden relativo, aunque sin detalles: la casa de un hombre más o menos organizado.
Vestuario
Ella : moderna, sexi: blusa de seda, traje de chaqueta; la falda, bastante corta y ajustada. Escena I: falda y
blusa. Escena II: se pondrá la chaqueta.
Él: discreto, juvenil. Escena I: pantalón y camisa modernos, jersey de pico. Escena II: pantalón, otra camisa,
corbata y chaqueta. Delantal gracioso (por ejemplo, con volantes).
Elementos
Casa de Carmen: mesa camilla, bonito mantel, bonita vajilla, candelabros, �lores en un jarrón sobre la
mesa. Asado. Casa de Manolo: mesa comedor, mantel normal, cubiertos y vajilla normales. Ramo de rosas
rojas. Pollo chamuscado. Estuche con anillo de brillantes (de mentirijillas, claro)
ESCENA I
Casa de Carmen. Ésta está poniendo la mesa para dos, muy coqueta, con un bonito mantel, candelabro con
velas; todo armónico y delicado. Termina de colocar las cosas; observa el resultado dando la vuelta a la
mesa y, en ese momento, llaman a la puerta. Abre. Entra Manolo.
CARMEN
Buenas noches, Manolo
Le besa en la mejilla
MANOLO
Buenas noches, Carmen. ¿Puedo pasar?
CARMEN
Naturalmente. Estás en tu casa...
MANOLO
¿Entonces...?
CARMEN
Es sólo una fórmula de cortesía, claro está.
Pasa, cierra la puerta. Él le entrega el ramo de rosas rojas que esconde detrás.
CARMEN
¿Rosas rojas? En el idioma de las flores, significa "pasión"
Coloca las flores en un jarrón
MANOLO
No lo sabía, pero me gusta el significado. ¿Y los niños?
CARMEN
Con mis padres, como acordamos. No les he dicho nada... Bueno... sí... que tenía que salir de
viaje por un asunto de trabajo.
MANOLO
Me encanta. ¡Les estamos engañando!
CARMEN
Es excitante.
MANOLO
Acercándose a Ella y tomándola por los hombros
Sí... terriblemente excitante (Intenta abrazarla)
¡Tan excitante como tú!
CARMEN
Separándole
¡No te lances, Manolo, que es nuestra primera cita en privado!
MANOLO
Tienes razón... Me reprimiré... de momento.
Apartándose de ella, pero sin soltarle las manos
¿Sabes que estás guapísima? Hace mucho tiempo que no te veía así: rejuvenecida,
espléndida. Te has cortado el pelo, te has cambiado el color... La verdad es que la separación
te ha sentado de maravilla...
CARMEN
Tú tampoco estás nada mal. Más delgado... Se te ha quitado la tripilla de casado aburrido que
tanto te afeaba.
MANOLO
... Voy al gimnasio dos veces por semana...
CARMEN
Yo también.
MANOLO
¿Qué nos está ocurriendo, Carmen?
CARMEN
Que, de nuevo, somos solteros y libres; que nos queremos más a nosotros mismos....
MANOLO
... que deseamos gustarnos el uno al otro...
Se acerca para besarla. Carmen cambia de conversación y se aleja
CARMEN
... Creo que el asado ya estará listo. Siéntate. Enseguida vengo.
MANOLO
¿Quieres que te ayude?
CARMEN
No. Ahora no.
MANOLO
Hablando fuerte, en plan "autosuficiencia”. Ella ya no está en escena
¡Por lo menos... me dejarás fregar los platos...!
CARMEN (En off)
Podrás ayudarme a aclararlos, si quieres. Hoy me toca a mí. Cuando tú me invites, me dejaré
servir.
MANOLO
Será un placer
Mientras vuelve Carmen, Manolo da vueltas por la habitación, mirando los objetos. En un momento
determinado pasa el dedo por encima de un mueble, haciendo un gesto de complacencia al verlo tan
limpio. Vuelve Carmen con el asado.
CARMEN
Siéntate, por favor.
MANOLO
Frente a ti... Pero, deja que ponga a un lado la vela... Así podré mirarte a los ojos.
Aparta la vela, toma el sacacorchos y abre la botella de vino. Primero se sirve él un poco. Lo mueve, lo
huele, lo prueba; luego le llena a ella la copa y termina de llenar la suya.
MANOLO
Exquisito. Un buen Rioja, sí señor. Ahora, brindemos... ¡Por nosotros!
CARMEN
¡Por nosotros….y los niños…! No olvides que existen.
MANUEL
¿A mí me lo vas a decir, que los aguanto cada día?
CARMEN
Por cierto, he pensado que quizá sería mejor que nos los repartiéramos más equitativamente.
MANUEL
¿Y tu abogada?
CARMEN
Hará lo que yo le diga. Creo que ahora que nuestra relación ha cambiado sustancialmente,
que te comportas de forma mucho más civilizada, que podemos hablar de tú a tú, sería mejor
que los chicos pasaran un mes contigo y otro conmigo. Me parece más justo.
MANOLO
¿Y los fines de semana?
CARMEN
Haremos como hasta ahora. Un fin de semana tú; otro fin de semana, yo.
MANOLO
Perdona Carmen... Espero que no te ofendas... pero ¿no podríamos salir todos?
CARMEN
¿Quieres decir los cuatro juntos?
MANOLO
Eso es... Iríamos a comer por ahí; les llevaríamos al cine...
CARMEN
¿Por qué no...? Pero no como sistema.
MANOLO
La custodia compartida será un alivio para mí. No sé cómo has podido hacerlo todo tú sola
durante tanto tiempo. Pero... ¿y ellos? ¿Cómo se lo tomarán?
CARMEN
Partiendo de la base de que, en una relación que se rompe, los niños son los más indefensos,
los que peor lo pasan, no creo que les trastorne demasiado. Al fin y al cabo están
acostumbrados a tener dos casas y, por suerte, una muy cerca de la otra.
MANOLO
Han madurado mucho. La verdad es que se portan bastante mejor.
CARMEN
Todos hemos madurado. Hemos aprendido. Nos hemos enfrentado con la vida real.... Sobre
todo tú.
MANOLO
De eso no tengas la menor duda. La soledad me ha hecho comprender muchas cosas; analizar
situaciones que antes jamás me las hubiera planteado.
CARMEN
Y has aprendido algo muy importante.
MANOLO
Cortándola y tomando sus manos.
Que me gustas cada día más...
CARMEN
No iban por ahí los tiros, aunque, bien mirado, también tiene algo que ver con lo que iba a
decirte. En efecto, te gusto cada día más porque has vuelto a darte cuenta de que existo, de
que soy una mujer.
MANOLO
Siempre lo he sabido...
CARMEN
Me mirabas, pero no me veías. Yo formaba parte del paisaje doméstico. Me había convertido
casi en un mueble.
MANOLO
Tienes razón... ¿Y qué otra cosa he aprendido?
CARMEN
Algo muy importante. Has aprendido a ser autónomo. Ahora no me necesitas.
MANOLO Cortándola
Sí te necesito
CARMEN
No me necesitas desde el punto de vista material. Quiero decir que ahora eres capaz de
solucionar los problemas por ti mismo. Has aprendido a manejar una casa, a organizarte. El
cambio ha sido increíble. En un año no pareces el mismo.
MANOLO
Al principio todo fue un desastre. No podía soportar la soledad, ni a los niños, ni el tener que
pensar en darles algo de comer o el simple hecho de lavarles la ropa. Bueno... ¿qué te voy a
contar que no sepas...? Luego, poco a poco, y recordando lo que tú hacías, he ido aprendiendo
a controlar mi tiempo libre, a organizar cada minuto de mi vida. Ahora ya no les compro
pizzas, ni porquerías de esas. Yo mismo les preparo una cena sencilla, pero sana. Sé cómo
funciona la lavadora, cómo se pasa la aspiradora, e, incluso, he aprendido a planchar. Me ha
costado lo mío, pero ya soy todo un experto.
CARMEN
Alargando la mano para tocar el cuello de su camisa
Desde luego esta camisa está muy bien planchada.
Manolo aprovecha que ella ha colocado la mano en su cuello para tomársela, llevársela a los labios y
besarla con suavidad. Se miran, tiernamente, a los ojos.
ESCENA II
Los actores cambiarán rápidamente alguno de los elementos de su vestuario Por ejemplo, ella podrá
ponerse la chaqueta. Él, en un principio estará en mangas de camisa con el nudo de la corbata sin apretar.
Sobre ésta llevará un delantal. Cuando vaya a abrir la puerta se pondrá la chaqueta. Carmen, puede
recogerse el pelo.
Se enciende la luz de casa de Manolo. Todo está limpio y ordenado. Da los últimos toques con un
plumero. Se ve que tiene práctica. Pone la mesa en un momento. Silva, contento con el resultado.
Guarda el plumero, se quita el delantal, enciende la vela que habrá sobre la mesa y saca del bolsillo del
pantalón una cajita bien envuelta. La coloca bajo una de las servilletas, allí donde ha de sentarse
Carmen. Se pone la chaqueta, repasa el nudo de la corbata, se pasa las manos por el pelo. En ese
momento suena el timbre de la puerta. Abre. Entra Carmen.
MANOLO
Pasa Carmencita. Esta casa se honra en recibir a la mujer más encantadora del Universo.
CARMEN
No te pases, Manolo (Observándole) Me gusta la camisa...
MANOLO
Es nueva... La compré ayer... y también la corbata... incluso los calzoncillos ‐de esos
modernitos, tipo pantalón de baño‐. Me gasté una pasta.
CARMEN
Lo del calzoncillo sobraba. Es como si yo te dijera que me he comprado unas bragas para la
ocasión.
MANOLO
Me hubiera encantado ¿Lo has hecho?
CARMEN Riéndose, en plan confidencial
La verdad es que sí... Un conjunto monísimo de sujetador, braguitas y liguero... El sujetador es
Wonderbra...
MANOLO
Acercándose a ella, en plan macho
¡Carmencita, no me digas esas cosas que me lanzo!
CARMEN
¡Quieto, Manolo...! Todo... a su tiempo...
MANOLO Hablándole cerca del oído
Te estoy deseando como nunca.
CARMEN
¡Qué bien hueles!
MANOLO
Paco Rabanne. También lo compré ayer...
Se abrazan
CARMEN
Por cierto... huele a otra cosa, que no es precisamente a perfume... ¿Tienes algo en el fuego?
MANOLO Alarmado
¡El pollo! ¡Seguro que se ha chamuscado! ¡Lo que faltaba!
Sale corriendo. Ella, mientras, observa detenidamente la habitación, complacida con lo que ve. En un
momento determinado pasa, igual que él hiciera en su casa, el dedo sobre uno de los muebles. No tiene
polvo. Sonríe, complacida. Al poco entra Manolo con un pollo calcinado en la fuente.
MANOLO Furioso
Este plato se llama "pollo a la carbonara". Me acabo de inventar la receta. ¡Me cago en diez!
¡Con lo bien que me sale y tenía que pinchar hoy, precisamente!
CARMEN
La culpa la tiene El Wonderbra...
MANOLO
Podemos llamar a un "chino". Es lo más socorrido. En veinte minutos están aquí con la cena.
CARMEN
Espera un poco. ¿Cuál es mi sitio?
Manolo le indica dónde debe sentarse y aparta la silla para que lo haga, ayudándola luego a volver a
colocarla. Todo un caballero.
CARMEN
Ven. Siéntate y no te pongas nervioso. Le haremos la autopsia al bicho y veremos lo que hay
bajo la costra calcinada.
Carmen toma un cuchillo y un tenedor y empieza a quitarle la piel al pollo
CARMEN
Mira, por dentro está perfecto. Además, la piel es cancerígena. Mejor así.
MANOLO
Traeré la ensalada de aguacates.
Sale y vuelve a entrar con la ensalada
CARMEN
¡Cada día me sorprendes más! ¡Esta ensalada tiene una pinta estupenda!
MANOLO
Los macarrones también me salen de maravilla... incluso la paella. Con el libro "Las cien
mejores recetas" me arreglo estupendamente. Incluso debo confesarte que empieza a
gustarme la cocina. Lo encuentro hasta creativo.
CARMEN
¿Y lo demás?
MANOLO
¿Te refieres a la limpieza, la plancha, la compra, la lavadora, etcétera, etcétera....? Pues, en
fase de franca mejoría. Es cuestión de organizarse... como todo en esta vida.
CARMEN Encantada con lo que escucha y ve... Sabes... me alegro mucho de que seas un
hombre independiente; que hayas conseguido tu propia autonomía.
MANOLO
La verdad es que yo también me alegro. Nunca lo hubiera pensado.... ¡Brindemos por la
independencia!
Mientras Manolo se dispone a abrir la botella de vino, Carmen toma la servilleta que está a su lado y ve el
paquetito
CARMEN
¿Qué es esto?
MANOLO
Una sorpresa
CARMEN
¡Me encantan las sorpresas!
MANOLO
Lo sé. Antes también lo sabía, pero pasaba... Anda, ábrelo.
Carmen abre despacio el paquete. Mientras, Manolo sirve el vino. Se queda atónita ante el anillo de
brillantes. Se lo pone. ¡Encaja perfectamente en su dedo! Lo mira, sorprendida.
CARMEN
Pero Manolo... ¡Qué maravilla!
MANOLO
.... Es un anillo de pedida... Más vale tarde...
CARMEN
¡Estás loco!
MANOLO
Me gusta estarlo.
CARMEN
Me gusta que lo estés.
MANOLO
Brindemos por nuestro futuro en común.
CARMEN Quitándose el anillo. Enfadada
Toma, lo devuelves. Te agradezco mucho el detalle, pero no estoy dispuesta a aceptar
chantajes.
MANOLO Perplejo. Asombrado
No entiendo nada. He cambiado. Estoy haciendo todo lo que a ti te gusta. ¿Piensas tenerme así
toda la vida? Estaba seguro de haber superado la prueba; de que podríamos volver a vivir
juntos.
CARMEN
No. Me niego rotundamente. ¡Eso nunca!
MANOLO
... Pero... ¡Carmencita mía!
CARMEN
No comprendes que lo estropearíamos; que lo que hemos conseguido hasta hora se iría de
nuevo a pique.
MANOLO
Podríamos volvernos a casar. Eso tendría gracia...
CARMEN
¡Ni hablar...! Pero, ¿acaso no somos felices así? ¿No te sientes más a gusto con tu vida
independiente, de soltero? Los niños crecen deprisa y ya no son tan plastas como antes.
Tenemos los dos nuestros días libres y nuestros días de encuentro. A mí me parece perfecto.
MANOLO
Por cierto... de eso te quería hablar. Supongo... Bueno... Espero que no salgas con otros
hombres...
CARMEN
Eso entra dentro del capítulo de mi vida privada, de la que tú formas parte tan sólo de vez en
cuando.
MANOLO
Pero yo... yo quiero que seas sólo para mí.
CARMEN
¿Acaso te pregunto qué haces con tu tiempo?
MANOLO
No... pero... Bueno, ya sabes... alguna vez...
CARMEN Cortándole
No me cuentes nada. Eres libre. Yo, también lo soy. No tenemos que darle cuentas a nadie de
nuestros actos. Lo que importa es que nos apetezca vernos; que deseemos, sinceramente,
estar el uno con el otro. El resto, no tiene importancia.
MANOLO
A mí me gustaría verte todos los días...
CARMEN
No te engañes, Manolo. A la larga volveríamos a la monotonía y al desgaste de antes.
MANOLO Pensativo
No sé... Puede que tengas razón… Posiblemente llevo incrustado en los genes lo de la caverna
y el hombre cazador arrastrando a la mujer por los pelos.
CARMEN
Pues mis genes me dicen que eso pasó a la historia hace mucho tiempo. Hay algo que Darwin
bautizó como "evolución de las especies" y, se supone que hemos debido cambiar bastante en
unos cuantos millones de años.
MANOLO
Francamente no sé si me siento capaz de asimilar que salgas con otros hombres....
CARMEN
Es que... a lo mejor no salgo... o, a lo mejor sí… o me voy por ahí con mis amigas; o al cine yo
sola; o de compras; o a un concierto porque me lo pide el cuerpo... Convéncete Manolo, el
tiempo libre debemos administrarlo a nuestro gusto. El hecho de mantener una amistad con
alguien del sexo contrario no debe convertirse en un drama. Es algo a lo que debemos
acostumbrarnos porque entra dentro de la nueva dinámica de nuestras vidas.
MANOLO Escuchándola, embobado
¡Qué bien hablas, cariño! Además de ser un bombón, resulta que también eres inteligente.
CARMEN
Jamás te hubieras dado cuenta de haber seguido juntos.
MANOLO
Ni tú te cuidarías tanto.
CARMEN
Ni tú tampoco, por supuesto.
Manolo se levanta. Se acerca al equipo de música y lo pone en marcha. Suena una melodía romántica.
Bajan las luces
MANOLO
¿Me concede este baile, señorita?
MANOLO
Encantada, caballero.
Manolo pasa una de sus manos por la cintura. Charlan mientras bailan
MANOLO
¿Viene usted aquí con frecuencia?
CARMEN
De vez en cuando. ¿Y usted?
MANOLO
Prácticamente puede decirse que vivo aquí.
CARMEN
.... Me gusta este lugar...
MANOLO
¿Conoce usted el dormitorio?
CARMEN
No. No me lo han presentado.
MANOLO
Pues... eso puede remediarse inmediatamente.
CARMEN
¿Y el sofá...? Parece cómodo.
MANOLO
No es ortodoxo.
CARMEN
Pero muy católico. De vez en cuando conviene cambiar de religión.
Manolo empieza a desnudarla, besándola por el cuello. Ella se deja hacer y también le va desnudando.
MANOLO
Me parece una idea estupenda. ¿Para qué ir más lejos?
CARMEN
¿Me está usted desnudando?
MANOLO
Poco a poco. Muy despacio. Deseo enormemente ver ese Wonderbra.
CARMEN
Le advierto... que soy virgen.
MANOLO
Seré tierno como un solomillo...
CARMEN Riéndose
¡Tonto!
Se besan y se acarician
MANOLO
¿Y el pollo?
CARMEN
¡Olvídate... (Muy tierna y sexy) y sigue con lo que estabas haciendo. El animalito puede
esperar... ¡Yo no...!
Ríen. Se besan, se acarician
MANOLO
¡Amor mío...! Bueno... Amor... sin propiedad privada.
CARMEN
Así me gusta más.
OSCURO
FIN