Coliformes
Coliformes
ANTECEDENTES
El agua es un líquido incoloro, casi inodoro e insípido, su fórmula química es H2O, éste líquido
esencial para la vida animal y vegetal, es muy empleado como solventes. El agua potable
contaminada origina enfermedades tanto en los países en desarrollo como en los desarrollados,
al mismo tiempo constituye un recurso fundamental en el desarrollo de la vida humana y de la
industria (Anselme, 1998).
El agua siempre ha sido utilizada por el hombre, pero fue hace poco que se ha percatado de su
importancia y del peligro que puede tener en la salud, si esta no llena la calidad sanitaria, para
que pueda ser consumida con confianza por el ser humano y otros servicios, entre ellos
domésticos, industriales, agrícolas, etc., además, debe contarse con instalaciones sanitarias
adecuadas para todos, independientemente de la diferencia de condiciones de vida. Para esto,
hoy en día se han implementado los métodos o medios adecuados que disminuyan la
contaminación del agua (Anselme, 1998).
Para garantizar sistémicamente la inocuidad del agua del consumo y proteger la salud pública,
debe presentarse atención especial a la aplicación de un marco para la seguridad del agua y de
planes de seguridad del agua (PSA) completos. Para gestionar la inocuidad microbiana del agua
de consumo es preciso: a) evaluar el conjunto del sistema, para determinar los posibles peligros
a los que pueden estar expuesto; b) determinar las medidas de control necesarias para reducir o
eliminar los peligros y realizar un monitoreo operativo para garantizar la eficacia de las barreras
del sistema y c) elaborar planes de gestión que describan las medidas que deben adoptarse en
circunstancias normales y si se producen incidentes. (Organización Mundial de la Salud [OMS],
2014)
Los agentes patógenos transmitidos por el agua constituyen un problema mundial que demanda
un urgente control mediante la implementación de medidas de protección ambiental a fin de
evitar el incremento de las enfermedades relacionadas con la calidad del agua (OMS, 1995).
El agua de calidad apta para consumo humano cuando entra al sistema de distribución, puede
contaminarse a través de conexiones cruzadas, retrosifonaje, rotura de las tuberías del sistema
de distribución, conexiones domiciliarias, cisternas y reservorios defectuosos, grifos
contraincendios dañados y durante el tendido de nuevas tuberías o reparaciones realizadas sin
las mínimas medidas de seguridad (OPS-OMS.2000; Vargas, 1996). Asimismo, defectos en la
construcción o en las estructuras de pozos, depósitos, ausencia o irregular mantenimiento de
dichas instalaciones son causas que predisponen el ingreso y proliferación de microorganismos
desde distintas fuentes (GOYA, 1997). Además, existen factores secundarios que permiten el
crecimiento de microorganismos en el agua dentro de los sistemas de distribución y
almacenamiento como: cantidad y tipo de nutrientes, oxígeno, temperatura, pH, concentración
de desinfectante y material de las tuberías (GALARRAGA, 1984).
La determinación de microorganismos intestinales normales como indicadores de
contaminación fecal, en lugar de patógenos, es un principio de aceptación universal en la
vigilancia y evaluación de la seguridad microbiana en los sistemas de abastecimiento de agua
(GOEZ, 1999). Estos microorganismos deben cumplir diferentes requisitos como: ser
inofensivos para humanos, permanecer más tiempo que los microorganismos patógenos y con
su ausencia demostrar un agua segura libre de microorganismos patógenos (GALARRAGA,
1984). Además, un buen indicador debe ser específico de contaminación fecal debe hallarse en
forma constante en las heces y estar asociado a las aguas residuales. Asimismo, debe ser
fácilmente aislable, identificable y enumerarle en el menor tiempo posible y con el menor costo.
Debe ser capaz de crecer en los medios de cultivo comunes, estar distribuido al azar en las
muestras y ser resistente a la inhibición de su crecimiento por otras especies (GOEZ, 1999).
El objetivo de las normas y estándares es el de controlar la cantidad de un determinado
microorganismo en el agua, siendo este microorganismo la causa de una enfermedad específica
o un indicador de las condiciones dentro de las cuales se podría transmitir esa enfermedad
(JONES, 1997).
Los microorganismos indicadores contemplados por la Norma Técnica Nacional (NTN
ITINTEC 214.003) son tres: Bacterias Heterotróficas, Coliformes totales y Coliformes fecales.
Las Bacterias Heterotróficas están presentes en todos los cuerpos de agua y constituyen un
grupo de bacterias ambientales de amplia distribución, éstas son indicadoras de la eficacia de los
procesos de tratamiento, principalmente de la desinfección (descontaminación).
El grupo de coliforme totales es definido como todas las bacterias Gram negativas en forma
bacilar que fermentan la lactosa a temperatura de 35 a 37°C, produciendo ácido y gas (CO2) en
24 o 48 horas de incubación, pueden ser aerobias o anaerobias facultativas, son oxidasa
negativa, no forman esporas y presentan actividad enzimática de la B-galactosidasa,
Constituyen el 10% de los microorganismos intestinales de los seres humanos y otros animales.
Además, tiene una gran distribución en el ambiente como lo es en fuentes de agua, vegetación y
suelos. Entre ellos se encuentran los diferentes Escherichia coli, Citrobacter, Enterobacter y
Klebsiella. (Pullés MR 2014; Carrillo EML,2008; Gonzáles UDP, 2007) La prueba más
relevante utilizada para la identificación del grupo de coliformes es la hidrólisis de la lactosa. El
rompimiento de este disacárido es catalizado por la enzima B-D- Galactosidasa. Ambos
monosacáridos (la galactosa después es transformada en glucosa por reacciones bioquímicas)
posteriormente son metabolizados a través del ciclo glocolítico y ciclo del citrato. Los productos
metabólicos de estos ciclos son ácidos y/o CO2. (Carrillo EML,2008)