Perícopa Marcos 8
Perícopa Marcos 8
Perícopa Marcos 8
INTRODUCCION
Se Sabe que al principio comienza con la proclamación del Reino de Dios con muchos
Milagros y mensajes. Pasa por la elección de sus discípulos, pero pasa algo en medio
de todo, “la transfiguración” lo cual lleva todo el esquema inicial. Comienza a
manifestarse a los discípulos, como el hijo de Dios que tiene que morir y luego
resucitar.
Para ello delimitaré la perícopa entre Marcos 8:27 y 9:29, donde se ve como una
subida a la montaña y luego, la bajada vertiginosa a la realidad; luego miramos la
subdivisión de la perícopa y enseguida haciendo un estudio textual, la geografía de los
hechos, para luego determina enseñanzas, a partir de la línea teológicas del Evangelio.
1. DELIMITACIÓN DE SU PERÍCOPA
A partir de Marcos 8:27, Cristo después de predicar, como el evangelio lo relata, llega
con una pausa significada, para que creamos que Jesús es el hijo de Dios vivo (Juan
20:31). Tres enseñanzas son inferidas a los hechos de Jesús en la parte primera del
Evangelio de Marcos:
a. La pregunta ¿Quién dicen la Gente que soy yo? la hace Jesús queriendo ver el
efecto en la comunidad hasta el momento, con todo lo que ha hecho desde el
inicio del Evangelio a hasta el momento.
b. El informe que hacen los discípulos son sus propias opiniones, aun cuando no
llegan a la plenitud del conocimiento de la identidad de Jesús hay
convencimiento por los milagros que hacían en su extraordinaria personalidad.
La claridad de que este hombre vienen comisionado de Dios y que no es un
impostor, a ejemplo de Juan el Bautista o Elías o cualquier profeta del Antiguo
Testamento (v.28)
Desde Marcos 8:31, Jesús comienza a hablar del “escándalo de la cruz” (Gálatas 5:11).
Pues hasta este momento Jesús se ve como el conquistador y no como el siervo
sufriente, que está dentro de la teología de Marcos, como el reverendo Pablo, nos
habló de la primera parte cuando Jesús se presenta como Mesías predicando el reino
de Dios.
Los discípulos se sienten convencidos que él es El Mesías, el liberador del yugo de los
romanos por medio de la fuerza con una inmediata restauración del reino de Israel
(Hechos1:6) y en Marcos 8:31 Jesús lo saca de error.
Después de este momento, Pedro convencido, que esto no le iba a suceder, no iba
aparecer; pero tal vez es más por el celo de maestro Jesús el Cristo: quería impedir y lo
invitaba a renunciar a lo que estaba diciendo; no era un lenguaje de la autoridad sino
un afecto que lo movía. Es cierto que Jesús permite a sus discípulos sientan libres con
Él, pero se puso a la raya en esta ocasión, El Señor lo reprende con unas palabras
fuertes “quítese de mi vista Satanás”. Poco se imaginaba Pedro, que iba a decir
tremenda reprimenda. Como Pedro, no entendemos el designio de Dios, pensaba que
la muerte de Cristo era necesaria y no se consideraba, que después venía la gloria que
era la resurrección. La sabiduría humana es una plena locura cuando pretende oponer
de algún modo a los planes de Dios, la cruz de Cristo es para una locura y para otro
escándalo. Como Pedro muchos no entendemos la naturaleza del Reino de Dios.
Lo ocurrido en la cima de un monte, como lo enseña la tradición del monte Tabor, los
testigos Pedro, Jacobo y Juan, discípulos, se transfigura frente de ellos, con sus
vestidos resplandecientes sumamente blancas cuál ningún lavandero de este mundo
pudo blanquear (v.3) la compañía está manifestación de la gloria Moisés y Elías (v.4)
conversando con Jesús para dar testimonio de Él. Moisés y Elías vinieron a gran
distancia de tiempo el uno al otro, pero eso no quebrantará leyes temporales del cielo
donde somos como uno en Cristo. Muchos primeros serán los últimos mientras muchos
últimos serán primeros. El gusto del deleite de los discípulos se experimenta en esta
versión donde Pedro es capaz de decir: “Señor maestro es bueno que nos quedemos
aquí haremos chozas”, pero no sabía lo que estaba diciendo (Lucas9:33), es decir, su
reacción fue inesperada en medio de la alegría y el espanto.
En el versículo 7. encontramos que hay un testimonio del cielo, una voz que habla en
medio de la nube que los cubre (Mateo17:5) la nube era luminosa lo cual era símbolo
de presencia bondadosa de Dios y luego el testimonio “Este es mi hijo amado
escuchemos” y luego, Dios lo muestra como su predilecto. su amado. el único
mediador entre Dios y los hombres (1 Tito 2:5). Pide a todos, escuchar a Jesús, la
palabra de Dios (Juan3:34) después desaparece la visión y pronto se encuentran con él
solo (v.8) con ello Cristo afirma, no abandonar los suyos, aunque desaparezca los
consuelos y costos externos: Siempre los discípulos tendrán a Cristo hasta el fin de los
tiempos (Mateo 28:20).
Como el reverendo Pablo Afirma. es muy claro que Jesús es hijo de Dios, que muere y
resucita en esta segunda parte del Evangelio de Marcos ya no se proclama el reino de
los cielos o de Dios, el reino está presente en el mismo, Señor Jesús, que manifiesta a
sus discípulos y los discípulos a toda la multitud: el hijo de Dios, que se muestra
plenamente, aunque esté en lo secreto y que pronto llegará a Jerusalén para morir y
resucitar.