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Drogodependencias
Errsa«oo BpcoNa
INDICE
I. lntroducción 494
u. La historia de las drogodependencias 496
m. 499
IV. Conceptos básicos en dÍogodependencias 501
A. Clusificot'ión de lus drogus 501
B. Uso, abu.so y dapenrlettcia 503
C. Arlicción i canducta aclictit,a -504
5 tl-r
506
506
G. Intoxicatión 506
H. Polítoxicamania 507
I. Trastorno dunl 507
Y. F,l diagnóstico de la dependencia y abuso de sustancias psicoactivas 507
VI. Características elínicas de las distintas sustancias psicoactivas 510
510
B. Cafetnu 511
C. Canngbis 512
El término genérico de trastornos por uso de sus- Sin embargo, y ello lo dejamos apuntadcr , i r. l]n acti'r'o
tancias psicoactivas se aplica a todas aquellas sus- partir de aquí, el fenómeno de las drogodepei*,..1, IJna ulacn
tancias que introducidas en el organismo afectan o cias es más complejo de lo que una simple r--.,,, .,r de consuc
alteran el estado de ánimo y la conducta, acaruean del mismo pueda parecernos y se suele pasal :ii-, Una crud¿
trastornos incapacitantes para el consumidor en la alto que si hablamos de drogodependencias h--:,o- Un subpn
esfera personal, laboral, social, física y familiar, y mos de drogas, y si hablamos de drogas ten.:r r extraordi¡
padece síntomas y estados característicos como in- que hablar de udrogas», de todas las drogas. Esi- *'
toxicación, tolerancia, dependencia y síndrome de de las ilegales, tales como la heroína, la coca::¿ *
abstinencia. Esta definición es equivalente a la hachís, el éxtasis, etc., de las legales, el tabac¡ - *
de droga, por la que se entiende «toda sustancia alcohol, y de distintos medicamentos que utilr'¡.'rm
que, introducida en el organismo vivo, puede modi- sin control médico, automedicado's, o en algrin ::u*rr
ficar una o más funciones de éste» (Kramer y Ca- para controlar o reducir el dolor en enfeme,i.-¡r Un uvicio'
meron, 1975, p. 13), y por droga de abuso «cual- graves e incurables bajo control médico, proc:*r IJna uconc
quier sustancia, tomada a través de cualquier vía de dependencia; éstos incluyen desde los tranqui-.-a¡" Un «estilo
administración, que altera el humor, el nivel de per- tes menores a 1os mayores, pasando por los hi-¡lL* tual, reciar
cepción o el funcionamiento cerebral» (Schuckit, ticos, los barbitúricos, etc. Claramente aquí nüs :m* Un «proce
1989, p.3). contramos con «lo que queremos creer» o ,:iiñ. mulo de ¡a
En nuestro mundo actual el fenómeno de las gustaría creer» y con la «realidad», la a veces "=su, l]n «trastt¡
dr o go d ep e nden cias, tétmino genérico utilizado para duo afecta
realidad».
[Jna uenfer
referirnos a todas las drogas o sustancias con poder El fenómeno de las drogodependencias ai<;-i . terminada
psicoactivo o psicotropo, tiene gran relevancia. Es muchas más personas de las que «en abstractcr, ir:+ Una uenfEl
un serio problema de salud pública y de inseguri- imaginábamos o «nos gustaría imaginar». In;_-r.L curso del <
dad ciudadana, de aparición de mafias y cárteles,
": ;
quizás nosotros mismos debiéramos incluirnos trastorno§
de sufrimiento para los adictos a las mismas y para categoría de «drogadicto» o «adicto», porque ,- ue"
sus familias. Pero también es el mejor negocio sa- blamos de drogas, con todo lo que ello implica :r-
neado que existe en el mundo actual, moviendo de una perspectiva científica, o no hal¡lamLn üg
una cantidad ingente de dinero que permite la com- drogas genéricamente. Aun hablando de ci¡.uro :orales y sanita:
pra, corrupción y extorsión de gran número de per- «legales» y drogas «ilegales» estamos hablani - ¡r :',: de personas,
sonas de muchos países del mundo. «drogas» y, por 1o que hoy conocemos, el :atología en ell
En las encuestas de opinión en España, las dro-
¡"-,:r
adictivo de la nicotina, del alcohol, de la heror:-, .E :rr lo tanto. prr
godependencias aparecen sistemáticamente como la cocaína, etc., es semejante, por lo que no sÉ :lir- snte y para ias
uno de 1os tres problemas que más preocupan a los rencian en modo importante unas de otras. S: ;lr ¿¡¡i¡ sufriendo r
ciudadanos, junto con el terrorismo y el paro. Los tenemos que reconocer que hay una gran difer:ua iel alcohol. o :
medios de comunicación de masas nos machacan entre problemas de salud, problemas económi;._", , .,¡cialización. D
casi diariamente con noticias, las más de las veces problemas sociales que cada una de las gen=:r-m, ilcohol no se ir
en sentido negativo, acerca de hechos relacionados drogas produce al considerarlas específicar_.m,u ndo monográfir
con el narcotráfico, alijos decomisados, detencio- una a una. Así, mientras que el tabaco es la ¿:.".¡, Con lo anteri
nes y redadas, blanqueo de dinero, muertes por so- que más mata :lema de las dr
bredosis, y así un largo etcétera.La realidad no es
-unos 44.000 ciudadanos espa-r. x*
fumadores mueren anualmente por su coflsuirtri- ::lt rüuana) se ha
exactamente la que tales medios de comunicación alcohol le sigue a la zaga en mortalidad -_rrlr rroblemas de p
nos exponen, aunque es indudable que este fenó- 20.000-, pero no hay duda alguna que el.alcoi -, *r --, por los probi
meno, reciente en una perspectiva histórica acerca quien produce mayores problemas sociales. lal.r¡ -os problemas d
deI gran número de personas que incluye en la ac- les y económicos, mucho más importantes que ; u ua pequeña pa
tualidad, se ha expandido en pocos años, aunque el todas las drogas ilegales juntas. Así, el Coo_¡:_Trlrl :nseguridad ciur
fenómeno de la adicción y de la dependencia ha abusivo de alcohol y el alcoholismo produce: rlrq ¡as, aparición
existido casi desde que al hombre se le considera cada uno de ellos una familia con conflictos. pr-,iru Ello, entre otrz
como hombre. mas de convivencia y relaciones, problerri- * :ran «negocio"
Drogodependencias 495
Tabla I
Consideracioncs sociales de la drogodependencia
(adaptado de Casas, Pérez de los Cobos, Salazar v Tejero, 1 992)
Tabla 2
Consideraciones de la droga desde la prcsunta responsabiliclad del sujeto toxicrimanir
(adaptado de Casas, Pérez de los Cobos. Salazar v Telero. 1992)
Un «vicio», producto de la debilidad del cspíritu y susceptiblc. por t¿rnto. clc ser cor:regiclo.
Una «conducta antisocial», que debe ser controlada y castigadtrpara evitar perjuicios-más gr¿lves.
Un «estilo de vida» patológico de determinados indi',.iducls qué. dcnunciandg como maiüna a la socieclaci ac-
tual, reclaman su derecho a la evasión.
Un uproceso autodestructivo, cle tipo reactivo. resultantc del clesespenr de unos inc'lividuos débiles ante un cú-
mulo de factores estresantes.
Un «1rn51s¡¡c) de personalidad» que facilita la implantacicin de conductas de clcpendencia ¿rl entrar
el inclivi-
duo af'ectado en contacto con grupos consumidorcs de drogas.
Una uenfermedad exógena». producida por el efecto clirecto y continuado clel tóxico objcto de abuso sobre cle-
terminadas estructuras y funciones ccrebralcs.
Una «enfermedad endógena». resultante cle una patología de origen genético. o cle un trastorno a<lquiriclo en cl
curso del dcsarrollo. que «forzaría» al adicto a consumir tcixicos como un proccso de «autotratamiento, de los
trastornos que le impiden una vida saludablc v autcinoma.
-,1lesy sanitarios importantes y. por el gran núme- nivel mundial el tráfico de drogas. Este saneado y
-- personas a las que afecta. una fuente de psico- bien organizado negocio sirve no sólo para enri-
logía en ellos mismos, en sus familias e hi¡os ¡r. quecer a muchos, sino también para pagar guerras,
.o tanto, produce un efecto en cascada en el pre- mercenarios, montar saneadas empresas a través
: \/ para las futuras generaciones que lo van a se- del blanqueo de dinero y muchas cosas más que
' :ufriendo directamente, si abusan o depenclen nos podemos imaginar.
rlcohol, o indirectamente por una inaclecuada El aspecto económico, aunque no lo menciona-
-,iización. Dada la importancia del consumo de mos antes conscientemente, ocupa también un lu-
rol no se incluye en este capítulo por ser anali- gar destacado en las drogas legales, especialmente
monográficamente en otro de este libro. para las haciendas públicas que, a través de gravar
rn lo anterior queremos dejar claro que el pro- con fuertes impuestos el tabaco y el alcohol, como
-r¡ de las drogas ilegales (heroína, cocaína. ma- también ocurre con otra conducta adictiva como es
,-Lna) se ha hecho más importante no por los el juego, consiguen unos suculentos ingresr)s que.
-lemas de personas dependientes a las mismas. aun produciendo graves problemas sociales y per-
: los problemas de tipo económico. sino por sonales a una parte de los consumidores de esas
'-roblemas de tipo social que
sus consumidores. sustancias, parece sugerir a todos los estados que
:equeña parte de sus consumidores, producen: «el beneficio» compensa el «coste» (personal v so-
-uridad ciudadana, detenciones. tráfico de dro- cial) que ello tiene.
,rparición de mafias, etc. (Buchanan, 1992). En las Tablas 1 y 2 presentamos un resumen dc
entre otras razonesl ha sido posible por el las concepciones sociales más comunes acerca de la
- ,negocio» que en este momento representa a drogodependencia y del sujeto drogodependiente.
496 E. Becoña
aparición de distintos movimientos culturales, mo- incógnitas para los próximos años es qué va a o;t* La cafeína a
vimientos contestatarios, así como la aparición del rrir con estassustancias, que pueden tener varia.¡:* re las que dest
abuso de esta sustancia en décadas posteriores nes importantes por cada nueva sustancia que a:rb :n el chocolate
(Weiss y Millman, 7991)- Este alucinógeno tiene rece, de la que no será posible conocer los efei-.:r son estimulantr
como nombre químico el de dietilamida del ácido porque con gran facilidad pueden fabricarse o:¡* mentan el estar
lisérgico -LSD como iniciales y 25 por ser el com- nuevas y distintas a las anteriores. Cara al r¡¡:r ms sobre la p
puesto número 25 sintetizado en aquel entonces miento, éste será el mayor problema cuando es:n xsrupan bajo e
por el laboratorio Sandoz-. No fue hasta 1943 generalizadas. Entre éstas, la más conocida es ei *- ;onsidera que
cuando Hofmann, por accidente, ingirió una pe- tasis o MDMA, o droga del amor, que estuvo ;:* nodestos en cr
queña cantidad de LSD y pudo apreciar sus propie- mercializada en Estados Unidos hasta julir-i :r psicoactivas. se
dades como alucinógeno. Sobre el LSD-25 y otros 1985 (León, 1990). ro lo incluye cr
alucinógenos han corrido ríos de tinta, docenas de Dentro de las drogas legales destaca el taL".¡:l
libros y miles de artículos publicados (véase Esco- (nicotina) y el alcohol, junto con la cafeína r r:r
hotado, 1989). El denominado «movimiento psi-
quedélico», o «psicodélico», llegó a ser relevante en
Estados Unidos en la década de los cincuenta y se-
distintos medicamentos con propiedades psico.aa-
vas, como los sedantes e hipnóticos. Como ]'a ¡tr-
mos comentado, en este capítulo no nos varnrd &
x6-
senta (Buchanan,1992), al tiempo que se hicieron detener en el alcohol. Lriste un cons:
muchas investigaciones con el LSD-25 para estu- El tsbaco es un producto originario de Ame:r:r niológicos sobr
diar sus propiedades terapéuticas. A mediados de que es consumido por los hombres de esas tie::¡r, "ias psicoactirz
los años sesenta fue prohibido en distintos estados desde hace miles de años. Inicialmente se utiliÉ:ir presentativas d
norteamericanos y en 7971,, en la Convención para por motivos religiosos y de placer, siendo intrr'¡rl. i98B se apreci^a
el control de sustancias psicotropas, realizada en cido en Europa a la .r,.uelta de Cristobal Colón i E¿. io por los disú
Viena y auspiciado por la ONU. coña, Palomares y García, 1,994). Con el transcu:rnr rados en Drq
Los inhalables o sustancias voldtiles, contenidas de los años, su consumo se ha ido popularizar:r -¿s cada varim
en algunos productos (laca de uñas, disolventes, produciéndose un gran incremento en su consu:r{ ;onsumo de drr
insecticidas, quitamanchas, pinturas, pegamentos, a principios de siglo y un empuje impensable a:r:* El estudio de
colas, gasolina de coches, barnices, desodorantes, atrás a partir de la Segunda Guerra Mundial ,e- ante número &
cementos plásticos y aerosoles), se caracterizan por gando en el momento actual a ser una «epide¡r*., los distin
contener productos químicos como acetona, alco- 'obre
su consumo, dado el gran número de persona: ;rr zumo de drogas
hol butílico, tolueno o bencina. Es, como le pasa al fuman -cigarrillos principalmente- én cada :studios epider
crack, otra droga de los pobres, que tiene una enor- =a¡
(Becoña, Galego y Lorenzo, t9 87 ). Actualmenri.,r Jomas que las
me relevancia en los barrios marginales de latinoa- tendencia en los países desarrollados es a re,j¡¡¡n nmbién aparec
merica, pero que apenas se consume en nuestro su consumo. Los datos que ir
país. El tabaco se extrae de la planta Nlcor-r¡¿ dos de estas pu
En la actualidad, y de cara al inmediato futuro, tabacurr4 fumándose habitualmente en forma cir :- ;ión esquemáti
destacan las nuevas drogas de diseño o de síntesis. garrillos; en menor grado en cigarros puros \- tri:dr ;onsumo de est
Estas son metanfetaminas y derivados de las mismas También se puede tomar en forma de polvo esr:rr *rposición con I
(Camí, 1988); esto es, para su fabricación se parte do, mascado, etc. En una muel
de las anfetaminas para producir metanfetaminas y El nivel de dependencia que produce el tabanr L8 o más años d
a partir de ahí conseguir distintas sustancias. Estas es muy elevado, semejante al de las restantes dro¡rc rumaba, con un
drogas de diseño se pueden obtener fácilmente en el (USDHHS, 19BB), a pesar de estar legalizado iu:m ¡or 100 que nu
laboratorio a partir de la metanfetamina y otras sus- con el alcohol. El gran problema que acarre¿ 3 ,-enso del consu
tancias, teniendo múltiples posibilidades su fabrica- tabaco en nuestro mundo actual es la alta morrar* ¡ños anteriores
ción, ya que se hacen en un sencillo laboratorio quí- dad que produce, debido básicamente a los a-i,xl- ¿adavez se ilcc
mico, sin necesidad de sustancias naturales ni de tranes que van en la hoja del tabaco y otros cr-"1- menos fumador
productos químicos sofisticados, sino de sustancias puestos que se producen en la combustión .-l ;antidad de ci-em
de fácil compra para combinar con la metanfetami- papel que envuelve al tabaco (USDHHS, 1989 t. No analizart
na. Pueden llegar a tener un poder enorme y, aparte, En pequeñas dosis, la nicotina es estimulante ¡s pero sí es de tc
ocupan muy poco espacio al ser algunos de estos SNC, actuando a dosis altas como bloqueador ir ,iri üonsumo que n
productos muy concentrados. Una de las mayores transmisión ganglionar. mundo en cons
Drogoclepenclencias 499
La ca.feína, contenida en distintas sustancias, en- nos por abuso de sustancias psicoactivas. aunque sí
:c las que destaca el café, la teobromina presente Io hace la CIE-10 (OMS, 1992).
::el chocolate y la teofilina presente en el té negro, El café (cofJbu arobiga) es originario de Etiopía y
. rn estimulantes menores que quitan el sueño, au- Somalia (Sanahuja y Scrrano. 19BB). Hoy puede be-
rentan el estado de alerta y tienen discretos efec- berse cn casi cualquier lugar del planeta, aunqlle
.s sobre la presión arterial. Estas sustancias se predomina en las culturas americanas y latinas euro-
:Jrupan bajo el genérico nombre de xantinas. Se peas. La caf'eína, que se encuentra básicamente en el
,¡nsidera que producen niveles de dependencizr café, también se encuentra en otros productos, como
rodestos en comparación con las otras sustancias el té, la cola, el chocolate, el coco, etc. E,n la actuali-
-:icoactivas, según el DSM-III-R (APA, 1987). que dad 1a cafeína constituye un componente de muchos
,r lo incluye con categoría específica en los trastor- medicamentos (Becoña, Lorenzo y Galego. 1990).
III. EPIDEMIOLOGIA
riste un considerable número de estudios epide- Acerca del consumo de café no hay datos fiables.
-:iológicos sobre el consumo de las distintas sustan- aunque en una encuesta del año 1980 1o consumía
, -rs psicoactivas en España. utilizando muestras re- diariamente un 78,7 por 100, con un consumo me-
:esentativas dc toda la población. Desde el año dio de café de 2,3 fazas.
,S8 se aprecian, en función del desarrollo adquiri- Acerca del consumo de fármacos. en una en-
- , por los distintos Planes Autonómicos o Comisio- cuesta representativa a nivel nacional del año 1992.
.rrlos en Drogodependencias, encuestas sistcmáti- se les preguntaba a las personas qué tranquilizantes.
. :s cada varios años para conocer la realidacl del y concretamente benzodiacepinas. utilizaban para
. nsumo de drogas en cada comunidad autónoma. calmar los nervios sin quc 1os hubiese recetado el
El estudio de Comas (en prensa) revis¿r un impor- rnédico. Los resultados inclicaban que los tomaba
:rte número de encuestas realizadas en todo el país c1 6 por 10(l con una media de 3 veces al mes. En
'¡re los
distintos aspectos relacionados con el con- otra pregr,inta se encontró que el 2 por 100 de per-
-mo de drogas. En las distint¿rs publicaciones cle los son¿ls con depresion tomaba estimulantes sin que
-.:udios epidemiológicos de las comLrniclac'les ruto- se los hubiese recetado el médico. con una media
,mas que las vienen realizando sistemáticamente. de l).6 r.eces al mes.
.nbién aparecen distintos datos de comparación. Aunque es difícil conocer el consumo real de
. ,s datos que indicamos a continuación están extraí- drogas en una población a través de las encuestas
, ': de estas publicaciones para hacer una presenta- (Comas, en prensal Rachin, 1993), no disponemos
. )n esquemática y global de la problemática del de muchos más datos para conocer esta problemá-
. rsumo de estas sustanci¿rs y no hacer engorrosa la tica a nivel cuantitativo, alrnque también hay que
.rosición con las múrltiples encuestas existentes. tener presente para un análisis más minucioso otros
En una muestra representativa de los adultos de datos como los del SEIT del Plan Nacional de Dro-
' o más años de toda España, el 36 por 100 de eilos gas de las personas atendidas en los centros de dro-
-:raba, con un 22 pot I 00 de ex fumadores y un 4 l godependencias. indicadores sanitarios como la he-
r 100 que nunca ha fumado, apreciándose un des- patitis en adictos a sustancias, ingresos en servicios
.:nso del consumo de tabaco respecto a encuestas de de urgencias por intoxicación o síndrome de absti-
'os anteriores. También se aprecia cómo la mujer nencia. etc.
,,Ja vez se incorpora más al consumo, y aunque hay Para darnos una idea de esta problemática pre-
-:nos fumadores, los que füman consumen mayor sentamos en la Tabla 3 los datos de la encuesta rea-
. ,:tidad de cigarrillos que hace unos años. lizada en Galicia en 1992 sobre el consumo de las
\o analizaremos aquí el consumo de alcohol, distintas sustancias psicoactivas en las personas de
:ro sí es de todos conocida la alta prevalencia de 16 o más años, que representan aproximadamente
. ,nsumo que nos pone a la cabeza de los países del dos millones trescientas mil personas de la pobla-
--lndo en consumo y dependencia del alcohol. ción gallega. Como se aprecia, el cannabis ha si-
500 E, Becoña
Tabla 3
Consumo de drogas en Galicia (I9t)2) por orden de importancia
(adaptado de O cc¡nsunto tle drogas en Gatic.i.a 11.
IV.
_
Santiago de compostela: Plan Autonómico sobre Drogodependencias, 1993)
\, CLASIFI(
Alguna vez
Habitualmenr,
Tipo de droga en los úkimos 6 meses :s dro_tas ::
itintos criti:
. por su oft_-;
Tabaco (consumo diario) ,\). por SU r'.,
29.6
Alcohol (75 o más cc. diariamentc).. . .. .rcológica. r
10,8 216.
Ar.ralgésicos comurres 6.5 t 50.000 1.,10 :i :gales, instr:-,
Tranquilizantes............. 3.7 84.000 r.20 :S a..
,-¡¿rs-blan d
Cannabis..... 2_.4 5,+.000 0,60 1i. n respecto ;.
Hipnóticos... 1,9 43.000 0,6t) 1 -+.
Cocaína -.iciones cltr. -
1.-5 34.00t) 0,10 ll
Heroína . .'lasificacio:. _
1,0 22.000 0.15 -1 .-
Anfettrminas r,ennedy. 1r, .--
Analgésicos morfínicos.
rl _1 10.000 0,1 0 :: Por lo qui
.
0.:l 7.000 0,06 1-. .
I v sedantes. -,: .
1988 (Edis. 1990) y ta de t992 (Edis, 1993) ha manos. que va poco a poco pasando de ser r-.
descendido e1 consumo de alucinógenos, inhalables de modo inyectada a fümada en forma cle
-::roS ! fencicl -_
-
.,'ión similar:
y cannabis. a pesar de tener éste un alto cclnsumo que ellos mismos preparan, denominándola ¡- . rmiméticos :-
en ambas encuestas. Otras encuestas confirman que got «cocinada». El envejecimiento de la pobl:,_ -,lv usada (E::-,.
el consumo de cannabis está estancado, a pesar de heroinómanos es apreciable, utilizando cu:, ., (cocaína. ar.--
ser su prevalenci¿r elevada. desde hace unos años. de los indicadores del SEIT (tratamientos. u:_, :es (alcohol. , :-
El mayor control médico de distintos meclica_ y mortalidad) con una proporción de cinc¡, n las pertull--,-
mentos psicoactivos también ha produciclo un midores de heroína o cocaína por cada mujer . objetos (mu;'.'
Drogodependencias 50I
Tabla 4
Sindromes mentales orgánicos asociados a distintas sustancias psicoactivas :antes (barbrt:
cafeína; y 1 1
Tipo de droga a) b) c) d) e) f) gt
-\1cohol. x x x I B. USO-.{E
-\iucinogentls..,............. x x x l
.\nfet¡Lminas r- sustanci¿rs afines.......... x x x x
_os concepto:
catc'ina
Cannlrbis, 'x x
,an habitualm:
Coc¡ri..L x x x x lnclaspsfcolla'
Fenci¡lidina |PCP) r.sustanci¿rs afines... x x x x : "'¡das las con'
Inh ant.s
al :rones (Becoñ.
\icLrtinlL, . x En el camr
Opiaccrrs. X entienú¡
.,.to Se
Seclantes. hrpnrrticos o ansiolíticos x x .:J0fÍeá COnS;-
a) Int0ricltcirr rL -{abitualmeni-
b) Sinclronrc dc ahstincncia los son espa':_
c) [)e]irirrr¡ ::porádico d;
d) Sinclrome dc abstinencia con delirium -as. Los facI,--.
e) Trastr¡rno clclirante ,1ntes para n\ ,
f) Trast.rrnr¡ del estado de ánimo llv Un USO CL':
Otrt¡s sindromcs -egativas qui ;
.¿ndencia se :.
l= lnioricacttttt alcohólica idiosincrática, trastorno amnésico alcohólico. demencia asociada a alcoholismo. .Jstancia qu.
a_ 'frastornos pelceptivos
posalucinógenos.
. Trastornos lttr'ntales orgánicos .-sniflcativa::
por f'enciclidina (PCP) o arilciclohexilaminas de acción similar, no especificacicr.
Trastorno amr.iésicc¡ por sedantes, hipnóticos o ansiolíticos.
-mpo.
Aunque sr :
,:uso, distin,,
iro hay un c :
-¿ diferenci.r:
-¡finido com
.tltentel no i-
Tabla 5 , -.eptable». re :
Clasificación de las drogas según Schuckit (1 989) -rientes conaa:
iodgson (19..
Clase Algunos ejemplos
.es (barbitúricos y benzodiacepinas)l (9) tabaco Suele indicarse que la diferencia entre uso v abu_
:lcína:y(I0)alcohol. so es en muchos casos difícil de delimitar tNlédina_
Mora, 7994). En todo caso parece que lo más co_
-¡ rrecto es considerarlo un continuo, ya que clepende
: USO, ABUSO Y DEPENDENCIA una u otra clasificación del carácter legal de lá pro_
du.cción, adquisición y uso con fines de intoiica_
. conceptos de uso, abuso y ciependencia
se utili_ clon.
- habitualmente cuando nos referimos a las sus_
-,'ias psicoactivas. aunque puede
Complementando la distinción de uso, abuso y
ser expandido a dependencia, hay una serie de características quá
--'s las conductas adictivas con algunás mafiza_ están presentes en los estadios cle abuso y depén_
:es (Becoña, en preparación). dencia: son los de intoxicación, tolerancia, sínto_
- n el campo de las conductas psicoactivas, por mas de abstinencia, deterioro. etc.
se entiende el consumo de una sustancia que no
En el momento actual. siguiendo los criterios de
. :t're2 consecuencias negativas en el inclividuo. la Organización Mundial de la Salucl (1992), para
.-,itualmente ello se produce cuando los consu_ la consideración de una droga tenemos que tener
i son esporádicos. Esto implica que hace un uso en cuenta: una evidencia subjetiva de compulsión
-,¡rádico de la sustancia o utiliza dosis moclera_
para la utilización de las drogas durante los intentos
. Los factores culturales pueden aquí ser impor_ de abandono del consumo; el deseo de abandonar
-.-s para no llegar al abuso. El abuso
se cla cuando el consumo; un hábito de consumo de drogas relati_
un uso continuado a pesar de las consecuencias vamente estereotipado; evidencia de neuioaclapta-
.--rtivas que ello acarrea para el inclividuo. La de_ ción con fenómenos de tolerancia y dependencia;
,lencia se da cuando hay un uso excesivo de la el consumo de drogas para aliviar o evitai los sínto_
'.lncia que produce consecuencias negativas mas de abstinencia; el predominio cle las concluctas
-rilicativas a lo largo de un amplio período de de búsqueda de dro-{a por encima de otras priori_
_:tpo. dades importantes; 1, una rápida reinstauración de
\unque se puede hacer la distinciónentre uso v la clependencia después de un período de absti_
' .ro, distintos estudios indican que entre
,nu i. nencl¿1.
r hay un continuo, la mayoría de las veces drficil Por depentlencict. denominado sínclrome de de_
. Jiferenciar. Para la OMS el abuso cle dro_9as es pertderttict en la última edición de la clasificación de
" inido como «un uso excesivo, esporádico o per_ las enfermedades. CIE-10 (OMS, lgg}), se entien_
inte, no relacionado con una práctica médica de ,(un conjunto de manifestaciones fisiológicas,
.:ptable», recomendándose el manejo de los si_ con.rportamentales y cognoscitivas en el cual el con_
-, -ntes conceptos. como describe Edwards, Arif y ,sumo de una droga, o de un tipo de ellas, adquiere
Jgsonll93l.¡: 1a máxima prioridad para el individuo, mayor inclu_
so que cualquier otro tipo de comportamiento de
.it Uso desaprobado; uso de una droga que no los que en el pasado tuvieron el valor más alto.
.rprobado por la sociedacl o un grufo ácntrc.r La manifestación característica del síndrome de
- una sociedad. Cuando el término es utilizado dependencia es el deseo, a menudo fuerte v a veces
irería hacerse evidente quién es el responsable clc insuperab-le, de ingerir sustancias psicoactivas ilega-
Jesaprobación. les o legales, aun cuando hayan sido prescritas
,)Uso peligroso: uso de una droga que proba_ un médico. La recaída en el consumó de una sus_
ior
:rrente producirá consecuencias nocivas para el tancia, después de un período de abstinencia, lleva
. rario, ya sea de disfunción o claño. Este concepto a la instauración más rápida del resto de las carac_
. srmilar a la idea de conducta de riesgo. terí.sticas de la dependencia, de lo que sucede en in_
.1. U,ro desadaptativo: uso de una droga que dividuos no dependientes» (p. 102).
- rlica daño en el funcionamiento social o piicoiO_
Concretando más 1o anterior, Ia CIE-[0 apunta
-'o (pérdida de rrabajo o problemas Oe paréia). que sólo debe realizarse el diagnóstico si durante
,l) Uso nocivo: uso de una droga q,r" ," to*u algún momento o de modo continuo, a 1o largo de
,i.iendo que puede causar enfermidad mental o los últimos doces meses, han estado presentes tres
-
'ño físico en el individuo. o más de los siguientes síntomas:
504 E. Becoño
placer o dir er¡ior.r. a causa del consumo cle la sus- cepciones- su consumo ni fumar con úto. -
t¿rncia. Auntentrr del tiempo necesario para obtener en cambio con el alcohol la mayor par:.
o rn_serir la <ustancia o para recuperarse de sus consumidores son bebedores sociales qu. -
e'fectos. controlar sin problemas su consuÍlo ! e Si :
f) Pcrsist.-nci¿r en el consumo cle la sustancia a tariamente días o semanas sin beber ning.,.
pesar de sus eliclentes consecuencias perjudicia- dad de alcohol.
les. Debc- inr.-srigarse a fondo si la persona que Históricamente, la denominación de ...
consumt 1a .LL:tanci¿r es consciente, o puede llegar aplicada a las sustancias psicoactivas (Salrr
a scrlo. de la naturaleza y _gravedad de los perjui- dríguez, 1994), ha sido sustituida por la ..
cios. dencia, aunque ha surgido otro términc¡ :
de conductas adictivas, en el que se inclur.
Estos criterios sugieren la existencia de la depen- rición de distintas conductas patolósicr,,
dencra fisica. la dependencia psicológica y la de- ciendo dependencia tanto con la inten : - ,
pendencia soctal. pelo no como elementos separa- sustancias químicas como sin la presenc:.,
dos. sino complementarios e interactuantes en un (por ejemplo, el juego patológico) (Bec,..
misnro sujcto. .\si. tc-ndríamos los factores físicos Ochoa y Labrador, 1994).
(tolu-r'nr.rcitr. neuroadaptación y abstinencia), los psi-
colo-tiicos ( aprenclizaje v c¿rracterísticas personaies)
r.ios social.-s (srllpo de allnidad, cultura de grupo y C. ADICCION Y CONDUCTA ADI( "
_ 't' :
*.;*-
j
mcdio untl¡lent.- ).
Tantr¡ 1as ciasiiicaciones CIE de la OMS como '--ri . .-
Cada vez más se incluyen todas las SLISI;- - rli r.--:
otros impr)rtilnter autores h¿rn diferenciado siempre coactivas como una parte de las conduc: . --. aie .,.::..
la depender-rcra lisica de la psíquica. Así, Snuctit vas; es decir, las que tienen base química. . --. r!. Lil-r
(1989) dilerc-ncra la dependencia psicológica de la que estamos viendo aquí, como las c1u.
-
dependencia fisica. Denrro de ésta considera que aparecen clasificadas en el trastorno d.- . -,:ci.i-, .: _
los dos aspecros principales de ella son la tolerán- _ -'t.t: ¡. -
impulsos del DSM-III-R, como es el ca:, _.
cia y el síndrome de abstinencia. como así recogerá -l LI-t l -:
patológico, y otras que no se incluven
el próximo DS\I-I\' ( \athan. I 991). -.rnil" l
obesidad). Un análisis completo tlc c.I. .
Por depenclenc'itt .fi'sica se entiende el «estado de a.1u: -i :
cias puede verse en Becoña (en preparacr -
_ .: .,1 ! ---
adaptación qlle se manifiesta por la aparición de in- Autores relevantes en el campo de il.
tensos trastornos físicos cuando se interrumpe la :,l r) t-lC --.- .:
adictivas, como Donovan y Marlatt (19¡.
-.,n. \ ..-
Drogodependencia.s 505
con mayor rapidez r. 1a duración e intensidad del Elsíndrome de abstinencia tardío aparece -,
efecto deseado se reduzca considerablemente. Para pués del síndrome de abstinencia agudo: esr
obtener el misr¡o efecto anterior tiene que aumen- después de 4 a 72 días de la aparición del sínd: - - \PA-" I .,-'
tar la dosis v frecuencia con que la administra. de abstinencia. El síndrome de abstinencia t.. rtoxicacion .
Dentro de 1a toleranci¿r se diferencia a su vez la se caracteriza por un conjunto de disregulacr -. USO fectu-..:.
toleroncict crtt:ttdu. que cs «un fenómeno en el que del sistema nervioso neurovegetativo y de las - ,hol).Lo: . '
se toma una droga \- aparece tolerancia no sólo a ciones psíquicas básicas, que persisten duran . --,encia en --,
esa droga. sino también a otra del mismo tipo o a largo período de tiempo, meses o años, despu.. ':rcepción.
-
veces de otro conexo: por ejemplo, la heroína pro- conseguirse la abstinencia. Esto, cuando se d¿r. .. --.iento, de ..,
voca tolerancia cruzada a la morfina, y viceversa, y rrea múltiples problemas al sujeto. -itnalyde.,
en menor srado el consumo intenso de bebidas a1- Por su parte, el síndrome de abstinencia cc»t. elicamos ,
cohólicas produce tolerancia cruzada a los fárma- nado consiste en la aparición de la sintomstrr. - -)SM-III-R: ,
cos del tipo de los barbitúricos» (Kramer y Came- típica de un síndrome de abstinencia agudo c:
ron, 197,5. p. 16 ). individuo que ya no consume, al ser reexpues.
La tolerancia está muy relacionada con la depen- los estímulos ambientales que fueron condici, H. POLIT(
dencia. Así. también existe el fenómeno de la de- dos, a través de un proceso de aprendizaje de -
pendencitt tnt-otlo. el cual se refiere a la capacidad pavloviano, al consumo de Ia sustancia de la - .-n conceft
de una droga para suprimir el síndrome de absti- era dependiente (Casas et a1.,1993). E,ste síndr - tendenci¿t..
nencia producido por otra (Echeburúa, 1990). Así, va seguido en el sujeto de períodos de gran ar. :l conocidr, ,
la metadona puede suprimir el síndrome de la abs- dad y miedo porque se ve como en la situación - :adicción i.' -
tinencia de 1a heroína y los tranquilizantes supri- cial después de la abstinencia. Hay un riesu, -:ferimos rL, ,,
men la abstinencia alcohólica. La utilización de la que vuelva a consumir para evitar esos efectc¡> - . ,n 1as persc,:.-.
depcndencia cruzada es la base de la mayoría de gativos que nota en su organismo sin razón apl - :.rl de depr:..'
Ios métodos de desintoxicación (Mothner y Weitz, te. Este síndrome también se Ie conoce pop- :rismo tiem:
1986). mente con el nombre de flashback (Mothn. :1o, el con\*
weitz,1986). -r cuando c.-
-r)Caína qui :
F. SINDRONIE DE ABSTINENCIA _cos para .- :
Tahla 7
Criterri¡s pa|a el diagnóstico de la depenclencia cle sustancias psicoactivas.
scgúr-r el DSM-III-R C-::_-
A ContL) nt1ni1ro. tr.\ clc kts síntomas si-Euientes:
I ( Lrn lrlt-uctrcilt. cl rtso cle la sustancia se hace en m¿ryor
.it;¡tL¡ |r-ctenclía.
cantidad o por un período más largo cle lo q,. \. Ft,,-,
L n 11¡:cr'r per\i\tente o uno o más esfucrzos inÍrtiles para suprimir
nlJ :
.urllrncia.
6'
Uso continuado de la sustancia a pcsar de ser consciente de tener un problema
social. psicológico cr : (i
co' persistente o recurrentc, que está provocado o estimulado por el
uio dc tal sustancia (por ejemp1,,
sujcto sigue consumiendo heroína a pera. de las cliscusiones iamiliares
que prouo.u ,, consumo. d-
clcpresión indr-rcida por cocaína. o de lener una úlcera que empeor¿r
con el alcohol).
l ' Tolerancia notable: necesiclad de incrementar consideiablem-ente
las cantidacles de sustancia (al mtr
un 50 9á) par¿l conseguir cl efecto dcseaclo o la intoxicación. o una
clara disminución clc ios ef'ccto: .
el uso continuado cle la misma canticlacl de sustancia.
\ota: Los siguientes ítems.no pueclen aplicarse al cannabis. alucinirgcnos y
f'cnciclidina (pCp):
S. Síntomas de abstinencia c¿rracterísticos para cada sustanciá.
9' A mcnudo se consume 1a suslancia para-iiliviar o evitar los síntom¿rs de abstinencia.
B '-\lgunos de los síntomas de la alteración han persistido clurante Lln mes como mínimo. o han aparecicl.
tidarnente ii 1o largo de un período prolongadó dc tiempo. r. -
'1'L-i5'r ii los cigarrillos y ¿t otras sustanci¿ts que contiencn nicolina a la ausenciir cle un síndrome -l-rr, crl.r*
-r
: !i!'lcrioro de la conclucta l¿rboral o social no es necesario para la i'aloración clÍnicamente significatjr
cle una depenclc.ncia,erave ¿c lanicotina.
l)\\l-.-
. ---\(r *r ,
Tabla 8
Critcrios diagnósticos plopuestos para el abuso y dependencia de sustancias psicoactivas en el DSM-IV
(adaptado de Nathan, 199 l)
El abuso dc una sustancia psicoactiva implica un patrón de problemas repetidos con la sust¿rncia indicad¿r al
menos por dos de los siguicntcs síntomas:
(1) ia sustancia se toma en mayor cantidad o por un período más largo de lo que el sujeto pretcndía;
(2) deseo persistente o esfucrzos inútiles partr suprimir o controiar e1 uso dc la sustancia;
(3) una -qr¿ln ptrrte del tiernpo se emplea en actividades necesarias para obtencr la sustancia (por ejemplo,
visitar a múrltiples rnédicos o viajar a largas distancias) o toma la sustancia (por eiempio, fumando en
cadena);
(1) uso continuaclo de la sustancia a pesar de scr consciente de que le producc pcrsistentes o recurrentes
problemas soci¿rles. psicológicos o físicos, causados o cracerb¿rdos pol el uso de la sustancil (por ejem-
plo, fumar cigarrillos diariamcnte a pesar de conocer el alto r:iesgo dc padecer cáncer de pulmón: usar
cocaína a pesar de 1a depresión inducida por la mismal o continuar bebiendo a pcsar de tener una írlce-
ra que cmpcora con el alcohol);
(5) uso recurrente de la sustancia resultantc en la incapacidad de cumplir sus principales obligaciones en el
trabaio, escuela o casa (los ejemplos incluyen: a.¡ ausencias rcpcticlas o bajo rendimiento laboral rcla-
cionados c«¡n el uso de la sustancia, b) ausencias. supresiones o expulsiones de la escucla relacionadas
con la sustancia, y c) incurnplimiento de las responsabilidadcs dc la casa y con los niños a causa del uscr
de la sustancial
(6) uso recurrcnte clc la sustancia cn situaciones en las que es físicamente peligroso (por cjemplo, conducir
un automovil o manejar una máquina cuando cstá afcctaclo por el uso de la sustancia);
(.1) renunciar o cvitar importantes actividades sociales. laborales o recreativ¿rs a c¿lusa del uso de la sustan-
cla; y
ticnc rcpetidos problemas legales o interpersonaies relacion¿rdos con la sustancia (1os ejemplos inclu-
yen arrestos v accidentes de tráfico relacionados con 1¿r sust¿rncia ¡, peleas relacionadas con el uso de la
sustancia).
B. La dependenci¿r dc una sustancia psico:rctir-a implica. adcmás. uuo o ¿rmbos de los siguientes critcrios:
(1) tol.erancia, definida por: a) Ia l.recesidad de incrernentar consrdcrablc'1rc1rt€ las car.rtidades de sustancia
para conseguir el el'ecto cleseado r¡ Ia into.ricaciLrn: h1 una clara disminución dc los ct'ectos con el uso
continuado dc la misma cantidad dc sustancral o c) cvidclrcia dc la capacidad de funcionar adecuada-
mente en dosis o niveles en sangre de la sustancia qLLe f¡roduce perjuicios significativcrs en un consumi-
dor ocasional (por cjcmplo. consumir ¡i¡s¡r güi:qui: , r :u cquir,aicntc por día); o
(2) evidencia de abstinencia, caracterizada por un srnclrome cle abstinencia observ¿rdo despuós de la reduc-
cicin o abandono del uso de la sustancin o en rü\fue\trL a un untagonista.
.lndo la intensidad de los mismos, como rt:coqcn a) uso continuado, a pesar de que el sujeto
rs criterios diagnósticos en el apartado de criterios sabe que tiene un problema social, laboral, psi-
-e -gravedad. cológico o físico, persistente o recurrente. provo-
El DSM-III-R también tiene otra categoría para cado o estimulado por el uso de la sustancia psi-
.i abuso de sustancias psicoactivas, refiriéndose a coactiva. y
,.1uellos casos en donde hay un uso desada¡rtativo b) uso recurrente de la sustancia en situaciones
-. una sustancia, pero que nunc¿l llega a cumpiir en que éste es físicamente arriesgado (por ejemplo,
¡s criterios diagnósticos de dependencia. Los cri- conducir estando intoxicado).
:r'ios para el diagnóstico de abuso de sustancias
r¡icoactivas son tres: 2. Algunos síntomas de la alteración han per-
sistido durante un mes como mínimo o han apare-
1. Un modelo desadaptativo de uso de sustan- cido repetidamente por un período prolongado de
-ias psicoactivas caractcrizado como mínimo por tiempo.
.no de los síntomas siguientes: 3. El cuadro nunca reunió los criterios para el
510 E. Becoña
VI.
CARACTERISTICAS CLINICAS -.-.chos d. .
DE LAS DISTINTAS SUSTANCIAS PSICOACTIVAS ,:nlente Cl :
::huible> .,
- i aacl¿l si a ..
La categoría de trastornos por uso de sustanci¿rs A continuación describimos las caractei .. . su altli .r-.-
psicoactivas se ocupa de los síntomas y cambios clínicas más relevantes de las sustancias psi, . ,nclLtiti: -
conductuales de inadaptación asociados al uso más vas más importantes, con la excepción del al- Daclli lr, . -
- SDHHS. 19¡¡ ). dejar de fumar es difícil, a pesar Una faza de café contiene aproximatlamcnte -:,r;_
,; quc uno de cada tres fumadores desea dejar de dedor de 100 a 150 mg de cafeína. una taza de te l¿t
..:ltar (Becoña, 1993). Los que lo dejan sufren el mitad y un vaso de cola Ia tercera parte. Los medica-
rdrome de abstinencia, que depende de la dosis mentos que contienen cafeína suelen tener el equiva_
-::r ia. y que resulta molesto o muy molesto para
el lente a un tercio de una taza d,e café (ApA. lgStj). pn
.mador, y es la causa de que casi el 90 por iOO Ae la Tabla 9 puede verse la cantidad, en miligramos. de
i que dejan de fumar de golpe vuelvan de nuevo a diversas suitancias y su contenido en cafeína.
-ttar. La intoxicación por cafeína puecle darse a partir
La dif'erencia que tiene la nicotina respecto a de 250 mg; esto es. 2-3 tazas al día, aunque otros in-
.ras drogas es que no acarrea problemas en el área dividuos requieren dosis mayores. Con más de
,horal, familiar o social, o éstos son manejables. Sin 1.000 mg diarios (7-10 tazas) pueclen producirse
-:rbargo, en etapas meclias de la vida. especialmente contracciones musculares, períodos de actividacl in-
-rtre ,10 y 50 años, acarrea en un porcentaje impor- cansable, agitación psicomotriz, habla y pensamien-
.,nte de fumadores graves problemas cle salud y en
tos confusos y arritmia cardíaca. Dosis más altas
.¡chos de ellos la muerte (actualmente aproxima- pueden provocar Iigeras perturbaciones sensoriales
--rmente el 13 por 100 de las muertes anuales son como silbidos de los oídos y destellos de luz. Dosis
,.ribuibles al tabaco; esto es. aproximadamente una
de más de 10.000 mg (10 g) de cafeína pueden pro-
-¡ c¿rda siete muertes que se proclucen a diario), da_
vocar crisis epilépticas de gran mal e incluso la
--r su alta incidencia en cáncer de pulmón, enfisema, muerte por fallo respiratorio. Al cuadro anterior se
- :onquitis crónica, problemas
circulatorios, etc. le denomina cafeinismo. Se considera que un consu-
Dada la alta prevalencia de fumaclores en la po_
-,ación, actualmente el 36 por 100 en España, mo normal de café es aquel que está por clebajo de
es 600 mg diarios. Irlormalmente, los síntomas de la in-
ecesario incidir con medidas de choque en esta
toxicación por cafeína surgen cuando la persona
,licción que produce anualmente 411.000 muertes toma m¿is de 4-1 tazas de café al día o i -9 tazas de té
rrematuras en España. Además, en torno ¿ri 100
al día, aunque depende de las características indivi-
ror 100 de los adictos a la heroína v cocaína son duales de cada persona, su nivel de tolerancia y la
-rnadores de cigarrillos, con cilras hut- elevadas interacción de1a cafeína con otras sustancias.
-:l consumidores dc olru\ su\lancias psicóactir ur.
Se considera que el cafeinismo afecta al 10 por
100 de la población (Kaplan y Shadock, 19g1),
B. CAFEINA aunque -eeneralmente se confunde con el trastorno
de ansiedad generalizada o con otros trastornos de
-'omo le ocurría a la nicotina en otras épocas. 1zt ansiedad. dada la gran similitud de los cuadros sin-
.:tención qlle se le ha dado a la cafeína ha sido esca_ tom¿rtoló-eicos en ambos trastornos.
.-t. aunque cacla vez aparecen más estudios acerca Cacla vez se tiende más a incluir a la cafeína bajo
-tel poder adictivo de la misma. Sin embargo. hav la agrupación genérica de xantinas, donde junto al
¡ue clarificar que los valores culturales son impor:_ café también se incluye a Ia teobromina (se encuen-
-1ntes en el consumo de cualquier sustancia v quc tra principalmente en el chocolate) y la teotilina (se
-r ingestión abusiva de café es poco adaptativa. encuentra en las mismas sustancias naturales que
1,a
rLre. de scr el caso. existcn o[ras suslanciás c.ln mlr_ contienen cafeína) (Schuckit, 1 989).
. or poder adictivo, más f¿iciles de obtener v us¿]r e El modo de acción de l¿r cafeína es complejo e
ncluso mas baratas. incide, dependiendo de la dosis. de modo diferente
La caf'cína se cncuentra en distintos productos. en los distintos sistemas corporales. Los problemas
-lparte del café como en el té, chocolate, bebidas de clínicos más importantes rel¿rcionaclos con el abuso
.ola y como parte del preparado de varios medica- de la cafeína son la aparición de sintomatología se-
nentos (Becoña, Lorenzo y Galego, 1990). Sus mcjante a la de los distintos trastornos de ansiedad
:ropiedadcs estimuiantes permiten cievar el hu_ y reacciones de pánico o ataques cle pánico. Se con_
ror, siendo una sllstancia muy enraizacla cultural_ sidera que la caleína puede exacerbar trastornos de
:rente cn gran número de culturas, tanto en las del ansiedad previos (Schuckit, 1989) y, por ello, po_
;afé, como en l¿rs del té y cola. La vida meclia oscila der precipitar ataques de pánico, incrementar la
:'ntre3vThoras. sintomatología agorafóbica, etc.
512 E. Becoña
Tabla 9
Bcbicias que contienen cafeína (dosis)
'.-¡1-i:- ---
- li-.r'l--: -
Bebida Dosis en mg. de cate -
.
..;t:L; -.-
Café(1taza)...,,. r00-150 .::- a . -1.
Cafó instant¡iner¡ t l 100 l- n.r '. -
Café ciescelcinudrr 3-84 - -.1rt-11_--.
Te 1l trzat 70 -
-''!] ¡1.-.' -
Cola(ltazal 50 Pr-rl- , ,.-
Chocolate calrcnt. 3 0--5 0 ,--iL.''-r.
-j C.,- ,
ilesales. Entre lr¡: ildolr.scentes el porcentaje suele ceos es extensa. incluyendo la heroína, la r.r.r - .r üiil rl
ser importante, En la c-ncuesta g¿rllega de 1992 en la metadona, la codcína, etc. Aquí nos v¿lmos - - ¡r.tlr,L-1,,
personas de 1l rr nril\ anos. e1 2.4 por 100 la había trar básicamente en la dependencia a la h¡: :tltttci.l'
probacio en los Liirilr(ls ll meses: cn otras encuestas daclo que hoy no es frecuente la aparición .,, .l]L) Cei
el porcentajc 1L-,rtial rloL¡le. La dependencia suele pendcncia a opiáceos por consumo de meclic.. . : ¡ci ttit. I .
prodLlcirse cuando ..1 corrsnmo cs diario o casi dia- tos automedicados, daclo el control que err. - tttc lra a .. -
rio: en casos ric iitrrL\(1. 1a ¡rersona la toma episódi- las prescripciones, con la excepción actual dc .. Lln tir-n'.-
c¿lmente. pclo nranilre\tit Lut¿t conducta desadapta- prenorfina (Torrens, cn prensa). Ello no int:r -. in¡rectlll . -
tiva cviclente (c(rmr) r-onducir bajo los efectos de la que no se usen muchos dé estos medicamento: ' -. efecto rr .
intoxicaciiin). Daclo que produce menos efcctos fí- pcrsonas adictas a heroína y que no se puedan . -.ISOS. la \1 - -
sicos v manifiu-slo< rllt. ()tras drogas, suelc combi- seguir con relativa facilidad en cl mercado n. - )ercado LL:
narse su consrlnro. ciestle el principio o conforme del mundo de las drosas ilegales. Además har . -iu- pureZá rl -.,
trascurre e1 tienrpo. con alcohol o cocaína. I-os sín- considcrar que la heroína y la metadona tienen ¡ :tllncs c'le l-:
tomas po-siti\ os mil§ curacterísticos que produce el piedades agonistas sobre los receptores opiáe. ':ridón; otr.
c¿rnnabis SOn sensacit)n de bienestar. relajación, ell- mientras que la naloxona y naltrexona las tr¡ .irlud (a trr'..
fbria. adormecimierto r eler¡ación de la actividad antagonistas y mixtas en el caso cle la buprenor' rina).
sexllal. aunqlle los cfcctos sul'rjetivos varían de mo- (Pérez de los Cobos, en prensa). E.l prim. r
do importante en cacla tndividuo. siendo a veces La heroína se administra fundamentalmente - ,iisforia; lu.=
más import¿rntes clLlr- 1a cantidacl dc sustancia con- vía intravenosa, siendo también posible lirnt reloína. c()r:-
sumicla. A continuación siguen otros efectos, como («chinos») o esnifarla. Aunque hasta hace uro-s .r .iedad, con, ,
letargo, anhedonia y prolllemas de atención y mc- la r,ía intravenosa era casi predominante, en los -. .t siguient.'
moria, entre otros muchos descrjtos y estudiados mos años se va dando ula paulatina aparición rt. -1e encontr'.1: '.
(véase Camí. 1990; Rclman. 1987). En todos los vía fumada como alternativa a la intravenosa por renci¿r.
infbrmes sobre el cannabis se concluye que su con- riesgos de contasio de distintas infecciones por c, La intori.,,
sumo puedc'producir' {ravc\ riesgos plra la salud, partir agujas ¡,, especialmente. por el sida. --os, como t.:- .
Drogodependencias 513
Puede igualmente producir alteraciones del estado Como estimulante del SNC. sus efectos son si-
le ánimo, dificultad paraexpresar los pensamien- milares a los de la cocaína. Muchas personas de-
.os, despersonalización y alucinaciones visuales. pendientes de 1as anfetaminas tienen como antece-
Estos suelen considerarse efectos agudos. Los dente el uso de esa sustancia u otras para suprimir
:-fectos crónicos incluyen estados psicóticos pro- el apetito o controlar el peso. El consumo de anfe-
.ongados, depresión, estado de ansiedad crónica y taminas en personas con abuso o dependencia de
:¿rmbios crónicos de la personalidad (Weiss y Mi- las mismas puede ser episódico o crónico y diario
.lman, l99l). Algunos consumidores pueden se- o casi diario. En el primer caso hay un alto consu-
:uir teniendo algunos efectos durante meses o mo episódico seguido por varios días sin consumir
-iños, especialmente trastornos perceptivos (por (por ejemplo, sólo los fines de semana); en el se-
:iemplo, percibir con mayor intensidad que 1o gundo, el consumo puede ser alto o bajo, pero a
rormal colores y sabores). La experiencia con alu- diario o casi a diario. El consumo se detiene cuan-
--inógenos se considera que varía de modo impor- do queda físicamente exhausto o no puede obtener
,lrnte de persona a persona e incluso en la misma más anfetaminas. El síndrome de abstinencia de las
rersona bajo distintas condiciones (Weiss y Mi- anfetaminas cuando la dosis es alta dura muchos
lman, I 991). días. Para evitar los efectos negativos de la intoxi-
Los alucinógenos tienen con frecuencia reaccio- cación por anfetaminas también suelen consumir,
:es adversas, como reacción aguda de pánico, alu- abusar o depender del alcohol, sedantes, hipnóti-
:inaciones desagradables, miedo por las sensacio- cos o ansiolíticos para aliviar los efectos desagra-
res experimentadas, estados psicóticos, flashbacks dables de la intoxicación por anfetaminas (APA,
-r volver a revivir posteriormente 1o que experimen- I e87).
.ó durante la intoxicación pero sin estar ahora pre- Algunos de los efectos conductuales más impor-
:ente el consumo de la sustancia. Los Jlashbacks tantes que producen las anfetaminas son depresión,
:ueden ser recurrentes y mantenerse mucho tiem- irritabilidad, anhedonia. falta de energía. aislamien-
:o. incluso años. to social y, en otros casos. disfunción social, idea-
ción paranoide. alteraciones de la atención y pro-
hlemas de memoria. En ocasiones. tanto con
G. ANFETAMINAS cocaína conto con anfetaminas, se incrementa la
O SIMPATICOMIMETICOS agresividad del consumidor en el período de intoxi-
DE ACCION SIMILAR cación.
D¿rdo el importante consumo que ha habido de
En este grupo se incluyen las anfetaminas. las cier- anfetaminas hasta años recientes y el rápido des-
.roanfetaminas y las metanfetaminas, así cor.no censo de personas dependientes a las mismas,
.rquellas que tienen una estructura similar a las ¿ut- cuando se introdujeron restricciones importantes a
,L-taminas (como el metilf'enidato) o que suprimen su consumo, es un buen ejemplo para mostrar có-
:1 apetito. Su vía de administración es oral o intra- mo la dependencia de cualquier sustancia psicoac-
i enosa y algunas, como las metanfetaminas. tam- tiva depende de la sustancia y de su poder adictivo
¡rén se pueden inhalar por vía nasal. (dosis y vía de administración). del consumidor y
Las anfetaminas son, como la cocaína. estimu- del ambiente (San, en prensa. a). Todos estos facto-
:intes del SNC. Descubiertas en Ios años treinta se res hay que tcnerlos sicmpre presenles.
-rtilizaron inicialmente como descongestivo nasal.
Sus efectos euforizantes produjeron pronto los pri-
rneros casos de abuso. Sus principales efcctos son: H. DEPENDENCIA DE FENCICLIDINA
:levación del estado de ánimo. disminución de la (PCP) Y ARILCICLOHEXILAMINAS
.ensación de latiga y del apetito. Finalizados los DE ACCION SIMILAR
:lectos estimulantes iniciales surge la depresión y la
-etiga. La supresión súbita del consumo provoca la Dentro de estc grupo de sustancias psicoactivas
.rparición de signos contrarios a la intoxic¿rción: se incluyen la fenciclidina (PCP) y aquellos com-
.lgotamiento, sueño excesivo, apetito voraz v depre- puestos que actúan de lorma similar como son la
.icin (APA. 1987: San, en prensa. a). quetamina (ketalar) y el tiofeno, que es análogo a
516 E. Bec:oña
la f'enciclidina (PCP). Estas sustancias admiten la estadio inicial de excitación va seguido de otr ;ia de consu:
vía oral. intr¿rvenosa. fumada e inhalada. En la calle. sedación, pudiendo fiecuentemente aparecer rece y tiene -
a la PCP se Ie conoce con el nombre de «poivo de final de irritabilidad. Posteriormente, aparece:-. mento de lu -
ángelr. Se comenzci a utilizar como anestésico en tomas físicos como dolor de cabeza y trasrr conseguir el i-
1957 y fue suspendido su uso por los efectos se- gastlointestinales (ntiuseas y vómitos, diarle-, renciarse un¡ -
cundarios, ya que producía un estado mental simi- lambres intestinales, etc.). Si el consumo de . rre en much, .
1ar al de los alucinógenos. Se utiliza de mezcla con lantes persiste a lo largo del tiempo surgen Lrr medicación..
otras sustancizrs y su uso suele sel a altas dosis y de mas más graves de tipo pulmonar o circul¿rt de una la dep.
forma episciclica. Es raro encontrar personas con anemia, hepatitis, trastornos clel desarrollo. '. dencia, que L'.
una clara dependencia a esta sustancia que, por ropatías, etc. (Schuckit, 1989; Weiss y Mi1-- con las otra> .
otro ltrdo, se usa por sus propiedades euforizantes. 1991). Esto es, los efectos de los inhalantc. :cnsa preocL,:
Sus principales efectos son distorsión de las imáge- desvastaclores. con la aparición de problemlr: la sustancia ', .
nes, cambios en el estado de ánimo, aiucinuciones. cos y mentaies graves. Las complicaciones ren-, - :'¿r laboral. l¡i::-.
desorientación, mareo, tzrquicardizr, sudoración e hepáticas en estos consumidores son frecuenti. tosalargop-.
incremento dcl tono muscular (Martín. 1994). Para los cor-rsulnidores irabitualcs de inhal., le la deteccr
ést¿r suclc ser la droga de elección, ounQue prL: .os años qr.r;
también haber probaclo otras. -En otros casos - - .or, 1991).
I. INHALANTES encontrado depenclencia dc distintos inhalanr. De las s1., ,
éteres. cetonas y glicoies son comunes en mírltiples El -qrupo dc fármacos incluidos cn los sed¡' -rntes a lc¡ -.,--
productos comercializados. En sustancias como pi:- hipnóticos o ¿rr-rsiolíticos es amplio y de una . - rr/biológic.,.
gamcntos, disolventes y aerosoles pueden encon- me utilización por parte de la poblacién, tAntL' -'. 1as de p- .
-l989).
trarse estos productos fácilmentc (Schuckit, vel méclico como de automedic¿tdos (Dupr ltegratir.o: - -
Es la droga de los pobres y dc ios marginados. Su Saylor, I99i). Dentr-o de los hipnóticos. tami.:- E,n cont:-., -
obtencicin es f¿hcil v gratuita o de muy bajo coste. Sc veces denorninados «píldoras pár'o dormir». ¡.ri,: -rológico. q,. -
consllmc introduciendo la sustancia en un plástico éste su uso más habitual. se incluyen ias benz, . - rra exp1ic.,:'
e inhalando sus g¿rses o impregnando cor-r la sustan- cepinas. los barbitúrricos y otras sustancias (cr)ri' -,rnductuai
cia un ptrño y lucgo aspirar los vapores del misrno hidrato cle cloral). Las benzocliacepinas tarnt'¡i.. :v,a|e, QuC r"
por la nariz. La cluración de sus efectos cs corta. utilizan para cl tratamiento de la ansiedad r, :, .rplicar disl.-
E,l consum«r de cstas slLstancius.plopias de zonas tipo de medicación psicozrctiva más comúnn'.- tIe f e collLr. ;
-,
marginales. suele comenzar a una edad muv joven. prescrita. A pcsar cle que hay enormes variaur -rue para 1u ,
En nueslro medio sc cla escasamente estc proble- clc unas a otras sustancias, todas tienen cl potcr. - --rtno del cr'--'
ma. Los electos ploducidos por cada inhalación tJe producir síndromes de intoxicación y abstr -- :elo biolo-cr -
duran só1o unos pocos rninutos, aunque pueden re- cia. Son una de las sustancias de mayor potcr - -ion que a .'
alizarse múltipics inhalaciones para conseguir efec- de abuso y clepcndencia en la actualidad, espc- ,rplicar el .
tos dc hor¿rs. Los electos psicoactivos iniciales son mentc fuera del control n-rédico. -.rn otras. c.:
sinrilarcs a l¿r into\icación alcol-rólica (Weiss ¡r Mi- La ingestión de estas sustancias suele hli.- :ces bajo ;
llman, 1991). buscando sus usuarios el ntsh. para por vía oral. El caso más frecuente de depentlr': -.:rlmente. .. .
conscguir de modo rírpido un sentimiento dc eufo- o abuso es después de una prescripción mc- .rciológica. -
ria que puede eslar asociado con una sensación de p:ir:a el tratamiento de la ansiedad o del inson, .. conside r"-
.
flotar y dcsaparicicin de las inhibiciones. Este cuando la persona incrementa l¿r dosis y la frccL.- .s de la so¡ ,
Drogodependencias 517
:ia de consumo. El fenómeno de la tolerancia apa- dicada a nivel mundial para el tratamiento de la an-
:ece y tiene que entrar en una escalada de incre- siedad, insomnio. epilepsia, etc. (Dupont y Saylor,
:nento dc la dosis o frecuencia del consumo para 1991). En 1971 se identificaron los receptores de
.'onseguir el mismo efecto del principio. Suele dife- las benzodiacepinas. siendo parte del complejo re-
:enciarse una dependencia física «normal» que ocu- ceptor GABA. La benzodiacepina más utilizada es
:re en muchos casos, dado que de suspenderse la el diazepam (Valium) y es. por tanto, la sustancia
nedicación se produciría síndrome de abstinencia, de mayor abuso, aunque éste suele producirse den-
le una la dependencia «real» o síndrome de depen- tro de la propia dosificación del paciente que las
Jencia, que ocurre cuando la persona, como sucede está tomando para un problema de tipo médico
;on las otras sustanciers psicoactivas, tiene unx in- o psiquiátrico. En las encuestas epidemiológicas.
:ensa preocupación por la búsqueda y consumo de como ya hemos visto. aparece un uso importante
r sustancia y ello le altera el rendimiento y la esfe- de las mismas por parte de la población.
,a laboral, familiar y social (APA, 1987). Los efec- Existe otro patrón de consumo de estas sustan-
:rls a largo plazo varían de la sustancia consumida, cias que se da básicamente en jóvenes, consistente
lc la detección temprana o tardía de su abuso y de en consumirlas para incrementar o disminuir el
os años que la Ueva consumiendo (Dupont y Say- efecto de otras sustancias psicoactivas. Por ejemplo,
or, 1991). consumirlas con opiáceos para incrementar el efec-
De las sustancias anteriores destacan las benzo- to de la misma, o con cocaína o anfetaminas para
-iiacepinas. que es la medicina psicotropa más me- contrarrestar los efectos estimulantes de ambas.
Tabla 10
Diferencias entre el modelo de enfern.redad y el dc autocontrol para las conductas adictivas
-'_Tr-
(adaptado de Marlatt y Gordon, 1985)
-:11-1'11;l .1.r.
Tópico Modelo de autocontrol b{odelo de enfermedad ----lCr¡! ..
, i¡lur.': : :
Lugar cic control La persona es capaz de autocontrol La persona es víctima de fuerzas que ..- --.-:r-iLlr i I
tán luera de su control --llL!. -
, ( ''
Objetrr ri Elccción del abstinencia o mo- El único objetivo posible es la al.: -'l \ ¡'.,-:'-
clcl tlatanri cnto deración nencia
- :. .l'.1 - I ::- -
Filosofí¡r Fomento de la separación del self de la Iguala el selfcon la conducta -'- r -:-l -
clel trat¿Ln'ricnto conducta . -,':11:l ,,
Aproximacicin cducativa Aproximación médica/basada en la .: \-- >.r. ,-
fermedad : (,., :
- -tr a -:-..
Proceclimiento Enseña habilidades conductuales de Conlrontlción y convcrsión -:
de tratamientcr afrontamiento Apoyo grupal
Dogma cognitivo
Apr orimacrcin general Búsqueda de comunalidades través cle Cada adicción cs única
¿r las adiccir¡ne-s las conductas adictivas
Las adicciclnes están basadas cn h¿ibitos La adicción está basada en proccsLr:
desadaptativos siológicos
El modelo moral. basado en la moralidad cristia- dizaje, en Ia Tabla 10 presentamos las cara..
n¿r.afirma que el adicto no es capaz de resistir la cas y diferencias entre uno y otro.
tentación por su pobre o baja moralidad (inmorali-
dad. en suma). siendo considerado como un inmo-
ral. r,icioso. desprecinble. etc. B. LA HIPOTESIS
Dentro del modekr biológico se han propuesto DE LA AUTOMEDICACION
explicaciones basadas en c¿rusas genéticas, como
ocurre en el alcoholismol cambios metabólicos En el campo de las drogodependencia:
para explicar 1a obesidad: una «noxa» interna para brado relevancia en los últimos años la c-
explicar la depender-rcia de la heroína; etc. Sin em- nada hipótesis de la automedicación, que :
bargo. los clatos científicos. sin negar que en un que de los pacientes que desarrollan trl.
porcentaje reducido de casos la conducta a explicar por abuso de drogas, una gran parte lo hr. -
puede tener esas c¿lusas. no explican ni la mitad de que sufre trastornos endógenos con sustl'¿1.t1
las conductas adictii'as. gico que, directa o indirectamente, Ie iL:
Aunque tanto Ltn modclo como otro implican un consumo de sustancias psicoactiv¿rs cr.:
gran reduccionismo. sí es cicrto que la sociedad ma de autotratamiento. Por tanto, en mu¡
suele creer qlle uno u otro modelo son los adecua- ellos el intento repetido de orientarlos a ,-.
dos para explicar y comprender las conductas adic- nencia, después de varias tentativas fallidl.
tivas, cuando la realidad no es esa. sintoxicacicin, se puede calificar desde csi.
Para poder ver las diferencias entre el modelo de de vista como (Casas, Pérez, Salazar r
enf'ermedad y el de autocontrol basado en el apren- t992):
Drogodependencias 519
1. Inútil, porque la mayoría de las uclrogas, «sano» en un individuo «dependiente». Sin embar_
r'r.leI], por desgracia, una mayor rapidez de acción go, la dependencia no se produce en todas las per_
{eneran menos efectos indeseables que los psico_ sonas que ingieren la sustancia. La hipótesis cle la
:rmacos utilizados en la actualidad, por lo que los automedicación ayudaría a explicar por qué unos
-..lividuos previamente enfermos que entran
en van a hacerse dependientes y otros no.
. ,ntacto con ellas difícilmente aceptarán, poste_ Casas y sus colaboradores (1992) sugieren la
,rrmente, una medicación psiquiátrica reglada. existencia de tres tipos de adictos alaluz de esta hi_
)-. ConfraprodtrcenÍe. porque necesitando con_ pótesis. E,l primero serían aquellos pacientes sin
.rlir y estando estas sustancias sujetas a la oferta trastornos psíquicos concomitantes y con un nivel
..'qal que impide conocer su calidad y pureza, cl in- socioeconór¡ico v cultural medio-alto. Estos pue_
viduo adicto se encuentra continuamente aboca_ clen llegar a tener un equilibrio estable con Ia de-
- , a complicaciones infecciosas y tóxicas que clebi_ pendencia, pudiendo mantener una vida familiar y
ln su salud. social estable. incluso laboral, aunque gastando uná
3.Cruel para el propio paciente, pues se permi_ gran cantidad de dinero para mantener su adicción.
: rlue el autotratamiento que busca para una enfer_ Sabrían dónde está el límite y ello les permitiría
-.¡dad clue padece le aboque a conductas delictivas
mantener el equilibrio. Pueden deiar la sustancia,
.r una posible muerte por sobreclosificación o, ac_ pero vuelven inmediatamente a consumirla por el
.-rlmente, por sida. malestar (síndrome de abstinencia) que les provo_
+. Frustrctnte para los equipos terapéuticos, ca. E\tas personas son las que no acudcn nunca íl
--rcs estos pacientes tienden a present¿rr recaídas tratamiento. ni a centros públicos ni privados.
- lv frecuentes. independicntemente cle cuál sea el
:.o y calidad de los abordajes terapéuticos instau_ . El segundo tipo está constituido por aquellos pa_
'.,.1os.
cientes sin patología psíquica concomitante. pero
con un precario nivei socioeconómico y cultural. En
-5. Peligroso para la salud pública. por cuanto la este caso. precisan la sustancia para llevar una vida
:rsistencia en el consumo rlegal v las recaídas nolmal v suelen conseguirla a través de actcls delic_
. ,mpulsivas favorecen, incluso en pacientes con un tiros. No tienen ninquna motivación para abando-
:o nivel intelectual y cultural. el uso de matcrial nar la sust¿rncia ), cuando acuden a tratamiento lo
-r cctable compartido
y, por tanto. la extcnsión del hacen por moti\ os económicos o por apreciar un
ntagio por el VIH. fuerte incremento de la tolerancia. Si deja esta sus_
tancia tiende a abusar de otras distintas.
Esta hipótesis se fundamenta por una parte en el El tcrcer tipo lo constituyen los pacientes con
:.cubrimiento de los receptores opiáceos en el trastornos psíquicos concomitantes. E,n este caso.
\C en 7973, y en el descubrimiento de sus li-uan_ padecen previamente un trastorno de personalidad.
\ endógenos específicos, inicialmentc delomina_ La sust¿rncia les ayuda inicialmente, pero luego les
: encefalinas. después endorfinas y actualmcntc lleva a conductas totalmente anárquicas y á"r..-
.rrtides o péptidos opioides. Al descubrirse
en la tructuradas. Dada su total falta de motivación y los
:cada de los ochenta y noventa clistintos recepto_ problcmas que acarrca su adicción, suele ser lleva_
:: específicos p¿lra cliversas moléculas psicoactir,as. do u obligado a desintoxicarse. recae posteriormen_
rno las de las benzodiacepinas, los antidepresir,.os. te, y entra en un círculo vicioso donde es sum¿lmen_
.',. sugiere que cualquier sustancia procluce aluúrn te dificil que abandone la sustancia. Al tiempo, se
rcto en el SNC, ef'ecto que implica interactu¿rr cor-r dan cuenta de su imposibiliclad para abandon¿rr Ia
.:r'r-rcturas cspecíficas. En el campo de
las clrogode_ sustancia v pueden incrementar los sentimientos
:ndencias ello viene a indicar (Casas et at.. iyyZ) autodcstructivos (sobredosis. sida. «lelincuencia).
.e la sustancia exógena (heroína. cocaína), actuan_ siendo impredccible su evolución a largo plazo.
repetidamente sobre determinadas estrlrcturas Aunque esta hipótesis fue inicialmente planteada
-l¿inicas (los sistemas de neurotransmisión/neuro-
para Ios opiáceos v psicoestimulantes. igualmente
,rciulación centr:ales). facilitado por el ambientc es aplicable al alcohol (Khantzian, 1990)y a la ni_
.¡erior (habitualmente desradaclo y hostil). clesen_ cotina {Fag.erstróm. 199 I).
.,Jenan una serie de camhios moleculares y lirncio_ Lo que viene a plantear esta hipótesis es clue el
,les en el SNC que transforman a un iñvidicluo consumo de drogas es una tentativa evasiva y equi_
520 E. Becoña
Tabla 11 -
Argumcntos a favor y en contra de la hipótesis de la automedicacicín -tsrcos soll
(Pérez y Casas, 1992, p.325) . rtnado, tolr:.,
rcionadas .,
Itllt¡t.' ,,rs similare: ..
Utilizacirín de sustancias psicoactivas. denominadas actualmente «drogas», como arm¿ls terapéuticas en la . Varios est---
pa hrsttirica plcvia a 1os psicofármacos. -ol1o de la t
- L¡Ls drt¡-las r de tcrminados psicofármacos poseen mec¿rnismos de acciírn similares. ! ¿rmbienti-r.
- L':o c1.'drosas. como ias anfetaminas, para predecir la respuesta de algunos medic¿rmentos utilizados en j, :ncia (po1' .
c1 ui utrir. ,!erancia .,¿
De:ctipcitrn cle casos clínicos. -,
.: la dis¡ttt::
Ell t t¡nrr,t - rnvertir la .-
- \'ariabilirl¡d de1 efccto de las drogas en función de: -o efl conrf'-.:
¡ Patrón d¡- s-or1\uIIto. .: la funrt,i -
¡ -f ie nrpL¡ cle con-sumo. --'ntro de , .
o Esr¡rlL¡ clintctt basal. -tl¿l mism¿1 a-:'
DilicultrLd p.r'e cLrferenciar entre trastornos primarios y drogoinduciclos. -' acción irf
..¡ de un r: ,
'\C) (Jalk.
:r'encia de ..--
vocacla de autoterapia (Salazar, Casas y Rodríguez, El modelo del aprendizaje explica la con; -
:'riencia i.... -
1992¡. Aunque cl consumo de drogas ilegales, como un fenómeno de adquisición que sier-re , rperiencirr ,
como la ¿iurrrnterlicación. equilibra al que la utiliza, leyes, las del condicionamiento clásico, opcr:rr' :csentes -r :
a la larga el eIc-ctrr puede ser más contraproducente. aprendizaje social. Sin embargo. se han prop.., -r 1a sustür':,
Existen d¿rtrt¡ r-r far or v en contra de esta hipóte- explicaciones a partir cle cada uno de los dis. .lsma, t¿rl -
sis (véase 1a Tabla 11). Se ha encontrado evidencia paradigmas de aprendizaje, aunque en el mon:, - ,liente: cu ir ,
de la mism¿r. p¿1r.ialrrrente. elt pacientes esquizofré- actual el que permite explicar de modo compr., - - r. EI) se .,.-
-
nicos (Pér ez r Casns. 1992) v en pcrsonas con tras- vo la conducta de consumo de drogas es 1., . onada. R,
tornos de pc.rsonalirlacl (Tejero y Czrsas, 1992), en- aprendizaje social, especialmente para su iniciL lrbiental r': -
tre otros. aunriue su clelimitación es la mayoría de 'rulo condi,
las veces difíci1. -'da (RC r ..,..
Lo quc si es cierro es que de confirmarse la hipó- 1. Condicionamientoclásico J signo oF,.-.
tesis de ia autontedlc¡rcicin tendría enormes reper- . -S Se plod .. - -
cusiones para 1a uctu¿rl cliscusión sobre la legaliza- La observación por parte de Wikler (1965) d. ,toriu. El ¡ :-
ción de las drrtgar (C ¿rsas. 1992) cara a erraclicar el aquellos individuos que habían sido adictos ., , r animalü\
claño que las e.\i\tL-nti\ actualmente en el mercado opiáceos a veces mostraban señales de un síncl: I que LlI, .. -
neero produccn en 1¿r salLrcl c1c sus consumidores de abstinencia -meses más tarde de haberse rL. ,.\pucstas ü -
por los aclitiicts qlle couticnen. ya que el nivel de nistrado la última dosis-, como lagrimeo. bo\i- .lniento ( \., -
pureza de ias droga: L-n e1 lrerc¿ldo negro es muy y rinorrea, le llevó a plantear un proceso de c, Dnadas cr,::- .
bajo en el punto Iinal de vcuta en 1os países indus- cionamiento, que él denominó con el nom[.i. ,s
inconrli.:
trializ¿rdos. cspecialmente en 1a heroína. síndrcnrc cle abstinenciu condicionadc. _E,sto int¡ debilita,
.-ra
ba que los episodios de abstinencia (respucsr.. . .da que 1;.r'
condicionada) se habrían apareado con estln- , ando. Esi.,
C.
.
TEORIA DEL APRE\DIZAJE ambientalcs (estímulos conclicionados). Esto i:: lo largo tr.
ca que la presencia de estos estímulos o el hech .:fine el fc:r
San Agustín decía acerca una cornpuisión sexllal
c1e pcns¿rr en ellos puede provocar una respuestii - ste efecto .¡
que padeció durante mucho tiernpo Que «cll¿¡clo r. dicionada de abstinencia (Graña, 1994). ..ilo er ot1'-:-
da satisfacción ¿rl deseo. el hábito se rcfuerza, y A partir de acluí, tanto Wikler como posrrl ,arcía, 19f;-
cuando cl hábito no encuentra lesistcnci¿rs a su cre- mente otros autores han elaborado explicaer Otro fen' '':
cimiento, se tr¿lnsforma en una urgencia compulsiva. basad¿rs en el condicion¿rmiento ciásico efl SLr:: :Spuestl.\ (
Tales eran las fuertes cadenas que me oprimían». depenc'lientes de la heroína. donde los colrc¡:- trvado qui
Drogodependencias 52l
--rsicos son los de síndrome
de abstinencia condi- roína manifiestan efectos subjetivos y fisiológicos
-.onado. tolerancia condicionada y respLlestas con- similares a los de la heroína cuanclo se les inyecta
-icionadas compensatorias, respuestas condiciona- en su lugar una solución salina (O'Brien y Jaffe,
..t: similares y deseo o quercnciu. 1993). Generalmente estos efectos, similares a los
Varios estudios han demclstrnclo que en el clesa- de los opiáceos, aparecen inmediatamente después
- ollo dc Ia tolerancia
a las drogas distintos estímu- de una autoadministración y no en los momentos.
,s ambient¿rles influyen en la aparición de la tole-
.
anteriores a la inyección. Este fenómeno ha sido
,ncia (por ejemplo. Siegel. úl O¡. Este tipo de ampliamente estudiado dentro del ef'ecto placebo
leruncia se denomina conductutLl. diferenciándola (Becoña. 1990; White, Tursky y Schwartz, 1985) y
-: la disposicionctl (capacidacl del organismo para más recientemente empieza a conocérsele con el
- rnvertir la droga circulante por el torrente sanguí- nombre de eJbcto pluc'ebo ele las drogus (O,Brien,
ro en compuestos inactivrts que son L.xcretados) y Childress, Mclellan y Ehrman, 1993). En este caso
: la .farmut'oclinrimicu (ctrmbios que se producen se asume que los ef'ectos similares a la droga o
,Jntro de los sistem¿rs afectados, de manera que «efectos placebo» han sido condicionados cn el pa-
:.ia misma cantidad de droga que aicanza sus sitios sado mediante la exposición a las drogas bajo cir-
: acción produce un ef'ecto menor por la exisl.en- cunstancias similares. De modo relevaite. O,Brien
- ¿ de un mecanismo de contraadapt¿rción en el y sus coiaboradores (1993) indican que con los pa-
.\C) (Jaffe. 1982). La rolerancia conductu¿rl. a cli- radigmas de condicionamiento probablemente ge-
;rencia de las anteriores, no sólo depende de la cx- ner¿ln, tanto en animales como en humanos. res_
-rriencia directa con la droga, sino
t¿rmbién cle l¿r puestas condicionadas similares a los efectos de Ia
, .periencia con las señales ambientales clue están droga en los estimulantes (anfetaminas y cocaína) y
:c'sentcs en el momento de la autoadrninistración l:espuestas condicion¿tdas compensatori¿rs en los
.: la sustancia (Siegel, 1981). E,l dcsarrollo de la opiáceos.
--isma. tal como describe Graña (1994),
es cl si- También se ha postulzrdo que las respuestas con-
--.lcnte: cuando una droga (estímulcl incondiciona- dicionadas compensatorias, que median en la tole-
- ). EI) se administra. su efecto (respuesta incondi- rancia conclicionada. influr,en en la quercncia o de-
. ,rnada, RI) va precedido de Ia cstimulación seo v en cl sínclrome de abstinencia (Graña y
rbiental en que se realiza la administración lestí- C¿r'rrtl¡1cs. I991 ). Daclo quc las respuestas concli-
r¡lo condicionado, EC). Si la respuesta condicro- cion¿rcl¿rs compensatorias pt'oclucen una mayor dis-
,da (RC) que elicita la estimulación ambiental es posiciou a aclministrarse Ia droga. ello implica que
.; signo opucsto al efecto de la clroga (L,I). entol- 1as i.l.lismas incrementan el deseo o qucrencia dc la
-:s se producc una respLrcsta condiciontttl(t (.otnpen- di'oga.
;roria. El ejemplo característico se ha encontrado
. . animaics a los que se Ies había inyectado nror-fi-
'-: Que produce analgesia. y quc se obsen,aron
2. Condicionamientooperante
:\puestas clc hipcralgcsia en pruebas de conclicio-
Lnricnto (Siegel. 1975). Si est¿rs resplrestas concli- El condicionalnicnto operante permite cxpiicar la
. rnadas compensatorias inter¿rctúan con Ios elec- conducta y especialmente Ia cle autoaclministración
: incondicionados de la droger, el resultado serlr de drogas. Como sabemos. el condicionamiento
-::a debilitación progresiva de dichos efectos a me- opcrante ha explicado el hecho c1e que la probabrli-
- .la que las respucstas condicionaclas vayan cre- dad cle ocurrcncia de una conducta está clcterntina-
. :ndo. Esta ¿rtenuación cie lcls efectos cle una droga da pclr sus consecuencias. Cualcluier evento estimu-
io largo dc la repetición de sus aciministraciones lar que incrcmeltte lu probabilidad de una conducta
:fine el fenómeno cle la tolerancia conclicionada. operantc se denomina cstímulo reforzante o reforza-
,.te electo se ha encontrado no sólo en la morfina. dor. La droga es un potente refbrzaclor. LIn evento
i.)o en otras drogas psicoactivas (véase Graña y estimular que precede y establece la ocasión para la
r.rrcía, 1994; T'rujillo. 199:1). emisión de una respuesta que va segr-rida c1e reforza-
Otro l'enómeno que se ha observado es el de las miento se denomina estímulo cliscriminativo.
)ptrcsfus conclicir¡naclo,s sirnilares; esto cs. se ha ob- Los opiáce os puedcn funcionar elicazmente
:r'\'ado que algunos sujetos dependientes cle la he- como reforzadores positivos. Distintos estudios.
522 E. Becoñct
sumo.
al eliminar el estado aversivo generado por el sín_
drome de abstinencia. De este lodo, el ápiáceo,
2. Estas cogniciones están acumulaci.,.
al vés de la interacción social en el curso de-l ¡
funcionar como reforzador negativo, mantiene 1a _
junto de síntomas 1, signos orgári..,, y psiquicos por uso tle sustancias psicoactivas: D.
min¿rcicin que se aplica a toclas aquellas
que aparecen inmediatamente después cle inte_ susttr:
que introducidas en c1 organismo af'ectan
rrumpir cl consumo tlel opiáceo clel que la persona o al ,
cl cstado c'le áninto v l¿r c«¡ncjucta, &cárreáfl tr.,.
cs dependiente. _Este stndromc t_lc abstinenc'ia
suele nos incapacitantcs para el consumidor en la .,
s:r cspectacular. percl poco peligroso para el sujeto.
._. personal. labor¿rl. social. física y familiar. ,u
Síndrorne dc ahstincncia-condiciolaao
len oliaceos;, síntomas y estaclos caractcrísticcr, .o-,, lni,i,..,.
C-onsisre en la aparic.itin dc lr sintomatololra
típica ción,.tolerancia. depenclencia y sínclrome dr- ,.
cle un síndrome dc abstincncia asurlo
.in irdiri_ nencl¿t.
",.,
ch-ro clue \,¿r no conslurre. al ser riexpuesto.
incluso Vías de ¿rdministración tle clrogas: Hay seis vías
mcscs m¿is tarde. a l<¡s estímulos ambientales d-
ciue milrislración: Ia oral. cn iormlr tlc inccsti,rt
fireron conclicionac-los. a través cle un proceso
de cada o sublingual; la pulmonar. in¡ujrJo ,l
aprcndizajc dc tipo par4ovizrno. al consumo
de la mrcla: llr nasul (csnilhcla): la intrurell,,.
sustancia cle la c¡-rc er:a dependiente.
^, rntramuscular o subcutáneii; lzr rcctal. La r l,
Sindrome de abstine¡rcia tardio (en opihceos): ¡r
Apare_ monar es la que permile que la sustanci¿i . : _
ce dcspuós clel síndrome cle abstinirciu ogudo;
con mayor rapidez al ccrcbro. en menos clu
es, despuós cle.l a Ll días clc la aparició'n
clel "ru,
sfu_ segundos en la mayoría de ias sustancias p-stci,._
drome de abstinenci¿r. Se caracte.iro p.r. un con_
vas. En todo caso, l¿r closis y f).ecuencia ile
c,
Drogodependencias 527
mo es importante para pasar del uso al abuso y a la Todos son estimulantes menores que quitan el sue-
dependencia. ño, aumentan el estado de alerta y tienen discretos
Xantinas: Conjunto de sustancias, entre las quc se in- efectos sobre la presión arterial. Se considera que
cluye la cafeína del cafó. la teobromina presente en producen niveles de dependencia modestos en
ei chocolate y la teofilina prescnte en el té negro. comparación con las otras sustancias psicoactivas.
X. LE,CTURAS RECOMENDADAS
BecoroA, E.; Pelor'trrrrr,is, A., y Ger.cÍa, M. P. (1994). nical textbor¡k o.t' oddictit,e ¿lisortlers. Nueva York:
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IV. Relacir
v. Obesid
.1. L.
D.
C.C
D. i-
E. (.
VL Teonr
\rII. Futur¡
\-III. Resum
IX. Térmir
X. Lectur:
XI. Referrr
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1. Histor
Estuba
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3. Métoa
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4. Clnd
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5. P$.r
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MANUAL DE PSICOPATOLOGIA'VoIumen - Ailryl
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