A Las Puertas Del Olimpo

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Cuadernillo de actividades (4º año Literatura)

Profesora: Bahiana Mancino

Alumno:……………………

A las puertas del Olimpo

Al principio, todo estaba revuelto: El agua no corría, las tierras no eran sólidas, en fin, reinaba el
Caos (que en griego quiere decir “la boca del abismo”). Del Caos nacieron la Noche y la Oscuridad,
que lo destronaron y engendraron a Éter (el aire luminoso de las alturas) y al día. De ellos nacieron
la Tierra y el Mar. Por aquellos tiempos existía Eros (el amor) un poder tan antiguo como Caos
pero que impulsaba la unión y la creación. Con su fuerza, Eros engendró la vida en la tierra, hasta
entonces desierta y florecieron las plantas, crecieron los animales, se poblaron las aguas, y el cielo lo
abrazó todo. De la unión entre el cielo y la tierra nacieron doce titanes enormes y fuertes, tres
cíclopes (que se llamaban así porque tenían un solo ojo en el medio de la frente) y tres gigantes. El
cielo temeroso de la fuerza de sus hijos fue encerrándolos a medida que nacían en el abismo del
Tártaro. Finalmente, la tierra, como buena madre decidió liberarlos y el menor de los titanes,
Cronos, el tiempo, eliminó a su padre y ocupó su lugar y comenzó reinar junto a sus hermanos.

Cierta vez Eros convocó a los hijos de un titán, llamados Prometeo y Epimeteo y les pidió que
crearan un ser capaz de dominar a todos los animales que poblaran la tierra. Prometeo tomó arcilla
húmeda y modeló figuras con forma semejante a la de los dioses. Eros les infundió con un soplo el
espíritu de la vida, y así nacieron las personas. Prometeo quedó tan encantado con las criaturas
recién creadas que quiso ofrecerles algo que los hiciera mucho más parecidos a los dioses. Entonces
robó una chispa de fuego sagrado y se la regaló para que tuvieran dominio sobre el fuego. Ese
atrevimiento de Prometeo irritó mucho a los dioses quienes para vengarse crearon a una mujer muy
hermosa a la que llamaron Pandora. A ella le regalaron un cofre y le ordenaran que jamás intentara
abrirlo. Pandora aceptó la condición y se convirtió en la feliz esposa de Epimeteo. Durante un
tiempo vivieron muy contentos pero como bien habían previsto los dioses Pandora no pudo
contener su curiosidad y abrió el cofre. Del que comenzaron a salir toda clase de males,
enfermedades y crímenes que se esparcieron por todo el mundo. Sólo la esperanza quedó en el
fondo de la caja. Así fue como la maldad y las pasiones se fueron adueñando de los hombres. La
tierra se empapó de sangre y la buena fe, la justicia y el pudor la abandonaron y volaron hacia el
cielo. Viendo esto los dioses consideraron que la raza de los hombres no debía sobrevivir y
desbordaron las aguas del cielo y la tierra. Tierra y mar se confundieron y sólo logró sobrevivir una
pareja: Un hombre. Deucaliòn y su esposa, Pirra, considerados justos y piadosos. Ambos se
mantuvieron a bordo de una débil barca y cuando las aguas descendieron, lloraron sobre la tierra
desierta rogando piedad a los dioses. Entonces escucharon una voz poderosa que les decía estas
palabras: “Velad vuestros ojos y tirad hacia atrás los huesos de vuestra abuela”. Después del
desconcierto del principio se pusieron a meditar y comprendieron que su abuela era la tierra y que
sus huesos eran las piedras. Entusiasmados, comenzaron a caminar, arrojando a cada paso una
piedra hacia atrás. De las piedras que arrojaba Pirra nacían mujeres y de las que tiraba Deucaliòn
surgían hombres. Así se repobló la tierra después del terrible diluvio.

Fuente: Dioses, héroes y heroínas. Historias de la mitología griega. Versión de Beatriz Fernández y
Alicia Stacco. Bs.As, Santillana, Leer es genial. 2001

Actividad de producción escrita:


Escribí un relato con tu versión mítica sobre el origen del mundo y sus primeras criaturas. Para ello
haz un plan de escritura siguiendo los siguientes pasos:

a. Imaginà un nuevo mundo que fue creado por dos dioses de ideas enfrentadas
respondiendo a estas preguntas:
1. ¿Cómo son esos dioses? ¿Qué poderes sobrenaturales tienen? ¿cómo colaborará
cada uno de ellos en la creación?
2. ¿Cómo es el lugar creado?
3. ¿Cuántos intentos llevarán a cabo antes de conformar a las primeras criaturas?
¿por qué fracasan?
4. ¿Qué cualidades especiales tendrán los seres humanos definitivos? ¿Por qué? ¿De
qué estarán hechos?
5. ¿Qué anécdota o aventura protagonizarán los primeros seres?
b. Escribí un borrador ampliando y conectando las respuestas anteriores.
c. Revisà el texto que escribiste y corregilo todas las veces que creas necesario. Verificà la
coherencia y si son correctas la puntuación y la ortografía.
d. Cuando estè listo pasalo en limpio.

Clase 2:

Popol Vuh

Intervenciones didácticas:

Bien chicos la clase anterior trabajamos con el texto “A las puertas del Olimpo” que explicaba el
mito de creación según los griegos. Habíamos dejado pendiente unas preguntas ¿las realizaron?
).Bien, el texto decía que en el origen del mundo estaba Caos y Eros. Caos tuvo como hijos a Noche
y Oscuridad, estos a su vez lo destronaron y engendraron a Éter y Día que, a su vez, dieron a luz al
Cielo y la Tierra. Cielo y Tierra tuvieron como hijos a los titanes, ciclopes y gigantes. Ellos fueron
encerrados por su padre en el Tártaro y liberados por su madre la Tierra. El más joven, Cronos,
destrona a su padre. Unos hijos de los titanes Prometeo y Epimeteo son convocados por Eros (que
antes había creado a la naturaleza) para que creen a las personas. Prometeo crea a las personas
semejantes a los dioses. Pero comete un error que enfurece a los dioses ¿cuál? (les da el dominio
del fuego. Los dioses como venganza qué hacen? (Crean a una joven llamada Pandora a la que le
dan un cofre y le dicen que no puede abrirlo ( sabiendo que lo va a hacer) ¿ Por qué sabían los
dioses que Pandora abriría la caja? ( Ellos la crearon curiosa porque era parte de su venganza).
¿Qué sucede cuando se abre la caja de Pandora? (Toda la maldad se apodera del planeta y hay un
diluvio). ¿Quiénes sobreviven? (Pirra y Deucaliòn quienes imploran a los dioses por ayuda. Ellos les
dicen que velen sus ojos y arrojen los huesos de su abuela ¿Qué significaba esto? Que tiren piedras
para atrás. De las piedras que arrojaba Pirra se formaban las mujeres y de las que arrojaba
Deucaliòn, los hombres. Así la tierra fue repoblada.

Breve actividad:

Intervenciones didácticas:

Las siguientes afirmaciones ¿son verdaderas o falsas? Justificar.


1. Los dioses griegos eran temerosos de sus hijos
2. Crearon hombres iguales a sí mismos
3. Si se enojaban eran muy rencorosos

Presentación del Popol Vuh

Intervenciones didácticas:

Hoy les traje otro mito de creación del mundo conocido como Popol Vhu o Libro del consejo, un
libro sagrado maya que resume las creencias de esos pueblos, se considera anónimo y de
redacción colectiva. Fue fijado por un indígena alrededor del año 1550 en idioma Quichè (maya de
Guatemala).

Lectura de los primeros párrafos del Popol Vuh:

Entonces no había ni gente, ni árboles, ni piedras, ni nada. Todo era un erial desolado y sin límites.
Encima de las llanuras el espacio yacía inmóvil; en tanto que, sobre el caos, descansaba la
inmensidad del mar. Nada estaba junto ni ocupado. Lo de abajo no tenía semejanza con lo de
arriba. Ninguna cosa se veía de pie. Solo se sentía la tranquilidad sorda de las aguas, las cuales
parecían que se despeñaban en el abismo. En el silencio de las tinieblas vivían los dioses Tepeu,
Gucumatz y Hurakàn , cuyos nombres guardan los secretos de la creación, de la existencia y de la
muerte, de la tierra y de los seres que la habitan. Cuando los dioses llegaron al lugar donde
estaban depositadas las tinieblas, hablaron entre sí, manifestaron sus sentimientos y se pusieron
de acuerdo sobre lo que debían hacer. Pensaron cómo harían brotar la luz, la cual recibiría
alimento de eternidad. Los dioses propicios vieron luego la existencia de los seres que iban a nacer;
y ante esta certeza dijeron:

-Es bueno que se vacíe la tierra y se aparten las aguas de los lugares bajos, a fin de que estos
puedan ser labrados. De los frutos cosechados comerán los pobladores que han de venir. Tendrán
de este modo igual naturaleza que su comida.

Así quedó resuelta la existencia de los campos donde vivirían los nuevos seres. Entonces se
apartaron las nubes que llenaban el espacio que había entre el cielo y la tierra. Debajo de ellas y
sobre el agua de la superficie, empezaron a aparecer los montes y las montañas que hoy se ven.

Dijeron entonces los dioses:

-No es bueno que los árboles crezcan solos, rodeados de sombras; es necesario que tengan
guardianes y servidores.

De esta manera decidieron poner debajo de las ramas y junto a los troncos enraizados en la tierra,
a las bestias y a los animales, los cuales obedecieron al mandato de los dioses, pero vagaban sin
orden ni concierto, tropezándose con las cosas que encontraban a su paso. Parecían mudos como
si sus gargantas hubieran muerto las voces inteligentes. Solo supieron gritar según era propio a la
clase que pertenecían. Entonces después de tomar consejo, los dioses se dirigieron de nuevo a las
bestias, a los animales y a los pájaros de esta manera:
-Por no haber sabido hablar conforme a lo ordenado, tendrán distinto modo de vivir y diversa
comida. Ya no vivirán en comunión plácida; cada cual huirá de su semejante, temeroso de su
inquina y de su hambre y buscará lugar que oculte su torpeza y su miedo. Así lo harán. Y aún más:
Por no haber hablado ni tenido conciencia de quiénes somos nosotros, ni dado muestras de
entendimiento vuestras carnes serán destazadas y comidas. Entre ustedes mismos se triturarán y
comerán los unos a los otros sin repugnancia. Este y no otro será vuestro destino. Porque así
queremos por justicia que sea.

Los dioses idearon entonces nuevos seres capaces de hablar y de recoger, en hora oportuna, el
alimento sembrado y crecido en la tierra.

Por esto dijeron:

-Recordemos que los primeros seres que hicimos no supieron admirar nuestra hermosura y ni
siquiera se dieron cuenta de nuestro resplandor. Veamos si, al fin, podemos crear seres más dóciles
a nuestro entendimiento. `*

Intervenciones didácticas:

¿Cómo era el inicio de los tiempos de acuerdo con el Popol Vuh? (No había nada, solo mar y
tinieblas. Por esta razón los dioses decidieron crear el mundo. Primero los montes y llanuras, luego
los árboles pero estaban muy solos así que crearon a los animales). ¿Qué sucedió con los
animales? (Eran tontos y no hablaban sino que gritaban así que los dioses los maldijeron y los
condenaron a comerse unos a otros). ¿Saben lo que es un erial? (Terreno sin cultivar ni labrar).
¿Qué otra cosa les molestaba a los dioses de los animales? (que no los adoraban). Exacto, los
dioses buscaban seres que los adoren, que sean capaces de hablar y de sembrar la tierra para
producir alimento. En otras palabras, necesitaban crear a las personas.

Lectura de Popol Vuh :

Después de decir tales palabras, empezaron a formar, con barro húmedo, las carnes del nuevo ser
que imaginaron. Lo modelaron con cuidado. Poco a poco lo hicieron sin descuidar detalle.

Cuando estuvo completo, entendieron, que tampoco, por desgracia, servía: estos muñecos no
podían permanecer de pie, porque se desmoronaban, deshaciéndose en el agua. Sin embargo, el
nuevo ser tuvo el don de la palabra. Los muñecos hablaron pero no tuvieron conciencia de lo que
decían; y así ignoraron el sentido de sus palabras. Los dioses contemplaron con tristeza a aquellos
seres frágiles y dijeron:

-¿Cómo haremos para formar otros seres de veras sean superiores, oigan, hablen, comprendan lo
que dicen y sepan lo que somos y seremos en el tiempo?

En silencio y meditación quedaron, mientras se desarrollaban las manifestaciones tremendas de la


noche. Entonces la luz de un relámpago iluminó la conciencia de la nueva creación. Los nuevos
seres fueron hechos de madera para que pudieran caminar con rectitud y firmeza sobre la faz de la
tierra. Las estatuas formadas parecían verdaderas gentes; se juntaron y se acoplaron en grupos y,
al cabo de un tiempo, procrearon hijos. Pero sus relaciones dieron muestras de no tener corazón ni
sentimientos. No podían entender que eran seres venidos a la tierra por voluntad de los dioses.
Hablaban, tenían conocimiento de lo que decían, pero no había en sus palabras ni expresión ni
sentimiento. Por esta causa también fueron condenados. Cuando menos lo esperaban, vino sobre
ellos una lluvia de ceniza que opacó su existencia. La ceniza cayó sobre sus cuerpos, violenta y
constante, como si fuera arrojada con lluvia por mano fuerte y desde arriba. Luego los dioses
dispusieron que la tierra se volviera a llenar de agua. Esta inundación que duró muchas lunas lo
destruyó todo.

Todavía los dioses hicieron nuevos seres con nueva sustancia natural. De tzitè( árbol) fue hecho el
hombre; de espadaña(planta de hoja larga con un fruto parecido a la mazorca), la mujer. Pero
tampoco correspondieron a esta figura la esperanza de sus creadores. Vinieron enseguida otras
fieras no menos crueles que se cebaron en sus despojos.

Sucedió que, a raíz de esto, se oscureció la Tierra con oscuridad grande y de mucho miedo, como si
descendiera sobre lo creado un manto espeso y poblado de tinieblas. En medio de la desolación y
ante los sobrevivientes que se debatían con angustia de muerte, casi sin esperanzas de salvación,
se presentaron pequeños seres, cuya alma había sido invisible hasta entonces. Irritados,
vociferando, se pusieron a decir voces terribles y altivas.

Las piedras de moler dijeron:

-Ustedes nos gastaron; día a día; desde el amanecer hasta la noche, nos estuvieron rascando y
amolando. Ya vemos, al cabo del tiempo, que no merecían nada. Ahora llegó el tiempo de nuestra
venganza.

Y luego los perros dijeron;

-¡Cuántas veces por culpa de ustedes no probamos bocado, ni lamimos hueso, ni bebimos sorbo de
agua, ni logramos, para dormir, un rincón de tierra fresca; y muertos de hambre y de sed,
desfallecidos, con la lengua afuera, nos quedamos como trastos inservibles en el basurero de la
choza! ¡Ahora los devoraremos!*

Intervenciones didácticas:

El texto nos explica ahora los intentos para crear a los seres humanos ¿Cuál es el primero de esos
intentos? (El hombre de barro. Pero ocurría que eran seres frágiles que se deshacían en el agua y
aunque tenían el don de la palabra no entendían lo que decían y decían cualquier cosa). ¿El
segundo de los intentos cuál fue? (Hombres de madera entendían las palabras pero no tenían
expresión ni sentimientos y por ello fueron castigados con una lluvia de ceniza que los aniquiló).
Exacto. Luego hubo un gran diluvio que duró varias lunas. ¿Qué otro intento? (hombre hecho de
árbol y mujer planta pero provocaron la ira de unos dioses hasta entonces desconocidos, las
piedras de moler y los perros que los querían devorar).

Duración estimada: 5 minutos

Cuando aquellos conatos humanos oyeron tanta acusación, espantados, temblorosos, se juntaron
como mazorcas tiernas. Como pudieron, azorados, atropellándose, subieron sobre los techos de las
casas, pero los armazones y las vigas se hundieron; treparon en los árboles pero las ramas se
quebraron. Los pocos que no sufrieron quebranto, como recuerdo de la simpleza de sus corazones,
se transformaron en monos. Estos se fueron por ahí y se perdieron en el monte. Por esta causa los
monos son los únicos animales que semejan y evocan la forma de los primitivos seres humanos de
la tierra quiché.

Entonces los dioses se juntaron otra vez y trataron acerca de la creación de nuevas gentes. Las
cuales serían de carne, hueso e inteligencia. Se dieron prisa para hacer esto porque todo debía
estar concluido antes de que amaneciera. Por esta razón, cuando vieron que en el horizonte
empezaron a notarse vagas y tenues luces, dijeron:

-Esta es la hora propicia para bendecir la comida de los seres que pronto poblarán estas regiones.

Y así lo hicieron. Bendijeron la comida que estaba regada en el regazo de aquellos parajes. Después
dijeron oraciones cuya resonancia fue esparciéndose sobre la faz de lo creado. Al tiempo que
sucedía esto faltaba poco para que el Sol, la Luna y las estrellas aparecieran en el cielo. De lugares
ocultos, cuyos nombres se dicen en las crónicas, bajaron, hasta los sitios propicios, el Gato, la
Zorra, el Loro, la Cotorra y el cuervo. Estos animales trajeron la noticia de que las mazorcas de maíz
amarillo, morado y blanco estaban crecidas y maduras. Por estos mismos animales fue descubierta
el agua que sería metida en las hebras de la carne de los nuevos seres. Pero los dioses la metieron
primero en los granos de aquellas mazorcas. Cuando todo lo que se dice fue revelado, fueron
desgranadas las mazorcas, y con los granos sueltos, desleídos en agua de lluvia serenada hicieron
las bebidas necesarias para la creación para la creación y la prolongación de la vida de los nuevos
seres. Entonces los dioses labraron la naturaleza de dichos seres. Con la masa amarilla y la masa
blanca formaron y moldearon la carne del tronco, de los brazos y de las piernas. Cuatro gentes de
razón no más fueron primeramente creadas así. Luego de que estuvieron hechos los cuerpos y
quedaron completos y torneados sus cuerpos y dieron muestras de tener movimientos apropiados
se les requirió para que pensaran, hablaran, vieran, sintieran, caminaran y palparan lo que existía y
se agitaba cerca de ellos. Pronto mostraron la inteligencia de que estaban dotados, porque en
efecto, como cosa natural que salió de sus espíritus, entendieron y supieron cuál era la realidad
que los rodeaba. Estos seres fueron Balam Quitzè ,Balam Acab, Mahucutha e Iquì Balam.

Balam Quitzè habló en nombre de los demás de esta manera:

-Nos han dado la existencia; por ello sabemos lo que sabemos y somos lo que somos; por ella
hablamos y caminamos y conocemos lo que está en nosotros y fuera de nosotros. Es de esta
manera cómo podemos entender lo grande y lo pequeño y aún lo que no existe o no está revelado
delante de nuestros ojos.

Pero ha de saberse que los dioses no vieron con agrado las consideraciones que de su propio saber
hicieron, con tanta franqueza, los nuevos seres. Por eso los dioses conversaron entre sí:

-Es preciso limitar sus facultades. Así disminuirá su orgullo. Los desmanes que cometan serán de
menos alcance. Si los abandonamos y llegan a tener hijos, estos, sin dudas percibirán más que sus
abuelos y habrá un momento en que entiendan lo mismo que los propios dioses. Por eso es
preciso deformar sus deseos y sus sueños para que no se aturdan. Si no se hace esto pretenderán,
en su locura y desvío, ser tanto o más que nosotros mismos. Estamos a tiempo para evitar este
peligro que será fatal para la creación. Y a fin de que estas gentes no estuvieran solas, los dioses
crearon otras de sexo femenino.
De esta suerte, Balam Quitzè y los otros abuelos resultaron ser el principio de las gentes que luego
vivieron y se desarrollaron durante las peregrinaciones y el asiento de las tribus del Quiché.

Fuente: Anónimo , Popol Vuh (fragmento)

Intervenciones didácticas:

Observemos que el mito explica la creación de los monos a partir de uno de los intentos fallidos de
hombres por parte de los dioses. ¿Cuál es el último intento? (Hombres de maíz o de choclo. Solo
crearon cuatro pero a los dioses les asustó que puedan ser más poderosos que ellos así que
limitaron su poder y le crearon mujeres para que le hagan compañía).

Actividad de escritura:

Popol Vuh

1- ¿Cómo y para qué crearon la tierra los dioses?


2- ¿Cómo surgieron los animales? ¿Cuál fue su destino?
3- ¿Qué intentos realizaron los dioses para crear al hombre? ¿Por qué fracasaban?
4- ¿Quiénes fueron “los abuelos” y por qué los dioses quisieron limitar sus acciones?

Actividad extra . En los relatos mitológicos que hemos estado leyendo “A las puertas del Olimpo” y
“Popol vuh” ¿El mundo se crea de forma rápida y correcta o por el contrario hay distintas etapas en
la creación? Justifica tu elección con ejemplos tomados de ambos textos

Actividades

a. Leè este mito:

“.. Perséfone era la hija de Zeus y Deméter, la diosa de la agricultura. Un


día Hades, el dios de los muertos la raptó y la llevó a los infiernos como su
esposa. Deméter, enojada, maldijo la tierra que ya no dio más frutos. Los
hombres hambrientos se quejaron a Zeus, quien ordenó a Hades que
devolviera a la joven. Pero Perséfone ya había probado la comida del
mundo de los muertos y no podía quedar del todo libre. Entonces llegaron
a un acuerdo: La joven pasaría la mitad del año con Hades y el resto con su
madre. Así, cuando Perséfone bajaba a los infiernos, Deméter estaba
triste, los arboles perdían sus hojas otoñales y no había cosechas. Cuando
la joven subía a la tierra, la alegría de Deméter hacía reverdecer las plantas
y crecer sus frutos..”

b. Elegí la opción correcta para este mito:

Este mito explica el origen de..

1. Los dioses.

2. La agricultura.

3. Las estaciones del año.


4. La creación del mundo.

d. Lee las siguientes definiciones de mitos y leyendas. Luego, especifica si los relatos que se
presentan a continuación son leyendas urbanas, leyendas tradicionales o mitos. Justica tu elección
con tus palabras.

Los mitos son relatos sobre seres sobrenaturales, como dioses o monstruos, que sirven para
explicar determinados hechos o fenómenos. Las leyendas, en cambio, son relatos de sucesos
maravillosos o imaginarios encuadrados en cierto momento histórico. Pese a que son utilizados
como sinónimos, no siempre son intercambiables. La leyenda y el mito tienen, sin embargo, ciertas
similitudes: ambos han pasado de generación a generación por medio de la trasmisión oral o
escrita, ambos son relatos que buscar explicar un evento o fenómeno que resulta enigmático o
misterioso. Características de las leyendas

∙ Ayudan a explicar aquello que es de difícil compresión para un grupo social, pero tiene al menos
un rasgo o elemento real.

∙ Tienen lugar en un contexto, espacio o tiempo fácilmente reconocibles.

∙ Pueden estar compuestas por una serie de relatos que giran alrededor de un mismo personaje o
evento, como es el caso de todas las historias sobre el Cid Campeador o Robin Hood.

Leyendas históricas : Explican hechos ocurridos durante conflictos bélicos, como guerras o
procesos de conquista. En España, existe la leyenda de un noble al que llamaban Guzmán el Bueno,
quien dejó que los invasores marroquíes asesinaran a su hijo con tal de no entregar el castillo que
le habían encomendado defender. Esto lo hizo merecedor del señorío de Sanlúcar por parte del rey
Sancho IV, como muestra de lealtad.

Leyendas urbanas: Forman parte del folklore contemporáneo y generalmente se desarrollan en un


contexto citadino. Las redes sociales han contribuido a alimentar o crear nuevas leyendas de este
tipo, ya que son medios en los que la información se comparte muy rápidamente. En Estados
Unidos existe una leyenda urbana sobre un juego de arcade llamado Polybius, que supuestamente
existió en la década de los ochenta y que dejaba secuelas físicas en quienes lo jugaban. Con la
masificación de internet y la cultura de los videojuegos, la leyenda volvió a tomar fuerza en los
últimos años y se han hecho intentos por recrear un juego similar.

Leyendas locales :Son las que tratan de explicar acontecimientos de un lugar muy específico, como
el origen del nombre de una calle. En Caracas, Venezuela, existe una esquina llamada "El muerto",
que según la leyenda debe su nombre a una curiosa anécdota: durante la Guerra Federal
(1859-1863), los soldados mal heridos y muertos en combate se amontonaban en las calles. Un
día, pasó una cuadrilla encargada de llevarse los cadáveres y uno de los soldados, a quien se creía
muerto, se levantó gritando que estaba vivo. Esto hizo que la cuadrilla saliera corriendo
horrorizada. Desde entonces, la esquina pasó a llamarse "El muerto".

Leyendas rurales: Son narraciones que tienen lugar en un contexto rural, y al ser tan específicas no
pueden ser trasladadas a un contexto urbano. En muchas partes de Latinoamérica existen leyendas
sobre duendes, animales fantásticos o entes que aterrorizan a los pobladores, se comen o roban el
ganado o se llevan a los niños.
Ejemplos:

El hombre de la bolsa

Se lo describe como un hombre de alrededor de unos 50 años, canoso y barbado, vestido con
oscuras ropas de linyera, que lleva una bolsa de arpillera colgada en la espalda. Al igual que el cuco,
cumple la función de atemorizar a los niños en caso de desobediencia, ya que en la bolsa colocaría
a los pequeños de mala conducta.

La flor del ceibo

Cuenta la leyenda que en las riberas del Paraná, vivía una indiecita fea, de rasgos toscos, llamada
Anahí. Era fea, pero en las tardecitas veraniegas deleitaba a toda la gente de su tribu guaraní con
sus canciones inspiradas en sus dioses y el amor a la tierra de la que eran dueños... Pero llegaron
los invasores, esos valientes, atrevidos y aguerridos seres de piel blanca, que arrasaron las tribus y
les arrebataron las tierras, los ídolos, y su libertad. Anahí fue llevada cautiva junto con otros
indígenas. Pasó muchos días llorando y muchas noches en vigilia, hasta que un día en que el sueño
venció a su centinela, la indiecita logró escapar, pero al hacerlo, el centinela despertó, y ella, para
lograr su objetivo, hundió un puñal en el pecho de su guardián, y huyó rápidamente a la selva. El
grito del moribundo carcelero, despertó a los otros españoles, que salieron en una persecución
que se convirtió en cacería de la pobre Anahí, quien al rato, fue alcanzada por los conquistadores.
Éstos, en venganza por la muerte del guardián, le impusieron como castigo la muerte en la
hoguera. La ataron a un árbol e iniciaron el fuego, que parecía no querer alargar sus llamas hacia la
doncella indígena, que sin murmurar palabra, sufría en silencio, con su cabeza inclinada hacia un
costado. Y cuando el fuego comenzó a subir, Anahí se fue convirtiendo en árbol, identificándose
con la planta en un asombroso milagro. Al siguiente amanecer, los soldados se encontraron ante el
espectáculo de un hermoso árbol de verdes hojas relucientes, y flores rojas aterciopeladas, que se
mostraba en todo su esplendor, como el símbolo de valentía y fortaleza ante el sufrimiento.

Narciso

Narciso era hijo del dios Boecio del río Cefiso y de Liriope, una ninfa acuática. El famoso vidente
Tiresias ya había hecho la predicción de que viviría muchos años, siempre y cuando no se viese a sí
mismo. A los 16 años Narciso era un joven apuesto, que despertaba la admiración de hombres y
mujeres. Su arrogancia era tal que, tal vez a causa de ello, ignoraba los encantos de los demás. Fue
entonces cuando la ninfa Eco, que imitaba lo que los demás hacían, se enamoró de él. Con su
extraña característica, Eco tendía a permanecer hablando cada vez que Zeus hacía el amor con
alguna ninfa. Narciso rechazó a la pobre Eco, tras lo cual la joven languideció. Su cuerpo se
marchitó y sus huesos se convirtieron en piedra. Sólo su voz permaneció intacta. Pero no fue la
única a la que rechazó y una de las despechadas quiso que el joven supiese lo que era el
sufrimiento ante el amor no correspondido. El deseo se cumplió cuando un día de verano Narciso
descansaba tras la caza junto a un lago de superficie cristalina que proyectaba su propia imagen,
con la que quedó fascinado. Narciso se acercó al agua y se enamoró de lo que veía, hasta tal punto
que dejó de comer y dormir por el sufrimiento de no poder conseguir a su nuevo amor, pues
cuando se acercaba, la imagen desaparecía. Obsesionado consigo mismo, Narciso enloqueció,
hasta tal punto que la propia Eco se entristeció al imitar sus lamentos. El joven murió con el
corazón roto e incluso en el reino de los muertos siguió hechizado por su propia imagen, a la que
admiraba en las negras aguas de la laguna Estigia. Aún hoy se conserva el término «narcisismo»
para definir la excesiva consideración de uno mismo.

Unidad II

Leyendas

La cultura mapuche

A partir del siglo XVI, presionados por el avance de los conquistadores españoles los pueblos
originarios comenzaron a llegar desde Chile y se instalaron en el territorio de la actual Neuquén.
Con el tiempo se fueron expandiendo hacia la provincia de Buenos Aires, sobre todo, por la
abundancia de ganado salvaje que pastaba libremente en la llanura.

Vivían en grupos familiares emparentados y cuando el territorio les quedó chico algunos hombres
migraron con sus familias y crearon nuevas poblaciones. Sin embargo, quedaban unidos por sus
antepasados comunes, a quienes veneraban como dioses. Su dios supremo era Nguenechèn que
habitaba en la cima de los volcanes y a quien le dedicaban una rogativa.

En este pedido incluían el pedido para obtener mejores cosechas, buen clima, salud y prosperidad
para todos. Leyendas y visión de mundo Los mapuches creían que los causantes de los fenómenos
de la naturaleza eran los espíritus. Así, cada vez que una tormenta los abrumaba con sus truenos y
rayos , o la tierra se partía por un terremoto pensaban que los espíritus de los antepasados (Los
Pillán) estaban luchando entre sí y provocaban las desgracias. Este tipo de creencias constituyeron
la base de las creencias de los mapuches y fueron transmitidas oralmente de padres a hijos. Estas
leyendas orales eran contadas junto al fogón, costumbre que se conserva en la actualidad.

Durante mucho tiempo estos relatos se preservaron de quienes no pertenecían al pueblo mapuche
hasta que en épocas bastantes recientes fueron recopiladas y difundidas por los estudiosos de la
cultura. Se ofrece a continuación, una de sus leyendas más difundidas:

Las barbas del ñire (leyenda mapuche)

En aquellos tiempos, cuando los mapuches se habían olvidado de adorar a Antü, el Sol, dos de los
Pillán que habitaban el Valle Embrujado iniciaron una feroz batalla. Numerosos espíritus los
ayudaban en uno y otro bando. Danzando furioso sobre las piedras más altas, se encontraba uno
de los Pillán, el Trauco. Con rabia saltaba sobre la montaña y le gritaba al otro, que era su peor
enemigo, el Huesha Cüref Huecufü: -No te salvarás. Esta vez te arrojaré todas las rocas que tenga
este volcán. Quiso entonces pelearse con el Trauco y comenzó a rugir y aullar tanto que provocó
una tormenta con la ayuda de los espíritus de su lado. Así empezó la gran batalla.

Con mucha violencia ambos Pillán se tiraban rocas encendidas, lenguas de fuego que atravesaban
el amplio valle y que el viento expandía. De las cavernas comenzó a salir un polvo negro y espeso
que fue cubriéndolo todo. El valle ardía; los terribles estrépitos y la confusión dominaban la Tierra
devastada y en penumbras. Entonces la montaña, que era muy alta y estaba cubierta de nieve,
decidió arrojar todo lo que albergaba en su interior. La lava, el fuego, el barro y el humo se
desparramaron por el valle y provocaron la destrucción y la muerte. A pesar de todo, los Pillán
continuaban lanzándose rocas desde un lado hacia el otro. Pero nada de esto perturbaba el sueño
de Antü, que dormía serenamente y no iluminaba la Tierra porque los mapuches ya no le rezaban
ni le dedicaban ofrendas. Como la batalla seguía, los animales ya no encontraban dónde
protegerse y corrían desorientados y sin rumbo.

Las bolas de fuego que atravesaban el aire iluminaban la tierra, que se abría en grandes pozos por
donde caían las bestias, las plantas y los árboles. Todo se lo tragaba la tierra, que ardía más y más.
Algunas plantas lograron sobrevivir aferrándose a las piedras y ahí se quedaron. Otras pudieron
treparse a algunos árboles y todavía no quieren abandonarlos.

La confusión iba en aumento y ya casi nada de lo conocido quedaba en su lugar. La nieve se


derretía con el fuego y el agua inundaba los ríos creando nuevos lagos. Las montañas se apilaban
unas sobre otras o desaparecían en los profundos pozos de la tierra que las tragaba.

Ocurrió entonces que el Trauco, que tenía mejor puntería, consiguió hacer tambalear a su
enemigo, el espíritu del viento, que se había quedado solo por un momento, sin los espíritus que
los auxiliaban. Trauco aprovechó la oportunidad y, con un tiro certero, logró que una enorme roca
se despeñara. En su caída, la roca arrastró al desprevenido espíritu del viento por la ladera.
Rodando y rodando, este Pillán no lograba aferrarse a la montaña a pesar de sus largos brazos, ya
que cualquier rama o piedra saliente lo quemaba.

Todo estaba encendido por el fuego que arrojaban los espíritus. A punto de perderse en el
profundo abismo, al Cüref Huecufü lo salvó su barba larga. Tan larga que tenía como mil metros y,
en la caída, se fue enredando entre los arbustos y las piedras, lejos del fuego que ardía en el cielo.
Sucedió que en el descenso, la larga barba del viento se aferró a un magnífico árbol. Era el ñire, un
árbol de raíces muy fuertes, bien afirmadas entre las rocas de la ladera de la montaña. Entonces, a
pesar de que el Trauco iba ganando la batalla, llegó la salvación para el viento, quien así habló al
ñire, agradecido: -Aferraste mi barba y me salvaste, ahora te la dejo para que te proteja.

Desde ahora, ningún ñire sufrirá por mi lengua, la lengua del feroz viento, ni verá desgastarse la
montaña donde habite. Así mi barba protegerá tus ramas para que la misma nieve no pueda
quebrarlas. Cuando terminó de decir estas palabras, el espíritu del viento le entregó al ñire su
barba, que desde entonces cuelga de su tronco y de sus ramas. Por eso, cada vez que el espíritu del
viento pasa cerca del ñire y ve su barba colgando, recuerda que sigue vivo por él y lo acaricia
agradecido.

GLOSARIO:

♣ PILLÁN: según los mapuches, espíritus que habitan en los volcanes y expresan su poder son
terremotos y tormentas eléctricas

♣ VALLE EMBRUJADO: actual Valle Encantado, donde la acción del viento sobre las montañas ha
formado llamativas figuras de piedra que parecen animales, personas y objetos.

♣ TRAUCO: espíritu maligno con cuerpo deforme y larga barba.

♣ HUESHA CÜREF HUECUFÜ: espíritu destructor del viento.


♣ ÑIRE: árbol propio de los bosques andino-patagónicos. Suele estar recubierto por barba del
diablo, un liquen de color verde claro. Según la tradición, lo protege del viento.

Actividades:

1. Cità ejemplos y transcribí en la carpeta de “Las barbas del Ñire” que señalen estas características
de los dioses:

a. El carácter vengativo y benefactor de los Pillán.

b. Las ceremonias que ofrendaban.

c. Las desgracias que provocaban.

2. Subrayà los errores en el siguiente texto y re escribilo correctamente en tu carpeta:

“.. La literatura de los mapuches era escrita. Sus antiguos relatos y leyendas se leían junto al fogón
solo durante la visita de otros pueblos. Los estudiosos que lo recopilaron lo transmitieron de
padres a hijos de forma oral..”

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