PA QUE SE ACABE LA VAINA

William Ospina
(Ensayo critico)

JEIMY NATALIA GUCHUBO CRUZ

Lic. HÉCTOR RODRIGUEZ TUNUBALÁ

UNIVERSIDAD DE CUNDINAMARCA
FACULTAD DE CIENCIAS ADMINISTRATIVAS, ECONOMICAS Y CONTABLES
COMUNICACIÓN I
SEDE FUSAGASUGÁ
2020
VOCABULARIO
Fanatismo: se refiere a las creencias de una persona o grupo.
Bipartidista: sistema de partidos políticos que favorece la aparición de dos coaliciones políticas.
Corrupción: situación o circunstancia en que los funcionarios públicos u otras autoridades
públicas están corrompidos.
Centralista: del centralismo o relacionado con este sistema político o administrativo.

PALABRAS CLAVES:
Corrupción, narcotráfico, social, cultural, económico, violencia, histórico, político, sociedad,
pobreza, clase alta, conflictos, diversidad étnica, mestizaje, esclavitud, conservador, liberal,
bipartidista, masacre, magnicidio, Colombia, excluyente, democracia, fanatismo, manipulación,
chantaje, intimidación.
 PA QUE SE ACABE LA VAINA
William Ospina
Hemos observado, escuchado y conocido muchos de los problemas que se han venido
presentando en Colombia como los sociales, culturales y económicos que han desatado violencia,
tienen sus raíces desde el periodo de la colonia los cuales estos fueron evolucionando con cada
periodo histórico de Colombia, entre los más importantes el rechazo al mestizaje , la pobreza, al
intentar eliminar el lenguaje y la cultura indígena, dar prioridad a la iglesia católica en el curso de
la vida de los habitantes, la lucha entre los dos partidos tradicionales, el gobierno no busca un
beneficio para su sociedad, sino en su propio beneficio de sus necesidades y demás, para aquellos
pertenecientes a la clase alta.
Con el anhelo de que las cosas cambien urgentemente, al momento del autor William Ospina
escribir “pa que se acabe la vaina”, es notable que nos hace un llamado a que no nos sigamos
haciendo los que no vemos, ni oímos nada acerca de la situación que vivimos actualmente en
nuestro país, el cual se ha enfrentado a una series de conflictos que han venido pasando con el
tiempo y dejando secuelas en cada uno de los aspectos como lo es el social, político y económico,
donde cada acción que se realiza tiene y puede tener su efecto tanto negativo como positivo los
cuales cada uno deja una pequeña marca en todos nosotros que la mayoría trata de pasar
desapercibida por no ser jugado por sus comentarios, pensamientos por miedo a ser
discriminados. Discriminados desde hace décadas desde que se empezó a esconder la diversidad
étnica y vino tras eso el racismo una de las grandes problemáticas que todavía vive hoy en día y
demás problemáticas como la riqueza de nuestro país que es explotada y escondida para sus
alrededores, para aquel que llevara la verdad a la sociedad se veía amenazado, mandado a callarse
ya que hacía ver un mundo lleno de pobreza, abuso, fenómenos aberrantes a la esclavitud, la
gente se hace invisible mientras no se le necesite, su dolor inexistente donde nadie tiene derecho
a quejarse. Tiempos en los que se nombraban por la voz del pueblo como mandatarios a personas
que en vez de hacer y crear estrategias lo que hacían era desencadenar más violencia, haciendo
creer a la comunidad cosas, que a lo que llegaban al poder cambiaban completamente sus
propuestas realizadas en sus campañas. El lenguaje del gran poder en la política colombiana ha
incluido a la sociedad en los últimos años a tener un pensamiento débil dejándose llevar por los
que digan nuestros representantes, creyendo en todo lo que digan.
Ospina toma como punto de problema el surgimiento del partido conservador y liberal, en un
principio el primero teniendo una gran relación con la iglesia, quería que esta estuviese
involucrada en la educación y en la toma de decisiones del Estado y el segundo con devoción en
la misma   pero sacándola de la educación y de la influencia del Estado. Colombia era un país
bipartidista por ende el poder se disputaba entre estos partidos políticos que se desataron
confrontaciones por quien gobernaba, ya que había mucha diferencia entre estos.
Jorge Eliecer Gaitán hombre que se forjó una reputación como orador y defensor de causas
populares, que consolidó gracias a sus intervenciones en el debate sobre la Masacre de las
Bananeras de 1928, convoco al pueblo a una transformación histórica, asesinado, un magnicidio
que cambio a Colombia produciendo mucha violencia, saqueos, produjo enormes protestas
populares inicialmente en Bogotá y luego a nivel nacional conocidas como el "Bogotazo", y el
inicio de un periodo sangriento en la historia del país podemos observar que la democracia se ha
venido rigiendo por la manipulación, el chantaje, la ignorancia, la intimidación y el fanatismo así
mismo manipulando la opinión pública. Democracia que fue más pervertida frente al surgimiento
del narcotráfico en la cual se presentaron grandes cambios en el contexto social que dio origen a
una transformación sustancial en materia penal donde el delito del tráfico de estupefacientes a su
vez, generaciones que tenían muchas deudas que cobrarle a Colombia excluyente que la había
engendrado, gente que había sido rechazada por los cuales se fueron por mal camino al no
encontrar una ayuda por parte de estos, igual fue con los campesinos quienes pedían ayudas que
fueron ignoradas, familias que formaron las primeras guerrillas un pueblo oprimido por muchos
problemas sociales respondiendo con violencia y resistencia armada para defenderse, campesinos
que le dijeron no a la orden de emigrar a la ciudad, sino a tener resistencia y a permanecer en su
campo, campesinos que se fueron aislando y hastiando de las injusticias, que luchaban por sus
derechos cansados se dejaron llevar por la criminalidad que en cierto momento también se
beneficiaron del narcotráfico para financiar sus guerras FARC, M-19. Donde Belisariano
Betancur presidente 1982 primero en lograr a llegar a entablar mesa y lograr un alto al fuego
quien paro un poco estas desgracias que venían pasando. Pablo Escobar convirtió a los jóvenes de
las barricadas en hijos de la violencia y del desprecio en sicarios. Así ha mutado en diferentes
actores y se ha extendido en tales proporciones que en sus inicios habrían sido inimaginables y
es evidente que el narcotráfico al igual que la corrupción por los representantes del poder ha sido
un fenómeno que ha tenido un desarrollo denso y oscuro, que lentamente ha tomado auge en
nuestro país y que nació como la solución al eterno conflicto socioeconómico, al permitir dentro
de su estructura la rápida abolición de las brechas económicas que separan a la población de
Colombia y así fue como se desencadenaron guerras civiles en las cuales la violencia fue el foco
principal; con estas a la vez se fueron perdiendo algunas costumbres y así mismo marcándose
más la violencia y perdiendo el sentido de pertenencia hacia nuestro país y terminamos siendo
una sociedad individualista que no le importa pasar por encima de los demás para conseguir sus
objetivos.
Actualmente ignoramos más nuestra cultura, nuestras problemáticas, le vemos solución esconder
la pobreza, pasando por encima de los demás, un grado de intolerancia y diferencia entre clases
sociales, cultural y educación, esta última dependiendo de la implementación del Estado ya que
no se le invierte mucho, estado mismo que se preocupa por corregir y disciplinar , meter a la
cárcel a las personas cuando  cometen actos que van contra la ley pero que ya es tarde para
corregir estos ya que al salir vuelven nuevamente a estos crímenes, muy pocos razonan y
cambian, medida que en vez de acabar con el problema de raíz implementando educación y en
ella hacernos conscientes de reconocer nuestras raíces, hacernos tolerantes con las personas con
las que convivimos, además desde siempre todo el planeta tierra es diverso por ende debe haber
un mayor grado de tolerancia frente a la gran diversidad que existe, si se empieza por la
educación se puede reformar la cultura, ciudadanía y acabar con la violencia. para acabar así de
una vez por todas con la violencia e implementar el sentido de pertenencia con nuestro país y el
mundo.
En conclusión, lo que nos deja el libro de William Ospina y la relación que existe entre cultura,
ciudadanía y violencia la cual se refleja en el mismo es que esta historia de Colombia no ha
cambiado, además de la guerra por el poder de esta tierra que es de todos y no de unos pocos.
Hemos descuidado nuestro país, el morbo con el que se vive actualmente es impresionante, como
llegamos a ser indiferentes y a normalizar algo que no está bien, para que la historia de Colombia
cambie y no siga siendo la misma e incluso mejor es necesario de una reforma no inmediata e
impuesta pues sería repetir lo que ya hemos pasado, si el Estado fuera por y para el pueblo, con la
riqueza cultural, agrícola, de territorio de diversidad étnica, cultural y demás se podría fácilmente
a ser una potencia mundial por nuestro propio esmero y esfuerzo, se puede soñar con este país,
tiene todo para ser lo mejor, por nuestras mismas diferencias, mestizaje, costumbres debería ser
este el país más tolerante, unido y con sentido de pertenencia pues pocos pueden “darse el lujo”
de tenerlo todo en un mismo lugar.
Biografía William Ospina
Nació en Herveo, Tolima, el 2 de marzo de 1954 y pasó su infancia recorriendo el sur
colombiano huyendo de la violencia. Su padre, Luis Ospina, enfermero de oficio y músico de
vocación cultivó en su hijo una profunda relación con la cultura colombiana. Según Ospina, "en
mi casa no había libros, pero en cambio tuvimos todas las canciones".1

Pasó su adolescencia en Cali donde ingresó a la Universidad Santiago de Cali a estudiar derecho
y ciencias políticas, pero abandonó la carrera para dedicarse a la literatura. Vivió en Europa de
1979 a 1981. Fue redactor de la edición dominical del diario La Prensa de Bogotá (1988 a
1989).2 Escribió varios ensayos sobre Lord Byron, Edgar Allan Poe, León Tolstói, Charles
Dickens, Emily Dickinson, Las mil y una noches, Alfonso Reyes, Estanislao Zuleta, literatura
árabe y William Shakespeare.

En 1992 obtuvo el primer Premio Nacional de Poesía del Instituto Colombiano de Cultura. En
1999 recibió el Doctorado Honoris Causa en Humanidades de la Universidad Autónoma
Latinoamericana de Medellín.2 En 2005 el Doctorado Honoris Causa en Humanidades de la
Universidad del Tolima. En 2008 recibió Doctorado Honoris causa de la Universidad de Santiago
de Cali. Fue galardonado con el Premio Rómulo Gallegos 2009 por "El país de la canela".34