La Diosa Oscura Mitologia y Sexo
La Diosa Oscura Mitologia y Sexo
La Diosa Oscura Mitologia y Sexo
Mitología y Sexo
Elizabeth Ross
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3
Notas para esta edición
4
aguerridos feminismos actuales. Y esto es porque siento
que aún hay que revisar esta historia y esos mitos que
tenemos introyectados de manera tan profunda. Que
puede ser de ayuda el dar un paso atrás para ver de
dónde viene el camino que vamos siguiendo, ampliar la
perspectiva. Y aunque sé que este texto es apenas un
apunte, que carece de mucha información que ha ido
saliendo a la luz durante estos años, tras una revisión
honesta he decidido dejarlo tal cual se publicó,
esperando que pueda ser un resquicio que permita la
reflexión sobre lo que hemos sido y del cómo podemos
reparar y reintegrar nuestro poder, diseñar el mundo que
queremos. Y desde dónde.
Elizabeth Ross
Ciudad de México, 2016
5
Presentación
6
era fuente de maldad carnal sino un atributo sagrado”. Y en
referencia a la religión, referida por ella como “lo relativo al
espíritu”, nos introduce de lleno en la audaz aventura de
interpretar el mundo desde las religiones de la “diosa madre”, que
hacen de nuestra sexualidad, de nuestro placer y de nuestra
fecundidad la fuente de una nueva divinidad y “la llave que nos
permite abrir la puerta hacia nuestra propia historia, hacia nuestro
propio poder”.
7
Elizabeth nos conmina a recobrar para todos la alegría,
a ser “carne y voluntad, espíritu e inteligencia, el amor y la
conciencia de la diosa en acción” (p.70); y así nos demuestra cómo,
y este es el principal aporte de su reflexión, la progresiva
degradación simbólica de “lo femenino”, que fuera paralela a los
procesos de exclusión histórica y de marginación social, política y
económica de las mujeres, ha conducido y ha sido la base, el
fundamento, de “la domesticación de las mujeres y la
deshumanización de los hombres”.
8
Como mujer, no tengo país
como mujer, no quiero país
Como mujer,
mi país es el mundo entero
Virginia Woolf
9
La manera en que describimos al mundo
determina como lo vamos a valorar y a ex perimentar.
Miriam Simos
Romper- separar
10
hacen del otro lado mantienen lo espiritual como un
elemento más de dominio, ya que han institucionalizado,
haciéndolo suyo, el reino del otro mundo. Pero lo que las
mujeres hemos encontrado se aleja total, radicalmente, de
lo establecido por el poder androcrático y funda, o
reencuentra, una nueva forma de relacionarse con lo
sagrado.
11
Tiene infinitos nombres y atributos y
muchos de ellos son masculinos, ya
que lo que llamamos Diosa se mueve
siempre en la paradoja y el misterio,
espacios que nunca podrán ser
limitados o definidos. La Diosa
representa lo sagrado de la vida que se
manifiesta. La llamamos Ella porque
nombrarla no es limitarla o definirla
sino invocarla, y al hacerlo, algo
cambia. Algo surge que provoca y
reta a lo que en nuestras mentes ha
sido conformado por el control
masculino. Es como si el sonido de un
enjambre de abejas opacara al
escándalo de los helicópteros.
12
hallar lo más parecido a la punta de la madeja para tejer
nuestro propio tapiz, que es también espejo.
13
las semillas 1 . El poder personal, el que crece con nuestra
conciencia, nuestra honestidad, nuestra impecabilidad y
coherencia. Del poder que la comunidad reconoce en las
sabias. Del poder natural que el otro poder se ha empeñado
en enterrar, en hacernos olvidar. En el poder
transformador. En el poder de la Diosa. El poder de la
vida. En el poder como verbo. Yo puedo y tú puedes.
1
Starhawk,. Truth and Dare, p.8
14
desintegra. La teoría Freudiana nos dice que el sublimar
nuestros impulsos instintivos es un sacrificio necesario que
permite la construcción de civilizaciones más altas. Es
dolorosamente claro que ocasiona el distanciamiento de la
Naturaleza, a la vez que las ciencias claman un
conocimiento cada vez más “profundo” de este mundo
desmembrado. Y es esta fragmentación lo que ha dañado
gravemente a todo lo que habita sobre la Tierra y a la
Tierra misma. El daño causado por el sistema del patriarca
toca hasta los más íntimos rincones de nuestro hacer. De
nuestro ser. La imposición del dolor por medio de la
violencia y del miedo es su rasgo inherente. De la relación
con el entorno que nos mantiene vivas a la relación con
nosotras mismas, con nuestro cuerpo, nuestra sexualidad,
con nuestros hijos e hijas, con nuestra vida toda. Todo está
marcado por el dolor. Se reconozca o no.
15
Podemos afilar nuestra memoria,
podemos aprender de nuestra historia.
Podemos seguir construyendo opinión pública
hasta que se vuelva un rugido ensordecedor.
Arundhati Roy
El poder y la Memoria
16
A la mitad del siglo XX la revolución llamada
feminista tomó un impulso sumamente importante, como
ya sabemos. Se comenzó a seguir la pista de esta historia
oculta en todos los campos. A cuestionarse desde una
visión de género religiones y mitos, además de las
relaciones socioeconómicas y políticas del mundo
moderno.
17
Antecedentes prehistóricos:
El Paleolítico
18
dicho pre-histórica, para poder situarnos en el tema, y
más dentro del contexto feminista.
19
un estudio que abarca cientos de pinturas y objetos
encontrados en unas 60 cavernas, afirma que podemos
tomar todo el ar te f igurativo del paleolítico como una
expresión de conceptos acerca de la organización natural y
supernatural del mundo viviente 2 y que expresa una cierta
forma de religión en la que son parte central símbolos y
representaciones femeninas. Este historiador encuentra
característico que las figuraciones femeninas se hallan en
posiciones centrales, mientras que las masculinas están
arregladas en posiciones periféricas. Lo que se representa
son abstracciones de la naturaleza: las plantas, de los
ciclos; son medidas de tiempo. Muchos de estos animales
aparecen en parejas y por supuesto además de genitales
femeninos también hay falos erectos.
2
Citado por Rian Eisler en The Chalice and the Blade, p.9, Todas las traducciones del inglés
hechas por la autora.
20
La agricultura como detonador de la
civilización:
el neolítico
21
verían emerger a Uruk, en Sumeria, la que fue considerada
la primera ciudad de la Tierra.
22
en contacto íntimo con las misteriosas fuerzas que
permiten la vida y les provocan un constante asombro y
reverencia, un sentimiento religioso que percibe la misma
energía en todos los seres, cosas y fenómenos con los que
conviven y que los inviste de sacralidad. Los académicos
llaman a esto animismo. El mundo es un misterio y todo
participa de él.
23
En el tiempo en que Leroi-Gourhan expone sus
hallazgos en las cavernas paleolíticas, en 1961 el inglés
James Mellaart descubre las ciudades más antiguas del
neolítico en Anatolia, lo que es hoy Turquía: Catal Huyuk y
Hacilar, y dice: la brillan te revaloración de la religión del
Alto Paleolítico ha aclarado muchos malentendidos...la
interpretación del arte centr ado en un complejo simbolismo
femenino muestra grandes similitudes con la imaginería
religiosa de Catal Huyuk 3.
3
Mellaart, Catal Huyuk, p.24
24
Catal Huyuk
C atal
Huyuk –fechada 6500-5700 años AEC 4- es
considerada la ciudad más antigua y el eslabón que une la
religión paleolítica alrededor de la Gran Diosa con las
grandes diosas de las eras arcaicas y clásicas, desde
Astarté y Artemisa hasta –incluso- la Virgen María. En las
excavaciones se encontraron altares y figuras de la Diosa
por todos lados, y no solo eso, la figura de la Diosa es
característica del arte neolítico en todo el Cercano y Medio
Oriente, de Jericó a Siria, así como en la India, Europa y
América. Los restos encontrados indican una vida religiosa
4
Utilizo las siglas AEC, Antes de la Era Común, en lugar de AC, Antes de Cristo y EC, Era
Común, en lugar de DC, Después de Cristo.
25
muy intensa en donde la Diosa y su hijo y consorte,
representado como un toro, se manifiesta por toda la
ciudad.
26
A partir de la revolución agrícola del neolítico, cuando
la comida deja de ser la única ocupación posible, se
comienza a desarrollar tanto la tecnología como el
comercio y empiezan a surgir los distintos oficios,
comenzando con la cerámica y la cestería, el tejido de
textiles y el trabajo en piel, la joyería, el tallado en madera
y el arte, por medio de la pintura y la escultura. Todo esto
significa un florecer civilizatorio.
5
Mellart, en The Neolithic of the Near East, citado por Eisler.
27
- No hay ninguna imagen de héroes, conquistadores o
nobles guerreros ni escenas de batallas.
28
Sabemos que el arte, en especial el religioso y el
mítico, refleja no solo las actitudes de la gente sino su
forma particular de cultura y organización social. Este arte
centrado en la Diosa, con su poderosa ausencia de
imágenes de dominación masculina guerrera, reflejan un
orden social en el que las mujeres, como cabezas de clan,
sacerdotisas u otros roles de importancia, tenían una parte
central, y en la que ambos, hombres y mujeres, trabajaban
juntos por el bien común. Si la figura predominante de la
época era una mujer dando a luz, no la de un hombre
muriendo en la cruz como en nuestr a era, es razonable
inferir que la vida y el amor a la vida, más que la muerte y
el miedo a la muerte, eran dominantes en esta sociedad.
29
Representación del interior de la capilla de Catal Huyuk y astas en Knossos.
Creta
30
arqueólogos es aceptado que en el neolítico la vida giraba
alrededor de la Gran Madre, dada la inmensa cantidad de
vestigios que así lo indican –altares, vasijas rituales,
pinturas, templos, y en especial esculturas. Quiero decir
que las esculturas en hueso y piedra son con mucho
anteriores a la cerámica que se empezó a fabricar hace
unos 8500 años.
En estas esculturas la
representación de la Diosa, la
Gran Madre, como ser sexual,
es innegable. Nacimiento y
muerte tienen un papel vital
dentro de la cosmogonía, al
igual que lo que permite la
renovación de la vida: la
unión de los sexos. La Diosa
y su consorte, representado
en distintos lugares no solo
como hombre sino como
animal astado, sea éste toro,
cabro o ciervo, simbolizando ambos la Tierra que se labra y
el ganado, realizan la Hierogamia o Matrimonio Sagrado,
que es un ritual mayor donde la Diosa se encarna en una
sacerdotisa y recibe a su amante, representante de la
potencia sexual masculina.
31
Ahora, se puede aducir que tanto la hierogamia como
la constante representación de vulvas era símbolo exclusivo
para perpetuar la vida y nada tiene que ver con el placer.
No veo porqué los antiguos debían estar ajenos a lo
placentero que es coger, pero lo que es importante señalar
es que todos, hombres y mujeres, desde el inicio de la
humanidad, consideraron al sexo y al el cuerpo -femenino y
masculino- como sagrados, benéficos, dadores de vida y de
placer. Y otra cosa, con igual importancia, es la notoria
ausencia de representaciones del acto de matar, de hechos
violentos. La muerte se consideraba como parte natural del
ciclo de vida y en los entierros se nota además una
igualdad muy contraria a los entierros posteriores.
32
Fantasía, utopía, sueños guajiros....
Cuando se habla de
matriarcado la visión es de
una sociedad dominada por
la mujer en la cual el
hombre era su subordinado.
Cuando se habla de
patriarcado entendemos los
tiempos históricos. En
sociedades en las que una
de las dos partes domina a
la otra no se puede hablar
de igualdad o armonía,
aunque a nosotras nos
gustará pensar que por
supuesto es mejor ser jefas
que sirvientas.
Estas sociedades
adoradoras de la Diosa eran
matrilineales, no
matriarcales. La evidencia
indica que la estructura
social pre-patriarcal era
notablemente igualitaria.
Aunque la descendencia
parece ser trazada por la
madre, y la mujer como cabeza de clan o sacerdotisa tenía
roles de importancia en la vida comunal, hay pocas
indicaciones de que la posición de los hombres en este
33
sistema social haya sido comparable de alguna manera con
la subordinación y supresión de la mujer –o sus atributos-
característica en el sistema de dominación masculina que
lo remplazó.
6
Enrique Florescano, Imágenes de la patria 1, en La Jornada, Junio 2004
34
Creta
35
Durante los mucho años de excavaciones se
encontraron grandes palacios de varios pisos, villas,
ciudades muy bien organizadas urbanísticamente, puertos,
caminos pavimentados que cruzan la isla de punta a punta,
acueductos, drenaje, instalaciones sanitarias, fuentes,
templos, cementerios; objetos de excelente manufactura en
cerámica, metal, textiles, una arquitectura y un arte muy
desarrollados que se podían ver en frescos, esculturas,
vasijas, tallas, con un estilo muy
característicamente gozoso, además
de cuatro documentos escritos: uno
con jeroglíficos, y proto-linear, linear
A y linear B los otros, que colocan a
Creta dentro de la definición de la
etapa histórica. Los cretenses
desarrollaron también una gran red
de comercio marítimo que al parecer
dominó el Mediterráneo.
36
Dice el arqueólogo Nicholas Platon, quien trabajó más
de 50 años en las excavaciones: esta era una cultura en l a
cual l a vid a en tera estaba permead a por una ardiente f e en
la Diosa N aturaleza, la f uente de tod a creación y armonía.
Esto lleva al amor por la p az, el horror a l a tir anía y el
respe to a l a ley... es un a cultura....que es únic a en su delicia
y belleza, gracia y movimiento, y en su gozo por la vid a y
cercanía a l a naturaleza 7.
7
N. Platon. Crete, p. 148
37
impulsándose con los cuernos. Aquí recuerdo el dicho que
se refiere a enfrentar la vida: tomar al toro por los cuernos.
38
39
La espada
La
irrupción de las tribus kurgas marca la
destrucción de una cultura desarrollada en varios
milenios, que enfatizó el uso de la tecnología adquirida
para la elevación de la calidad de la vida y cuya ideología
ginocéntrica 8 la representación de la divinidad era
femenina, la equidad de los géneros era algo natural y la
distribución de la riqueza igualitaria.
8
del griego gyne, mujer.
40
ellos llegaron de los desiertos del Norte, aunque los
hebreos – la tribu levíta de Moisés, Arón y José- venían del
desierto del sur cuando conquistaron Canaan, hoy nada
menos que Palestina. Todos estos grupos tenían en común
una organización social en el que la violencia, el dominio,
la jerarquía y la estructura autoritaria eran la norma y,
además, que no habían desarrollado tecnologías de
producción, sino de destrucción.
41
La ideología Kurga, como se deduce de la mitologí a
comp ar ativ a indoeuropea, exal ta a los viriles dioses
guerreros del trueno y el rayo. Las armas no existen en al
imaginería europea, pero la d aga y el hacha de doble
cabeza son símbolos dominan tes de los Kurgos, quienes,
como todos los indoeuropeos conocidos históric amente ,
glorif icaban el poder letal de la f ilosa hoja de la espad a.
42
es. Y todo esto, sin menospreciar al hombre ni a la energía
masculina, sino uniéndose a ella.
43
La de los mil nombres en la historia
O
El patriarca y la muerte
del Toro Sagrado
44
A hora me enfocaré en una zona geográfica muy
particular: el cercano y medio Oriente, una de las llamadas
cunas de la civilización. Lo hago porque en la actualidad su
influencia se deja sentir hasta el fondo de nuestras
acciones. No solo es la zona que los perros del mal insisten
en devastar, sino que su legado no solo histórico sino
mitológico, es decir psicológico, pesa sobremanera en
nuestra cultura occidental. Pero no dejaré de lado, aunque
sea más superficialmente, algunas otras culturas que
también tienen su influencia en esta aldea global.
45
manifiesto de manera clara y ella ofrece su cuerpo y canta
su belleza.
46
celebrada por sus poderes de placer y renovación, no de
reproducción.
Mi vulva, el cuerno,
el Barco Celestial,
está pleno de ansiedad
como la luna nueva,
¿Quién labrará mi vulva?
¿Quién labrará mi
planicie superior?
¿Quién labrará mi
terreno húmedo?
Ha brotado, ha retoñado
Él es verdor plantado cerca del agua
Es el que mi vientre ama más.
Su mano es miel, su pie es miel
11
Paráfrasis de textos sumerios en Innana, Reina del Cielo y de la Tierra, de Diane Wolkstein y Noah
Kramer, Harpers&Row, NY, 1983, p 38 y 39
47
Siempre me endulza.
Haz tu leche dulce y espesa, mi amado
Mi pastor, beberé tu leche fresca
Deja que la leche de la cabra fluya a mi redil
Llena mi sagrada mantequera con queso de miel.
48
que aún en el último milenio AEC las suyas eran muy
sagr ad as costumbres.
12
según la traducción del Pop Wuj (Popol Vuh) directamente del kiché hecha por Adrían Ines
Chávez . Ediciones de la Casa Chata, Guatemala, 1977
49
Ishtar y Gilgamesh
o la conquista del poder
C omo
ya vimos, las invasiones indoeuropeas fueron
cambiando las culturas ginocéntricas hasta hacerlas
desaparecer bajo el completo dominio de estos guerreros.
13
todas las citas en este capítulo fueron tomadas de Gilgamesh, en traducción de Jorge Silva
Castillo.
50
Eres un ariete que derrumba las murallas
de su propio país!
Eres sandalia que lastima el pie de quien la calza!
14
sic
51
Con él corta los cedros, a él lo llora cuando muere, y
él vuelve del infierno en una de las versiones para decirle:
15
en o tra tr adu cc ión d ic e : sus gen ita le s
52
Y con los cuernos lunares colgados en la alcoba del jefe
de familia la historia evidentemente ha dado un vuelco. La
Diosa se vuelve oscura, negativa, malvada. Y el padre, el rey,
la única autoridad.
16
en J. Pritchard, The Ancient Near East, p.35
53
esta: si una mujer le dice a un hombre.....se le romperán los
dientes con un ladrillo 17.
17
ley Urukagina, 2415 AEC, citada en S Kramer, The Sumerians, p.322
18
en T. Jacobsen, The Treasures of Darkness, p.176
54
Los Actores de Yahvé
55
bienes de las mujeres, demandan su virginidad hasta el
matrimonio bajo pena de ser lapidadas o quemadas, y
después la total fidelidad, también bajo amenaza de
muerte. Estas reglas por supuesto que no se aplicaban a
los hombres, a quienes se les permitía cualquier número de
esposas, como lo demuestra el riquísimo rey Salomón y su
harem.
Yahvé ordena:
56
Y no solo los objetos y los espacios del culto de los
llamados ídolos debían ser destruidos, sino que este celoso
dios ordenaba la masacre de los idólatras: En
Deuteronomio 3:3-7 dice:
Y también:
57
Es Yahvé el que habla. Tus hijas se hacen las putas y tus
novias cometen adulterio por los hombres que van con
las putas y hacen sus sacrificios con las prostitutas del
culto.(O.2.11)
58
herencia, según aparece en el Zohar, que es parte de la
Kábbalah 19.
19
Merlin Stone, When God was a Women, p.195-196
59
60
La serpiente
La primigenia Madre de la
Creación egipcia, Per-Uatchet, era
serpiente y está tan unida esta
palabra al concepto de Diosa que en la escritura
jeroglífica serpiente significa Diosa. Isis (Nacimiento) y
Nepthys (Muerte) son la Madre Serpiente dual de la vida y
la vida después de la vida que ayudaban a las almas a
través del inframundo. Madre Serpiente del inframundo
teje los hilos blanco y negro de los días y las noches
atados por el hilo rojo de la vida para asegurar la
inmortalidad.
61
En la antigua China
pre-confuciana, Nüwa
también es considerada
la diosa primigenia, la
primera serpiente /
dragón, el pilar de cielo.
No solo repara el cielo
después de que una
disputa entre dioses lo
destruye, detiene la gran
inundación, sino que crea
a la humanidad con barro
amarillo y una cuerda.
Además una de las
particularidades de Nüwa
es que al amar a su
hermano Fuxi, inicia el
matrimonio sagrado.
20
The Chalice and the Blade, p.88
62
Ha h abido muchos intentos de los teólogos par a
interpretar l a expulsión del paraíso de f ormas que no
“expliquen” la barb arid ad, crueldad e insensibilid ad como
resultado inevitable del pecado original. De hecho, la
reinterpretación del más f amoso de todos los mitos religioso
con un simbolismo nuevo y a f avor de lo humano, debe
integrarse a la tr ansformación ideológic a que debe
acomp añar al c ambio social, económico y tecnológico de un
sistema de dominio a uno de compañerismo e iguald ad. Pero
es también esencial que entendamos claramente el
signif icado social e ideológico de esa importan te historia
dentro de su contexto histórico.
63
Desde la perspectiv a de esa realid ad, las ordenes de
este poderoso y advenedizo Jehová de no comer del árbol
sagr ado, ya se a del conocimiento o de la vid a, no solo era
an tin atural sino sacrílego. Los bosques de árboles sagrados
eran parte integral de l a vieja religión, así como los ritos
diseñados par a inducir una conciencia receptiv a a l a
revelación de verdades divinas o místicas, ritos en los
cuales l as mujeres ac tu aban de sacerdotisas.
64
persistente culto a al Diosa.
65
su hija Petronila era tan hermosa, obtuvo de dios el favor
de que ella enfermara de fiebre y no se levantara de la
cama. Un día uno de sus discípulos le preguntó, tú, que
curas todas las enfermedades, porqué no curas a Petronila?
A lo cual san pedro le contestó: porque estoy contento con
su condición. Pero le ordenó, levántate Petronila y
apresúrate a servirnos, la muchacha, curada, se levantó y
los sirvió, pero al terminar su padre la mandó al lecho y la
fiebre volvió 21.
21
Jacobus de Voragine, The Golden Legend, LXXVI, “Santa Petronila Virgen”, citado por
Campbell en El Héroe..., p.116
66
67
Al’at o la piedra negra
68
Esta piedra negra, pulida ya por siglos de toques y
besos de los peregrinos, ha sufrido varias fracturas y, para
mantenerla, se montó en una estructura de plata sólida
que representa claramente una vulva, aunque los
musulmanes la llamen la Mano de Alá. Abraham copuló
ante esa piedra con su esclava Hagar (la egipcia) para
procrear a Ismael, el ancestro de todos los árabes, ya que
era, como todos los templos de la Diosa, un lugar donde se
celebraba la hierogamia. Se sabe que ese ritual seguía
efectuándose entre los chiítas persas, que podían tener
bodas temporales mientras duraba la peregrinación, y los
hijos nacidos de esos encuentros eran considerados
santos 22.
22
R. Trubshaw, The Black Stone, The Omphalos of the Goddess. Mercian Mysteries, Albion Press,
1992
23
Alby Stone, Goddess of the Black Stone, Mercian Mysteries, Albion Press, 1993
69
judeocristianismo pero, a través de años y escribas, la
ideología misógina es también una ley que hay que seguir
fortaleciendo: en la sura 4:31 dice: los hombres tienen
au torid ad sobre las mujeres porque Alá hizo a uno superior
sobre la otr a y porque él gasta su riqueza par a mantenerla.
Así que la buena mujer es obediente, y gu arda l as par tes no
visibles como Alá las h a guard ado 24.
70
puede interpretar la palabra sagrada, que el conocimiento
no se limita a las páginas de un libro y que manifiestan
descender de Fátima, la hija de Mahoma y Khadija, su
primer esposa 27.
27
Shlain, p.374
28
citado por Merlín Stone, p 36
71
72
El oscurecimiento de la diosa:
guerra, sexo e inframundo
73
A l ser la diosa destazada por Marduk, al ser
arrasadas sus ciudades por los invasores guerreros, la
Diosa y su poder fueron transformados según las
necesidades político-económicas del sistema impuesto de
dominio. La existencia de las mujeres y su reflejo divino no
podía ser eliminada totalmente, así que se les asignaron
papeles acordes con las nuevas políticas. El sexo se
convirtió en lo obsceno de la carnalid ad y el pecado y se
inventó la prostitución instituida al servicio de los
hombres, pero, de manera clandestina, el sexo significaba
la cada vez más dañada –mas viva- memoria de las mujeres.
Cuando a la Diosa se le da el papel de patrona de la
sexualidad, se le quitan los elementos sagrados y se le
trivializa como tentadora, seductora y caprichosa. Le toca
ahora la responsabilidad de unir lo dividido por los
hombres, trastocar una moral fundamentalista y confundir
aún más a la humanidad.
74
Hay distintas concepciones de la Diosa guerrera según las
culturas, desde la androcratísima Atenea, que nace de la
cabeza de Zeus, hasta la Morrigan celta, que mantiene
mucho de la divinidad antigua y que veremos más adelante.
75
tumbas demuestran el cambio: múltiples huesos, armas,
además de ofrendas, acompañan los esqueletos del guerrero
muerto.
La derrota infligida a
los pueblos adoradores de
la Diosa forzosamente
implicó derrotar sus
maneras de vida. Entonces
la mujer es subyugada,
violada y castigada por
serlo. Es por eso que
Coyolxauhqui es destazada
por Huitzilopochtli, que
Zeus es impuesto como el
dios de dioses y reduce a
Hera al papel de esposa
engañada y celosa. Por eso
el babilónico Marduk
destaza a Tiamat, la Madre
del Mundo. Y es por eso mismo que, aunque no se puede
ocultar que la vida proviene de ella, la madre puede y debe
ser dominada.
76
y el padre 29, estructura que seguramente refleja a las
familias que habitaron la ciudad. Esto apoya la afirmación
de Robert Graves de que en esta tierra no hay mas que dos
tipos de seres: las madres y sus hijos, sean estos
hermanos, padres, sacerdotes....siempre serán hijos. Es por
esto que la Diosa tiene a su hijo, quien la vez es su
consorte. Y dice Gimbutas: el mundo del mito no estab a
polarizado en f emenino y masculino como lo estab a entre los
indoeuropeos y muchos otros pueblos nómad as y pastores
de las estep as. Ambos principios se manif estab an uno al
lado del otro. La divinid ad masculina en f orma de un hombre
joven o un animal macho parece af irmar y f ortalecer las
fuerzas de la hembra ac tiva y creativ a. Ninguno se
subordina al o tro; al complementarse, su poder se ve
mul tiplicado 30.
29
Catal Huyuk, p.201
30
Goddeses and Gods of Old Europe, p.237
31
la Orestíada es una trilogía. En la primera, Agamenón, su hijo Atreo sacrifica a su hija Ifigenia.
Su madre Clitemnestra la venga matando con un hacha a Agamenón. En la segunda, Las Coéforas,
Orestes mata a su vez a su madre Clitemnestra para vengar a su padre. La última, que es la que nos
ocupa, es las Euménides, donde Orestes es protegido por el nuevo dios, Apolo.
77
al hijo, sino que solo es la nodriza del embrión recién
sembrado. Engendra el que f ecunda, mientr as que ella solo
conserva el brote 32. Les d aré pruebas de lo que les he dicho,
continúa. Puede haber padre sin madre alguna. Ahí esta
ella, l a testigo viviente, hija del olímpico Zeus, ella quien
nunca f ue albergad a en la oscuridad de matriz alguna, que
diosa alguna pudo nunca dar a luz a tal criatura.
32
Esquilo, Las Euménides p.260
78
sus hijos. No hubo ninguna madre en ningún lado que me
dier a nacimiento y estaré siempre por el hombre con todo el
corazón y f uertemente del lado de mi padre 33.
79
A continuación les presento un breve desfile de diosas
de la nueva era patriarcal. Diosas ya oscuras, construidos
estereotipos de la mujer que mantienen hasta cierto punto
su poder original, pero muy matizado por el régimen de
dominio. Por supuesto que faltan muchas, pero son solo
una muestra de las características con que nos enjoyan los
“dueños del mundo”.
80
Ella es tan hermosa:
desnuda, negra y terrible
desnuda, negra y terrible;
desnuda como la vida y la
muerte;
su piel es azul como una
sombra,
su cabello negro y enredado
por el viento,
agitado como el tiempo
desnuda y negra y terrible
coronada con cráneos,
bebe sangre de demonio
pero ella es hermosa,
hermosa hermosa
ella es hermosa,
hermosa
hermosa
81
en una de sus manos tiene la espada para vencer a los
demonios, que son los enemigos de su pueblo, y en otra el
fuego de la vida. Por un lado es la terrible, es la fiera que
lucha y da muerte, por el otro es la dadora de vida. Ella
representa una versión actualizada de la Diosa para
tiempos patriarcales. Ella reta, amenaza a la estabilidad y
al orden, es la rabia y la furia, la diosa encabronada.
35
Skanda Purana
82
contrario, se une a la muerte salvaje con el sexo, pero con
el sexo de mujer, esa criatura perversa.
Grecia
83
S egún
Hesíodo, an te todo f ue el Caos y luego, Gaia, l a
del ancho seno e inquebran table sostén de tod as las cosas,
y Eros, el más hermoso de los inmortales 36.
36
Hesiodo, Teogonía, citado por Eisler p.59
84
Creta y Artemisa conquistadas, el desdén aqueo –esto
es, indoeuropeo- por la mujer se manifiesta con claridad
desde la Ilíada y a través de toda la literatura y la filosofía
griegas. Zeus es un violador consumado y aún su esposa
Hera teme desobedecerlo por miedo a ser golpeada. Atenea
nace de su cabeza y se dedica a patrocinar la guerra. El
reinado del falo es tan contundente, que una de las leyes
que instituye Solón, el padre de la democracia, permite a
un padre vender a su hija como esclava si pierde la
virginidad antes del matrimonio. De hecho, según la
historiadora Eva Keuls 37, las mujeres y los esclavos tenían
el mismo estatus y la esclavitud en Atenas era más cruel
que en otras sociedades. Señala una combinación de
supremacía masculina y culto al poder y l a violencia que
llama f alicismo. En la Grecia clásica existía una policía
para mujeres, la gynaikonomoi que, según Aristóteles,
restringía el movimiento de las mujeres p ara proteger su
castid ad. Porque la mujer griega solo era recipiente y
productora de hijos. Se le consideraba tan inferior que era
compañera inadecuada para los hombres. No es de extrañar
que la homosexualidad griega– específicamente entre
hombres y muchachos- fuera tan celebrada. Aquí quiero
apuntar que las relaciones entre hombres de igual madurez
no eran socialmente autorizadas. Toda relación -sexual o
no- era de dominación. El joven debía de asumir el papel
pasivo y si se encontraba que el adulto desempeñaba este
papel, era tratado igual que a las mujeres: con el mayor
desprecio.
37
Eva Keuls, El Reinado del Falo, Política Sexual en la Antigua Atenas, University of California
Press, Berkeley, 1993
85
En esos tiempos, frente a
la mayoría de las casas
atenienses, había una estatua
de Hermes con el pene
enhiesto y la erección se
representaba incluso en
imágenes de niños. Era un
verdadero culto al falo, a su
poder. Las niñas eran, en su
mayoría, abandonadas a su
suerte y ésta, si sobrevivían,
era la esclavitud. Las que
quedaban bajo la autoridad del
padre eran casadas muy jóvenes, consideradas solo un
recipiente desgraciadamente necesario.
86
Entre los dioses no era diferente. Zeus tonante –y
todos los dioses arios son dioses del trueno- es dueño y
señor de todo lo que es- dicen- y cualquier mujer del rango
que fuera debía de mostrarse complaciente para merecer
una mirada de consideración. En la complicada mitología
griega el abuso es general. Como en el secuestro de
Perséfone y su violación, engaño y la separación forzada de
su madre. El conocido mito subyacente del invierno y el
retorno de la primavera no oculta la violencia y la sumisión
de la diosa a su destino.
87
Y si hablamos de mujeres peligrosas, las amazonas de
Artemisa parece que fueron más que mito 38. Mujeres
guerreras que deciden defender su vida utilizando los
mismos métodos del enemigo, con su propio sistema de gobierno,
que solo se relacionaban con hombres extraños y criaban
solo niñas, fueron descritas en la Ilíada como antianeirai –
que significa las que van a l a guerra como hombres, hasta
que Hércules engaña a su reina Hipólita, le roba su cinto
protector divino y la asesina. Las amazonas tratan de
recuperar a Antíope, la hermana secuestrada de Hipólita,
pero son vencidas en Atenas. Esta última batalla está
representada en el Partenón y Plutarco, entre otros, da
testimonio de ello.
38
ver mi artículo Amazonas, en Acento 452 y 453, de la Voz de Michoacán.
88
Estas historias homéricas sobre mujeres capaces de
existir sin hombres, y peor aún, resistirlos en batallas y
vencerlos, difícilmente parecieran ser verdad sino, al igual
que los cíclopes gigantes, solo una metáfora literaria. Pero
según los mismos griegos, durante unos 400 años -1000-
600 AEC-, las Amazonas llegaron a gobernar grandes
porciones de Europa, Asia Menor (Anatolia) y África. Se
sabe que establecieron ciudades llamadas Amazonium en
Pontus y la Isla de Patmos y numerosas poblaciones
antiguas, incluyendo Smyrna y Éfeso, con su Gran Templo
a Artemisa, claman haber sido fundadas por ellas.
89
Esta pintura de Tintoretto demuestra el estatus de la
diosa durante la gloriosa época griega: Afrodita, nuestra
Astarté, cuyo truculento nacimiento griego la hace hija o de
Zeus y una de sus amantes, Dione, o de los genitales
cercenados y lanzados al mar de su padre Cronos, es
casada por Zeus con Hefestos, el viejo y cojo dios herrero y
a quien engaña nada menos que con Ares, el dios de la
guerra. En esta escena ella duerme después del amor,
Hefestos llega a comprobar la traición y Ares huye por la
ventana. Mientras tanto, Eros duerme apacible junto a ella.
90
Norte de Europa
39
Edda Poética, poesía de Islandia que data entre el 900 al 1100 EC, y Edda en Prosa, compilada
por el islandés Snorri Sturluson en el Siglo XIII
91
esposa se llama Fregga y como bruja, amante y guerrera,
Freya, de quien el mismo Sturluson afirma que, al tiempo
que escribía los Eddas, dos siglos después de que el
cristianismo se había convertido en la religión oficial, solo
la diosa Freya permanece viv a.
92
En la verde isla esmeralda de Eire, Irlanda,
La Morrigan, es Diosa de la guerra que guía a
su pueblo con agudos gritos. Es Macha, la
poderosa, Babd, la que hierve, y Nemain, la
venenosa. La épica Tain Bo Dualgne deja
claro que es otra diosa triple, también
protectora de su pueblo. Doncella, Madre y
Vieja, se presentaba ante sus enemigos –
formorianos o Fir Bolgs-cambiando de forma,
de hermosa pelirroja vestida con su túnica de
sangre a el negro cuervo de gritos
espeluznantes y la muerte descendía de sus
alas.
93
a crecer. Ella jura matarlo en cuanto nazca, pero al verlo decide
mejor dejarlo a su suerte: lo mete en un saco de cuero y lo lanza a la
corriente del río.
México
94
Y entre nosotras, y para no ir mas lejos, sabemos que
el imperio azteca dominó también a sangre y piedra una
basta región en solo 200 años, y repite el patrón dominador
95
muy claramente: se apodera de las tierras, esclaviza a los
pueblos, se queda con las mujeres de la élite y rescribe la
historia y los mitos, que transforma en su favor. Rinde
pleitesía a un dios guerrero y cruel, como es el colibrí
zurdo, Huitzilipochtli, y no es exagerado decir que el terror
era una de sus mejores armas.
40
en Mythes et Rites des Vintaines de Mexique Central Prehispanic, 1980, citado por Blas Romás
Castellón, en Cosmogonías de los nahuas antiguos, de Mitos Cosmogónicos del México Indígena,
41
ibid, p.129-30
96
Huey Tonantzin es vista de distintas maneras en la
mitología azteca. Como Tlazolteotl es una diosa oscura que
traga los pecados ajenos y los vomita, es la diosa de la
basura que al ser violada por Tezcatlipoca se ensucia y es
entonces la diosa de los adúlteros y desvergonzados; es
Xochiquetzal, la de las flores y las plantas que hacen dar
vueltas; es Ixnextli, la que tiene ceniza en la car a, la
pecadora mariposa de obsidiana 42. Y el violador? Ese es el
viejo coyote, nada más.
Tlazolteotl azteca
La
visión de la Tlazolteotl-Huey Tonantzin
huasteca difiere en mucho en la
representación azteca: la llamada
42
códice vaticano
97
comedora de inmundicias es aquí la misma diosa de los
partos, de los nacimientos y sus rasgos son dulces. La
huasteca es también cultura nahua, como muchas otras del
Mesoamérica, pueblo de ilusionistas y magos que no tenían
la lujuria por pecado, dijo Sahagún 43 y tampoco el de la
violencia, como atestigua su arte, ya que no era un pueblo
imperialista, como los aztecas.
43
citado por Octavio Paz en Magia de la Risa, de Paz, Medellín y Beverido, UV 1962, p. 11
44
Relación de Michoacán, p.72
45
Vega Núñez, Mitología Tarasca, p.67
98
guerrero, destaza el cuerpo de su hermana y termina con
sus demás hermanos, porque – sintiéndose inf amados-
pretenden matar a su madre y a su nuevo hermano. EL
cuerpo de Coyolxauhqui rueda por el Coatepetl y puede ser
una clara metáfora del final dado a la adoración femenina-
lunar. Y aún más, el nuevo dios –cuyo oficio es la guerra-
tiene otra hermana, Malinalxochitl, que era hermosa y de
gentil disposición y de tan ta h abilid ad y saber, que vino a
dar en mag a y hechicera. Tan grande era su poder mágico
que los mexicas quieren deshacerse de ella y su hermano
ordena abandonarla. Ella pare a Copil y le pide venganza.
Huitzilopochtli entonces le arranca el corazón al sobrino,
del cual brota el nopal en que mas tarde hall aron el águila
que marcó el asiento en que se levantara l a ciudad de
Huitzilopochtli. 46
46
de El poema de Huitzilopochtli en Garibay, Épica Nahuatl, , p.42-49
99
100
La Diosa y el Astado
47
ver mi artículo Ese Toro Enamorado de la Luna en Acento 492, de La Voz de Michoacán. Ver
también La Rama Dorada, Cap XLIX, p.528
101
que es tomado para emparejarse a la Diosa, cuando no es
un joven pleno y bello.
102
En esta historia narrada por Ovidio 48, Diana
Nemorensis, la que habita en los bosques, la diosa lunar,
virgen y cazadora, se baña desnuda a medio día en la
poza de agua fresca de su bosque sagrado, junto con sus
ninfas. Su lanza, su arco y sus flechas, sus sandalias y su
túnica descansaban en el césped de la orilla. Acteón, un
joven cazador, vagaba por este bosque después de una
mañana de caza, dejando atrás a sus compañeros y sus
perros. Al caminar sin rumbo se topa con la escena
prohibida a ojos humanos del baño de la Diosa.
48
Ovidio, Metamorfosis, Libro Quinto, cap V
103
ciervo, en el símbolo de su pareja mítica. Con esta acción
la Diosa mata al Astado, lo entrega a los hombres, y al
hacerlo se conserva pura al defender su virginidad del
más ligero peligro que la amenace.
104
105
Epílogo
Barbara Walker
106
107
T oda esta historia se ha tratado de la domesticación
de las mujeres y la deshumanización de los hombres. A
través de la manipulación de los mitos, de los símbolos, se
impone la androcracia, la violencia y la muerte sobre la
vida, el gozo y la mujer. Aunque el sexo es la pulsión vital
mas terrena e importante, al ser colocada en el ámbito de
lo inmoral, fuera de la ley impuesta a sangre y miedo, se
convierte en sucio, prohibido e igualmente mal deseado. A
la mujer se le odia y desea, se le desprecia y castiga. La
diosa oscurecida es puta y siempre seductora.
108
los otros, las otras-, y vuelve a este mundo maniqueo.
Estás conmigo o contra mí, porque celoso es mi nombre. El
sexo está en Eros pero lo violentan con Tánatos. Sexo
enfermo de pornografía, sadomasoquismo, pedofilia, de
donjuanismo, eyaculación precoz y frigidez, de no hallarse
a gusto ni encontrar satisfacción en nada.
49
sic de sics.
109
analizar si son pro-humanos o anti-humanos, si son de
vida, de fertilidad, de amor, o de muerte, dolor, y miedo.
Elizabeth Ross,
aquí en Morelia, 2003-04
110
111
Bibliografía
112
El Mito del eterno retorno, Alianza Emecé, 1968
113
The Language of the Goddess, Harper, San Francisco 1989
The Civilization of the Goddess, Harper, San Francisco,
1991
114
Monjarás-Ruiz Jesús: Mitos Cosmogónicos del México
Indígena, INAH,1987
115
Simos, Miriam -Starhawk: Truth or Dare. Harper San
Francisco,1990
Dreaming the D ark, Magic, Sex and Politics. Beacon Press,
1982
The Spiral D ance, a rebirth of the ancient religion of the
great goddess, Harper Collins 1979
116
Wilson H.H., The Great Mother, Oriental translation Fund,
1840
117
Índice iconográfico
Pág.
Figura hecha con barro y polvo de hueso- Moravia, República 10
Checa. 24000AEC
118
c. 4500AEC
Artemisa de Éfeso 39
119
Ishtar. Escultura en alabastro, oro e incrustaciones, 46
Babilonia 3000AEC
120
Bastet, réplica en bronce 71
Freya, anónimo 91
121
Tlazoleotl pariendo, Azteca 95
122
índice
124
125