Guia #7 Religion 6° Alfredo 2021
Guia #7 Religion 6° Alfredo 2021
Guia #7 Religion 6° Alfredo 2021
OBJETIVO: Reconocer la necesidad absoluta de permanecer en Cristo a fin de desarrollar el fruto del Espíritu
Santo en la vida de cada uno.
COMPETENCIA: Hacer: Resolver dedicar tiempo con Jesús en oración, el estudio de la Biblia y la meditación
cristiana a fin de desarrollar el fruto del Espíritu en cada aspecto de la vida de cada uno.
NOTA EXPLICATIVA: para realizar todas las actividades que están en la guía de Religión, debes leer
cuidadosamente cada página que ella tiene y resolver todas las preguntas que encuentras en cada página, los
textos bíblicos que encontraras en cada página te ayudaran a responder cada pregunta.
Debes realizar todo en el cuaderno y cuando lo termines me lo envías al número de WhatsApp 3116004967 si
estas en casa, de lo contrario, lo presentas presencialmente.
"El Espíritu Santo y la Iglesia"
Memorizar: “Solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz; un cuerpo, y un Espíritu,
como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación; un Señor, una fe, un
bautismo” (Efe. 4:3-5).
A veces pensamos en el Espíritu Santo obrando únicamente a nivel individuo y en las vidas de cada
creyente de forma individual. Pero esta obra individual es el fundamento de la comunidad espiritual. El
Espíritu Santo es el responsable final de la existencia de la iglesia de Cristo.
A menudo nos vemos tentados a pensar que la iglesia existe y crece gracias a nuestras diversas actividades
evangelísticas y misioneras. Sí, Dios desea lograr sus planes gloriosos para la iglesia, y hacerlo con nuestra
ayuda. Pero la verdadera razón de ser de la iglesia no yace en lo que hacemos; tampoco es el resultado de
nuestra organización eficiente y administración eficaz, por más importantes que sean. La iglesia existe
gracias a lo que Dios ya ha hecho y continúa haciendo por nosotros por medio del Espíritu Santo. Es el
Espíritu Santo el que crea una comunidad espiritual y de compañerismo que tiene a la Palabra escrita de
Dios, inspirada por el mismo Espíritu, como su autoridad de fe y práctica. La Biblia inspirada por el Espíritu
es el fundamento para la unidad teológica de la iglesia. Sin la obra del Espíritu, la iglesia no existiría y no
podría continuar cumpliendo su misión unida.
El Espíritu Santo nos une con Cristo. El Espíritu Santo nos une de muchas maneras. No existiríamos
como iglesia si el Espíritu Santo no nos uniera primeramente con Cristo. Cristo es la cabeza de la iglesia
(ver Efe. 1:22, 23; 5:23). Por medio del Espíritu Santo, podemos ser unidos de manera efectiva con Cristo
mismo. Estar unidos a Cristo es el fundamento de todas las bendiciones de salvación, porque todo lo que
tenemos en el Señor proviene de él. Nuestra adopción como hijos e hijas de Cristo, nuestra justificación al
igual que nuestra santificación, nuestra vida victoriosa sobre el pecado y nuestra glorificación; todo es
recibido gracias a nuestra unión con Cristo. Por ello, él debe ser el fundamento de nuestra experiencia
cristiana entera.
Lee Efesios 2:18 y 20 al 22, y 1 Pedro 2:6 y 7. ¿Qué nos dicen estos versículos acerca del papel de Cristo y
del Espíritu Santo en la creación de la iglesia?
Por medio del Espíritu, tenemos acceso a Dios el Padre. Jesús es la roca, el fundamento de nuestra
salvación, y aquel en quien todas las otras partes del edificio son erigidas.
Luego, la obra del Espíritu a nivel individual lleva a una comunidad específica de fe: la iglesia. Cuando
hemos experimentado la salvación por fe en Cristo Jesús solamente, y habiendo sido tocados por el amor
de Dios, hay una dulce “comunión del Espíritu Santo” (2 Cor. 13:14) en la iglesia. Los creyentes individuales
están siendo edificados en una nueva morada espiritual de Dios “en el Espíritu” (Efe. 2:22). Como
seguidores de Cristo deberíamos estar deseosos de “guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz”
(Efe. 4:3). De toda manera posible, sin comprometer lo que no puede ser comprometido, debemos buscar
unidad en la comunidad de creyentes.
Lee Colosenses 3:12-14. ¿De qué manera puedes ejemplificar esos atributos y contribuir a la unidad en la
iglesia? ¿Por qué estos atributos son tan importantes para la unidad de la iglesia?
El Espíritu Santo nos une por medio del bautismo
Lee 1 Corintios 12:13. ¿De qué manera el bautismo nos une con Cristo y con el Espíritu?
Es el Espíritu Santo el que nos une en un solo cuerpo de creyentes. La entrada pública al reino espiritual de
Cristo es por medio del bautismo. Somos bautizados a un cuerpo eclesiástico específico. Por lo tanto, el
bautismo tiene una dimensión de comunión distintiva e importantes implicancias de comunidad. Como
seguidores de Cristo, no podemos vivir por nuestra cuenta. Todos necesitamos el apoyo, el ánimo y la
ayuda de los demás. Y ciertamente no podemos cumplir la misión divina solos. Por eso Dios creó la iglesia.
Seguir a Cristo significa seguirlo en comunión con otros creyentes. Por ello el bautismo y la iglesia tienen un
componente visible.
Lee Romanos 6:3-7. ¿Qué simboliza el bautismo bíblico?
El acto de ser enterrado con Jesucristo, por medio del bautismo, en la muerte de la tumba de agua y ser
resucitados a una nueva vida de comunión con Jesús, nuestro Señor y Salvador, simboliza la crucifixión de
la antigua vida y la confesión pública de aceptar a Cristo como nuestro Salvador.
“El bautismo es una solemne renuncia al mundo. Por esta profesión el yo muere a la vida de pecado. Las
aguas cubren al candidato y en presencia del universo entero se sella la promesa mutua. En el nombre del
Padre, del Hijo y del Espíritu Santo el hombre es sepultado con Cristo en el bautismo y se levanta del agua
para vivir una nueva vida de lealtad a Dios” (FV 146).
El bautismo es un paso positivo que deben cumplir todos los que desean reconocerse bajo la autoridad del
Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. En otras palabras, el bautismo marca el verdadero arrepentimiento y la
crucifixión de la vida antigua, y señala al nuevo nacimiento o conversión. También abarca obligaciones
pactuales mutuas. El creyente promete ser fiel a Dios y a sus mandamientos, y Dios garantiza que podemos
depender de su ayuda cuando sea que la necesitemos.
¿Ya has tomado la decisión del bautismo del creyente? Si no, ¿qué te detiene de seguir a Cristo a través del
bautismo? Si ya has sido bautizado por inmersión, ¿de qué manera ha impactado tu pacto bautism al en tu
caminar espiritual con Jesús?
El Espíritu Santo une a la iglesia por la Palabra de Dios
Lee Hechos 17:11 y Juan 5:39, 46 y 47; 8:31 y 32. ¿Cuál es una de las marcas distintivas de un verdadero
discípulo de Cristo? ¿Por qué la Biblia es tan indispensable en señalarnos a Cristo y en ayudarnos a
seguirlo fielmente?
El medio principal por el cual el Espíritu Santo nos une con Cristo es a través de la Palabra de Dios. La
Biblia es una fuente confiable para conocer a Jesús y la voluntad de Dios. Por eso es tan importante leer las
Escrituras y memorizar su contenido. La Biblia es la fuente autoritativa para discernir la verdad espiritual y el
error. Pablo felicitó a los bereanos por su nobleza (Hech. 17:11), porque estudiaron diligentemente y
escudriñaron las Escrituras a fin de comprobar si lo que oían era verdad.
Toda reforma y reavivamiento espiritual, no importa si nos afecta individualmente o como iglesia en forma
corporativa, debe basarse en las Escrituras. La Biblia es el fundamento sobre el cual nuestra fe se
construye; al mismo tiempo, el amor de Jesús y a su Palabra es el vínculo que nos mantiene unidos.
Lee Juan 17:17-21. Aquí Jesús habla acerca de la unidad como una marca distintiva de discipulado
cristiano. Según Juan 17:17, ¿cuál es la base para esta unidad?
La Palabra de Dios es verdad (Juan 17:17; Sal. 119:160). La unidad de la iglesia es la obra del Espíritu con
y por medio de la Palabra escrita de Dios. El Espíritu Santo nunca nos guiará a dudar, criticar, añadir o
reducir la enseñanza de la Biblia. Más bien, el Espíritu nos hace apreciar la autoridad divina de las
Escrituras. El Espíritu Santo nunca nos aleja de la Palabra escrita, como tampoco lo haría de la Palabra (el
Verbo) viviente. Más bien, nos mantiene en sumisión constante, consciente y voluntaria a ambas. La Biblia
es la fuente fundacional para cualquier unidad teológica global. Si fuéramos a minimizar o debilitar nuestra
creencia implícita en la Biblia como la Palabra de verdad de Dios para nosotros, la unidad de la iglesia sería
destruida.
¿Cuánto tiempo dedicas a la Palabra? Más importante aún, ¿cómo puedes aprender a someterte a sus
enseñanzas?
El Espíritu Santo une a la iglesia en fe y doctrina
“Un Señor, una fe, un bautismo, un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos”
(Efe. 4:5, 6). ¿Qué nos está diciendo aquí Pablo acerca de la unidad y de dónde viene?
La unidad en fe y doctrina se logra únicamente en fidelidad a la Palabra de Dios. El Señor, que es el mismo
ayer, hoy y para siempre, forma un vínculo espiritual con cada creyente. El mismo nuevo nacimiento,
generado por el Espíritu Santo, la misma obediencia a la Palabra de Dios, hecha posible por el Espíritu
Santo, lleva a una unidad de fe y práctica que trasciende toda diferencia humana y cultural.
Aunque somos llamados a someternos a la Palabra de Dios y hacer todo lo que podamos para mantener la
paz con todos (Rom. 12:18), en última instancia no podemos por nosotros mismos lograr la unidad teológica
o la unidad de propósito como cuerpo de la iglesia. Pues la unidad no es tanto algo que tengamos que lograr
nosotros sino más bien un don del Espíritu Santo, que obra en cada creyente de manera individual y en la
iglesia de forma corporativa.
El fundamento teológico de esta unidad es la Palabra de Dios. Cualquier apelación al Espíritu sin la Palabra
Escrita puede llevar a doctrinas y prácticas dudosas. Al mismo tiempo, cualquier apelación a la Palabra de
Dios sin el Espíritu Santo seca la Palabra y la vuelve estéril. Dado que hay un solo Señor, hay una sola fe
que lleva a un solo bautismo. Solamente en fidelidad gozosa hacia la Palabra de Dios podremos ver la
unidad en nuestra iglesia. Y si no hay unidad en fe y doctrina, no habrá unidad en misión.
“Tenemos un Señor, una fe, un bautismo. El Evangelio de Cristo debe alcanzar a todas las clases, todas las
naciones, todas las lenguas y pueblos. La influencia del Evangelio debe unir en una gran hermandad.
Tenemos un solo Modelo que debemos imitar en la edificación del carácter, y entonces todos tendremos el
molde de Cristo; estaremos en armonía perfecta; las nacionalidades se unirán en Jesucristo, poseyendo la
misma mente, y el mismo juicio, hablando de las mismas cosas, y glorificando a Dios con una sola boca”
(NEV 173).
Observa la declaración de Elena de White. Sin pensar en los demás, o en lo que hacen los demás, sino
solamente en ti mismo, pregúntate: ¿Qué puedo hacer para ayudar a alcanzar este maravilloso objetivo de
la unidad?
El Espíritu Santo une a la iglesia en misión y servicio
Lee Hechos 2:4 al 11 y 16 al 21. ¿Cuál fue el resultado del derramamiento del Espíritu Santo en los
creyentes del Nuevo Testamento?
El Espíritu Santo fue responsable del esfuerzo misionero más poderoso que la historia había presenciado
hasta ese momento. Dios puede hacer más por medio de un grupo pequeño que está unido en su devoción
a él que lo que puede hacer por medio de un grupo grande pero dividido. Dios puede hacer cosas mucho
mayores cuando todos dedicamos nuestras vidas y energías, nuestros talentos y recursos, a él.
La iglesia del Nuevo Testamento creció a partir de la unidad en la vida y la misión de los creyentes. Un
pequeño y tímido grupo de creyentes fue transformado hasta conformar una tropa poderosa que se convirtió
en una herramienta efectiva que alcanzó a personas de diferentes culturas e idiomas. Se unieron al
proclamar “las maravillas de Dios” (Hech. 2:11). El mismo Dios que estuvo activo en los tiempos del Nuevo
Testamento estará activo al fin del tiempo, cuando la obra deba ser finalizada antes de que Jesús regrese
por segunda vez.
Lee Hechos 2:42 al 47. ¿En qué otros aspectos estaban unidos los creyentes del Nuevo Testamento?
El emprendimiento misionero de Pentecostés estuvo acompañado de otros factores en los cuales la iglesia
temprana permaneció unida. Estaban unidos en el estudio de la Biblia y perseveraban en las enseñanzas de
los apóstoles (Hech. 2:42). Estaban unidos en comunión y el partimiento del pan, posiblemente una
referencia a la unidad en adoración (Hech. 2:42). Estaban unidos en oración (Hech. 2:42) y en alabanzas a
Dios (Hech. 2:47). Estaban unidos en servir a las personas necesitadas al compartir sus posesiones y tenían
todas las cosas en común (Hech. 2:44, 45). El estudio de la Biblia en unidad y la confraternización darán
como resultado el deseo de compartir las buenas nuevas con otras personas y ayudar a otros de maneras
muy prácticas. El Espíritu Santo abrirá nuestros ojos a las necesidades de quienes nos rodean.
¿Qué actividades en tu iglesia local ayudan a revelar la unidad de tu iglesia? ¿Qué más se podría hacer?
Algunos argumentan que lo que realmente nos dará unidad es el servicio, no la doctrina. ¿Por qué una fe
compartida es un factor poderoso para la misión unida y efectiva?
Al mismo tiempo, ¿cuánto lugar hay para las diferencias teológicas? Pocas personas entenderán la verdad
exactamente de la misma manera. ¿Cómo podemos estar unidos como iglesia mientras, al mismo tiempo,
permitimos las diferencias menores que surgirán? ¿De qué manera las personas en tu iglesia local pueden
lidiar con las diferencias de entendimiento y aun así mantener la unidad?
¿De qué manera la Biblia puede ser un instrumento que traerá unidad? ¿Qué actitud es necesaria en nuestro
estudio de la Palabra de Dios para que podamos estar unidos en misión y fe como iglesia?
INSTITUCION EDUCATIVA JUNIN RUBRICA DE EVALUACION
DOCENTE: ALFREDO PEREZ P AREA: C RELIGIOSAS GADO: 6---- GUIA: 7
NOMBRE DEL ESTUDIENTE: --------------------------------------------------------------------
Marca con x la respuesta que consideres más apropiada de acuerdo al trabajo realizado en casa, teniendo en
cuenta la guía asignada por el docente
CRITERIOS SIEMPRE CASI NUNCA OBSERVACION
SIEMPRE
Reconoce que el espíritu santo intercede por cada
una delas personas de este mundo
Muestra interés por todo lo relacionado con las
enseñanzas del espíritu santo a las personas
Comprende el significado de la palabra espíritu
santo cabalmente
Analiza las consecuencias que produce el pecado
en la vida de las personas y como Jesús libera a
los seres humanos de la esclavitud que produce el
pecado
Muestra interés por el cumplimiento de sus
trabajos y tareas asignados
Participa activamente en las actividades
desarrolladas en casa y la escuela
Cumple con responsabilidad cada una de las
actividades propuestas por el docente
Sintetiza y enumera aspectos que destruyen la
vida personal y social del ser humano y reconoce
lo que el espíritu santo hace todos los días para
salvarnos
Analiza la misión que realiza el espíritu santo en
cada persona de esta tierra