Llamados para Servirle A Dios

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LLAMADOS PARA SERVIRLE A DIOS

Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios,
para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable.
1 Pedro 2:9

Objetivo:
Concientizar al pueblo del Señor sobre la importancia de conocer que Él nos ha llamado para
anunciar su santo Evangelio.

Introducción:
Algo de lo que debemos ser conscientes es que Dios a sido el que nos ha elegido a nosotros,
desde tiempos antiguos el ha llamado a hombres y mujeres: Abraham, Moisés, Josué,
Débora, Sansón, Rut, David, María, Pedro, Juan, Pablo, Priscila, etc... ¿Que tenían en
común? ¿que vio Dios en ellos para que los escogiera?, por tanto es necesario meditar para
que hemos sido seleccionados y estar seguros que si él nos ha llamado, seremos,
transformados y capacitados para la obra que el desea que realicemos, en la parte final del
verso vemos el propósito principal que es dar testimonio de lo que Jesús hizo, el verso habla
de virtud, bondad, las maravillas etc. Y esto es a lo que el señor nos ha LLAMADO, a dar a
dar testimonio de lo que Jesús ha hecho y lo que sigue haciendo en nuestras vidas.

A. Como nos prepara el Señor. Jeremías 18:1-6


1. Primero al darnos dones espirituales. 1 Pedro 4:10
2. Dota de lo necesario como a David. 1 Samuel 17:37
3. Somos transformados por el espíritu del Señor. 2 Corintios 3:1

B. Lo que pide el Señor para que él nos llame.


1. Que tengamos disposición. Isaías 6:8
2. Renuncia. Mateo 19:29
3. Determinación. Josué 24:15

C. Como inicia un servicio útil para el reino de Dios.


1. Siguiendo los pasos de Jesús. 1 Pedro 2:21
2. Con una vida Santa. 2 Timoteo 2:20-21
3. Cuando tomamos en serio el llamado. 2 Pedro 1:10-11

D. Que debemos hacer ahora que comprendimos su llamado.


1. Trabajar dentro de su obra. 1 Corintios 15:58
2. No negarnos a Dios. Mateo 16:24
3. Cumplir la gran comisión. Marcos 16:15

Conclusión:
Uno de los propósitos de la Iglesia es que su Evangelio y virtudes sean predicadas a todos los
seres humanos, incluyendo a quienes se consideran poderosos, (en los cielos) por su riqueza
o autoridad y parecen no necesitar de la ayuda de Dios. Recordemos que Jesús dijo: no he
venido a ser servido, sino a servir. ¿Cuál es tu actitud frente a la vida? ¿Eres de aquellos que
les gusta sentirse servido o de los que buscan servir a otros?
¡ESCOGIDOS PARA SERVIR A DIOS!
Desde que Dios empezó a manifestarse al hombre, ha escogido entre ellos a varones y mujeres en quienes
pueda confiar para servirle a Él, al servir a los de su generación: Abraham, Moisés, Josué, Débora, Sansón,
Rut, David, María, Pedro, Juan, Pablo, Priscila, etc...
¿Qué tenían en común todas estas personas?
¿Qué los hizo tan especiales que fueron escogidos por Dios para servirle?
Seguramente cada uno manifestaba características únicas, y entre ellas había algunas que para Dios son
muy importantes: Un corazón conforme al suyo, un corazón dócil, manso y humilde con la capacidad para
responder al llamado. (Números 12:3, Isaías 57:15, 1 Samuel 13:14, Mateo 11.29, Lucas 5:11)
Cuando Jesús estuvo entre nosotros en cuerpo dice Marcos 3:13-14 que después de haber orado toda la
noche, “…subió al monte, y llamó a sí a los que él quiso; y vinieron a él. 14 Y estableció a doce, para que
estuviesen con él, y para enviarlos a predicar”
¡Qué fantástico!
El primer motivo por el cual llamó nuestro Señor Jesús a los que conformarían su equipo de trabajo era:
“Para que estuviesen con Él”
Esto tiene muchas connotaciones:
a.- Estar con Él, habla de vivir en Su Presencia para poder servir.
b.- Estar con Él, es mostrar fidelidad a Dios en todo tiempo.
c.- Estar con él, implica ser parte del equipo, servicio o iglesia en la cual servimos a Dios.
d.- Estar con él, implica apoyar y vivir bajo la autoridad de aquellos que velan por nuestra alma delante de
Dios.
¿Pero, nota que es una decisión personal responder a este llamado?
Porque dice la Escritura que a los primeros doce discípulos que llamó: “Vinieron a Él”... ellos eligieron ser
parte del equipo.
Pudieron negarse, sin embargo aceptaron el reto y el compromiso de servir.
¿Y tú qué decisión vas a tomar?
Servir a Dios es un honor inmerecido, el cual nunca podrá compensar la salvación tan grande que Dios nos
ha dado a través del sacrificio de su hijo Jesús.
Dios está buscando desde la antigüedad hombres y mujeres que anhelen ser usados por Dios.
Por ejemplo:
1.- Cuando Moisés escoge jueces que le ayuden a aconsejar al pueblo:
“Además escoge tú de entre todo el pueblo varones de virtud, temerosos de Dios, varones de verdad, que
aborrezcan la avaricia; y ponlos sobre el pueblo por jefes de millares, de centenas, de cincuenta y de diez”
(Éxodo 18:21)
2.- Cuando los apóstoles escogen diáconos para servir en la iglesia:
“Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y
de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo” (Hechos 6:3)
¿Aprecias que cada servidor fue buscado y escogido por aquellos que previamente fueron llamados por
Dios para servirle?
¿Notas el perfil que busca Dios y sus siervos en aquellos a quienes se les va a confiar una
responsabilidad?
Pongamos atención, porque si anhelamos servir a Dios, primeramente debemos desarrollar las virtudes
necesarias para ser tomados en cuenta, sabiendo que todos seremos sometidos a prueba y si somos
hallados irreprensibles, entonces seremos escogidos como obreros aprobados para dar de gracia lo que de
gracia hemos recibido.
(1 Timoteo 3:10, Mateo 10:8)

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