Las 4 Leyes de Las Oportunidades (Resumen)
Las 4 Leyes de Las Oportunidades (Resumen)
Las 4 Leyes de Las Oportunidades (Resumen)
Cuando nuestros sentimientos son negativos lo Cuando crees que dominas algo, tienes que
proyectamos, la negatividad no vende, la mejor seguir pensando en ello con frecuencia si
manera de conectar con tu cliente es quieres que esa habilidad se mantenga y
transmitiéndole algo que le resulte agradable perfeccione con el tiempo.
sentir en tu compañía. Pensar que algo formará parte de ti para siempre
Cada vez que te asalte un pensamiento negativo, te hará fracasar si no tomas conciencia de ello
búscale la parte positiva. Al principio parece de vez en cuando.
imposible, pero te aseguro que llegarás a Nunca dejes de mejorar.
conseguirlo, sólo es cuestión de practicar Pensar en positivo es bueno mentalmente y,
mucho. como todo lo que afecta a la mente, ese
Aunque hay muchas cosas que no podemos bienestar se acaba trasladando también al
elegir cada día, siempre podemos seleccionar cuerpo. Pensar en positivo es la mejor manera
nuestros pensamientos. Ha pensamientos que de predisponernos a detectar oportunidades.
nos impulsan a detectar oportunidades y otros Segunda Ley: Las oportunidades vienen con fecha de
que nos bloquean e impiden encontrarlas. Sólo caducidad
es cuestión de elegir bien.
Las oportunidades son como las estrellas
Si sientes que un pensamiento te bloquea, fugaces, sólo duran un instante, las ves, o no las
cámbialo por otro que te impulse. ves.
Cuando uno hace las cosas bien, los resultados Las oportunidades siempre están ahí, vienen
tienden a ser buenos. Lo contrario también se con fecha de caducidad, y hace falta una visión
cumple. positiva para verlas, además de una agudeza
Cuando crees que algo saldrá mal, casi siempre especial para reaccionar rápido y aprovecharlas.
sucede así, porque llegas a convencerte de que Tercera Ley: Si no las aprovechas tú, otro lo hará
tienes razón. Pero si te convences de que algo Si consideras a tu cliente un rival, éste lo notará
va a salir bien, siempre te acercas más al y siempre estará a la defensiva.
resultado esperado. Y también tienes razón.
Al cliente le importa un pito que tú te ganes o
Y eso sucede porque las oportunidades aparecen no la vida, que alimentes a tu familia y que
con mucha mayor claridad si estamos pagues una hipoteca.
predispuestos a que lo hagan. Es muy difícil
detectar oportunidades cuando nuestra actitud Ése es el problema de muchos vendedores:
está cargada de negatividad. pensar que el cliente se tiene que apiadar y
comprarnos algo para salvar nuestra dignidad o
La prisa es mala consejera si quieres conseguir nuestra economía.
algo que perdure en el tiempo.
Un día nos pueden comprar por lástima o por
Igual que un deportista de élite no puede dejar solidaridad con la causa, pero si eso se repite,
de entrenar ni un solo día, cualquier profesional acaban poniéndose una coraza de protección.
que quiera rendir al máximo también lo ha de
hacer. Cada uno de nosotros ya tiene sus propios
problemas, como para que las personas a las
que atendemos nos vengan a dar la vara con los Un buen vendedor, alguien que aspira a ser la
suyos. opción elegida, dedica mucho más tiempo a
Si lo único que tenemos en la cabeza es preguntar y a escuchar que a hablar.
«vender», con toda seguridad hallaremos a un Y sólo cuando tiene la certeza de que ha
cliente con una coraza de protección que nos detectado una necesidad real, presenta sus
pondrá las cosas aún más difíciles, ya que lo opciones y las elabora al máximo para hacerlas
que le vamos a transmitir es que sólo nos atractivas a los ojos del cliente.
importa nuestra propia supervivencia. Para ser el elegido hay que conectar con las
Lo que tenemos en la cabeza, nuestra intención emociones y la lógica del cliente. Y esa lógica
real, es lo que transmitimos a través de nuestros no se llama altruismo, sino rentabilidad.
gestos. Podemos engañar con las palabras, pero Pregunta al dueño del río dónde están los peces.
no con nuestro lenguaje corporal. Nuestras
intenciones siempre deberían ir en la línea de El pensamiento funciona mucho más rápido
nuestras acciones. cuando escuchamos que cuando hablamos;
dicen que hasta ocho veces más rápido.
Hasta que no estés absolutamente convencido
de que cuando te halles en presencia de un Escuchar atentamente a alguien siempre hace
cliente, al menos durante el tiempo que que esa persona se sienta bien porque se siente
permanezcas con él, lo único que puedes tener valorada y, en el mejor de los casos,
en la cabeza es su beneficio y no el tuyo... la comprendida.
cosa no funcionará. Cuarta Ley: Ante la duda, ¡atrévete!
En ese momento, desde la óptica del cliente, Muchas personas saben lo que no quieren en sus
dejas de ser un rival y te conviertes en un vidas, pero no tienen claro lo que sí quieren.
aliado, en un socio, en alguien que está allí para
Cuando algo nos genera una duda es porque
proporcionarle aquello que necesita para
tiene un atractivo para nosotros.
facilitarle el trabajo, para que lo haga más
rápido, más seguro y con más calidad. Si la oportunidad que se nos ha presentado nos
hace dudar, es porque algo de ella nos atrae.
Un cliente comprará antes a un aliado que a un
rival. Si no fuese atractivo no dudaríamos;
sencillamente tendríamos claro que esa
El cliente siempre escuchará tus argumentos
oportunidad no es para nosotros.
con mucha más atención, presentará sus
objeciones de una manera mucho más educada, La duda, además de ser un indicador, puede
será mucho más sincero y te dará siempre la llegar a paralizarnos.
oportunidad para que tú des el siguiente paso. Cualquier oportunidad que nos hace dudar nos
Si has conseguido la conexión emocional con tu atrae y que en esos casos siempre necesitamos
cliente, lo que le permite considerarte un darnos un pequeño empujoncito.
interlocutor de nivel para él, ahora sólo te queda El miedo al fracaso es muy paralizador, pero el
hacerte con la conexión lógica, la real, la que se fracaso no existe.
puede cuantificar, la que le hará ganar dinero
con tu ayuda. La vida es una constante comparación entre
nuestras expectativas y nuestras percepciones.
La conexión lógica es aquella que se produce Cada vez que nos enfrentamos a algo
cuando el vendedor ha entendido correctamente generamos una expectativa, es decir, nos
las necesidades del cliente y le ofrece las imaginamos cuál es, o cuáles son los posibles
opciones que las cubren. desenlaces que esa circunstancia tendrá.
Cuando ese algo ha ocurrido y el desenlace se
ha producido, tenemos una percepción y
automáticamente comparamos ambas cosas. En
ese momento, pueden pasar tres cosas.
La primera, que la percepción coincida con la
expectativa, es decir, hemos acertado en
nuestras previsiones.
La segunda, que el resultado sea mejor que el
esperado. Esto siempre es fantástico, ya que ha
habido un final más feliz del que habíamos
imaginado.
La tercera es la peor de todas, y es lo que
solemos llamar fracaso. Es lo que sucede
cuando la percepción, es decir, lo ocurrido
finalmente, es peor de lo que esperábamos.
Por tanto, el fracaso no es objetivo sino
subjetivo. No se puede medir en términos
absolutos porque es la sensación que nos queda
cuando lo que nos ha ocurrido es peor de lo que
esperábamos.
La mayoría de las personas imaginamos el
desenlace ideal como el único de los desenlaces
posibles, ya que es el que más deseamos.
A partir de ese momento, construimos nuestra
realidad en torno a él. Por tanto, cualquier
suceso que quede por debajo de lo esperado nos
afecta negativamente.
Lo interesante, es prepararse mentalmente para
una amplia gama de posibles desenlaces. A
partir de ese momento nos convertimos en seres
mucho más atrevidos y capaces de tomar
decisiones arriesgadas.
En la vida continuamente se corre el riesgo de
que nos pasen cosas que no esperamos, pero si
no nos atrevemos a hacer nada, tampoco nos
pasarán las que sí esperamos que nos pasen.
Perder el miedo al fracaso pasa por
reinterpretarlo como uno de los posibles
desenlaces. Hay que preparar la mente, las
emociones y nuestra capacidad de reacción.