Lenguaje-COMO HACER UNA BUENA EXPOSICIÓN ORAL EN CLASE ROSALVINA CAMPOS PÉREZ

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UNIVERSIDAD NACIONAL FEDERICO VILLARREAL

LENGUAJE Y COMUNICACIÓN

COMO HACER UNA


BUENA EXPOSICIÓN
ORAL EN CLASE

DOCENTE: DRA. ROSALVINA CAMPOS PÉREZ

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COMO HACER UNA BUENA
EXPOSICIÓN ORAL EN CLASE

Una exposición oral consiste en hablar en público sobre un

tema determinado del que previamente se ha realizado una

investigación. A la exposición oral también se le puede denominar

conferencia o ponencia. No olvides que para hacer una buena

exposición oral una de las claves es practicar mucho antes de

realizarla. Piensa que es una importante forma de comunicar y de

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transmitir información, y si no sabes muy bien cómo afrontarla

presta atención a los siguientes consejos

1. Haz una breve introducción.

Presentar el tema y hacer un breve repaso de los puntos que se

tratarán ayudará a la audiencia a saber cómo estructurarás la

exposición e ir comprendiendo mejor la relación entre las

diferentes ideas.

2. Prepara tu exposición. 

No se puede hablar sobre un tema sin estar informado sobre él o

haberse documentado previamente. Lo primero que debes tener

en cuenta es determinar de qué vas a hablar, y si tienes o no

conocimientos sobre ello. Hablar en público necesita una

preparación y tomar conciencia de lo importante que resulta.

3. Elabora un guion. 

Puede servirte el guion de tu trabajo, con algunas anotaciones

sobre detalles que no debes olvidar. Por ejemplo, puedes

suprimir datos difíciles de entender y ampliar otras explicaciones

que sepas que interesarán al público y les generará curiosidad.

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4. No te alargues demasiado. 

Habla como sueles hacerlo normalmente. No utilices expresiones

raras o complicadas, porque no te entenderán. Busca la manera

más sencilla de decir las cosas, ya que la sencillez suele ser la

mejor arma en este tipo de ponencias.

 Lleva lo mejor preparado que puedas el tema de la

exposición. No vale con repasar cuatro párrafos un par de días

antes y preparar un mínimo guion, porque si no sabes

realmente de un tema se va a notar enseguida. Una buena

exposición puede durar pocos minutos, pero tiene detrás un

trabajo de muchas horas de documentación y síntesis.

 Si no se te da bien hablar en público, ensaya y practica. No

hay nada peor que quedarse en blanco en mitad de una

exposición por culpa de los nervios o la timidez. Por ello

conviene ir al evento mentalizado de antemano, sabiendo lo

que uno se va a encontrar y cómo comportarse. Puede ser

buena idea practicar delante del espejo o de amigos que se

presten a hacer de "público".

 No memorices. Una cosa es ensayar y otra es llevar

aprendido “de carretilla” el discurso. Eso es un riesgo porque

los nervios te pueden hacer una jugarreta, y en cuanto te

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atasques en un punto, ya no vas a saber cómo seguir. Es

preferible llevar el tema bien preparado y memorizar en todo

caso los bloques temáticos que vas a desarrollar.

 Sé amable con el público y comprensivo con sus preguntas.

Siempre es recomendable al final de una exposición dejar un

espacio para el turno de preguntas. Sé paciente y didáctico en

las contestaciones, no tengas una actitud prepotente y

muestra amabilidad en todo momento.

5. Utiliza materiales de apoyo. 

Se dice que una imagen vale más que mil palabras. Puedes

ayudarte de fotos, diagramas, mapas, dibujos, etc., pero ten en

cuenta que estos materiales deben servir de apoyo a tu

exposición y argumentos, pero en ningún caso sustituirlos.

Recuerda que realizar una buena exposición suma puntos

positivos, ya sea a nivel académico o profesional. Para ello, no

solo deben haber datos ciertos y verídicos, sino que también

debes intentar hacer la charla o ponencia lo más amena posible

si no quieres que tu auditorio se aburra, pierda el hilo o deje de

interesarle lo que les estás explicando.

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6. No leas en tu presentación.

Ya sea de tu laptop o de notas escritas. Sabemos que hablar en

público es algo que produce nervios; pero recuerda que

aceptaste hacerlo. Así que dales a las personas el respeto que

merecen. Practica tu presentación y conoce a profundidad sobre

lo que estás hablando. Si de pronto te pierdes, está bien que de

vez en cuando des un vistazo a tu presentación, pero lo peor que

puedes hacer es sonar como un robot en el escenario. 

7. Contacto visual

El contacto visual es una de las cosas más importantes en una

presentación. Compromete a la audiencia porque les permite

sentirse como si estuvieras hablando con ellos y no a tus fichas

de apuntes o al suelo. También e permite controlar el flujo de la

presentación a juzgar por sus reacciones o respuestas.

8. Mueve las manos para apoyar tu exposición oral.

Señala, apunta, compara. Los gestos refuerzan lo que cuentas.

Es muy importante que mires al público, y no siempre al mismo

sitio. Debes hablar para todas las personas de la sala. Mirarles a

los ojos transmitirá seguridad y confianza.

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9. Mantente de pie.

De acuerdo al tamaño de la audiencia o incluso el tamaño de la

habitación, es mucho más impresionante si el presentador está

de pie. Denota la experiencia, autoridad y muestra a su público

que se toma en serio la presentación.

10. Ensaya en voz alta. 

Habla frente a un espejo o pide a algún amigo o familiar que

haga de público. Si no sabe nada del tema y al final ha aprendido

cosas, es una muy buena señal. También puedes grabar tus

ensayos en una grabadora o en el ordenador, así podrás

escucharla y saber en qué aspectos debes mejorar la exposición

oral.

11. Disfruta de tu exposición oral. 

Has invertido mucho tiempo y esfuerzo en investigar y preparar

la presentación. Ha llegado el momento de que los demás vean

el resultado; todas las cosas que has aprendido y lo bien que

sabes contarlo. Al final de tu conferencia, responde a las

preguntas de tus compañeros, y diles donde pueden encontrar

más información sobre el tema.

12. Sé tú mismo.

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Sé que esto suena obvio, pero es muy importante que lo

recuerdes. Conforme más intentes actuar como alguien que no

eres, más podrán ver las personas a través de ti. Cuanto más

actúes como tú mismo, más confianza tendrás y es más fácil que

la audiencia se relacione contigo.

13. Nunca olvides de la conclusión.

Recoge siempre al final las ideas más importantes, justo antes de

abrir un turno de preguntas para aclarar aquellas dudas que

hayan quedado pendientes en la audiencia.

EN RESUMEN RECUERDA LO SIGUIENTE:

Debes tener muy claro lo que deseas transmitir.

Antes de comunicar tu idea tienes que pensar qué es exactamente

lo que quieres decir. Es muy importante poderlo escribir en una sola

frase, es decir tener un único mensaje.

Contarlo de forma memorable.

Tu mensaje compite con infinidad de otros mensajes que todos

recibimos a diario. Para que recuerden el tuyo, debes hacerlo

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especialmente interesante y eso puede conseguirse a través de las

historias memorables.

Usa una manera de comunicarte que conecte

La forma de comunicarte dependerá de aquellos a quienes vaya

dirigido el mensaje. El expositor debe conocer muy bien a su

auditorio.

El mensaje que vale es el que capta la gente

Una vez que has construido el mensaje, un único gran mensaje,

contado de forma interesante, con un lenguaje que conecte, tienes

que trabajar su escenificación. Debes mirar al público a los ojos,

leer sus reacciones. Y ser capaz de cambiar la comunicación en todo

momento en función de las reacciones que percibas.

Invitar en vez de intentar convencer.

Cuando intentamos convencer, no convencemos. Solo si nosotros

estamos convencidos de lo que decimos y somos capaces de

transmitirlo, tenemos la oportunidad de resultar convincentes.

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Persuadir a los demás no puede ser nuestro objetivo, sino que

será mostrarnos convencidos, y contagiar ese entusiasmo.

Compilación:
Dra. Rosalvina Campos Pérez

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