Estrago Materno
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Estrago Materno
KATY AYALA
HUMANIDADES Y EDUCACIÓN
PROGRAMA DE PSICOLOGÍA
SINCELEJO
2021
ESTRAGO MATERNO
Coloquialmente, la relación madre-hijo se estima como uno de los lazos emocionales más
fuertes que puede existir entre dos personas, es común escuchar que “no hay como el amor
de madre”, “solo una madre comprende a su hijo” o incluso “a la madre, se le debe hasta la
vida”. Todos estos supuestos parecen inofensivos, y hasta románticos, muchas personas
podrían estar de acuerdo con lo anterior dicho, partiendo del hecho de que si bien no
siempre sucede así, lo esperado es que sí, es decir, se tiene a la madre deificada como el ser
más puro que existe en la vida de las personas. Sin embargo, en el siguiente ensayo se
pretende dar una visión Lacaniana a esta relación madre-hijo, basándose principalmente en
el estrago materno.
En el seminario XVII “el reverso del psicoanálisis” (1969-1970) Jacques Lacan expone el
estrago materno a través de la metáfora del cocodrilo, donde se muestra el deseo de la
madre como las fauces abiertas de un cocodrilo que puede cerrarse inoportunamente sobre
el niño. “No se sabe qué mosca puede llegar a picarle de repente y va y cierra la boca. Eso
es el deseo de la madre.” (Lacan, citado en Zawady, 2017, p 47).
Ahora bien en esta definición según Lacan, también se abarca la influencia del padre,
siendo el punto de intervención y detención “como un palo que impide que dicha boca se
cierre” [ CITATION Zaw17 \l 9226 ] impidiendo a la madre retener al niño, es entonces donde
se introduce el término “estrago” el cual precisamente hace referencia a la consecuencia de
la relación de la constitución del sujeto con el deseo del Otro materno. “El papel de la
madre es el deseo de la madre. Esto es capital. El deseo de la madre no es algo que pueda
soportarse tal cual, que pueda resultar indiferente. Siempre produce estragos” (Lacan,
citado en Cárdenas, 2011, P 7)
En este orden de ideas, la versión de madre Lacaniana se aprecia como una madre
insaciable y omnipotente en la cual su deseo abarca la existencia del sujeto (hijo) como
objeto de goce. Lo que conlleva a la búsqueda de respuestas ante el pedido insensato de la
madre, estableciéndose como un sujeto atrapado en la forma imaginaria del falo que ella
desea y se convierte en demanda. [CITATION Jac94 \l 9226 ] Afirma, “para satisfacer lo que no
puede ser satisfecho, a saber el deseo de la madre que en su fundamento es insaciable, el
niño, por la vía que sea, toma el camino de hacerse él mismo objeto falaz”.
Para concluir, puedo decir que a pesar de la existencia de muchas inquietudes respecto al
tema en cuestión, ha sido sensato poder comprender y darle otra mirada a las relaciones
madre-hijo que han sido romantizadas por años y reflexionar sobre todo lo que puede
suponer estas situaciones normalmente estipuladas como amor materno.
Referencias
Cardenas, M. P. (2011). El estrago materno: sus modos de manifestarse y los signos que comporta.
Obtenido de
http://bibliotecadigital.udea.edu.co/bitstream/10495/1539/1/RestrepoMaria_2011_Estra
goMaternoModos.pdf
Lacan, J. (1994). El falo y la madre insaciable. En: Seminario IV la relación de objeto. Buenos Aires.
Zawady, M. (2017). Reseña de tesis doctoral. El "estrago materno" como concepto psicoanalítico.
Ética & Cine, 47-54.