Resumen DL1278

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RESUMEN DL 1278

Piero Jordano Iparraguirre Bedoya

El principal objetivo del decreto legislativo 1278 es el poder maximizar la


eficiencia en el uso de recursos, buscando la prevención o minimización de los
residuos generados y la correcta gestión de los mismos en las etapas más
tempranas del proceso productivo o en la fuente de origen.

Se prioriza la recuperación de los mismos mediante el reúso o reciclaje para


aprovecharlos en nuevas actividades, pero de no ser posible deben ser
dispuestos finalmente en infraestructuras adecuadas, para que no generen un
impacto a nivel ambiental de acuerdo a lo que establece la legislación actual.

El Estado se encarga de su gestión, la limpieza de áreas públicas y la


recolección de los residuos generados en su jurisdicción (actividades
productivas, comerciales y de distribución de bienes).

Se basa en los principios de Economía circular (el valor de un recurso abarca


todo su ciclo de vida), valorización de residuos (búsqueda de recuperación de
los mismos), responsabilidad extendida del productor (preocuparse por cómo
se pueden disponer los productos luego de que llegan a los consumidores),
responsabilidad compartida (por todos los actores y entidades competentes) y
la protección sanitaria y ambiental.

A partir de dichos principios, el decreto desarrolla una serie de 20 lineamientos


enfocados a mejorar la eficiencia de la producción, aprovechando mejor los
recursos, promover la responsabilidad de las autoridades, así como la
intervención de la población en el desarrollo de mejorar los métodos de
recuperación de los residuos y otras buenas prácticas.

De igual manera, presenta diversos instrumentos que pueden utilizarse para


tener un uso eficiente de los materiales y mejorar la gestión de los residuos.
Entre se puede mencionar la Estrategia Nacional de Ecoeficiencia, Acuerdos
de Producción Limpia (APL), PLANRES, PIGARS, entre otros.
En cuanto a la eficiencia de los materiales, la norma promueve el desarrollo de
ecodiseños de algunos productos, así como optimizar procesos productivos
para aprovechar de mejor manera los recursos reduciendo los residuos
generados en la fuente.

Destaca el hecho de aprovechar los insumos sobrantes para las actividades


donde sean requeridos, y de no ser posible, dichos insumos deben ser
transportados según la norma de transporte de mercancías (Ministerio de
Transportes y Comunicaciones) y dispuestos en infraestructuras adecuadas.

El decreto también establece la implementación de IGA, según lo establezca el


reglamento del SEIA. Asimismo, mantener el mismo actualizado al igual que su
Plan de Manejo de Residuos Sólidos.

Los actores que se involucran activamente a lo largo de las etapas del ciclo de
vida del producto podrán tomar en consideración medidas que involucren el
uso eficiente de los materiales y ecodiseño de los bienes, como parte de su
responsabilidad extendida.

Respecto a las distintas competencias en la gestión de residuos sólidos, el


aspecto ambiental recae sobre el MINAM, SENACE y OEFA. Por otro lado, las
autoridades sectoriales, MINSA y MTC se encargan de normar el manejo
adecuado y transporte de los residuos, controlando riesgos sanitarios y
habilitando las vías por donde recorrerán los vehículos destinados para la
recolección. Asimismo, las autoridades descentralizadas (municipalidades y
gobiernos regionales) se encargan de promover acciones para mejorar la
adecuada gestión de los residuos, incentivando a la población las buenas
prácticas de segregación y también de velar una adecuada recolección de los
residuos municipales y no municipales dentro de su jurisdicción.

El decreto también brinda detalles sobre la forma en que se debe gestionar y


manejar los residuos, aunque no incluye los radioactivos, militares, aguas
residuales o emisiones gaseosas. Por el contrario, contempla los municipales
especiales (de laboratorios, veterinarias, lubricentros, etc.), no municipales
(competencia de la autoridad del sector que lo genera), sólidos peligrosos (por
corrosividad, explosividad, autocombustibilidad, reactividad, toxicidad,
radioactividad o patogenicidad).
También se hace mención de las actividades (operaciones y procesos) que
abarca la recolección y manejo de los residuos, como son el barrido,
segregación, almacenamiento, recolección, valorización, transporte,
transferencia, tratamiento y la disposición final.

La segregación debe llevarse a cabo en la misma fuente (obligatorio para


municipales y no municipales) o en la infraestructura donde se valoriza. Los
generadores deben realizar esta clasificación para poder facilitar el
reaprovechamiento de los residuos, así como para permitir un manejo más
adecuado y tratamiento de los residuos que tengan cierta peligrosidad.

La recolección debe ser selectiva y efectuada por trabajadores debidamente


formalizados por la municipalidad correspondiente. El almacenamiento de los
residuos debe tener en consideración los criterios de segregación actuales,
responsabilidad del generador de los mismos hasta que sean recolectados.
Tras la recolección, se almacenan en espacios adecuados para dicho fin.

La valorización es la alternativa que se debe priorizar sobre la disposición final,


buscando el reaprovechamiento de los residuos siempre que sea posible. El
transporte de los residuos debe ser con vehículos adecuados para dicha
función, y regidos bajo la reglamentación que establece el MTC.

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