Preview-Teologia Pastoral Vol 1
Preview-Teologia Pastoral Vol 1
Preview-Teologia Pastoral Vol 1
TEOLOGÍA PASTORAL
–
VOL. I
PURITANA Y REFORMADA
Editado por:
©TEOLOGIAPARAVIVIR.S.A.C
José de Rivadeneyra 610.
Urb. Santa Catalina, La Victoria.
Lima, Perú.
[email protected]
https://www.facebook.com/teologiaparavivir/
www.teologiaparavivir.com
Primera edición: Enero de 2020
Tiraje: 1000 ejemplares
Prohibida su reproducción o transmisión total o parcial, por cualquier medio, sin permiso
escrito de la editorial. Las citas bíblicas fueron tomadas de las Versión Reina Valera de 1960,
y de la Nueva Biblia de los Hispanos, salvo indique lo contrario en alguna de ellas.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 3
TABLA DE CONTENIDOS
DEDICATORIA 9
AGRADECIMIENTOS 11
PREFACIO 13
Jaime D. Caballero 13
CARACTERÍSTICAS DEL LIBRO Y RELEVANCIA PARA EL CONTEXTO
LATINO 13
CONCLUSIÓN 16
INTRODUCCIÓN: LA PREDICACIÓN Y EL MINISTERIO
PASTORAL PURITANO Y REFORMADO 17
Jaime D. Caballero 17
1. INTRODUCCIÓN 17
2. LA PRIMACÍA DE LA PREDICACIÓN EN LOS PURITANOS 19
a. La teología de la predicación puritana 19
b. La necesidad de la predicación 20
c. La urgencia de la predicación 21
d. La predicación al intelecto, la consciencia y las emociones 22
3. LA SIMPLICIDAD DE LA PREDICACIÓN PURITANA 24
a. Definición de simplicidad en la Predicación 24
b. Simplicidad en la exposición Bíblica 25
c. Simplicidad en la doctrina 27
d. Simplicidad en la aplicación 29
4. CONCLUSIÓN: UN AVIVAMIENTO PURITANO Y REFORMADO 30
UN CATECISMO ORTODOXO: LA TEOLOGÍA TRINITARIA DE
HERCULES COLLINS 33
G. Stephen Weaver, Jr. 33
1. INTRODUCCIÓN 34
2. THOMAS COLLIER Y LA RESPUESTA BAUTISTA REFORMADA 35
3. HERCULES COLLINS Y UN CATECISMO ORTODOXO 37
4 PURITANA Y REFORMADA
Depravación total y gracia eficaz: humilde gratitud y la muerte del orgullo 281
La preservación de los santos y el incentivo a la vida santa 287
4. CONCLUSIÓN: EL CALVINISMO INSPIRA LA PIEDAD 297
LA DOCTRINA DE DIOS Y EL MINISTERIO PASTORAL: EL
DEBATE PURITANO - SOCINIANO 299
Joel M. Heflin 299
1. INTRODUCCIÓN 300
2. PERSPECTIVAS PURITANAS Y SOCINIANAS DE LA ESCRITURA 302
3. TEOLOGÍA NEGATIVA Y EL SER DE DIOS 309
4. VISIÓN PURITANA Y SOCINIANA DE LA NATURALEZA DE DIOS 312
5. LOS ETERNOS DECRETOS DE DIOS: LA VISIÓN SOCINIANA 318
6. LOS ETERNOS DECRETOS DE DIOS: LA VISIÓN PURITANA 326
7. DANIEL ROGERS 329
8. STEPHEN CHARNOCK 331
9. JOHN OWEN 333
10. CONCLUSIÓN 340
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 9
DEDICATORIA
A DAVID MAGOWAN
Pastor, amigo, y mentor
10 PURITANA Y REFORMADA
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 11
AGRADECIMIENTOS
Jaime D. Caballero.
Cork, Irlanda
Viernes 20 de diciembre del 2019
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 13
PREFACIO
Jaime D. Caballero
Vincit qui patitur, “aquél que sufre, triunfa”. Con estas líneas J.I. Packer
resume el motto de los puritanos.1 Quizá ninguna otra época en la
historia de la Iglesia ha producido pastores y predicadores de la talla de
los puritanos, firmes en las Escrituras y ungidos por el Espíritu Santo.
Pero esta madurez en la predicación, desarrollo en la piedad y sabiduría
en el ministerio pastoral fueron una consecuencia de un intelecto
consagrado al estudio de las Escrituras, así como perseverancia en
medio de los sufrimientos. Este es el propósito de este libro, aprender
sobre ministerio pastoral de algunos de los mejores pastores en la
historia de la Iglesia.
1 James I. Packer, «Why We Need the Puritans», Themelios 21, n.o 2 (1996): 9.
14 PURITANA Y REFORMADA
del último de los puritanos Matthew Henry (1662-1714), y otros en 1689, año de la
revolución gloriosa. Históricamente el inicio del fin del movimiento puritano es en la Gran
Expulsión de 1662. De esta manera, todos aquellos que estaban vivos en 1662 se
consideran puritanos, siendo el último de estos Matthew Henry, quien nació en 1662. Sin
embargo, estas fechas son solo referenciales. Es mejor decir que el puritanismo como
movimiento se extendió desde finales del siglo XVI hasta finales del siglo XVII.
16 PURITANA Y REFORMADA
una doctrina de Dios clásica para el ministerio pastoral, los peligros del
emocionalismo en el evangelismo moderno, entre otras. Es con esto en
mente que se ha seleccionado los capítulos para estos dos volúmenes.
Esperamos de esta manera poder contribuir a llenar el vacío en un área
de suma importancia para la vida y el ministerio de la Iglesia.
d. Eruditos reconocidos.
Conclusión
INTRODUCCIÓN: LA
PREDICACIÓN Y EL
MINISTERIO PASTORAL
PURITANO Y REFORMADO
Jaime D. Caballero
1. Introducción
4 J. I. Packer, A Quest for Godliness: The Puritan Vision of the Christian Life (Wheaton,
IL: Crossway Books, 1990), 281.
5 J.I. Packer, prefacio a Introduction to Puritan Theology: A Reader, ed. Edward Hindson
(Grand Rapids: Baker, 1976)
6 Joel Beeke & Mark Jones (eds.), A Puritan Theology: Doctrine for Life (Grand Rapids:
b. La necesidad de la predicación
9 Joel R. Beeke and Randall J. Pederson, Meet the Puritans: With a Guide to Modern
Los ministros tienen que predicar la Palabra. Hay una maldición de por
medio para ellos si no lo hacen (1 Co. 9:16). De tal manera que, o
predican o perecen. ¡Debes hacer esto o están condenados!10
c. La urgencia de la predicación
10 Thomas Hall, A practical and Polemical Commentary… upon the Third and Fourth
Chapters of the Latter Epistle of St. Paul to Timothy (London: E. Tyler for John Starkey, 1658),
329.
11 Joel Beeke & Mark Jones (eds.), A Puritan Theology: Doctrine for Life (Grand Rapids:
the Presbyterian and Reformed Heritage, ed. Peter A. Lillback (Fearn, Ross-shire, UK: Christian
Focus Publications, 2002), 178.
13 Joel R. Beeke, “Puritan Evangelism”, en Living for God’s Glory: An Introduction to
15 J. I. Packer, A Quest for Godliness: The Puritan Vision of the Christian Life (Wheaton,
IL: Crossway Books, 1990), 285.
16 Joseph Pipa, “William Perkins and the Development of Puritan Preaching.” (PhD diss.,
to the Galatians, en The Works of William Perkins (London: John Legatt, 1613), 2:222.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 25
18 William Perkins, The Arte of Prophecying, or, A Treatise Concerning the Sacred and Onely
True Manner and Methode of Preaching, in The Works of William Perkins (London: John Legatt,
1613), 2:662
26 PURITANA Y REFORMADA
19 Perry Miller, The New England Mind: The Seventeenth Century. (Boston: Beacon Press,
1961), 332-33.
20 J. I. Packer, A Quest for Godliness: The Puritan Vision of the Christian Life (Wheaton,
IL: Crossway Books, 1990), 284-85.
21 Ibid., 100-103.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 27
de Cristo Jesús. Una exégesis que explica el texto de las Escrituras, pero
que no muestra a Cristo era una exégesis incompleta, y errada.
La exposición bíblica puritana, aunque era sencilla y profunda al
mismo tiempo, era también hasta su médula misma Cristo-céntrica.
Esto es de suma importancia en nuestro contexto, pues uno puede
exponer las Escrituras de manera expositiva y exegética sin
necesariamente ser Cristo céntrico. ¿De qué sirve la exegesis más fina
en un sermón si la misma no me va a llevar a Cristo? ¿Cuál es el
propósito de una exégesis fina de un texto si lo único que voy a enseñar
del mismo son buenos modales y moralismo? Es el Espíritu Santo quien
cambia vidas a través de una exposición de las Escrituras de la persona,
mensaje y obra de Cristo Jesús.
c. Simplicidad en la doctrina
Para los puritanos, la teología sistemática era para el pastor lo mismo que
el conocimiento de la anatomía era para el médico. Solo a la luz del todo
del cuerpo de la divinidad (como ellos solían llamarle), puede un ministro
proveer un diagnóstico, prescripción, y ultimadamente curar una
enfermedad espiritual en aquellos que tenían la plaga del pecado y la
muerte.23
24 Michael F. Ross, Preaching for Revitalization: How to Revitalize Your Church through Your
la vida es una teología muerta, pero una vida que no tiene su raíz en la
teología es una vida guiada por cualquier viento de doctrina. Una
predica sin teología es como un árbol sin raíces, pero una teología que
no lleva a piedad es como un árbol sin frutos. La una y la otra son
igualmente inútiles. 25
d. Simplicidad en la aplicación
26 William Perkins, The Arte of Prophecying, or, A Treatise Concerning the Sacred and Onely
True Manner and Methode of Preaching, in The Works of William Perkins (London: John Legatt,
1613), 2:56-63.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 31
27 Joseph Pipa, “William Perkins and the Development of Puritan Preaching.” (PhD
1. Introducción
2. Thomas Collier y la respuesta Bautista Reformada.
3. Hercules Collins y un Catecismo Ortodoxo.
a. El uso de los Credos.
4. El uso de teología patrística.
5. Trinitarianismo enraizado en Nicea y Constantinopla.
6. Cristología Calcedonia.
7. Conclusión: Los Bautistas Reformados y el uso del Catecismo de
Hercules Collins.
de la obra del autor sobre Hercules Collins, G. Stephen Weaver, Jr., Orthodox, Puritan y
Baptist: Hercules Collins (1647–1702) and Particular Baptist Identity in Early Modern England
(Göttingen: Vandenhoek & Ruprecht, 2015). Usado con permiso del publicador. La
versión en español ha sido adaptada de: G. Stephen Weaver, Jr., “‘Tres personas, pero solo
Uno’: La teología trinitaria de Hercules Collins”, Puritan Reformed Journal 9, no. 2 (2017):
211–225. Usado con permiso escrito de los editores para Teologia para Vivir.
34 PURITANA Y REFORMADA
1. Introducción
2 Para un breve escenario biográfico, véase Jim Spivey, “Caffyn, Matthew”, en DNB
ed. H.C.G Matthew and Brian Harrison (Oxford: Oxford University Press, 2004).
3 Para un breve escenario biográfico, vea Stephen Wright, “Collier, Thomas” en
DNB, ed. H.C.G. Matthew and Brian Harrison (Oxford: Oxford University Press, 2004).
El nombre de Collier es a veces escrito “Collyer” en sus obras publicadas. A través de este
ensayo se ha usado “Collier”.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 35
4 A Confession of The Faith of several Churches of Christ, In the Country of Somerset, and of
some Churches in the Counties neer adjacent (London: Henry Hills, 1656).
5 Para más información de la carrera de Thomas Collier, véase Richard Dale Land,
“Doctrinal Controversies of English Particular Baptists (1644–1691) as Illustrated by the
Career and Writings of Thomas Collier” (D.Phil. thesis, Regent’s Park College, Oxford
University, 1979). Para documentación detallada de la desviación de Collier del Calvinismo
ortodoxo, véase James M. Renihan, “Thomas Collier’s Descent into Error: Collier,
Calvinism, and the Second London Confession,” Reformed Baptist Theological Review 1, no. 1
(January 2004): 67–83.
6 Land, “Doctrinal Controversies of English Particular Baptists”, 332.
7 Michael A. G. Haykin, Kiffin, Knollys and Keach: Rediscovering our English Baptist Heritage
(Leeds, England: Reformation Today Trust, 1996), 68. La deserción de Collier fue
emblemática de un gran movimiento en la Inglaterra del siglo XVII, el cual incluyó
hombres tales como John Biddle (1616–1662), que negó la deidad de Cristo y la Trinidad.
Para un estudio reciente y detallado de esta controversia doctrinal, véase Paul C. H. Lim,
Mystery Unveiled: The Crisis of the Trinity in Early Modern England, Oxford Studies in Historical
Theology (Oxford: Oxford University Press, 2012). La década de los 1690 vieron el
surgimiento del Deísmo inglés a través de los escritos de hombres como Anthony Collins
(1679–1729), Matthew Tindal (1655–1733), y John Toland (1670–1722). Para una breve
36 PURITANA Y REFORMADA
No es, primero, como algunos imaginan, Tres Personas, pero un Dios, o tres
subsistencias diferenciadas, pero no divididas. Es completamente
imposible distinguir a Dios de esta manera y no dividirlo, pues distinguir
es dividir. Porque tres personas son tres no solo distinguidas o
diferenciadas, sino también divididas. Algunos dicen que hay, Dios el
Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo, pero no son tres, sino un Dios; que
cualquiera juzgue si no hay tres Dioses, si hay tres, entonces no es uno.10
en Hall’s The Font Guarded With XX Arguments (London, 1652), 123, 125.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 37
12 Hall, The Collier in his Colours in The Font Guarded, 121, 125.
13 Para una breve reseña biográfica de Coxe, véase James Renihan, “An Excellent
and Judicious Divine: Nehemiah Coxe,” Reformed Baptist Theological Review 4, no. 2 (July
2007): 61–78.
14 Nehemiah Coxe, Vindicae Veritas, Or A Confutation of the Heresies and Gross Errours
Asserted by Thomas Collier in His Additional Word to His Body of Divinity (London: Nath.
Ponder. 1677).
15 A Confession of Faith Put Forth by the Elders and Brethren Of many Congregations of
Christians (baptized upon Profession of their Faith) in London and the Country (London: Benjamin
Harris, 1677).
16 Una oscura referencia es hecha en los minutos de la iglesia Petty France el 26 de
agosto de 1677, en la publicación de una confesión de fe. Minute Book, 6. Esta confesión
de fe sería formalmente adoptada por la Asamblea General de Bautistas Particulares.
17 Hercules Collins, An Orthodox Cathecism: Being the Sum of Christian Religion, Contained
in the Law and Gospel. (London, 1680), página del título. El texto de este catecismo, junto al
texto del Catecismo Heidelberg, es también provisto en James M. Renihan, True Confessions:
Baptist Document in the Reformed Family (Palmdale, CA: Reformed Baptist Academic Press,
2004).
38 PURITANA Y REFORMADA
20 An Orthodox Creed: Or, A Protestan Confession of Faith, Being an Essay to Unite, and
Confirm all true Protestants in the Fundamental Articles of the Christian Religion, against the Errors
and Heresies of the Church of Rome (London, 1679). Texto completo también encontrado en
William L. Lumpkin, Baptist Confessions of Faith (Valley Forge, PA: Judson Press, 1969), 297-
334.
21 Cuatro piezas de evidencia indican que Collins fue inspirado por el Credo Ortodoxo
P. Considerando que no hay más que una única substancia de Dios, ¿por
qué denominamos a esos tres, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo?
R. Porque Dios se ha manifestado de tal manera en Su Palabra, que estas
tres personas distintas son ese único Dios verdadero y eterno.26
Ortodoxo y “El Prefacio” en el Catecismo Ortodoxo es casi idéntico al lenguaje del artículo 8
de los Treinta y Nueve Artículos. “Los tres Credos, Credo Niceno, Credo de Atanasio, y
el que es comúnmente llamado Credo de los Apóstoles, debería ser completamente
42 PURITANA Y REFORMADA
recibido y creído: porque pueden ser probadas por las más ciertas garantías de la Sagrada
Escritura”. Philip Schaff, The Creeds of Christendom, with a History and Critical Notes, vol. 3, The
Evangelical Protestant Creeds, with Translations (1931; repr., Grand Rapids: Baker Books, 2007),
3:492.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 43
P. Considerando que no hay más que una única substancia de Dios, ¿por
qué denominamos a esos tres, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo?
R. Porque Dios se ha manifestado de tal manera en Su Palabra, que estas
tres personas distintas son ese único Dios verdadero y eterno.34
35 Hercules Collins, The Temple Repair’d: Or, An Essay to revive the long-neglected
Ordinances, of excercising the spiritual Gift of Prophecy for the Edification of the Churches, an of ordaining
Ministries duly qualified (London: William y Joseph Marshall, 1702), 49.
36 John Owen, A Brief Declaration and vindication of the Doctrine of the Trinity (London:
R.W., 1669)
37 Hercules Collins, The Marrow of the Gospel-History: Or, A Diversion for Youth at spare
Hours (London: 1696). También publicada en Hercules Collins, Three Books (London,
1696).
38 Collins, The Marrow of Gospel-History, 4.
39 Collier, A General Epistle, 4
46 PURITANA Y REFORMADA
Ese es el deber de todos los que son hechos idóneos para el cielo, dar
gracias al Padre. [Pero] observen una cosa, aunque se dice que debemos
dar gracias al Padre, eso no excluye al Hijo ni al Espíritu Santo, sino que
es al Padre como la Fuente de la Gracia, al Hijo como el Procurador de la
Gracia y al Espíritu Santo como el Aplicador de la Gracia.40
6. Cristología Calcedónica
51 Phillip Schaff, The Creeds of the Christendom, with a History and Critical Notes, vol. 2,
The Greek and Latin Creeds, with Translations (1931; repr., Grand Rapids: Baker Books, 2007),
2:62.
52 A Confession of Faith, 29; Renihan, True Confessions, 96-97.
53 Véase Hechos 20:28.
54 Véase Juan 4:24.
55 Véase Juan 3:13
56 Collins, The Temple Repair’d, 38-39.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 51
1 Este capítulo es una adaptación del ensayo publicado en: Ryan J. Martin, «“Violent
Motions of Carnal Affections”: Jonathan Edwards, John Owen, and Distinguishing the
Work of the Spirit from Enthusiasm», Detroit Baptist Seminary Journal Volume 15 15 (2010):
99-116. Ryan Martin es un estudiante de Doctorado en Filosofía en el Seminario Teológico
Bautista en Plymouth, MN.
2 La palabra traducida como emocionalismo, depende del contexto en el que la
misma se este usando, y hace referencia a un énfasis desmedido en las experiencias,
usualmente como medio subjetivo para conocer la veracidad de algo. La traducción del
ingles al español es difícil, pues la palabra usada es entusiasmo. Sin embargo, la traducción
“entusiasta” tiene una connotación en español diferente a la del ingles, por lo cual el
54 PURITANA Y REFORMADA
a.
El emocionalismo y la Palabra de Dios.
i. Pneumatología.
ii. Otros escritos teológicos.
b. Resumen.
2. Jonathan Edwards y la acusación de emocionalismo.
a. Las marcas distintivas de la obra del Espíritu de Dios.
b. Oposiciones.
c. Algunas reflexiones con respecto al avivamiento
d. “La Gran Decadencia”.
3. Conclusión.
adjetivo usado ha sido “emocionalista”. El lector debe tener presente esto al momento de
leer este ensayo.
3 William Sherlock, uno de los principales críticos de Owen, dijo que Owen
enfatizaba la unión con Cristo por encima de la obediencia, y era por lo tanto de una
“devoción Entusiasta y Amorosa, que consiste en un amor apasionado hacia la Persona de
Cristo” (A Discourse Concerning the Knowledge of Jesus Christ, and Our Union and
Communion with Him (1674), pág.13; también ver Kelly M. Kapic, Communion with
God: The Divine and the Human in the Theology of John Owen (Grand Rapids: Baker,
2007, pp. 199’200. Para más sobre Sherlock, ver Carl R. Trueman, John Owen: Reformed
Catholic, Renaissance Man (Burlington, VT: Ashgate, 2007, 123-28 y Kapic, Communion
with God, págs. 153-54
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 55
En la Inglaterra del siglo XVII, los cuáqueros dirigidos por George Fox
(1624-1691) muy a menudo se ganaban la acusación de “entusiastas”.4
Los cuáqueros o “amigos” defendían que Dios hablaba directamente a
cada individuo a través de lo que ellos llamaban una “luz interior.” Esta
luz interior guiaba a un rechazo a la educación superior, a la necesidad
de las Escrituras, a las ordenanzas, e incluso a la Trinidad.
Seventeenth Century,” Quaker History 74 (Fall 1984): 1–24; Michael Haykin, “John Owen
and the Challenge of the Quakers,” en John Owen, the Man and His Theology, ed. Robert W.
Oliver (Phillipsburg, NJ: P&R Publishing, 2002), pp. 131–55; David S. Lovejoy, Religious
Enthusiasm in the New World (Cambridge: Harvard University Press, 1985), pp. 111–34;
Geoffrey F. Nuttall, The Puritan Spirit (London: Epworth Press, 1967), pp. 170–76;
Dictionary of Christian Biography, s.v. “George Fox.”
56 PURITANA Y REFORMADA
i. Pneumatología.
5 Lovejoy, Religious Enthusiasm, pp. 124–26; Peter Toon, God’s Statesman: The Life and
Work of John Owen: Pastor, Educator, Theologian (Grand Rapids: Zondervan, 1971), 75–77;
Kapic, Communion with God, 198–202.
6 John Owen, Πνευµατολογια, vol. 3 of The Works of John Owen, ed. William Goold
(London: Banner of Truth, 1966), pág. 29. Con respecto, a las referencias de aquí en
adelante de las obras de Owen se recurrirá a la edición de The Banner of Truth.
7 Ibid., 37.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 57
Un don extraordinario del Espíritu Santo, ... que ni debe ser confinado a
la estricta noción de predicción o conjetura, ni ser extendida a cada
declaración de verdad de la mente de Dios, sino solamente a aquella que
es obtenida por la revelación inmediata.9
8 Ibid., 39.
9 Ibid., 130.
10 Ibid., 133.
11 Ibid., p. 216.
12 Ibid., pp. 218–19.
58 PURITANA Y REFORMADA
13 Ibid., 219–21.
14 Ibid., 224.
15 Ibid., 225. También ver la discusión de Owen sobre la iluminación después en
Πνευµατολογια, págs. 333–34.
16 Ibid., 225.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 59
En Comunión con el Dios Trino (Communion with the Triune God), Owen
articulaba temas similares a aquellos en Pneumatología. La iglesia
Romana había mostrado desprecio por el obrar del Espíritu en su
17 Ibid., 225–26.
18 Ibid., 319.
60 PURITANA Y REFORMADA
b. Resumen
23 A Defense of Sacred Scripture from Modern Fanaticism in Biblical Theology, trans. Stephen
P. Wescott (Pittsburgh: Soli Deo Gloria, 1994), 848.
24 Este es el título de la obra en inglés, que podría ser traducido como “Entendiendo
la Obra del Espíritu Santo”, la misma que lleva como subtitulo en el original ingles: “The
causes, ways, and means of understanding the Mind of god as revealed in his word, With
assurance therein; And A declaration of the perspicuity of the scriptures, with the External
means of the interpretation of them.”
25 Συνεσις Πνευµατικη, vol. 4 of Works, 127.
26 ibid.
62 PURITANA Y REFORMADA
27 Para una historia del Gran Avivamiento, ver, C. C. Goen, “Introducción del
Editor” en The Great Awakening, vol. 4 de, The Works of Jonathan Edwards (New Haven,
CT: Yale University Press, 1972), 32–89. También ver Edwin Scott Gaustad, The Great
Awakening in New England (New York: Harper & Brothers, 1957); Iain Murray, Jonathan
Edwards: A New Biography (Carlisle, PA: Banner of Truth Trust, 1987), 153–76; Perry Miller,
Jonathan Edwards (1949 reprint; Lincoln, NE: University of Nebraska Press, 2005) 133–63;
Edwin S. Gaustad and Mark A. Noll, eds., A Documentary History of Religion in America to
1877 (Grand Rapids: Eerdmans, 2003), 160–76; y Frank Lambert, Inventing the “Great
Awakening” (Princeton, NJ: Princeton University Press, 1999). Para emocionalismo y el
Gran Despertar, ver Lovejoy, Religious Enthusiasm, págs. 178–94. Referencias de aquí en
adelante de las Obras de Edwards se mencionarán en Yale Works of Jonathan Edwards.
28 Edwards vio un trabajo inicial de Dios a mediados de la década de 1730, pero esto
casi se desvanecería para el tiempo del más grande despertar a comienzos de la década de
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 63
1740. Una carta de 1735 de Edwards contando este anterior despertar fue publicado y
después titulado A Faithful Narrative. En ella Edwards expresa elocuentemente puntos
sobre ciertos temas que el repetiría una década más tarde (con desarrollo) (Faithful Narrative,
vol. 4 de The Works of Jonathan Edwards, ed. C. C. Goen [New Haven, CT: Yale University
Press, 1972], págs. 144–211). De acuerdo con Faithful Narrative, cuando el Espíritu de Dios
trabaja en los pecadores, ellos quedan convictos de la certeza del Evangelio y tienen “esa
vista y gusto de la divinidad, o excelencia divina, que hay en las cosas del Evangelio” (ibid.,
p. 179). Algunas veces este gozo tenía efectos corporales, pero siempre y aún más
importante resultaba en santidad. El presente trabajo estuvo acompañado de
irregularidades, pero Edwards las “corrigió”, y “No será una sorpresa, que una
congregación pueda necesitar guía en dichos casos, para ayudarlos a distinguir el trigo de
la paja” (ibid., p. 188). Edwards admite en Faithful Narrative que había habido algunos
ejemplos de “extraños delirios entusiásticos” en los despertares – un hombre creía que
había sido “divinamente instruido” para decir a un hombre desalentado que ore un cierto
Salmo. “Pero él desde entonces lamenta excesivamente el deshonor que le ha hecho a
Dios” (ibid., p. 207). El entusiasmo debe ser frenado inmediatamente por el ministro a
través de una enseñanza cuidadosa.
64 PURITANA Y REFORMADA
29 The Distinguishing Marks of a Work of the Spirit of God, vol. 4 of The Works of Jonathan
Edwards, 227.
30 Ibid., 231.
31 Ibid., 234.
TÓPICOS EN TEOLOGÍA PASTORAL – VOL. I 65
El verdadero amor por Dios y el hombre fue otro resultado del Espíritu
que nunca se vio entre los entusiastas. Los Entusiastas amaban por
causa de su “amor-propio”; su amor estaba enraizado en “aquellas
peculiaridades que los hace a ellos los objetos del menosprecio de
otros.”36
En verdad, aquellas obras del Espíritu de Dios no serían hechas
por el Diablo, aún si él pudiera. Edwards enfatizaba que solo el Espíritu
obraba así, porque era imposible para el Diablo falsificar los frutos de
32 Tampoco deberían los críticos del despertar apuntar a los grandes efectos sobre
las mentes de los hombres, aunque Edwards admite que muchos hacen demasiado de lo
que han experimentado en sus imaginaciones. Aun cuando las imaginaciones de las
personas son afectadas para que ellos experimenten éxtasis o vean visiones, Edwards no
piensa que Satanás o el Espíritu deben ser inmediatamente citados —tal es la respuesta
natural de los hombres. Edwards escribe, “La naturaleza humana, bajo estos ejercicios
vehementes e intensos y afectos de la mente, de los cuales algunas personas son objeto, es
todo lo que necesita ser traído a cuenta” (ibid., 237).
33 Ibid., 241.
34 Edwards enfatizaba que el Cristo confesado es aquel que apareció en la carne, no
37 Ibid., 258.
38 Edwards escribió que, aunque las personas deben tratar de refrenarse a sí mismas,
“si Dios se complace en convencer las conciencias de las personas, para que ellas no
puedan evitar grandes manifestaciones externas, aún hasta la interrupción de esos medios
públicos donde ellos estaban asistiendo, no creo que esto es confusión, o alguna
interrupción infeliz, no más que si una compañía se juntara en el campo para orar por
lluvia, y fuera interrumpida por una lluvia abundante” (ibid., 267).
39 Edwards dijo, “Si … alguno … resueltamente todavía continúa hablando
despectivamente de estas cosas, les rogaría que presten atención que no vayan a ser
culpable del pecado imperdonable contra el Espíritu de Dios” (ibid., 275).
40 Ibid., p. 277.
41 Ibid., p. 278. Comparar Religious Affections, vol. 2 de Works of Jonathan
Edwards, ed. John E. Smith (New Haven, CT: Yale University Press, 1959), pp. 285–87.
Para una explicación de Edwards un “Cesacionista”, ver Michael A. G. Haykin, Jonathan
Edwards: The Holy Spirit in Revival: The Lasting Influence of the Holy Spirit in the Heart of Man
(Webster, NY: Evangelical Press, 2005), pp. 59–73.