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REPÚBLICA BOLIVARIANA DEVENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA DEFENSA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL POLITECNICA DE LA

FUERA ARMADA NACIONAL BOLIVARIANA

UNEFANB

NUCLEO APURE

CATEDRA 2

TRASLADO DE LOS RESTOS DE BOLÍVAR

ENERO 2022
INDICE

 INTRODUCCIÓN

1. TRASLADO DE LOS RESTOS A VENEZUELA


2. COMISIÓN VENEZOLANA EN NUEVA GRANADA
3. ENTREGA DE LOS RESTOS
4. BUQUE CONSTITUCIÓN
5. LLEGADA DE LOS RESTOS A VENEUELA
6. HONORES ENTIERRO Y PANTEON
7. BALORES ETICOS DE BOLIVAR
a) LIBERTAD
b) IGUALDA
c) JUSTICIA
d) ABOLICIÓN DE PRIVILEGIOS

 CONCLUSIÓN
 BIBLIOGRAFÍA
INTRODUCCIÓN

TRASLADO DE LOS RESTOS

Muerto el Libertador el 17 de diciembre de 1830, le fue practicada una


autopsia. Su cadáver fue embalsamado para luego ser sepultado en Santa
Marta en 2 urnas, una contentiva del cuerpo y otra del corazón. Durante los
años que siguieron a la muerte de Simón Bolívar, Venezuela se consolidó
como República independiente. Las viejas rencillas, desacuerdos y rencores
quedaron olvidados para dar paso a un sentimiento más noble y
perdurable: el agradecimiento a aquel hombre que, a cambio de su fortuna
y su vida, luchó por la independencia de 5 naciones americanas. En ese
sentido, el presidente de la República, general José Antonio Páez, se dirigió
al Congreso Nacional, en 1833, para solicitar que se decretasen los honores
públicos al más insigne de sus hijos. Esta petición la volvió a formular el
general Carlos Soublette en 1839. Nuevamente, en febrero de 1842, el
general José Antonio Páez insistió sobre la necesidad de que se dictasen las
medidas para el traslado definitivo de los restos de Bolívar.  

El día 10 recibió los auxilios religiosos suministrados por el Obispo de Santa Marta
Monseñor José María Estévez, en horas nocturnas dictó el Testamento y su Última
Proclama, era su deseo que lo enterraran en Caracas; hubo que esperar doce años para
que se cumpliera su voluntad. El 17 de diciembre pasada la una de la tarde entrega su
alma al Supremo Creador.

En horas de la tarde y parte de la noche Reverend, realizó la autopsia en un espacio


improvisado al lado de la cocina de la hospitalaria casa de campo; el corazón lo colocó
en un pequeño cofre el cual fue enterrado junto al cadáver en la Catedral de Santa
Marta, actualmente se encuentra desaparecido. El Dr. Reverend solicitó al general José
Laurencio Silva nacido en Tinaco, una camisa, al decirle que Bolívar ni fallecido
merece una camisa rota.
El primer traslado: se realizó el 17 en la noche desde la hacienda San Pedro Alejandrino
hasta la Casa de la Aduana; durante dos días el pueblo le rindió un sentido homenaje;

El segundo traslado: se ejecutó desde de la Casa de la Aduana, hoy Museo Nacional,


hasta el panteón de la familia Díaz Granados en la Catedral de Santa Marta, allá estuvo
nueve años, único sitio donde permaneció enterrado.

El tercer traslado: ocurrió a consecuencia de un movimiento sísmico que agrietó la


bóveda en mayo de 1834; Don Manuel Ujueta, con el permiso respectivo, llevó el
cadáver hasta su casa ubicada a una cuadra de la Catedral, durante tres días con dinero
de su peculio, preparó una nueva bóveda ubicada cerca del altar y ejecutó el cuarto
traslado; allí permaneció durante tres años.

Quinta movilización: El 30 de abril de 1842, el presidente José Antonio Páez, decretó el


regreso a Venezuela de los restos del Padre de la Patria. Ocurrió el 22 de noviembre de
1842 desde Santa Marta en la corbeta “Constitución” al mando del capitán de navío
Sebastián Boguier. Llegó al puerto de La Guaira el 13 de diciembre.

La sexta movilización: sucedió con la llegada de los restos desde el buque hasta el
puerto de La Guaira, la parada militar la comandó el general, ya anciano Juan Uslar.
Los restos pernoctaron en la iglesia del puerto.

la séptima movilización: se realizó desde La Guaira hacia Caracas a través del camino
de los españoles hasta la iglesia de la Santísima Trinidad donde pernoctó, casualmente
la Santísima Trinidad es la devoción de la familia Bolívar, de allí el nombre del
Libertador: Simón José Antonio de la Santísima Trinidad.

El octavo movimiento: se llevó a cabo el 17 de diciembre de 1842, cuando fue


trasladado en imponente manifestación de duelo popular hasta la iglesia de San
Francisco.
La novena movilización: ocurrió el día 23 de diciembre de 1842, cuando es llevado
hasta el panteón de la familia Bolívar en la Catedral de Caracas, allí están enterrados
los restos de sus padres y su esposa; en la Catedral

El décimo traslado: sucede el 28 de octubre de 1876, (día de San Simón), cuando el


presidente, el general Antonio Guzmán Blanco, convirtió la iglesia de la Santísima
Trinidad en Panteón Nacional, Altar de la Patria. Ese día ingresaron los restos al
Panteón nacional

El undécimo traslado: se realizó en 1930, durante la presidencia del doctor Juan


Bautista Pérez, cuando se ejecutó una remodelación interior al Panteón Nacional, se
colocaron los restos en una urna artística construida por el escultor español Chícharo
Gamo.

Y el duodécimo y último traslado, se realizó al nuevo mausoleo construido


especialmente para el Padre de la Patria, contiguo al Panteón Nacional inaugurado el
17 de diciembre del 2013.

Nuestro Libertador, Padre de seis naciones, tiene un templo en el corazón de todos los
hombres de buena voluntad.

El día 23 de Diciembre, nuevamente fueron trasladados los restos del Libertador desde el
Templo de San Francisco hasta la Iglesia Catedral, al Panteón de la Santísima Trinidad de
la familia Bolívar, siendo colocados al lado de sus padres, de su esposa María Teresa y de
su hermana María Antonia. Allí descansarían en paz. La Comisión presidida por el Dr. José
María Vargas continuó su trabajo, a fin de preservar de la completa destrucción la
osamenta del Libertador. Inmediatamente después de las exequias, el Dr. Vargas se había
encargado de dichos trabajos. En fecha 15 de marzo de 1843, el Dr. Vargas presentó su
informe al Secretario de Estado en el Despacho de lo Interior (Obras Completas Dr. José
María Vargas. Comisión Nacional del Natalicio del Dr. Vargas, 2da. edición. Caracas,
1986). Algunas de sus consideraciones fueron:

    "En medio del montón de polvo y horrura que la urna de plomo contenía, resultado de la
descomposición de todos los tejidos blandos del cuerpo y de los otros vestidos, se ha
preservado el esqueleto casi completo, aunque algunos huesos pequeños han ya
desaparecido, otros están casi pulverizados y todos los demás ennegrecidos y en proceso a
la descomposición a causa de la humedad que en dicha urna se conserva.

Se procedió, pues, a nombrar dos jóvenes bien instruidos en anatomía, a saber: el Doctor
Cosme Jiménez y el Bachiller Manuel Alvarado, que con el mayor cuidado y prolijidad,
entresacasen del montón de horruras todos los huesos, los limpiaran y lavaran con Cloruro
de Sodio; los secaran bien, y después los cubriesen de barniz preservativo. Separados los
huesos del polvo, y preparados como queda dicho, han sido ensamblados, formando el
esqueleto, con alambres de plomo y de plata según las partes, y así conexionados, han sido
cubiertos de varias capas de dicho barniz preservativo.

El esqueleto tiene las faltas siguientes: 1. La de los dedos anulares, y las segundas falanges
de todos los otros dedos de las manos; excepto las de los pulgares. 2. La de algunos huesos
del metatarso y todos los dedos de ambos pies. 3. La de la última muela o la cordal
izquierda de la mandíbula superior, que en la primera vez que la urna fue abierta en esta
ciudad estaba movido pero no faltaba; pero que después no ha sido hallada.
Todas las articulaciones o adaptaciones de los huesos del carpo y metacarpo, tarso y
metatarso y de los dedos, así de las manos como de los pies, han sido hechas por medio de
cera de modelar; no siendo posible por su blandura y casi desintegración unirlos por
talados y alambres. Con la misma cera de modelar han sido llenados los espacios vacantes
de las manos y los pies por la falta ya dicha de algunos huesecillos, por no introducir allí
parte alguna extraña de los restos.

Se ha construido una urna de hoja de plomo, mucho más delgada que el pedazo que
quedaba de la que tenía y que fue recortada... En el centro de la nueva urna de plomo está
acomodado el esqueleto; y en dos cajoncillos, también de plomo que como apéndice están
soldados al interior de aquella pieza, van todo el polvo y demás restos que contenía la caja
con entera separación del cuerpo o esqueleto. Este ha sido envuelto en un manto negro de
damasco, y de este modo y con una cuña grande de cedro bien barnizada para colocar la
cabeza, ha sido acomodado en la urna de plomo que a presencia de todos los miembros de
la Comisión ha sido soldada y puesta dentro de la madera, la cual cerraron con sus dos
llaves... José Vargas, J.M. Carreño, Mariano Uztáriz".

   Treinta y dos años más tarde, el General Antonio Guzmán Blanco, Presidente de la
República de Venezuela, emitió el Decreto Nro. 1876, fe fecha 27 de mayo de 1874,
declarando la Iglesia de la Santísima Trinidad de Caracas como Panteón Nacional,
ordenando depositar allí los "restos de los Próceres de la Independencia y de los hombres
eminentes que designe la Cámara del Senado a propuesta del Presidente de la República"
(Biblioteca de la Academia de Ciencias Políticas: Leyes y Decretos de Venezuela. Caracas,
1982. Tomo V, p. 14). Esta iglesia había sido construida por Juan Domingo del Sacramento
Infante, a mediados del siglo XVIII, y durante el terremoto de Caracas del año 1812,
destruida casi en su totalidad. Culminada la obra el 28 de octubre de 1875, es un año
después, el 28 de octubre de 1876, Día de San Simón, cuando se consagró el Panteón
Nacional con el traslado de los restos del Libertador desde la Catedral de Caracas. Estos
fueron colocados en un sarcófago de madera con revestimientos de oro y plata, realizado
por el francés Emile Jaccquin. Igualmente fue trasladada la estatua, realizada en 1842 por
el escultor italiano Pietro Tenerani. El sarcófago y la estatua fueron colocados en el sitio
correspondiente al presbiterio, es decir, el altar.
 En el año 1910, el General Juan Vicente Gómez, Presidente de la República, ordenó la
reforma general del Panteón Nacional, concluyendo los trabajos en julio de 1811, con
motivo del centenario de nuestra independencia. Nuevamente, en el año 1929, el General
Gómez ordenó cambios generales en el edificio. En 1930, durante estos trabajos de
remodelación, en virtud que el techo de la nave central del Panteón estaba en muy mal
estado, hubo que sacar la urna de plomo del arca cineraria, para proteger los retos del
Libertador. La urna fue llevada a un compartimiento al lado, colocándola sobre un
entablado y sostenida por dos barriles de cemento. Se observó que la tapa de la urna estaba
asentada sobre el cuerpo del esqueleto, sostenida por la frente, el pecho y los pies.
Concluidas la reparaciones, la urna regresó a su lugar. El antiguo sarcófago de madera que
contenía los restos del Libertador fue sustituido por uno de bronce, diseñado por el
escultor español Chicharro Gamo y colocado sobre un basamento de mármol. Fue en esta
remodelación cuando se colocaron las pinturas alegóricas e históricas de Tito Salas.

En el año 1947, Vicente Lecuna, Cristóbal Mendoza y Monseñor Nicolás Navarro,


solicitaron al médico José Izquierdo, les ayudara a clasificar por sexo algunos huesos
encontrados en la cripta de los Bolívar, en la Catedral de Caracas. Esta había sido violada
por desconocidos, ya sea por curiosidad, codicia o por odios políticos. El Dr. José Izquierdo
encontró en el suelo osamenta de caballo, perros, gallinas y numerosos huesos humanos,
casi todos fragmentados, y una base de cráneo, con un corte de sierra revelador de una
autopsia (El Cráneo del Libertador: Dr. José Izquierdo. Ediciones Edime. Caracas-Madrid,
1961).

El Dr. Izquierdo, basado en su experiencia como profesor de Anatomía en la Universidad


de Caracas, alarmado por este hallazgo, inmediatamente informó de ello a la Asamblea
Nacional Constituyente, presidida por Andrés Eloy Blanco, solicitando la autenticación de
los restos del Libertador en el Panteón Nacional, ya que el cráneo encontrado estaba
barnizado, tal cual lo hiciera el Dr. Vargas, presentando además, un agujero anormal, que
bien pudo servir para el ensamblaje hecho a dichos restos. Además, sostenía el Dr.
Izquierdo, que al único miembro de la familia Bolívar que se la había hecho autopsia fue al
Libertador. Indudablemente, que esta denuncia provocó un escándalo nacional. La
Asamblea Nacional designó una comisión para comprobar la denuncia del Dr. Izquierdo.
Estuvo formada por: Andrés Eloy Blanco, Mario Briceño Iragorry, Vicente Lecuna, Rafael
Caldera, Enrique Velutini, Julio Lander Márquez, Simón Gómez Malaret, Juan Oropeza,
Mariano Medina Febres, Ambrosio Perera, Luis M. Peñalver, Alfredo Celís Pérez, Ana
Luisa Lovera y el Pbro. José R. Pulido Méndez.

La Comisión nombrada visitó la cripta de los Bolívar, acompañados de miembros de la


prensa, observando los nichos violados y el cráneo en cuestión. En reuniones posteriores,
la Comisión no estaba convencida de la denuncia del Dr. Izquierdo, ya que dichas
afirmaciones no podían ser anatómicamente comprobadas por ningún especialista.
Mientras tanto, la Corte Federal y de Casación se opusieron a que se abriera la urna con los
restos del Libertador, por la inconsistencia de la denuncia. Se hicieron varias reuniones de
la Comisión con especialistas médicos e inclusive, con los embajadores de Panamá,
Colombia, Perú, Ecuador y de Bolivia, quienes no estuvieron de acuerdo con abrir la urna
en el Panteón Nacional, pero es interesante la opinión del embajador del Perú, en el
sentido de que si se abría, debería hacerse en un acto público, porque se trata de los restos
del Libertador y la expectación que hay es universal. El embajador de Colombia lo secundó
en esta idea, para no dejar asidero alguno a la duda o a la leyenda. La Academia Nacional
de la Historia fijó posición en cuanto a que no habían indicios de que ese cráneo
correspondiera al trabajo realizado por el Dr. Vargas en el cráneo del Libertador. También
consideró que en la cripta de los Bolívar se habían enterrado a varias personas,
autopsiadas también, como el caso de la Sra. Josefa María Tinoco, madre de Fernando
Bolívar, y cuyos restos habían sido trasladados desde el cementerio de Los Hijos de Dios
hasta la Catedral y colocados en la cripta de los Bolívar. Inclusive, hasta negros esclavos
estaban enterrados allí.

 La comisión se trasladó al Panteón Nacional y examinaron por fuera la urna de plomo que
contenía los restos del Libertador, observando la forma de los huesos: pelvis, el sacro, los
coxales, y se veía claramente la forma del cráneo. Esto era posible ya que a lámina de
plomo era muy delgada. Lo visto también se correspondía con lo observado en el año 1930,
cuando los trabajos de remodelación del Panteón. El informe de la Comisión concluyó que
en el orden histórico no existía evidencia de profanación de los retos del Libertador; que en
el orden técnico, el cráneo hallado por el Dr. José Izquierdo, no puede ser del Libertador
porque no tiene los agujeros requeridos para las aldabillas de sostenimiento entre la
bóveda y la base, hechos por el Dr. Vargas, y que vistos por fuera de la urna, se comprobó a
través de las paredes de plomo, que es posible reconocerlos por sus detalles, ya que la capa
de plomo es delgada y maleable.

    El cráneo en cuestión desapareció de la cripta de los Bolívar, durante los sucesos del
Golpe de Estado del año 1948.

BUQUE CONSTITUCIÓN

Estas gestiones tuvieron su feliz término cuando el Congreso Nacional


decretó el 30 de abril de 1842: «El Senado y la Cámara de Representantes de
la República de Venezuela reunidos en Congreso:
Considerando:
1.- Que los grandes hechos del Libertador Simón Bolívar, ilustre hijo y
blasón de Caracas, están ya consignados en la historia, que lo reconoce
como fundador de tres Repúblicas, y el primer caudillo de la Independencia
suramericana; y 2.- Que a Venezuela asiste el precioso derecho de depositar
sus restos venerandos; así como obliga el deber de tributarle un solemne
homenaje de suma estimación y gratitud.
Decretan:
Artículo 1°: Venezuela se honra de aclamar al Libertador Simón Bolívar con
los títulos de honor y gloria decretados por Venezuela y Colombia.
Artículo 2 o : El Gobierno hará trasladar sus cenizas desde Santa Marta a esta
capital con el decoro propio, y previa participación al Gobierno de la Nueva
Granada.
Artículo 3 o : A su llegada se le harán los honores fúnebres de Capitán
General.
Artículo 4 o : Todos los empleados públicos de cualquier clase y
denominación que sean llevarán luto por ocho días.
Artículo 5 o : Se celebrará un aniversario fúnebre en cada capital de provincia
y en aquel día llevarán luto todos sus empleados públicos.
Artículo 6 o : Sus ilustres cenizas serán depositadas en la Santa Iglesia
Metropolitana, y se levantará un modesto panteón que las contenga.
Artículo 7 o : La efigie del Libertador será colocada distinguidamente en los
salones del Congreso y del Poder Ejecutivo, para que en todas ocasiones
recuerde sus grandes merecimientos.
Artículo 8 o : El Poder Ejecutivo queda encargado de reglamentar este
decreto, y autorizado para hacer del Tesoro Público los gastos necesarios
para su ejecución».

Traslado de restos de Bolívar a Venezuela: En 1839 el general Carlos


 
Soublette, encargado de la presidencia, inició tímidamente un movimiento para la
repatriación. El Presidente Páez, en su segundo mandato, y debido a un clamor
popular, solicitó al Congreso repatriar los restos del Padre de la Patria. Al ser
aprobada la solicitud, decretó el 30 de abril de 1842, la traída de los restos con los
honores fúnebres, y la disposición de que sean depositados en la Catedral de
Caracas.

21.         Comisión  Venezolana en Nueva Granada:   Páez designó al eminente Dr.


José María Vargas jefe de la comisión, junto a los generales Francisco Rodríguez
del Toro (el marques), Mariano Ustáriz, José María Carreño y al sacerdote Manuel
Cipriano Sánchez como Gran Capellán La comisión venezolana que debía recibir
el féretro y fijó el 17 de diciembre, la fecha de regreso a la capital. El 12 de mayo,
invitó al Poder Ejecutivo Nacional y al de la Nueva Granada y Ecuador a concurrir
a la exhumación de los restos en Santa Marta.

22.         Buque Constitución: La Constitución, nuestra nave capitana, al mando del


Capitán   de fragata Juan B. Baptista, con sus velas blanquísimas, alumbradas por
la Luna, iba adelante, ligera como una garza. Luego seguía nuestra embarcación,
la hermosa corbeta Circe, al mando del cariñoso Sr. Jules Ricard, rompiendo las
olas, majestuosa como un cisne; y a su popa, navegaba el velero bergantín El
Caracas a las órdenes de Mr. Wheeler.  El 13 de noviembre salió de La Guaira la
comisión a bordo de la goleta Constitución debidamente acondicionada al mando
del capitán de Navío Sebastián Boguier, acompañado del bergantín Caracas y de
la fragata francesa Circe. Llegaron a Santa Marta el día 16. El 20 a las cinco de la
tarde exhumaron los restos que se encontraban en el panteón de la familia Díaz
Granados en la Catedral de Santa Marta; reconocidos por los médicos encargados
de tan noble comisión entre ellos, el preclaro Dr. Alejandro Próspero Reverend
(quien atendió a Bolívar desde su llegada a Santa Marta, le realizó la autopsia y lo
vistió) y el ilustre Dr. Vargas. Las calles y casas de Santa Marta estaban
enlutadas; la comisión venezolana agradeció las atenciones de las autoridades
neogranadinas. Los restos fueron embarcados el día 21 en la goleta Constitución,
con una gran ceremonia fúnebre. Durante el viaje 15 cadetes comandados por el
teniente Nicomedes Zuloaga, montaron guardia de honor.

23.         Llegada de los restos de Bolívar a Venezuela: El 13 de diciembre llegan


los restos del Libertador, estaban frente a La Guaira, esperando varias
embarcaciones nacionales y extranjeras con sus banderas a media asta, para
agregarse al gran cortejo naval. El día 15 fue bajado a tierra. El general de brigada
Juan Uslar, llegó de Valencia con lágrimas en los ojos, portando el uniforme con el
cual combatió al lado de Bolívar, los restos pernoctaron en la iglesia de ese
puerto; el día 16 lo subieron a Caracas en una extraordinaria procesión,
pernoctando en la iglesia de la Santísima Trinidad, hoy Panteón Nacional; por
coincidencia, la Santísima Trinidad es la devoción de la familia Bolívar, de allí el
nombre de Simón José Antonio de la Santísima Trinidad, así se llama el panteón
familiar en la Catedral de Caracas. En Caracas se designaron comisiones para
montar guardias de honor; el 17 de diciembre fecha de su muerte, sus restos
fueron trasladados hacia la iglesia de San Francisco cumpliendo un estricto
protocolo.

24.         Honores al Libertados: El pueblo de Caracas acompañó a su eximio hijo


detrás del gran carruaje construido en Paris según instrucciones del coronel
Agustín Codazzi; todas las calles, casas y ciudadanos mostraban riguroso luto; la
gran parada militar, la comandó el siempre leal general en jefe Rafael Urdaneta
Farías, con su uniforme de gala y el sable que le regaló Bolívar. El ilustre Concejo
Municipal de Valencia comisionó a Bernardo Escorihuela, Felipe Sojo y Jaime
Alcázar. José Alberto Espinosa, Canónigo de la Catedral y Rector de la
Universidad de Caracas, leyó a la una su brillante Oración, recorriendo la vida del
más grande de los americanos. El 23 de diciembre se realizó una ceremonia
similar para el traslado de los venerados restos en hombro de sus edecanes y
oficiales que lo acompañaron en la emancipación hasta la Catedral de Caracas;
sus restos estuvieron al lado de sus padres y esposa, hasta que fueron
trasladados al Panteón Nacional el 28 de octubre de 1876, día de San Simón. Así
concluyó la voluntad de nuestro Padre Libertador. Sus cenizas permanecerán a
través de los siglos, acompañadas por el esplendor de su gloria y el calor de los
pueblos libre.

25.         Valores éticos de Libertad de Bolívar: La Libertad para bolívar es la


libertad no solo política(los derechos políticos, la participación, la república para
elegir nuestros gobernantes),sino que la libertad es también la libertad social, que
es la abolición de la esclavitud, la abolición de todos los privilegios que existían
durante la colonia; también es la libertad económica, que es la posibilidad de cada
ciudadano de tener la oportunidad de mejorar económicamente su vida, ,de
mejorar sus condiciones para él y para sus hijos también. El cambio que señala
bolívar con su pensamiento libertario es pasar de un imperio a una confederación
de repúblicas libres que mantengan las garantías políticas y sociales para todos
los ciudadanos de América Latina, de América española. La independencia es una
declaración de libertad para toda la vida, es la lucha por la libertad de un pueblo y
por las libertades de los pueblos.
26.         Valores éticos de igualdad  de Bolívar: La justicia social. La república y la
libertad no pueden existir en una sociedad con injusticia social. Es un deber
republicano corregir las desigualdades sociales, equilibrar los poderes, los saberes
y las virtudes de sus habitantes: oigamos sus palabras: La naturaleza hace a los
hombres desiguales, en genio, temperamento, fuerza y caracteres. Las leyes
corrigen esta diferencia porque colocan al individuo en la sociedad para que la
educación, la industria, las artes, los servicios, las virtudes, le den igualdad ficticia
propiamente llamada política y social. Bolívar   afirma que cuando hay
desigualdades sociales se pone en peligro la república.

27.         Valores Éticos de Justicia: El Libertador marcó pauta como estratega en la


dura faena militar, igualmente brilló en el difícil cometido de estructura
políticamente los estados surgidos de las antiguas áreas geográficas coloniales
Bolívar siempre tuvo vigente su preocupación por la administración de la justicia;
en Caracas en 1.813 y hasta el Congreso Admirable de 1.830, insistió en una u
otra forma, en destacar la importancia de la administración de justicia como una
actividad funcional del estado y en su proyecto constitucional en Angostura. El
carácter social de la lucha obligó al libertador a establecer la justicia para tratar de
dar seguridad al pueblo.

28.         Ideas Educativas de Bolívar: El libertador, a lo largo de su carrera como


gobernante y estadista, manifestó preocupación e interés por la educación de los
ciudadanos. Para Bolívar "El primer deber del gobierno es dar educación al
pueblo". Refiriéndose a la importancia de la educación, el libertador señalaba:
Cuando el pueblo, por medio de la instrucción, sepa lo que son sus deberes y
derechos, habremos consolidado la Republica. En Venezuela, Manifestó varias
veces su preocupación por mejorar el sistema educativo, y dictó medidas como
estas: - Creación de escuelas primarias, basadas en el sistema de enseñanza de
José Lancaster, a quien Bolívar conoció en Londres e invitó a Venezuela. -
Reforma de los estatutos de la Real y Pontificia Universidad de Caracas para
adaptarla a la nueva realidad del país y actualizar su funcionamiento tanto
académico como administrativo. En los diferentes países Bolivarianos, el libertador
dejó su huella como reformador y promotor de la educación. En Colombia, decretó
en 1829 la obligatoriedad de la educación primaria e implanto numerosos colegios
y centros de enseñanzas. En el Perú, creó la universidad de Cuzco, así como los
colegios para varones y hembras. Su interés por mejorar la calidad de la
educación en su época, le hizo pensar en la necesidad de enviar varones becados
al exterior para perfeccionar sus conocimientos y traer al país nuevas técnicas y
aprendizaje.

29.           Ideas Administrativas de Bolívar: El sistema de gobierno más perfecto,


es aquel que  produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad
social y mayor suma de estabilidad política. La disipación de las rentas públicas en
objetos frívolos, y perjudiciales, y particularmente en sueldos de infinidad de
oficinistas, secretarios, jueces, magistrados, legisladores provinciales y federales,
dio un golpe mortal a la República, porque le obligó a recurrir al peligroso
expediente de establecer el papel moneda sin otra garantía, que la fuerza y las
rentas imaginarias de la Confederación. Es el deber de todo ciudadano  vigilar
sobre la legítima inversión de las rentas públicas en beneficio de la sociedad. Todo
funcionario público a quien se le conviniere en juicio sumario, por haber
malversado o tomado para sí los fondos, queda sujeto a la pena capital. Los
jueces, a quienes según la ley compete este juicio, que en su caso no procediesen
conforme a este decreto, serán condenados a la misma pena. Todo individuo
puede acusar a los funcionarios públicos del delito que incurra.  Hombres virtuosos
y hombres honrados son de los que me valdré para darle vigor a todos los ramos
de la administración pública. Es deber de todo ciudadano vigilar sobre la legítima
inversión de las rentas públicas en beneficio de la sociedad. Que se acuse a
cuantos cometen faltas y todo se corregirá... Yo seré el primero.

30.         Ideas Sociales de Bolívar: El fin de la esclavitud en Venezuela. No


sólo la nueva Junta de Gobierno había prohibido la trata de negros, sino que el
Generalísimo Francisco de Miranda llamó a los esclavos a formar filas en el
ejército patriota ofreciéndoles la libertad. Por su parte, Simón Bolívar, aunque
mantuano y propietario de haciendas y de esclavos, fue el primero en liberarlos,
dando ejemplo de magnanimidad. Protección al indio y al campesino. Las
posiciones de Bolívar frente a la población indígena y esclava:  Prohibición de la
explotación de los indios. Distribución de tierras entre los indios. Eliminación del
tributo indígena.

CONCLUSIÓN
BIBLIOGRAFÍA

https://www.el-carabobeno.com/historia-y-tradicion-cronologia-de-los-traslados-de-los-restos-
del-libertador/

http://valorespatriosv.blogspot.com/2010/08/el-peregrinar-de-los-restos-del_27.html

https://bibliofep.fundacionempresaspolar.org/dhv/entradas/r/repatriacion-de-los-restos-de-
bolivar/#:~:text=El%2026%20de%20agosto%20de,donde%20reposan%20en%20la%20actualidad.

http://ktdrabolivariana.blogspot.com/2016/06/cuestionario-catedra-bolivariana-ii.html

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