MARX - 200 AÑOS - PRESENTE, PASADO Y FUTURO

MARX, 200 AÑOS.

Michael David Mosquea García

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De esta forma es como se titula el primer capítulo de la obra “Marx, 200 años. Presente,

pasado y futuro” la cual es de autoría colectiva. En esta se desarrolla un análisis al respecto del

pensamiento de Marx en diversos ámbitos, como lo son: filosofía, sociología, politología y

economía. Para el desarrollo de este escrito prestaremos mayor atención a su doctrina

económica.

Antes de empezar a desarrollar lo tratado en el capítulo, conozcamos pinceladas de su

vida y aportes, Karl Heinrich Marx, mejor conocido como Karl Marx, fue entre muchas cosas

un destacado economista, considerado padre del marxismo, comunismo moderno y socialismo

científico. Entre sus obras más importantes podemos destacar "El Capital” en la cual aborda

temas como la lucha de clases, la plusvalía y la explotación de los trabajadores por parte de la

burguesía. Planteó, además, que el sistema capitalista estaba condenado a la quiebra

provocando así constantes crisis económicas.

Se inicia haciendo referencia a que es posible dividir a Marx en dos, un Marx del primer

siglo que culmina en la Gran Teoría del Partido Comunista y un Marx del segundo siglo, el

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cual se postra en contra del capitalismo e incluso critica en muchos aspectos al socialismo real,

este último es quien resulta ser más relevante para nuestro análisis.

Algo que debemos tener claro es que, a lo largo de la historia, los seres humanos se han

visto en la necesidad de producir bienes y distribuirlos entre la sociedad para lograr subsistir,

esto ha permanecido siglo tras siglo, lo que ha cambiado es la forma en la cual se producen,

distribuyen e intercambian estos bienes. En consecuencia, para las determinaciones del ente

producto del trabajo vivo, Marx continua la lógica de Hegel, siendo estas tres: valor de uso,

valor de cambio y el dinero. Marx resume lo anterior en la proposición: las mercancías se

cambian unas por otras en proporción a la cantidad de trabajo socialmente necesario que es

incorporado en cada una, su valor de uso depende de las necesidades que cada uno satisface y

el dinero es lo que mide el valor de cambio de un producto al valor de uso de otra.

Cabe destacar, que autores como Paul Sweezy mencionan que el valor de cambio entre

bienes resulta ser vital para las sociedades, siendo esta el inicio de la ciencia económica y,

además, que Marx desdeñaba las necesidades de los consumidores, dado que como plantean

otros economistas, excluyendo las necesidades biológicos y físicos básicos, las necesidades son

un reflejo del desarrollo y avance que presenta la sociedad en materia de producción y no

viceversa.

Marx opinó que América Latina aportó a sentar las bases para el desarrollo del sistema

capitalista, esto debido a que, tras la colonización de América, el cual trajo consigo el

descubrimiento de yacimientos de metales preciosos, se dio continuidad y mayor auge a los

saqueos, conquistas y la esclavización, características que para Marx formaban la esencia del

capitalismo.

Dando continuidad al capitalismo, la compra y venta de la fuerza de trabajo es la

diferencia especifica de este con cualquier otro, dicha fuerza laboral se caracteriza por ser

trabajo “libre”. El capitalista adquiere con su dinero materiales y fuerza laboral, produciendo

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entonces bienes de los que adquiere un beneficio, siendo este último superior a la suma inicial

gastada. Es decir, el capitalista solo lleva a cabo este proceso si adquiere mayor cantidad de

dinero, a lo largo de este proceso es que se produce la plusvalía, concepto que desarrollaremos

más adelante.

En ese mismo sentido, Marx descubrió algo que economistas como Adam Smith y

David Ricardo pasaron por desapercibido, este descubrimiento resulta ser el planteamiento

científico clave que demuestra la explotación capitalista. Consiste en que los medios de

producción privados conformaban un robo a la clase obrera, el cual se fundamenta en que dicho

sistema lleva a cabo una explotación a quienes carecen de estos medios de producción y solo

disponen de su mano de obra para vivir.

Por lo mencionado anteriormente, es posible introducir el concepto de plusvalía, el cual

no es más que lo que el trabajador produce por encima de lo necesario para pagar su salario,

siendo el trabajo vivo quien lo crea, es preciso destacar que el plusvalor es una creación de la

nada del capital.

El argumento marxista se basa esencialmente en dar a entender que el capitalismo no

es un sistema que podrá prevalecer por mucho tiempo, y plantea la necesidad de ir sentando las

bases para construir una sociedad post-capitalista. Dicha sociedad se basaría en un sistema,

llamémosle, anticapitalista, es decir, las clases sociales serían abolidas, eliminar la propiedad

privada, en su defecto la plusvalía, y un sin número de las críticas de Marx al capitalismo. No

obstante, esta sociedad post-capitalista basaría su crítica también al liberalismo.

Por otro lado, con respecto a los Estados, el análisis marxista concluye que en esencia

todos conforman un tipo de dictadura, independientemente del alto grado de institucionalidad

que estos posean. Esto dado que, al fin y al cabo, la naturaleza de un Estado es básicamente la

tiranía de una clase sobre todos los ciudadanos, concluyendo entonces que, en el capitalismo,

si hay Estado, hay entonces una dictadura, debido al rol que juega el Estado en este sistema.

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El marxismo también aborda la sucesión de ciclos económicos en el capitalismo, dando

entonces como resultado la teoría de la crisis capitalista. Como ya sabemos, para producir el

capitalista adquiere con su dinero materiales y fuerza laboral, produciendo entonces bienes de

los que adquiere un beneficio, siendo este último superior a la suma inicial gastada. Es decir,

se da el ciclo siguiente: inversión -> materiales y mano de obra -> beneficios. Con la

característica fundamental de que el beneficio resultante ha de ser mayor que la inversión,

cualquier interrupción del ciclo antes descrito puede desembocar una crisis. Anticipar esta

crisis de contracción en la economía resulta relativamente fácil de ver, imaginemos lo

siguiente: se da una interrupción en el ciclo, supongamos que los beneficios pronto no serán

suficientes como para seguir invirtiéndolos, ante esta situación el capitalista sospecha que sus

ganancias se verán afectadas, por lo que reduce la producción, contribuyendo así el mismo a la

crisis.

La teoría de crisis capitalista antes descrita da origen a un nuevo planteamiento acerca

de los ciclos económico, específicamente por la crisis de la tendencia decreciente de la tasa de

ganancia, es decir, la economía crece hasta aquel punto en el cual la tendencia decreciente de

la tasa de ganancia es significativa, provocando una crisis, posteriormente la economía

capitalista logra sentar las bases para dar inicio nuevamente a todo el proceso productivo, por

lo que la crisis termina siendo parte del ciclo económico en sí mismo. Es decir, se concluye

que el capitalismo es un sistema en el cual la crisis forma parte de su ciclo económico

Un ultimo dato que me parece interesante, es que se menciona por igual, que Marx es

uno de los ecologistas más grandes, pero que los marxistas no han dado cuenta con esto, y

lamentablemente han convertido al socialismo real en un sistema antiecológico.

Podríamos seguir desarrollando la doctrina económica de Karl Marx que se trata a lo

largo de este capítulo, no obstante, esto requeriría de numerosas páginas más, en consecuencia,

me es grato finalizar destacando los puntos claves que los autores persiguen abordar a lo largo

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de sus apartados, y es que estos exponen y reflexionan sobre la visión que Marx tuvo sobre la

economía del mundo, así como la de cada nación y las relaciones que se producen entre ellas.

Hasta el sol de hoy sus ideas persisten y aún más al producirse alguna crisis capitalista, sus

ideas han marco un punto de referencia para el continuo desarrollo de la economía como

ciencia.