Resumen Sobre Las Ideas Centrales de San Agustín y Santo Tomas de Aquino

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 3

Resumen sobre las ideas centrales de los filósofos San Agustín y Santo

Tomas de Aquino

San Agustín

Dentro de los personajes más destacados dentro del pensamiento cristiano está el de
Agustín de Hipona, mejor conocido como San Agustín, este es considerado el
pensador más influyente desde la antigüedad hasta la edad media.

San Agustín siendo un personaje tan icónico de la historia del pensamiento porque este
fue el primero en poner en contacto la filosofía griega con la dogmática cristiana,
ambas piedras angulares de la civilización occidental. Siendo de esta forma el pionero
de lo que llamamos la patrística que es el estudio del cristianismo de los primeros
siglos y de sus primeros autores conocidos como padres de la iglesia.

Dentro de sus ideas centrales tenemos la de Dios y alma, estas son las dos grandes
ramas del pensamiento agustiniano. Por un lado, Dios, y por el otro, el alma. Dos
grandes conceptos que fue capaz de enlazar con las enseñanzas de los neoplatónicos
y Porfirio, hasta darle a sus teorías un enfoque nuevo, que seguirá vigente hasta el
medievo.

Por otro lado, el Platonismo tuvo un gran peso en las ideas de San Agustín, como
demuestran algunas de las teorías del sabio de Hipona que así le llamaban. Para él, al
igual que para el ateniense, la totalidad de la existencia tiene un origen divino. Ambos
se acogerán a la idea de la existencia de un “mundo de las ideas”, pero que San
Agustín contemplará de un modo diferente: en relación con la creación divina. Dios
creó todas las cosas que existen previamente en su espíritu y las ideas son los
modelos pensados por Dios para dar forma a dichas cosas.

Otra variación del pensamiento platónico lo encontramos en la teoría del


conocimiento de San Agustín. Para él, el descubrimiento de las llamadas “verdades
eternas” es más un proceso de iluminación interior que una reminiscencia, tal y como
defendía Platón. Para el griego el alma tiene en sí misma todas las verdades y por ello
el hombre puede acceder a ese conocimiento innato. San Agustín defenderá algo
parecido, pero en este caso ese conocimiento llega de Dios, al que podemos acceder a
través del alma, la parte de la divinidad que habita en nuestro interior.

Tomás de Aquino
Como dicen algunos, hablar de Tomás de Aquino es hacerlo de uno de los más
grandes pensadores de la historia. Fue Teólogo y doctor de la iglesia católica, su
filosofía fue una de las más influyentes que han existido, principalmente por lograr
aglutinar el pensamiento de Aristóteles con la religión cristiana.

Auténtico titán de la historia del pensamiento, Tomás de Aquino se convirtió en el


máximo representante de la teología de su época, y con el paso del tiempo, de toda la
escolástica, este personaje Es considerado uno de los más importantes filósofos del
cristianismo -si no el más relevante-, pues logró fundir el platonismo que hasta
entonces había predominado en la filosofía cristiana con las tesis de Aristóteles,
principalmente las teorías de la abstracción, del acto-potencia y de la analogía.

Las ideas de Tomás de Aquino sobre el hombre son muy innovadoras: lo entiende
como una unión de alma y cuerpo, pero no siendo la primera como una mera forma del
cuerpo que, por ejemplo, perece con él. Es su forma, pero también es lo que le da su
Ser, su individualidad. El hombre existe y es individuo por su alma. Cada alma es
depositaria de su propia inmortalidad.

Santo Tomás es el más importante filósofo de la escolástica, pensamiento que dominó


la vida intelectual en toda la cristiandad durante la Edad Media, Logró llevar a cabo la
mejor síntesis entre razón y fe que se había logrado hasta la fecha. Concedió a la
razón su propia autonomía en todas aquellas cosas que no se deben a la revelación.
Para explicar la autonomía de la razón recurrió a la filosofía de Aristóteles como
instrumento adecuado para ello. Desde esta postura, Aquino afrontará antiguas
cuestiones, entendiendo, por ejemplo, a Dios como “primer motor del mundo eterno”, el
alma como mera forma del cuerpo y la preexistencia de las esencias.

También podría gustarte