Bases para El Diagnostico
Bases para El Diagnostico
Bases para El Diagnostico
El diagnóstico es una de las tareas fundamentales de los médicos y la base para una terapéutica
eficaz. En sí mismo no es un fin sino un medio, e indispensable para establecer el tratamiento
adecuado. Hay quienes lo señalan como la parte más importante del trabajo médico, pero a pesar de
eso conlleva muchas dificultades cuando se explica y se enseña cómo realizarlo.
El diagnóstico se basa en el análisis de datos seguros. El razonamiento solo será válido cuando
descanse sobre nociones exactas y hechos precisos, pero cuando no se cumplen estos principios los
resultados siempre serán erróneos. La validez de una deducción depende de la calidad de las
observaciones en que ella se basa.
El pronóstico debe estar estrechamente relacionado con el cuadro clínico, la evaluación diagnóstica
y el tratamiento. El diagnóstico permite relacionar las observaciones clínicas con lo que se sabe
científicamente sobre las enfermedades. A su vez, la evaluación clínica conecta el análisis completo
del problema, así como del paciente y del contexto, con las técnicas de tratamiento más apropiadas
a cada caso. Finalmente, el pronóstico relaciona el tratamiento con la evolución previsible del
estado del paciente, en función del conocimiento sobre él, el trastorno y su curso y las
anticipaciones acerca de la eficacia de la terapia.
Entre las distintas formas de recolectar datos, existen secuencias de mayor o menor eficiencia para
hacerlo. La manera más eficiente será aquélla que produzca el mayor cambio, hacia arriba o hacia
abajo, en la probabilidad de estar frente al diagnóstico sospechado, mediante el menor número de
tests.
El tratamiento médico necesita una metodología que sistematice y ordene los pasos necesarios para
establecer una terapéutica racional. Su objetivo es mostrar cómo prescribir y no qué prescribir, ya
que los conocimientos sobre los medicamentos cambian constantemente, surgen nuevos fármacos,
aparecen nuevas indicaciones para su uso, etcétera, es decir, que lo que se prescribe, varía con el
tiempo, pero siempre será necesario un método racional de cómo hacerlo.
Estas etapas se entremezclan de forma continuada, ya que la planificación suele ser un proceso
dinámico y sujeto a continuos cambios y adaptaciones.
El proceso de planificación no debe entenderse de forma lineal, sino como un ciclo en que se
producen continuas retroalimentaciones. De forma gráfica puede expresarse así :
El programa como tal se refleja en un documento donde deben especificarse los objetivos que se
pretenden conseguir, las actividades que se van a realizar, los recursos con los que se cuenta y el
sistema de evaluación. La existencia de un documento escrito en el que se declaran explícitamente
los objetivos, las actividades y los sistemas de evaluación facilita a todos los participantes en el
mismo la discusión y el análisis del proceso de programación. Utilizando métodos cuantitativos
(encuesta) y cualitativos (entrevista) puede valorarse los efectos concretos del programa mediante
las pruebas pre y post programa. En el desarrollo del programa deben definirse el conjunto de
proyectos que forman parte del mismo, y establecerse las interrelaciones y dependencias entre ellos.
La evaluación pretende valorar el impacto de la aplicación del programa y analizar las diferencias
entre los objetivos propuestos y los resultados alcanzados.
La lectura crítica de artículos científicos se constituye en una práctica que demanda un alto grado de
integración y comprensión de un modo articulado de los diferentes componentes que los conforman.
Al leer este tipo de textos se busca que los estudiantes comprendan el hilo conductor que lleva una
investigación; esto es, aproximarlos al método científico.
Esto es importante, puesto que en la investigación científica es vital tener una ruta, plantear y
contestar preguntas relativas a la estructura teórica y metodológica subyacente, usando los criterios
adecuados. Difícilmente se puede hacer investigación sin plantearse preguntas, y para poder
plantearlas se debe enseñar a cuestionar la realidad y acercar a los estudiantes al proceso
investigativo que siguen los científicos.